El Archivo Municipal de Toledo honra al pintor, grabador y cincelador del siglo XIX Críspulo Avecilla

May 21, 2017 | Autor: A. De Mingo Lorente | Categoría: Toledo, PINTURA ESPAÑOLA SIGLO XIX, Fabrica de Armas de Toledo
Share Embed


Descripción

12TOLEDO

LA TRIBUNA MARTES 2 DE MAYO DE 2017

ARCHIVO MUNICIPAL

Este pintor, grabador y cincelador, maestro en la Fábrica de Armas de Toledo, tuvo importantes encargos en el Madrid del siglo XIX. Representó facsímiles de antiguos códices musicales para Francisco Asenjo Barbieri y realizó las tapas metálicas para el codicilo de Isabel la Católica por encargo de la Biblioteca Nacional A. DE MINGO | TOLEDO [email protected]

E

l Archivo Municipal, que ha participado esta semana en las actividades culturales de ‘La Noche Toledana’, dedicó una de sus propuestas al pintor, cincelador y grabador Críspulo Avecilla, maestro de la Fábrica de Armas que pese a ser un sobresaliente artista del siglo XIX permanece hoy completamente olvidado. De su taller de la calle Comercio 39 salieron exclusivos diseños para la alta sociedad madrileña del momento, entre otros las tapas metálicas que desde 1881 albergan, en la Biblioteca Nacional, el Codicilo de la reina Isabel la Católica, dictado el 23 de noviembre de 1504. Nacido en Toledo en julio de 1828, tuvo su primer aprendizaje en la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel, al igual que otros artistas toledanos de su época, como el pintor Cecilio Pizarro, el arquitecto Ezequiel Martín y el escritor Abdón de Paz. Son escasos los detalles de su biografía que conocemos, aportados en su mayor parte por Manuel Ossorio y Bernard dentro de su Galería biográfica de artistas españoles del siglo XIX, obra de 1868 (en la que ya se menciona brevemente a este artista) ampliada en 1883-1884. Críspulo Avecilla formó parte de los principales núcleos artísticos que había en Toledo en el siglo XIX: la Fábrica de Armas (en la que ingresó por oposición el 17 de mayo de 1842 y cuyo taller de Grabados dirigió a partir de 1867), la Academia de Santa Isabel (de la que fue nombrado profesor ayudante en 1850) y el Casino de Artistas e Industriales (a una de cuyas entregas de premios, en el Teatro de Rojas, asistió en 1880). También era conocido en los ambientes artísticos madrileños, ya que obtuvo tres menciones en las exposiciones nacionales de 1848, 1862 y 1864. En 1869 elaboró para el compositor y estudioso

EL ARCHIVO MUNICIPAL HONRA A CRÍSPULO AVECILLA

Detalle de los Facsímiles de códices musicales existentes en la Librería del Cabildo Toledano, realizados en 1869 y conservados en la Biblioteca Nacional.

musical Francisco Asenjo Barbieri un álbum con facsímiles de textos medievales de la Catedral de Toledo, los cuales se conservan asimismo en la Biblioteca Nacional. Uno de sus mejores años fue 1868, ya que fue galardonado en la Exposición Universal de Viena y el Reino de Italia le otorgó una medalla por haber realizado «un cuchillo de monte» para Víctor Manuel II, primer monarca de aquel

Anuncio de su establecimiento de la calle Comercio, en los años ochenta.

país. En 1883, formó parte de la comisión toledana que envió diversas obras a otra exposición internacional, celebrada en Munich. En 1876 estableció en Toledo su primer taller, que tres años después trasladó a la calle Comercio 39. De él salieron algunas de sus mejores obras, como cuatro candelabros de tres metros de altura en «estilo del Renacimiento» para la decoración del Alcázar, así

TOLEDO13

MARTES 2 DE MAYO DE 2017 LA TRIBUNA

Diseño de 1881 para las tapas metálicas del Codicilo de Isabel la Católica, conservado en la Biblioteca Nacional.

como los llamadores de bronce de su puerta principal y un escudo y cuatro «bichas» para el pedestal de la estatua del patio. Suponemos que estas obras se perdieron en el incendio de 1887. De aquí salieron también las tapas de hierro cinceladas y repujadas con incrustaciones de oro y plata para encuadernar el título del Marquesado de San Román, proyecto al que seguiría su importante encargo para la Biblioteca Nacional. Apenas conocemos detalles sobre su vida personal. Tuvo una hija, Carmen Avecilla Gallego, que casó a comienzos de 1887 con Enrique Sordo y Magro, empleado de la Diputación. Es probable que la hija del pintor y grabador muriera en el parto, pues tenemos constancia tanto de su fallecimiento, el 20 de octubre de 1887, como de la posterior existencia de un militar llamado Enrique Sordo y Avecilla, nieto de Críspulo. Finalizamos esta semblanza con el entrañable recuerdo que el historiador militar Hilario González (1853-1928) le dedicó en 1889, en la revista quincenal Toledo: «Si no te-

miésemos ofender la modestia de aquel maestro, con gusto recordaríamos todas las obras ejecutadas

Grabado de jarrón de Avecilla publicado en un artículo de Cruzada Villaamil para La Ilustración de Madrid en 1870.

durante este período de brillante apogeo bajo su acertada dirección. Séanos permitido, no obstante, consignar aquí para consuelo del distinguido artista, hoy anciano y achacoso, que no hay en la Fábrica de Armas un lugar que no le recuerde por su amor al trabajo y al arte; habiendo mostrado su inteligencia y habilidad en planos transparentes, dibujos, modelos, álbums, autógrafos y trabajos caligráficos, viéndose todavía impresa su mano en la iglesia, en la oficina y en los talleres». El Archivo Municipal posee dos interesantes obras manuscritas suyas. La primera es el Álbum con las tablas para la fabricación de los modelos de armas blancas, de 1868, perteneciente a la Colección Alba y disponible desde hace algunos años en su página web. Más recientemente ha ingresado en la institución municipal, por donación particular, otro libro de Avecilla que contiene diferentes escudos de ciudades españolas y países, junto con reproducciones de los dibujos que decoraban algunas de las espadas más singulares realizadas en la Fábrica de Armas.

Diseños para vainas de oficiales y gobernador civil de 1832-1872.

Diseño de espada de ceñir para ingenieros de minas, de 1867.

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.