Educación en Derechos Humanos: Museo de la Memoria y DD.HH. como experiencia pedagógica y de aprendizaje

August 31, 2017 | Autor: J. Ponce Villarroel | Categoría: Educación, Derechos Humanos, Historia reciente, Enseñanza de la historia, UArcis
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Descripción

I JORNADA DE ESTUDIOS “Historia y Educación de la Historia Reciente en Chile” Contulmo, 29 de septiembre de 2014, Chile

PONENCIA

Educación en Derechos Humano: Museo de la Memoria y Derechos Humanos como experiencia pedagógica y de aprendizaje

Universidad ARCIS

Johan Manuel Ponce*1

* Profesor de Historia y Ciencias Sociales, Licenciado en Educación, Licenciado en Historia y Ciencias Sociales, Universidad ARCIS; Tutor académico Magíster en Ciencias Sociales, Escuela Latinoamericana de Estudios de Postgrado (ELAP) – Universidad ARCIS.

1. INTRODUCCIÓN Nací y crecí en una sociedad de cambios y transformaciones, en medio de una «transición» donde hablar de los derechos humanos era volver a recordar episodios incómodos, de los que no se deben hablar 2, de aquello que se debe guardar silencio. Con el tiempo entendí que los derechos humanos no sólo se refieren a la violación sistemática ocurrida durante la dictadura o a un cuerpo de leyes estático, sino que hablamos de nuestra dignidad como seres humanos, en cualquier tiempo y en cualquier momento. La historia Reciente de nuestro continente, señalada por Franco y Levín (2003) «es hija del dolor» y de un pasado reciente que se resiste a pasar, congelando las estructuras sociales, económicas y políticas, en medio de un sistema que no admite diferencias. El caso de América Latina ha sido singular, nuestra historia ha emergido como consecuencia de los procesos desencadenados por la instauración de dictaduras militares en los distintos países del Cono Sur y nuestra sociedad actual es heredera de aquellos procesos traumáticos no resueltos. En este punto hacemos el nexo entre memoria como lo que recordamos, los derechos humanos aquello que nos protege y la historia como el recuerdo que intentamos conservar. Los derechos humanos se encuentran a nuestro alrededor, debemos fijar la mirada para poder encontralos en nuestra vida cotidiana. A veces creemos que no sabemos nada acerca de los DD.HH., pero sabemos más de lo creemos. Muchos de los problemas planteados puede que se refieran sólo a nuestra realidad local y pueden no tener la misma validez para otras personas, pero es esa misma dinámica la que plantea la necesidad de proteger y visualizar nuevos derechos. 2. DESARROLLO a. Educación en Derechos Humanos Hablar de «aprendizajes significativos» es entender los contextos y realidades propias de los estudiantes, según David Ausbel (1960) como la incorporación de información a la estructura cognitiva de los individuos. Las fracturas generadas tras la Segunda Guerra Mundial, abrieron un nuevo campo para el estudio de la Historia en el mundo, mientras que en Chile esa fractura fue dada por el golpe militar de 1973 y la instalación de una dictadura cívico-militar por los siguientes 17 años, entonces surgen las preguntas: ¿Cómo enseñar lo que se ha ocultado durante años? Y del mismo modo ¿Cómo enseñar para que aquellos hechos de violencia no se vuelvan a repetir? Encontrarle un sentido práctico al pasado es lo que permite explicar el presente, una respuesta puede encontrarse en la «pedagogía de la memoria» (Ramírez, Scantlebury & Erazo, 2011), pero en Chile se ha trabajado muy poco. Por otro lado, la «Educación en Derechos Humanos – EDH» posee una perspectiva más amplia, permitiendo 2

Parafraseando a Ludmila Da Silva Catela (2000) sobre los silencios en el Chile post-dictadura.

