Edgar Allan Poe (19 de enero 1809 - 7 de octubre 1849). Conmemorando el bicentenario de su nacimiento, 2010

October 7, 2017 | Autor: M. Rigal-Aragón | Categoría: Edgar Allan Poe
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Descripción

Edgar Allan Poe (19 de enero 1809 - 7 de octubre 1849):
Conmemorando el bicentenario de su nacimiento


Dra. Margarita Rigal Aragón y Dra. Beatriz González Moreno
Universidad de Castilla-La Mancha






Tras una corta vida, llena de avatares y sufrimientos, Edgar A. Poe,
fallecía en extrañas circunstancias el día 7 de octubre de 1849. Hoy en
día, transcurridos ya más de 160 años de esa enigmática muerte, resulta
curioso comprobar que, tal vez, gracias a la polémica que se desató después
en torno a su carácter (y no a su obra), el maestro fue por fin reconocido
y encumbrado a la categoría de mejor escritor norteamericano del período
Romántico (por lo menos a este lado del Atlántico). Así, dos días después
del desgraciado suceso, aparecía en el Daily Tribune de Nueva York un
obituario, firmado por un tal Ludwig —que no era otro sino Rufus Wilmot
Griswold— en el que éste escritor, que había sido primero "amigo" de Poe y
después uno de sus mayores detractores, afirmaba que pocos serían los que
le llorarían ya que el finado carecía de amigos[1]. Las respuestas de los
que sí habían sido sus amigos no se harían esperar: el día 20 de octubre,
aparecía en otro periódico de Nueva York, el Home Journal, otra nota sobre
la muerte de Poe, firmada por Nathaniel Parker Willis y titulada Death of
Edgar Poe (Clarke 1991: I, 78); en ella, Willis lo describe como a un
genio, y como a una persona trabajadora, cumplidora, constante, etc. A
estas primeras "respuestas" les seguirían otras que poco a poco irían
contribuyendo a que el público se centrase más en la obra del autor que en
su posible vida "disipada". Dignos de mención son los casos del doctor
Richard Henry Stoddard (1825-1903) quien, en 1852, escribiría una breve
biografía para la National Magazine en la que hablaba de Poe como del más
popular e imaginativo de los escritores (365) (Cfr. Peeples 2004: 6).
También en 1852 Baudelaire (1821-1867) publicaría en la Revue de Paris el
primero de sus ensayos sobre el bostoniano: Edgar Allan Poe, vida y
obra[2], donde elevaba al bostoniano a la condición de héroe literario.
Ocho años más tarde, en 1860, la poetisa americana Sarah Helen Power
Whitman (1803-1878) –con la que Poe mantuvo una relación sentimental en los
últimos años de su vida—, publicó un libro en defensa de éste contra sus
críticos: Edgar Allan Poe and His Critics. Estas y otras muchas
manifestaciones de aprecio hacia su obra y/ o persona, o de desprecio, se
sucedieron a lo largo del siglo XIX. Las dos grandes contribuciones[3] de
ese siglo fueron la del británico John Ingram (1842-1916) —quien editaría
las obras completas de Poe en 1880, prologadas por una "Memoria" en las que
dibujaba una semblanza muy positiva del escritor— y la de los poetas y
críticos Edmund C. Stedman (1833-1908), y George E. Woodberry (1855-1930),
quienes publicaron, en 1894, The Works of Edgar Allan Poe, precedidos por
una larga nota biográfica (escrita por el segundo) sobre el bostoniano y,
pese a que todavía se recogen algunos malentendidos, sobre todo en torno al
alcohol y las drogas, se puede apreciar que se había llevado a cabo un
análisis minucioso acerca de la viada de Poe[4].
Sin embargo, a lo largo de estas páginas lo que deseamos es centrarnos
en los homenajes y tributos que se le hicieron y se le siguen haciendo, muy
merecidamente, al maestro del relato corto. Así —tal vez movidos por las
reconciliadoras voces que, como hemos visto, se fueron levantando a su
favor, y antes de que se cumpliese ninguna efeméride del escritor— la
Asociación de Profesores de Escuelas Públicas[5] de Baltimore comenzó a
recaudar fondos para colocar un monumento sobre la tumba de Poe, el cual
había sido enterrado en el cementerio adyacente a la iglesia presbiteriana
de Westminster[6]. La recolecta duró diez años. El diseño de la lápida
estuvo a cargo de George A. Frederick[7] y la ejecución del trabajo vino
de la mano de Hugh Sisson. También se decidió trasladar los restos del
escritor desde donde habían sido sepultados[8] a un lugar donde la iglesia
no ocultase su vista, en el punto donde confluían las calles Fayette y
Greene. (Véase las fotografías 1 y 2, que se incluyen al final de este
artículo.)
Finalmente, el 17 de noviembre de 1875, se celebró un acto público al
que asistieron un gran número de personas, destacando: Walt Whitman, John
H. B. Latrobe[9], el juez Neilson Poe (primo de Edgar) el profesor John
Hewitt[10], el doctor John H. Snodgrass[11], el profesor N. C. Brooks[12],
el profesor Joseph Clarke[13], etc. Los allí presentes pudieron disfrutar
de recitales poéticos, actuaciones musicales y de la lectura de cartas que
remitieron escritores de reconocido prestigio, tanto americanos como
europeos. Entre ellas destacaban las de John, G. Whittier, W. C. Bryant, W.
Longfellow, O. W. Holmes, S. D. Lewis, Sarah Helen Whitman, John Neal,
John Ingram, Stéphane Mallarmé, etc. Asimismo, tuvieron el privilegio de
poder oír las charlas que, con motivo de la celebración pronunciaron el
Reverendo William Rounseville Alger[14], el coronel J. T. L. Preston[15],
el profesor William Elliott Jr.[16], el profesor y escritor Henry Elliot
Shepherd, John H B. Latrobe y Neilson Poe. El Reverendo Alger destacó,
entre otros aspectos, que Poe había sido víctima de malas interpretaciones
y que había que centrase en su "brillante capacidad intelectual, su
desbordante imaginación y su amor por la belleza y el arte"; el coronel
Preston recordó los tiempos en los que Poe y él fueron compañeros de
colegio, lo describió como indomable y caprichoso, añadió que la mayor
parte de los otros alumnos lo rechazaban por ser hijo de actores y vivir de
la "caridad" de los Allan, pero lo alabó como estudiante y poeta,
incidiendo en la veneración que él sentía hacia Poe; William Elliot explicó
