DE HARO ORDOÑEZ, J.; CABACO ENCINAS, B. y GARCÍA TEYSSANDIER, E., Nuevos descubrimientos en el yacimiento romano de Isla Canela-Punta del Moral (Ayamonte, Punta del Moral), XXI Jornadas de Historia de Ayamonte. Ayamonte 22-26 de Noviembre, (e.p.)

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Descripción

NUEVOS DESCUBRIMIENTOS EN EL YACIMIENTO ROMANO DE ISLA CANELA-PUNTA DEL MORAL (AYAMONTE, HUELVA) JESÚS DE HARO ORDÓÑEZ

BENJAMÍN CABACO ENCINAS

ELISABET GARCÍA TEYSSANDIER

NUEVOS DESCUBRIMIENTOS EN EL YACIMIENTO ROMANO DE ISLA CANELAPUNTA DEL MORAL (AYAMONTE, HUELVA)

JESÚS DE HARO ORDÓÑEZ BENJAMÍN CABACO ENCINAS ELISABET GARCÍA TEYSSANDIER ------------------------------------------

En el presente artículo queremos exponer un avance de los principales resultados obtenidos en los últimos trabajos arqueológicos desarrollados en este yacimiento, los cuales vienen a aportar nuevos datos de cara al verdadero conocimiento de la realidad histórica del mismo desde el Periodo Romano a la Edad Moderna Un avance sobre las últimas investigaciones realizadas presentado el jueves 24 de Noviembre de 2016 dentro de la programación de las XXI JORNADAS DE HISTORIA DE AYAMONTE

ANTECEDENTES El yacimiento arqueológico se localiza en el término municipal de Ayamonte, concretamente en el estuario del Guadiana. La formación geológica de este estuario se caracteriza por la interacción de los procesos costeros y continentales que desarrollarán paulatinamente la génesis de un entorno natural muy dinámico conformado por la formación de islas barreras, marismas, esteros y caños debido a la colmatación progresiva del estuario desde hace unos 5.000 años. Se trata de un entorno natural muy propicio históricamente a la instalación de enclaves cuya actividad económica principal ha de estar orientada a la explotación de los recursos marinos fundamentalmente, pero también se ha de tener en cuenta las posibilidades de los mismos para dar salida comercial al exterior de las riquezas productivas de en entorno geográfico más amplio, lo que podía convertir a estos asentamientos en potenciales centros desde los cuales articular toda una red de redistribución de recursos económicos que podrán convertirlos en determinados periodos históricos en centros de determinada relevancia. Y eso es lo que pareció sucederle al asentamiento de Canela-Punta del Moral, ya que con cada intervención arqueológica que se realiza sobre el mismo, los nuevos datos que van saliendo a la luz y que vamos conociendo corroboran que se trata de un núcleo que adquirió un papel protagonista en los circuitos económicos del mundo romano fundamentalmente a partir del siglo III d.C. Será sobre uno de estos enclaves de islas barreras que conforman el estuario del Guadiana, en el lugar que se conoce como Isla Canela y, desde aquí, hasta el actual poblado de Punta del Moral en donde se ubica el yacimiento romano. El yacimiento abarca también un área sumergida en la actualidad, puesto que el entorno terrestre que lo conforma se encuentra delimitado al sur por el caño de la Moharra y al norte y este por la margen derecha del Río Carreras, lugares donde en dragados recientes acometidos desde 2008 han sido localizados también restos arqueológicos. Estos hechos son importantes matizarlos, pues desde 2011 trascendería a la prensa la noticia del hallazgo aquí de una Ciudad Sumergida. Los primeros restos subacuáticos ya fueron localizados en el 2008 y 2010 durante los dragados del Puerto pesquero que da acceso al Caño de la Moharra, suponiendo todos ellos realmente parte de la totalidad del asentamiento romano que comienza en la parte continentalizada de Isla Canela y se prolonga, como decimos, hasta la misma aldea de la Punta del Moral. Es más, científicamente este yacimiento se conoce al menos desde el siglo XVII, cuando el erudito Rodrigo Caro, quien recoge ya en 1.634 la leyenda de la existencia aquí de una supuesta ciudad fenicia llamada Tiro y que finalmente definiría como los restos de un asentamiento romano al estudiar las monedas e inscripciones latinas que procedían del lugar.

