Cultura de los Cuidados.Revista de Enfermería y Humanidades. XX/47

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Descripción

Revista de Enfermería y Humanidades

SUMARIO EDITORIAL • Ética del cuidado y robots

FENOMENOLOGÍA

• La dimensión espiritual en el cuidado de las personas con cáncer: una revisión integradora • Reflexiones sobre enfermería desde la biopolítica: relaciones de poder y cuidado • ¿Por qué se escapó?

HISTORIA

• San Camilo de Léllis:Caridad y bondad en la prestación del cuidado • Una monografía de Manuel Martín Salazar sobre la tuberculosis (Cádiz, 1887) • La prensa profesional como fuente de información historiográfica en la Historia de la Enfermería • El cuidado del cuerpo en el arte, la ciencia y la filosofía de la enfermería • Del Hospital Municipal de Trujillo y del cese de las Hermanas Amantes de Jesús • La activa participación de las Madres Mayores del Hospital del Santo Cristo de los Dolores (Pozo Santo) bajo la administración de la Hermandad de la Misericordia de Sevilla • Literatura e enfermagem: fontes e saberes para pesquisa em história

ANTROPOLOGÍA

• La percepción del envejecer en una población de ancianos • La interfaz salud y medio ambiente en el diálogo com estudiantes: ressignificando el sentido del cuidado

TEORÍA Y MÉTODO

• Proceso de enfermería aplicado al paciente con tetralogia de Fallot • Prácticas educativas en salud en la escuela: una revisión integrativa • Determinar la sensibilidad y especificidad de la Percepción Materna del Peso de su descendiente de la frontera norte de Tamaulipas por palabras/ por imágenes frente al estándar de oro • Vacunación contra Hepatitis B: un estudio de revisión

MISCELÁNEA • Biblioteca comentada • I Jornada de Historia de la Enfermería: Retrato de la Enfermería en el Ocaso del Siglo XVI

1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.º 47

ASOCIACIÓN NACIONAL DE HISTORIA Y ANTROPOLOGÍA DE LOS CUIDADOS

CONSEJO DE ENFERMERÍA DE LA COMUNIDAD VALENCIANA

SEMINARIO DE HISTORIA Y ANTROPOLOGÍA DE LOS CUIDADOS ENFERMEROS. DEPARTAMENTO DE ENFERMERÍA. UNIVERSIDAD DE ALICANTE

Cultura de los Cuidados CONSEJO EDITORIAL DIRECCIÓN/ EDITOR José Siles González COMITÉ EDITORIAL Luis Cibanal Juan - Carmen Solano Ruiz CONSEJO DE REDACCIÓN COORDINADORA Ana Lucia Noreña Peña MIEMBROS CONSEJO REDACCIÓN Miguel Ángel Fernández Molina Eva Mª Gabaldón Bravo Elena FerrerHernández Flores Vizcaya Moreno José Ramón Martínez Riera Mª Mercedes Rizo Baeza Mercedes Nuñez del Castillo Miguel Castells Molina Rosa Pérez-Cañaveras Manuel Lillo Crespo Isabel Casabona Martínez Departamento de Enfermería. Universidad de Alicante COORDINADOR INFORMÁTICO Y PÁGINA WEB Pablo Díez Espinosa DIRECCIÓN FINANCIERA Organización Colegial de Enfermería de la Comunidad Valenciana - Francisco Mulet Falcó. Enfermero. Tesorero del Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA). - Belén Paya Pérez. Enfermera, Presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Alicante. - Juan José Tirado Dauder. Enfermero. Presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Valencia. - Francisco J. Pareja Lloréns. Enfermero. Presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Castellón. COMITÉ CIENTÍFICO O ASESOR Manuel Amezcua Martínez Presidente de la Fundación Index. Profesor asociado Universidad de Granada (España). Carmen Chamizo Vega Enfermera. Doctora por la Universidad de Alicante. Profesora Universidad de Oviedo. Oviedo (España) César Hueso Montoro Doctor por la Universidad de Alicante. Profesor Universidad de Granada (España). Manuel García Martínez Enfermero y licenciado en Antropología social y cultural. Doctor por la Universidad de Sevilla. Profesor asociado Universidad de Sevilla (España). Guillermo Silva Magaña Doctor por Universidad de Alicante. Profesor titular. (Universidad de Colima, Méjico. Carlos Lousada Lopes Subtil Profesor titular Escola/Faculdade: Escola Superior de Enfermagem. Viana do Castelo (Portugal)

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Antonio C. García Martínez Licenciado en Historia. Doctor en Historia Profesor Titular Universidad de Huelva (España) María Elisa Moreno-Fergusson Profesora Asociada de la Facultad de Enfermería y Rehabilitación de la Universidad de La Sabana, Colombia. Editora de la revista Aquichan. Esperanza de la Peña Tejeiro Enfermera. Profesora Titular Escuela de Enfermería. Universidad de Extremadura (España) Cecilio Eseverri Cháverri Enfermero e Historiador de la enfermería Centro Asistencial San Juan de Dios. Palencia (España) Francisca Hernández Martín Enfermera y Licenciada en Historia. Presidenta del Seminario de Historia de la Enfermería. Doctora por la Universidad Complutense de Madrid. Profesora Titular Escuela de Enfermeria, Universidad Complutense de Madrid. Madrid (España) Francisco Herrera Rodríguez Doctor en Medicina. Historiador de la Enfermería. Catedrático de la Escuela Universitaria de Ciencias de la Salud. Universidad de Cádiz (España) Amparo Nogales Espert Enfermera. Licenciada en Historia. Doctora por la Universidad de Valencia. Profesora Titular. Facultad de Ciencias de la Salud. Universidad Rey Juan Carlos I, Madrid (España) Natividad Sánchez González Enfermera. Profesora Escuela de Enfermería y Fisioterapia. Universidad de Albacete (España) Francisco Ventosa Esquinaldo Enfermero. Historiador de la Enfermería. Superior Gerente del Hospital San Juan de Dios “Juan Grande” Jerez/Cádiz (España) Carmen de la Cuesta Benjumea Ph.D en Enfermería. Profesora Visitante Universidad de Alicante (España) Marilyn Douglas Doctora en Enfermería. Profesora, School of Nursing University of California, San Francisco (EEUU) Fernando Porto Doctor en enfermería por la escuela de Enfermagem Anna Nery/ UFRJ. Professor Adjundo da Escola de Enfermagem Alfredo Pinto da UNIRIO (Brasil) Beatriz Morrone Profesora Titular de la Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad Nacional de Mar del Plata. Investigadora Categorizada II. Integrante del Banco Nacional de Evaluadores para Proyectos de Investigación del Ministerio de Cultura y Educación (Argentina). Ximena Isla Lund Magister en Enfermería. Doctora por la Universidad de Alicante. Profesora Universidad del Bio-Bio. (Chile) Raquel Spector Doctora en Enfermeria. School of Nursing Boston College. Boston (EEUU)

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Rick Zoucha Enfermero. Doctor en Enfermería. Profesor Asociado. Universidad Duquenese Pittsburgh PA (EEUU) Taka Oguiso Enfermera y licenciada en derecho. Doctora Universidad de São Paulo. Profesora Titular Emérita. Universidad de São Paulo (Brasil) Genival Fernandes de Freitas Enfermero y licenciado en Derecho. Doctor por la Universidad de São Paulo. Profesor Titular. Universidad de São Paulo (Brasil) Cultura de los Cuidados. Revista Sociofundadora del Consejo de Editores de Revistas de Enfermería Iberoamericanas. INDIZADA E INSCRITA EN: Cultura de los Cuidados está incluida en las bases de datos: - CAPES/QUAL. Base de datos de revistas del Ministerio de Educación de Brasil. - LATINDEX. Sistema Regional de Información en Línea para Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal. - “Scientific Commons” Details at a Glance: Publications: 31,839,799 - Repositories: 1,157 - BDIE, ENFISPO, EBSCO, PUBLISHING, CUIDATGE, CUIDEN CINHAL y hemerotecas digitales como: Cantárida y RUA (repositorio Institucional Universidad de Alicante: http://rua.ua.es/dspace/ handle/10045/831) “Inscrita y miembro del en Servicio CrossRef (DOI prefix is: 10.7184)” Coordinadora RUA. Ana L. Noreña SUSCRIPCIONES: Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana (CECOVA) C/. Xàbia, 4 - 3º Pta. 10 - 46010 Valencia Tarifas 3 números (1 año). España y Portugal: 12,02 euros Alumnos Enfermería: 7,21 euros Extranjero: 18,03 euros CORRESPONDENCIA: Carmen Solano Ruiz. Departamento de Enfermería. Universidad de Alicante. Campus de Sant Vicente del Raspeig Ap 99. E-03080 Alacant - Alicante Revista «on line»: http://rua.ua.es/dspace/handle/10045/831 ISSN:1138-1728-Dep.Legal: A-1309-1997 Título clave: Cultura de los Cuidados Título abreviado: Cul. Cuid. Tirada/ Producción: 3.000 ejemplares IMPRESIÓN Y ACABADO: Edita: Consejo de Enfermería Comunidad Valenciana (CECOVA) Diseño editorial, maquetación e impresión: AROA Diseño y Comunicación. Alicante (España) LA DIRECCIÓN DE LA REVISTA NO SE HACE RESPONSABLE DE LOS CONTENIDOS DE LOS ARTÍCULOS. MARCA ESPAÑOLA Nº 2.816.560 DENOMINADO CULTURA DE LOS CUIDADOS BOE. 16/04/2008.

Cultura de los Cuidados

SUMARIO

NORMAS DE PUBLICACIÓN....................................................................................................................... 4 Criterios de evaluación y selección de artículos................................................................................................. 7 EDITORIAL Ética del cuidado y robots....................................................................................................................................9 Carmen Domínguez-Alcón

FENOMENOLOGÍA La dimensión espiritual en el cuidado de las personas con cáncer: una revisión integradora...........................14 Talita Prado Simão-Miranda, Lidiane Aparecida Monteiro, Camila Csizmar Carvalho, Laís Andrade Cordeiro, Erika de Cássia Lopes Chaves, Marília Carvalho Leite

Reflexiones sobre enfermería desde la biopolítica: relaciones de poder y cuidado...........................................22 Claudia Andrea Collado Quezada Correo y Silvana Castillo Parra Correo

¿Por qué se escapó?...........................................................................................................................................28 Raquel Asunción Díaz Alonso

HISTORIA San Camilo de Léllis:Caridad y bondad en la prestación del cuidado...............................................................32 Fernando Porto, Mercedes Neto, Tiago Ferreira da Silva, Keythluci Faria Trigueiro, Pedro Ruiz Nassar, Hugo Alberto Neves

Una monografía de Manuel Martín Salazar sobre la tuberculosis (Cádiz, 1887)..............................................43 Francisco Herrera-Rodríguez

La prensa profesional como fuente de información historiográfica en la Historia de la Enfermería................69 Antonio Jesús Marín Paz

El cuidado del cuerpo en el arte, la ciencia y la filosofía de la enfermería........................................................83 Carlos Roberto Carlos Fernandes, Isaura Setenta Isaura Porto, André Marcelo Machado Soares

Del Hospital Municipal de Trujillo y del cese de las Hermanas Amantes de Jesús...........................................99 Esperanza Santano Mogena, Julián Fernando Calderón García, José Luis Cobos Serrano, María Luz Sánchez Calvarro, Mariana Martínez Álvarez, Sergio Rico Martín

La activa participación de las Madres Mayores del Hospital del Santo Cristo de los Dolores (Pozo Santo) bajo la administración de la Hermandad de la Misericordia de Sevilla ....................................110 Paula Ermila Rivasplata Varillas

Literatura e enfermagem: fontes e saberes para pesquisa em história.............................................................129 Taka Oguisso, Onã Silva

ANTROPOLOGÍA La percepción del envejecer en una población de ancianos............................................................................149 Karina Jazmín Marrujo Pérez, Domingo Palacios Ceña

La interfaz salud y medio ambiente en el diálogo com estudiantes: ressignificando el sentido del cuidado..158 Edite Lopes da Silva, Francisco Rafael de Araújo Rodrigues

Teoría y método Proceso de enfermería aplicado al paciente con tetralogia de Fallot...............................................................165 Eliane Santos Cavalcante, Izaura Luzia Silvério Freire, Andréa Tayse de Lima Gomes, Micheline da Fonseca Silva, Francisco Arnoldo Nunes de Miranda, Gilson de Vasconcelos Torres

Prácticas educativas en salud en la escuela: una revisión integrativa..............................................................175 Silvana Ceolin1, Marjoriê Mendieta, Márcia Vaz Ribeiro, Márcio Rossato Badke, Teila Ceolin, Rita Maria Heck

Determinar la sensibilidad y especificidad de la Percepción Materna del Peso de su descendiente de la frontera norte de Tamaulipas por palabras/ por imágenes frente al estándar de oro..............................185 Jéssica Naiara de Medeiros Araújo, Andréa Tayse de Lima Gomes, Raianny Alves Costa Medeiros, Ana Paula Nunes de Lima Fernandes, Viviane Euzébia Pereira Santos, Allyne Fortes Vitor

Vacunación contra Hepatitis B: un estudio de revisión...................................................................................194 Telma Maria Evangelista de Araújo, Karinna Alves Amorim de Sousa, Samya Raquel Soares Dias, Vanessa Cavalcante Oliveira, Evellyn Stefanne Bastos Marques.

MISCELÁNEA BIBLIOTECA COMENTADA Notas sobre “el Rostro Enfermo” de Isidoro y Florencio Monje Gil..............................................................203 I Jornada de Historia de la Enfermería: Retrato de la Enfermería en el Ocaso del Siglo XVI........................207

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Cultura de los Cuidados

ESTRUCTURA DE LA REVISTA Y NORMAS DE PUBLICACIÓN Aunque sujeta a variaciones, en aras de su filosofía contextualizadora, la revista constará de secciones tales como : • Editorial. • Fenomenología: sección destinada a la publicación de originales y/o revisiones sobre fenomenología clínica. Asimismo tendrán cabida en este apartado las experiencias clínicas de los profesionales sea cual sea la forma de expresión: narrativa, ensayo, poética o plástica. Por último, también serán susceptibles de publicación los originales que, a juicio del comité de redacción, contribuyan al desarrollo humanístico de la enfermería (en cualquiera de sus vertientes). • Historia: destinada a la publicación de originales y/o revisiones de historia de enfermería. • Antropología: sección reservada para la inclusión de originales y/o revisiones de trabajos antropológicos en materia de cuidados enfermeros. • Teoría y métodos enfermeros: apartado dedicado a la publicación de originales y/o revisiones que contribuyan tanto al desarrollo teórico-filosófico de la enfermería como a sus métodos y aplicaciones prácticas. • Miscelánea: Sección dedicada a la divulgación de actividades, noticias, agenda etc, revisión de novedades editoriales. • Cartas al Director PRESENTACIÓN DE LOS TRABAJOS - Estructura del manuscrito: En la primera página figurará el título del artículo en minúscula en tres idiomas en este orden: español, inglés y portugués, seguido del nombre de los autores (no más de 6),en minúscula. En primer lugar las iniciales en mayúsculas separadas por un punto y seguido por los apellidos en minúsculas por ejemplo: Mª.C. Solano Ruiz. Mediante un asterisco (superíndice) escribir su rango académico más elevado o profesional y la dirección de contacto del primer autor junto con su correo electrónico y teléfono. En la segunda

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página: resumen del trabajo no superior a 200 palabras (en inglés, portugués y español. Se incluirán, además de cuatro a cinco palabras clave en los tres idiomas. Las siguientes páginas incluirán el contenido del artículo evitando poner subíndices y notas al pie de página, con una extensión no superior a los 17 folios; la última página estará dedicada a la bibliografía. - El sistema de citas adoptado en la revista está de acuerdo a la normativa Harvard-APA: en el texto sólo aparecerá el apellido en minúsculas y la fecha del autor entre paréntesis, ej: (López,1998). La bibliografía consultada al final del artículo no llevará numeración y quedará ordenada alfabéticamente por el apellido del autor ej: Sánchez, J. (1997) Historia de la revista panacea. Paidós, Barcelona (Libro) Sánchez, J. (1997) Historia de la revista panacea. Enfermería Científica 8 22-27 (Artículo revista) Sánchez, J. (1997) Historia de la revista panacea. En: Cibanal, L.. ed. Las revistas españolas de enfermería ,Síntesis, Madrid: 88-102 (Capítulo de Libro). Para citar documentos/ artículos “on line”: Pagani, R.. (2002) Informe técnico. El crédito europeo y el sistema educativo español. 425 Available http: www.eees.ua.es/http:aneca.es/ modal_eval/docs/doc. downloaded 426 27th July 2008. - Las ilustraciones, gráficas y fotografías se enviarán en otro archivo, indicando su número de orden y título a pie de página o en su reverso en el caso de las fotografías. Las gráficas, preferentemente, deberán presentarse en blanco y negro. - Presentación: letra Times New Roman, tamaño letra12, a doble espacio. - Los autores deberán realizar el” check list” disponible en este enlace, previo a la remisión del artículo.

Cultura de los Cuidados

STRUCTURE OF JOURNAL AND NORMS OF PUBLICATION Although subject to variations in the interest of contextualizing the journal philosophy, will include sections such as: • Editorial. • Phenomenology section devoted to the publication of original and / or reviews of clinical phenomenology. They will also take place in this section, the clinical experience of professionals in whatever form of expression, narrative, essay, poetry or art. Finally, also be eligible for the original publication, in the opinion of the editorial board, contribute to the development of humanistic nursing (in any of its aspects).

these languages. The following pages include the contents of the article to avoid subscripts andfootnotes footer, with an extension not exceeding 17 pages, the last page is devoted to the literature. - The citation system is adopted in the journal according to the Harvard law-APA: the text will only appear in lower case the name of the author and the date in brackets, eg (Lopez, 1998). The bibliography at the end of the article will benumbered and arranged alphabetically by author’s surname eg Sanchez, J. (1997) History of the Journal panacea. Polity Press, Barcelona (Book)

• History: intended for publication of original and / or revisions of nursing history.

Sanchez, J. (1997) History of the Journal panacea. Nursing Science 8 22-27 (Journal Article)

• Anthropology: section reserved for the inclusion of original and / or revisions of anthropological work on nursing care.

Sanchez, J. (1997) History of the Journal panacea. In: Cibanal, L. ed. The Spanish journals nursing, Synthesis, Madrid. 88-102 (Chapter in Book).

• Theory and methods nurses: section dedicated to the publication of original and / or reviews that contribute to both theoretical and philosophical development of nursing as their methods and practical applications. • Other: Section dedicated to the dissemination activities, news, calendar etc., reviews, new books. • Letters to the Editor PRESENTATION OF WORK - Structure of the manuscript: On the first page will contain the article title inlowercase in three languages in this order: Spanish, English and Portuguese,followed by the name of the authors (no more than 6), in lowercase. First initial capital letters separated by a period followed by the surnames in lowercase eg: M ª.C. Solano Ruiz. By an asterisk (superscript) write their highest academic level or professional contact and address of the first author with his email and phone. On the second page: abstract of the work not exceeding 200 words (in English, Portugueseand Spanish. shall include in addition to four to five keywords in

To cite documents / articles “on line”: Pagani, R.. (2002) Technical Report. The European credit and the Spanish educational system. Availablehttp:www.eees.ua.es/http:aneca. es/modal_eval/docs/doc 425. downloaded 42627th July 2008. - The illustrations, charts and pictures will be sent to another file, indicating your order number and title in footer or the reverse in the case of the photographs. Graphs,preferably, should be submitted in black and white. - Presentation: Times New Roman, size letra12, double-spaced. - The authors should make the “check list” available here, prior to the submission of the article.

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ESTRUTURA DA REVISTA E NORMAS DE PUBLICAÇÃO Embora sujeita a variações no interesse de contextualizar a sua filosofia, a revistavai incluir recursos como: • Editorial. • A secção dedicada à Fenomenologia da publicação do original e / ou opiniões da fenomenologia clínica. Eles também serão realizados nesta seção, a experiênciaclínica dos profissionais, independentemente da forma de expressão, a narrativa, o ensaio de poesia, ou de plástico. Finalmente, também será elegível para a publicação original, na opinião do conselho editorial, contribuir para o desenvolvimento da enfermagem humanística (em todos os seus aspectos). • História: destinadas a publicação do original e / ou revisões de história da enfermagem. • Antropologia: seção reservada para a inclusão de original e / ou revisões detrabalho antropológico sobre cuidados de enfermagem. • enfermeiras Teoria e métodos: secção dedicada à publicação de opiniõesoriginais e / ou que contribuam para o desenvolvimento teórico e filosófico da enfermagem como os seus métodos e aplicações práticas. • Outros: Seção dedicada a actividades de divulgação, notícias, calendário etc,resenhas de livros novos. • Cartas ao editor DE APRESENTAÇÃO DE TRABALHO - Estrutura do manuscrito: Na primeira página vai conter o título do artigo em letras minúsculas em três idiomas, nesta ordem: Espanhol, Inglês e Português, seguido do nome dos autores (não mais que 6), em letras minúsculas. Primeira letra inicial maiúscula, separados por um ponto seguido pelo sobrenome em minúsculas, por exemplo:. M ª C. Solano Ruiz. Por um asterisco (sobrescrito) escrever seu mais alto grau acadêmico ou contato profissional e endereço do primeiro autor com o seu e-mail e telefone. Na segunda página:.. Resumo do trabalho não superior a 200 palavras (em Inglês,

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Português e Espanhol, para além de quatro a cinco palavras-chave em todas as três línguas As páginas seguintes incluem o conteúdo do artigo para evitar subscritos e notas rodapé, com uma área não superior a 17páginas, a última página é dedicada à literatura. - O sistema de nomeação é adotado na revista de acordo com a Harvard-lei APA: o texto não aparece apenas em letras minúsculas o nome do autor ea data entre parênteses, por exemplo (Lopez, 1998). A bibliografia no final do artigo serão numerados e dispostos em ordem alfabética pelo sobrenome do autor, por exemplo Sanchez, J. (1997) História da panacéia Journal. Polity Press, Barcelona (Book) Sanchez, J. (1997) História da panacéia Journal. Enfermagem da Ciência 8 22-27 (Journal Article) Sanchez, J. (1997) História da panacéia Journal. In: Cibanal, L. ed. Os espanhóisperiódicos de enfermagem Síntese, Madrid. 88-102 (Capítulo de Livro). Para citar documentos / artigos “on line”: Pagani, R.. (2002) Relatório Técnico. O crédito Europeu e do sistema educativo espanhol. Disponível http:www.eees.ua.es/http:aneca. es/modal_eval/docs/doc 425.baixado 426 27 de julho de 2008. - As ilustrações, gráficos e fotografias serão enviadas para um outro arquivo,indicando o seu número de ordem e título em rodapé ou o inverso no caso das fotografias. Gráficos, de preferência, devem ser apresentadas em preto e branco. - Apresentação: Times New Roman, tamanho letra12, com espaçamento duplo. - Os autores devem fazer o “check list”, disponível aqui, antes da apresentação do artigo.

Cultura de los Cuidados

CRITERIOS DE EVALUACIÓN Y SELECCIÓN DE ARTÍCULOS

EVALUATION CRITERIA AND SELECTION OF ARTICLES

La revista Cultura de los Cuidados publica artículos en español, portugués e inglés. La recepción de los mismos pasa por un proceso de selección en una primera revisión por el Consejo editorial verificando el cumplimiento de los requisitos propios de la revista, descritos en las indicaciones a los autores, en caso de no cumplir estas condiciones se le notifica al autor o autores para que realicen los cambios oportunos. Posteriormente tras la clasificación temática y preservación del anonimato del manuscrito los documentos son enviados a dos especialistas de reconocido prestigio en el área de conocimiento, para que procedan a su evaluación. Una vez recibidos los conceptos de los pares académicos se toma una decisión conjunta con el Consejo Editorial que puede ser de aceptación con ajustes, de aceptación definitiva o de rechazo comunicándolo al autor o autores a través de correo electrónico o postal. En caso de que la decisión del Consejo Editorial sea la de rechazo se remitirá el informe de los evaluadores junto con la decisión adoptada por el Consejo Editorial que fundamente esta decisión. Los manuscritos que sean considerados para publicación previa modificación, se notificarán con una propuesta concreta de modificación o con el informe de los evaluadores. Los autores dispondrán de un máximo de 2 semanas para comunicar a la secretaria de redacción su decisión en la modificación del mismo y en el plazo máximo de dos meses se comprometerán a entregar la versión revisada. La revista se reserva el derecho de realizar revisiones de estilo que faciliten la claridad y la comprensión del texto. Los factores donde se fundamenta la decisión sobre la aceptación o rechazo de los trabajos por parte de la redacción de la revista son los siguientes: - La originalidad, novedad y actualidad del tema. - Relevancia y aplicabilidad de los resultados. - Calidad metodológica. Fiabilidad y validez - Presentación, buena redacción, organización y coherencia lógica del texto. - La inclusión en los manuscritos enviados de, al menos, una cita de artículos publicados en Cultura de los Cuidados.

“Cultura de los Cuidados” (The Culture of Care) Journal publishes articles in Spanish, Portuguese and English. Admission will be subject to a selection process in a first review by the Editorial Board to verify compliance with the requirements of the Journal, as stated in the instructions for authors. In the case these conditions are not met, the author or authors will be notified in order to make the necessary changes. After accomplishment of topic classification and preservation of the anonymity of the paper, documents are submitted to two specialists of recognized prestige in the corresponding area of knowledge for evaluation. Once peer academic report is produced, decision is reached together with the Editorial Board to either accept with adjustments, final acceptance o rejection that will be notified to the author or authors by email or post. Should the decision of the Editorial Board be to reject, the evaluators’ report will be sent together with the decision of the Editorial Board that substantiates this decision. Manuscripts to be considered for publication after amendment shall be notified with a specific proposal for amendment or with the evaluators’ report. Authors will have a maximum of 2 weeks to inform the Assistant Managing Editor of their decision of amendment and the deadline for submitting the revised version is two months maximum. The Journal reserves the right to make revisions in style to facilitate clarity and understanding of the text. The factors which ground the decision on acceptance or rejection of papers by the Journal Editor are: - Originality, novelty and contemporary issues. - Relevance and applicability of the results - Methodological quality, reliability and validity - Presentation, good writing, organization and logical consistency of the text. - The inclusion in manuscripts submitted to at least one citation of articles published in Culture Care.

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Cultura de los Cuidados

CRITÉRIOS DE AVALIAÇÃO E SELEÇÃO DE ARTIGOS A Revista Cultura de los Cuidados publica artigos em Espanhol, Português e Inglês. O recebimento dos mesmos está sujeito a processo de seleção, em primeira revisão, pelo Conselho Editorial, no qual verifica-se o cumprimento dos requisitos próprios da Revista, descritos nas indicações aos autores. Em caso de cumprimento dessas condições, será notificado o autor ou autores para que realizem as mudanças oportunas. Em seguida, depois da classificação temática e preservação do anonimato do manuscrito, os documentos serão enviados a dois especialistas de reconhecido prestígio na área de conhecimento, para que procedam à avaliação. Uma vez recebidos os conceitos dos dois pares acadêmicos, toma-se decisão conjunta com o Conselho Editorial, que pode ser de aceitação com ajustes, de aceitação definitiva ou de recusa, comunicando-se a decisão ao autor ou autores, por meio de correio eletrônico ou postal. Se a decisão do Conselho Editorial for de recusa do artigo, será informado ao autor ou autores acerca dessa decisão adotada pelo referido Conselho, apresentando-se os fundamentos que a justificam. Os manuscritos que forem aprovados para publicação, porém com prévia modificação, far-se-á notificação ao autor ou autores com uma proposta concreta de modificação e com informe dos avaliadores. Os autores disporão de no máximo 2 semanas para se comunicarem com a Secretaria de redação acerca da modificação proposta e no prazo máximo de dois meses se comprometerão a devolver a versão corrigida, caso tenham concordado com as correções. A Revista reserva para si o direito de realizar revisões de estilo que facilitem a clareza e compreensão do texto. Os fatores que fundamentam a decisão sobre a aceitação ou recusa dos trabalhos, por parte da redação da Revista são os seguintes: - A originalidade, novidade e atualidade do tema; - Relevância e aplicabilidade dos resultados;

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- Qualidade metodológica, confiança e validade; - Apresentação, boa redação, organização e coerência lógica do texto. - A inclusão em manuscritos submetidos a pelo menos uma citação de artigos publicados nos Cuidados de Cultura.

Cultura de los Cuidados

Ética del cuidado y robots Ética do cuidado e robôs Ethics of care and robots Carmen Domínguez-Alcón PhD Sociology. École des Hautes Études en Sciences Sociales. París. Universidad de Barcelona. España. Cómo citar esta editorial en edición digital: Domínguez-Alcón, C. (2017). Ética del cuidado y robots. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.01 CCorrespondencia: Emplear correo electrónico para cualquier comunicación con la autora. Correo electrónico: [email protected]; [email protected] Recibido: Autor invitado

RESUMEN En esta editorial, se reflexiona sobre la incidencia de los robots en los cuidados de enfermería y sus implicaciones éticas. Palabras clave: enfermería, robótica, cuidados, tecnología y salud.

ABSTRACT In this editorial, the author reflects on the incidence of robots in the nursing care and its ethical implications. Keywords: nursing, robotics, care, technology and health. RESUMO Neste editorial, o autor reflete sobre o impacto de robôs nos cuidados enfemería e suas implicações éticas. Palavras chave: enfermagem, robótica, cuidado, tecnologia e saúde.

¿Cuál es el papel de los robots en las prácticas de cuidado? ¿Qué sabemos acerca de cómo son aceptados por las personas cuidadas? ¿Son percibidos como colaboradores por las enfermeras? Estas y otras muchas cuestiones se plantean al pensar en robots y cuidados. Lo cierto es que la tecnología y la robótica están cambiando nuestras vidas, ambos términos nos sugieren máquinas complejas y múltiples dispositivos de uso habitual que “supuestamente” facilitan nuestra vida. Estamos familiarizados con los cambios que las tecnologías han ido introduciendo en distintos ámbitos: producción, conducción, transporte, logística; agentes inteligentes en el hogar, salud y asistencia u otros ámbitos. La tendencia es a incrementar el uso de la tecnología en entornos variados y en la vida cotidiana. Por ejemplo 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados humanoides en funciones de asistente personal1, incluso algunos dispositivos que nos pueden parecer del futuro ya están funcionando en algún lugar. Lo que hasta hace poco parecía ciencia ficción está ya formando parte de proyectos realizados en algún laboratorio, es experimentado como innovación, o forma parte de prácticas avanzadas en algún sector. La presencia de robots es frecuente en distintas aplicaciones, y en el entorno asistencial se debaten las posibilidades en el cuidado directo, mediante el estudio de la interacción humana con robots (HRI), y se muestra la importancia del papel de la cultura en esa compleja relación (Schwiebert 2013, p.8). En el ámbito del cuidado la información existente sobre el uso de la robótica evidencia el avance realizado. Se plantea a menudo la necesidad del uso de robots debido al incremento de personas mayores y muy mayores que precisan cuidados y pueden beneficiarse de los avances tecnológicos, aunque frente al tema las posturas son diversas, incluido el rechazo (Fitzpatric 2011). La oferta de robots existente es variada, y el deseo es armonizar las nuevas necesidades de cuidado con las posibilidades y funcionamiento de los robots. El objetivo es utilizar la ayuda eficaz que las aplicaciones de la robótica ofrecen, manteniendo la independencia de las personas usuarias, y su autonomía de decisión. Ya en la actualidad varios robots se publicitan como “robot enfermero”. Por ejemplo Robear es un asistente para personas mayores con problemas de movilidad2. Riba II puede sustituir a enfermeros para coger en brazos a una persona que está en la cama y depositarla en

una silla, o cogerla del suelo3. O Asimo que se considera el robot humanoide más avanzado. Existen varios robots entre los denominados sociales, asistenciales, cuidadores, enfermeros, entre otras denominaciones, relacionados con prácticas de cuidado, que presentan diferentes características que podrían enunciarse como (1) Educativos y de entretenimiento, se trata de juguetes o dispositivos interactivos cuya finalidad es el aprendizaje, comunicarse, interactuar, entretener. (2) Terapéuticos, algunos con apariencia de peluche, se basan en la interacción animal. El objetivo es reducir el stress, estimular la interacción, y la socialización.(3) Asistentes personales inteligentes, basados en el sistema de reconocimiento de voz, que permiten pedir al móvil o a otro dispositivo que realice algunas funciones. (4) Robots cuidadores, que interactúan, y se comunican. El objetivo es ayudar a las personas mayores a vivir de forma independiente. (5) Robots médicos. (6) Robots cuyo uso se inició en la industria y actualmente tratan de adaptar sus aplicaciones a tareas asistenciales. Otro tipo son los robots sexuales, o de placer, o entretenimiento, de aspecto humanoide. Conocer los distintos tipos de robots y dispositivos que ofrecen la posibilidad de mejorar algunas capacidades, ayuda a visualizar las diferencias que existen entre ellos, según las características que presentan, y la utilidad que pueden suponer en distintas situaciones. Algunos robots funcionan desde hace años y sus fabricantes han introducido mejoras en las sucesivas generaciones. Sin embargo, todavía sabemos poco de la percepción que cada uno

1 Robots avanzados en 2017- https://www.youtube.com/watch?v=zFAOeJ5NfB8 https://www.elandroidelibre.com/2016/12/plen-cube-robot-asistente-personal.html https://www.youtube.com/watch?v=kbaDdg4LA9k

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https://www.xataka.com/robotica-e-ia/robear-es-un-robot-oso-japones-enfermero-del-futuro)

3

https://hipertextual.com/2011/08/riba-ii-robot-enfermero-japon

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Cultura de los Cuidados de ellos puede despertar en diferentes grupos de población, e incluso entre los propios profesionales. Lo que hace necesario profundizar en esa vertiente. Desde el robot “personificado” animado, que promueve una interacción compleja, al robot “mecánico” que se utiliza como herramienta, que incluso en cirugía robótica la persona sobre la que actúa quizá no llega a verlo materialmente, hasta la variedad de dispositivos disponibles IoT y wearables4. Es obvio que cada sistema tiene su utilidad en cada contexto. Lo que nos lleva a algunas reflexiones acerca de la interacción entre humanos y robots desde la aplicación de la ética del cuidado en la práctica enfermera. Desde que Carol Gilligan identificó las diferencias por razón de género en el razonamiento moral (Gilligan 1982), la ética del cuidado se ha desarrollado y se aplica de diferentes formas (Barnes y Brannelly 2008, p.384). Para la reflexión en el tema que propone el presente editorial se utiliza la aproximación de Joan Tronto que define el cuidado como la ”actividad genérica que comprende todo lo que hacemos para mantener, perpetuar, reparar nuestro mundo de manera que podamos vivir en el lo mejor posible. Este mundo comprende nuestro cuerpo, nosotros mismos, nuestro entorno, y los elementos que buscamos enlazar en una red compleja de apoyo a la vida” (Fisher y Tronto 1990, 38). Esa definición, de 1990, es la misma que plantea posteriormente en Moral Boundaries (Tronto, 1994) obra en la que esa autora realiza un análisis pionero, sugerente y relevante, señalando la dimensión política del cuidado. Proponiendo cuatro fases analíticas y los aspectos morales vinculados a cada una de ellas, a las que posteriormente añade una

quinta fase (Tronto 2013). Considera que en el cuidado es decisivo tener en cuenta las necesidades del otro/otros para guiar la acción. De manera que el cuidado implica una forma de relación activa (Domínguez Alcón et al. 2013, pp.91 ss. y 157 ss.). Para comprender y concretar todas las dimensiones del cuidado Tronto plantea considerarlo como un proceso social continuo con distintas fases: La primera fase que denomina preocuparse de (“caring about”) implica el reconocimiento de las necesidades y la evaluación de la posibilidad de aportar una respuesta. Es una preocupación que está matizada individual y culturalmente. Incluye también el nivel social y político. La segunda fase que corresponde a asumir la responsabilidad (“caring for”) supone asumirla en relación con la necesidad identificada, así como determinar la naturaleza de la respuesta a aportar. La tercera fase realizar el cuidado (“care giving”) es el trabajo material, tomando contacto directo con quien recibe el cuidado. En la cuarta fase que señala como recibir el cuidado/ servicio / actividad (“care receiving”) se supone que el objeto de solicitud responde al cuidado que recibe. La autora pone énfasis en la importancia de incluir y considerar la recepción del cuidado entre los elementos del proceso, así como las preferencias de quien recibe el cuidado. Se trata de ofrecer una respuesta accesible, adaptada, y aceptable a la necesidad (Domínguez Alcón 1996, 1997). Es esencial que la respuesta sea accesible, ya que la existencia de respuesta no siempre supone que quien la precisa pueda acceder a ella. La idea de adaptabilidad es relevante, ya que la existencia de respuesta implica que sea apropiada a la necesidad que se preten-

4 Internet de las cosas (IoT) y llevables (wearables) con expectativas remarcables de uso para el cuidado y de aplicabilidad en la practica enfermera. Y la tele asistencia.

