Educación. El taladro y el Hoyo

El Taladro vs El Hoyo: La Importancia de Ser un Educador relevante

En el anterior siglo 20, los educadores tenían muy pocas herramientas
educativas para llevar a cabo su objetivo de educar a los estudiantes.
Bolígrafos, lápices, marcadores, pizarras, cuadernos y papel de
construcción eran las herramientas comunes en cada salón de clases. Con el
tiempo, la tecnología evolucionó y mejores herramientas de enseñanza
surgieron: proyectores, reproductores de discos, películas fijas,
películas, reproductores de video, grabadoras, impresoras Xerox y
calculadoras de cuatro funciones. Cada educador tomó una decisión personal
en cuanto a la cantidad, o lo poco, que utilizaría las herramientas
mencionadas. Esas fueron las mismas herramientas novedosas para aquellas
épocas, aunque muy primitivas para los estándares de hoy en día, que la
sociedad utiliza para la curación, el cálculo, la comunicación, la
colaboración y, el la educación.

Como las herramientas tradicionales son fáciles de usar y muy simples, los
maestros no tienen que adaptarse a un programa educativo para lograr el
desarrollo profesional para aprender a utilizarlas. Las Herramientas
educativas se mantuvieron igual durante muchos años. No había ningún ataque
a la zona de confort de nadie. No hubo cursos jornadas que requieren mucho
tiempo para actualizar las metodologías de enseñanza. El cambio fue la
influencia de la tecnología, que tuvo muy poco efecto sobre la educación
hasta la década de 1980. Incluso entonces, los maestros tenían la opción de
si o no emplear la tecnología en su metodología. Cuando el problema se
produjo en era que nuestra cultura y la sociedad en general no tenían esas
restricciones a la tecnología. La Tecnología comenzó a moverse a un ritmo
rápido, esencialmente acabando con marcas que no podía seguir el ritmo.
Ejemplos de esto incluyen wipeout: Kodak, Blockbuster, registrando las
industrias, así como muchas otras grandes corporaciones. Incluso con las
consecuencias de la falta de mantenimiento de relevancia, muchos educadores
aún tienen que incorporar efectivamente la tecnología en su metodología.

Muchos todavía están enseñando y medición de los estudiantes como si viven
en un episodio de Mad Men.
Me acordé de una historia reciente de uso frecuente en conferencias de
ventas sobre la compra de un taladro eléctrico. Se pidió a la audiencia si
alguien alguna vez había comprado un taladro eléctrico. Casi todas las
manos en la sala subieron. Fue entonces cuando el orador explicó de qué se
trataba lo que el público realmente había comprado. Era un agujero. Era un
agujero que necesitaban, y no un taladro ya que ese era el objetivo. Para
alcanzar esa meta, ese agujero se necesita, de la manera más eficaz y
eficiente, se necesita la herramienta adecuada. Hay muchas maneras de
conseguir ese agujero. Otras herramientas, más primitivos podrían ser
fácilmente empleadas, pero las alternativas no serían tan fácil, tan
eficiente o eficaz.

Si el objetivo de la educación es enseñar a los niños las habilidades que
les permitan sobrevivir y prosperar en el mundo, un mundo impulsado por la
tecnología aún más que hoy, entonces tenemos que cambiar nuestra
metodología, así como la manera de medir el aprendizaje para satisfacer ese
objetivo. Si las habilidades de curación, el cálculo, la comunicación, la
colaboración y la creación son que subrayar, a continuación, los educadores
deben ser llevados a la velocidad de las herramientas y los métodos
necesarios para lograr ese objetivo. Los educadores deben ser innovadores y
relevantes.

El mantenimiento de relevancia como educador requiere una cierta cantidad
de conocimientos informáticos. Sin esa alfabetización, un educador no sólo
será irrelevante, sino también analfabetos. Ni rasgo hace que para un
maestro eficaz. Sí, uno puede ser un buen maestro sin tecnología, pero si
la tecnología puede hacer un buen maestro un mejor maestro, ¿por qué la
lucha contra eso? ¿Dónde está la ventaja de un profesor no aprende más para
enseñar mejor? No funciona de esa manera.

Tecnología abre la puerta a muchos obstáculos para los educadores para
superar, al igual que muchas cosas nuevas que aprender, sino que también
proporciona una oportunidad de encontrar nuevas soluciones y métodos de
enseñanza aplicables en una industria de la educación en constante
evolución. Tecnología a través de las redes sociales, por ejemplo, permite
a los educadores para controlar y dirigir su propio aprendizaje de una
manera que antes no era posible. Nuestro mayor problema avanzar es que no
sabemos qué es lo que todavía no sabemos. Este camino tiene el potencial de
hacer que la enseñanza sea más eficiente, eficaz y pertinente. El logro de
ese objetivo depende de la habilidad del maestro, tanto como conseguir que
el agujero en la pared depende de perforación de un carpintero. ¿Cómo
llegamos a la meta puede ser facilitada por las herramientas que empleamos
y modelo para nuestros hijos. Para educar mejor a nuestros hijos, debemos
primero educar mejor a sus educadores.