EL CENTENARIO DEL CANAL DE PANAMÁ

August 21, 2017 | Autor: F. Álvarez Simán | Categoría: Panama
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Descripción

EL CENTENARIO DEL CANAL DE PANAMÁ

(La Tierra Dividida; el Mundo Unido)
El sello de armas y la bandera de la Zona del Canal

Fernando Álvarez Simán*

A mediados del pasado mes de agosto el Canal de Panamá una de las obras de ingeniería más impresionantes que el hombre haya construido, cumplió sus primeros 97 años del término de su construcción y el inicio de su operatividad. Doscientos invitados especiales entre autoridades americanas y panameñas fueron los privilegiados testigos de cómo el Buque Vapor americano "Ancón" completó el primer tránsito oficial del Canal en 9 horas y 40 minutos un 15 de agosto de 1914, solo dos semanas después de estallar la Primera Guerra Mundial hecho que opacó su inauguración. Sin embargo su viabilidad como ruta marítima comercial nunca ha estado a discusión, puesto con su puesta en marca se acortaron los tiempos de navegación entre el océano Atlántico y el Pacífico y por ende, el comercio mundial comenzó a fluir con mayor rapidez. Por ejemplo un barco que partía de Nueva York a San Francisco debía necesariamente de rodear el Cabo de Hornos en Sudamérica, con el Canal este largo viaje ya no era necesario ahorrando casi 8 mil millas de travesía marítima.

El Canal se encuentra situado en la zona central de Panamá, precisamente en la franja más estrecha de este país centroamericano, tiene una longitud de cerca de 80 kilómetros y une a la ciudad de Colón en el Atlántico y la Ciudad de Panamá en el océano Pacífico. Está compuesto por un lago artificial y tres juegos de exclusas llamadas Gatún, Pedro Miguel y Miraflores que compensan la elevación orográfica del Canal sobre el nivel del mar de 30 metros. Estas exclusas tienen dos líneas de tráfico que permiten el sentido de ida y vuelta en los buques que lo transitan y miden cada una 35.5 metros de ancho por 305 de largo y 24 de profundidad. La historia del Canal es singular, se cuenta que Vasco Núñez de Balboa fue el primer europeo que logró ver lo que inmediatamente llamó el "Mar del Sur" (hoy océano pacífico) el 25 de septiembre de 1513 y desde entonces la Corona Española analizó seriamente la posibilidad de construir un Canal que conectara el Atlántico y el Pacífico para llegar en menos tiempo a Ecuador y Perú evitando el Cabo de Hornos. La empresa en esa época fue imposible por el poco nivel tecnológico disponible para transformar un área geográfica particularmente agresiva con la condición humana.

Españoles y portugueses intentaron siempre abrir al comercio colonial una vía artificial por el actual Panamá, analizando también la posibilidad de Nicaragua o el Istmo de Tehuantepec; incluso en un hecho poco conocido dos expediciones escocesas entre 1698 y 1700 se asentaron en la zona, con la finalidad de fundar una ruta comercial con China y Japón para la Corona Británica, pero las rudas condiciones climatológicas y el acoso español a los colonos dio fin de manera trágica a los sueños de fundar y consolidar el "Nuevo Edimburgo". En el siglo XIX el geógrafo, naturista y explorador prusiano Alexander Von Humboldt, derivado de sus múltiples estudios revive la idea de la construcción del Canal, pero no es hasta 1881 que el francés Ferdinand de Lesseps cuya participación en la construcción del Canal de Suez le daba autoridad técnica en la materia, propusiera a la Sociedad de Geografía de París, la idea de construir el Canal de Panamá. El sueño de Lesseps arranca con un presupuesto de 600 millones de francos pero pronto se topa con tres obstáculos mayúsculos; la oposición de los Norteamericanos, la falla estructural del diseño del proyecto que no considero los desniveles mayores a 30 Mt entre la costa del pacifico y el atlántico. Tampoco preveía la construcción de esclusas y las condiciones accidentadas e insalubres del área que provocaban accidentes, desataron enfermedades tropicales como la malaria y la fiebre amarilla pasando factura sobre la vida de más de 22 mil personas.

Aunado a ello un manejo poco claro de los recursos para la construcción del canal por parte de los socios de Lesseps, llevaron a la quiebra a la Compañía, transfiriéndose poco después los derechos de construcción al gobierno norteamericano. Quienes mediante el Tratado Hay-Bunau Varilla se aseguraron a perpetuidad el control del canal y la zona adyacente (ocho kilómetros a cada lado del canal) por un pago de 10 millones de dólares y una renta anual de 250 mil dólares. Esta negociación fue llevada a cabo en 1903 solo unos días después de que Panamá dejara de ser una provincia Colombiana y se convirtiera en un país independiente. Durante la época que Norteamérica retomó los trabajos de construcción, también las difíciles condiciones ambientales cobraron vidas, en este caso poco más de cinco mil; pero fue la administración americana que pudo concluir la construcción que ascendió según los registros de la época a 325 millones de dólares; sin embargo, desde el inicio de la administración americana del canal siempre fue cuestionada por los panameños que consideraban un ultraje la presencia americana en su país, incluso con roces y episodios tristes y violentos como el denominado "día de los mártires" cuando el 9 de enero de 1964 un grupo de estudiantes panameños intenta izar la bandera en la denominada zona de exclusión con la consiguiente represión americana.