abarcar ambas preguntas y, a la vez, sentar las bases para la construcción de una sociedad más democrática y plena en derechos. La EDH, desde la perspectiva de Fabián Salvioli (2009), posee tres dimensiones: como derecho humano, en derechos humanos y práctica de los derechos humanos. En ese sentido, la EDH se entiende como el conjunto de acciones orientadas a crear una cultura de los DD.HH., inclusiva a todos los sistemas y modelos de educación, sean estos formales e informales y su inserción en los espacios públicos. Según lo señalan las recomendaciones del Informe de la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación (1991), los derechos humanos deben estar “manifestados en los planes y programas, como así también deben estar presentes en el currículo oculto, para que los estudiantes no sólo sean conscientes de la teoría sino que pongan en práctica en sus acciones cotidianas” y se inserta en las acciones del Programa Mundial para la Educación en Derechos Humanos (2005), impulsado por la Organización de las Naciones Unidas – ONU y el Alto Comisionado por los Derechos Humanos – ACNUDH. La incorporación de los derechos humanos en el sistema educativo formal ha sido una tarea lenta y dificultosa. Por una parte, la ausencia de políticas oficiales impulsadas desde el Estado y por otro lado la falta de preparación de los docentes, responsabilidad que debieran asumir las Universidades. Sin embargo, no podemos dejar de reconocer que existe un salto de calidad importante dado por el Estado a través de la creación del Instituto Nacional de Derechos Humanos – INDH y el desarrollo de políticas enfocadas a la educación. En el último tiempo, el INDH ha elaborado una serie de materiales –disponibles en su página web– para utilizar en clases, pero comparado con Argentina y las políticas estatales sobre memoria y derechos humanos, aún nos queda mucho camino por recorrer. En ese mismo sentido, existe una apertura importante desde las universidades nacionales al permitir el desarrollo de investigaciones vinculadas a los DD.HH., como asimismo abrir la discusión y reflexión sobre su importancia en la formación de profesionales. La Educación en Derechos Humanos no sólo es importante para conocer los derechos que nos protegen, sino que implícitamente visualizan los «otros derechos». Hablamos de una cobertura progresiva basada, según lo plantea Magdalena Aguilar (2008) en tres generaciones de derechos humanos. En la primera categoría los derechos civiles y políticos, una segunda categoría llamada derechos sociales, culturales y económicos, de una tercera categoría ligada al desarrollo económico e incluso, hoy se habla del nacimiento de una cuarta categoría de derechos ligados a la tecnología (Bustamante, 2001). En este punto hago un paréntesis para señalar que no existen derechos humanos más importantes que otros, todos tienen la misma validez y deben protegidos por el Estado, estas categorías son una forma de clasificarlos mejor para su estudio. Por lo mismo, la enseñanza en derechos humanos se sostiene en el reconocimiento de que los derechos no están dados de una vez y para siempre, sino que son producto de las luchas colectivas. Surgieron del sacrificio de las luchas de

hombres y mujeres, su expansión –existencia de nuevos derechos- y cumplimiento dependerá de la responsabilidad de cada uno de nosotros en el presente. La enseñanza en derechos humanos, es un aporte fundamental para la construcción de una nación justa, habitada por ciudadanos activos cuya responsabilidad hacia los otros surge –entre otras cosas–, al reconocerse como parte de un pasado común que es re-elaborado constantemente desde nuestro presente. b. Investigaciones en Derechos Humanos en Chile En el último tiempo, además de la Educación en Derechos Humanos –o adscrito a ella–, ha surgido una preocupación por conocer y explicar el pasado, no sólo desde la historia, sino desde variadas disciplinas del saber. Según la investigación reciente, realizada por Benítez & Ponce (2014), existe un proceso de apertura y cambio por el que transitan las universidades y país. Se recogieron los datos de las versiones 2012, 2013 y 2014 del concurso «Cuenta tu tesis en derechos humanos», convocado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos, como una muestra contundente e ilustrativa del panorama actual sobre investigaciones en DD.HH., permitiendo concluir que no sólo existe interés por la vulneración de derechos durante la dictadura en Chile (1973-1990), sino también en la búsqueda de nuevas problemáticas y reflexiones en torno a la construcción de una nación más justa en el Chile actual. Hasta el momento se han realizado tres versiones del concurso, según los datos proporcionados por el INDH, han acumulado un total de 131 trabajos, provenientes de 30 universidades públicas y privadas del país: de igual modo, es importante destacar el aumento generado en el año 2013, coincidente con la conmemoración de los 40 años del golpe de estado en Chile. La procedencia de las investigaciones, según «área de conocimiento», utilizando la clasificación del Comisión Nacional de Acreditación – CNA Chile, el área del Derecho se impone con un 44% del total de trabajos presentados, a lo que siguen las Ciencias Sociales y el resto de las humanidades. En el caso de educación –incluye a todas las pedagogías–, es posible detectar una baja producción académica y entre los tópicos tratados se refieren a la Educación en Derechos Humanos. Al docente como actor social, se le proponen un desafío, el de incorporar en sus prácticas pedagógicas los derechos humanos, sólo de esta forma podrá convertirse en ejemplo e incorporarlas en las acciones cotidianas de los estudiantes, por ende de sus familias y la sociedad. c. Nuestra Experiencia pedagógica La Escuela de Historia y Ciencias Sociales de la Universidad ARCIS se encuentra a la vanguardia en la generación de nuevos conocimientos, su labor ha sido constante