cómo y cuándo se habían iniciado los trámites para la construcción del
monumento[17]. Posteriormente, el profesor Shepherd pronunció una
conferencia titulada "El genio y el carácter literario de Poe", en la que
resaltaba los méritos poéticos del autor de "The Raven", John Latrobe narró
sus recuerdos sobre el día en el que se el otorgó a Poe el premio por su
relato "Manuscrito hallado en una botella", Neilson Poe pronunció unas
palabras de agradecimiento a los allí presentes y, a renglón seguido, la
señora Sara Sigourney Rice y el profesor Elliott procedieron a descubrir
el monumento. Diez años más tarde, los restos de su esposa Virginia[18] y
de su suegra, Maria Clemm[19], fueron incorporados al mausoleo.
Sara Sigourney Rice recogió los discursos, cartas y poemas en una
especie de libro de actas titulado A Memorial Volume, publicado en 1877 en
Baltimore por Turnbull Brothers. El libro comienza con un prefacio en el
que Rice explica que el motivo del acto tenía un doble propósito: honrar
los restos del escritor y honrar su memoria, para acabar, de una vez por
todas, con las calumnias y difamaciones que se habían levantado en su
contra (1887: vii). A continuación se incluye la biografía —revisada— que
John Ingram había añadido a su edición de las obras completas de Poe en
1880, ahora titulada "A Biographical Sketch", y después se detallan el
resto de actividades realizadas durante ese día. El volumen es toda una
obra de arte y un testimonio "vivo" de la transcendencia que el padre del
relato moderno había tenido, habría de tener y sigue teniendo.
Desde la perspectiva de hoy en día, se puede inferir que, a partir de
ese momento, los norteamericanos se habían reconciliado, por fin, con el
poeta y ya no cesarían las conmemoraciones. Nos detendremos aquí sólo en
aquellas que consideremos más relevantes para el público al que van
dirigidas estas páginas. Por ejemplo, el 17 de abril de 1881, en el New
York Times aparecía una reseña en la que se informaba sobre una serie de
actos que estaban siendo organizados por la Asociación de Actores de Nueva
York para recoger fondos con el fin de costear un monumento en memoria del
"mayor de nuestros escritores"[20]. El monumento, esculpido en mármol por
Richard Henry Park[21] entre 1882-84, fue descubierto en el Museo de Arte
Metropolitano de Nueva York el día 4 de mayo de 1885, durante una
celebración en memoria de Poe. A ella asistió, también, una gran cantidad
de público y entre los organizadores se encontraban personalidades hoy ya
casi olvidadas, pero muy interesantes y que entonces sí eran famosas. Por
ejemplo, el acto estuvo presidido por el Reverendo Edwin Booth, Presidente
de la Asociación de Actores, quien intervino en nombre de ellos, a
continuación habló Algernon S. Sullivan (1827-1887)[22], quien insistió en
el genio de Poe y manifestó que desde ese momento el Museo Metropolitano de
Arte de nueva York había dejado de ser en un simple museo para convertirse
en un altar en el que honrar a la intelectualidad. Asimismo, se encontraba
allí el Reverendo William Rousenville Alger —que también había estado
presente en la ceremonia de Baltimore— y que habló en términos muy
similares con una conferencia titulada: "The Mission and Errors of Genius
as Seen in the Personality and Works of Edgar Allan Poe". El Director del
Museo, el General L. P. Di Cesnola[23], recibió el monumento con gratitud;
y éste fue descubierto, con grandes aplausos por parte del público. La obra
simula un monumento funerario y está realizada en mármol blanco. En ella,
tal y como puede apreciarse en las fotografías, se muestra a una mujer —que
representa a la diosa Fama— sujetando una corona de laurel, dentro de la
cual se enmarca un relieve con el busto del poeta tallado en bronce. Al
igual que hubiese sucedido con la conmemoración del cementerio, en esta
ocasión el volumen que resultó estuvo a cargo del propio escultor y recibió
el título de: The Dedication Exercises of the Actor's Monument to Edgar
Allan Poe y fue publicado ese mismo año (1885) por el Museo Metropolitano
de Arte de Nueva York. (Véase las fotografías 3 y 4, incluidas al final de
este artículo.)
Muy pocos años después, la Universidad de Virginia –en la que como es
bien sabido Poe cursó un año académico— encargó un busto de nuestro
escritor para celebrar el cincuenta aniversario de su muerte. En esta
ocasión, el artista elegido por la "Poe Memorial Association" habría de ser
George Julian Zolnay[24]. La escultura fue descubierta en un acto que tuvo
lugar el día 7 de octubre de 1899, en la Biblioteca Alderman de la propia
universidad, y tras pasar cien años en la tercera planta, fue traslada al
primer piso, a una zona de mayor accesibilidad, el mismo día en el que se
conmemoraba el ciento cincuenta aniversario de la muerte del poeta. (Véanse
las fotografía 5 y 6, que se incluyen al final de este artículo.
Estas manifestaciones de aprecio y respeto al arte de Poe tuvieron su
punto más álgido en 1909, con motivo del primer centenario de su
nacimiento. Se organizaron actos de diverso tipo en Baltimore (John Hopkins
University), Richmond, Nueva York, West Point, Boston, Virginia, e incluso
Londres[25]. Nueva York, por ejemplo, honró al autor de "The Fall of the
House of Usher" con la organización de varias conferencias, que tuvieron
lugar en las Universidades de Nueva York y de Columbia, la exhibición de un
manuscrito de "Annabel Lee", y con la colocación de un busto –obra de
Edmond Thomas Quinn[26]– en su honor, en el "Poe Park", en Fordham, junto a
le pequeña casita en la que habían vivido los Poe entre 1846-49, y en la
que Virginia había exhalado su último aliento. (Véanse las fotografías 7, 8
y 9, incluidas al final de este artícul.)
De entre todas las estas ceremonias de 1909, quizás la más destacada
fuese la que se llevó a cabo en la Universidad de Virginia durante los días
16, 17, 18 y 19 del mes de enero, donde se celebró lo que hoy
consideraríamos un congreso internacional en toda regla. El Libro del