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Cultura de los Cuidados de cubrir. La inclusión de la aceptabilidad por parte de quien recibe el cuidado, es primordial ya que supone respetar a la otra persona como interlocutor, sujeto del cuidado, persona con dignidad, derechos, y capacidad de decidir, lejos de considerarla meramente objeto receptor del cuidado, servicio, o atención, sin capacidad de decisión, ni participación. La fase final (caring with”) requiere que las necesidades de cuidado y las formas de satisfacerlas sean compatibles con los compromisos democráticos de justicia igualdad y libertad para todos (Tronto, 2013, p.23). Proporcionar y recibir cuidado es una parte importante de la vida de las personas. La aproximación de Tronto coloca la ética del cuidado en un contexto moral y político, cuya puesta en práctica, a partir de las fases que la autora identifica, suponen un punto de partida para reflexionar sobre los elementos necesarios, en cuanto a aspectos morales y sociales vinculados a cada una de las fases que plantea. Así a la primera fase “preocuparse de” le corresponde un valor o virtud de la atención; a la segunda “asumir la responsabilidad” le corresponde el valor responsabilidad; a la tercera fase “realizar la actividad” le corresponde la competencia; y por último a la cuarta fase “recibir el cuidado” le corresponde la sensibilidad/ capacidad de respuesta. Tales elementos/ componentes/ valores/ virtudes citadas, son esenciales en relación con la intervención en políticas públicas, ya que pueden ser: (a) ignorados con las implicaciones que la no consideración pueda suponer; (b) institucionalizados y posibilitar el avance hacia bases más permanentes y positivas en la consideración y provisión del cuidado; y (c) dar lugar a estereotipos que marquen negativamente la construcción del objeto de intervención. Al añadir una quinta fase (“caring with”) Tronto apunta como cua12

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lidades necesarias: pluralidad, comunicación, confianza, respeto, y solidaridad Los aspectos de: atención, responsabilidad, competencia, capacidad de respuesta, y confianza se consideran los principios esenciales de la ética del cuidado. Los estudios realizados (Barnes y Brannelly 2008, p. 384) muestran como la ética del cuidado puede usarse como marco para analizar prácticas sociales y de cuidado, ya que los principios pueden servir de guía en diferentes formas de práctica, como es el caso que se plantea en la reflexión crítica acerca de los robots y las prácticas de cuidado. Para la práctica enfermera la utilización de alta tecnología es frecuente y supone una ayuda valiosa. En relación con los cuidados una cuestión esencial es preservar el protagonismo y participación de la persona que necesita utilizar cualquier dispositivo tecnológico. Cada contexto requiere tener en cuenta condiciones y particularidades específicas. Al utilizar la ayuda eficaz que las aplicaciones de la robótica ofrecen, la preocupación es mantener la independencia de las personas usuarias, y su autonomía de decisión. El objetivo final es proveer “buen cuidado” y el enfoque es “hacer con”, “estar con”. En la perspectiva que supera el “hacer para” de períodos anteriores, que dejan al margen a la persona sujeto del cuidado, ya sea –el cuidado– realizado otra persona, profesional, enfermera, cuidadora, o que se realiza mediante la ayuda de robots o de otros dispositivos técnicos facilitadores. El buen cuidado en la perspectiva que defiende Gastmans (2012) supone: “respetar a la persona; obtener su consentimiento; proteger la información confidencial; cooperar con los demás profesionales; mantener la competencia profesional, y minimizar los riesgos”. Para Barnes y Brannelly (2008, p.386) el buen cuidado requiere de una continua negociación entre

Cultura de los Cuidados quienes proveen el cuidado y quienes lo reciben. Desarrollar prácticas basadas en los principios de la ética del cuidado tiene el potencial de permitir un dialogo que incluye las perspectivas de los actores implicados en la situación de cuidado y proporciona un lenguaje común. Las nuevas direcciones del cuidado se relacionan con lo que es significativo para las personas en cada situación de vida que precisa cuidado. El contexto y las condiciones en que se desarrolla el cuidado muestran los elementos esenciales en los que la práctica enfermera centra la atención. Giran alrededor de acompañar, orientar, enseñar, facilitar, tomar decisiones, aplicar con competencia e inteligencia los complejos conocimientos propios de la disciplina, utilizar la tecnología para mejorar la calidad de vida y del cuidado. Tienen en cuenta las raíces culturales, las creencias, lo que es significativo para las personas implicadas en las situaciones de vida que precisan cuidado. El objetivo es el buen cuidado, aplicar con inteligencia los saberes y el conocimiento profesional, restaurar la fuerza, el deseo de vivir, acompañar y facilitar el bienestar en cualquier situación, con preocupación, solicitud, con respeto a la dignidad y autonomía de todas las personas. De manera que en la reflexión acerca del uso de robots en el cuidado de las personas, parece razonable la propuesta de utilizar como guía los principios esenciales de la ética del cuidado. Además de ampliar el conocimiento de las tecnologías y los robots en la practica enfermera. Tarea a la que ya se han aplicado las enfermeras (Wilson 2014; ANA, 2014; Mieronkoski, Azimi, Rahmani et al. 2017) y con ello aportar elementos para el debate acerca de un tema controvertido pero imprescindible. Que también es objeto de preocupación e interés a nivel del Parlamento Europeo que ha publicado un informe (Delvaux, 2016) con

varias recomendaciones destinadas a la Comisión sobre normas de Derecho civil sobre robótica. Preocupación que en los últimos años (Sharkey 2008) se viene expresando desde diferentes instancias Bibliografía

- American Nurses Association (2015). Wearable Technology for Nurses. American Nurses Association. Recuperado de http://www.nursingworld.org/Wearable-Technology-for-Nurses - Barnes, M., & Tula, B. (2008). Achieving Care and Social Justice for People with Dementia. Nursing Ethics, 15 (3), 384-395. - Delvaux, M. (2016). Proyecto de Informe con Recomendaciones destinadas a la Comisión sobre normas de Derecho civil sobre robótica 2015/2103(INL). Bruselas: Parlamento Europeo. Comisión de Asuntos Jurídicos. - Domínguez Alcón, C. (1997). Familia, cuidados informales y políticas de vejez pp. 464-479 en A. S. Staab y L.C. Hodges Enfermería gerontológica. México: McGraw Hill. - Domínguez-Alcón, C.et al.(2013). Qué políticas para qué igualdad Valencia: Tirant lo Blanc. - Domínguez-Alcón, C. (2017). Evolución del cuidado y profesión enfermera Barcelona: Ediciones San Juan de Dios.. - Fisher, B. & Tronto, J. (1990). Toward a Feminist Theory of Caring pp. 35-61 en Emily Abel y Margaret Nelson Circles of Care. Nueva York: University of New York Press. - Fitzpatric, M. (2011). No robot: Japan´s elderly fail to welcome their robot overloads. BBC News 4, febrero. - Gastmans, C. (2012). Dignity-Enhancing Care for Persons with Dementia and its Application to Advance Euthanasia Directives. en: Y. Denier, C. Gastmans, A. Vandevelde (Eds.) Justice, Luck & Responsibility. Philosophical Background and Ethical Implications for End-ofLife Care. Dordrecht: Springer. - Gilligan, C. (1982). In a Different Voice. Cambridge: Harvard University Press. - Mieronkoski, R., Azimi, I., Rahmani, A.M.,, Aantaa, R., Terävä, V., Liljeberg, P., Salanterä, S. (2017). The Internet of Things for basic nursing care—A scoping review” International Journal of Nursing Studies 69 (2017) 78–90. - Sharkey, N. (2008). The Ethical Frontiers of Robotics. Science 322(5909), 1800-1801. - Schwiebert, A. (2013). Could a nurse robot cry?: Nurses´perspectives on medical robots. Michigan: University of Michigan. - Tronto, J. (1994). Moral Boundaries. Nueva York: Rouledge. - Tronto, J. (2013). Caring Democracy: Markets, Equality and Justice. Nueva York: Nueva York University Press. - Wilson, B. (2014). The Nerdy Nurse´s Guide to Using Technology, Indianapolis: Sygma Theta Tau International. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Fenomenología La dimensión espiritual en el cuidado de las personas con cáncer: una revisión integradora Spiritual dimension in the care of people with cancer: an integrative review A dimensão espiritual no processo de cuidar da pessoa com câncer: uma revisão integrativa Talita Prado Simão-Miranda1, Lidiane Aparecida Monteiro2, Camila Csizmar Carvalho3, Laís Andrade Cordeiro4, Erika de Cássia Lopes Chaves5, Marília Carvalho Leite6

Enfermeira graduada pela Universidade José do Rosário Vellano, UNIFENAS. Doutoranda em Enfermagem pela Escola de Enfermagem de Ribeirão Preto da Universidade de São Paulo, EERRP/USP, Brasil

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Enfermeira graduada pela Universidade José do Rosário Vellano, UNIFENAS. Doutoranda em Enfermagem pela Escola de Enfermagem de Ribeirão Preto da Universidade de São Paulo, EERRP/USP, Brasil.

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Enfermeira graduada pela Universidade Federal de Alfenas, UNIFAL. Mestre em Enfermagem pela Universidade Federal de Alfenas, UNIFAL-MG, Minas Gerais, Brasil.

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Enfermeira graduada pela Universidade Federal de Alfenas, UNIFAL. Mestre em Enfermagem pela Universidade Federal de Alfenas, UNIFAL-MG, Minas Gerais, Brasil.

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Tutora PET/Enfermagem. Doutora em Enfermagem pela Escola de Enfermagem de Ribeirão Preto da Universidade de São Paulo EERP/USP. Professora Associada da Escola de Enfermagem da Universidade Federal de Alfenas, UNIFAL-MG, Minas Gerais, Brasil

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Enfermeira graduada pela Universidade José do Rosário Vellano, UNIFENAS. Mestre em Enfermagem pela Universidade Federal de Alfenas, UNIFAL-MG, Minas Gerais, Brasil.

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Cómo citar este artículo en edición digital: Simão-Miranda, T.P., Monteiro, L.A., Carvalho, C. C., Cordeiro, L.A.M., Chaves, E.C.L., Leite, M.A.C. (2017). La dimensión espiritual en el cuidado de las personas con cáncer: una revisión integradora. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.02 Correspondencia: Emplear correo electrónico. Correo electrónico: [email protected] Recibido: 14/01/2016; Aceptado: 07/06/2016

ABSTRACT Justification: To clarify what makes up the spiritual care and also invest in studies to clarify on it in the care of people with cancer. Objective: To identify nursing activities, directed to adult patients with cancer, which make up the spiritual care. Methods: Integrative review conducted on the BDENF, CINAHL and PubMed databases using the keywords “nursing care”, “spirituality”, “neoplasm” and “adultery”. We used the following inclusion criteria items in Portu14

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Cultura de los Cuidados guese, English and Spanish; with abstracts available and to answer the question: “What are the nursing activities directed to the spiritual care of the adult with cancer?”. Results: Eight studies were selected for the sample. Nursing staff provided some spiritual care of the patient with cancer, among them were: perform meditation and arrange to visit religious leader. Conclusion: Nurses play activities that encompass the spiritual care the person with cancer. However, we need that care be performed by means of scientific background with good evidence. Keywords: Nursing care, spirituality, cancer, adult. RESUMEN Justificación: Aclaración de lo que constituye el cuidado espiritual y también invertir en estudios para aclarar sobre el mismo proceso del cuidado de la persona con cáncer. Objetivo: Identificar las actividades de enfermería dirigidos a pacientes adultos con cáncer, que representan el cuidado espiritual. Método: Revisión integradora contenida en las bases BDENF, CINAHL y PUBMED con los descriptores “cuidados de enfermería”, “espiritualidad”, “neoplasia” y “adulto”. Fue utilizado como criterios de inclusión artículos en portugués, Inglés y Español; con resúmenes disponibles y que contestasen a la pregunta: “Cuáles son las actividades de enfermería dirigidos a la atención espiritual de la persona adulta con el cáncer?”. Resultados: Se seleccionaron ocho estudios para la muestra. El equipo de enfermería proporcionaba algún tipo de atención espiritual a los pacientes con cáncer, entre ellos estaban realizando la meditación y organizando una visita de un líder religioso.

Conclusión: Las enfermeras desempeñan actividades que abarcan el cuidado espiritual de la persona con cáncer. Sin embargo, necesitamos que este tipo de atención sea interpretado por base científica con buena evidencia. Palabras clave: Cuidados de enfermería, espiritualidad, cáncer, adulto. RESUMO Justificativa: Esclarecer o que compõe o cuidado espiritual e também investir em estudos que esclareçam sobre o mesmo no processo de cuidar da pessoa com câncer. Objetivo: Identificar as atividades de enfermagem, direcionadas a pacientes adultos com câncer, que compõem o cuidado espiritual. Método: Revisão integrativa realizada nas bases de dados BDENF, CINAHL e PUBMED com os descritores “cuidados de enfermagem”, “espiritualidade”, “câncer” e “adulto”. Utilizou-se como critérios de inclusão artigos em português, inglês e espanhol; com resumos disponíveis e que respondesse a questão: “Quais são as atividades de enfermagem direcionadas ao cuidado espiritual da pessoa adulta com câncer?”. Resultados: Foram selecionados oito estudos para compor a amostra. A equipe de enfermagem proporcionava alguns cuidados espirituais ao paciente com câncer, dentre eles foram: realizar meditação e providenciar a visita de líder religioso. Conclusão: Os enfermeiros desempenham atividades que englobam o cuidado espiritual a pessoa com câncer. Entretanto, há necessidade que esse cuidado seja desempenhado por meio de embasamento científico com boas evidências. Palavras-chave: cuidados de enfermagem, espiritualidade, câncer, adulto. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados INTRODUÇÃO O câncer é considerada uma doença que ocasiona alterações no âmbito econômico, nos relacionamentos afetivos com familiares, amigos e na auto percepção dos pacientes (Guerrero et al., 2011). Para isso, conhecer as ações utilizadas pelos pacientes para o enfrentamento do diagnóstico dessa doença na prática assistencial de saúde, possibilitará que o profissional que atua nessa área direcione um melhor planejamento dos cuidados (Nascimento et al., 2013). Dentre os diversos profissionais, o enfermeiro destaca-se por apresentar um maior intervalo de tempo despendido ao paciente, sendo responsável por um processo de cuidar que direciona ações aos aspectos biológico, emocional, mental e espiritual do indivíduo; o que insere a espiritualidade e a religiosidade na assistência de enfermagem (Pedrão e Beresin, 2010). A espiritualidade, uma dimensão humana universal, pode constituir de uma importante estratégia de enfrentamento das complicações que acometem a integralidade do paciente, como por exemplo, diante de situações difíceis, como no caso do diagnóstico e tratamento do câncer, evento permeado de estresse e que desencadeia um forte impacto na vida do indivíduo (Galvls-Lopez e Perez-Giraldo, 2011). Além disso, como meio de estabelecer menor sofrimento e esperança de cura, a espiritualidade pode atribuir significado ao processo de saúde-doença (Valcanti et al., 2012). Para proporcionar aporte as necessidades que se apresentam comprometidas faz se necessário incluir intervenções de enfermagem que envolva o caráter holístico do ser humano. De acordo com Swinton e Pattison (2010) um cuidado que apresenta um caráter multidimensional da experiência humana e está relacionada com questões de significado, propósito, espe16

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rança, amor, Deus, valor e transcendência é o direcionado a dimensão espiritual. Na enfermagem os cuidados espirituais são compreendidos como uma intervenção realizada para proporcionar um sentido para a vida e para o alcance de um melhor bem-estar (Caldeira, 2009; Caldeira, 2011). Galdeano (2007) aponta que os fatores que dificultam o emprego do cuidado espiritual na prática é a falta de conhecimento e de habilidade de alguns profissionais de enfermagem, uma vez que conteúdo relacionado à espiritualidade não foi explanado em sua formação. Sabe-se que esses tipos de limitações apresentadas não podem ser barreiras para que o cuidado espiritual não aconteça. Diante disso, faz se necessário esclarecer o que compõe o cuidado espiritual e como o profissional de enfermagem tem realizado este cuidado na assistência às pessoas com câncer, este estudo teve por objetivo investigar quais atividades de enfermagem direcionadas a pacientes adultos com câncer compõem o cuidado espiritual. MÉTODO Para o alcance do objetivo estabelecido na presente pesquisa optou-se pelo método de revisão integrativa, o qual é caracterizado por uma ampla abordagem metodológica e compreende estudos experimentais e descritivos para entendimento de um determinado fenômeno (Whittemore e Knafl, 2005). Além disso, esse tipo de estudo oferece um panorama consistente e compreensível de conceitos complexos e teorias (Whittemore e Knafl, 2005). Para o desenvolvimento da revisão integrativa faz se necessário adotar etapas predeterminadas, em que primeiramente identifica-se o tema da pesquisa por meio de uma questão norteadora que, de acordo com a problemática de interesse do presente foi: “Quais

Cultura de los Cuidados final, foi elaborado um instrumento de coleta são as atividades de enfermagem direcionadas de dados, o qual foi submetido a um procesao cuidado espiritual da pessoa adulta com so de refinamento, realizado por uma banca câncer?”. Posteriormente, um levantamento de juízes especialistas na temática. O instrudos dados foi realizado pelo acesso online, no mento foi composto pelas seguintes variádecorrer do mês de maio de 2015. Utilizaramveis: identificação do estudo; palavras-chaves; -se descritores controlados baseados nos Desobjetivo(s); referencial teórico; características critores em Ciências da Saúde (DeCS/Mesh), metodológicas; nível de evidência; resultados “nursing care”, “spirituality”, “neoplasm” e e/ou conclusão; viés/limitação; conceito de es“adult”, nas seguintes bases de dados: BDENF piritualidade; fatores relacionados ao cuidado (Base de dados da Enfermagem), CINAHL espiritual. (Cumulative Index to Nursing and Allied HePara o delineamento dos níveis de evidênalth Literature) e PUBMED (Public/Publish cia dos estudos utilizou-se a seguinte classifiMedline). Para o processo de seleção dos cação: nível I (evidência obtida do resultado artigos adotou-se como critérios de inclusão: de metanálise de estudos clínicos controlados artigos nos idiomas português, inglês e espa6   e randomizados); nível II (evidência obtida nhol; com resumos disponíveis e que respon   em um estudo de desenho experimental); nía questão Após a critérios leitura Medline). desse Para o processo de seleçãonorteadora. dos artigos adotou-se como de inclusão: vel III (evidência obtida de delineamento de criteriosa do resumo dos 159 artigos enconartigos nos idiomas português, inglês e espanhol; com resumos disponíveis e que estudo quase-experimental); nível IV (evidêntrados, 25 estudos foram selecionados para respondesse a questão norteadora. Após a leitura criteriosa do resumo dos 159 artigos cia que emerge de estudos não experimentais, serem lidos na íntegra e destes apenas oito encontrados, 25 estudos foram selecionados para serem lidos na íntegra e destes apenas descritivo ou com abordagem metodológica corresponderam ao foco deste estudo. O Fluoito corresponderam ao foco deste estudo. O Fluxograma 1 faz uma descrição dessa qualitativa ou estudo de caso; nível V (evidênxograma 1 faz uma descrição dessa etapa. etapa. cia que surgem de relatórios de casos ou dados Fluxograma 1: Sínteses da busca nas bases obtidos de forma sistemática, de qualidade vede dado, 2015,daMinas Gerais. Fluxograma 1: Sínteses busca nas bases de dado, 2015, Minas Gerais. rificável ou de dados de avaliação de programas); nível VI (evidências baseadas em opini159 artigos ões de especialistas, baseadas nas experiências clínicas ou opinião de comitês especialistas) (Stetler et al., 1988). CINAHL 04 artigos

01 artigo incluído

 

BDENF 0 artigos

PUBMED 155 artigos

07 artigos incluídos

Amostra final 08 artigos

 

Como meio de extrair as informações necessárias dos estudos pertencentes à amostra

RESULTADOS Ao analisar o perfil dos oito artigos incluídos na presente revisão, observou-se que cinco (57,14%) (Ando et al., 2011; Ando et al., 2009; Shih et al., 2009; Ferrell et al., 2008; Balboni et al., (2013) foram publicados nos últimos 12 anos. Em relação ao nível de evidência e tipo de estudos houve três artigos (42,86%) (Ando et al., 2011; Ando et al., 2009; Herth, 2000) que realizaram pesquisas experimentais e quase-experimentais, sendo estas considera1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados importância de se manter esperançoso no 8   enfrentamento da doença para a melhora da mente (Quadro 1).   qualidade de vida; incentivar a Quadro 1: Perfil dos artigos analisados, 2015, Minas Gerais. n=8. expressão do medo; interagir o Artigo Nome do Revista Autor Ano Vol / n / Tipo de Nível de com a natureza e resgatar meartigo página Estudo Evidência 2000 Journal of Herth K 32(6):1431QuaseIII A1 Enhancing hope mórias positivas. Advanced 1441 experimental in people with a Nursing first recurrence 2. Realizar meditação baof cancer 2011 19(7):929-933 Experimental II Journal Ando M, A2 A qualitative Support Care Morita T, study of seada na consciência, oração Cancer Akechi T, mindfulnessIfuku Y based meditation meditativa e/ou imaginação therapy in Japanese cancer patients guiada (A2; A3; A7; A8) (Ando 2009 12(12):109Experimental II Journal of Ando M, A3 The efficacy of 1094 Palliative Morita T, mindfulnesset al., 2011; Ando et al., 2009; Medicine Akechi T, based Ito S, meditation Tanaka M, therapy on Brown-Saltzman, 1997; BalboIfuku Y, anxiety, Nakayama depression and T spirituality in ni et al., 2013) Japanese patients with Promover a revisão autocancer 2009 IV 36(1):31-38 Qualitativo Oncology Shih F, Lin A4 Spiritual needs realizado por Nursing H, Gau M, of Taiwan’s biográfica, de forma a possimeio da Forum Chen C, older patients investigação Hsiao S, with terminal hermenêutica Shih S, cancer bilitar que o paciente a reveja Sheu S 2008 Clinical Ferrell B, 12(4):575-581 Estudo de Caso V A5 Manging pain sua vida com temas que trazem Journal of Levy M, from advanced Oncology Paice J cancer in the Nursing palliative care a recordação eventos vividos setting 2000 Journal of Sherwood G 18(2):159-175 Reflexão VI A6 The Power of Holistic orientada a partir nurse-client (A2). Meditar e realizar moNursing da realização de encounters: grupo focal. Interpreting vimentos respiratórios e yoga spiritual themes 1997 Seminars in Brown13(4):255-259 Revisão de ----------A7 Replenishing OncologyNurs Saltzman K literatura the spirit by com duração de 30 a 60 miing meditative prayer and guided nutos (A3). Orar por meio da imagenary 2013 31(4): 461Não experimental IV Journal of Balboni MJ, A8 Why Is Spiritual meditação e imaginação guiada 467 Clinical Sullivan A, Care Infrequent Oncology Amobi A, at the End of Phelps AC, Life? (A7). Oferecer oração para o Gorman DP, Spiritual Care Zollfrank A, Perceptions Peteet JR, Among Patients, paciente e realizá-la com o seu Prigerson Nurses, and HG, Physicians and VanderWeel the Role of consentimento (A8). TJ, Training Balboni TA 3. Escutar os relatos dos pacientes e tocá-lo (A4; A6; A8) (Shih et al., 2009; Sherwood, Todos os artigos incluídos neste estudo ti2000; Balboni et al., 2013). veram enfoque nos tipos de cuidado espirituEstabelecer uma relação de confiança enal realizado, entretanto, nenhum dos autores tre o profissional e o paciente, permanecer ao descreveu a conceituação utilizada para essa lado do paciente por um tempo determinado temática. durante a hospitalização; escutar os relatos Os cuidados espirituais proporcionados dos pacientes sobre reflexões acerca de sua neaos pacientes com câncer nos estudos desta cessidade espiritual (A4). revisão foram divididos em quatro categorias, Puxar uma cadeira ao lado da cama do com as atividades realizadas descritas abaixo: paciente, para mostrar que está disponível; 1. Incentivar a expressão de medo, expecapertar a mão da paciente; silenciar entre as tativas e esperanças (A1) (Herth, 2000) palavras, a fim de proporcionar um tempo Orientar e informar sobre o câncer e a para assimilar o que é dito; partilhar a alegria das com nível de evidência II e III respectiva-

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Cultura de los Cuidados e a dor (A6). Dialogar com o paciente sobre religiosidade/espiritualidade, verificar a aceitação do mesmo quanto a esse tipo de cuidado e compreender que crença pode afetar nas decisões de tratamento (A8). 4. Providenciar a visita de um membro religioso (A5; A8) (Ferrell et al., 2008; Balbomi et al., 2013) Solicitar a presença do capelão do hospital para facilitar o ambiente e a despedida entre família e paciente, quando iminência de morte do mesmo (A5) ou promover um momento de encontro entre o paciente com um membro religioso para diálogo (A8). Outros líderes religiosos podem ser solicitados, principalmente atendendo a crença religiosa do paciente. Ainda, nesta revisão foi observado que as atividades propostas para o cuidado espiritual tiveram efeitos positivos, pois proporcionaram redução da ansiedade e da depressão (Ando et al., 2009), aumentaram o sentimento de esperança e melhoraram a qualidade de vida (Herth, 2000), facilitaram o tratamento e o processo de adaptação do paciente a doença (Ando et al., 2011), entre outros. Além desses resultados, o estudo de Ferrell et al. (2008) também aponta a necessidade de intervenção (por capelão ou assistente social) não somente para paciente e/ou família, mas também para o profissional, uma vez que o mesmo estabelece vínculo com o paciente que se interna com frequência antes de sua morte. DISCUSSÃO De acordo com o ano de publicação dos artigos incluídos neste estudo, observa-se mais da metade (57,14%) das publicações sobre espiritualidade nos últimos 12 anos (Ferrell et al., 2008; Ando et al., 2009; Shih et al., 2009; Ando et al., 2011; Balboni et al., 2013). Segundo Val-

canti et al. (2012) os profissionais da saúde, em especial a enfermagem têm valorizado a espiritualidade e se interessam pelo tema, inclusive avaliam o impacto dessa dimensão perante o enfrentamento de doença crônica. Em relação ao tipo de estudo, observa-se que três são decorrentes de pesquisas experimentais e quase experimentais (Herth, 2000; Ando et al., 2009; Ando et al., 2011). Assim, é possível constatar que embora a enfermagem ainda apresenta restrição em realizar estudos de ensaios clínicos (Chaves et al., 2008), essa realidade está se modificando em que há interesse de resgatar a espiritualidade por meio da prática baseada em evidências. A busca da espiritualidade na profissão de enfermagem é relevante na compreensão do conceito de cuidado espiritual, levando-se em conta que o mesmo é subjetivo, fato que o torna de difícil definição (Mcsherry et al., 2001). Neste estudo, percebe-se isso, uma vez que todos os artigos abordaram sobre o cuidado espiritual fornecido ao paciente, entretanto nenhum deles apresentou seu conceito. O cuidado espiritual, pela sua particularidade, é diferente do cuidado físico, que é encontrado facilmente na literatura, na grade curricular dos cursos de enfermagem e na prática clínica. No entanto, mesmo sendo um cuidado diferenciado por envolver aspectos pessoais, ele precisa ser realizado, uma vez que existe referenciais que norteiam sua utilização, como o sistema de linguagem padronizada da NIC (Nursing Interventions Classification) (Bulecheck et al., 2010). Nesta revisão foi encontrado diversos atividades relacionados à espiritualidade como a orientação dada ao paciente quanto a sua doença, para promover esperança; o incentivo para a expressão dos sentimentos; a meditação e a oração; a escuta e o toque de mãos; 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados a escuta ativa; a visita de um capelão e/ou de outro membro religioso. Essas atividades estão de acordo com as propostas apresentadas pela NIC para as intervenções de enfermagem apoio espiritual e facilitação do crescimento espiritual (Bulecheck et al., 2010). Contudo, além das atividades encontradas neste estudo, há outras sugeridas pela NIC como: encorajar o uso de recursos espirituais, caso o paciente deseje; oferecer artigos espirituais desejados; encorajar a participação em serviços religiosos e em programas de oração, dentre outras (Bulecheck et al., 2010). As atividades de cuidado espiritual expostas nas categorias 1, 2 e 4 desta revisão corroboram com os estudos de Menezes e Dell’Aglio (2009); Nogueira (2004); Gentil et al. (2011), em que se destaca respectivamente a importância clínica da meditação, o incentivo a exteriorização dos sentimentos para que o paciente compreenda o significado da experiência do adoecer proporcionando a ressignificação e a aceitação diante de situações estressantes e o serviço de capelania previsto na Constituição Brasileira desde 1988. Ressalva-se que o serviço de pastoral pode ser um dos meios que o enfermeiro utiliza para direcionar os pacientes, promovendo assim, um momento de fé, de paz e de esperança (Ferrell et al., 2008). Perante a vulnerabilidade que o paciente com câncer apresenta é indispensável que a abordagem ao mesmo seja realizada de forma holística e com o objetivo de garantir o máximo de conforto possível (Amorós, 2011). Este fato se torna possível por meio da promoção do cuidado espiritual pelos profissionais da área da saúde em especial a enfermagem. De acordo com Ferrell et al (2008) a presença do profissional de enfermagem junto ao paciente para ouvir suas angústias e atentar-se as suas emoções e seus sentimentos é considerado 20

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muitas vezes, mais importante que qualquer terapêutica. Portanto, erante o contexto apresentado, nota-se que há diversas atividades a serem realizadas para se oferecer o cuidado espiritual ao paciente, tão importante como qualquer outro tipo de cuidado que compõe a assistência. O necessário é especificar como essas atividades serão realizadas, em que momento, em que local, como os pacientes desejariam que elas fossem abordadas, para assistir os mesmos com qualidade. CONCLUSÃO Há diversas atividades a serem realizadas como meio de proporcionar o cuidado espiritual ao paciente, dentre elas identificou-se orientação acerca da expressão de sentimentos, meditação, realização de momentos de reflexão, escuta e interação com o paciente e a visita de um membro religioso com participação ativa dos enfermeiros. Observa-se, entretanto, a existência de lacunas em relação a temática de cuidado espiritual, visto que os artigos não apresentaram conceito sobre o mesmo, além de não especificar detalhes quanto a atividade realizada para proporcionar o cuidado espiritual em especial como ela foi realizada, o tempo em que foi dedicado para isso, em que momento do tratamento do paciente realizou-se a atividade. Nesse contexto, é necessária a realização de mais pesquisas experimentais, de estudos de ensaios clínicos, para comprovar os reais benefícios do cuidado espiritual a fim de fornecer melhores evidências científicas, contribuir com o conhecimento da Enfermagem e aprimorar a prática clínica desse profissional. BIBLIOGRAFÍA - Amorós, B. Y. (2011). Music therapy in cancer patients. Cultura de los Cuidados, 15 (29), 57-73. Disponível

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Cultura de los Cuidados

Reflexiones sobre enfermería desde la biopolítica: relaciones de poder y cuidado Reflection from the biopolitic perspective: power relations and health-care Reflexões sobre a enfermagem desde a biopolítica: relações de poder e cuidado Claudia Andrea Collado Quezada Correo y Silvana Castillo Parra Correo Departamento de Enfermería, Facultad de Medicina, Universidad de Chile. Chile. Cómo citar este artículo en edición digital: Collado Quezada, C.A., y Castillo Parra Correo, S. (2017). Reflexiones sobre enfermería desde la biopolítica: relaciones de poder y cuidado. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.03 Correspondencia: Departamento de Enfermería. Facultad de Medicina. Av. Independencia 1027, Independencia, Santiago (Chile) Correo electrónico: [email protected] Recibido: 11/03/2016; Aceptado: 05/09/2016

ABSTRACT This essay invites to a reflection, from the Foucauldian perspective, about the viewpoint of nursing-care delivery and teaching to future professionals, as well as the analysis of the relations of power in nursing and the link with people “caring objects” from a bioethical point of view. The methodology includes texts analysis from a Foucauldian perspective in health, a retrospective view about the experiences of professionals nurses and the installation of mechanism of power in nursing. Sources related to nursing history and the professional formation with emphasis on professor/student and nurse/patient relationship were analyzed. 22

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Bioethical aspects and professional contexts were compared. Currently nurses have normalized the existence of control mechanism within the direct attention of people and their care, which is transferred to the formation of nurses. Nowadays, nursing thoughts have been expanded, become independent and adapted to different contexts. This invites to use a broader perspective to observe the purpose of the discipline and the profession of nursing, using an introspective view that allows to understand that the nursing practice perpetuates subordination and power in both direct care teams and work teams. Key words: Nursing, biopolitics, nursing care and discipline. RESUMO Este tema tem como objetivos reflexionar desde a perspectiva foucaultiana, o cuidado que se entrega e se ensina a os futuros professionais e analizar as relações de poder em o ámbito da enfermería e o vínculo com as pessoas “objetos de cuidado” desde um en-

Cultura de los Cuidados foque bioético. A metodología incorpora um análises de textos desde a perspectiva foucaultiana em saúde, uma olhada retrospectiva sobre experiências professionais e a instalação de dispositivos de poder em enfermería. Se analizam fontes relacionadas com a história da enfermaría e da formação professional com énfases em as relacões professores/estudantes e enfermeros/pacientes. Se contrastam aspectos bioéticos e contextos professionais. A enfermería ha normalizado a instalação de lógicas de controle em a atenção direta de pessoas e em o cuidado, do qual se transfere a formação de enfermeiras e enfermeiros. Atualmente, o pensamento de enfermaría se ha ampliado, independizado e adaptado a os contextos, o que convidam a visualizar desde uma perspectiva mais ampla o proposto de que fazer disciplinar e professional, abrindo uma nova forma de observar, a introspectiva que permita compreender, que o exercício da enfermería desde o cotidiano, perpetue lógicas de subordinação e poder tanto em a atenção direta como em as equipes de trabalhos. Palavras chaves: Enfermaría, biopolítica, cuidado, disciplina. RESUMEN Este ensayo tiene como objetivos reflexionar desde la perspectiva foucaultiana, el cuidado que se entrega y se enseña a los futuros profesionales y analizar las relaciones de poder en el ámbito de la enfermería y el vínculo con las personas “objetos de cuidado” desde un enfoque bioético. La metodología incorpora un análisis de textos desde la perspectiva foucaultiana en salud, una mirada retrospectiva sobre experiencias profesionales y la instalación de dispositivos de poder en enfermería. Se analizan fuentes relacionadas con la historia de enfermería y la formación profesional con én-

fasis en las relaciones profesores/estudiantes y enfermeros/pacientes. Se contrastan aspectos bioéticos y contextos profesionales. La enfermería ha normalizado la instalación de lógicas de control en la atención directa de personas y en el cuidado, lo cual además se transfiere a la formación de enfermeras y enfermeros. Actualmente, el pensamiento de enfermería se ha ampliado, independizado y adaptado a los contextos, lo que invita a visualizar desde una perspectiva más amplia el propósito del quehacer disciplinar y profesional, abriendo una mirada introspectiva que permita comprender, que el ejercicio de la enfermería desde lo cotidiano, perpetúa lógicas de subordinación y poder tanto en la atención directa como en los equipos de trabajo. Palabras claves: Enfermería, biopolítica, cuidado, disciplina.