y ha logrado adaptarse rápidamente a los cambios sociales, políticos y culturales del país. A grandes rasgos se puede señalar: i. Programas de formación en Derechos humanos: En los planes y programas de estudio de la carrera están incorporados los derechos humanos, como parte fundamental en la formación de profesores y profesoras, licenciados y licenciadas en Historia y Ciencias Sociales. Estas son: la Cátedra de Derechos Humanos y Ciudadanía, la Cátedra de Historia Reciente de Chile y los Seminarios Temáticos que han desarrollado temáticas sobre memoria, educación, cine y memoria, lugares de memoria y contemplan visitas a distintos lugares de memoria, entre ellos el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos. ii. Museo de la Memoria y los Derechos Humanos La experiencia pedagógica vinculada a los lugares de memoria no es un tema nuevo. Desde la apertura del Museo de la Memoria y Los Derechos Humanos – MMDH en el 2010, se ha convertido en un referente para entender la historia reciente de Chile, en el que han intervenido múltiples actores, abierto a interpretaciones y significaciones disímiles (Mallea, 2013). La memoria es un concepto polisémico, elaborado y estudiado desde distintas disciplinas académica, entendido como un proceso de adaptación. Tal como señala Antonio Mitre (2001): «donde los pasados afloran en el presente sin confundirse con él»; el MMDH es producto de los aprendizajes y recuerdos retenidos por los individuos. En este caso, de aquellos que no vivieron directamente el golpe de estado, ubicándonos en un tránsito constante desde y hacia el pasado. El recuerdo forma parte de la «memoria histórica», entendida dentro de los marcos de una memoria colectiva que le dan sentido (Halbwachs, 2004). Esa ha sido justamente la labor del MMDH: Preservar la memoria del país y también comprometerse al desarrollo de políticas que promuevan los derechos humanos en la sociedad. Es por ello que se han realizado distintas actividades, entre ellas: 1. Salidas a terreno. Como profesor me tocó acompañar a los estudiantes –de enseñanza media y también en pregrado–, quienes lograron acercarse a una realidad totalmente distinta para ellos. Conocieron un fragmento de la historia del país, silenciada no sólo por el rígido curriculum de los colegios, sino también por sus familias. En una de las salidas, una estudiante se dio cuenta de que su abuelo figuraba en la lista de lista de los Detenidos Desaparecidos y en otra ocasión otra estudiante contó la

historia de miembros de su familia que habían sido víctimas del terrorismo de Estado. Cabe destacar que existe un acompañamiento de estos casos y los guías prestan contención emocional a los estudiantes, lo que deja en evidencia el profundo quiebre que existe aún, después de 24 años del retorno a la democracia. 2. Trabajo. Para poder realizar la visita al MMDH, existe una planificación previa donde se les habla a grandes rasgos de lo que van a encontrar en el Museo, se explica el contexto social y político del país y se organizan los aspectos técnicos de la visita. Durante la visita, los guías proyectan un video institucional y luego invitan a los estudiantes a visitar las salas temáticas, organizadas por los procesos ocurridos entre 1973 y 1990 y los distintos hitos que marcaron el periodo, colocando énfasis en la vulneración de los derechos civiles y políticos de la población. Terminada la visita se realiza una guía de trabajo para que los estudiantes puedan llegar a comprender, no sólo las implicancias del «Nunca más», sino también del empoderamiento de sus derechos. Se puede concluir que los estudiantes siguen creyendo que existe una división político-social y que será muy difícil de superar. También comprendieron que los cambios ocurridos durante la dictadura cívico-militar chilena fueron heredados por sus padres y por ellos mismos, tomando conciencia que el pasado sigue presente. Cabe destacar que muchos estudiantes adoptaron un “compromiso ciudadano” hacia la construcción de una sociedad más justa y plena en derechos; para otros sólo fue una historia que no conocían y un número menor no encontró utilidad en la visita, consecuencia del traspaso de una visión polarizada de sus padres. 3. Concurso de Tesis del MMDH. Una de las formas de vinculación con el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos ha sido mediante el Concurso de Tesis. A este concurso son presentadas aquellas investigaciones de pregrado y post-grado vinculada a la temática de la vulneración de derechos en dictadura. En los tres años de concurso la Universidad Arcis, a través de sus estudiantes en proceso de