Centenario de Poe (The BOOK of the POE CENTENARY), editado por Charles W.
Kent[27] y John S. Patton[28] y publicado en 1909 por la propia
Universidad, contiene un excelente reflejo de lo allí acontecido[29]:
cuatro intensas jornadas en las que hubo, al igual que en los eventos antes
descritos, conferencias —incluso se pronunció una en francés por parte del
Dr. Alcée Fortier, procedente de la Universidad de Tulane[30] y otra que
estuvo impartida por el Doctor Georg Edward[31], venido de Alemania y que
trabajaba en Estados Unidos en aquel momento—, recitales, lectura de cartas
provenientes de americanos y europeos[32] de "reconocido" prestigio, y la
apertura al público de la habitación en la que Poe se había alojado, el
número 13 de West Range. De destacar es, por un lado, la intervención de
Herbert Melville Nash[33], que había conocido a Poe personalmente en
septiembre de 1849, en Norfolk, poco antes de su muerte, con motivo de una
charla sobre su poema "El cuervo". Explicaba Nash, en esta intervención,
que había quedado impresionado por el aspecto de Poe, a quien describía
como un caballero sorprendente, de aspecto cordial y digno[34]. Añadía que
sabía, por fuentes directas, que Poe nunca escribió ni una sólo línea bajo
la influencia del alcohol y que cuando bebía, lo hacía movido por un
impulso incontrolable (Kent y Patton: 30–31). Por otra parte, lo más
destacado de este volumen era, tal y como ha señalado Scott Peeples, el
esfuerzo que comenzó a hacerse, a partir de ese momento, por "americanizar"
al maestro (2004: 17-20). Dos fueron las conferencias que se impartieron en
esta línea, la del Dr. Barrett Wendell[35], Catedrático de la Universidad
de Harvard, quien habló de "El nacionalismo de Poe" (Kent y Patton: 117-
158) para terminar afirmando que Poe no sólo era americano, sino también
"único" (Kent y Patton: 156), y la de el Dr. Alphonso Smith, de la
Universidad de Carolina del Norte, que pronunció la conferencia titulada
"El americanismo de Poe" (Kent y Patton: 159-179). Smith resaltaba el buen
hacer artístico de Poe, destacando que ahí era precisamente donde residía
su americanismo[36].
En 1900 el "Bronx Community College" había fundado el "Hall of Fame"
con la intención de honrar a aquellas figuras norteamericanas que habían
hecho una gran labor en campos tan amplios y variados como el arte, la
literatura, la ciencia, la medicina, la política, etc. Después de diez
años de controversia, Poe fue admitido en 1910. La ceremonia de colocación
del busto no tuvo lugar hasta 1922, el día 20 de mayo, cuando el poeta
Edwin Markham (1852 -1940) descubrió el busto, obra de Daniel Chester
French[37]. (Véase la fotografía 10, que aparece al final de este
artículo.)
Por su parte, también en Baltimore y en preparación para el centenario
se había creado, en 1896, la "Poe Memorial Association". En 1907, el
"Women's Literary Club" de Baltimore comenzó, junto con la "Poe Memorial",
la recaudación de fondos para erigir un monumento en recuerdo suyo. Sir
Moses Jacob Ezekiel[38] fue el escultor elegido pero la obra no estuvo
terminada hasta 1916 y no pudo llegar a Baltimore hasta cinco años más
tarde. Por fin, el 21 de octubre de 1921 la estatua fue descubierta en
Wyman Park (fotografía 10); recientemente, en 1983 y por indicación de la
"E. A. Poe Society" de Baltimore, fue trasladada a la plaza de la Facultad
de Derecho (fotografía 11). Tras la inauguración del la estatua, la "Poe
Memorial Association" comenzó a organizar un grupo oficial que recibió el
nombre de "Edgar Allan Poe Society" de Baltimore; esta nueva Sociedad
inició su andadura el 19 de enero de 1923. Desde entonces, la Edgar Allan
Poe Society organiza actos públicos para honrar al maestro del misterio:
recitales musicales y poéticos, exhibiciones, conferencias, etc.
A lo largo del siglo XX, muchas otras celebraciones se sucedieron. No
queremos dejar de dedicar unas líneas a la encomiable labor que viene
realizando la "Poe Studies Association" (PSA), fundada en 1972 con el ánimo
de promover un foro de intercambio sobre la vida y obra del bostoniano. En
1973 la asociación decidió el lanzamiento de una publicación bianual, The
Poe Studies Association Newsletter, cuyos primeros editores fueron dos
eminentes estudiosos de Poe: Eric Carlson y John Reilly[39]. En junio del
año 2000, la publicación se convirtió en The Edgar Allan Poe Review,
editada por Barbara Cantalupo, y auspiciada por la PSA y la Penn State
Lehigh Valley, con una periodicidad semenstral. Posteriormente, en el
2004, la revista dejó de depender de la Peen State y pasó a manos de la St.
Joseph's University, momento en el que Richard Fusco y Peter Norberg se
unieron a ella en calidad de co-editores. La PSA patrocina dos sesiones
anuales, una en la Convención que todos los años celebra en el mes de
diciembre la "Modern Language Association" y otra en la Convención de mayo
de "The American Literature Association Conference". Además, la PSA ha
organizado una serie de congresos internacionales adicionales, como el que
tuvo lugar en Richmond, Virginia, en octubre de 1999, para conmemorar el
150 aniversario de la muerte de Poe; o el que se llevó a cabo en Towson,
Maryland, en octubre de 2002; o el que se celebró en Oxford, Inglaterra, en
julio de 2006, en colaboración con las Sociedades de Emerson y de
Hawthorne.
En 1968 comenzó su andadura en la Washington State University otro
foro para el dialogo en torno a la vida y la obra del autor de "La caída de
la Casa Usher": The Poe Newsletter —con G.R. Thompson como editor—, en 1971
pasó a llamarse Poe Studies, y en 1986 Poe Studies/Dark Romanticism.
Actualmente la revista está a cargo de Scott Peeples y Jana L. Argersinger
y es publicada anualmente por la "Washington State University Press" con la
colaboración del Centro de Recursos Humanos, el College de Liberal Arts y
el Departamento de Inglés de la misma Universidad. Su página web, mantenida
regularmente, es uno de los pocos lugares fiables de Internet para llevar a
cabo una investigación rigurosa sobre el autor.