INTRODUCCIÓN Siendo la enfermería una disciplina en creciente desarrollo, surge la necesidad de reflexionar en torno a cuestiones vinculadas con el cuidado y la biopolítica, entendida esta última como “designar lo que hace entrar a la vida y sus mecanismos en el dominio de los cálculos explícitos y convierte al poder-saber en un agente de transformación de la vida humana” (Foucault, 1977: 85), la cual permea el ámbito de la enfermería en silencio con la comodidad de no ser visualizado. Atrapados en la praxis, enfermeras/os permanecen con una especie de ceguera beneficente, disfrazada del rol de empoderar a las personas que atienden desde el fortalecimiento de la autonomía, mientras sigan las “indicaciones” que les dan para que se hagan “cargo de su propia salud”. Esto lleva a divagar en una especie de impulso liberador emanado desde la reflexión y, sin embargo, la 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados praxis sigue atravesada por la subordinación y la historia que se construyó, y que “disciplinó” hasta lograr el cuerpo de conocimientos ordenado y confiable que permite mirar el mundo y sus fenómenos desde la ciencia del cuidado. Se ha partido de los siguientes objetivos: 1) Reflexionar desde la perspectiva foucaultiana, sobre el cuidado que se entrega y se enseña a los futuros profesionales. 2) Analizar las relaciones de poder en el ámbito de la enfermería y el vínculo con las personas “objetos de cuidado” desde un enfoque bioético. METODOLOGÍA Este trabajo fue desarrollado en el marco del curso electivo “De la biopolítica a la bioética. Consideraciones críticas acerca del dispositivo biomédico moderno” del Programa de Magíster en Bioética de la Universidad de Chile, a cargo del Profesor Raúl Villarroel. En una primera instancia se realizó un análisis de textos relacionados con la perspectiva foucaultiana en el ámbito de la salud, además de una mirada retrospectiva sobre experiencias profesionales que evidenciaran la instalación de dispositivos de poder en la enfermería incorporando elementos del panóptico. A continuación se procedió a analizar artículos y libros relacionados con la historia de la enfermería y la formación de profesionales con especial atención a las relaciones establecidas en las diadas profesores/estudiantes y enfermeros/pacientes. Por último, se desarrolla una contrastación entre aspectos bioéticos y los contextos profesionales en enfermería antes descritos. DESARROLLO DEL TEMA No hay duda que la enfermería, desde la construcción profesional y disciplinar en las 24

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últimas cinco décadas, ha tenido un avance significativo en cuanto a la construcción de saberes propios, manifestado claramente en la instalación de ella en la academia como disciplina. En Chile, existen en la actualidad normas que respaldan el actuar del profesional en cuanto a la gestión del cuidado “entendida como el ejercicio profesional de la enfermera sustentada en su disciplina, la ciencia de cuidar, se define como la aplicación de un juicio profesional en la planificación, organización, motivación y control de la provisión de los cuidados, oportunos, seguros e integrales, que aseguren la continuidad de la atención y se sustenten en las políticas y lineamientos estratégicos de la institución” (MINSAL, 2009). Lo anterior, hace pensar en el recorrido que la construcción del profesional de enfermería ha tenido que sostener y que se perpetúa de alguna manera, con aires de innovación, en la formación de los futuros profesionales. La beneficencia, entendida como el “deber moral de obrar para beneficiar a otras personas” (Ferrer, 2012, p. 80), permanece latente en el espacio formativo, teñido del ímpetu por fortalecer la autonomía de las personas, de modo que el cuidado propio acompañe la libertad que todo ser humano, en distinta medida, busca para su vida. Como elementos centrales del cuidado se reconocen el orden, la disciplina y el control, que permiten disminuir cualquier posibilidad de incidente que signifique daño o desborde de alguna situación. Es frecuente que los profesionales de enfermería manifiesten que están “entrenados” para saber “todo” lo que sucede en su servicio, incluidos pacientes y personal a cargo. Entonces, nos preguntamos: ¿A qué mecanismos responden los enfermeros/as para brindar cuidados? ¿De qué manera están construidos los procesos que buscan mantener la vigilancia? Y por sobreto-

Cultura de los Cuidados do está la pregunta ¿Será posible superar esta perspectiva si se es hijo/a de ella? Existen elementos de la historia de la enfermería que se mantienen y perfeccionan, haciendo posible una analogía partiendo desde lo que Florence Nightingale -considerada como la fundadora de la enfermería profesional- menciona en sus notas de enfermería del siglo XIX, en relación a la importancia de los pequeños detalles en la atención, que hacen la diferencia en la eficiencia que se logra, más allá de la abnegación y entrega del profesional: “Todos los resultados de una buena enfermería, tal como se detallan en estas notas, pueden echarse a perder o ser completamente negativos, por un defecto, es decir: los pequeños detalles, o, en otras palabras, no saber conseguir que lo que usted hace cuando está allí se haga igual cuando no esté…la enfermera puede abandonar su salud y todos su otros deberes, y, sin embargo, por falta de un pequeño detalle, no ser la mitad de eficiente que otra que no es ni la mitad de entregada de ella, pero que tiene ese arte de multiplicarse a sí misma”. (Nigthtingale, F. 1859. p. 30) Lo anterior, da cuenta de la instalación de lógicas de control presentes en la atención directa de las personas, y la idea de que la eficiencia va de la mano del arte de multiplicarse a sí misma, de tal forma que las cosas ocurran aun cuando no esté el profesional, y el cuidado se perpetúe en ausencia del mismo; es decir mantener una vigilancia constante, que trasciende a la presencia de la persona. Así entonces, una vez que el dispositivo de vigilancia se instala, ya no es necesaria la presencia constante del enfermero/a. Ahora bien, el cuidado de enfermería ha evolucionado en su conceptualización con el pasar de los años, siendo para Florence Nigthtingale al inicio de la enfermería moderna

“un servicio a la humanidad basado en la observación y la experiencia, que consiste en poner a la persona enferma o sana en las mejores condiciones, a fin de que la naturaleza pueda restablecer o recuperar la salud” (Kérouack, 1996, p.48). Por su parte, una de las teóricas de enfermería más recientes, Jean Watson, define el cuidado como: “arte y ciencia humana del caring, ideal moral y procesos transpersonales dirigidos a la promoción de la armonía cuerpomuerte-espíritu utilizando diez factores de cuidado” (Kérouack, 1996, p. 56). Las perspectivas desde Nigthtingale a Watson evidencian la evolución que el pensamiento de enfermería ha tenido y sus esfuerzos por ampliarse, independizarse y adaptarse a los contextos. En un intento por observar el cuidado desde la perspectiva de la biopolítica, parece pertinente considerar que “el cuidado tiene su fin en evitar la muerte” considerando que “ahora es en la vida y a lo largo de su desarrollo donde el poder establece su fuerza, la muerte es su límite” (…) “poder que se ejerce sobre la vida, el derecho individual y privado de morir…” (Foucault, 1977, p. 83). En este sentido, cuidamos para mantener la vida y de esta manera perpetuar el control sobre las personas, el cual acaba cuando finaliza la vida. Por su parte, la maquinaria tecnológica y humana, de la cual la enfermería también forma parte, está montada para hacer frente y vencer dicha muerte, como una manera de evitar la pérdida del control. Existe un control social sobre el cuerpo de las personas, en donde se indica qué hacer, cómo cuidarse para evitar la muerte y de esa manera mantener una población productiva. Los pacientes sumisos son considerados buenos, tranquilos, agradables, sobre todo aquellos que nos “hacen caso”. De tal modo, las estadísticas relacionadas con los parámetros de salud poblacionales, dan cuenta del 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados éxito de las acciones que emprendemos como sociedad, en pro del sometimiento del cuerpo del otro y que cuenta con normas que lo respaldan. En este sentido, la enfermería se convierte en una efectiva herramienta de control, consagrado a él desde sus inicios en “disciplinar” sus integrantes y las personas a las que cuida. Las mismas lógicas de alguna manera han sido transferidas a la formación profesional de enfermeras, la cual desde sus inicios consideraba que la buena estudiante era aquella que “hacía lo que se le mandaba” (Donahue, 1985), “siendo evidente que la alumna que hacía demasiadas preguntas caía en la categoría de personalidad inapropiada para la enfermería”, cuya consecuencia era la expulsión de la Escuela” (Castillo, 2007, p.2). Un par de siglos después de la instalación de las primeras escuelas de enfermería, se continúa evidenciando las múltiples formas en que el poder actúa en la formación de profesionales de enfermería, explicando los mecanismos mediante los cuales las ideologías dominantes dirigen a profesoras y estudiantes hacia la conformidad y subordinación, cuyas prácticas y lógicas serán replicadas en la posterior acción profesional en las instituciones sanitarias (Medina, 2006). Por su parte, la enfermería con sus diversos sistemas de gestión del cuidado busca mantener y mejorar el nivel de salud de las personas, cuestión que se relaciona con la idea de que “las disciplinas funcionan cada vez más como unas técnicas que fabrican individuos útiles” denominado por Foucault como “la inversión funcional de las disciplinas” (Foucault, 2002, pp. 192-193). En consecuencia, se es un agente de biopoder desde la propia construcción profesional. Entonces, la genuina intención de ayuda al prójimo que moviliza el cuidado, se mezcla con la visualización de prevenir, pro26

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mover y recuperar la salud, para mantener individuos saludables durante el mayor tiempo posible, los cuales sean útiles al sistema social imperante. Sumado a lo anterior, la revolución de la tecnología abre espacios de observación permanente en tiempo real. La presencia humana comienza a ser desplazada por dispositivos tecnológicos donde todo queda registrado, en el que la vida privada y la intimidad son espacios con límites cada vez más estrechos. Se ve de manera positiva para quienes requieren de cuidado, el estar permanentemente observados por dispositivos tecnológicos, sin presencia de el/la enfermero/a. De acuerdo a esto, se hace imprescindible “establecer una suerte de equilibrio reflexivo que permita asegurar que lo factible no prevalezca necesariamente por sobre lo legítimo” (Villarroel, 2013, p. 46), planteamiento que podría representar la era del panoptismo generalizado – entendido desde Bentham como “la figura arquitectónica de esta composición. Conocido es su principio: en la periferia, una construcción en forma de anillo; en el centro, una torre, ésta, con anchas ventanas que se abren en la cara interior del anillo. La construcción periférica está dividida en celdas, cada una de las cuales atraviesa toda la anchura de la construcción (…) De ahí el efecto

Cultura de los Cuidados mayor del Panóptico: inducir en el detenido un estado consciente y permanente de visibilidad que garantiza el funcionamiento automático del poder. Hacer que la vigilancia sea permanente en sus efectos incluso si es discontinua en su acción” (Foucault, 2002, p. 183). CONCLUSIONES La imagen de la enfermería y el cuidado como herramienta de control, instala tensiones en la reflexión vinculada al principio de beneficencia, considerada frecuentemente como una motivación primaria por cuidar a los más débiles. Lo anterior, hace necesario visualizar desde una perspectiva más amplia el propósito de nuestro quehacer disciplinar y profesional de enfermería, que abra la posibilidad de remirarnos y comprender que muchas veces nuestras prácticas desde lo cotidiano perpetúan lógicas de subordinación y poder. Sólo el derrumbe de una estructura permite levantar otra, pero parece complejo siquiera darse la posibilidad de cuestionar lógicas disciplinares que se han construido durante siglos, y las consecuencias que éstas han tenido para las personas y la sociedad. Sin embargo, el visibilizar estas cuestiones podría abrir espacio para que, conscientes del poder que constantemente es posible ejercer sobre las personas que son cuidadas, y para el cual se fue entrenado, pueda surgir una forma alternativa de concebir la enfermería. Buscar en los anales de la enfermería, nos daría la posibilidad de volver a pensar en valores intrínsecos de nuestra deontología profesional como son el respeto, la confiabilidad y trato digno, entre otros; de tal forma de construir saberes en torno al cuidado buscando la comprensión íntima de los procesos que pasa la persona a lo largo de su vida, respecto a los tránsitos entre salud y enfermedad.

Finalmente, se hace necesario que estas reflexiones sean parte de los procesos formativos de los futuros profesionales de enfermería y puedan hacerse parte también de las discusiones respecto las relaciones establecidas entre profesores y estudiantes, lo que sin duda requiera una transformación del paradigma disciplinar hasta ahora normalizado. BIBLIOGRAFÍA

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Cultura de los Cuidados

¿Por qué se escapó? Why did it escape? Por que ele fugiu? Raquel Asunción Díaz Alonso Diplomada Universitaria en Enfermería. Residencia y Centro de Día Nuestra Señora De La Soledad, Parla (Madrid). Cómo citar este artículo en edición digital: Díaz Alonso, R.A. (2017). ¿Por qué se escapó? Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.04 Correspondencia: C/Gladiolo, nº1, 28980, Parla (Madrid). Correo electrónico: [email protected] Recibido: 10/05/2016; Aceptado: 11/11/2016

Through the narrative, the initial purpose of showing the relevance of the psychosocial plane in people who has been achieved. Understanding how our patients interact with their environment can help us to achieve a more effective communication. Keywords: Phenomenology of care, nursing, narrative anthropology, qualitative research.

ABSTRACT The psychosocial aspect of our patients is critical to care them holistically. Throughout our professional and personal life, we observe and live different relationships. The characteristics and quality of the same influence on the emotions of each person as well as how they interpret and deal with the difficulties of life. Understanding how our patients interact with their environment can help to improve communication with them. This is a reflection of a complex interpersonal relationship. Objective: To raise awareness of the importance of the psychosocial aspect of our patients. Method: Narrative as an instrument to reflect on interpersonal relationships. Results: The elaboration of the story has contributed to show the complexity of interpersonal relationships, and their influence on our behavior. Conclusions: 28

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RESUMO O aspecto psicossocial dos nossos pacientes é fundamental para tratar de forma holística. Ao longo da nossa vida profissional e pessoal, podemos observar e viver relacionamentos diferentes. As características e qualidade da mesma influência sobre as emoções de cada pessoa, bem como a forma como eles interpretam e lidar com as dificuldades da vida. Entender como nossos pacientes interagem com seu ambiente pode ajudar a melhorar a comunicação com eles. Aqui são um reflexo de um relacionamento interpessoal complexa. Objetivo: sensibilizar para a importância do aspecto psicossocial dos nossos pacientes. Método: A narrativa como uma ferramenta para refletir sobre as relações interpessoais. Resultados: O desenvolvimento da história ajudou a mostrar a complexidade das relações interpessoais, e influenciar o nosso comportamento.

Cultura de los Cuidados Conclusões: Através da narrativa, ele atingiu o objetivo inicial de mostrar a relevância do nível psicossocial nas pessoas. Compreender como os nossos pacientes interagem com seu ambiente pode nos ajudar a alcançar uma comunicação mais eficaz. Palavras-chave: Fenomenologia dos cuidados, enfermagem, antropologia narrativa, pesquisa qualitativa. RESUMEN El aspecto psicosocial de nuestros pacientes es fundamental para atenderlos de manera holística. A lo largo de nuestra vida profesional y personal, observamos y vivimos diferentes relaciones interpersonales. Las características y calidad de las mismas influyen sobre las emociones de cada persona, así como sobre su manera de interpretar y afrontar las dificultades de la vida. Entender la forma en la que nuestros pacientes interactúan con su entorno puede ayudarnos a mejorar la comunicación con ellos. A continuación, presentamos una reflexión sobre una compleja relación interpersonal. Objetivo: Concienciar de la importancia del aspecto psicosocial de nuestros pacientes. Método: La narrativa como instrumento para reflexionar sobre las relaciones interpersonales. Resultados: La elaboración del relato ha contribuido a mostrar la complejidad de las relaciones interpersonales, y su influencia en nuestro comportamiento. Conclusiones: Mediante la narrativa, se ha alcanzado el propósito inicial de mostrar la relevancia del plano psicosocial en las personas. Entender la forma en la que nuestros pacientes interactúan con su entorno puede ayudarnos a conseguir una comunicación más efectiva. Palabras clave: Fenomenología de los cuidados, enfermería, antropología narrativa, investigación cualitativa.

Ahora sé que te odio. Te odio con una furia que nunca hubiera imaginado. Y me odio a mí mismo por no haber querido ver. Por haberme dejado naufragar cómodamente en tu barco, sin importarme que cada vez estuviera más lejos de la tierra en la que podía ser libre. Por eso, te miro con odio desde el punto más alto de mi rascador, en una esquina de tu salón. Estático y en silencio. Me miras; intuyo tu preocupación, esperando maliciosamente que esté teñida de una pizca de miedo. Llega tu pareja a la hora que esperabas. Te oigo decirle que algo le pasa al gato, que estoy muy raro. Mi odio no entraba en tus planes de hoy. Pero, ahora que ha aflorado, no puedo reprimirlo. Aunque me empiezo a sentir algo culpable de estropearte el día. La culpa me hace odiarme más, y odiarme me lleva a odiarte. Y pasa otra hora, inmóvil. Debo parecer una gárgola. Acercas tu cara a la mía, y me hablas como si fuera un niño. Esa misma voz que usaste el primer día que te vi. ¡Me sentí tan afortunado! Mi pasado era igual de terrible que el del resto de seres que moraban aquella perrera. Mi futuro, igual de incierto. Había llegado a pensar que allí, de esa manera, pasaría el resto de mi vida, y estaba desesperado. Me creí especial cuando me elegiste. Pensé que habías detectado, de un solo vistazo, todo lo bueno de mi interior, todo lo que podía dar. Te elevé a la categoría de Diosa en ese mismo momento. Ya no quise ver más, hasta hoy. Ahora sé que no me elegiste por lo que yo era; me elegiste por lo que planeabas hacer de mí. Yo cumplía las características básicas que buscabas para tu plan: pequeño, bonito y asustado. Podías haber elegido a cualquier otro con la misma base. Me asignaste un lugar en tu casa. Un sitio donde dormir. Un plato para comer y otro 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados para beber. Un baño cuadrado con tierra. Un peine. Todo para mí solo. Y me pareció más de lo que merecía. Sin duda, era más de lo que me habían dado nunca. No podría ponerle palabras al agradecimiento que sentí. Me hundí más aún en tu plan, sin saber el alto precio que pagaría. Al poco de llegar a tu casa, descubrí en mi exploración esas cortinas. ¡Miau! Eran preciosas. Acaricié con las patas delanteras su suave tela, disfrutando cada segundo. Mis uñas aparecieron sin control, salvajes, sacando de su sitio algunos preciados hilos. Poco tiempo después, descubriste el desastre. Pasaste de ser una diosa a ser un demonio en milésimas de segundo. A los tres días me encontraba en el veterinario, quitándome el utensilio felino más práctico: mis preciadas uñas. La misma noche de la operación, ya en casa, me pusiste una cena de marajá. Y me acariciaste mucho rato, alabando lo bien que me había portado. Ése fue el pequeño precio que tuviste que pagar por despojarme de un trozo de mi naturaleza. Y yo lo acepté encantado, agradeciendo que con eso perdonaras mi pecado. Más preocupado por ti que por mí mismo. Todos los días me peinabas, me buscabas por la casa, jugabas conmigo. Veías la televisión acariciando mi pelaje. Todo iba bien, hasta que hacía algo que me apetecía y que tú no creías conveniente. Si seguía tus instrucciones la vida me era plácida, sin castigos ni enfados. Poco a poco, fui adaptando mis apetencias a tus reglas, para que nuestros días fueran felices. Añoraba un poco la compañía de otros gatos, pero tú llenabas ese vacío. Me convencí de que no necesitaba a nadie más. Si tú pensabas que eso era lo mejor para mí, así era, sin duda. Conseguiste ser mi único mundo, y alejarme de todo aquello que no podías controlar. 30

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Me hice mayor, y empecé a sentir un fuerte deseo de conocer gatas. Trataba de pedírtelo mediante maullidos constantes, y de atraerlas por mis propios medios marcando el territorio. Mi necesidad te exasperó. Creo que ya contabas con que algún día pasaría, porque la cita con el veterinario tardó aún menos que aquella para las uñas. Ya lo tenías planeado, seguro. Tras la operación, volví a cenar como un rey y a ser mimado en exceso. Así, conseguiste que me sintiera culpable de mi molesta necesidad, y agradecido a ti por seguir queriéndome a pesar de todo. La vida siguió unos años más, plácida al seguir tus normas. Y cuando te sentiste segura de mi fidelidad y mi buen comportamiento, empezaste a relajarte. Peinarme ya no era un placer, era una obligación. Cuando yo quería jugar, me lanzabas los juguetes lo más lejos posible del pasillo, y resoplabas al verme volver con ellos. La calidad de la comida fue bajando, hasta que la lubina empezó a saber a perca. Pero yo te seguía idolatrando. Tu plan para mí se había completado, y te centraste en el resto de tus metas. Ya no tenías que darme nada para obtener todo lo que querías de mí. Te fuiste de vacaciones por última vez hace poco. Con confianza, porque ya sabes que no haré nada malo. Estoy bien domesticado. Calculaste, un tanto a la baja, la cantidad de sustento que necesitaría para sobrevivir. Y me dejaste solo, como si fuera un mueble más. Sin compasión, porque yo era un estorbo en tus nuevos planes. Medité sobre muchas cosas. Al volver, te encontraste un gato más pensativo que otras veces, más apagado. Un gato que se empezaba a plantear estas ideas. No te recibí como habitualmente, con alegría y agradecimiento por tu vuelta. Te debiste sentir algo culpable de tu abandono. Y así conseguí yo mi rascador nuevo, último modelo. El rascador desde el que

Cultura de los Cuidados te estoy odiando ahora mismo. Lo elegiste, no porque me fuera a gustar más, sino para que te pegara con el salón y tus amigos te envidiaran. Estás tan segura de tu poder y de mi ceguera, que ya no recuerdas que tengo oídos. Cuánto te odio. Me has despojado de mi naturaleza. Has decidido qué placeres debo conocer y cuáles no. Has decidido lo que debo hacer en cada momento de mi vida. Has disfrazado tu dominio de amor. Y yo me lo he creído. Trato de no sentirme idiota por tu engaño. Haces lo mismo con tu pareja. Pero él no quiere ver, al menos aún. No te sorprendas si cualquier día no me encuentras por la casa. No habrá caricias, comida gourmet, juguetes ni rascadores que me hagan quedarme contigo. Ni el miedo a un fu-

turo incierto. Ni el miedo a la soledad. Pasar el día odiándote sólo me envenena, sin producir nada constructivo, sin hacerme feliz. Ahora que he decidido que quiero ser libre, nada podrá frenarme. Y no creas que me siento un desagradecido. Tus atenciones sólo han sido un arma de manipulación. Y eso no es amor de ningún tipo, no al menos para mí. Buscaré un amor que suponga una simbiosis sana, un potenciarse el uno al otro. Un amor que acepte mi naturaleza y me permita aceptar la suya. Un amor que me ayude a mejorar, sin manipularme, pensando en nuestro bien común y no sólo en sus propios beneficios. No como rey y vasallo, sino como compañeros de vida. Y no voy a perder ni un minuto más. Hoy voy a comenzar con mi propio plan.

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Historia San Camilo de Léllis: Caridad y bondad en la prestación del cuidado St. Camillus of Léllis: Charity and Kindness in the Provision of care São Camilo de Léllis: Caridade e bondade na prestação do cuidado

Fernando Porto1, Mercedes Neto2, Tiago Ferreira da Silva3, Keythluci Faria Trigueiro4, Pedro Ruiz Nassar5, Hugo Alberto Neves6 1 Pós-Doutor em Enfermagem. Bacharel em História. Professor Associado da Escola de Enfermagem Alfredo Pinto (EEAP/UNIRIO). Presidente da Academia Brasileira em História da Enfermagem (ABRADHENF). Líder do grupo de pesquisa LACUIDEN.

Doutora em Biociências. Professora Adjunta da Universidade do Estado do Rio de Janeiro (UERJ). Vice-líder do LACUIDEN/UNIRIO.

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Enfermeiro. Pós graduado em clínica médico-cirúrgica.

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Acadêmica de Enfermagem da Escola de Enfermagem Alfredo Pinto (EEAP/UNIRIO). Bolsista de Iniciação Científica (CNPq/PIBIC). Membro do Laboratório de História do Cuidado e Imagem em Enfermagem (LACUIDEN).

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Mestre em Enfermagem. Serviço de educação permanente do Instituto de Cardiologia Aloysio de Castro (IECAC/RJ). Professor da Universidade Veiga de Almeida (UVA). Membro do LACUIDE/UNIRIO.;

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Enfermeiro. Residente de oncologia do Instituto Nacional do Câncer (INCA/RJ). Membro do LACUIDEN/UNIRIO.

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Cómo citar este artículo en edición digital: Porto, F., Neto, M., Ferreira da Silva, T., Faria Trigueiro, K., Nassar, P., Alberto Neves, H. (2017). San Camilo de Léllis: Caridad y bondad en la prestación del cuidado. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.05 Correspondencia: Escola de Enfermagem Alfredo Pinto - Universidade Federal do Estado do Rio de Janeiro. Av. Pasteur, 296 - Urca - Cep 22290-240 (Brasil) Correo electrónico: [email protected] Recibido: 07/05/2016; Aceptado: 11/11/2016

ABSTRACT The object of this study is the pictorial representation of the care provided by Camilo de Léllis, which has as objective: to present the life trajectory of Camillus de Lellis; to show 32

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the care provided by Camilo de Léllis, through the pictorial representation of Pierre Hubert Subleyras (1745) and comment the trajectory of caring given by him, as a contribution to the construction of the knowledge of the history of nursing. Method: steps followed for the investigation were the search of the literature of the articulated pictorial representation adhesion proposal. This entailed, in summary, a presentation of a biography of Camilo de Léllis and the decoding of the screen attributes examined. The result showed a care of the soul, beyond the physical body, in healing of illnesses with standards and systematization in the 18th century. Keywords: History of care, image, nursing.

Cultura de los Cuidados RESUMEN El objeto de estudio es la representación pictórica de los cuidados prestados por Camilo de Lelis, teniendo como objetivo: presentar la trayectoria de vida de Camillus de Lellis; mostrar los cuidados realizados por Camilo de Léllis, por medio de la representación pictórica del Pierre Hubert Subleyras (1745) y comentar su trayectoria de los cuidados como contribución a la construcción del conocimiento de la historia de la enfermería. Método: los pasos seguidos para la investigación se ciñeron a la búsqueda de la literatura de la propuesta de adhesión articulada representación pictórica propuesta. Esto exigió, en resumen, la presentación de la biografía de Camilo de Léllis y la descodificación de los atributos de pantalla examinados. El resultado mostró el cuidado, además del cuerpo físico, sino el alma, la curación de enfermedades con estándares y sistematización en el siglo XVIII. Palabras clave: Historia del cuidado, imagen, enfermería. RESUMO O objeto do estudo é a representação pictórica do cuidado prestado por Camilo de Léllis, tendo por objetivo: apresentar a trajetória de vida de Camilo de Lellis; mostrar os cuidados prestados por Camilo de Léllis, por meio da representação pictórica de Pierre Hubert Subleyras (1745) e comentar a trajetória dos cuidados por ele prestada, como contribuição para a construção do conhecimento da História da Enfermagem. Método: Os passos seguidos para atendimento da investigação foram à busca de literatura de aderência articulada à representação pictórica proposta. Isto implicou, em síntese, na apresentação da biografia de Camilo de Léllis e a decodificação dos atributos em tela

analisada. O resultado evidenciou o cuidado, para além do corpo físico, mas da alma, na cura das enfermidades com normas e sistematização no século XVIII. Descritores: História do Cuidado,imagem, enfermagem.

Introdução Ao se pensar em Enfermagem, no senso comum, se tem em mente a imagem central feminina, pois o cuidar é atribuído como tarefa dela (enfermeira, mãe, professora, assistente social), sendo tarefa de o masculino o tratar/ curar, (médico, pai, provedor) (Bandeira e Oliveira, 1998). Isto ocorre, segundo a explicação de Colliére (2001), na obra “Soigner… le premier art de la vie”, a respeito do cuidar, entendido como arte. Ela atribuiu à origem dos conhecimentos e sua matriz cultural inserida na textura da vida, apesar das dificuldades para se ensiná-lo, uma vez que há distância entre a ressonância e a razão, pois ele se encontra na poesia, na canção, na música, em diversos momentos que, se permite perceber as vibrações da vida (emoção, alegria, sofrimento, solidão, dor, esmagamento, silêncio...). Nesta perspectiva, ele tem por finalidade garantir a satisfação das necessidades indispensáveis à vida, pela prática exercida, majoritariamente, feminina em torno da fertilidade, manutenção e desenvolvimento do ser humano no sentido de recuar da morte (Colliére, 1989). Neste sentido, a visão adotada na sociedade do cuidado se cristaliza na figura do feminino. Por outro lado, isto pode se tornar equivoco, pois, tanto as mulheres, como os homens prestaram/prestam cuidados, se diferenciando pelos caminhos trilhados no processo do cuidar do ser humano. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Em tempos atuais, o discurso de gênero vem aos poucos, reclamando o seu espaço. Isto tem por efeito a defesa a favor da inclusão, o que justifica se repensar a historiográfica da Enfermagem. Com efeito, não se pode negar ou se quer reduzir a participação do masculino, como, por exemplo, se pode citar: João de Deus, Francisco de Assis, Camilo de Léllis. Eles foram pessoas e depois santificados pela religião católica, em virtude da deferência que prestavam ao ser humano, em especial, pelos cuidados prestados aos necessitados e enfermos, o que conduzem as datas festivas no calendário católico. Por outro lado, alguns autores vêm ao longo dos tempos, se debruçando sobre a trajetória do cuidado e a identificação de personagens masculinos é evidenciada, mas a jornada é longa, sendo instigante saber mais, pois as releituras de épocas contribuem para a construção do conhecimento na História da Enfermagem e por consequência do cuidado. Retornando aos exemplos masculinos, pode-se delimitar em São Francisco de Assis, quando no século XVIII, fundou a Ordem dos Frades Franciscanos e provocou a renovação no espírito cristão, ao dedicar-se aos pobres e humildes, em especial aos leprosos, dedicando-se aos cuidados, seja do corpo ou da alma (Alves, Moreira e Silva Junior, 2005). Em outras palavras, ele contribuiu para a profissão como exemplo de atenção e cuidado direcionado ao ser humano, transcendendo a assistência ao corpo debilitado, indo para além das palavras corpo, mente e espírito na representação. Ele mostrou a necessidade do respeito ao próximo, com uma das formas de vida do nosso planeta. Seu carisma pode ser entendido como, por exemplo, esforço, ao deixar contribuição no processo de construção da profissão nos cenários hospitalares asilos e escolas ao levar seu nome como forma de divulgação 34

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dos princípios e propósitos franciscanos, o que chegou como referência aos dias atuais (Alves, Moreira e Silva Junior, 2005). Outro exemplo que se pode citar trata-se de São João de Deus, que teve sua importância no cuidado de enfermos, zelando pelas crianças abandonadas e pessoas com retardo mental, e, que, para tanto, construiu hospital destinado a eles até a possibilidade de adoção por alguma família (Pacheco, 2012). João de Deus foi um dos precursores das preocupações com a humanidade, ao zelar pelo ser humano nos hospitais dois séculos antes dessa ideia humanística transitar como no século XVIII na França e Inglaterra (Cristo Neto e Fulgêncio, 2005). Com isso, ele se transformou em “padroeiro dos hospitais e dos doentes (1886) e dos próprios enfermeiros (1930)” (Sterpellone, 1998). Nesta linha de pensamento, se pode citar São Camilo de Léllis. Este, por volta de 1579, se dedicou aos cuidados aos doentes com visão a frente de sua época, pois observou e interviu na higiene, alimentação de pessoas que necessitavam de atenção, tendo por resultado o cuidado, no entendimento de que corpo e a alma necessitavam de cura. Este olhar de corpo e alma de São Camilo de Léllis chama a atenção, pois se trata de concepção revestida da mística do cuidado, dando origem ao interesse em trazer à tona a figura masculina como sujeito-objeto de estudo, como contribuição para a História da Enfermagem e, consequentemente, do Cuidado. Para tanto, se tem por objeto de estudo a trajetória dos cuidados prestados por Camilo de Léllis, tendo por objetivos: apresentar a trajetória de vida de Camilo de Lellis; mostrar os cuidados prestados por Camilo de Léllis, por meio da na representação pictórica de Pierre Hubert Subleyras (1745) e comentar a trajetória dos cuidados por ele prestada, como con-

Cultura de los Cuidados tribuição para a construção do conhecimento da História da Enfermagem. A justificativa para o investimento intelectual proposto deve-se pela inquietação, como enfermeiro, em se desconhecer seus antecessores masculinos, mesmo diante dos clássicos, como, por exemplo, o livro de Walesca Paixão (1987), que, apesar de, citar nomes masculinos, oferece baixo relevo a eles. METODOLOGIA Para a metodologia do estudo, se optou pela perspectiva da História Cultural, visando o cumprimento dos objetivos pela iconografia articulado a outros documentos e literatura pertinente ao espaço, tempo, e lugar de produção sem ignorar o contexto (André, 2009). Nesta perspectiva, a proposta do uso de documento imagético na pesquisa trata-se de desafio para o pesquisador no momento que, a partir do recorte do objeto em uma determinada dimensão micro, se procura promover exame dos processos nos quais ele se insere. Isto posto, o método permite ao pesquisador construir, a partir de um “outro” ponto de observação, uma trama narrativa diferenciada, impondo-se nas suas condições de criação realizado no processo de generalização analítico teórico, o que permite reflexões sobre uma problemática mais ampla que o próprio objeto (Bonato, 2011). Desta forma, para se apresentar a trajetória de vida de Camilo de Léllis se foi em busca de literatura de aderência. Para se mostrar os cuidados prestados por Camilo de Léllis, depois decodificar a representação pictórica sobre o cuidado, e, por fim, se comentar a trajetória dos cuidados por ele, como contribuição para a construção do conhecimento da História da Enfermagem, ele foi conduzido por meio dos resultados obtidos.