RESUMEN ACTUACIONES ARQUEOLÓGICAS PREVIAS En 1.981 durante los trabajos de desmonte en Isla Canela de una duna para labores agrícolas aparecería el primer gran referente de la investigación del Yacimiento. Sería la localización de un Panteón Monumental romano datado en el siglo IV d.C. que albergaba el enterramiento de un grupo familiar en su interior. Las excavaciones fueron llevadas a cabo por el antiguo director del Museo de Huelva Mariano Del Amo. Con

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posterioridad, sobre el entorno del Panteón se acometerían labores de limpieza y prospecciones arqueológicas del sector, por parte de la Universidad de Huelva y el Instituto Arqueológico Alemán, que vendrían a evidenciar la existencia de un asentamiento en el sitio que hubo de comenzar en torno al siglo I d.C si bien su mayor esplendor se situaría a partir del siglo III d.C., según el análisis de materiales arqueológicos de superficie sin que se acometieran entonces actuaciones de excavación. Durante los años 2004 y 2005, debido al abandono y deterioro que presentaba el Panteón/Mausoleo descubierto en los ‘80, se llevaron a cabo obras de restauración y consolidación con financiación de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Se realizó una intervención arqueológica puntual de apoyo a la restauración acometida por la empresa GIRHA, S.C., dirigida por Miguel Ángel López, en la que se documentaron un total de nueve enterramientos en el entorno del propio Panteón al exterior, en cotas inferiores y superiores al mismo, así como un edificio o recinto de grandes dimensiones asociado a otra fase anterior de esta necrópolis que discurre hacia el este del mismo bajo las dunas actuales. Actualmente, sólo el Panteón se encuentra restaurado junto a la carretera de acceso a la Punta del Moral, si bien requiere actuaciones de limpieza y adecuación de cartelería adecuada para su correcta comprensión ya que realmente hoy día pasa desapercibido para los visitantes del lugar. Ya en 2008 comenzaron las labores de dragado en el caño de La Moharra para la construcción del nuevo puerto pesquero de Punta del Moral, lo que conllevaría la realización de actividades arqueológicas de Control sobre los dragados acometidos, trabajos desarrollados por el equipo de arqueología de GIRHA, Benjamín Cabaco Encinas, como director de la Iª (2008), y las arqueólogas Elisabet García y Paola García, Directora de la IIª Fase (2010). Los resultados de las prospecciones subacuáticas que se realizaron revelaron la presencia de abundante material cerámico (principalmente ánforas) que nos evidenciaron la existencia de un fondeadero de época romana, junto con materiales de edificaciones antiguas, que en la actualidad se encuentran sumergidas, debido a la erosión de las corrientes marinas dominantes en la zona. Con estas actuaciones se confirmaría la prolongación del yacimiento romano conocido de Canela-Punta del Moral hasta un entorno hoy sumergido que abarca el sector del Caño de la Moharra, en el actual fondeadero de la Punta del Moral. Con posterioridad, en 2011, se acometerían nuevos dragados ahora en el entorno inmediato al fondeadero de Punta del Moral, en el río Carreras para restablecer el canal de acceso al puerto de Isla Cristina. Para velar por el yacimiento subacuático y con los resultados de las Intervenciones del 2008 y 2010 en el caño de la Moharra, la Delegación Provincial de Cultura de Huelva estableció la necesidad de realizar prospecciones subacuáticas previas al dragado de la ría Carreras. Los trabajos de Control arqueológico de las obras, realizados por la empresa Ánfora y coordinados por Diego Gonzáles Batanero, vendrían a sumar nuevos datos a los ya conocidos entonces sobre la existencia de un sector sumergido del yacimiento de Isla Canela-Punta del Moral.