En lo que al momento presente se refiere, el diecinueve de enero de
2009 hemos asistido a la celebración del segundo centenario del nacimiento
de Edgar A. Poe y se le está homenajeando de muy diversos modos[40]. Por
ejemplo, mientras escribimos estas líneas se están preparando varios
eventos: en marzo, tendrá lugar en Lisboa el Congreso Internacional "Poe
200th Birthday"; en mayo, el Instituto Universitario de Estudios
Norteamericanos de Alcalá de Henares será la sede del Congreso
Internacional "Poe presente en el Siglo de la Ansiedad"; en septiembre la
Biblioteca Nacional Rusa acogerá en San Petesburgo el Congreso que lleva
por título: "International Scientific and Practical Conference: Edgar Allan
Poe's Legacy and the Twenty First Century"; y en octubre se celebrará en
Filadelfia —una de las ciudades en las que Poe buscó fortuna como editor y
escritor durante algunos años— el que promete ser el mayor Congreso
celebrado hasta el momento en torno a nuestro escritor: "The Third
International Edgar Allan Poe Conference: The Bicentennial".
También el día o los días inmediatamente previos o posteriores a su
"cumpleaños", los culturales de la mayor parte de los periódicos españoles
–sin mencionar los de otros países europeos o americanos— le han dedicado
algunas páginas: el 17 de enero, aparecían en el ABCD, artículos de Blas
Matamoro, Fernando Martínez Laínez y Miguel Sánchez-Ostiz; el 19 de enero,
La Vanguardia le dedicaba una página a Poe como "padre" del género
policial; el 24 de enero, Fernando Savater hablaba de los "herederos"
literarios de Poe en El País Babelia, etc.
Aprovechando "el tirón" los hay que hasta ofertan vacaciones en
lugares exóticos relacionados con Poe. Por ejemplo, en la isla de Sullivan
(en la costa de Charleston), donde Poe pasó un año mientras que estuvo
enrolado en el ejército, y donde transcurre la acción de "El escarabajo de
oro", han decorado y dispuesto todo para celebrar el bicentenario. Así, el
turista que se acerque allí atraído por sus deliciosas playas de arena
blanca, podrá también acercarse a la biblioteca local, la Edgar Allan Poe
Library, donde los encargados de la misma —Jeri England y Linda Rumph,
entre otros— le entregarán un folletito con preguntas como: "En el relato
'El corazón delator', ¿dónde estaba el corazón escondido?". Los amantes de
Poe recomiendan que se llegue a Charleston por la costa, se cruce el río y
se entre desde allí en la pequeña isla. Después aconsejan pasear por Gold
Bug Avenue y por la Poe Avenue, donde en el número 1921 se encuentra la
biblioteca. Si se continúa andando hasta el final de la isla, se llega al
fuerte Moultrie, ahora monumento nacional, y desde allí se contempla una
excelente vista del puerto de Charleston.
Pero las conmemoraciones en torno al bicentenario no empezaron en
enero de 2009. Algunos se adelantaron un poco: Por ejemplo, a finales de
2008, entre los meses de septiembre-noviembre, se levantaron nuevas
ampollas en la ya tradicional disputa que algunas ciudades norteamericanas
(Filadelfia, Nueva York y Baltimore) vienen manteniendo al reivindicar para
sí al genio[41]; el 14 de noviembre el "Triangel Club", grupo de teatro de
la Universidad de Princenton, estrenó su "extravaganza musical anual",
titulada "Stark Raven Mad", una comedia musical en honor al "maestro
americano de lo macabro"; También en el Matthew Corozine Studio Theatre de
Nueva York, se puso en escena el 16 de mayo por primera vez, Death by the
Visitation of God, un viaje por la mente, el corazón y el alma de Poe.
Otros incluso precedieron a éstos: en 2006, Matthew Pearl, el aclamado
escritor norteamericano de The Dante Club (Club Dante, 2003), publicaba The
Poe Shadow (La sombra de Poe), una novela en la que se recrean los últimos
días de la vida del bostoniano y se elucubra en torno a su muerte. En
nuestro país, en septiembre de 2002, Dagoll Dagon representaba, por
primera vez, en Barcelona el musical Poe, bajo la dirección de Joan Lluís
Bozzo. A continuación, pudimos asistir en la prensa a la polémica desatada
entre el propio Bozzo y Eduardo Mendoza, lo que volvió a abrir una
discusión entre intelectuales en torno al escritor. Unos años antes, en
1997, Ediciones Altera publicaba El faro, una propuesta de continuación del
último relato inconcluso de Poe ("The Lighthouse", 1849), en la que nueve
escritores de habla española se adentraban en esta historia para inventarle
un final.
Y es que, aunque, como hemos tenido ocasión de comprobar en la primera
parte de este artículo, son cuantiosos los críticos (y escritores) que
—desde el obituario de Griswold— han analizado su obra y vida, y bajo
perspectivas muy diferentes, todavía muchos otros seguiremos indagando en
su amplia producción. Por ello y como homenaje a la labor de este eminente
escritor y, también, como contribución a las conmemoraciones a las que nos
referíamos más arriba, las dos firmantes de este artículo organizamos un
Congreso de carácter internacional que tuvo lugar los días 3, 4, 5 y 6 de
febrero de 2009, bajo el título de "Edgar Allan Poe: Doscientos años
después/ Edgar Allan Poe: Two Hundred Years Later". Siendo nuestra
Universidad, la de Castilla-La Mancha, la que tuvo el privilegio de
celebrar el primero de los que este año se llevarán a cabo. La sede fue la
Facultad de Humanidades del Campus de Albacete, donde confluyeron
estudiosos y eminentes especialistas provenientes de buen número de
universidades españolas, de otros países europeos, y de Norteamérica.
Nuestro ánimo era profundizar tanto en la amplia producción como en la
vida del autor de "La caída de la casa Usher", ya que, pese a que
escritores, periodistas, y aficionados de todo tipo se atreven a escribir o
hablar sobre él y sus obras, la imagen erróneamente heredada en España
continúa siendo una sombra de la leyenda forjada por el propio Poe, por el
citado Griswold, por otros de sus contemporáneos (muchos de ellos arriba
mencionados) y por el también legendario Baudelaire[42]. Por ello, tanto
las conferencias, ponencias y seminarios que aquí se presentaron —y de las