DESARROLLO DEL TEMA: CAMILO DE LÉLLIS Escritor curioso e com espírito de observação, Cicatelli (1993), na abordagem histórica relata que, em 25 de maio de 1550, em Buquiânico, lugarejo da província de Abruzzo, na Itália, nasceu Camilo de Léllis. Sua infância foi marcada pelos ensinamentos religiosos e caridosos vindos de sua mãe, porém, aos doze anos, viciado em jogo, não nutre interesse pela escola, pois mal sabia ler e escrever (Bautista, 1995). Aos 17 anos, seu pai o levava consigo a guerra contra os turcos. Pai e filho não foram muito longe, ambos caíram doentes. O pai morreu e o filho ficou sozinho no mundo. Com se não bastasse encontrar só, era acometido por ferida na perna esquerda e úlcera na direita. Nesta circunstância, seguiu Camilo de Léllis para Roma e no hospital de São Tiago dos Incuráveis encontrou-se com o mundo da doença. Como não possuía dinheiro, prestou serviço de servente em contrapartida dos cuidados prestados, podendo ao mesmo tempo se cuidar e ganhar/pagar algum dinheiro. No entanto, foi demitido por ter sido pego em flagrante com baralho debaixo do travesseiro, sendo considerado à época inepto para a tarefa de proposta (Sommaruga, 1982). Então, sem dinheiro e com debilidade começou a pedir esmolas em uma festa de Santo André. Ao estender a mão aos transeuntes na porta da igreja, quando Di Nicastro se compadeceu com a situação do rapaz e lhe faz a proposta de, ao invés de mendigar, se ele não gostaria de trabalhar com os padres capuchinhos. Sua convivência com estes religiosos de vida simples, passaram a denomina-lo de Frei Cristóvão, pela humilde da aparência transmitida, mas a ferida no peito do seu pé direito reabriu, o que o levou, novamente, para o Hospital de São Tiago. Após algum tempo de sua 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados permanência naquela instituição e sanado a cicatrização da ferida, ele retornou ao convento dos Capuchinhos, mas por motivos adversos a ferida reabriu, forçando-o a se afastar dos padres (Cicatelli, 1993). Mediante ao último fato exposto, Léllis se determina a servir aos doentes e por volta de 1579, se refugiou pela terceira vez no mesmo hospital. À época, contava com 29 anos de idade, sem profissão e ignorante. Nesta condição, ele poderia ter sucumbido à própria sorte e ficado como os demais doentes do hospital sozinho e no anonimato. No entanto, os administradores do hospital notaram e recordaram de suas internações, quando identificaram os préstimos para com os outros de sua bondade e decisão no que fazia, despertando-lhes interesse, conduzindo-o a vaga de provedor - responsável pela direção ordinária e imediata do hospital (Sommaruga, 1982). Camilo de Léllis se viu diante de importante desafio mediante a realidade. A situação era deplorável, não havia trabalho, os latifundiários acabavam abandonando as terras e com fome e desnutridos, procuravam amparo nos hospitais, fora as epidemias de tifo e peste bubônica presentes naquela época. Os hospitais ficavam superlotados e sem local para todos que o procuravam, agravado pelo problema da assistência direta aos enfermos. Em São Tiago, os enfermeiros eram raros para atenderem em quantidade aproximada de sessenta ou setenta pacientes. Em meio ao descaso, Camilo viu que havia pessoas voluntárias que demandavam seu tempo ao hospital, para dar de comer aos doentes, quando teve a ideia de pedir a colaboração destas pessoas (Sommaruga, 1982). Desta forma, ele conseguiu formar um grupo de cinco pessoas, tendo por finalidade a realização das tarefas dos cuidados aos doentes. O grupo formado por ele, além de cuidar 36

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dos doentes do hospital, também, passou a se reunir em um dos quartos da instituição para orarem, quando os administradores souberam proibiram, preocupados com possível empoderamento dos voluntários, liderado por Léllis, a direção do hospital proibiu as reuniões, mas Camilo resistiu e protestou a proibição, até que em determinado dia, diante do crucifixo, onde orava, adormeceu e teve o sonho, no qual o próprio Cristo despregava-se da cruz e lhe dizia-lhe: “Coragem, ó pusilânime! Vá em frente, a obra não e tua, mas minha!”. No místico do acontecimento, Léllis se reanimou e deu continuidade a sua, pois o que se encontrava em jogo era a vida dos doentes, sendo, pelos relatos encontrados, o ápice para a decisão final de não se separar dos cuidados em prol dos doentes, na mística de cuidar da alma e do corpo. Mediante ao sonho decidiu se tornar sacerdote agregar a sua liderança autoridade e liberdade em suas ações em prol dos doentes e de seu grupo, quando passou a frequentar a escola com este propósito e em 26 de maio de 1583 foi ordenado sacerdote (Sommaruga, 1982). Em 1591, o Papa Gregório, através da Bula Illiusqui pro Gregis transformou o que era Congregação para Ordem de Clérigos Regulares Ministros dos Enfermos e em dezembro do mesmo ano instituiu Camilo, como primeiro superior geral da ordem fundada (Vezzani, 1996). Cabe destacar que Camilo ao fundar a Congregação passou a ser Ordem, ele careceu de dimensionar o alcance do feito, no sentido de dedicar-se aos doentes e servi-los com toda diligência (Vendrame, 2001), pois era convicto de que para ser um bom enfermeiro, era necessário do espírito de fé e de como se realizava o trabalho para com o doente (Fernandes, Pessini e Sá, 2010). Camilo de Léllis morreu em 1614, e após seu falecimento muitos o proclamaram como santo devido sua dedicação aos doentes e aos

Cultura de los Cuidados pobres. A beatificação ocorreu no ano de 1742 e a canonização em 1746. Em 1886, o Papa Leão XIII proclamou-o patrono de todos os hospitais e dos doentes. Em 1914, em Roma, foi proclamado benfeitor da humanidade e, por fim, o Papa Pio X propôs aos enfermeiros, como modelo de caridade e exemplo a ser seguido por suas inúmeras contribuições para a profissão (Sommaruga, 1982). A vocação de Camilo e de seu grupo era de precisão, organização e espiritualmente motivado ao cuidado ao corporal e espiritualidade dos doentes, por meio da caridade e dedicação, que carecia em muitos Hospitais à época, fossem em Roma ou em qualquer outro lugar. Este caminho seguido por Camilo e os seus seguidores, portanto, não poderia deixar de levar o grupo para outros Hospitais da cidade e lugares com esta finalidade, onde existissem sofrimento físico e moral. Graças à força de seu bom exemplo e à crescente fama de suas virtudes, porém, conseguiu dar início a associação, com o objetivo de prestar assistência aos doentes. Religiosos e noviços de várias ordens religiosas, sobretudo, da Companhia de Jesus, vinham amiúde, exercitar-se com ele nestas obras de caridade. Os padres jesuítas encaminhavam-lhe jovens, nos quais disseminaram vocação para este serviço. Léllis os acolhia de braços abertos e os estimulava com inesgotável zelo em suas atividades no Hospital do Espírito Santo, próximo ao Vaticano (Arautos do Evangelho, 2014). Hoje em dia, alguns elementos da espiritualidade camiliana são elencados, a saber: o amor ao doente - o pobre e o doente são o coração e as pupilas dos olhos de Deus; cuidar com sensibilidade feminina - prega aos seus seguidores que devem amar o paciente como a mãe que cuida do seu único filho doente;

cuidado holístico e acolhida incondicional - respeita mais as necessidades humanas do que as exigidas pela igreja; liturgia ao pé do leito - no evangelho, João fala do sacramento de Jesus, lavando os pés dos seus discípulos na quinta-feira santa; escola de caridade - os candidatos à santidade para a igreja católica são avaliados por sua beneficência e não por suas experiências místicas; o cuidar é uma obra de arte, que une ética e estética, amor e beleza. Nesta perspectiva, a espiritualidade de Camilo, para quem o principal rito no cuidado do enfermo é estar ao pé de seu leito, sentir e sofrer com a presença de mercenários, cuidando dos doentes nos hospitais e admirar e comparar a música sacra tocada na igreja, como um concerto musical, ao prestar o cuidado para o enfermo (Pessini, 2004). O carisma foi outra marca deixada por Léllis como expressão, tipicamente, cristã, usada na bíblia por dezessete vezes, sendo dezesseis pelos Apóstolos de São Paulo e São Pedro. Este foi definido como um dom especial, que leva uma pessoa a fundar um instituto religioso (Ordem ou Congregação). O carisma camiliano é uma vocação, ou seja, a tendência de socorrer aos enfermos com sua própria vida, com obras de misericórdia espirituais e corporais, exercendo a caridade para com o doente (Vendrame, 2004). O carisma e a espiritualidade de Camilo de Léllis podem ser representados na síntese da seguinte frase “Mais coração nessas mãos, irmãos”. As palavras desta frase significavam para Camilo a sensibilidade e a ternura no trabalho, e nas ações para com os doentes (Bautista, 1995). REPRESENTAÇÃO DO CUIDADO CAMILIANO Após apresentar à trajetória de vida de Camilo de Lellis e alguns aspectos de sua forma 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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de pensar à vida e o cuidado, passa-se para nado e amplo com janelas, possuindo colunas se mostrar os cuidados prestados por ele, por de sustentação e escadas, o que sugere que, o meio de tela pintada, como ilusão do real, que local tivesse outro pavimento. Há, também, pode se aproximar pela verossimilhança, mas alguns objetos como: vaso na parede, tecido que não será de fato o ocorreu, mas sim uma acima do teto como se fosse uma cortina e um das possibilidades de representação de um de cesto com roupas e utensílios de cerâmica nas seus feitos, para se comentar a trajetória dos mãos de uma pessoa retratada no quadro. cuidados por ele prestada, como contribuição O local encontra-se inundado por água, para a construção do conhecimento da Histócomo se pode ver, alguns dos personagens leria da Enfermagem. vantam suas roupas até o joelho a fim de evitar Neste sentido, se traz à baila a pintura de que elas ficassem molhadas. A representação Pierre Hubert Subleyras (1745), com o título pictórica deixa passar, por verossimilhança, “São Camilo de Léllis assistindo aos doentes aspectos relatos sobre as condições que se enna enchente do Rio Tibre em 1598” (Figura contravam os hospitais à época. n.1). Ele retrata o episódio significativo da A obra apresenta a representação de catornoite de Natal de 1598: uma aluvião1, entre os ze pessoas. Destas, treze aparentam ser do sexo mais fortes e desastrosos, flagelou Roma, de masculino, porém, um personagem que se vesmodo particular a região do Hospital Santo te de túnica azul e que se encontra no canto Spírito. Sobre uma das colunas de tijolos do esquerdo da obra possui traços femininos. trosos, flagelou Roma, de modo particular a regiãoda do via Hospital Santo Spírito. Sobre uma A S. obra apresenta a Em representação Destas, retratadas, treze aparentam ser do sexo pórtico externo, no começo Borgo relação de àscatorze vestespessoas. das pessoas Spirito existe a lápide que da indica omasculino, nível emporém, olunas de tijolos do pórtico externo, no começo via Borgo S. Spirito existe um a lápide que três encontram-se vestidas de azul túnica personagem que se veste de túnica e queem se tom encontra no canto que às águas lamacentas do rio chegaram. escuro, possivelmente, preta, ostentam o síma o nível em que às águas lamacentas do rio chegaram. esquerdo da obra possui traços femininos.

bolo da cruz em tom vermelho. Dos três citados, um encontra-se no lado esquerdo e o ouescuro, possivelmente, preta, ostentam o símbolo da cruz em tom vermelho. Dos três citados, um tro a direita na tela e ao centro a representação encontra-se no lado esquerdo e o outro tela eseaoencontra centro a representação de Camilo dea direita Léllis,naque com um de Camilo de envolto seu como Léllis, que se encontratecido com um branco tecido branco envolto seuquadril, quadril, como umauma espécie de avental espécie de avental ou toalha (Figura 2). Em relação às vestes das pessoas retratadas, três encontram-se vestidas de túnica em tom

ou toalha (Figura 2).

Figura 1. São Camilo de Léllis assistindo aos doentes na enchente do Rio Tibre em 1598. Figura 1. São Camilo de Léllis assistindo doentes na Pintor: Pierre Hubert Subleyrasaos (1745).

enchente do Rio Tibre em 1598. Tal fato teve repercussão, mesmo de mais de cem anos, Pierre Subleyras Pintor: que Pierre Hubertdepois Subleyras (1745).

9-1749) tenha retratado este dramático evento em uma grande tela, hoje conservada no

Tal fato teve repercussão, que mesmo depois de mais de cem anos, Pierre Subleyras o com janelas, possuindo colunas de sustentação e escadas, o que sugere que, o local tivesse (1699-1749) tenha retratado este dramático Figura 2. Desdobramento em fragmento figura n.1 pavimento. Há, também, como: vaso na parede, tecido acima do teto como Figura 2. Desdobramento em fragmento da figura n.1da como referência evento emalguns umaobjetos grande tela, hoje conservada como referência noe Museu PaláciodeBraschi. sse uma cortina um cesto de comRoma roupasdo e utensílios cerâmicaNesta nas mãos de uma pessoa Alguns dos representados cena se encontram com parte do corpo desnudo. O primeiro 1 Inundação,naenxurrada. tela, observa-se a paisagem de um local ilumi-

u de Roma do Palácio Braschi. Nesta tela, observa-se a paisagem de um local iluminado e

ada no quadro.

se refere à própria representação de Léllis, transportando em seus ombros um doente, o segundo O 38 local encontra-se inundado por água, como se podeXXI ver, alguns 1er Cuatrimestre 2017 • Año N.° dos 47personagens no atendimento ao doente, próximo ao eixo central da tela do lado direito e o terceiro se refere a tam suas roupas até o joelho a fim de evitar que elas ficassem molhadas. A representação

Cultura de los Cuidados do se identificou características dos hospitais à época, que possuíam grande número de pessoas. Elas foram retratadas ao aparentam ser de classe social mais baixa, inferência segundo os relatos ditos anteriormente e o aspecto em relação à religiosidade, a caridade e o cuidar representado, deixa transparecer atenção para os necessitados, independentemente das suas condições sociais, mesmo considerando se tratar de momento adverso.

Alguns dos representados na cena se encontram com parte do corpo desnudo. O primeiro se refere à própria representação de Léllis, transportando em seus ombros um doente, o segundo no atendimento ao doente, próximo ao eixo central da tela do lado direito e o terceiro se refere a um personagem que se encontra com um cesto de roupas e cerâmicas. Isto, possivelmente, implica o esforço físico, direto e indiretamente, no atendimento, o que conduz ao trabalho braçal, podendo representar a necessidade de movimentação rápida que, a roupa no comprimento e volume em condição natural do uso, atrapalhava a movimentação, logo retirada total ou parcial de volume em condição natural do uso, atrapalhava a movimentação, logo retirada total ou parcial do corpo de parte doparte corpo se justificaria (Figurase 3). justificaria (Figura 3).

Figura 4. Desdobramento em fragmento da figura n.1 como referência

Alguns aspectos queFigura chamaram a atenção seem referem ao biológico. Este é possível 4. Desdobramento fragmento da figura n.1 como inferir nos representados, ajudando outros que se referência mostravam debilitadas, tentando retirá-las

local alagado. Outro aspecto foi o social, quando se identificou características dos hospitai

Mediante a representação pictórica, que

época, que possuíam grande de pessoas. Elas foram retratadas ao aparentam ser de cla tevenúmero a intencionalidade, provável, de sacralizar

Figura 3. Desdobramento em fragmento da figura n.1 como referência

os feitos de Camilo Léllis pela cena eescolhimaisn.1baixa, inferência segundo os relatosdeditos anteriormente o aspecto em relaçã Figura 3. Desdobramento em fragmentosocial da figura Os doentes representados, pelo que se pode ver no campo visual, deixam transparecer

da pelo artista. A imagem de fato, transmite, e o cuidar representado, deixa transparecer atenção para os necessitad sensibilidade e a mensagem de projeção de centralizado nos ombros de Léllis, com possível bandagem na cabeça (Figura 4). independentemente das ajuda suas condições sociais, considerado mesmo considerando se tratar de mome ao próximo, por Camilo Os doentes representados, pelo que se aos doentes os seus verdadeiros professores do adverso. pode ver no campo visual, deixam transparecuidado (Sommaruga, 1982). cer serem três, sendo dois posicionados nas a representação pictórica, que teve a intencionalidade, provável, de sacrali Mediante Ademais, ele acreditava não existir homem laterais, envolto em tecidos de cor clara e um os feitos de Camilo de que Léllisnão pelativesse cena escolhida pelo artista. A imagem de fato, transm alma unida ao corpo, pois secentralizado nos ombros de Léllis, com possíguia de o entendimento Vicente de Pau- por Camilo sensibilidade e a mensagem projeção de ajudadeaoSão próximo, considerado vel bandagem na cabeça (Figura 4). lo, no sentido de redação aproximada de que, doentes os seus verdadeiros professores do cuidado (Sommaruga, 1982). Alguns aspectos que chamaram a atenção para fazer o bem às almas era necessário se se referem ao biológico. Este é possível seAdemais, infe- ele acreditava não existir homem que não tivesse alma unida ao corpo, p doar ao corpo que padecia (Brandão, 1987). rir nos representados, ajudando outros que se por Camilo de deLellis sobre as de que, p seguia o entendimento de SãoEscritas Vicente de Paulo, no sentido redação aproximada mostravam debilitadas, tentando retirá-las do Regras da Companhia dos Servos dos Doeno bem às almas era necessário se doar ao corpo que padecia (Brandão, 1987). local alagado. Outro aspecto foi ofazer social, quantes podem representar o que o artista tentou como referência serem três, sendo dois posicionados nas laterais, envolto em tecidos de cor clara e aum religiosidade, caridade

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Cultura de los Cuidados transmitir em sua obra, que pode ser dita nas próprias palavras do religioso: Em primeiro lugar, cada qual peça a Deus que lhe dê um afeto materno para com o próximo, a fim de podermos servi-lo com todo o amor, tanto na alma quanto no corpo, pois, com a graça de Deus, desejamos servir todos os doentes com o mesmo carinho que uma extremosa mãe dedica ao seu filho doente (Vanti, 1988: 8-14 e 97-98). Durante 40 anos, a casa de Camilo foi o hospital e a escola que formou por seus ensinamentos, milhares de jovens seguidores para prática da caridade. Ele contribuiu com a administração hospitalar, escrevendo as Regras que os nossos irmãos deverão observar no Hospital Mor de Milão, a fim de servir com perfeição aos pobres doentes, um verdadeiro manual, quando usou, intuitivamente, para escrevê-lo com palavras simples, mas com entusiasmo, sabedoria e caridade, o que pode ser considerado o código de cuidado aos doentes, implantado em vários hospitais da Itália (Vanti, 1988). CAMILO DE LÉLLIS E ENFERMAGEM Como se pode identificar no escrito até aqui, é possível se verificar vestígios de cuidados adotados séculos depois, para alguns sistematizados, para outros nem tanto, são se inferem terem sido a base das atitudes tomadas por Florence Nightingale nos hospitais, na Guerra da Criméia e depois como ensinamento da Enfermagem na escola que fundou. Ademais, pode-se citar que foi ele que instituiu o trabalho noturno, conhecido na atualidade como plantão noturno, dando ordens para que em cada turno se deixasse um relatório escrito do que tinha acontecido, para 40

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que fosse entregue ao seu chefe na unidade, sendo o primeiro a estabelecer uma ficha detalhada de internação do doente; exigiu uma cama para cada doente; preocupado com a falta de higiene e sua prejudicial condição para o doente, mandou abrir amplas janelas nos hospitais para que sol e oxigênio fossem acessados pelos doentes, determinando que as roupas deles fossem trocadas com frequência; considerando a individualidade de cada doente, recomendou que eles fossem separados por doença, em espaços distintos, bem como para daqueles com problemas doentes mentais tivessem espaço apropriado, conduzindo a eliminação da tortura terapêutica, como forma de cuidado (Bautista, 1995, p.194-195). Tais atitudes possuem significados e importância para o cuidado prestado aos enfermos que podem ser traduzidas pelas seguintes palavras: É realmente o amor buscando a técnica para melhor servir. (...) Camilo insiste na importância das anotações de enfermagem e de passagem do plantão. (...) Os horários da medicação deviam ser diligentemente anotados. (...) Aos mais graves deviam ser dispensados cuidados intensivos. Em suas Regras, descreve minuciosamente as atribuições do pessoal, introduz a educação em serviço, insiste na supervisão, exige serviço de assistência social, indica métodos de limpeza hospitalar, prescreve o uso de avental branco, dita normas para controle de estoque. (...) A regra ensina a tratar os enfermos e confortá-los. Dava instruções práticas aos religiosos, ensinando-os a preparar leitos, arranjar travesseiros e lençóis, a mudar roupa e transportar os doentes. (...) Os doentes haviam de ter o rosto, as mãos e os pés sempre limpos. Não bastava a técnica. Desejava saber se faziam com amor, com todo o carinho e dedicação. Tudo inspirado pelo

Cultura de los Cuidados respeito e amor devido à pessoa humana enferma, na qual ele via e servia o próprio Cristo. (Brandão, 1987:71) O cuidado domiciliar foi outra atividade que Camilo de Léllis apreciava, devido ao seu completo anonimato. Esta pela liberdade de prestar serviços aos doentes e moribundos, nos cortiços e casebres da periferia de Roma, onde os peregrinos estavam alojados. Para tanto, ele preconiza o maior cuidado em favor dos agonizantes, recomendando o cuidado com o enfermo ao pé do leito até o último momento de sua vida com amor e compaixão (Sommaruga, 1982). Para Camilo, quando um doente se encontrava em agonia, quem estivesse cuidando teria de ficar sempre em oração à sua cabeceira, sugerindo-lhe mensagens espirituais. Caso a agonia se prolongasse deveria haver rodízio por hora com o crucifixo, a água benta, o livro para a encomendação da alma e a vela acesa. Com o passamento do doente deveria ser feito o funeral, com o padre acompanhado por três irmãos, um dos quais deveria carregar a cruz e as outras duas velas acesas (Vanti, 1988). Desta forma, os camilianos foram e são conhecidos como os padres da boa morte ao longo da história. Isto se deve a preocupação constante de Camilo em humanizar o cuidado, para com o enfermo. Para eles, o que se tem pertence aos pobres, e só, o que se dá se torna deles. Os hospitais era o caminho para se cumprir suas missões, pois embora, mesmo sem eliminar a dor, acompanha-o e ter certos gestos humanos, era por eles, entendido como zelo de fazer com que o outro tivesse a oportunidade de não se sentir só (Bautista, 1995). A obra idealizada e concretizada por Camilo de Léllis valoriza, respeita, dignifica e humaniza o cuidado para com o doente, bem

como reformulou as instituições hospitalares da época e comprova sua relevância para a trajetória da Enfermagem. Nesta perspectiva, a articulação dos ditos por Camilo se aproximam com alguns preceitos do cuidado, que, a Enfermagem em tempos de tecnologia e profissionalismo segue em reflexão. Para tanto, ele é considerado pai, modelo para os enfermeiros, bem como um dos notáveis precursores para da profissão, devido ao seu trabalho realizado diante dos enfermos, tanto quanto Florence Nightingale (Oguisso, 2005). CONSIDERAÇÕES FINAIS A vida e obra de Camilo de Lellis retratam-se devido aos seus ideais, como patrono dos enfermos e modelo de cuidado para os enfermeiros. Seus preceitos e práticas, ainda hoje, conduziram e conduzem o exercício da Enfermagem, guardando as devidas proporções, por um mundo capitalizado e globalizado, profissionalizante sem o juramento de votos religiosos, a leitura deste estudo possibilita reflexão de ser o cuidado é ferramenta poderosa de capitalização, manipulação e reconfiguração da vida humana de uns para com os outros. Pensar nesta linha de pensamento é sugerir que, as Instituições de Ensino de Enfermagem, em especial, na disciplina de História da Enfermagem ou correlatas, possam inserir abordagem dos personagens masculinos, com a relevância que eles merecem, sem com isso desmerecer os créditos a percussora da Enfermagem, dita Moderna para o século XIX. No momento, cabe-se refletir: Seria a Enfermagem, moderna para o século XIX, tendo-se por baliza terminal na historiográfica da Idade Moderna a Revolução Francesa (século XVIII)? Como poderíamos denominar, de forma processual, a Enfermagem no século XX? 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Desta forma, acredita-se em investimento em estudos sobre os cuidados prestados no passado, se encontram no século XXI, visando à vigilância epistemológica do conhecimento científico adotados em nossos tempos, considerando a mística, a abordagem de gênero e o avanço da tecnologia do cuidado para quiçá responder aos questionamentos supramencionados.

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Cultura de los Cuidados

Una monografía de Manuel Martín Salazar sobre la tuberculosis (Cádiz, 1887) A monograph of Manuel Martín Salazar on tuberculosis (Cadiz, 1887) Uma monografia de Manuel Martín Salazar sobre a tuberculose (Cadiz, 1887) Francisco Herrera-Rodríguez Facultad de Enfermería y Fisioterapia (Universidad de Cádiz) Cómo citar este artículo en edición digital: Herrera-Rodríguez, F. (2017). Una monografía de Manuel Martín Salazar sobre la tuberculosis (Cádiz, 1887). Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.06 Correspondencia: Francisco Herrera-Rodríguez. Facultad de Enfermería y Fisioterapia. Avda. Ana de Viya, 52. 11009-Cádiz. Correo electrónico: [email protected] Recibido: 18/07/2016; Aceptado: 11/12/2016

the discovery of the tuberculosis bacillus by Robert Koch. Keywords: Tuberculosis, History of Tuberculosis, tuberculosis, Public Hygiene, nineteenth century, “Restoration”, Spain, Cadiz, Manuel Martín Salazar, Benito Alcina Rancé.

ABSTRACT In the present article we study the monograph on tuberculosis by Manuel Martín Salazar published in Cadiz in 1887. Besides the prologue which was written by Benito Alcina Rancé, the mentioned monograph presents specific sections on the etiology of tuberculosis infection, heredity, vaccination, disinfection, food and climate, as well as sections dedicated to social hygiene and tuberculosis in the army. This study of Martin Salazar has not received the attention it deserves, especially considering the high incidence of the disease in the Spain of the “Restoration” and that the preventive proposals were made considering

RESUMO Monografia deste artigo Manuel Martín Salazar sobre a tuberculose, publicado em Cadiz, em 1887, é estudado; além do prólogo de Benito Alcina Rancé, este trabalho apresenta secções específicas sobre a etiologia da infecção por tuberculose, a hereditariedade, a vacinação, desinfecção, comida e clima, bem como seções dedicadas à higiene social e tuberculose no exército. Esta obra de Martin Salazar não recebeu a atenção que merece, especialmente considerando a alta incidência da doença em Espanha da “Restauração” e propostas natureza preventiva são feitas tendo em conta a descoberta do bacilo tuberculose por Robert Koch. Palavras-chave: Tuberculose, história de tuberculose, a Higiene Pública, do século XIX, “Restauração”, Espanha, Cádiz, Manuel Martín Salazar, Benito Alcina Rancé. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados RESUMEN En este artículo se estudia la monografía de Manuel Martín Salazar sobre la tuberculosis, publicada en Cádiz, en 1887; además del prólogo de Benito Alcina Rancé, esta obra presenta apartados específicos sobre la etiología de la tuberculosis, el contagio, la herencia, la vacunación, la desinfección, la alimentación y el clima, así como epígrafes dedicados a la higiene social y a la tuberculosis en el ejército. Esta obra de Martín Salazar no ha recibido la atención que se merece, sobre todo teniendo en cuenta la alta incidencia de la enfermedad en la España de la Restauración y que las propuestas de carácter preventivo planteadas se hacen teniendo en cuenta el descubrimiento del bacilo de la tuberculosis por Robert Koch. Palabras clave: Tuberculosis, Historia de la Tuberculosis, Higiene Pública, siglo XIX, Restauración, España, Cádiz, Manuel Martín Salazar, Benito Alcina Rancé. A Francisco Salas Fernández (1952-2008), biógrafo de Manuel Martín Salazar . INTRODUCCIÓN Manuel Martín Salazar (1854-1936) pertenece a la misma Generación de Santiago Ramón y Cajal (1852-1934), con el que convivió en el seno de la Real Academia Nacional de Medicina. Más concretamente, y siguiendo a Laín, lo podemos adscribir a la Generación de 1880, junto a otros nombres notables de la medicina española como José Gómez Ocaña (1860-1919), Alejandro San Martín (18471908) o Jaume Ferran i Clúa (1851-1929). La gran virtud de estos y otros médicos de la época fue “la introducción en España de una investigación científica a la vez actual, original y exportable”, pero en muchas ocasiones sin otros recursos que su vocación personal, su talento y esfuerzo solitario. En esta Genera44

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ción se han incluido, entre otros, a figuras de otros campos como Marcelino Menéndez Pelayo (1856-1912) y Leonardo Torres Quevedo (1852-1936) (Laín Entralgo, 1998). No cabe duda de que Martín Salazar fue una figura notable de la medicina española en el primer tercio del siglo XX, destacó muy especialmente por sus conocimientos higienistas y la aplicación de los mismos a la Sanidad española, tanto en el seno del Ejército como posteriormente en la sociedad civil, ejerciendo los cargos de Inspector general de Sanidad exterior e Inspector general de Sanidad, precisamente en este último cargo tuvo que afrontar la difícil situación que provocó la crisis epidémica de 1918 (figura 1). No se trata en este artículo de consignar todos sus trabajos, muy numerosos, ya que dejó escritos en la prensa médica y publicó monografías, tratando temas como el tifus exantemático, la fiebre tifoidea, el tracoma, las epidemias, la sanidad en España, etc. (Salas Fernández, 1998). Una de sus preocupaciones constantes, como no podía ser de otra manera, fue la tuberculosis, y a esta cuestión vamos a dedicar las páginas que siguen, a través del estudio de una monografía que publicó en Cádiz, en 1887, que se ha tenido poco en cuenta hasta el momento en los estudios realizados sobre la citada enfermedad (Orozco Acuaviva, 1981a). Los objetivos que nos planteamos son los siguientes: 1º. Estudiar la monografía de Manuel Martín Salazar sobre la “higiene de la tisis”, publicada en el Cádiz de la Restauración y más concretamente en 1887. 2º. Relacionar esta monografía con los años que Martín Salazar tuvo destino en Cádiz en el seno del Ejército y su posible vinculación en esos años con el catedrático de Higiene de la Facultad de Medicina Benito Alcina Rancé.

onar esta monografía con los años que Martín Salazar tuvo destino en no del Ejército y su posible vinculación en esos años con el catedrático Cultura de los Cuidados la Facultad de Medicina Benito Alcina Rancé.

rar sus ideas3º.etiológicas preventivas las de otros de 1873autores comenzóque el primer curso de la carreComparar susy ideas etiológicascon y preién sobreventivas la tuberculosis, principalmente con algunosra miembros con las de otros autores que versaron en la Escuelade de la Medicina y Cirugía de Setuberculosis, principalmente villa, aunque posteriormente se trasladó a la a gaditanatambién de los sobre añoslaochenta. con algunos miembros de la escuela médica gaditana de los años ochenta.

Facultad de Medicina de Granada; en el curso 1876-77, Martín Salazar vivió la experiencia dramática de una epidemia de tifus exantemáque acabóDESDE con laSU vida de un íntimo amigo, APUNTE tico BIOGRÁFICO: NACIMIENTO HASTA LA DÉCADA DE LOS OCHENTA de varias Hijas de la Caridad, y del catedrático Manuel Salazar nace en don Montellano (Sevilla), octubre de 1854, año deMartín Clínica médica Basilio Sanz.enEn 1878 en el que se produjo el “Manifiesto de Manzanares”, de corte liberal, inaugurándose obtuvo el progresista” título de (1854-1856) licenciado(Tamames, en medicina así el llamado “bienio 1985); enyese mismo año apareció en escena una epidemia de cólera (Salas Fernández, 1998). La vida de cirugía e inmediatamente en 1879 ingresó en nuestro biografiado fue larga, falleció con 82 años, en el fatídico 1936 en que dio elGuerra Cuerpo comienzo la Civil.de Sanidad Militar, institución en la que realizó una importante laborenantes de ocuCon aproximadamente 15 años de edad ingresó el Instituto Provincial de Segunda Enseñanza de Sevilla; en responsabilidad esta localidad y en la par puestos de alta endelaOsuna ad- cursó el Bachillerato. En octubre de 1873 comenzó el primer curso de la carrera en la Escuela ministración sanitaria civil (Salas seFernández, de Medicina y Cirugía de Sevilla, aunque posteriormente trasladó a la Facultad de Medicina 1998). de Granada; en el curso 1876-77, Martín Salazar vivió la experiencia dramática de una epidemia de tifus exantemático que acabó con la vida de un íntimo esta etapa yde vida hemos consideamigo, de variasSobre Hijas de la Caridad, delsu catedrático de Clínica médica don Basilio Sanz. En 1878 obtuvo el título de licenciado en medicina y cirugía e inmediatamente rado necesario consultar su hoja de servicios en 1879 ingresó en el Cuerpo de Sanidad Militar, institución en la que realizó una 2),de que proporciona algunaeninforimportante(figura labor antes ocuparnos puestos de alta responsabilidad la administración sanitaria civil (Salas Fernández, 1998). mación de interés que lo vincula a Cádiz y más Sobre esta etapa de su vidaalhemos considerado necesario consultar concretamente Hospital Militar de esta ciu-su hoja de 1: Manuel Martín Salazar (1854-1936). Fuente: Sa-servicios (figura 2), que nos proporciona alguna información de interés que lo 1: Manuel Figura Martín Salazar (1854-1936). Fuente: Salas Fernández, 1998. dad.y más concretamente al Hospital Militar de esta ciudad. vincula a Cádiz las Fernández, 1998.

APUNTE BIOGRÁFICO: DESDE SU NACIMIENTO HASTA LA DÉCADA DE LOS OCHENTA Manuel Martín Salazar nace en Montellano (Sevilla), en octubre de 1854, año en el que se produjo el “Manifiesto de Manzanares”, de corFigura 2: Detalle de la Hoja de Servicio de Manuel Martín Salazar en el Cuerpo de Figura 2: Detalle de la Hoja de Servicio de Manuel Martín te liberal, inaugurándose así el llamado “bienioSanidad Militar. Fuente: Archivo General Militar de Segovia (AGMS). Salazar en el Cuerpo de Sanidad Militar. Fuente: Archivo progresista” (1854-1856) (Tamames, 1985); en En agosto de 1879 consta como “Oficial Médico Alumno”, pero ya en julio de 1880 figuraGeneral como “Médico por(AGMS). oposición”, puesto que desempañará durante Militar segundo de Segovia ese mismo año apareció en escena una epide-más de 13 años hasta que pasa a ocupar plaza de “Médico 1º por antigüedad” en mia de cólera (Salas Fernández, 1998). La vida1893 y en 1898 la de “Médico Mayor por antigüedad”. En noviembre de 1912 es ascendido al puesto de “Subinspector Médico de 2ª como clase de “Oficial Sanidad Militar por En agosto de 1879 consta de nuestro biografiado fue larga, falleció conantigüedad”. Como apuntamos en el título de este apartado no debemos extendernos Médico Alumno”, pero ya en julio de 1880 82 años, en el fatídico 1936 en que dio comienfigura como “Médico segundo por oposición”, zo la Guerra Civil. puesto que desempañará durante más de 13 Con aproximadamente 15 años de edad años hasta que pasa a ocupar plaza de “Méingresó en el Instituto Provincial de Segunda dico 1º por antigüedad” en 1893 y en 1898 la Enseñanza de Sevilla; en esta localidad y en de “Médico Mayor por antigüedad”. En nola de Osuna cursó el Bachillerato. En octubre viembre de 1912 es ascendido al puesto de 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados “Subinspector Médico de 2ª clase de Sanidad Militar por antigüedad”. Como apuntamos en el título de este apartado no debemos extendernos más allá de la década de los ochenta en la biografía de Manuel Martín Salazar, aunque el citado expediente nos ofrece información detallada de su vida profesional y de los destinos que ocupó en el Ejército. Tan solo subrayaremos aquí que tuvo destino en la Academia de Sanidad Militar desde agosto de 1879 hasta julio de 1880, pasando luego hasta el mes de septiembre al Primer Batallón del Regimiento de Infantería de Bailén. Y sobre todo, lo que más nos interesa destacar, estuvo destinado durante seis años en el Hospital Militar de Cádiz, entre 1880 y 1886; hasta el año 1894 encontramos que tuvo destinos en Cádiz o en otros puntos de la provincia, aunque también pasó por Sevilla, Huelva, Madrid y en Melilla para operaciones de campaña; en 1896 embarcó en Cádiz con destino a La Habana (Expediente AGMS). Llevó a cabo en 1885 una intensa actividad como médico durante la epidemia de cólera, lo que le hizo entrar nuevamente en contacto con las enfermedades infecciosas y las epidemias, recuérdese que en su periodo de estudiante ya vivió en Granada una experiencia al respecto pero con el tifus exantemático (Salas Fernández, 1998). Según apunta este autor, después de un breve destino en Mahón, que está consignado en su expediente militar, regresó nuevamente a Cádiz, incorporándose en el Primer Batallón del Regimiento de Infantería de Álava nº 60, destino en el que permaneció hasta 1891. Por tanto, su vinculación con Cádiz queda probada tanto por su biógrafo como por la constancia efectiva en su expediente militar. En 1885 se doctoró, con la calificación de sobresaliente, con una tesis sobre “La locura afectiva desde el punto 46

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de vista médico-legal”, defendiendo su trabajo ante figuras médicas como Javier Santero, Maestre de San Juan, Alejandro San Martín, Federico Olóriz y Adolfo Moreno Pozo (Salas Fernández, 1998). No podemos cerrar esta breve reseña biográfica, sin apuntar una circunstancia que hemos podido comprobar en su expediente personal en el Archivo General de la Administración en Alcalá de Henares (Expediente AGA). Y es que nuestro autor, estando como hemos visto en el seno del Cuerpo de Sanidad Militar, tuvo noticia de que se convocaba la cátedra de Higiene de la Facultad de Medicina de Cádiz, presentándose a la misma en octubre de 1889, consiguiendo un meritorio segundo puesto. No se olvide una cuestión, que retomaremos más adelante, y es que esta cátedra de Higiene Privada y Pública en Cádiz la había regentado alguien que creemos fue importante en esos años en la vida profesional de Martín Salazar, nos referimos a Benito Alcina Rancé (1853-1902). También tenemos constancia de que se presentó a la cátedra de Patología General en Granada en 1892, presentando un programa para competir por la misma en la que incluyó una lección, la número 105, que debía versar sobre los “Principios de estadística médica” (figura 3), aspecto que hemos subrayado en otra publicación (Herrera, 1997; Expediente AGA). Estas tentativas a cátedra no fueron fructíferas ya que en su expediente militar observamos que en la década de los noventa tuvo varios destinos que incluyen al menos Cádiz, Melilla, Madrid y La Habana (Expediente AGMS). Pero sobre la cuestión apuntada de la estadística médica, debemos recordar que Martín Salazar estaba en sintonía con autores como Rudolf Virchow que valoraba la importancia de la estadística como herramienta para conocer

Cultura de los Cuidados los trastornos producidos por la organización social y política, y la repercusión en la salud de los ciudadanos (Rosen, 1984), y el cirujano Federico Rubio y Galí, que en 1878, señaló también la necesidad de utilizar las operaciones que brinda la estadística para el progreso de la Higiene (Herrera, 2002); todo esto sin olvidar que Mateo Seoane fue promotor en España de importancia de lacon estadística como “Consideraciones herramienta para conocer generalos trastornos la misma su obra producidos por la organización social y política, y la repercusión en la salud de los les sobre estadística médica” ciudadanos (Rosen,la 1984), y el cirujano Federico Rubio y(1838) Galí, que en(López 1878, señaló también la necesidad de utilizar las operaciones que brinda la estadística para el Piñero, 1984(Herrera, y 1990). En esto esta líneaquedel uso defue progreso de la Higiene 2002); todo sin olvidar Mateo Seoane promotor en España de la misma con su obra “Consideraciones generales sobre la la estadística médica deben ser consignados estadística médica” (1838) (López Piñero, 1984 y 1990). En esta línea del uso de la estadística médica deben ser consignados los estudios realizados por Rodríguez los (1985, estudios realizados por Rodríguez Ocaña Ocaña 1988a, 1988b, 1993, 1996a, 1996b) y Bernabeu Mestre (2007). Volveremos a insistir en este punto en el siguiente apartado. (1985, 1988a, 1988b, 1993, 1996a, 1996b) y Bernabeu Mestre (2007). Volveremos a insistir en este punto en el siguiente apartado.