LOS DESCRUBIMIENTOS ARQUEOLÓGICOS DE 2015-2016. Una vez más no tendrá que ser hasta la puesta en marcha de alguna obra de construcción cuando tengan que generarse a través de la misma actuaciones arqueológicas de urgencia o salvaguarda sobre los posibles restos de nuestro pasado que previsiblemente puedan verse afectados por la nueva obra en ejecución. En este caso, se tratará de la Obra de reforma de la carretera que da acceso a la aldea de Punta del Moral, promovida por la Junta de Compensación U.E. 1-A de Isla Canela. Una obra ciertamente necesaria para facilitar la comunicación y acceso a esta área de alta focalización turística que en la actualidad fundamenta su oferta base en el turismo de playa y golf. Por la tradición oral y las actuaciones previas éramos conscientes de la alta potencialidad de aparición de restos arqueológicos sobre el trazado a reformar de la vieja carretera. Los trabajos arqueológicos realizados consistirían en primer lugar en supervisiones de Control sobre las obras en ejecución siendo dirigidas por la arqueóloga Elisabet García Teyssandier y coordinadas por el arqueólogo Benjamín Cabaco Encinas. La creciente aparición de restos arqueológicos generaría que desde la Delegación Territorial de Cultura de la Junta de Andalucía se dictaminase la necesidad de proceder de manera simultánea a la excavación y documentación de las evidencias que iban apareciendo a través de un nuevo expediente de Excavación de Urgencia bajo la dirección de Jesús De Haro Ordóñez. El Equipo de Arqueología se complementaría con y la incorporación de las arqueólogas Paula García Díaz y Carmen Quintero Cristóbal.