que a continuación incluimos una selección— se centraron en el análisis y
la revisión de las últimas aportaciones científicas en torno a la vida y
obra de Poe, al período histórico-literario en le que escribía y a las
influencias en escritores y obras posteriores. Con este fin, constituimos
un Comité Organizador formado por las dos firmantes de esta introducción:
la Dra. Margarita Rigal Aragón y la Dra. Beatriz González Moreno, ambas
profesoras del Departamento de Filología Moderna de la UCLM. De la
Secretaría del Congreso se encargaron dos compañeros de la Facultad de
Humanidades de Albacete: el Dr. Fernando González Moreno, profesor del
Departamento de Historia del Arte y el Dr. Ricardo Marín Ruiz, profesor del
Departamento de Filología Moderna. Como vocales primero y segundo actuaron
dos Becarios de Investigación del Departamento de Filología Moderna de la
Universidad de Castilla-La Mancha, que se encuentran en este momento
realizando sus Tesis Doctorales: Don Ángel Galdón Rodríguez (adscrito a la
Facultad de Humanidades de Albacete) y Doña Isabel Jiménez González
(adscrita a la Facultad de Letras de Ciudad Real). Los vocales tercero y
segundo fueron Kathryn Sue Radosta, Ayudante del English Department de la
University de Nebraska at Omaha y Don Juan Antonio Romera Velasco, entonces
becario del Aula de Idiomas de la Facultad de Humanidades de Albacete. Sin
los desvelos de unos y otros y sin su valiosa y siempre pronta colaboración
este evento no habría resultado satisfactorio. Tampoco lo habría sido sin
los excelentes miembros del Comité Científico que nos avalaron y apoyaron
en todo momento, analizando y seleccionando, en una primera fase, las muy
diversas y numerosas propuestas que nos llegaron: La Dra. Barbara
Cantalupo, Associate Professor of English (Profesora Titular) de la
Pennsylvania State University y Editora de The Edgar Allan Poe Review; el
Dr. Richard Fusco, Associate Professor (Profesor Titular) de The Saint
Joseph's University, Philadelphia, y también editor, con anterioridad, de
The Edgar Allan Poe Review; el Dr. Fernando Galván Reula, Catedrático del
Departamento de Filología Moderna, de la Universidad de Alcalá, Presidente,
desde 2002, de ESSE ("European Society for the Study of English"),
asociación que agrupa a 33 asociaciones nacionales de estudios ingleses en
todos los países europeos, y anteriormente (1996-2002) Presidente de la
Asociación Española de Estudios Anglo-Norteamericanos (AEDEAN); el Dr.
Scott Peeples, Full Professor of English (Catedrático) del College of
Charleston, en Carolina del Sur y Editor de la Poe Studies; y la Dra.
Socorro Suárez Lafuente, Catedrática del Departamento de Filología Moderna
de la Universidad de Oviedo y actual Presidenta de AEDEAN. Dos de ellos no
pudieron acompañarnos en persona, por motivos tanto profesionales como
personales, durante la celebración del Congreso: Richard Fusco y Socorro
Suárez, sin embargo, sí estuvieron con nosotros en "espíritu", siguiendo
las numerosas noticias que les llegaban a través de los organizadores,
ponentes, la web, etc.
Las cuatro jornadas de trabajo se distribuyeron en torno a
Conferencias Plenarias, Seminarios, Ponencias y una Mesa Redonda, y
estuvieron aliñadas por una representación teatral inspirada en el relato
"El corazón delator", a cargo de Clipes Producciones, y un recital de
textos en poesía y prosa interpretados por el irlandés Patrick Donohue. La
Conferencia Inaugural, "Poe en el laberinto", estuvo a cargo del Dr. José
Antonio Gurpegui Palacios, Director del Instituto Universitario de Estudios
Norteamericanos (Universidad de Alcalá), quien resumió la trayectoria vital
del autor de "El cuervo", tratando algunas de las cuestiones más
controvertidas en torno a la persona de Poe: relaciones de
amistad/enemistad, relaciones con su esposa-prima, relaciones con el
alcohol y las drogas, circunstancias de su muerte, etc. Todo ello adornado
con un entretenido cuento suyo al más puro "estilo" poeniano. Por su parte,
el Dr. Antonio Ballesteros González (Profesor Titular de Universidad
Nacional de Educación a Distancia, Madrid), experto en Literatura Inglesa
del período romántico y autor, entre otros muchos de Narciso y el doble en
la literatura fantástica victoriana (1998)[43], puso el broche de oro al
Congreso con una excelente Conferencia de Clausura titulada "Un cierto
sentido de la irrealidad: Poe y sus dobles"[44]: En ella, desveló con
erudición y pasión múltiples facetas de tan relevante aspecto de la obra
poeniana.
Las otras tres Conferencias Plenarias fueron dictadas por tres de los
miembros del Comité Científico: Scott Peeples, Fernando Galván Reula y
Barbara Cantalupo. El Dr. Peeples, que recoge ahora en su país la antorcha
de los más eminentes especialistas en Poe —como Thomas Ollive Mabbott,
Burton R. Pollin y J. Gerald Kennedy— dedicó su charla, titulada "Poe and
Pain"[45] a señalar con gran elocuencia la presencia de situaciones de
sufrimiento en la producción literaria de Poe, prestando especial atención
a "El pozo y el péndulo" y a otros relatos de corte "satírico" como "El
aliento perdido". Por su parte, en "Poe y Dickens: una historia de
encuentros y desencuentros"[46], el Dr. Fernando Galván nos ilustró –con
todo lujo de detalle— sobre la compleja relación literaria y personal entre
dos de los escritores más destacados de uno y otro lado del Atlántico. La
Dra. Barbara Cantalupo, en "Poe and the Visual Arts"[47], sacó a la luz
aspectos altamente reveladores y esclarecedores de la crítica artística que
Poe realizó sobre pintores y escultores de su época.
Los dos seminarios estuvieron precedidos, cada uno, por sendas
conferencias impartidas una por Margarita Rigal Aragón y otra por Beatriz
González Moreno. La Dra. Beatriz, en la tercera jornada del Congreso,
explicó con maestría la compleja relación existente entre Sir Arthur Conan
Doyle y Edgar A. Poe, o más bien entre sus "criaturas": Dupin y Holmes, en
una conferencia titulada "La controversia entre Dupin-Holmes (o Poe-