Figura 3: Página manuscrita por Martín Salazar en la que se reflejan los epígrafes de la lección 105 3: dedicada a losmanuscrita principios de lapor estadística médica (1892).Fuente: Figura Página Martín Salazar en la Archivo que General de la Administración, Alcalá de Henares (AGA).

se reflejan los epígrafes de la lección 105 dedicada a los prin-

En Cádiz realizó tareas de reconocimiento de los “mozos” para dictaminar su exclusión o no del servicio militar, lo cual hizo que visitara diversas localidades cipios de la estadística médica (1892).Fuente: Archivo Genegaditanas; pero también este destino parece que le llevó a desempeñar una notable influencia en Administración, los ambientes culturales de Cádiz, dado que (AGA). en julio de 1889 fue ral de la Alcalá de Henares nombrado “vicepresidente del Ateneo de dicha localidad, donde participa activamente” (Salas Fernández, 1998; Expediente AGMS). Hasta aquí esta breve síntesis biográfica, algunos de los aspectos apuntados nos ayudarán a entender

En Cádiz realizó tareas de reconocimiento de los “mozos” para dictaminar su exclusión o no del servicio militar, lo cual hizo que visitara diversas localidades gaditanas; pero también este destino parece que le llevó a desempeñar una notable influencia en los ambientes culturales de Cádiz, dado que en julio de 1889 fue nombrado “vicepresidente del Ateneo de dicha localidad, donde participa activamente” (Salas Fernández, 1998; Expediente AGMS).

Hasta aquí esta breve síntesis biográfica, algunos de los aspectos apuntados nos ayudarán a entender cuestiones relacionadas precisamente con su ejercicio profesional en Cádiz y su relación con el catedrático de Higiene Benito Alcina Rancé. Aunque también debemos precisar otros aspectos que se consignan en su expediente militar: se le distingue como un notable especialista en “Higiene y Bacteriología”, dominando dos idiomas que sin duda le ayudaron a estar al corriente en los temas médicos de su interés: francés y alemán (Expediente AGMS). MANUEL MARTÍN SALAZAR, BENITO ALCINA RANCÉ Y OTROS MIEMBROS DE LA ESCUELA MÉDICA GADITANA Si traemos a colación en este artículo la figura del gaditano Benito Alcina Rancé (18531902) (figura 4), es porque se puede establecer una conexión directa con Manuel Martín Salazar a través de su monografía sobre la tuberculosis, motivo de nuestro estudio, ya que Benito Alcina le prologa la obra, y consideramos que este no es un hecho casual sino que tiene que ver con la labor que Alcina realiza en el seno de la cátedra de Higiene Privada y Pública en la Facultad de Medicina de Cádiz, y las publicaciones de éste en la década de los ochenta. El hecho de que Martín Salazar estuviera destinado en Cádiz durante varios años y precisamente en el Hospital Militar, paredaño con la Facultad de Medicina, y los intereses comunes de los dos en torno a la Higiene Pública, debió establecer un vínculo hasta el extremo de que Martín Salazar le pidiera a Benito Alcina que le prologara su obra “Higiene de la tisis con arreglo a la nueva doctrina parasitoria”, impresa en Cádiz en 1887, en la calle de la Bomba (actual calle Ceballos), muy cercana también a la Facultad y al Hospital Militar.

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arreglo a la nueva doctrina parasitoria”, impresa en Cádiz en 1887, en la la Bomba (actual calle Ceballos), muy cercana también a la Facultad y al Cultura de los Cuidados Militar.

tisis tuberculosa”. El catedrático gaditano se muestra escéptico con los recursos terapéuticos existentes y defiende la atmósfera marina en el tratamiento del tuberculoso, apoyándose en el estudio de Balfour (1844). Alcina apoya sus afirmaciones con un solo caso de su experiencia personal, un joven tuberculoso de 23 años al que instaló en un buque en la bahía gaditana durante mes y medio, mejorando al parecer de forma significativa, pero la enfermedad se intensificó cuando el paciente desembarcó, atribuyéndolo el higienista gaditano al abandono 4: Benito Alcina Rancé Detalle del cuadro de F. Godoy (salón de de la atmósfera marina, por eso Figura 4: Benito(1853-1902). Alcina Rancé (1853-1902). Detalle del cuase mostraba partidario de crear una Casa de e la Facultaddro dede Medicina de Cádiz). F. Godoy (salón de grados de la Facultad de Medicina Salud en la Bahía de Cádiz, concretamente en es de entrardeenCádiz). el análisis de la obra de Manuel Martín Salazar conviene que el islote Fort-Louis (Herrera, 1998). También mos los puntos principales de la biografía de Benito Alcina, lo cual nos hará médico francés René Théophile Laënnec Antes de entrar en el análisis de la obra de lo el r la vinculación higiénico-sanitaria de ambos, aunque primero que (1781-1827) era partidario de la climatoterapia Manuel Martín Salazar conviene que expongamarina; incluso el poeta John Keats, en 1820, mos los puntos principales de la biografía de con la enfermedad ya muy avanzada, se emBenito Alcina, lo cual nos hará entender la vinbarcó con la esperanza de “que el aire del mar culación higiénico-sanitaria de ambos, aunque me será muy beneficioso” (Herrera, 2012). lo primero que debemos señalar es que los dos Pero al margen de este comentario sobre pertenecen a la misma Generación ya que solo la tuberculosis, lo verdaderamente significatimediaba un año de diferencia entre sus respecvo en la biografía de Benito Alcina es que en tivos nacimientos: Alcina nació en 1853 y Marla década de los ochenta, en la que coincidirá tín Salazar, como queda apuntado, en 1854. La en Cádiz con Manuel Martín Salazar, y más vida de Martín Salazar fue longeva se extendió concretamente en enero de 1880, saca a la luz hasta el año 1936, mientras que la de Alcina se pública la “Gaceta de Higiene y Climatología”, truncó prematuramente en 1902, aunque como que al menos se publicó durante ese año y tampuede comprobarse tuvo tiempo de dejar huella bién en 1881 (Orozco Acuaviva, 1981b). En esta en la medicina y en el higienismo gaditano. revista Alcina dejó constancia de su trabajo y Un dato a subrayar es la precocidad de Bededicación a la higiene y la microbiología, tenito Alcina, ya que en 1879, con 26 años de niendo muy presente los trabajos de Pasteur edad alcanza la cátedra de Higiene Privada y y de Lister, además de señalar las carencias en Pública de la Facultad de Medicina de Cádiz España de estadísticas médicas fiables (Herrera, (Orozco y Mira, 1982; Herrera, 1998). Alcina 1998). Benito Alcina, en la Facultad de Mediciparticipó en el Congreso Regional de Cienna, creó una Estación Meteorólogica y un Gacias Médicas, celebrado en Cádiz, en 1879, binete de Higiene (Orozco Acuaviva, 1981b). Y presentando varios trabajos, de los cuales solo tuvo como colaborador en la revista a Antonio destacaremos aquí “Los climas marítimos y la navegación en el tratamiento higiénico de la Mendoza, estudioso de la microbiología, que 48

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Cultura de los Cuidados años más tarde brilló en Madrid en el Hospital en octubre de 1889, Manuel Martín Salazar se de San Juan de Dios con su labor docente de las presentó, como hemos indicado ya, a la cátetécnicas bacteriológicas, de la cual se beneficiadra de Higiene de la Facultad de Medicina de ron Cortezo, Mansilla, Simarro, Hernando, San Cádiz, quedando en segundo lugar; si relacioMartín, etc. (Herrera, 1998). namos hechos todo apunta a que el número 1 En noviembre de 1881 se constituyó la secen estas oposiciones fue el ya citado Juan Luis ción provincial de Cádiz de la Sociedad EspaHöhr. Cabe señalar también que en 1888, Juan ñola de Higiene, nombrándose Presidente a Luis Höhr (figura 5), tan solo un año después Alcina, y al menos desde 1880 actuaba también de la publicación por Martín Salazar de la mocomo Corresponsal extranjero de la Sociedad nografía sobre la tuberculosis que estudiamos de Medicina Pública e Higiene Profesional de en este artículo, defendió su tesis doctoral soParís. En 1882 participó con una comunicación bre la “Etiología y profilaxis de la tuberculosis” en el Congreso Médico Internacional de Sevilla, (Höhr Rodríguez, 1888) (BFF-UCM), datos en el cual presentó un aparato original, un “aeque hemos podido corroborar en su expedienroscopio”, para recoger del aire el “polvo vivo”, te personal de doctorado que se encuentra siguiendo así la línea de trabajo de Pauchet y en el Archivo Histórico Nacional (AHN). La Pasteur en los estudios microscópicos de los gércarrera profesional del sanluqueño Juan Luis menes. Además en este mismo año publicó su Höhr también fue “meteórica” ya que obtuvo “Tratado de Higiene Privada y Pública”. En 1883 el grado de licenciado en medicina en 1886, denunció que la Dirección de Sanidad fuera un incluyendo las calificaciones de sobresaliente puesto ocupado por políticos que desconocen y premio en las asignaturas de Higiene Públilos fundamentos de la Higiene, así como las ca y en la de Higiene Privada (Expediente de deficientes leyes sanitarias existentes en España doctorado, AHN), que impartía el catedrático (Herrera, 1998). Entre los años 1884 y 1886, en Benito Alcina Rancé. En plena juventud, Höhr, colaboración con Cayetano del Toro y Quartiedescubrió una “anema bucali” no descrita llers (1842-1915), publica la revista “Crónicas (Orozco Acuaviva, 1981a). de especialidades médico-quirúrgicas” (Orozco Acuaviva, 1881c). Aún en el curso 1887-1888, Benito Alcina, sigue explicando en la Facultad de Medicina de Cádiz la asignatura de Higiene Privada y Pública “con nociones de estadística y legislación sanitaria”, recuérdese que es precisamente en 1887 cuando prologa la monografía sobre la tuberculosis de Manuel Martín Salazar que comentamos en este artículo. Pero en 1890, la cátedra de Higiene en Cádiz la desempeña Juan Luis Höhr Rodríguez Figura 5: Juan Luis Höhr Rodríguez (1864-1907), médico (1864-1907) (Casas de Ciria, 2012), explicanFigura 5: Juan Luis Höhr Rodríguez (1864-1907), médico de Sanlúcar de Barrameda, que Barrameda, queAlcina sucedió la cátedra Hido Benito Alcina en ese año la Terapéutica mé-sucedió en dela Sanlúcar cátedra dedeHigiene a Benito en en la Facultad dede Medicina de Cádiz cedidaapor C. Márquez). Benito Alcina en la Facultad de Medicina de Cádiz dica (Orozco y Mira, 1982). También conviene(Fotografíagiene aúncedida debemos un hecho más; Joaquín Portela González (Fotografía pordestacar C. Márquez). recordar, hecho que no nos parece casual que, Curiosamente

(1869-1939) (Bartual Pastor y Bartual Magro, 1999) (figura 6), discípulo de Benito Alcina, que subrayó el “arte pedagógico” y las “lecciones admirables” de su 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47con el49tema maestro (Herrera, 1998), también publicó una monografía en 1889 “Reflexiones sobre la etiología y tratamiento antiséptico de la tuberculosis”,

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Curiosamente aún debemos destacar un libro y un Gabinete. Martín Salazar, además hecho más; Joaquín Portela González (1869de la tradición higienista de los médicos de 1939) (Bartual Pastor y Bartual Magro, 1999) la Armada, debió nutrirse en mayor o menor n Luis Höhr Rodríguez (1864-1907), de Sanlúcar de Barrameda, que propiciado en Cádiz por (figura 6), discípulo de Benitomédico Alcina, que sumedida del ambiente cátedra debrayó Higiene a Benito Alcina en la Facultad de Medicina de Cádiz el “arte pedagógico” y las “lecciones admiBenito Alcina, que contaba con ilustres precedida por C.rables” Márquez). de su maestro (Herrera, 1998), también dentes que no podemos sintetizar aquí (Herrepublicó una monografía en 1889 con el tema ra, 2007). Llama la atención que Benito Alcina mente aún debemos destacar un hecho más; Joaquín Portela González “Reflexiones sobre la etiología y tratamiento reclamara en los años ochenta, como hemos (Bartual Pastor y Bartual Magro, 1999) (figura 6), discípulo de Benito antiséptico de la tuberculosis”, prologándole en apuntado, la necesidad de que la Dirección de subrayó el lasHöhr “lecciones admirables” su en manos de políticos esta“arte ocasiónpedagógico” su trabajo Juan yLuis Rodríla Sanidad node estuviera rera, 1998), publicó unaque monografía el tema guez también (B-FHR). No cabe duda tanto el tra- en 1889 y quecon al correr de los años Manuel Martín Sasobre labajo etiología y tratamiento de que la tuberculosis”, en esta década de los ochenta Alcinafigura despliegade unaprimer intensa labor como de Höhr como el de Portela antiséptico nos serán detampoco lazar se convirtiera en una profesor de las asignaturas de Higiene Privada y Pública, pero también contribuye a en esta ocasión su trabajo Juan Luis Höhr algunos Rodríguez (B-FHR). Nocomunicaciones, cabe gran utilidad para someter a contraste nivel dirigir la Sanidad en circunsesta disciplina conalrevistas, libroEspaña, y un Gabinete. Martín Salazar, además de la tradición higienista de los médicos de la Armada, debió nutrirse en aspectos de lacomo monografía la tuberculoo el trabajo de Höhr el desobre Portela nos serán de gran para habría alegrado a Benito tanciautilidad que creemos mayor o menor medida del ambiente propiciado en Cádiz por Benito Alcina, que sis de Manuel Martínde Salazar, que como hemos Alcina siprecedentes hubiera que tenido ocasión de saberlo, ya 2007). ntraste algunos aspectos la monografía sobre tuberculosis de no podemos contaba la con ilustres sintetizar aquí (Herrera, Llama la atención que Benito Alcina reclamara en los años ochenta, fue publicada en Cádiz en su fallecimiento n Salazar,apuntado que como hemos apuntado fue1887. publicada en que Cádiz en 1887. como hemos indicado fuecomo hemos apuntado, la necesidad de que la Dirección de la Sanidad no estuviera en manos de políticos y muy que alprematuro correr de los en años1902. Manuel Martín Salazar se convirtiera en una figura de primerPasemos nivel al dirigir Sanidad en España, pues, circunstancia que creemos sin lamás dilaciones, a cohabría alegrado a Benito Alcina si hubiera tenido ocasión de saberlo, ya que su mentar la obra de Manuel MartínenSalazar “Hifallecimiento como hemos indicado fue muy prematuro 1902. giene dedilaciones, la tisis con a la laobra doctrina paraPasemos sin más pues,arreglo a comentar de Manuel Martín Salazar “Higiene de la tisis con arreglo a laen doctrina parasitoria”, sitoria”, publicada Cádiz en 1887publicada (Fondoen Cádiz en 1887 (Fondo Antiguo BCS-UCA) (figura 7). Antiguo BCS-UCA) (figura 7).

Figura 6: Joaquín(1869-1939). Portela González Fuente: (1869-1939). Fuente: del cuadro de F. Godoy quín Portela González Detalle del cuadro de F. Godoy (Facultad de Medicina de Medicina deDetalle Cádiz). Cádiz).

nta a que Manuel Martín Salazar, durante su destino militar en Cádiz, ción con Benito Alcinaa que y con su Martín círculo, una prueba evidente es el Todo apunta Manuel Salazar, a obra que pasamos a comentar continuación. durante su destino militar enaCádiz, mantuvo No debemos olvidar relación con Benito Alcina y con su círculo, una prueba evidente es el prólogo de la obra que pasamos a comentar a continuación. No debemos olvidar tampoco que en esta década Figura 7: Portada de la monografía de Manuel Martín Salazar sobre la “Higiene de la tisis 7: Portada de la monografía de Manuel Martín de los ochenta Alcina despliega una intensa la-con arregloFigura a la nueva doctrina parasitoria” (Cádiz, 1887). Fuente: Fondo antiguo BCSUCA. Salazar sobre la “Higiene de la tisis con arreglo a la nueva bor como profesor de las asignaturas de Higiedoctrina parasitoria” (Cádiz, 1887). Fuente: Fondo antiguo ne Privada y Pública, pero también contribuye BCS-UCA. a esta disciplina con revistas, comunicaciones, 50

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Cultura de los Cuidados LA HIGIENE DE LA TISIS SEGÚN MANUEL MARTÍN SALAZAR (1887) La monografía de Manuel Martín Salazar, además del prólogo que comentaremos en primer lugar, presenta apartados específicos sobre la etiología de la tuberculosis, el contagio, la herencia, la vacunación, la desinfección, la alimentación y el clima, así como epígrafes dedicados a la higiene social y a la tuberculosis en el Ejército. Creemos que no se ha subrayado todavía su importancia, en el contexto del inicio de la obra como higienista de Manuel Martín Salazar; sabemos por su excelente y documentado biógrafo que, en mayo de 1888, se le concedió una mención honorífica a esta monografía, aunque apunta “trabajo del que ya hicimos mención anteriormente y del que tan sólo poseemos una pequeña reseña bibliográfica de A. Quintana, publicada en la Revista de Sanidad Militar de fecha 1 de julio de 1887” (Salas Fernández, 1998). Centremos, en primer lugar, nuestra atención en el prólogo de la obra escrito por Benito Alcina Rancé. En el mismo, Alcina, habla de “buena amistad” con el autor de la obra, pero sobre todo señala que “urge acostumbrar á médicos y á profanos á que piensen sobre Tuberculosis del mismo modo que se indica en este trabajo”. En las primeras líneas del prologuista apunta la crítica a los que se amparan en la práctica y en la tradición para negar la experimentación y añade: “Las cosas, vistas de tal suerte, hacen que el experimentador de hoy salude agradecido y respetuoso al sabio de ayer que le donó materiales á manos llenas, y que éste le felicite á su vez por el buen uso, que del donativo ha hecho”. Alcina señala que la monografía de Martín Salazar está escrita desde la perspectiva de la moderna microbiología que permite plantear de manera diferente la prevención de la enfermedad, “a pesar de que la tuberculosis no sea todavía enfermedad generalmente curable”.

Encontramos, pues, que Alcina defiende la tradición de los estudiosos de la tuberculosis, desde el punto de vista clínico; pero como era de esperar de su talante científico, aboga por la moderna investigación microbiológica, que él mismo auspiciaba en las revistas anteriormente mencionadas, no dudando en calificar a la tuberculosis como “terrible azote de la Sanidad moderna” y de “endemia devastadora”. Incluso encontramos que en sus comentarios prologales sobre la enfermedad reflexiona así: “Será la civilización, causa de la tuberculosis? ¿Será la civilización enemiga de la misma?”. Para Benito Alcina, que no en vano explicaba nociones de estadística en su asignatura en la Facultad de Medicina de Cádiz y que además abogaba por la mejora de las estadísticas sanitarias en España, las elevadas cifras de mortalidad por tuberculosis en las grandes capitales señalan, sin duda, “el mónstruo de la época”. Por eso el catedrático gaditano defiende en su prólogo las líneas argumentales generales esgrimidas por Martín Salazar en su monografía, ya que se trata de estudiar tanto “el gérmen tuberculoso como el terreno en que éste pueda sembrarse, siendo esto tan verdadero, que sin aquel, el terreno es infecundo, y sin éste, el gérmen no prospera”. Extinguir los gérmenes de la tuberculosis, evitar su siembra en el organismo, por eso considera perentorio divulgar la “doctrina patogénica actual y prevendremos mucho y combatiremos algo”. Pero centremos ya nuestros comentarios en el texto de Martín Salazar, que se interesa por la tuberculosis por la elevada mortalidad que produce en el mundo (tabla 1), y muy específicamente en España donde la tuberculosis en esa época mataba cada año a 68.000 personas. Su revisión estadística abarca de forma general a los países europeos, pero realiza interesantes reflexiones sobre diversos lugares del mundo, 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados incluyendo América, con una alta mortalidad en Brasil, Perú y en las Antillas, donde la tuberculosis es “después del vómito, el gran azote de nuestras tropas y de los españoles en general”. En cuanto a grandes capitales señala a París, Londres, Berlín, Viena, Roma, San Petersburgo y Madrid, que “atestan sus necrópolis de tísicos”. Una enfermedad, pues, que realiza estragos en las vidas de las personas, sobre todo y con preferencia en las edades comprendidas entre los 15 y los 45 años. Y ante este panorama Martín Salazar se pregunta: “¿Cómo los hombres soportan con tanta indiferencia estas plagas, con tal de que sean sordas y constantes, y se conmueven, en cambio, tanto, en presencia del cólera por ejemplo, que es, por lo pasajero, mucho menos mortífero y peligroso que la tisis?”. Según sus datos son más de 3 millones de personas las que mueren por la tuberculosis en el mundo cada año. Martín Salazar está convencido de que la Higiene es la primera disciplina del Derecho Público y es una ciencia social trascendente, y por estas razones el higienista, desde su experiencia social y científica, debe alzar la voz para llamar la atención de los gobiernos, sobre todo en España, que es de las más castigadas por esta enfermedad en Europa, pero también como militar recuerda que el Ejército español es de los más diezmados en el mundo por la tuberculosis. Tabla 1: Nº de defunciones por tuberculosis (por mil habitantes) PAÍSES Nº DE DEFUNCIONES HOLANDA 4,9 BÉLGICA 4,9 FRANCIA “Similar” ALEMANIA 4,2 ESPAÑA 4 INGLATERRA 4 SUIZA 2,5 Fuente: Martín Salazar, 1887. Elaboración propia.

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La etiología de la tuberculosis Martín Salazar tiene claro un precepto, no se puede determinar la medicina preventiva contra una enfermedad, sin antes estudiar la causa “que la instituye como fenómeno positivo y real en la Naturaleza”. De ahí que el médico sevillano insista en que la profilaxis depende de la etiología y su patogénesis, “y por eso ha cambiado tanto la higiene de la tuberculosis, desde el concepto antiguo del tubérculo, hasta los modernos descubrimientos de Koch”. Aquí está el nudo gordiano de la monografía de Martín Salazar, existe un antes y un después del descubrimiento del bacilo de la tuberculosis, hecho determinante que marcará la pauta de la medicina preventiva para luchar contra esta enfermedad. Pero existe un problema, y no es otro que la “doctrina parasitaria” de la tuberculosis no es admitida como cierta por toda la comunidad médica, por eso “no hay más remedio que insistir en ella, y demostrar, hasta donde nos sea posible, el origen parasitario indiscutible de la tisis, si por acaso intentamos asentar la higiene sobre base lógica é incontestable”. Para Martín Salazar la “doctrina parasitaria” abre un campo a la investigación profiláctica y terapéutica de la tuberculosis. Entre las autoridades en que se apoya en su texto encontramos a Koch, Pasteur, Darwin, pero llama la atención que se apoye en los argumentos matemáticos esgrimidos en su “Patología general” por José de Letamendi (18281897), concretamente recoge de este autor lo siguiente: “…la intensidad de los efectos parasitorios estará en razón directa de la energía positiva del organismo invasor, y en razón inversa de la energía positiva del organismo invadido”. A partir de este apunte letamendiano, Martín Salazar anuncia un principio de higiene general aplicable a todas las enfermedades ocasionadas por “agentes vivos”, y en particular

Cultura de los Cuidados en la tuberculosis, consistente en combatir al enemigo invasor (el parásito), destruyéndolo o atenuándolo, y fortalecer la energía individual del hombre, “y en general del ser agredido”. Así queda planteada la base, según sus criterios, de la lucha contra la tuberculosis. Se ha señalado que la dialéctica del origen de la tuberculosis se desarrolló en torno a dos elementos, el “germen” y el “terreno”, factores que condicionarían el grado, evolución y pronóstico de la enfermedad, de manera que los médicos de la época se adscribieron a distintas posturas según la categoría que le concedieran a uno u otro factor, lo cual repercutía a la hora de reivindicar unas medidas profilácticas u otras para evitar la difusión de la enfermedad. Los “gerministas” consideraban que la principal tarea de la lucha antituberculosa, consistía en cerrar todas las fuentes de contagio, impidiendo que el sano adquiriese el bacilo y por tanto la enfermedad, y los que creían en el contagio a ultranza defendían la declaración obligatoria para recluir a los tuberculosos en sanatorios, mientras que los que daban más importancia al “terreno” afirmaban que lo de menos era el bacilo ya que, si en realidad fueran tan peligroso, la humanidad hubiera desaparecido, pues el bacilo de Koch se encontraba esparcido por doquier (cf. la excelente síntesis que sobre este asunto ha realizado Molero Mesa, 1989). En este sentido creemos que podemos considerar a Martín Salazar como un ecléctico, pero que demuestra un firme convencimiento de que en la lucha contra la tuberculosis es fundamental el descubrimiento de Robert Koch. Martín Salazar destaca cuatro nombres en la historia del estudio sobre la tuberculosis humana: René Laënnec, Rudolf Virchow, Jean Antoine Villemin y Robert Koch. Laënnec hizo una descripción clínica magistral de la tuberculosis, Virchow estudió su histología

patológica y concibió la enfermedad como el resultado de una “erupción neoplásica, pobre y miserable del tejido conjuntivo”, sin comprobar que además de este tejido “contribuyen a formar los elementos del tubérculo, células epiteliales y hasta células emigrantes salidas de los vasos sanguíneos y linfáticos”. Villemin comparó la tuberculosis con el muermo, y demostró que su inoculación en los animales producía granulaciones semejantes a las de los pulmones de los tuberculosos. Aunque hay autores que señalan a Klencke como el primero en reproducir con éxito la tuberculosis de manera artificial, inoculando material tuberculoso de un ser humano en las venas cervicales de un conejo, provocando en el animal una tuberculosis diseminada en pulmones y riñón (Gutiérrez García, 2003). Y, por último, Robert Koch, que con el descubrimiento del bacilo que lleva su nombre inaugura, según Martín Salazar, “la racional investigación profiláctica y curativa de este padecimiento”. Este descubrimiento lleva a algunos investigadores de la época a pensar que el tubérculo no es un tumor de estructura embrionaria especial sino el resultado de una reacción inflamatoria ocasionada en las células por el estímulo de las bacterias de Koch. Así, pues, los trabajos de Koch, Cornil, Klebs, Toussaint, Malassez y Vignal preconizan la teoría inflamatoria y parasitaria de la tuberculosis. Apunta Martín Salazar al respecto: “Según estos autores, los bacilos en circulación por el torrente sanguíneo o linfático, se detienen en los pequeños vasos, y determinan por su acción irritante sobre los elementos endoteliales, aquella especial proliferación celular que constituye el tubérculo”. A todo esto ayuda que el bacilo de Koch es aerobio y encuentra en los pulmones la mayor cantidad de aire posible para su desarrollo, lo que justificaría el predominio de la tuberculosis pulmonar. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Otros autores de la época matizaban que el bacilo se convierte en un parásito de la célula y esto se traduce por una exageración nutritiva y generadora, primero del núcleo y después del protoplasma, señalando que la inoculación experimental permite seguir atentamente el proceso inflamatorio que representa la formación del tubérculo, por tanto la denominada “neoplasia tuberculosa” no sería más que una hiperplasia de elementos más o menos modificados, cuya evolución defectuosa ha sido motivada por el “gérmen fimógeno” (Portela González, 1889). Desde la admiración al hallazgo de Koch y a la microbiología en general, Martín Salazar explica que no se puede concebir que la microbiología sea la medicina entera, ya que si no se conocen las condiciones orgánicas que hacen posible el desarrollo del microbio y la reacción natural del organismo “no se tiene, en verdad, gran cosa que pueda utilizarse ni para la medicina ni para la higiene”. Se observa, pues, que el médico sevillano aprecia los descubrimientos de Koch, pero sintetiza lo que le parece válido de las viejas opiniones sobre la enfermedad que representan una “tradición secular”, sin olvidarse por supuesto del “axioma indiscutible entre los microbiologistas” de los postulados de Koch para asegurar que un microbio es la causa de una determinada enfermedad, recordando que el investigador alemán no solo descubrió el microbio de la tuberculosis en el hombre y en los animales tísicos, sino que dio, a la vez las pruebas científicas requeridas para dejar sentada para siempre la naturaleza bacilar de esta enfermedad cuando publicó sus primeros estudios en abril de 1882. Koch vio en los esputos de los tuberculosos, en la superficie supurada de las cavernas, en los cortes de los tubérculos miliares y de las producciones tuberculosas de los diversos ór54

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ganos, unos bacillus delgados, de 3 a 4 milésimas de milímetro de longitud, muy parecidos a los de la lepra, y que coloreaba, sumergiendo las preparaciones durante 24 horas en una mezcla de azul de metileno y una disolución de potasa cáustica al diezmilésimo, método de coloración que posteriormente fue mejorada por Ehrlich. Sin embargo, otros autores preferían el método de Neelsen ya que tiñe intensamente al bacilo empleando la fórmula siguiente: fuchina (1 gramo), fenol (5 gramos), alcohol absoluto (10 gramos) y agua destilada (95 gramos) (Portela González, 1889). También debe tenerse en cuenta que el descubrimiento de Koch fue puesto en duda por algunos científicos como, por ejemplo, Stemberg, Haricourt, Tulasne, Spina, Craemer o Balong, incluso Schmidth confundía el bacilo con cristales de grasa, mientras que Gregg lo consideraba como filamentos de fibrina, y Beneke y Cuter lo aceptaron pero como formas embrionarias del “micoderma aceti” (Höhr Rodríguez, 1888). Martín Salazar, revisando los estudios de los autores de mediados del siglo XIX, señala la gran intuición que tuvieron algunos cuando defendieron “la identidad efectiva de la tisis y la escrófula, que había de venir á darles la razón la microbiología moderna, nada menos que con prueba plena, como es la de encontrar el bacillus de Koch en las lesiones escrofulosas, y ocasionar la tuberculosis generalizada en los animales con inoculación experimental de los productos escrofulosos”. Ideas sobre el contagio y la herencia Martín Salazar parte de que Hipócrates refleja en su obra la existencia de una epidemia de tisis en la isla de Thassos, y de que Galeno y los médicos árabes creyeron siempre en la contagiosidad de esta enfermedad; en cambio, el médico sevillano comenta que él mismo ha

Cultura de los Cuidados visto a médicos explicar la no contagiosidad de la enfermedad, por eso valora la reacción a favor del contagio que suscitaron los experimentos de Villemin, Chauveau y Tappeiner, este último demostrando el contagio por la vía respiratoria en animales, mientras que los otros autores citados lo hicieron a base de inoculaciones debajo de la piel de los conejos o haciendo ingerir esputos de tísicos también en animales, mientras que Klebs hacia lo propio con leche de vacas tuberculosas. Incluso cita el desgraciado accidente de Laënnec, que al serrar vértebras de un cadáver tuberculoso durante una autopsia se hirió un dedo, “y todo el mundo sabe que este ilustre médico murió de tuberculosis pulmonar”, aunque también se ha apuntado que el médico francés pensaba que la tuberculosis no era contagiosa (Herrera, 2012). Además de lo expresado se debe consignar que en la bibliografía de la época se argumenta sobre el “contagio por inoculación directa”, a través del atroz experimento realizado por Demet, Paraskova y Zablonis, tres médicos griegos que inocularon esputos tuberculosos en la pierna de un enfermo que padecía gangrena del pie, comprobando que a las tres semanas existían alteraciones en el pulmón derecho, falleciendo a los 38 días el paciente al parecer de la enfermedad primitiva, demostrándose en la autopsia la existencia de tubérculos pulmonares que “se encontraban en un periodo de desarrollo correspondiente á la fecha de la inoculación” (Portela González, 1889). Desde el punto de vista de Martín Salazar es indudable que por la respiración de un aire lleno de partículas tisiógenas, que contengan muchos bacilos de Koch, es como se produce la mayoría de las veces la infección tuberculosa. Cita, como ejemplo, el caso de una comadrona de Núremberg, enferma de tuberculosis,

que acostumbraba a hacer la insuflación directa con su boca a los niños recién nacidos, en corto plazo de tiempo murieron por meningitis tuberculosa más de diez pequeños asistidos por esta mujer; mientras que en la misma población otra comadrona, sana, no perdió por afección tuberculosa ninguno de los niños asistidos. Sin embargo, se debe apuntar que en la época había autores que consideraban que el contagio de la tuberculosis mediante el aire era poco seguro ya que consideraban que la presencia del bacilo de Koch en la atmósfera que rodea al tísico no ha sido plenamente demostrada, creyendo además que los “productos morbosos” después de desecados pierden “su virulencia por haberse acompañado de un proceso de putrefacción”. Sí podían admitir algunos el papel contagiante de los esputos, “infeccionando la atmósfera con los bacilos que contienen”, pero consideraban que esto solo ocurría en casos de tos, acto mecánico destinado a dividir en finas partículas el producto de la expectoración que arrastra, sustentando que en cambio el aire espirado por los tísicos y exhalado directamente sobre la boca de un individuo sano no tiene este mismo poder, “y que por lo tanto el aire expirado jamás podrá ocasionar la infección”. Autores como Cohnheind y Verneuil admitían el contagio mediante las relaciones sexuales (Höhr Rodríguez, 1888). Como vemos el debate sobre el contagio estaba abierto en la época, por eso conviene profundizar un poco más en las ideas plasmadas al respecto por Martín Salazar en su monografía. Martín Salazar le da mucho valor a las partículas de los esputos desecados, confundidas con el polvo atmosférico y arrastradas por el viento, en la producción de la infección respiratoria, aunque las partículas desecadas de las heces fecales, de la orina y de otras secreciones donde se ha reconocido el bacilo de Koch po1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados drían “inficionar el aire”. Igualmente da gran valor a la transmisibilidad de la tuberculosis por la alimentación con sustancias procedentes de animales tísicos, en este sentido “la leche ha sido el alimento más acusado”. En cambio señala que las investigaciones de la época no han podido obtener resultados concluyentes sobre si la sangre, las carnes y las vísceras de los bovinos atacados por la tisis, usados como alimentos, podrían ocasionar la enfermedad. En cuanto a las gallináceas, alimento muy común del hombre, se han encontrado bacilos en los tubérculos de los pollos, demostrando Nocard el contagio del hombre a las gallina, pero en opinión de Martín Salazar no parece fácil el contagio por la alimentación dada la acidez del jugo gástrico, además de las preparaciones culinarias, “quitando por el calor todo poder tisiógeno á los alimentos”. Desaconseja no utilizar vacunas que procedan de personas o de terneras enfermas de tuberculosis. En cuanto a la herencia, Martín Salazar se hace una pregunta: ¿se nace tuberculoso o se nace “tuberculizable”? Cuestión a la que responde “que se puede heredar, ó la semilla en germinación, ó el terreno adecuado para germinar”. Cita la experiencia de Demme que encontró en los pulmones de dos niños tísicos, muertos a los pocos días de nacer, cavernas extensas y profundas “que probaban la infección tuberculosa durante la vida fetal”. De manera que Martín Salazar se muestra categórico, no se puede negar en absoluto la herencia directa por la madre, manifestando que se puede producir mediante la sangre placentaria de la madre tísica “ó por impregnación primitiva tuberculosa del óvulo”, sin descartar la sospecha de la posibilidad de la infección del feto por el esperma del padre, sin contaminación alguna de la madre, aspectos en los cuales la investigación se encuentra en estado muy primario 56