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Los trabajos de Control y Excavación de Urgencia se prolongarían desde los meses de Octubre de 2015 a Julio de 2016, abarcando una superficie de Control de 2 km en paralelo al eje de la actual carretera según las cautelas impuestas por la Consejería de Cultura y han sido sufragados por la Junta de Compensación U.E. 1A de Isla Canela como entidad promotora de la Obra de reforma de la carretera. Los trabajos se coordinaron en todo momento con los procesos de la Obra en ejecución sin que supusieran ningún retraso en la misma. Decimos esto para desmitificar ese mito de que los arqueólogos paralizamos las obras. Para bien o para mal, nada más lejos de la realidad. Simplemente debieran realizarse más investigaciones sobre los yacimientos conocidos y por conocer sin que tenga que existir de por medio la amenaza de ejecución de una obra sobre los mismos, sea ésta de la índole que sea. Dentro de la zona cautelada y en función a la aparición de restos se dividiría la zona a intervenir en dos sectores definidos como Área I y Área II. El Área I se relaciona con el sector de la necrópolis en el entorno del Panteón conocido desde los años ’80 y en el Área II se localiza en el entorno del lugar conocido como “Cerro de las Piedras” muy próximo al núcleo actual de la Punta del Moral. En el ÁREA I se han documentado NUEVOS ENTERRAMIENTOS de inhumación correspondientes a la necrópolis de inhumación ya conocida por las intervenciones previas realizadas desde la década de los ’80 y 2004-2005, pero ahora en sectores espaciales no intervenidos lo cual nos hace profundizar en el conocimiento de la misma. También se registran intensas Áreas de Actividad asociadas al periodo de funcionamiento de la misma (silos de almacenamiento, etc). Destacamos en este Sector el Descubrimiento ahora de una NECRÓPOLIS DE INCINERACIÓN, inédita hasta la fecha, que nos habla por primera vez de la existencia de áreas funcionales en el interior de este espacio sacro y cuyo máximo exponente será la aparición de un…NUEVO MONUMENTO FUNERARIO. Se trata de un hallazgo de singular y de gran importancia histórica dentro del contexto general de conocimiento relativo al mundo funerario del Periodo Romano de la Provincia de Huelva. Elaborado Se trata de una construcción de planta circular/circuloide que aparece junto a la actual carretera en su lado norte elaborada en fábrica de mampuestos de pizarras de mediano tamaño en su perímetro interior, y mampuestos de pizarra de pequeño tamaño en su núcleo y perímetro exterior asociado a la pared de su fosa de construcción. Se compone de dos cuerpos estructurales, Anillo y Cámara, alcanzando unas dimensiones de 3.50 x 3.00 m. En su entorno inmediato se localiza un área de cremación para la acometida de los rituales asociados a los enterramientos de incineración que se acometieron en el lugar, conformando todo el conjunto un área Sacra que se complementa en el entorno con la aparición de muros que delimitarán físicamente este espacio, separándolo de las inhumaciones que se desarrollan al oeste en la misma necrópolis. En torno a este Espacio Sacro se disponen los diversos Depósitos funerarios registrados ahora con los restos de las cremaciones de los difuntos, dispuestos en fosas individualizadas excavadas en las arenas del entorno, conformando plantas elipsoidales o circulares. Fosas de enterramientos en donde aparecen elementos de ajuares personales en homenaje a los difuntos (monedas, acus crinalis, útiles bronce, elementos de adorno metálicos, copas y jarritos de vidrio o de cerámica, ollitas, lucernas fragmentadas etc…), restos del soporte de los enterramientos (clavos de hierro, clavos de bronce o remaches de bronce), y numerosos restos de los desechos de los banquetes fúnebres (silicernium / novendiale sacrificium,…) asociados al ritual del enterramiento en sí (restos de consumo de malacofauna predominando en este caso la marina –bivalvos-, restos de ictiofauna variada, y restos de pequeños mamíferos y aves domésticas). En definitiva nos encontramos ante una Necrópolis que presenta una alta potencialidad de cara a investigaciones futuras, por su complejidad, características, proceso de monumentalización, coexistencia de ritos, etc, etc. Sin olvidar en este aspecto el buen estado de conservación que presentan las estructuras conocidas, como por ejemplo el Panteón intervenido en los ’80 o incluso los restos del nuevo Monumento descubierto ahora, de cara a su igualmente alta potencialidad en relación a actuaciones de puesta en valor y difusión. Por su parte en el ÁREA II “Cerro de las Piedras” se ha de resaltar, en base a los datos obtenidos ahora, el alto potencial del área en cuanto a las evidencias arqueológicas relativas a su amplia secuencia crono-cultural, asociada a diferentes periodos históricos que abarcan como mínimo desde el Periodo Romano (Siglos I al V d.C) al Periodo Moderno (Siglo XVIII). En lo que se refiere al Periodo Romano destacamos el Hallazgo inédito

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de construcciones históricas asociadas directamente al asentamiento habitacional del Yacimiento de CanelaPunta del Moral. El “Mundo de los Vivos”, el lugar donde desarrollaban sus actividades cotidianas, en este caso económicas, los pobladores del lugar que acabarían sepultados en la necrópolis ubicada al oeste. Se trata del hallazgo de toda una serie de Almacenes industriales, construcciones que representan edificios de planta cuadrangular de en torno a los 20 o 25 m2, elaborados en fábricas de pizarras y que presentan un gran estado de conservación, a pesar de no haber conservado a coronación las cubiertas originales. Por el Sur se documentan construcciones de pizarras destinadas a la contención de los avances naturales del sistema dunar para proteger el área destinada a los almacenes. Ninguno de los edificios hallados ha sido excavado en su totalidad, en base a las afecciones derivadas del desarrollo de la Obra y la legislación y normativas de aplicación al respecto, lo que hace posible la intervención futura en algunos de los registrados en base a criterios de Investigación y propuestas de Conservación y Puesta en Valor. Se trata de una serie de edificaciones distribuidas en el reborde norte del Cerro de las Piedras en su declinar hacia la actual marisma continentalizada y antigua salida hacia el océano, destinadas al almacenamiento de la producción industrial del asentamiento en sí de Punta del Moral y de su hinterland de influencia, que hubo de abarcar toda la producción de los asentamientos del entorno y la ribera del Guadiana hacia el interior. Pero también es de destacar aquí el HALLAZGO de una NUEVA NECRÓPOLIS de Inhumación asociada a la fase de abandono de los ALMACENES referidos con anterioridad. Otro de los hallazgos inéditos de la presente actuación. Se trata de la localización de enterramientos complejos caracterizados por tumbas estructurales revestidas de mortero con estucado exterior sobre cama y cuerpo de pizarras. Su detección y características constructivas y espaciales plantean sin duda la apertura de nuevas y múltiples líneas de investigación en base a la diacronía del yacimiento y su paulatina evolución durante el Periodo Romano.