Doyle)". A continuación, a modo de taller, mostró textos e imágenes en las
que se apreciaba cómo el maestro Doyle había siempre reconocido el mérito y
su deuda para con el maestro Poe. El seminario se cerró con un animado
debate entre la investigadora y los asistentes, quienes llegaron a concluir
que de no haber sido por la pareja Holmes-Watson, tal vez la pareja Dupin-
amigo/narrador habría pasado más desapercibida para los anales de la
historia literaria. La Dra. Rigal, por su parte, en la segunda tarde del
Congreso, explicó en su Conferencia "Edgar Allan Poe: Doscientos años
después. Cómo se forjó la leyenda" cómo contextualizar a Poe en su época,
insistiendo en la importancia de encuadrarlo, para entender su obra, como
figura central del "Renacimiento Americano"[48] y procedió a ahondar en la
vasta producción del autor, incidiendo en el hecho de que Poe no era "sólo"
un escritor de cuentos y poemas, sino también el autor del más amplio
corpus literario producido hasta el momento por un autor norteamericano
(más de mil reseñas críticas, estudios poéticos, ensayos, etc. fueron
publicados durante su vida). A continuación, ya centrándose en los relatos,
clarificó los términos "arabesco" (extraño, fantástico, complicado) y
"grotesco" (cómico distorsionado), que son los que habitualmente se han
aplicado al clasificarlos, para remarcar que tal "separación", según su
opinión y sus investigaciones, no se corresponde con los designios del
maestro. La conferencia concluyó con un taller en el que se leyeron
fragmentos representativos de relatos de Poe con los que se ilustraba lo
expuesto y con un interesante coloquio entre los asistentes.
La mesa redonda, coordinada por el Dr. Santiago Rodríguez Guerrero-
Strachan (Universidad de Valladolid), contó con la presencia del Dr. José
Ramón Ibáñez (Universidad de Almería) y del Dr. Emilio Cañadas (Universidad
Alfonso X El Sabio, Madrid) y versó sobre "La larga sombra de Edgar Allan
Poe en España en el siglo XX". Tras la misma, se desarrolló un animado
debate sobre la marcada permanencia del maestro norteamericano en la
literatura española tanto del siglo XIX como del XX. Pero España también
estuvo presente en la intervención de Fernando González de León, que
rastreó las referencias españolas en la obra de Poe; y en la de Ricardo
Marín, que examinó la influencia de Poe en las Leyendas de Bécquer.
Las sesiones de ponencias abarcaron una amplia gama de aspectos. Como
no podía ser de otro modo, Baudelaire estuvo presente en las intervenciones
de Sonya Isaak, quien profundizó en la relación entre Poe y el poeta
francés, presentándolos como antihéroes y víctimas de una sociedad con la
que, a su vez, habían sido críticos; y de Olga Elwes, quien analizó los
prólogos que Baudelaire escribió a su traducción al francés de los cuentos
de Poe; Ignacio Ramos, por su parte, se centró en la relación entre Poe y
Victorien Sardou y cómo este último dramatiza "The Purloined Letter"
exaltando su naturaleza vodevílica. Aparte de las relaciones de Poe con
España y Francia, Marta Miquel-Baldellou examinó la herencia británica en
la obra del bostoniano; y Christopher Rollason puso de manifiesto la
relación del escritor norteamericano con Borges, comparando "The Fall of
the House of Usher" y "Tlön, Uqbar, Orbis Tertius".
A lo gótico y lo sobrenatural prestaron atención Esther Bautista,
quien se centró en el motivo del espejo en la obra de Poe y lo comparó con
la de Oscar Wilde; Ana González-Rivas, que, por su parte, llevó a cabo un
análisis de las referencias clásicas en "The Assignation"; y, finalmente,
Javier Sánchez examinó la presencia de la femme fatale, del vampiro
femenino, en "Berenice", "Morella" y "Ligeia". La ciencia ficción también
estuvo representada gracias a Isabel Jiménez, quien nos ofreció un retrato
de Poe como fabulador de mentiras y gran maestro de la verosimilitud, y
Ángel Mateos-Aparicio, que se centró en la influencia de Poe en Ray
Bradbury. Ángel Galdón, por su parte, se centraba en los homenajes de Roger
Corman, Tim Burton y The Simpsons a la obra de Edgar Allan Poe.
Un análisis más estético-filosófico de la obra de Edgar Allan Poe fue
el llevado a cabo por Santiago Rodríguez, que analizó lo pintoresco y la
melancolía en la obra poética de Poe; Jennifer C. Cook, que exploró los
límites de la epistemología en Narrative of Arthur Gordon Pym of Nantucket;
Stephanie Sommerfeld, que analizó la relevancia de lo sublime en "The
Domain of Arnheim"; y Mary Carmen Pérez, que señaló cómo la obra de Poe
está atravesada por el silencio, repleta de imposibilidad y de dificultades
para expresar el horror o lo sobrenatural. También la lingüística tuvo
cabida a la hora de adentrarnos en la obra del bostoniano. Eusebio Llácer,
Amparo Olivares y Nicolás Estévez efectuaron un análisis cognitivo del
relato "The Masque of the Red Death"; y Eduardo de Gregorio ofreció un
estudio retórico-discursivo de "Ligeia", examinando los valores y funciones
de la descripción, la imagen metafórica y la comparación.
Ni que decir tiene que el Congreso resultó grato a todos,
organizadores, conferenciantes, ponentes, asistentes, quienes disfrutamos y
aprendimos sobre el maestro del terror y del relato policíaco. Hasta
creemos que el propio Poe disfrutó con la celebración, pues mientras el Dr.
Ballesteros pronunciaba las últimas palabras de su conferencia de clausura,
se levantó un viento infernal, seguido de una terrible tormenta. Sin duda
Poe estuvo allí, acompañándonos y deleitándose con la merecida fama que ha
logrado alcanzar, aunque para ello haya tenido que esperar doscientos años.
No en balde, el narrador de "Conversación con una momia" decía, al término
de su relato:
Diré la verdad: estoy amargamente cansado de esta vida y del siglo
XIX en general. Me siento convencido de que todo va mal. Además
tengo gran ansiedad por saber quién será Presidente en 2045. Por
eso, tan pronto me haya afeitado y bebido una taza de café, volveré
a casa de Ponnonner y me hará embalsamar por un par de cientos de
años.