titulación ha presentado trabajos, de los cuales uno de ellos fue reconocido durante el 2013 sobre la “Reconstrucción histórica de la Cueca Sola, desde el imaginario político y social en Chile (1978-1990)”, permitiendo el acceso a los fondos y colecciones del MMDH. 3. CONCLUSIONES Los derechos humanos son inherentes a todas las personas –independientes de su raza, religión o nacionalidad– y son protegidos por el Estado, de modo que sólo el Estado puede vulnerarnos. Dada su importancia transversal a todas las sociedades y sus contextos, es necesario e imperativo su incorporación en el aula, como trabajo sistemático que empodere a los estudiantes sobre sus derechos, y a la vez, construyendo una sociedad más equitativa y basada en la cultura de la Paz. Tanto la historia Reciente, como la historia del Tiempo Presente, hacen referencia a un tiempo que no tiene una cronología definida. Los cambios en las estructuras políticas y económicas siguen siendo parte de los hondos quiebres en las sociedades latinoamericanas, y especialmente en el caso de Chile, han quedado congeladas en el tiempo, a la espera de cambios reales que pueda dar respuesta a las demandas actuales. Si bien se tiende a asociar el concepto de derechos humanos sólo a su vulneración y –en muchos casos– enmarcados en la dictadura militar chilena, en el último tiempo se ha enfocado la mirada hacia otras problemáticas. No sólo se ha permitido instalar en la reflexión pública la obligación de salvaguardar todo derecho, sino que ha puesto en evidencia la necesidad de una apertura de la que debe hacerse cargo la Educación en Derechos Humanos. La EDH no debe concebirse como un problema, sino como una oportunidad para la concreción de políticas efectivas sobre derechos humanos en el país, a través de la educación, en todos sus niveles y formas –formal e informal–, ofreciendo un panorama renovador que permita focalizar los esfuerzos hacia la construcción de un presente que aprende de su historia y repiensa su futuro. Las salidas a terreno, el trabajo que se han realizado sobre la memoria y los contextos propios de los estudiantes, permiten visualizar y poner en práctica una realidad que es tangible a través de la «historia heredada» y permitiendo generar nuevas perspectivas de conocimiento. De ninguna forma pretendemos construir una versión hegemónica del pasado, sino que es una invitación para que cualquier persona pueda laborar su propia visión de los hechos ocurridos en Chile. A nosotros, como educadores, nos corresponde un importante rol social mediante la formación de personas, esa importante misión que cumplimos debe estar impregnada de un fuerte sentido de la ética y defensa de los derechos fundamentales para nosotros y nuestra comunidad. Aquello permitirá poner en práctica nuestras libertades personales y ser ejemplo para los estudiantes y sus proyectos personales.

Cambiar la sociedad no es una utopía ni una entelequia, debemos –como sociedad civil– ser conscientes del futuro y de la educación en valores y derechos, tanto para nosotros como para las nuevas generaciones. Gracias.

REFERENCIAS Aguilar, Magdalena (1998). Las tres generaciones de los derechos humanos. Derechos Humanos: Órgano Informativo de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México. (N° 30), 93-102. Benitez, Jorge & Ponce, Johan (2014). Una aproximación a los contenidos en Educación en Derechos Humanos en tesis de pregrado en Universidades nacionales [Resumen]. En proceso de publicación. Bustamante, Javier (2001). Hacia la cuarta generación de Derechos Humanos: repensando la condición humana en la sociedad tecnológica. Revista de Ciencia, Tecnología, Sociedad e Innovación. (N° 1). Recuperado de: http://www.oei.es/revistactsi/numero1/bustamante.htm Da Silva Catela, Ludmila (2000) De eso no se habla. Cuestiones metodológicas sobre los límites y el silencio en entrevistas a Familiares de desaparecidos políticos. Revista Historia, Antropología y Fuentes Orales, 2 (24), 69-75. Franco, Marina & Levin, Florencia (2007). Historia Reciente. Perspectivas y desafíos para un campo en construcción. Buenos Aires: Paidós. Gobierno de Chile (1990). Informe Comisión Nacional Verdad y Reconciliación. Santiago: Ministerio del Interior. Mallea, Felipe (2013). Museo de la Memoria y los Derechos Humanos de Santiago. El proceso de memorialización de la exhibición permanente bajo el enfoque de las “controversias sociales. En: Ávila, Jorge: Mallea, Felipe & Monares, Andrés. En el Umbral: Reflexiones contemporáneas de sociólogas y sociólogos jóvenes en Chile. (1ª Ed., 61-93). Santiago, Chile: Editorial Ayún. Mitre, Antonio (2001). Historia: memoria y olvido. Historia y Cultura, (N° 27), 111 -125. Ramírez, Gloria; Scantlebury, Marcia & Erazo, Ximena (2011). Derechos humanos, pedagogía de la memoria y políticas culturales. Santiago, Chile: LOM. Salvioli, Fabián. (2009). La universidad y la educación en el siglo XXI. Los derechos humanos como pilares en la nueva reforma universitaria. San José de Costa Rica: Editorial Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH).

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