PROPUESTAS PARA EL FUTURO DEL YACIMIENTO Actualmente, el Equipo de Arqueología se encuentra en fase de redacción de las Memorias Científicas para su presentación ante la Delegación Territorial de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Andalucía. Esta documentación servirá de base para que desde la Consejería de Cultura se activen los procedimientos adecuados que han de velar por la conservación del Yacimiento. La magnitud de la evidencia empírica constatada ahora, sumada a la ya conocida con anterioridad, establece la necesidad de proceder, de manera firme y decidida, al establecimiento de un adecuado y coherente tratamiento y revisión de las normativas de protección existentes en la actualidad para el Yacimiento de Canela-Punta del Moral. Un hecho que pasa por la Declaración del Yacimiento como BIC, de Bien de Interés Cultural, con la categoría de Zona Arqueológica. Igualmente, deberían plantearse a corto o medio plazo la ejecución de una serie de actuaciones patrimoniales que fomenten la Investigación, Conservación, Puesta en Valor y Difusión del Yacimiento, a través de una programación de actividades de índole diversa que debieran contemplar desde, por ejemplo, la generación de un Proyecto de Investigación, dado que la escala del sitio así lo requiere, a la realización en paralelo de Actuaciones de Integración Definitiva de algunos de los elementos inmuebles conocidos ahora, tales como el nuevo Monumento Funerario del Área I, o los Almacenes industriales del Cerro de las Piedras en el Área II, todos ellos conservados bajo tierra pero ocultos en la actualidad. Bienes Inmuebles patrimoniales que, una vez conservados tras la ejecución de la reforma de la carretera que motivó su descubrimiento, podrían ser nuevamente intervenidos para su Investigación, Puesta en Valor y rentabilización social. Bienes que vendrían a sumar al Mausoleo Romano ya Restaurado y actualmente aislado al pie de la actual carretera en un “contexto” en el que “actualmente” se ha de reconocer que los valores culturales que representa pasan “desapercibidos”. La declaración del BIC, como Zona Arqueológica de Isla Canela-Punta del Moral por un lado y, por otro, la integración de algunos de los nuevos hitos descubiertos ahora generaría la protección definitiva del sitio y

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permitiría las futuras investigaciones que requiere el yacimiento. Igualmente permitiría la creación inmediata de todo un Itinerario Cultural, que trascurriría en paralelo a la carretera de acceso desde Torre Canela a la aldea de la Punta del Moral. Una actuación integral que vendría a sumar al sitio sus valores históricos a los valores naturales ya existentes y declarados del entorno, en un área de focalización turística bien aguerrida en el tejido económico de la localidad de Ayamonte y del suroeste peninsular. Los restos materiales de nuestro pasado también pueden rentabilizar económicamente nuestro futuro, desde su conocimiento, conservación y difusión social.

Nuevo monumento funerario romano

Almacenes factoría romana de salazones I

Detalle de ánfora y piedra molinera reutilizada

Tumbas de inhumación romanas 1 y 2

Almacenes factoría romana de salazones II

Depósitos de actividad factoría salazones

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