Referencias
Baudelaire, C. (1852). "Edgar Allan Poe", en Hyslop, L. & F. (1952).
Baudelaire on Poe: Critical Papers, Bald Eagle: Bald Eagle Press.
Clarke, G. (1991). Edgar Allan Poe: Critical Assessment, East Sussex: Helm
Information.
Griswold, R.W. (1849). "Death of Edgar Allan Poe", obituario aparecido tras
la muerte de Poe en el New York Daily Tribune, recogido en Clarke, op.
cit., 286-288.
Kent, Ch. W. and J. Sh. Patton (1909). The Book of the Poe Centenary: A
Record of the Exercises at the University of Virginia January 16-19,
1909, in Commemoration of the One Hundredth Birthday of Edgar Allan
Poe. University of Virginia.
Peeples, S. (2004). The Afterlife of Edgar Allan Poe. Rochester, New York:
Camden House.
----- (2009): "Nowhere Man: The Problem of Poe and Place", en Nexus/
Aedean, Santiago de Compostela.
Rice, S. S. (1887). Edgar Allan Poe: A Memorial Volume. Baltimore: Turnbull
Brothers.
Rigal Aragón, M. (2000): "Malentendidos en torno a la vida y obra de Edgar
Allan Poe", en Revisión del canon literario norteamericano: 1607?-
1890, Cuenca: Servicio de Publicaciones de la Universidad de Castilla-
La Mancha.
Apéndice
Fotografía 1: Lápida que marca el supuesto lugar en el que Poe fue
enterrado en 1849.