Este hecho sobre todo y el temor de que se volviera a repetir acontecimientos parecidos, hizo posible que en 1977 bajo la presidencia del General Omar Torrijos Herrera que los Estados Unidos devuelvan la soberanía del Canal a Panamá. Se firmo un acuerdo entre el entonces presidente Jimmy Carter y el General Torrijos, haciéndose efectivo el acuerdo el 31 de diciembre de 1999. Desde entonces el gobierno soberano de Panamá se encarga de la administración, funcionamiento y mantenimiento de esta obra de ingeniería a través de una estructura burocrática, operativa denominada "Autoridad del Canal de Panamá". Que además vigila el cumplimiento del tratado de neutralidad contenido en el acuerdo Torrijos-Carter de otorgar el derecho de igualdad a todas las naves del mundo y permitir transitar, sin sometimiento a inspección, registro o vigilancia, a las naves de guerra y naves auxiliares de todas las naciones.

Indudablemente que a lo largo de su singular historia, el Canal de Panamá se ha constituido como una vía fundamental para el comercio marítimo internacional. Para los norteamericanos representó la oportunidad de acercar comercialmente sus dos costas, pero ha significado más que esa sola idea. Hoy según datos oficiales de la Autoridad de Canal atiende 144 rutas comerciales y el cinco por ciento del total del comercio marítimo mundial, pero la globalización acelerada lo urge a expandirse pues la tendencia mundial es de comercio marítimo con buques más grandes que los que sus esclusas miden.
Hoy el Canal es un verdadero orgullo para el pueblo panameño compuesto por 3.4 millones de habitantes, es el activo más valioso y por tanto patrimonio inalienable de la nación, por lo que las leyes de ese país determinan que no puede ser vendido, ni cedido, ni hipotecado, ni de ningún otro modo gravado o enajenado. Si su importancia para el comercio internacional es estratégica, para el funcionamiento de la economía panameña su operatividad y viabilidad es vital. Cuenta con más de 9 mil empleados la mayoría de ello panameños que controlan las esclusas, manejan los remolcadores, administran, reparan, controlan el tráfico y permiten su funcionamiento ininterrumpido las 24 horas del día los 365 días del año.

En ese sentido, es el motor de las actividades económicas y productivas porque representa cerca del 9% del Producto Interno Bruto panameño, pero además porque empuja de manera significativa al sector servicios, que para Panamá representan el 70% del PIB representado por el turismo, las exportaciones y las importaciones. Barcos de todo el mundo cruzan a diario el canal, en promedio lo hacen entre 13 mil o 14 mil anuales, las principales rutas comerciales que utilizan el canal son; la primera es la de la Costa Este de Estados Unidos a Asia. Pero también de la costa este de EU a la costa oeste de Sudamérica y desde Europa hacia la costa oeste de Estados Unidos y Canadá. Por productos los principales son los granos, la carga llevada en grandes contenedores desde Asia hasta los EU y el petróleo y sus derivados. Por países los principales usuarios son en primer lugar los Estados Unidos, seguidos por China y Japón y el principal usuario latinoamericano es Chile.

Claramente el Canal de Panamá es una obra colosal, de casi 80 km, el mayor agrado lo ha tenido el Estado panameño que durante los 11 primeros años de transferida la administración de la vía ha recibido $5,571.1 millones provenientes de las operaciones canaleras. Las proyecciones efectuadas por las autoridades de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), entidad rectora de la administración, funcionamiento y mantenimiento de la vía acuática, estiman que en el año 2011 el Estado panameño podría estar percibiendo 839 millones de dólares más. Durante los 11 primeros años de la administración panameña, el canal ha aportado casi tres veces más de lo que en 86 años aportó la administración norteamericana al Estado panameño 1,833.4 millones de dólares. En la actualidad, el mundo está enfocando sus ojos en la ampliación de la vía acuática con un tercer juego de esclusas que duplicará la capacidad actual, que inicio en el año 2007 y con fecha de culminación en el año 2011, con una inversión de 5,250 millones de dólares. Estos trabajos consisten en la construcción de dos complejos de esclusas de tres niveles cada una con tres tinas de reutilización de agua por nivel, una en el lado Pacífico y otra en el lado Atlántico. También es parte del programa el ensanche y la profundización de los cauces de navegación existentes del Lago Gatún y de las entradas del mar del Pacífico y del Atlántico así como la profundización del Corte Culebra. Para conectar las esclusas del Pacífico con el Corte Culebra se llevará a cabo la excavación en seco de un nuevo cauce de acceso de 6.1 km de largo. El futuro de este proyecto está ligado al aumento mundial del comercio; hecho irrefutable que garantiza su mayor uso, también los mayores usuarios son Estados Unidos, China y Japón, que son las economías más fuertes del mundo. Particularmente las exportaciones de Asia a Estados Unidos, lo cual sube a Panamá a esta plataforma de crecimiento de manera automática por ser el transporte marítimo la vía más económica de transporte intercontinental. Buena manera de celebrar 100 años de vida Canal interoceánico.

* Profesor-Investigador. Universidad Autónoma de Chiapas






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