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como para dar respuestas categóricas, aunque cita que Niepce encontró bacilos en el esperma de hombres tuberculosos. Autores, como Juan Luis Höhr (1888), apoyándose en los trabajos de Jani, Landouzy, Martín, Chamberland y Strauss eran partidarios de la herencia paterna de la tuberculosis, pero se mostraban aún más partidario de lo que denominaban “heredo-tuberculosis por semilla materna”, considerando una evidencia “el paso posible de las bacterias de la sangre materna á la del feto”. Otros autores daban por sentada la transmisión por herencia de forma más categórica, y no solo la herencia de la predisposición sino también la del germen, argumentando “que estudios y experiencias han demostrado que á más del terreno abonado, puede trasmitirse hereditariamente en muchos casos la enfermedad misma”, apoyándose sus argumentos en las estadísticas de Parrot, West, Wahl y Lannelongue. Parrot, por ejemplo, presentó 219 observaciones de tuberculosis, desarrolladas antes de los 2 años, diagnosticando la tuberculosis en 23 niños cuyas edades estaban comprendidas entre 1 día y 3 meses, en todas esas observaciones se comprobaron en la autopsia lesiones específicas más o menos avanzadas en los pulmones y otros órganos como laringe, hígado, intestinos y meninges, argumentos que consideran suficientes para demostrar que la “tuberculización” no es infrecuente en las primeras edades, en este sentido autores como Baumgarten y Vallin pensaban que el origen de la enfermedad había que buscarlo en el contagio ulterior, ocurrido muy principalmente por la lactancia, en cambio otros autores abogaban a favor de la transmisión de la enfermedad durante la vida intrauterina, apoyando sus argumentos en los fetos tuberculosos observados por Chaweau, Peter y Jonhe (Portela González, 1889). En la actualidad se admite que la bacteriemia tuberculosa

Cultura de los Cuidados que ocurre durante el embarazo puede resultar en infección de la placenta o del aparato genital materno, esta transmisión puede ser transmitida al feto por rotura de un tubérculo de la placenta produciéndose difusión hematógena por vía del cordón umbilical, o bien a partir de una afección de los genitales de la madre produciéndose aspiración o deglución del líquido amniótico o sangre infectados (Soza, Cala y Mantilla, 2007). Se entiende, pues, el debate existente al respecto a finales del siglo XIX, porque hoy día la tuberculosis congénita es de difícil diagnóstico y requiere de un alto grado de sospecha, debido a la falta de especifidad de las manifestaciones, ya que usualmente hay compromiso multisistémico y a que en la mayoría de las ocasiones se desconoce el estado infeccioso de la madre (Soza, Cala y Mantilla, 2007). De toda esta cuestión sobre la herencia y tuberculosis, comprobamos también una opinión de carácter eugenésico en el discurso de Martín Salazar: “los matrimonios entre tuberculosos, constituyen un verdadero mal para la sociedad”; planteándose cuestiones éticas sobre si la higiene social debe intervenir en las leyes matrimoniales o incluso autorizarse el divorcio por “tuberculización” de uno de los cónyuges. En este sentido, Martín Salazar, se muestra categórico calificando de inmoral este tipo de intervenciones, argumentando que con estas medidas no dejarían los tísicos de reproducirse y se incentivaría la prostitución, el concubinato y el adulterio, consiguiendo con todo ello que los enfermos no encuentren el calor, el consuelo, los cuidados y hasta “el heroísmo de la familia”. Vacuna, desinfección, alimentación y clima La cuestión que plantea el médico sevillano sobre la vacuna o “inoculación preservativa”

es la siguiente: “¿Es de esperar, ya que la tuberculosis es una enfermedad infecciosa, como la viruela, como el carbunco, etc., que andando el tiempo (…) llegue el día en que se descubra la vacuna de la tuberculosis?”. En este punto se muestra pesimista ya que considera que tampoco es de esperar que se descubra la del paludismo, la de la erisipela, la de la blenorragia, ni la de ninguna de esas enfermedades parasitarias, “que en vez de dar inmunidad, dan, por el contrario, mayor predisposición”, aunque no descarta sorpresas del genio científico e investigador de su época, de cuya muestra pone como ejemplos los experimentos con animales realizados por Martín, Parrot, Falk y Gosselin, resultando sus experiencias negativas. Recuérdese, como apuntó Portela González (1889), el intento de Cantani con la “bacterio-terapia”, que consistía en establecer una lucha por la existencia entre el bacilo de Koch y el “bacterium termo”, a fin de lograr el exterminio del primero. Vistos estos fracasos señala Martín Salazar que autores como Gosselín, Raymon y Arthaud han cambiado la orientación de sus investigaciones empeñándose en “hacer estéril el organismo, merced á sustancias antizimóticas que lo impregnen, y que le coloquen á salvo del ataque fatal del bacilus de la tuberculosis”. En esta línea se experimentó con el poder preservativo del bicloruro y del yoduro de mercurio, del sulfuro de carbono, del yodoformo y del tanino, pero salvo estos dos últimos que parecen haber detenido algo el desarrollo de la tuberculosis experimental, las demás sustancias, hasta la han favorecido por la debilitación orgánica que producen en los animales utilizados en la experimentación. Martín Salazar se muestra escéptico que por este camino se llegue a resultados prácticos en la preservación de ninguna enfermedad, ya que no se puede 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados condenar a una persona, con el pretexto de salvarle de la tuberculosis, al uso diario de medicamentos antisépticos que minarán con el tiempo su salud, resultando la profilaxis peor que la enfermedad. Además se debe tener en cuenta que la supuesta preservación instituida por el medicamento no durará sino el tiempo que se tarde en eliminar, “mientras que la preservación dada por la vacuna, equivaldrá siempre á la inmunidad natural que deje en el organismo el padecimiento que se intente precaver”. Pero otra cosa distinta es la idea de destruir el bacilo de Koch en el organismo de los enfermos, en los esputos, en las excreciones, en el suelo, en el aire, sobre las cubiertas de la cama, en los vestidos, en los alimentos, en las habitaciones, en los objetos que utilizan los tísicos, en los animales tuberculosos, en todas partes donde pueda vivir el microbio y multiplicarse, “y de alguna suerte inficionar el organismo del hombre”. En esta línea, Martín Salazar expone los experimentos de Schüller y Fischer con el alcohol absoluto, el amoniaco cáustico, el licor de Van-Swieten, las disoluciones concentradas de ácido salicílico, de permanganato potásico, de ácido fénico, de cloruro de zinc, de ácido tímico y de sulfato de cobre, que “han esterilizado por completo los esputos frescos de los tísicos”. Otros autores realizaron tentativas, entre otras sustancias con la creosota, el eucaliptol, el ioduro potásico, el arsénico, el ácido pícrico, la fenilamina, el mercuretilo, el mentol, la helenina, la trementina, el terpinol, el ácido sulfuroso, el cloro, etc. Los resultados prácticos dejaron mucho que desear, aunque algunos se empeñasen en resaltar la acción específica de determinados compuestos, circunstancia que llevó a un cierto pesimismo sobre la posibilidad de encontrar un tratamiento etiológico de la tuberculosis (Portela González, 1889). Este 58

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pesimismo sobre la terapéutica queda de manifiesto también en el siguiente párrafo de Juan Luis Höhr Rodríguez (1889): “…debemos convenir en que la terapéutica de la tuberculosis pulmonar no está en poseer un desinfectante que por acción interna ó externa, mate al bacilo tuberculoso ó evite su multiplicación. Dá pena de ver hombres tan conspicuos como el microbiólogo inglés Klein, medir la virtud terapéutica de un agente por la disminución mayor ó menor que se observa en el número de bacilos que el esputo presenta. Aun cuando fuera posible encontrar ese antiséptico ideal que otros como él buscan en vano, no se debe olvidar que existe una relación tan estrecha entre la tuberculosis y la tisis pulmonar que mientras quede el tubérculo, aun purgado de bacilo, queda un inminente peligro de tisis, á no ser que el individuo viva en un medio aséptico en absoluto que libre á sus pulmones de microbios piógenos”. Pero para Martín Salazar el gran descubrimiento es el de la esterilización de los esputos tuberculosos por medio del agua hirviendo o del vapor de agua caliente, durante algunos minutos, “con estos dos sencillos y económicos medios de desinfección, tiene la higiene bastante para purificar casi todas las cosas suspectas de contaminación tuberculosa”. En este sentido apela a los experimentos de Frerichs que hizo inoculaciones en los animales con esputos tuberculosos, “cocidos ó desinfectados con el agua hirviendo”, y no pudo nunca producir la tuberculosis experimental. De todo ello se desprende, según el médico sevillano, una recomendación que conviene transcribir con detalle, ya que plantea un precepto de carácter higiénico y práctico: “Por eso, lo que más importa, es desinfectar los esputos en el momento mismo de ser expectorados. A este fin, conviene aconsejar á los tísicos

Cultura de los Cuidados que no escupan en el suelo, ni sobre las ropas, donde fácilmente se transforman los esputos en polvo dañoso para la salud de los demás; sino que arrojen su expectoración en vasos ó escupidores que contengan, ó serrín de madera para quemarlo después, ó disoluciones antisépticas, en las cuales entre una cierta cantidad de glicerina ó de otra sustancia higroscópica cualquiera, que pueda impedir los peligros de una rápida evaporación. Estos vasos se vaciarán una ó dos veces al día, y serán después cuidadosamente lavados y desinfectados con el agua hirviendo. Otro tanto convendrá hacer con las vasijas que reciban las deposiciones diarréicas”. Añade que los vestidos y las ropas de cama de los tísicos no deben utilizarse hasta que no hayan sido lavados y desinfectados convenientemente en una cámara de vapor, de no ser posible bastará hervirlos en agua agregándole una solución salina cualquiera. Los utensilios y los muebles pueden desinfectarse con el agua hirviendo o con un chorro fuerte de vapor de agua. Martín Salazar recuerda también que Jaccoud recomienda para el saneamiento de la atmósfera de los tuberculosos, las pulverizaciones de ácido fénico o de benzoato de sosa en el aire de las habitaciones de los enfermos. Pero ante estas recomendaciones prácticas encontramos un comentario escéptico de Martín Salazar: “Tiempo ha de tardar en que estas sencillas prácticas de desinfección se encarnen en las costumbres, mientras anden por ahí vigentes las ideas contrarias al contagio”. El control de los alimentos también es un tema subrayado por Martín Salazar en su monografía; por ejemplo, debe cuidarse la pureza y la inocuidad de la leche, por lo que es preciso inspeccionar la salud de los animales que abastecen de leche a los mercados, realizar análisis microbiológicos para impedir su uso en caso de que se descubra el bacilo de Koch y reco-

mienda que se tome la leche hervida: “Hipólito Martín ha demostrado que a los 100 grados pierde el virus tuberculoso todas sus propiedades nocivas”. Preconiza también evitar el uso de alimentos de carnes y vísceras procedentes de animales tuberculosos, apuntando que Vallín ha demostrado que las carnes asadas solo llegan por dentro a la temperatura de 58 grados y Toussaint ha probado experimentalmente que a los 75 grados pueden aún “conservar los músculos su virulencia”. Por eso Martín Salazar cree que los higienistas deben plantear la prohibición terminante del consumo de reses tuberculosas, apoyándose en las ideas expuestas por Bouley en el Congreso Veterinario internacional de Bruselas (1883), aunque las conclusiones aceptadas por la Asamblea no fueron tan absolutas como las que proponía este autor ya que se inclinaron por tolerar el libre consumo de las reses, siempre que estando en el primer periodo de la tisis, no tuvieran interesado más que un órgano que fácilmente pudiera ser eliminado. En la misma línea se pronunció el Congreso de Higiene de la Haya (1884) y el Congreso Veterinario de París (1886), todo lo cual decepciona a Martín Salazar que piensa: “…nosotros creemos con Bouley, que todo lo que no sea tomar una medida radical, es correr el riesgo seguro de autorizar el consumo de carnes y vísceras tuberculosas. La medicina veterinaria no puede decir siempre, hasta donde, habiéndose tuberculizado un órgano, puedan estar sanas las vías linfáticas y sanguíneas,…”. Todo ello aún teniendo en cuenta sus ideas, como se expuso anteriormente, del papel jugado por la cocción de los alimentos y de la acción salutífera del jugo gástrico. Debemos apuntar que se han realizado investigaciones muy serias que giran en torno a la tuberculosis bovina como zoonosis en la España Contemporánea (1850-1950), que tie1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados nen en cuenta este asunto también en el “periodo antemicrobiano” (1830-1882), así como a partir del descubrimiento del bacilo de Koch, analizando asimismo el problema de la carne y de la leche como factor de transmisión de la tuberculosis bovina, y la epidemiología de la tuberculosis de origen bovino en la especie humana (Gutiérrez García, 2003). Martín Salazar opina, con respecto a las gallinas, que no son suficientemente inspeccionadas antes de exponerlas en el mercado. Por eso reclama que los poderes públicos deben comprender la utilidad de una “ley de policía veterinaria, que, protegiendo la salud y la vida de los animales que padecen la tuberculosis, al par que favoreciera los intereses de la agricultura, coadyuvara de un modo poderoso á la extinción de uno de los principales orígenes de la tuberculosis humana”. En este apartado quedan dos puntos por aclarar: el régimen alimenticio y el clima más propicios para fortalecer el organismo contra la enfermedad. En la primera cuestión Martín Salazar se decanta por un régimen alimenticio altamente nutritivo: alimentos azoados, carnes, vinos generosos, las grasas y el aceite de hígado de bacalao. Tiene claro que la tuberculosis es una enfermedad de las grandes poblaciones y que se padece muy poco en los campos, gracias a la atmósfera pura. Considera ideales los países montañosos y de cierta altura sobre el nivel del mar para evitar la enfermedad. Los climas cálidos enervan y agotan las fuerzas, y los climas fríos ocasionan fluxiones del aparato respiratorio, por eso considera como más adecuados los climas templados, sin bruscos cambios atmosféricos, como el de Niza, Málaga, Alicante, Murcia, etc. Apunta la hidroterapia y los baños de mar como medios excelentes para fortificar el cuerpo, “por su acción tónica generalmente especialísima”. Señala 60

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a la “gimnástica pulmonar” como un remedio de gran utilidad contra la tuberculosis, ya que hace entrar “en función forzada y tonificar los vértices pulmonares que son los más expuestos á la tuberculización”. Higiene social y la tuberculosis en el Ejército Para Martín Salazar la misión de la Higiene es aconsejar, instruir, civilizar, señalar el peligro, ofrecer el remedio, y respetar la voluntad de los hombres, ya que de ahí nace la libertad “como principio informador de la moderna organización política de los pueblos”. Esta idea la apunta en el contexto que ya hemos comentado del debate sobre la prohibición de los matrimonios entre tuberculosos, considerando que la interferencia de la higiene social en las leyes matrimoniales “sería erróneo y además profundamente inmoral”. El papel de la Higiene social, para Martín Salazar, ya sea en el debate ético que hemos planteado o bien en la lucha contra la enfermedad en el seno de las escuelas, los talleres, los asilos, las cárceles, los conventos, los hospitales o los cuarteles, es de gran importancia porque se trata de evitar el contagio allí donde se produce la aglomeración de los hombres, por eso insiste también en la familia, sobre todo “por la mancomunidad del aire que respira, del alimento que come y de todas las condiciones cósmicas que le rodean, constituye el principal foco de propagación de la tuberculosis”. Dos medios señala el médico sevillano para evitar el contagio: la desinfección y el aislamiento. En la primera cuestión hemos insistido ya en párrafos precedentes, pero conviene apuntar algunos aspectos sobre el “alejamiento de los enfermos”. Vuelve a insistir en la tuberculosis en la familia y en el matrimonio, pero midiendo lo que escribe. Para Martín Salazar es conveniente “aconsejar” a los matrimonios

Cultura de los Cuidados la separación del lecho “cuando se haga tísico alguno de los cónyuges; y en general, á las familias, que coloquen a los enfermos en lugar aislado, y donde nadie respire constantemente la atmósfera infectada por los productos de escreción y secreción de los tísicos”. Pero, inmediatamente, matiza sus palabras: “…entiéndase bien, que al hablar de aislamiento en el interior de la familia, ha de ser mientras resulte compatible con los altos deberes de humanidad, y con el perfecto cuidado y la asidua y cariñosa asistencia de los enfermos. Ni la higiene, ni nadie podrá legislar sobre lo material con menoscabo y hasta con mengua de la moral; que la salud del alma será eternamente preferible á la salud del cuerpo; y que cuando toque morir al lado de nuestros padres y de nuestras esposas y de nuestros hijos, nadie podrá volver la cabeza atrás”. Este párrafo está escrito por un médico que está al corriente de las prescripciones de segregación de, por ejemplo, tuberculosos y sifilíticos, pero que en cambio no se entrega a la idea del radical apartamiento social que preconizan algunos higienistas. Su discurso sobre la enfermedad en el medio familiar, le obliga a matizar el problema de la profilaxis en las escuelas, en los talleres, en los conventos y en las cárceles, aquí sí apunta “la separación de los individuos tísicos, y una escrupulosa ventilación y desinfección de los locales”. Y en lo que se refiere a los hospitales, defiende el ejemplo de la Sanidad militar, reclamando para los hospitales civiles la creación de salas especiales para los tuberculosos, “para que no siga dándose el tristísimo espectáculo de la contaminación de unos enfermos por otros”. Para Martín Salazar no es de recibo que alguien que va a buscar su salud en un hospital por otra causa termine por dejar su vida por causa de la infección tuberculosa. Por todo ello las personas que atiendan en es-

tas salas específicas no deben trabajar en otras dependencias del hospital y las prácticas de desinfección deben llevarse a cabo en los hospitales con todo rigor. Martín Salazar reclama que la moderna Higiene Pública debe abogar por el aire puro, alimentos sanos y abundantes, luz vivificadora, suelos llenos de hermosa y lozana vegetación; habitaciones espaciosas; ciudades modernas, más salubres, con anchas calles, jardines, alamedas, “su sistema de perfecto enmadronamientos, sus aguas puras y potables; y á todo esto, habría que agregar: el problema de la miseria resuelto…”. El médico sevillano escribe párrafos llenos de sentido común y aboga utópicamente por la ilustración y el saber, además de la riqueza y felicidad prodigada a la humanidad entera. Así, y solo así, “veríamos como desaparecía la tisis, que arrastra hoy al sepulcro más de tres millones de habitantes de los más pobres, orgánicamente hablando, que pueblan este planeta en que vivimos”. Un capítulo dedica Martín Salazar a lo que era una de sus grandes preocupaciones en el momento de redactar la monografía: la tuberculosis en el Ejército, ya que la enfermedad es más frecuente en esta institución que en las clases civiles. Maneja cifras precisas de Inglaterra y Francia señalando que el número de muertos e inutilizados por la tisis en estos países asciende a 7,82 por 1.000, siendo en España la estadística muy parecida. El médico sevillano opina que urge reformar el cuadro de exenciones físicas vigente en España, tema que dominaba ya que en el Hospital Militar de Cádiz durante algunos años se dedicó al reconocimiento de los “mozos” que quedaban excluidos de la obligatoriedad de realizar el servicio militar. Y en esto es muy claro: “La tuberculosis en todas sus formas y en todos sus periodos debe eximir del servicio de las armas, y la ley 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados debe expresarlo así, clara y terminantemente. Como enfermedad contagiosa, como enfermedad casi incurable y como enfermedad que recae siempre en organismos de debilidad general muy graduada, debe ser en absoluto causa de inutilidad”. Se trata con esta medida de que los tuberculosos sean enviados a sus casas, donde pueden mejorar y recibir cuidados, y que no permanezcan en los cuarteles y hospitales militares, evitándose así los contagios. Recuérdese que en los congresos antituberculosos celebrados en la España de la Restauración, algunas de las ponencias presentadas defendían la ampliación del cuadro de exenciones a los llamados “pretuberculosos” (tórax estrecho, talla corta y delgadez acentuada) (Molero Mesa, 1987). Unos años más tarde, en 1905, encontramos que Martín Salazar visitó los hospitales militares de Prusia, de Sajonia y de Baviera, y pregunta por las salas de tuberculosos, comprobando, en el hospital de Tempeloff (Berlín), que la clínica de tuberculosis está cerrada y sin un solo enfermo. Y se pregunta lo siguiente: “¿Qué hacen para obtener este sorprendente resultado? Pues muy sencillo: no admitir al ingreso, ni tolerar un momento la existencia dentro del ejército, no ya de los enfermos, sino de los sospechosos, de los simplemente predispuestos á contraer la tuberculosis”. Ante este hecho considera que países como Alemania han progresado más que España en la higiene de sus ejércitos, disminuyendo cada vez más y de un modo notable sus cifras de morbilidad y de mortalidad (Martín de Salazar, 1905). En su monografía, publicada en 1887, centra también sus críticas en el estado de los cuarteles en España que, según su opinión, no son para reformarlos sino para abandonarlos, ya que estos edificios enormes, largos, profundos, de escaleras y corredores sombríos, mal 62

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ventilados, albergan unos 2.000 hombres bajo el mismo techo. Los cuarteles deben construirse fuera de las ciudades, vertebrándolos en 20 pabellones aislados unos de otros; este tipo de reformas ha llevado a Austria y a Alemania a reducir notablemente la tuberculosis. El ejercicio físico, la reducción del tiempo de servicio militar y la alimentación del soldado son elementos a tener muy en cuenta para luchar contra la tuberculosis en el Ejército. En lo que se refiere a la alimentación, Martín Salazar apunta que las tropas españolas reciben pocas “sustancias azoadas”. La carne en cantidad suficiente, el vino y el café deben ser de uso ordinario en la alimentación de los soldados, así como el abrigo para evitar los enfriamientos. Construcción, pues, de hospitales y cuarteles ya que España pierde “capital humano por falta de higiene en el ejército”. Martín Salazar recuerda en 1887 que el ejército español es de los más diezmados del mundo por la tuberculosis y por las enfermedades en general, y así lo seguiría siendo en los años siguientes; un ejemplo claro lo constituye la campaña militar cubana, tan solo en el año 1896 la tuberculosis, la fiebre amarilla, el paludismo, la fiebre tifoidea y la disentería causaron una extraordinaria morbilidad y mortalidad, muy superiores al del número de heridos en acciones bélicas (Rico-Avello, 1969). Se entiende, pues, que Martín Salazar incluya como corolario final de su monografía sobre la tuberculosis un capítulo con propuestas de reformas para la mejora de la vida diaria del soldado en los cuarteles y en los hospitales militares. EPÍLOGO En la España de la Restauración, según ha apuntado Molero Mesa (1987), destacaron los estudios sobre la tuberculosis de Federico Gu-

Cultura de los Cuidados tiérrez Jiménez (1875), León Corral y Maestro (1884) José Moreno Fernández (1889), Francisco Moliner y Nicolás (1896), José Verdes Montenegro (1902), Vicente Guerra Cortés (1903), Bernabé Malo de Póveda (1908), Vicente Álvarez (1912), (1914), José Chabás (1914), José Codina Castellví (1920), etc. Sin olvidarnos de la importante labor divulgadora y clínica dentro del campo de la tisiología realizada por Antonio Espina y Capo (1850-1930). Y no olvidemos los impresionantes estudios realizados por Philiph Hauser (1832-1925), pionero de la encuesta sanitaria, y autor de obras sociosanitarias sobre Sevilla y Madrid, preocupándose también entre otras cuestiones sobre el pauperismo en Andalucía (1884), la casa y el suelo en relación con las enfermedades (1885) o la defensa social de la tuberculosis (1898) (Del Moral, 1979; Hauser, 1979, 1990; Carrillo, 1996; Rodríguez Ocaña, 1996; Porras Gallo, 1996). Se ha señalado a la tuberculosis como el prototipo de la enfermedad social infectocontagiosa crónica; en España, por ejemplo, las tasas de mortalidad específica señalan 200 defunciones por cien mil habitantes para el periodo que abarca de 1860 a 1900, y para este último año la cifra apunta 200,6. Igualmente se ha apuntado que la tuberculosis es una de las enfermedades más claramente asociada a la pobreza, destacando entre las investigaciones que pusieron de relieve la acusada desigualdad de su distribución por clases sociales las realizadas por Vicente Guerra Cortés en su trabajo “La tuberculosis del proletariado en Madrid” (1904) (López Piñero, 1990). Este texto de Martín Salazar publicado en Cádiz, en 1887, es una notable reflexión sobre los conocimientos científicos, epidemiológicos y sociales de la tuberculosis en la España de la Restauración, y no deben ser desatendidas sus

apreciaciones porque permiten comprender la situación social y el debate científico generado sobre esta enfermedad en su época, abordando la prevención de la misma desde la perspectiva del descubrimiento bacteriológico de Robert Koch (cf. al respecto a Coury, 1972; Báguena Cervellera, 1992); hecho que generó debate sobre la etiología de la enfermedad, con partidarios y detractores, tan solo cabe recordar en este sentido la reacción de Rudolf Virchow ante las investigaciones de Koch (Lederman, 2003). De igual manera, como hemos podido comprobar, el médico sevillano se esmera con meticulosidad en el debate sobre el contagio de la enfermedad, cuestiones que entre otras han sido estudiadas en sus trabajos por Molero Mesa (1987; 1989; 1990), así como también cabe significar los problemas de la “habitación”, la arquitectura y la salud pública en el periodo señalado (Bernabeu Mestre, 2009; Huertas, 2002). Sin olvidar el tema del control de la calidad de la alimentación, cuestión que en relación al “Urban Penalty” han estudiado recientemente Guillem Llobat y Perdiguero Gil (2014). Téngase en cuenta que en 1882, año del descubrimiento del bacilo de Koch, en el IV Congreso Internacional de Higiene, en Ginebra, se definió a la tuberculosis como una enfermedad contagiosa y que en 1888, en París, se celebró el primero de la serie de los congresos internacionales sobre la tuberculosis, de los cuales emanaron una serie de medidas profilácticas, señal de la gran preocupación que generaba la enfermedad, ya que se ha llegado a apuntar que en la Europa anterior al descubrimiento de Robert Koch una de cada siete muertes se debía a la tuberculosis (Villanueva Edo, 1988). Y siguió preocupando en los años siguientes, tan solo hay que recordar que el médico de la Armada, Ángel Fernández-Caro, en 1912, en 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados el Congreso dedicado a la tuberculosis en San Sebastián, también se mostró pesimista al afirmar que “…hoy la tuberculosis produce tantas víctimas como producía hace cincuenta años, y es de temer que siga produciéndolas…” (Herrera, 2002). Y no se equivocó en su apreciación Fernández-Caro, ya que la Organización Mundial de la Salud estima que en 2014 en el mundo se produjeron 9,6 millones de enfermos y 1,5 millones de muertes por tuberculosis, y en el mismo año en España se notificaron 5.018 casos, lo que corresponde a una tasa de incidencia de 10,8 casos por cien mil habitantes (Centro Nacional de Epidemiología, Instituto de Salud Carlos III, 2015), aunque también se debe tener en cuenta que en 1997 en España la incidencia era de 60 nuevos casos por cien mil habitantes, relacionándose este hecho con la inmigración (Carceller y Lebel, 2005). Martín Salazar, en los años posteriores a la publicación de su monografía sobre la tuberculosis, siguió insistiendo en el gran problema que suponía esta enfermedad en nuestro país, sin ir más lejos en su discurso “La Sanidad en España”, publicado en 1913 (BFM-UCM), denunció la alta mortalidad por tuberculosis en el primer quinquenio del siglo XX en Oviedo, Cádiz (6,39 por mil habitantes), Huelva, Sevilla, San Sebastián (Herrera, 1997, 2007). Se ha señalado, por ejemplo, que en la población bilbaína, entre 1878 y 1885, entre el 5,1% y el 6,6% de las defunciones fueron ocasionadas por la tuberculosis, siendo atribuidas estas cifras tan altas a la mayor afluencia de inmigrantes en Vizcaya (Villanueva Edo, 1988; Urkia Etxabe, 1992), también se ha estudiado la incidencia de la lucha antituberculosa en la mortalidad de la población valenciana (1882-1914) y en el primer tercio del siglo XX (Báguena Cervellera, 1991; Barona, 2007), así como la evolución de la mortalidad en Madrid en el 64

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periodo 1883-1925 (Porras Gallo, 1996), y recientemente se ha comprobado las altas cifras de mortalidad ocasionadas por la tuberculosis en Cádiz en los primeros años del siglo XX (Rodríguez Aguado, 2015). Incluso se ha señalado que la imagen de Sevilla sufrió un proceso de deterioro, en la segunda mitad del siglo XIX, “hasta el punto de considerársela como una ciudad altamente peligrosa para vivir”, teniendo mucho que ver en esto el aumento de las enfermedades infecciosas (Carrillo, 1998), cuestión que cuenta con un estudio específico de la mortalidad en Sevilla durante la Restauración (1875-1924) (Bernal-Borrego, 1994). En octubre de 1901, se publicó en la Gaceta de Madrid, una Circular, firmada por Ángel Pulido, en la que se afirma que la tuberculosis “no se hereda, sino en casos excepcionalísimos”, pero “solamente en Madrid causa anualmente más de 2.000 víctimas, y en España pasan de 30 a 40.000” (Molero Mesa, 1987). Se debe tener en cuenta que Manuel Martín Salazar fue un higienista importante en la Sanidad militar, pero también que durante el reinado de Alfonso XIII se convirtió en figura crucial en lo que concierne a la Sanidad española (Salas Fernández, 1998). En el citado discurso del médico sevillano sobre “La Sanidad en España” (1913), escrito un cuarto de siglo después de la monografía sobre la tuberculosis que estudiamos en este artículo (1887), encontramos que Martín Salazar señala, como otros muchos sanitaristas en España, el atraso de la administración y por tanto la necesidad de una regeneración sanitaria (Rodríguez Ocaña, 1994). Recordemos, para terminar, algunos datos que corroboran la constante presencia e influencia del médico sevillano en la Sanidad militar y civil en España. En el curso 1898-1899 comenzó a impartir la asignatura de Higiene

Cultura de los Cuidados Militar en la Academia Médico-Militar, labor que llevó a cabo hasta 1907. En el seno del Ejército español fue comisionado en noviembre de 1901 para realizar el análisis bacteriológico de las aguas que abastecían la ciudad de Zaragoza y a partir de 1906, fecha que coincide con la del Premio Nobel otorgado a Santiago Ramón y Cajal, comenzó a dirigir la Revista de Sanidad Militar. En 1907 publicó su obra “Inmunidad con aplicación a la higiene y terapéutica de las enfermedades infecciosas”, y siguió escribiendo sobre la tuberculosis en 1908 y en 1912, incluso en 1927 lo hizo en torno a la doctrina de Ferrán sobre esta enfermedad y su “vacuna antialfa” (Salas Fernández, 1998). No olvidemos que en 1909 fue nombrado, dentro del contexto de la Sanidad civil, Inspector general de Sanidad Exterior, poniendo en marcha un Boletín de Estadística demográfico sanitario, y que en 1916 fue nombrado Inspector general de Sanidad del Reino, dimitiendo de la Dirección general de Sanidad en noviembre de 1923. Más de catorce años, pues, rigiendo los destinos de la Sanidad española; encontrándose en esos años con la mortífera epidemia gripal de 1918, preocupándose por la fiebre tifoidea, el tifus exantemático, el tracoma, la poliomielitis y, por supuesto, entre otras muchas enfermedades por la lucha antituberculosa. Asimismo, en el seno de la Real Academia Nacional de Medicina presidió la sección de Higiene. Como hemos tenido ocasión de comprobar, Manuel Martín Salazar, estuvo destinado en Cádiz como médico militar en la década de los ochenta del siglo XIX. En este contexto, el médico de Montellano (Sevilla), publicó en Cádiz una extensa monografía de más de ochenta páginas que resume los avances científicos y médicos de la época, pero sobre todo la influencia del descubrimiento del bacilo de

la tuberculosis (1882), hecho que consideraba determinante para plantear la “higiene de la tisis” partiendo de la doctrina parasitaria del médico alemán Robert Koch. Estando en Cádiz, pues, entabló relación con Benito Alcina Rancé, figura emergente en la década de los ochenta en la cátedra de Higiene Privada y Pública de la Facultad de Medicina, prologándole éste su monografía. Asimismo hemos tenido en cuenta en el análisis de la monografía de Martín Salazar, la tesis doctoral impresa en Cádiz y defendida en Madrid de Juan Luis Höhr Rodríguez (1888) (Herrera, 2009) y la monografía también impresa en Cádiz de Joaquín Portela González (1889) (B-FHR). Nos ha llamado la atención, como ha quedado escrito en párrafos precedentes, que Benito Alcina, en esos años ochenta denunciaba la carencia de estadísticas sanitarias fiables en nuestro país, así como que la dirección de la Sanidad en España estuviera en manos de políticos que no entendían de los aspectos técnicos de la cuestión. Al cabo del tiempo, a partir de 1909 y hasta el año 1923, ese joven médico militar, llamado Martín Salazar, que le pidió un prólogo a Benito Alcina en 1887, fue una figura importante de la Sanidad en España. Pero encontramos otra vinculación de Martín Salazar con Cádiz: prologó, en 1917, al médico cántabro Leonardo Rodrigo Lavín (1867-1950), Inspector provincial de Sanidad, la “Monografía relativa al abastecimiento de aguas de Cádiz, San Fernando, Puerto Real y Puerto de Santa María”; pero este capítulo lo hemos estudiado en otro lugar, significando además que Rodrigo Lavín llegó a ser nombrado Subinspector General de Sanidad Interior en 1920, cuando todavía estaba al frente de la Sanidad española Manuel Martín Salazar (Herrera, 2007). Y, por último, otro hecho que lo vincula con Cádiz: la Junta de Gobierno de la 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Real Academia Hispano Americana de Ciencias y Artes de esta ciudad, lo admitió como Académico de Mérito en abril de 1923, siendo director de esta institución Pelayo Quintero (Salas Fernández, 1998). Gregorio Marañón, en 1927, no dudó en calificar a Manuel Martín Salazar como “un epidemiólogo modernísimo, lleno de ideas y sugestiones; pero sedimentadas, distribuidas, cocidas en el horno de una mente toda claridad” (Salas Fernández, 1998). Palabras que en absoluto pueden ser consideradas excesivas si se analiza el conjunto de su obra como higienista e incluso esta temprana monografía escrita en Cádiz a la edad de 33 años, cuando todavía le quedaba mucho camino por recorrer. FUENTES Y BIBLIOGRAFÍA Fuentes - Alcina Rancé, B. (1887). Prólogo En Martín de Salazar, Higiene de la tisis con arreglo a la nueva doctrina parasitoria (pp. 7-12). Cádiz: Imprenta y Litografía de la Revista Médica (Fondo antiguo de la Biblioteca de Ciencias de la Salud UCA, BCS-UCA). - Expediente de doctorado de Juan Luis Höhr Rodríguez. Legajo 1482 (4)-Expediente nº 53 (Archivo Histórico Nacional. Madrid) (AHN). - Expediente de Manuel Martín Salazar (Cuerpo de Sanidad Militar). Legajo M-1197 (Archivo General Militar de Segovia) (AGMS).