Fotografía 2:
Monumento erigido en 1875, donde ahora se encuentran los restos de Poe,
Virginia y Maria Clemm.


Fotografía 3


Fotografía 4: Monumento encargado por la Asociación de Actores, esculpido
por Richard Henry Park

Fotografía 5:
Busto realizado por J. Zolnay








Fotografía 6











Fotografía 7:
Entrada actual al "Parque Poe"



Fotografía 8: Aspecto actual al de la casa que habitaron los Poe en Nueva
York,
en Fordham


Fotografía 8:
Busto realizado por Edmond Thomas Quinn















Fotografía 9:
Busto esculpido por Daniel Chester French



Fotografía 10:
Estatua realizada por Moses Jacob Ezekiel





Fotografía 11:
La misma estatua que aparece en la fotografía anterior, pero en su
ubicación actual.


-----------------------
[1] "EDGAR ALLAN POE is dead. He died in Baltimore the day before
yesterday. This announcement will startle many, but few will be grieved by
it. The poet was well known, personally or by reputation, in all this
country; he had readers in England, and in several of the states of
Continental Europe; but he had few or no friends; and the regrets for his
death will be suggested principally by the consideration that in him
literary art has lost one of its most brilliant but erratic stars" (Clarke
1991: I, 69-74).
[2] A éste el seguiría en 1856: las Histories Extraordinaires, que
contenían el citado artículo y la traducción al francés de 14 de los
cuentos de Poe; en 1857: Nouvelles Histories Extraordinaires (con 23
cuentos); en 1858: Adventures d'Arthur Gordon Pym; en 1863 Eureka; y en
1865, Histories Grotesques Et Sériuses, con 9 cuentos, un poema ("El
cuervo") y una de las piezas más interesantes de la extensa crítica
literaria del autor ("La filosofía de la composición"). Todos ellos fueron
apareciendo en París, editados por Michel Lévy.
[3] Aunque la de mayor repercusión en nuestro país fuese la de Baudelaire.
[4] Para aquel que desee adentrarse en profundidad en este apasionante tema
recomendamos encarecidamente la lectura del primer capítulo ("The Man That
Was Used Up: Poe's Place in American Literature, 1849-1909", pp. 1-28) del
libro de Scott Peeples, The Afterlife of Edgar Allan Poe, recogido en la
bibliografía.
[5] "Public School Teachers Association of Baltimore".
[6] El edificio de la iglesia fue construido seis años después de la muerte
de Poe, en 1855.
[7] El mismo arquitecto que había diseñado del Ayuntamiento de Baltimore.
[8] Los restos descansaban en un lugar sin lápida dentro de un terreno que
había pertenecido desde generaciones a la familia paterna de Poe.
[9] Latrobe fue uno de los jueces que contribuyese a que a Poe se le diese
el premio del Baltimore Saturday Visiter en 1833 por su "Manuscrito hallado
en una botella".
[10] Que había sido editor del Saturday Visitor.
[11] Arriba mencionado.
[12] Editor de la American Magazine.
[13] A cuya escuela asistió Poe de niño en Richmond.
[14] El título de la misma era: "The Mission and Errors of Genius as Seen
in the Personality and Works of Edgar Allan Poe".
[15] Quien había sido compañero de Poe en el colegio del profesor John
Clark.
[16] Presidente del "City College" de Baltimore.
[17] "But the neglected grave was not always to remain such. At a regular
meeting of the Public School Teachers' Association, held in this hall,
October 7, 1865, Mr. John Basil, Jr. Principal of No. 8 Grammar School,
offered a paper, of which the following is a copy: It has been represented
to certain members of the Association that the mortal remains of Edgar
Allan Poe are interred in the cemetery of the Westminster Church without
even so much as a stone to mark the spot; therefore, it was resolved, that
a committee […] be appointed […] to devise some means best adapted in their
judgment to perpetuate the memory of one who has contributed so largely to
American literature" (Rice 1887: 45-46).
[18] Virginia había sido enterrada en New York en 1847.
[19] Fallecida en 1871.
[20] "To show public regard for the greatest among our early authors".
[21] Richard Henry Park (1832–1902), escultor nacido en Nueva York y de
reconocido prestigio en su época.
[22] Escritor, político y orador de gran renombre en a época, que fue el
Presidente del Comité para la organización del acto.
[23] Luigi Palma di Cesnola (1832 - 1904): soldado americano que había
nacido en Turín y que recibió la Medalla al Honor por sus acciones durante
la Guerra Civil Americana. Fue el primer director del Museo Metropolitano
de Nueva York, al que donó las antigüedades que había encontrado durante
unas excavaciones en Chipre.
[24] G. J. Szolnay había nacido en Rumania en 1863, pero en 1892 se
trasladó a vivir a Nueva York, y se convirtió en ciudadano americano dos
años más tarde. Fue un prominente artista de la época. Falleció en 1940.
[25] Donde el día 1 de marzo de 1909 se celebraba, por iniciativa del
"Author's Club" un banquete en honor de Poe. En la velada intervino Arthur
Conan Doyle, quien habló de los logros del bostoniano y se quejó de que aún
no hubiese sido admitido en el "Hall of Fame".
[26] La Sociedad para las Artes y las Ciencias del Bronx, encargó al
escultor E. T. Quinn (1868–1929) este busto, realizado en bronce, que fue
colocado en el parque en 1909, y trasladado posteriormente al interior del
cottage debido a que estaba siendo objeto de actos vandálicos.
[27] Charles William Kent (1860-1917) fue profesor, editor y crítico.
Durante la época en la que el volumen fue editado, él era el responsable de
la Cátedra de la "Liden Kent Memorial School of English Literature" de la
Universidad de Virginia.
[28] John Shelton Patton (1857-1932) el entonces Bibliotecario Jefe de la
Universidad.
[29] De hecho, el subtítulo del volumen lo explica con total claridad: "A
Record of the Exercises at the University of Virginia January 16-19, 1909,
in Commemoration of the One Hundredth Birthday of Edgar Allan Poe".
[30] La conferencia de Portier giró en torno al prestigio que Poe había
alcanzado de la mano de Baudelaire en Francia (páginas 41-73 de la citada
edición de Kent y Patton).
[31] Edward habló del reconocimiento que los alemanes sentía hacia el
poeta, de la influencia que Tieck y Hoffmann habían tenido en sus cuentos y
de las continuas traducciones que a la lengua alemana se hacían de los
cuentos y poemas del autor de "The Raven" (Kent y Patton: 73-99).
[32] Entre las que se encontraba una del escritor británico Thomas Hardy
(1840-1928), lamentando que Poe hubiese pasado más años de su vida
formándose en Inglaterra (Kent y Patton: 196-97), y otra del galardono
premio Nobel, el irlandés William B. Yeats (1865-1939), lamentándose de no
haber podido asistir a los actos y manifestando que Poe era "so certainly
the greatest of American poets" (Kent y Patton: 207).
[33] Nash era un médico de reconocido prestigió que se había licenciado en
1852 en la Universidad de Virginia. Parte de su vida la pasó trabajando en
Norkfolk, donde murió en 1911.
[34] "[…] the impressive countenance, the dignified yet cordial manner, the
cadence of the voice, and the pressure of the hand of Edgar Allan Poe"
(Kent y Patton: 27).
[35] Barrett Wendell (1855-1921), eminente investigador y autor, entre
otras obras de A Literary History of America (1900).
[36] "Poe's Americanism is to be sought in his craftsmanship, the conscious
adaptations of means to end. The quick realization of structural
possibilities, the practical handling of details, which enabled him to body
froth his visions in enduring forms and thus to found the only new type of
literature that America has originated" (Kent y Patton: 178).
[37] French (1850-1931) es sobre todo conocido por la estatua de Abraham
Lincoln del Lincoln Memorial, Washington, DC.
[38] Escultor virginiano (1844 - 1917) que pasó gran parte de su vida en
Roma.
[39]A ellos le sucedieron: Kent P. Ljungquist, J. Lasley Dameron, Lynette
Black, Dennis Eddings, Richard Kopley y Barbara Cantalupo.
[40] La que sigue no pretende ser una lista de todos los Cursos,
Seminarios, Congresos, libros, representaciones, acontecimientos, etc. que
van a tener lugar, o se han publicado, o se van a representar, etc., sino
una muestra de la repercusión que este escritor sigue teniendo en los
inicios del siglo XXI.
[41] Véase, a este respecto, el interesante artículo de Scott Peeples.
"Nowhere Man: The Problem of Poe and Place", aparecido en Nexus/Aedean, y
recogido en la bibliografía.
[42] Véase el artículo de Margarita Rigal titulado "Malentendidos en torno
a la vida y obra de Edgar Allan Poe", incluido en la bibliografía.
[43] Cuenca: Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha
[44] El artículo resultante de la misma se recoge en la presente edición.
[45] El artículo resultante de la misma se recoge también en la presente
edición.
[46] A aquellos interesados en las publicaciones derivadas de esta
conferencia, les remito al próximo número de la revista Barcarola, en el
que se incluirá un Dossier sobre Edgar Allan Poe y al "Fall Volume" (2009)
de la Edgar Allan Poe Review: Saint Joseph University Press: Philadelphia.
[47] La conferencia está basada en algunos de los aspectos que estudia en
el libro en el que actualmente trabaja sobre Poe y las Artes visuales de su
época.
[48] Amplio período que se abriría tras la promulgación de la Constitución
de los Estados Unidos de 1787 y que no se cerraría hasta la guerra civil.
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