Cultura escolar y permanencia en educación superior. Tensiones y problemas frente al concepto de equidad. Eduardo Guzmán Utreras Universidad de Santiago de Chile Libertador Bernardo O'Higgins 3363, Santiago, Chile. Correo electrónico:
[email protected] Teléfono: +56-2-27184352. Actualmente la educación chilena se encuentra en un período de crisis, donde conceptos como calidad, equidad y gratuidad forman parte de la discusión. Las constantes desigualdades que emergen en las prácticas de la escuela, privada, subvencionada o municipal, permiten pensar que existen factores individuales, familiares, socioeconómicos y/o culturales que influyen en este problema. Diversos estudios aseguran que los instrumentos actuales de acceso a la universidad aumentan esta desigualdad de origen (Gil, Paredes y Sánchez, 2013), dado que realizan una evaluación de elementos académicos que son principalmente desarrollados en las escuelas caracterizadas como aventajadas, principalmente del sector privado. Para intentar solucionar este problema, surge como primera medida la implementación de un “Ranking de notas”, como instrumento que considera y compara a los individuos en relación a su propio rendimiento y talento individual, más allá de las diferencias culturales escolares desde donde proviene. El acceso por medio del ranking de notas plantea nuevos desafíos a las universidades desde el punto de vista académico, éstos han sido considerados en los lineamientos del “programa de acompañamiento efectivo a la educación superior” (PACE), el cual se desarrolla en la actualidad en universidades que comparten esta metodología de acceso. Sin embargo, sus objetivos dan énfasis principalmente a factores individuales académicos que deben ser desarrollados para lograr una inclusión sustentable en el sistema universitario como reivindicación a un proceso desigual proveniente desde las escuelas. Si consideramos que cada escuela posee una cultura particular, y que la cultura escolar se entiende como aquellos supuestos, creencias, valores y actitudes compartidas en relación a formas de asociación y organización, y que estos factores pueden influir en los individuos participantes (Escobedo, Sales y Fernández, 2012), es posible pensar que ésta promueve factores protectores o de riesgo, a través del curriculum, que incentivan el desarrollo de la motivación, el talento y las expectativas que se tienen por parte de los estudiantes y cómo estas son promovidas por los distintos actores de la institución. Estos factores, teóricamente, pueden ser relacionados con aquellos descritos por la literatura en estudios relacionados con la retención y permanencia en la universidad desde la sociología (Spady), la psicología (Fishbein y Ajzen) y desde el intercambio (Tinto, Bean, Ethington). ¿Qué sucede con aquellos estudiantes, de alta vulnerabilidad, que provienen de un contexto sociocultural adverso y que no reconocen a la universidad como una opción principal de vida, pero a los cuales se les abre la posibilidad por medio de su rendimiento académico, de obtener un cupo?. En este trabajo se exponen los datos obtenidos de una revisión bibliográfica como base de una investigación emergente, teniendo por objetivo identificar y destacar las tensiones existentes entre la cultura escolar, la cultura académica universitaria y cómo las distintas acciones realizadas en virtud de la equidad de acceso y la nivelación académica de origen en sectores de alta vulnerabilidad, aparentemente no consideran en forma suficiente aquellos factores protectores del individuo, influenciados por esta cultura escolar, y que dependiendo del énfasis académico otorgado, pueden transformarse en factores de riesgo de deserción universitaria. Palabras Claves: Cultura escolar, acceso, equidad, igualdad, universidad.