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Cultura de los Cuidados

La prensa profesional como fuente de información historiográfica en la Historia de la Enfermería

The professional press as a source of historiographical information on the History of Nursing A imprensa profissional como uma fonte de informação historiográfica sobre a História da Enfermagem Antonio Jesús Marín Paz Diplomado en Enfermería. Máster Universitario en Innovación e Investigación en Cuidados de Salud. Cómo citar este artículo en edición digital: Marín Paz, A.J. (2017). La prensa profesional como fuente de información historiográfica en la Historia de la Enfermería. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.07 Correspondencia: C/ Arquitecto Torcuato Cayón nº1 2ºA. 11100. San Fernando (Cádiz). Correo electrónico: [email protected] Recibido: 28/04/2016; Aceptado: 10/09/2016

by the precepts of Jaques Kayser and its contents by themes through heuristic, hermeneutic and historical methods in the interpretation of texts. Keywords: Nurses, midwives, ministrantes, practicantes, press.

ABSTRACT The nurse and previous auxiliary professions press, is a valuable source for the study of evolution developed and its interrelationship between different health disciplines. Knowing and studying serials publications in this sector allow us to approach reality and professional identity, educational and current which hit. In this article is proposed a metodological guide for finding this kind of source of historiographical information and a model for the historical study of the nurse professional press based on the latest developments in the historiographical methodology; supported on separate analysis of the structure of the press

RESUMO A imprensa profissional enfermeiro e suas profissões antecedentes de saúde é uma fonte valiosa para o estudo da evolução que desenvolveu e sua inter-relação entre as diferentes disciplinas da saúde. Conhecer e estudar folhetins nesse setor nos permite abordar a realidade e identidade profissional, educacional e tópica que atingiu. Neste artigo tenciona um guia metodológico para encontrar este tipo de fonte de informação historiográfica e um modelo para o estudo histórico da imprensa profissional enfermeiro com base nos mais recentes desenvolvimentos na metodologia historiográfica; suportado pela análise separada da estructura da imprensa os preceitos de Jaques Kayser e seu conteúdo por temas através de heurística, 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados hermenêutica e método histórico na interpretação de textos. Palavras Chave: Enfermeiros, Parteiras, Minitrantes, Practicantes, Imprensa. RESUMEN La prensa profesional enfermera y de sus antecedentes profesiones auxiliares, constituye una fuente valiosa para el estudio de la evolución que desarrollaron y su interrelación entre las diferentes disciplinas sanitarias. Conocer y estudiar las publicaciones seriadas de este sector nos permite acercarnos a la realidad e identidad profesional, formativa y de actualidad por la que atravesaban. En el presente artículo se propone una guía metodológica para la búsqueda de este tipo de fuente de información historiográfica y un modelo para el estudio histórico de la prensa profesional enfermera basado a los últimos avances en la metodología historiográfica; apoyado en el análisis por separado de la estructura de la prensa mediante los preceptos de Jaques Kayser y de su contenido por ejes temáticos a través los métodos heurístico, hermenéutico e histórico en la interpretación de textos. Palabras clave: Enfermeras, matronas, ministrantes, practicantes, prensa.

INTRODUCCIÓN La Historia de la Enfermería se encuentra en un periodo de auge desde la incorporación de la titulación a la Universidad. A través de este factor, hemos comprobado una evolución en los últimos 35 años, tanto en la temática como los contenidos metodológicos realizados por tantos investigadores de la enfermería (Hernández Martín, 2008). En la actualidad, el historiador tiene a su disposición un elevado número de fuentes de 70

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información historiográfica de diversa índole, desde los tradicionales archivos históricos hasta las entrevistas en el ámbito de la historia oral. Así, pues, el investigador puede realizar una selección de sus fuentes en función de su fiabilidad y adecuación a la problemática seleccionada a resolver (Siles González, 2011). La prensa constituye una fuente de información historiográfica de indudable valor en la Historia Contemporánea (Barrera del Barrio, 2000), aportando una mayor cantidad de información escrita que otras, además de los múltiples periódicos y revistas que coexistieron en los mismos años y que diferían en sus posturas políticas e ideológicas; desde las favorables al gobierno hasta las minorías o clases sociales menos pudientes (Tuñón de Lara, 2009). No podemos olvidar el hecho de que suele constar de información relevante y variada en función de la época que se esté consultando. Por ejemplo, hay que tener muy presente que la prensa durante la Dictadura de Primo de Rivera era revisada y validada por el comité de censura. Así, pues, información e ideología suelen ser características interrelacionadas que es preciso discernir en cualquier prensa. En las secciones de opinión, a falta de poder recoger fuentes orales debido a su lejanía en el tiempo, se puede observar el punto de vista y la mentalidad de las personas que escribieron, pudiendo abarcar desde una persona célebre hasta personas o profesionales poco conocidos (Valle Racero, 2000). La prensa puede clasificarse en función del público al que se dirija. En nuestro caso, es destacable la división en prensa general y prensa profesional. La prensa general engloba todo tipo de temáticas y diferentes formatos; por ello suelen tener una periodicidad corta (en muchos casos, son diarios). Ello conforma un tipo de fuente de información historiográ-

Cultura de los Cuidados fica valiosa para el estudio de la sociedad de los años estudiados y se desprende que a partir de ella podríamos conocer la visión que tiene la sociedad con respecto a la sanidad (Heierle Valero, 2009); y más específicamente, a las ramas sanitarias auxiliares y de enfermería en función de la época (Rodríguez García, 1994) (Herrera Rodríguez, 2008). Dada la gran cantidad de información, la ardua tarea de recopilar noticias y artículos de opinión sobre la profesión requiere invertir mucho tiempo y paciencia, pero tiene la compensación de que este tipo de prensa nos ofrece una visión diferente de los profesionales y de la población a la que atendían. Aunque normalmente dedican mayor información a las figuras médicas notables, en ocasiones encontramos apuntes sobre practicantes, matronas y enfermeras; ya sea sobre sus laborales asistenciales, colegiales o incluso de organización y convocatorias de enseñanza de sus respectivas carreras (Lasarte Calderay, 2000). En cambio, la prensa profesional enfermera (haciéndose extensible a la prensa profesional española de los ministrantes, practicantes, matronas y A.T.S.), editada por y para los profesionales, presenta temáticas específicas de la profesión y del entorno en el que se desenvuelven. Su periodicidad es mayor (con frecuencia quincenal, mensual, trimestral o semestral) y contiene información de primer orden para identificar la evolución de la identidad y memoria profesional enfermera de los últimos siglos (Bernabeu Mestre y Gascón Pérez, 1995); además de conocer la posición de la profesión en la sociedad, desde el ámbito local hasta el internacional (Herrera Rodríguez, 1995) (Siles González, 2004). A diferencia de la prensa general, el escaso número de ejemplares puede provocar vacíos temporales y de contenido en nuestro estudio (máxime si se carece de la se-

rie completa de la prensa consultada, por esto aparte de los archivos y bibliotecas, que posteriormente comentaremos, hay que tener muy presente la localización de números de estas revistas en archivos particulares). Por lo tanto, nuestro objetivo es presentar una guía metodológica y un modelo para el estudio de la prensa histórica profesional enfermera, así como sus diversas aplicaciones para la mejora del conocimiento en la Historia de la Enfermería desde mediados del siglo XIX. DESARROLLO DEL TEMA Una guía metodológica para el estudio de la prensa profesional. Como toda investigación basada en el método heurístico, el primer paso imprescindible es la delimitación de nuestro campo de estudio a través del conocimiento del estado actual del tema. No sólo hay que conocer la estructura histórica profesional, también es imprescindible conocer y relacionar la situación histórica en el que se desenvuelven, de tal manera que podamos explicar los factores que intervienen, acercándonos a su vez, a la historia total que en su día reivindicaron Lucien Febvre y Marc Bloch (Itayra Padilla, Borenstein y Guedes, 2007). Una vez realizada la revisión bibliográfica, es posible que nos preguntemos ciertos aspectos relacionados con la prensa profesional o bien detectemos vacíos temporales y de contenido que se podrían abordar (Santo Tomás Pérez, 2006). Dependiendo de la cuestión que queramos tratar, seleccionaremos el estudio de prensa general o prensa profesional enfermera específica: o ambas si es necesario. La localización de fuentes es variable. Por un lado, afortunadamente se conservan numerosos ejemplares de las revistas más recientes, mientras que por otro, a medida que retrocedamos en el tiempo, será más difícil encontrar 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados la totalidad de ejemplares de la prensa que queramos investigar. Debemos tomar nota en que se trata de un tipo de producción periodística que ha sido poco valorada hasta su incipiente estudio hace pocas décadas (Herrera Rodríguez y Lasarte Calderay, 1996). Tampoco debemos desdeñar la labor de consulta de catálogos bibliográficos y estudios bibliométricos para tener constancia de la existencia de una determinada publicación (Martínez Sánchez, 1901) (López Piñero y López Terrada, 1991) (Álvarez Nebreda, 2010). Actualmente, la prensa, ya sea general o profesional, se pueden encontrar en los siguientes emplazamientos en España, pero en algunos casos son extensibles a otros países: • Biblioteca Nacional de España (Madrid). La biblioteca más importante del país, posee un extenso catálogo de prensa general y profesional enfermera en su sección de “Prensa y revistas”. Disponen de ejemplares físicos y microfilmados, aunque actualmente existen restricciones para el acceso a las publicaciones anteriores a 1958 (dependiendo del carné que posea el usuario). • Colegios Oficiales de Enfermería. Sin duda, los Colegios de Enfermería, motor de la profesión durante muchos años, suelen disponer de la mayoría de los ejemplares de las revistas provinciales. Especialmente relevante es el caso del Colegio Oficial de Enfermería de Madrid (CODEM) y su prolífica hemeroteca, con más de 50 publicaciones diferentes de prensa profesional enfermera. Hay que destacar que esta institución está haciendo un esfuerzo digitalizando libros y revistas para su disponibilidad en la red, entre los cuales, podemos mencionar la revista Medicina y Cirugía Auxiliar (1941-1978). • Bibliotecas de las universidades. La prensa histórica profesional enfermera, en especial 72

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del ámbito provincial, pueden encontrarse en los diferentes depósitos de las bibliotecas de las universidades, como es el ejemplo de la Universidad de Zaragoza con la revista El Practicante (1885). El principal inconveniente estriba en su acceso: es de relativa facilidad para docentes y alumnos de la propia Universidad y más dificultoso en caso de un investigador externo. Debemos subrayar el caso de la Biblioteca de Ciencias de la Salud (Universidad de Cádiz) que custodia la donación por José Eduardo Lasarte Calderay de varios centenares de números fotocopiados de las siguientes revistas: El Practicante Gaditano (1916-1939), El Practicante Sevillano (1923-1936), La Federación Sanitaria (1925-1928), El Auxiliar Médico de Córdoba (1935-1936) y El Practicante Almeriense (1919-1936). • Instituciones docentes privadas o religiosas. Buena parte de la profesión enfermera ha ido ligada a través del tiempo con instituciones de carácter privado o religioso, por lo que en ocasiones estos centros conservan determinadas revistas específicas de enfermería. La institución Salus Infirmorum es un ejemplo de ello con la revista ¡Firmes! (1953-1965). • Bibliotecas públicas y hemerotecas. En estos centros podremos encontrar en su catálogo, revistas de carácter provincial. Especialmente importante este aspecto, porque a menudo conservan los únicos ejemplares que puedan existir de determinadas revistas. En general, estas instituciones tienen gran variedad de prensa general accesible al público. Podemos citar algunos ejemplos como la Biblioteca Pública Provincial de Cádiz y la Hemeroteca Municipal de Madrid. • Biblioteca Virtual de Prensa Histórica. En este portal disponible a través de la red informática mundial, podemos encontrar ejemplares de varias revistas de practicantes

Cultura de los Cuidados debidamente digitalizadas para su consulta. ello). Afortunadamente, a partir de la publicaUn ejemplo de ello es El Practicante Español ción de la Ley 11/2007, de 22 de junio, dedica(1899). da al acceso electrónico de los ciudadanos a los • Archivos históricos. En ocasiones, los Servicios Públicos, poco a poco las diferentes diferentes archivos históricos del país pueden bibliotecas, hemerotecas y archivos históricos disponer de prensa histórica, principalmente se encuentran en un proceso de digitalización de carácter local, aunque es posible encontrar de la prensa en consonancia con los presuen sus cajas algún ejemplar de prensa profepuestos que disponen, no sólo para favorecer sional enfermera si contiene información resu acceso (ya sea en el propio centro o a través levante de la población donde se emplace el de bibliotecas virtuales, tanto nacionales como archivo histórico. internacionales), sino también para la conser• Archivos particulares o privados. Detervación de la prensa física custodiada. En la minadas personas por diferentes motivos (coactualidad podemos encontrar una serie de dileccionismo, herencias, interés en la temátificultades en el acceso de determinadas prensa ca..., etc) pueden poseer ejemplares de revistas profesional enfermera, que aún sigue sin ser enfermeras en sus respectivos hogares y que digitalizada, como es el caso de las diferentes tienen predisposición a ceder temporalmente revistas históricas de la Cruz Roja. sus archivos para su estudio. Podemos citar la A modo de ejemplo, en el estudio realizabiblioteca particular de Luis García Jiménez y do se puede adjuntar una tabla sencilla con los su colección de ejemplares de El Practicante números consultados, para que cualquier lector Gaditano del periodo 1930 a 1934. que necesite conocer o estudiar el tema, sepa Debemos considerar otro aspecto: el soen todo momento los contenidos que han sido porte en el que se encuentren dichas fuentes. sometidos a juicio crítico por parte del investiPor regla general, se encuentran en formato fígador. En las filas podemos emplazar los años, sico y a veces no se permite la consulta debido en las columnas los meses (o bien numerados) a su precario estado de conservación. Como y, por último, en las restantes celdas, insertar los consecuencia de los avances de la tecnología números consultados en función de su fecha óptica en las últimas décadas, es posible que se (un color para cada revista si se han consultado dispongan de ejemplares microfilmados o en varias; y en caso de ser una revista con una nomicrofichas, por lo que se da la oportunidad menclatura de volúmenes, numerar el volumen al investigador de poder realizar una copia diy entre paréntesis insertar el número; en consogital (si disponen de soporte informático para nancia con el estilo APA). (Tablas 1 y 2). número; en consonancia con el estilo APA). (Tablas 1 y 2). Tabla 1. Ejemplares de “El Practicante Valenciano” en el CODEM.

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Tabla 2. Ejemplares de “Caridad, Ciencia y Arte: Boletín las enfermeras y A.T.S. de España” de laXXI 1ª época 1erdeCuatrimestre 2017 • Año - N.° 47 (1963-1971) y de la 2ª época (1972-1977) en el CODEM.

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Fuente: CODEM (2013).

Tabla 2. Ejemplares de “Caridad, Ciencia y Arte: Boletín de las enfermeras y A.T.S. de España” de la 1ª época (1963-1971) y de la 2ª época (1972-1977) en el CODEM.

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hacer es realizar una lectura inicial para famiEn función de las preguntas que nos forliarizarnos con la prensa consultada y tomanmulemos, debemos abordar la prensa de do debemos nota de los principales temas una manera u otra. Si nuestra intención es En función de las preguntas que nos formulemos, abordar la prensa de que una se tratan junto con los diferentes colaboradores printratar un determinado acontecimiento de la manera u otra. Si nuestra intención es tratar un determinado acontecimiento de la profesión, lo cipales. Explicaremos a continuación cómo profesión, lo más factible sería consultar dipodría realizarse desde nuestro punto de vista ferentes periodísticas, general más fuentes factible sería consultar tanto diferentes fuentes periodísticas, tanto general como prensa un estudio de una determinada prensa profecomo prensa profesional, de la época a tratar sional enfermera, basándonos en el método (Rodríguez García, 1994). En este sentido dehistórico en la interpretación de textos (Siles bemos consultar una extensa bibliografía de González, 2001b). apoyo como contraste para la información que analicemos. Un modelo para el estudio de la prensa hisSi nuestro objetivo está orientado a seguir tórica profesional enfermera. la evolución de una determinada publicación a Una vez localizada la documentación se lo largo del tiempo para establecer relaciones debe proceder, además del método citado precon otras o bien analizar exhaustivamente una viamente, de acuerdo a las normas marcadas sección en concreto, deberíamos realizar una por autores como Sánchez Granjel (1967), Ferecopilación de todos los ejemplares que estén bvre (1974), Pierre Salmon (1978), David Rodisponibles de una determinada publicación. mano (1983), Tuñón de Lara (1985), Thuillier Independientemente de la estrategia que y Tullard (1989) o Aróstegui (1995). hayamos escogido, lo primero que debemos 74

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Cultura de los Cuidados Comenzaremos a revisar concienzudamente cada número. Cada revista, dependiendo de la época, puede variar en forma y contenido, aunque siempre podremos apreciar una serie de aspectos análogos. (Figura 1)

Lo primero que debemos observar es la portada, ya que a medida que nos acercamos al tiempo presente, la imagen de portada podría variar en cada número, constituyendo una fuente iconográfica valiosa de estudio propio si lo requiriese. La revisión del título, lema y Figura 1. Temáticas para el estudio e interpretación de el equipo de redacción pueden cambiar con revistas (ministrantes, practicantes, matroel paso de los años y, por ello, conllevar a un Figura profesionales 1. Temáticas para el estudio e interpretación de revistas profesionales (ministrantes, practicantes, matronas y enfermeras). nas y enfermeras). cambio en la mentalidad y en los objetivos del periódico o de la revista. Conocer la tirada y, por ende saber el número exacto de ejemplares que se distribuían a los profesionales en la época estudiada, puede hacernos una idea de la extensión y de la importancia que tuvo una determinada publicación seriada. Es muy importante para la memoria histórica de los profesionales sanitarios el dar a conocer en nuestro estudio, los nombres y apellidos de tanto del equipo de redacción como Fuente: Elaboración propia (2014). Fuente: Elaboración propia (2014). el de los principales colaboradores. Es una 3.1. Estudio de la estructura: realidad comprobar que estamos más familiaEsla importante que el conocedor de la prensa rizados con los nombres y apellidos de otras 3.1. Estudio de estructura: profesional siga las normas marcadas por JacEs importante que el conocedor de la prensa profesional siga las normas marcadas porprofesiones del pasado que de nuestros proqueshaceKayser de medio por Jacques Kayser ya más dehace medio ya siglo;más por ejemplo, en lo quesiglo; se refiere al “registro depios profesionales (ya sean ministrantes, pracejemplo, en lo que se refiere al “registro de identicantes, matronas, A.T.S. o enfermeras; como identificación” del periódico o revista. (Tabla 3). tificación” del periódico o revista. (Tabla 3). ya comentamos anteriormente). Generalmente las revistas enfermeras se Tabla 3. Principales aspectos de estructura a recoger en encuentran divididas en diferentes secciones, Tabla 3. Principales aspectos de estructura a recoger en un estudio de prensa. un estudio de prensa. que pueden variar de una publicación a otra. Especialmente relevante son las secciones liteREGISTRO DE IDENTIFICACIÓN rarias, en las que podemos encontrar narracioNombre del periódico o revista (anotar los cambios en la denominación y las nes y poesías. Las fotos y figuras que aparecen respectivas fechas). pueden ser objeto de estudios iconográficos al Lugar de la residencia de la Administración y de la redacción, consignando igual que las portadas, principalmente en lo igualmente si se producen cambios. referente a retratos de profesionales, eventos Las indicaciones que se puede acompañar al nombre. o problemas históricos de mayor complejidad, La periodicidad. como es el caso de las noticias y fotografías de El momento de la aparición. Zona principal de difusión. El Practicante Gaditano sobre la huelga de saEjemplares que compone cada tirada. Fecha del primer y último número. nitarios liderada por Fermín Aranda en 1919 Precio. en la ciudad de Jerez de la Frontera (Herrera Formato. Número de páginas. Rodríguez y Cabrera Afonso, 2001). Nombre y dirección del impresor. Lugar y conservación de las colecciones. Fuente: Kayser, J. (1966).

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Cultura de los Cuidados La prensa es destinada al consumo público, ya sea para la población general como para un reducido sector, y como tal, se vale, además del pago de los lectores (mediante pago directo o bien por suscripción), de la publicidad como método de financiación (García Hernández y Gálvez Toro, 2002a). Recuérdese que el establecimiento tipográfico (o imprenta) suele ser independiente de la redacción, además de que se necesitan vías de ingreso para los salarios del equipo de redacción. La publicidad puede ser de tipo general (establecimientos, servicios..., etc) y específica para la profesión (cursos, productos farmacéuticos..., etc). 3.2. Estudio del contenido: La corriente ideológica de una publicación seriada obedece en muchos casos al contexto histórico en el que se desenvuelve: la prensa profesional enfermera no es una excepción. Sin embargo, presenta una serie de diferencias con respecto a la prensa generalista, recordando en todo momento los preceptos señalados por Jaques Kayser. El estudio del contenido debe basarse en una lectura concienzuda y pormenorizada, basada en el método heurístico, como hemos indicado anteriormente. A través de la hermenéutica, se pretende establecer una base racional de las corrientes intelectuales en la que se engloban dichas fuentes de información historiográfica. El procedimiento requiere de un análisis documental en niveles de profundidad, desglosando cada idea aportada en el texto para establecer un esquema que nos permita averiguar las estructuras mentales y los condicionantes que influyeron en el proceso de escritura; y comprender el significado de las acciones humanas en la exposición del acontecimiento histórico (Aróstegui Sánchez, 1995). Por otra parte, la escritura de nuestro estudio 76

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debe alejarse del carácter positivista (basado en la historia-relato, reduciendo al historiador como mero consignador de datos sin crítica de los hechos) y acercarse a las nuevas tendencias de la historiografía (Hernández Sandoica, 2004) (Moral de Calatrava y Hernández Conesa, 2007). Con todo ello se podría conseguir un análisis del texto y una escritura crítica acorde al período estudiado. A tenor de nuestra experiencia al estudiar las diferentes publicaciones, podemos distinguir cuatro ejes importantes de estudio referente a su contenido: Eje I: asociacionismo, identidad profesional, luchas con otros sectores de la misma profesión u otros profesionales sanitarios y las condiciones laborales. Este tema es tratado desde las primeras publicaciones hasta la actualidad. A menudo los ministrantes y practicantes denunciaban el intrusismo de las enfermeras, principalmente a partir del auge de la formación de las enfermeras en la Escuela de Enfermeras Santa Isabel de Hungría (Lasarte Calderay, 1993) (Rodríguez García, 1994) (Calvo Calvo, 2014). Las matronas a su vez acusaban a los practicantes de ejercer en partos en poblaciones pequeñas en las primeras décadas del siglo XX (García Martínez y Espina Gutiérrez, 1998-1999). El intrusismo va evolucionando con el tiempo y la enfermería también miraba con recelo a otras ramas sanitarias, como es el caso de la década de 1950 con otras profesiones auxiliares sanitarias respecto a la luchas sociales y sus competencias (Córdoba Mariscal, 1994). Para este punto, es importante establecer quiénes son los profesionales implicados, la situación legislativa de la época estudiada y, por supuesto, la valoración de las distintas opiniones de las diferentes facciones.

Cultura de los Cuidados Otro tema importante a tratar en este apartado son las condiciones laborales de la profesión: no es lo mismo el trabajo de un practicante o matrona en el ámbito rural que la pertenencia al Cuerpo de Beneficencia de una capital de provincia a principios del siglo XX. A su vez, desde la propia Sociedad de Ministrantes, el tema recurrente de la protección social a través de seguros y montepíos nos aproxima a las dificultades económicas por las que atravesaba el propio profesional y sus consecuencias en los familiares más allegados (Ávila Olivares, 2014). Una última cuestión de interés, es que la mayoría de las publicaciones pertenecen o han pertenecido a Colegios provinciales: no debemos desviar nuestra atención a los acontecimientos que se produzcan en ellos y que hayan sido plasmados en la revista a estudio. Eje II: formación a través de cursos, titulaciones y manuales. Los profesionales de la enfermería históricamente han sabido plasmar el ideal de que, para mejorar el reconocimiento profesional en la sociedad, debían de ser útiles a ella, y para eso hacía falta perfeccionar su formación a través de la adquisición de nuevos conocimientos, habilidades o técnicas que repercutan en beneficio de la salud de la población. En ocasiones, las revistas enfermeras daban a conocer a sus lectores nuevos manuales o bien, mediante anuncios, se anunciaban diferentes cursos de perfeccionamiento o para adquirir una determinada titulación, entre los cuales se pueden citar las técnicas de cirugía menor recogidas en la sección científica de La Voz de los Ministrantes (1864) o bien los cursos de enseñanza de las asignaturas de la titulación de Practicante con autorización a la asistencia a los partos normales en El Practicante Valenciano (1905).

Eje III: reconocimiento de los profesionales en la sociedad y entre compañeros sanitarios. A través de la formación y a la aplicabilidad de dichos conocimientos, es posible que un determinado profesional de las diferentes ramas sanitarias auxiliares que existieron desde el siglo XIX, fuese premiado por haber realizado alguna obra de sumo interés, no sólo para la ciencia, si no para la contribución del desarrollo del progreso a las condiciones sanitarias de la población. A veces, la prensa profesional también realizaba un reconocimiento a un determinado profesional de otra rama sanitaria que, por alguna razón, se encuentre estrechamente relacionada con la profesión enfermera. Podemos citar la felicitación de El Eco de las Matronas (1898) al médico Dr. Andrés Martínez Vargas por su ingreso en la Sociedad de Pediatría de Moscú. Eje IV: visión de los profesionales con respecto a la Sanidad de la época estudiada. Los profesionales de enfermería y de sus antiguas ramas, son testigos y, por supuesto, forman parte del motor que contribuye al desarrollo de la Sanidad. Por lo tanto, ofrecen un punto de vista detallado y más íntimo de la marcha del desarrollo de la Sanidad de un país; ya que normalmente han sido especialistas, por lo que ofrecen un punto de vista humanístico al campo de la salud. La prensa enfermera no es ajena a ello: no duda en realizar artículos de crítica o de opinión en las diferentes épocas en pro de mejorar las condiciones sanitarias de la población. La denuncia de los practicantes de Madrid a través de El Practicante Moderno (1903) sobre la clausura del hospital de epidemias del Cerro del Pimiento en época de epidemia de viruela, es un ejemplo de ello (Marín Paz, 2014). Por lo tanto, recoger estas opinio1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados nes nos brinda un acercamiento y una visión única de la Sanidad de los años estudiados. Por supuesto, estos ejes son orientaciones para el análisis de contenido, pueden variar o bien añadir algún aspecto que sea particularmente novedoso en alguna publicación. Es de reseñar el cariz hispanoamericano que se caracterizaba la revista Enfermeras en 1950-1951 (Córdoba Mariscal y Herrera Rodríguez, 1992). Para el estudio del contenido de la prensa profesional, es muy útil como orientación la consulta previa de referencias sobre la historia de las fuentes periodísticas de las profesiones sanitarias (Riera Palmero, 1978), además de estudios precedentes que son de obligada lectura como los trabajos de Raúl Expósito González. Una vez escogida la prensa a investigar, es muy importante delimitar su estudio en función de su periodo de publicación y del contenido a analizar, utilizando una base de datos o las tradicionales fichas bibliográficas que recomendaba a sus discípulos el profesor Luis Sánchez Granjel para registrar los cambios que se produzcan tanto en la estructura como en el contenido a lo largo de los diferentes números consultados. Con ello se pretende un mejor ordenamiento de las temáticas y de las ideas principales, además de brindarnos la posibilidad de realizar un análisis cuantitativo de las diferentes secciones de las revistas enfermeras. Las conclusiones de cada estudio que en esta línea se realicen deben siempre estar referidas a los objetivos que se planteen en la introducción del trabajo. También debemos preguntarnos si a través de la revista o periódico que se plantee el historiador, se podrían llegar a conclusiones influyentes para la Historia de la Enfermería. Señalamos algunas sugerencias por si son de utilidad a los futuros investigadores: ¿qué hace diferente una publicación de otras? ¿Qué aportaciones originales hemos 78

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encontrado? ¿Existen contradicciones entre diferentes publicaciones? ¿Hemos detectado un desequilibrio de los contenidos a través de un análisis cuantitativo? ¿Cuál fue la visión de una población referente a la enfermería y sus predecesores? ¿Podemos analizar una época determinada de la enfermería a través de la prensa profesional y generalista? CONCLUSIONES. EL FUTURO DE LA CUESTIÓN El análisis de la prensa, tanto profesional como general, nos ofrece un amplio repertorio de posibilidades para mejorar el conocimiento histórico de la enfermería desde mediados del siglo XIX (Expósito González, 2013a). Comprende desde el estudio general de una determinada prensa histórica profesional enfermera que no haya sido sometida a estudios previos (y, por tanto, podría realizarse un análisis crítico de todo el contenido de los números en función del tiempo de publicación) hasta el estudio minucioso de una determinada sección de una sola publicación, aunque haya sido estudiada previamente en sus aspectos generales en anteriores estudios (Callejas Chagoyen y Miqueo, 2014). El conocimiento sobre las relaciones de profesionales de otras ramas sanitarias con la profesión enfermera podría suponer una nueva línea de investigación en un futuro no muy lejano, como es el caso de la estrecha relación que mantienen los médicos tocólogos y las matronas en El Eco de las Matronas. Tampoco debemos olvidar la impresión de la propia población respecto a los profesionales a través de la prensa generalista, además de la participación de estos últimos en este tipo de prensa. Una observación sobre este punto es que, a partir de 1975, esta prensa ofrece múltiples posibilidades para cumplir con este objetivo.

Cultura de los Cuidados Por lo tanto, no se trata de un tipo de investigación aislada en la Historia de la Enfermería, es un tipo de fuente de información historiográfica que refleja de manera muy aproximada los sentimientos y la mentalidad de nuestros profesionales precedentes, y por tanto complementaria de otras fuentes, sobre todo para cuando no sea posible abarcar ese campo de conocimiento en caso de la lejanía en el tiempo de la prensa profesional seriada (Sanz Hernández, 1995). La búsqueda de las diferentes publicaciones periodísticas profesionales y su revelación a la comunidad científica, nos permitirá abrir nuevas vías de estudio para mejorar sustancialmente nuestros conocimientos sobre la profesión en los últimos siglos. Para ello, se ofrece en el presente trabajo una guía metodológica y un modelo para el estudio de las revistas enfermeras y de las ramas auxiliares sanitarias, facilitando la labor de los historiadores interesados en esta temática. Agradecimientos: ”A Francisco Herrera Rodríguez por sus orientaciones para la realización de este trabajo y por su entusiasmo efusivo hacia el estudio de la Historia de la Enfermería”.

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Body and Care in Art, Science, and Philosophy of Nursing Corpo e cuidado na arte, ciência e filosofia de enfermagem Carlos Roberto Carlos Fernandes1, Isaura Setenta Isaura Porto2, André Marcelo Machado Soares3 Universidade Federal do Espírito Santo (UFES), doutor em Enfermagem, professor de Magistério Superior.

1

Universidade Federal do Rio de Janeiro (UFRJ), doutora em Enfermagem, professora de Magistério Superior.

