DEL BIEN HUMANO

DEL BIEN HUMANO
Esta obra de Aristóteles nos habla como su nombre lo dice del bien, para empezar nos dice que toda acción que realicemos y elección que tomemos tienden a algún bien, es a su vez un bien el ser aquello que aspiran todas las cosas. Un ejemplo de ello es; el fin de la medicina es la salud.
También Aristóteles nos sobre habla sobre la política que es según por excelencia el bien humano.
Asi pues, todo conocimiento y elección apunta a un bien, y ese bien tiende a la política y que este será el mejor de todos los bienes en el orden de la acción humana.
El bien fue llamado felicidad, donde vivir bien y hacer buenas obras es equivalente a ser feliz.
Volviendo a hablar del bien y cuestionarnos cuál puede ser, será aquel que esté por encima de todo, la felicidad; pues ya que según esto todo lo que buscamos como el placer, el inteligencia u otra cosa, es la que en vista propia nos da felicidad. Pues creemos que al alcanzarlas seremos felices. Así que la felicidad es algo final y autosuficiente, y es el fin de todo lo que hacemos.
Llegando a lo anterior mencionado el hombre feliz es aquel que vive bien y obra bien, pues en términos finales el bien se definio como una forma de vida dichosa y de recta conducta. Por lo tanto la estabilidad, es manejada por un hombre feliz, pues este obtará por realizar acciones de buena voluntad.
Y por último cabe mencionar las divisiones de la virtud: intelectuales (sabiduría, entendimiento, prudencia, etc.) y a otras morales (liberalidad y templanza). A las disposiciones dignas de alabanza son llamadas virtudes. Una virtud que ponemos mencionar, por ejemplo del grupo en el que nos encontramos es que somos muy trabajadores.

TEETETES
Nos habla de un diálogo en donde Sócrates, Teodoro y Teetetes se encuentran inmiscuidos.
El motivo de dicha acción es el interés por Sócrates de examinar una cosa, un estudio en el que tanto Teodoro como Teetetes no saben a lo que están sometidos.