2

Fundação Oswaldo Cruz (FIOCRUZ), doutor em Teologia, professor de Magistério Superior

3

Cómo citar este artículo en edición digital: Fernandes, C.R., Porto, I.S., Soares, A.M. M.(2017). El cuidado del cuerpo en el arte, la ciencia y la filosofía de la enfermería. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.08 Correspondencia: Universidad Federal do Rio de Janeiro. Escola de Enfermagem Anna Nery da Universidade Federal do Rio de Janeiro Universidade Federal do Rio de Janeiro. Correo electrónico: [email protected] Recibido: 27/04/2016; Aceptado: 11/010/2016

ABSTRACT The research objectives are to clarify the theoretical origin of so-called Nursing metaparadigmas, explicit kinds of seconds Wilhelm Dilthey worldviews on the paradigm concept in Thomas Kuhn, propose two nouns concepts identified in national Nursing writings. The research is theoretical, the method is inductive, the technique is descriptive-analytic and the approach is historical. Results: the apparent consensus on the Nursing metaparadigmas is more didactic than coming from refined epistemological research; there is no concep-

tual similarity of metaparadigm of meanings in Margaret Mastermann and designing metaparadigmas in nursing; the notion of paradigm in Thomas Kuhn has similarities to the earlier theory of world views in Wilhelm Dilthey. Purposeful conclusion: body and care are nouns concepts; therapeutic relationship is connective concept; Nursing care is adjective concept. The three types of concepts has been the fundamental connection experience (Erlebnis). If having for object of study the mediator body of nursing care, in Aristotelian terms it can be said that the body is material cause, the mediator body is formal cause, the therapeutic relationship in the care process is efficient cause, care Nursing is final cause. Keywords: Metaparadigm, care, body, nursing care, nursing. RESUMO Os objetivos desta investigação são esclarecer a procedência teórica dos chamados metaparadigmas de Enfermagem, explicitar os tipos de concepções de mundo segundo Wilhelm Dilthey diante da concepção de paradigma em 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Thomas Kuhn, propor dois conceitos substantivos identificados em escritos nacionais de Enfermagem. A investigação é teórica, o método é indutivo, a técnica é descritivo-analítica e a abordagem é histórica. Os resultados encontrados são: o aparente consenso sobre os metaparadigmas de Enfermagem não procedem de apurada investigação epistemológica; não há similaridade conceitual das significações de metaparadigma em Margaret Mastermann e a concepção de metaparadigmas na Enfermagem; a noção de paradigma em Thomas Kuhn tem semelhanças com a anterior teoria de concepções de mundo em Wilhelm Dilthey. As conclusões propositivas são: corpo e cuidado são conceitos substantivos; relacionamento terapêutico é conceito conjuntivo; cuidado de Enfermagem é conceito adjetivo. Aos três tipos de conceitos tem-se a conexão fundamental da vivência (Erlebnis). Tendo-se por objeto de estudo o corpo mediador do cuidado de Enfermagem, em termos aristotélicos pode-se dizer que o corpo é causa material, o corpo mediador é causa formal, o relacionamento terapêutico no processo de cuidado é causa eficiente, o cuidado de Enfermagem é causa final. Palavras-chave: Metaparadigma, cuidado, corpo, cuidado de enfermagem, enfermagem. RESUMEN Los objetivos de la investigación consisten en clarificar el origen teórico de los llamados metaparadigmas de Enfermería, aclarar los tipos de concepciones del mundo segundo de Wilhelm Dilthey en relación al concepto de paradigma en Thomas Kuhn, proponer dos conceptos sustantivos identificados en los escritos nacionales de enfermería. La investigación es teórica, el método es inductivo, la técnica es descriptivo-analítica y el enfoque es histórico. Los resultados son: lo consensos 84

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sobre los metaparadigmas de Enfermería son solamente aparentes en el contexto de una investigación epistemológica refinada; no existe similitud conceptual de significados de metaparadigma en Margaret Mastermann y su uso en la enfermería; el paradigma en Thomas Kuhn tiene similitudes con la teoría anterior de concepciones del mundo en Wilhelm Dilthey. Las propuestas concluyentes son: el cuidado y el cuerpo son conceptos sustantivos; la relación terapéutica es un concepto conectivo; el cuidado de enfermería es concepto adjetivo. Los tres tipos de conceptos tienen por conexión fundamental el concepto de vivencia (Erlebnis). Si tener por objeto de estudio el cuerpo mediador de los cuidados de enfermería, en términos aristotélicos se puede decir que: el cuerpo es causa material, el cuerpo mediador es causa formal, la relación terapéutica en el proceso de cuidado es causa eficiente, el cuidado de enfermería es causa final. Palabras clave: Metaparadigma, cuidado, cuerpo, cuidado de enfermería, enfermería

INTRODUÇÃO Pela influência da concepção de paradigma do físico estadunidense Thomas Samuel Kuhn, com a publicação de sua obra The structure of scientific revolutions, no ano de 1962, pesquisadoras de Enfermagem, desde o início dos anos de 1970, têm se dedicado a criar ou identificar os seus paradigmas, metaparadigmas, conceitos, meta-conceitos e até buscar consensos a partir da produção de modelos conceituais e teorias de Enfermagem. Num quase consenso e sob a influência de enfermeiras norteamericanas apresentam-se os denominados metaparadigmas pessoa, saúde, ambiente e Enfermagem. Estes quatro conceitos, ainda não sistematicamente definidos,

Cultura de los Cuidados aparecem como uma espécie de “fio de navalha” para identificar o uso e a concepção dos mesmos nos modelos conceituais e nas teorias de Enfermagem. Um primeiro complicador é a replicação acrítica daqueles quatro conceitos, mediante um aparente ou prematuro consenso. Um segundo complicador é a aplicação daqueles modelos conceituais e teorias de forma a-histórica, negligenciando os caminhos diferentes e concepções de mundo até divergentes, por exemplo, entre a Enfermagem britânica, francesa, estadunidense, hispânica e brasileira. Os dois complicadores apontados trazem à tona as possíveis distorções e confusões conceituais quando se buscam ou se forjam apressadas generalizações, desatentas ao que pode ser chamado de princípio de historicidade (historizität) pelo qual emergem, se configuram, se desenvolvem, se hegemonizam e fenecem determinadas e históricas concepções de arte, de filosofia, de religião, de ciência. Perante tais questões e após a análise apurada de 120 textos nacionais de Enfermagem, entre livros, artigos, dissertações e teses previamente selecionados para a pesquisa de doutoramento em curso, tem-se por objetivos: esclarecer a procedência teórica dos chamados metaparadigmas de Enfermagem; explicitar os tipos de concepções de mundo segundo Wilhelm Dilthey diante da concepção de paradigma em Thomas Kuhn; propor dois conceitos substantivos identificados em escritos nacionais de Enfermagem. MÉTODO A investigação é teórica, o método é indutivo, a técnica é descritivo-analítica e a abordagem é histórica. Teórica é a pesquisa “dedicada a reconstruir teoria, conceitos, idéias, ideologias, polêmicas, tendo em vista, em termos

imediatos, aprimorar fundamentos teóricos” (Demo, 2000, p. 20). Ainda, o “conhecimento teórico adequado acarreta rigor conceitual, análise acurada, desempenho lógico, argumentação diversificada, capacidade explicativa” (Demo, 1994, p. 36). A técnica descritivo-analítica caracteriza-se pela descrição e análise de uma conexão que se nos dá sempre de modo originário, como a vida mesma [e, por isso,] tem por objeto as regularidade na conexão da vida psíquica desenvolvida. [...] Observa, analisa, explicita e compara [e] toda conexão utilizada pode ser verificada univocamente mediante a percepção interna e toda conexão semelhante pode mostrar-se como membro da conexão mais ampla, total, não inferida, mas originalmente dada (Dilthey, 1951, p. 204). A característica da observação, da análise, da explicitação e da comparação na técnica descritivo-analítica para apreender uma conexão originária e não inferida expressa o próprio método indutivo utilizado. O processo compreensivo apreendido como indução é comum às Ciências da Natureza (Naturwissenschaften) e às Ciências do Espírito (Geisteswissenschaften) e esta indução “pertence à classe na qual não se deriva uma lei universal de uma série incompleta de casos, mas na qual se deriva desses casos uma estrutura, um sistema ordenado reunidor dos casos como partes em relação a um todo” (Ditlhey, 1914; 2010, p. 204; 2012). Ratificando e particularizando, nas Ciências do Espírito (Humanas e Sociais), a compreensão é “uma indução que deduz das particularidades parcialmente determinadas para 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados nós uma conexão definidora do todo” (Dilthey, 1914; 2010, p. 214; 2012). Essa “conexão definidora do todo” é a expressão da própria vida (mundo humano-sócio-histórico) porque esta, original e imanentemente, é conexão (Zusammenhang), totalidade. Não se trata, pois, de criar unidades temáticas, de significado ou de sentido mediante captação de núcleos de conteúdos assemelhados, mas de captar uma estrutura (Struktur) viva e, portanto, histórica. O percurso descritivo se dará a partir da seleção, em obras específicas das concepções de seus autores sobre paradigma, metaparadigma e teoria das concepções de mundo; nas obras previamente selecionadas de Enfermagem buscar-se-á a explicitação dos denominados metaparadigmas de Enfermagem. O passo um é o da observação, onde observar significa “direção da atenção a algo colocado-diante-de-mim” (Dilthey, 1986, p. 100); consiste na própria busca dos conceitos de paradigma, metaparadigma e teoria das concepções de mundo. O passo dois é da explicitação e consiste no destaque e retomada daqueles conceitos. O passo três é o da comparação entre as concepções dos autores selecionados, relativas àqueles conceitos. O percurso analítico e que entre aspas pode ser chamado de passo quatro é conexo ao comparativo e tem por fundamento as operações lógicas primárias ou formais: ao comparar, relaciona, distingue, estabelece graus de diferença ou semelhança, “deriva relações uniformes, partindo de casos isolados, analisa processos em particular, divide ou classifica” (Dilthey, 1951, p. 224). Tais operações lógicas primárias ou formais “captam relações e não conteúdos, objetos, processos” (Dilthey, 1944, p. 87). Das operações próprias do pensamento tácito procedem as operações lógicas do pensamento discursivo, diferenciadas e aperfei86

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çoadas: os movimentos de igualar preparam a “formação dos juízos gerais, os conceitos gerais e o método comparado. [...] [os de separar preparam] abstrações e o método analítico” (Dilthey, 1944, p. 145-6). O movimento de relacionar prepara a operação de sintetizar, própria do pensamento interpretativo. No percurso analítico se dá a proposição dos conceitos substantivos, resultantes da análise prévia dos textos de Enfermagem e pre-selecionados no doutoramento. Esses textos, de 1984 a 2014, compõem-se de 120 obras nacionais, entre artigos, dissertações, teses e livros sobre corpo. Como todos estes textos foram previamente analisados, são aqui considerados e não detalhados para se chegar à proposição dos conceitos substantivos. A abordagem é histórica porque todas as operações e movimentos lógicos buscam a “conexão que se nos dá sempre de modo originário, como a vida mesma [e, por isso,] têm por objeto as regularidades na conexão da vida psíquica desenvolvida”. Nesta investigação, vida significa estritamente “mundo humano, histórico e social” e história “é realização da vida no curso do tempo e na simultaneidade” (Ditlhey, 1951, p. 204, 362, 364; 1986, p. 236). RESULTADOS E DISCUSSÃO Conceitos centrais e metaparadigmas Em linguagem mais ou menos consensual, pelo menos do ponto de vista norteamericano, sugerem-se focos de interesse investigativo da Enfermagem expressos em termos de conceitos centrais. Uma destas primeiras sugestões é a revisão de Fawcett (1984) de dez concepções de pesquisadoras de Enfermagem, num período entre 1971 e 1983, congregando tais concepções sob o título de conceitos centrais: a – “Pode-se [...] demarcar a enfermagem em termos de quatro subconjuntos : 1) As pes-

Cultura de los Cuidados soas prestadoras de cuidado, 2) pessoas com problemas de saúde que recebem cuidado, 3) o ambiente em que o cuidado é dado, e 4) um estado final, o bem-estar” (Walker, 1971, p. 429); b – “Os principais conceitos identificados a partir da análise dos componentes, temas, tópicos e subtópicos de modelos conceituais de 50 programas de bacharelado de enfermagem foram Homem, Sociedade, Saúde e Enfermagem” (Yura e Torres, 1975, p. 22); c – “A enfermagem estuda a integridade ou a saúde dos seres humanos, reconhecendo que os mesmos estão em contínua interação com seus ambientes” (Donaldson e Crowley, 1978, p. 119); d – “O foco da enfermagem são as pessoas, seus ambientes, sua saúde e a própria enfermagem” (Bush, 1979, p. 20); e – “Os elementos de Enfermagem são atos de enfermagem, o paciente e a saúde” (Stevens, 1979, p. 11); f – “Os focos de enfermagem são o indivíduo em relação à saúde, o ambiente e do processo de mudança, seja de maturação, adaptação ou enfrentamento” (Barnard, 1980, p. 208); g - “Enfermagem é definida como o diagnóstico e o atendimento das respostas humanas, atuais ou potenciais, aos problemas de saúde” (ANA, 1980, p. 9); h - Quatro são as áreas conceituais ou meta-conceitos para o desenvolvimento de teorias de Enfermagem: o ambiente existente dentro da pessoa; o processo saúde-doença dentro do qual a pessoa está no momento da interação com a enfermeira; as ações de enfermagem (Flaskerud e Halloran, 1980); i – “O domínio de enfermagem inclui sempre a enfermeira, o paciente, a situação em que se encontram, e a sua finalidade de ser em conjunto, ou a saúde do paciente. Em termos mais formais, [...] os principais componentes,

(meta) paradigma da enfermagem são Enfermagem (como uma ação), o cliente (ser humano), meio ambiente (do cliente e do enfermeiro-cliente) e saúde” (Newman, 1983, p. 388); j – “Há um consenso geral de que os conceitos centrais da disciplina de enfermagem são a natureza da enfermagem, o indivíduo que recebeu o cuidado de enfermagem, a sociedade-ambiente e saúde” (Chinn, 1983, p. 396). Ao destacar tais investigações, Fawcett (1984) sugere que os conceitos saúde, ambiente, Enfermagem e indivíduo são metaparadigmas de Enfermagem, ainda que as declarações assinaladas não sejam absolutamente convergentes àqueles quatro conceitos. Posteriormente, Fawcett e Desanto-Madeya (2013, p. 28) reafirmam: “os conceitos do metaparadigma de Enfermagem, identificadores dos fenômenos de interesse da disciplina de Enfermagem, são o ser humano, o ambiente, saúde e enfermagem”. Por tal influência, Nyatanga (1990, p. 16) chega a decretar: “Cada teoria de enfermagem deve abordar quatro conceitos centrais (outro pesquisador conhece tais conceitos como paradigma) ou seja, a pessoa, o meio ambiente, o grau de saúde / doença, e a própria profissão de enfermagem”. Tradução minha. E o que é metaparadigma? Três definições correntes de metaparadigma de Enfermagem podem ser citadas, desde o final dos anos de 1970: “uma Gestalt [...] dentro da disciplina, [...] um mapa orientando o cientista no vasto e geralmente incompreensível mundo” (Hardy, 1978, p. 38); modo de organização e de estruturação dos fenômenos de uma disciplina (Smith, 1979); “o conceito global que identifica o fenômeno de interesse central para a disciplina, a proposição global que descreve os 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados conceitos, e a proposição global que formula as relações entre ou por meio dos conceitos” (Fawcett e Desanto-Madeya, 2005, p. 4-5). Um complicador adicional às declarações de Smith (1979) e de Fawcett e Desanto-Madeya (2005; 2013) é o esclarecimento denotativo e conotativo do que seja fenômeno. Do ponto de vista estritamente helênico, o termo phainómenon (fenômeno) e seu plural phainómena (fenômenos) sempre foi utilizado nas concepções de mundo dos chamados pré-socráticos, na filosofia clássica, por Platão, por Aristóteles, pelos pirrônicos ou céticos, pela filosofia helenística e particularmente pelos epicuristas e estoicos. Essa utilização do termo no vocabulário dos pensadores helênicos e seus leitores cultos tinha duas significações gerais, conforme revê Pereira (2013): os objetos físicos sensíveis (tà aisthetá) ou os objetos exteriores (tà ektòs hypokeímena) e, também, as ideias e pontos de vista das pessoas, nelas incluídas os filósofos. Na particularíssima obra de Immanuel Kant, Crítica da Razão Pura, há criteriosa distinção entre Phainómenon, Erscheinung e Schein: Phainómenon ou Phaenomenon (fenômeno) designa as manifestações sensíveis pensadas como objetos e segundo a unidade de suas categorias a priori e, portanto, resultantes do nexo entre intuição empírica (sensações resultantes da afecção do objeto em si sobre os sentidos e sintetizadas na imaginação) e intuição pura (formas puras da sensibilidade); Erscheinung (aparecimento, aparição) e derivado do verbo erscheinen (aparecer) refere-se às manifestações sensíveis reais, ou seja, aparição do objeto indeterminado nas intuições empíricas e, portanto, pertencentes à sensibilidade; Schein (aparência, feição, aspecto, ilusão, enganoso, “disfarce ou simulação”, fantasmagórico) e derivado do verbo scheinen, ou seja, pare88

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cer (Kant, 1919; Loparic, 2002, p. 6; Pimenta, 2006). Porque não há explicitação consolidada sobre a significação de fenômeno ou fenômenos no âmbito da Enfermagem, a que se referem as expressões “fenômenos de uma disciplina” (Smith, 1979), “fenômeno de interesse central para a disciplina” (Fawcett e Desanto-Madeya, 2005), fenômenos de interesse da disciplina de Enfermagem (Fawcett e Desanto-Madeya, 2013). Pesquisadores de Enfermagem seguem o uso helênico generalizado, seguem algum outro uso específico no campo filosófico, distinguem-se de todos os demais usos por alguma diferenciada significação? Tal questionamento exige uma investigação a parte. A par da lacuna sobre a significação de fenômeno e fenômenos no âmbito da Enfermagem, para Fawcett e Desanto-Madeya (2013, p. 5) um metaparadigma tem a função de sumarizar a missão social e intelectual da disciplina e delimitar o seu assunto, tendo por requisitos: “identificar um domínio característico dos domínios de outras disciplinas; [...] englobar todos os fenômenos de interesse da disciplina de maneira parcimoniosa; [...] ter uma perspectiva neutra; [...] deve ter substância e extensão global”. A parcimônia refere-se a não redundância de conceitos e de proposições; a neutralidade refere-se a não específicos paradigmas, modelos conceituais, visões de mundo ou combinação de visões de mundo; a globalidade de substância e extensão refere-se a não nacionalidade, culturalidade, crenças étnicas e valores para os conceitos e proposições. A concepção de Fawcett, publicada originalmente em 1984, influencia várias produções de Enfermagem, inclusive no Brasil onde não se pode afirmar que haja seguimento dos requisitos evocados. No todo ou em partes, a concepção de Fawcett tem sido revista por ou-

Cultura de los Cuidados tras pesquisadoras. Por exemplo e desde 1979, Barnum (1994) exclui o conceito de ambiente e defende o conceito de pessoa para abranger o ser humano e o paciente; Schultz (1987, p. 71) adota o conceito de cliente para significar “pluralidades de pessoas e unidades internas, tais como famílias, grupos e comunidades”. Além das investigações de Jacqueline Fawcett, de Bárbara Stevens Barnum e de Phyllis R. Schultz, um quarto exemplo é encontrado em Afaf Ibrahim Meleis num capítulo específico de publicação de 1985, revista, ampliada e reeditada nos anos de 1991, 2005, 2007 e 2012. Neste específico capítulo, a pesquisadora enumera as várias concepções das enfermeiras estadunidenses sobre os conceitos centrais da Enfermagem e explicita o pressuposto perspectivo de que, indissociavelmente, Enfermagem é uma ciência humana, uma disciplina orientada pela tradição prática de cuidado e uma disciplina orientada para a saúde. Nestes termos, a referida pesquisadora distingue e interrelaciona domínio e conceitos centrais, sem utilizar-se dos conceitos de paradigma e metaparadigma. Domínio é “o cerne de uma disciplina, [...] um território com limites teóricos e práticos”. Do ponto de vista de Meleis, o domínio de uma disciplina científica, incluindo-se a Enfermagem, “é revisado e desenvolvido mediante o saber e a experiência dos membros da disciplina, mediante pesquisa e teoria acumuladas, e mediante o conhecimento desenvolvido em outras disciplinas” (Meleis, 2012, 94-6). Para este ponto de vista, Meleis evoca aspectos das concepções dos pesquisadores estadunidenses Talcott Edgar Frederick Parsons, Thomas Kuhn, Robert King Merton e do britânico Stephen Edelston Toulmin Para a mesma autora e atentando-se para as influências orientadoras de suas concepções

e por ela mesma citadas, os conceitos centrais para todos aqueles domínios são “cliente de Enfermagem, processo de Enfermagem, terapêuticas de Enfermagem, mudanças, ambiente, saúde, interação” (Meleis, 2012, 97). Procedência das noções de paradigma e metaparadigma No itinerário das pesquisadoras norteamericanas de Enfermagem e sua influência na Enfermagem brasileira, pouco ou nada se refletiu sobre as discussões consequentes de, pelo menos e supostas, vinte e uma significações de paradigma, expostas por Thomas Kuhn, identificadas e comentadas por Margaret Masterman, posteriormente esclarecidas pelo próprio Kuhn. Nesse momento, tornar-se-ia pouco útil repassar as vinte e uma significações, já plenamente conhecidas e discutidas nos meios científicos. Thomas Kuhn menciona a identificação feita por Margaret Masterman e resume duas significações mais gerais, atribuindo à maioria das outras a diferenças por “inconguências estilísticas”. Primeira significação: “um paradigma é aquilo que os membros de uma comunidade partilham e, inversamente, uma comunidade científica consiste em homens que partilham um paradigma” (Kuhn, 1970 , p. 176). Parágrafos adiante, Kuhn (1970, p. 182) fala da impropriedade de chamar paradigma o que os membros de comunidade científica partilham. Provisoriamente, designa este o quê se partilha de “matriz disciplinar” e não de teoria ou teorias: “todos ou quase todos os objetos de compromisso grupal que meu texto original designa como paradigmas, partes de paradigma ou paradigmáticos, constituem essa matriz disciplinar e como tais formam um todo, funcionando em conjunto” (Kuhn, 2001, p. 219, 226-7). 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Dentre os componentes de uma matriz disciplinar, Kuhn (2001, p. 227-232) rotula e destaca quatro: as “generalizações simbólicas” ou “componentes formais ou facilmente formalizáveis” em forma de palavras ou de símbolos geralmente matemáticos; os “modelos heurísticos” ou “compromissos coletivos com crenças como: o calor é a energia cinética das partes constituintes dos corpos”; “valores”, dentre os quais estão (a) as predições das teorias, (b) valores para julgamento de teorias completas, (c) valores sobre a utilidade social que a ciência deve ou não ter, (d) valores compartilhados por pesquisadores divergentes quanto à aplicação de uma matriz disciplinar; exemplares, ou seja, “as soluções concretas de problemas que os estudantes encontram desde o início de sua educação científica, seja nos laboratórios, exames ou no fim dos capítulos dos manuais científicos, [...] soluções técnicas de problemas encontráveis nas publicações periódicas que os cientistas encontram durante suas carreiras como investigadores”. Segunda significação: paradigmas são “exemplares” tipicamente organizados e compartilhados da denominada “ciência normal” para a solução concreta de quebra-cabeças. Para Kuhn (2001, p. 232-3) o conhecimento científico está fundado na teoria e nas regras; os problemas são fornecidos para que se alcance destreza daquelas. Todavia, tentei argumentar que esta localização do conteúdo cognitivo da ciência está errada. O estudante que resolveu muitos problemas pode apenas ter ampliado sua facilidade para resolver outros mais. Mas, no início e por algum tempo, resolver problemas é aprender coisas relevantes a respeito da natureza. Na ausência de tais exempla90

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res, as leis e teorias anteriormente aprendidas teriam pouco conteúdo empírico. Nesse itinerário da segunda significação, emergem duas consequências. Primeira: o conteúdo cognitivo da atividade científica não se funda em teorias e regras ou métodos pre-estabelecidos ou consolidados. Se assim o fosse, não haveriam novas descobertas, mas reafirmação ou justificação do que anteriormente já está conhecido, afirmado, aceito. Segunda: anteriores a conceitos, a teorias e a leis pre-estabelecidos ou consolidados, os paradigmas são inventados, consolidados, compartilhados e seguidos até certo ponto ou momento em que novos conteúdos empíricos são apresentados, exigindo a constituição de outro “exemplar” para o “quebra-cabeça” dos fatos, diante dos quais e por competição e por persuasão formam novos paradigmas. O fundamento heurístico do paradigma é a base para a tese de Kuhn de que a ciência ou o conhecimento científico não é produto da “acumulação de descobertas e invenções individuais, [...], dos ditames da observação e do método científico, [mas, da] incomensurabilidade de suas maneiras de ver o mundo e nele praticar a ciência”. E, mais: “revoluções científicas [são] episódios extraordinários nos quais ocorre [...] alteração de compromissos profissionais. As revoluções científicas são os complementos desintegradores da tradição à qual a atividade da ciência normal está ligada” (Kuhn, 2001, p. 21, 23, 25). Se o conhecimento fosse por acumulação de conhecimentos, de invenções e de descobertas, nenhuma revolução científica ter-se-ia dado no campo da história humana. Muito anteriormente a Thomas Kuhn, o filósofo e historiador alemão Wilhelm Dilthey (1833-1911) criara a teoria das concepções

Cultura de los Cuidados de mundo (Weltanschauung) e publicada originalmente em 1911, demonstrando a incomensurabilidade aparente de tais concepções e encontrando nexos milenares distintivos entre as mesmas. Por tais nexos, tipifica-as em concepção poética, religiosa e filosófica de mundo, sendo que esta última se diferencia em concepção naturalista da qual o materialismo e o positivismo são derivações, em concepção idealista da liberdade e da personalidade, em concepção idealista objetiva. O nexo (Zusammenhang) entre todas as concepções filosóficas é o fato de serem metafísicas. Metafísica é a reflexão que tem como supostos prévios explicações singulares e deduz as determinações gerais de toda conexão cósmica. [...] A reflexão metafísica analisa no mundo exterior a conexão da realidade. Certamente, esta conexão achava-se fundada, em última instância, na consciência e constituía, com o mundo histórico, o todo da realidade. Sem embargo, o pensamento metafísico dos gregos captou esta conexão no estudo do mundo exterior. Isto teve por consequência o vínculo dos conceitos metafísicos à intuição espacial (Dilthey, 1949, p.148). Sem negar a função histórica de desenvolvimento da Metafísica até o século XIX no pensamento europeu, constata-se que historicamente, tem-se desenvolvido um número ilimitado de tais sistemas metafísicos, combatendo-se e excluindo-se reciprocamente em todo tempo. [...] A variedade das formas humanas de existência corresponde à multiplicidade de modos de pensar, de sistemas religiosos, de ideias morais e de sistemas metafísicos. Esta é uma realidade histórica. Os sistemas filosóficos caminham com os

costumes, as religiões, as constituições, manifestando-se, portanto, como produtos condicionados historicamente. [...] As contradições entre os sistemas radicam-se na pluralidade de aspectos da vida, expressos nas formas capitais daqueles. [...] Os sistemas acham-se atravessados de contradições e de conclusões falsas; selecionam um aspecto das coisas e eliminam os demais; mutilam o vivo em virtude uma vontade poderosa. Apesar de sua fragilidade lógica, vivem graças à energia de um pensamento fundamental e a uma complexidade de ânimo operante nele. Surpreendente é o pouco assombro produzido por tal circunstância. Em lugar de ver as coisas como são, a maioria dos historiadores ocultam por detrás de um mera seriação dos sistemas ou por detrás de algumas uniões lógicas artificiosas e extrínsecas (Dilthey, 1954, p. 3, 5, 6, 8, 31). Duas explicitações referentes à citação textual de Dilthey. Primeira, deve-se lembrar que sistemas significam conexões de fim ou nexos finais (Zweckzusammenhang) da cultura, conhecidos pelos conceitos gerais de Arte, Ciên1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados cia, Filosofia, Religião; são “uma espécie de seres vivos, em luta recíproca, como ocorre com as criaturas vivas. [...] A exposição de um sistema consistiu até agora nada mais que o intento de encobrir suas lacunas, contradições, etc., mediante um arranjo lógico” (Dilthey, 1954, p. 33, 35). A segunda explicitação é quanto a observação final referente aos historiadores em geral, extensiva aos denominados filósofos e historiadores da história e da ciência: tanto história da religião, da arte, da ciência, “a história da filosofia representa [...] o cenário [...] de teorias excludentes, orientadas para a solução dos problemas” (Dilthey, 1954, p. 79). Conquanto neste texto o itinerário não é estabelecer comparações entre os dois filósofos, a concepção de paradigma em Thomas Kuhn traz subjacente e em grande medida várias constatações da teoria das concepções de mundo e suas consequências, exaustivamente pesquisadas por Wilhelm Dilthey. O destaque a Wilhelm Dilthey e a Thomas Kuhn quer acentuar a intransponível necessidade de aprofundar-se nas proveniências de concepções de mundo de quantos formulam as suas teorias e modelos teóricos. O investimento teórico das pesquisadoras norteamericanas em adotar ou criar metaparadigmas de Enfermagem procede não da própria nominação de Masterman (1979, p. 79, 80) quando a mesma classifica as supostas várias concepções de Kuhn sobre paradigma em três tipos: “paradigmas metafísicos ou metaparadigmas”, “paradigmas sociológicos” e “paradigmas de artefato ou paradigmas de construção”. Na mesma referência já citada e resumidas no quadro 1, Mastermann chama de metaparadigmas o que Thomas Kuhn qualifica de conjunto de crenças, mitos, especulações metafísicas bem sucedidas, modelos, novos modos de 92

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ver, princípios organizadores e governantes da percepção, mapas, algo determinante de uma grande área de realidade; paradigmas sociológicos são o que Kuhn qualifica de realização científica universalmente reconhecida, realização científica concreta, conjunto de instituições políticas, decisão judicial aceita; paradigmas de artefato ou de construção são o que Kuhn qualifica de verdadeiro manual ou obra clássica, fornecedor de instrumentos, instrumentação real, paradigma gramatical do ponto de vista linguístico, do ponto de vista ilustrativo como analogia, do ponto de vista psicológico como figura de Gestalt. Tendo por fio condutor a interpretação, adequada ou não, de Mastermann para metaparadigma, tem-se a introdução deste conceito na Enfermagem pelas pesquisadores anteriormente citadas: “uma Gestalt [...] dentro da disciplina, [...] um mapa orientando o cientista no vasto e geralmente incompreensível mundo” (HARDY, 1978, p. 38); modo de organização e de estruturação dos fenômenos de uma disciplina (Smith, 1979); “conceito global que identifica o fenômeno de interesse central para a disciplina, a proposição global que descreve os conceitos, e a proposição global que formula as relações entre os conceitos ou por meio deles” (Fawcett e Desanto-Madeya, 2005, p. 4). Pelo exposto, não há similaridade conceitual das significações de metaparadigma em Margaret Mastermann com as conceituações de M. E. Hardy, de Jacqueline Fawcett, de Marilyn M. Rawnsley. Nas características de metaparadigmas consideradas por Fawcett e Desanto-Madeya (2005) há, de modo adequado ou não, fusão entre os três tipos distintos de paradigmas, segundo a interpretação de Mastermann. Deve-se relembrar que, posteriormente, o próprio Kuhn (1970) reviu suas explanações, distinguindo paradigma de matriz

Cultura de los Cuidados disciplinar e explicitando alguns componentes dessa matriz. Não há, portanto, até o momento, generalizações possíveis ou cabíveis nem consensos mundiais sobre metaparadigma de Enfermagem. Nesse itinerário, uma posição e crítica radicais foram feitas no ano de 1998: Em nossa opinião, os debates sobre metaparadigma tem mais criado divisões teóricas dentro de enfermagem do que definir claramente a nossa missão única e facilitar a comunicação eficaz entre os enfermeiros. Porque nós nos tornamos convencidos de que o efeito mais prejudicial dos debates sobre a pessoa, saúde, meio ambiente e de enfermagem é criar discórdia e falta de comunicação dentro de enfermagem, acreditamos que nossos conceitos centrais deveriam ser caracterizados pela neutralidade paradigmática e uso corrente. Propomos, portanto, definições que reflitam o meio termo e permitam uma gama de posições filosóficas dentro de um núcleo comum de propósito. Em nosso ponto de vista: Enfermagem é o estudo dos processos de saúde e doença humana. A prática de enfermagem busca facilitar, apoiar e ajudar indivíduos, famílias, comunidades e / ou sociedades para melhorar, manter e recuperar a saúde, e para reduzir e atenuar os efeitos da doença. A prática e a ciência relacional de enfermagem são dirigidas para o resultado explícito de qualidade de vida relacionada à saúde dentro dos contextos ambientais imediatos e maiores (Thorne et al, 1998, p. 1265). Tradução minha

Sally Thorne, Connie Canam, Susan Dahinten, Wendy Hall, Angela Henderson e Sheryl Reimer Kirkham, a posição dessas autoras sobre metaparadigma não interrompe as investigações sobre o tema e pode ser considerada uma evidência da multiplicidade e até incompatibilidade de concepções de mundo e a luta por hegemonia das mesmas, inclusive no âmbito da Enfermagem.

Sem necessariamente adotar a definição de Enfermagem assumida no artigo assinado por

Todos os paradigmas são históricos porque são criações humanas em diversos momen-

Paradigmas, metaparadigmas, concepções de mundo Os denominados paradigmas de Thomas Kuhn e metaparadigmas de Margareth Mastermann são sistematizados anteriormente por Dilthey sob o conceito de concepções de mundo e seus tipos fundamentais: poético, incluindo todas as expressões e gêneros artísticos; religioso; filosófico. O paradigma filosófico tem dois subtipos: o naturalista e do qual o materialismo e o positivismo são derivações; e o idealista subdimensionado em idealismo da liberdade e da personalidade e idealismo objetivo. Idealismo é todo sistema fundado no conhecimento filosófico da conexão da consciência. Este idealismo é subjetivo quando e na medida em que limita os fatos da consciência ao conhecimento filosófico. [... O] idealismo se torna objetivo quando pretende colocar como base explicativa do universo a conexão do espírito: neste sentido idealismo objetivo é toda filosofia que mostra uma conexão espiritual na realidade exterior e trata de torna-los compreensíveis mediante [aquela conexão espiritual] o sentido desta realidade [exterior] (Dilthey, 1954, p.233).

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Cultura de los Cuidados tos da história e, igualmente, são científicos damentais de cada concepção de mundo ou no sentido e no momento em que se tornam paradigma, características apresentadas e esconhecimentos sistematizados: ou seja, não tudadas por Dilthey (1954; 2003), excetuandohá, em Dilthey, uma concepção metafísica de -se a concepção histórica. A importância de ciência e muito menos de método. Todos os tais características é demonstrar o nexo entre a subtipos do paradigma filosófico são metafísimultiplicidade de concepções de mundo, mulcos. O fundamento metafísico é superado nas tiplicidade esta geradora de incontáveis conCiências do Espírito (humanas e sociais) pela cepções de mundo particulares de seus criadoconsciência histórica. Dessa superação emerge res. Por não ser uma mera tipificação, expressa o paradigma histórico e com suas várias ramio desenvolvimento histórico do pensamento ficações derivadas da pluralidade de concephumano e suas sistematizações doutrinárias multiplicidade esta geradora de incontáveis concepções de mundo particulares de seus criadores. Por não ser ções históricas de mundo. sobretudo pelo pensamento ocidental. uma mera tipificação, expressa o desenvolvimento histórico do pensamento humano e suas sistematizações O quadro 1 resume as características funDo ponto de vista helênico, o naturalisdoutrinárias - sobretudo pelo pensamento ocidental. Quadro 1 - Tipos de concepções de mundo Concepções de mundo poética

religiosa

ponto de partida: a vida; núcleo: referências, conexões vitais com as pessoas, as coisas, a natureza; instrumento e mediação: a linguagem; material cognitivo: experiência sensível, imaginação, fantasia; objetivo: conhecer o significado do que acontece, dos homens, dos destinos e das coisas em suas redes vitais; não objetivo: conhecer a realidade da mesma forma que a ciência - origem: experiências cotidianas e recorrentes do nascimento, da morte, da enfermidade, do sonho, da loucura, das intervenções malignas e saudáveis dos deuses, dos fenômenos da natureza, contemplação do céu, do sol, dos astros. - ideia elementar: força atuante do invisível; base cognitiva: pensamento analógico; expressões da vivência decorrentes da relação religiosa das coisas e das pessoas concretas com o invisível: lugares sagrados, pessoas santas, imagens de deuses, símbolos, escrituras pictórico-simbólicas, sacramentos ou mistérios, vida eremítica, profetismo... - fundamento de coesão e de desenvolvimento: a tradição; características das formações típicas das concepções religiosas: oposição entre seres benéficos e maléficos, existência sensível e mundo superior; etapas prévias e pontos de apoio das concepções religiosas para o desenvolvimento posterior da metafísica: monoteísmo judaico-cristão, panenteísmo chinês e indostânico (região meridional da Ásia). - evidências da conexão entre concepção religiosa e metafísica: do monoteísmo à teologia escolástica dos pensadores judeus, árabes e cristãos até Descartes, Wolff, Kant e os filósofos da reação do século XIX; crença fundamental: nas coisas e nas pessoas existe a presença de uma energia suprassensível. Continua...

Continuação

filosófica naturalista

filosófica idealista liberdade

Características fundamentais

da

filosófica idealista objetiva

- conhecimento causalista; Gnoseologia: fato dominante = sensualismo, ou seja, “redução do processo de conhecimento ou de suas operações à experiência sensível exterior e das determinações de valor e fins ao critério de valor contido no prazer e dor sensíveis. [...] A primeira teoria do Sensualismo foi criada por Protágoras” (DILTHEY, 1954, p. 132-3). - Metafísica: dirigida pelo materialismo; ao permanecer nos limites da experiência refutando a metafísica, adotará no século XIX a forma de Positivismo. - Conhecimento da natureza precede o estudo do Homem; auxiliado pela matemática e pelo experimento, investiga o mundo físico e descobre leis regedoras do cosmos; a matéria é realidade absoluta. Se a matéria é substância última do real torna-se materialismo; se a matéria possui apenas caráter fenomenal é positivismo. - Mundo: é totalidade causalmente determinada na qual descartam-se conceitos de liberdade, de valor, de fim; O espiritual é explicado pelo físico e a ele se subordina; o Homem por suas paixões é escravo da natureza e adquire consciência de sua situação pela força do pensamento. aspiração ao espiritual; é uma criação do espírito ateniense; Mundo é luta entre espírito e matéria; seus pensadores partem da experiência volitiva; há o primado do problema ético e autonomia do espiritual sobre toda causalidade física; Gnoseologia: fundada na consciência; Metafísica: fundada na razão ou numa divindade transcendente; lutam contra o Naturalismo e opõem-se a toda forma de panteísmo; Ideia culminante: o Homem Heroico - Experiência íntima e valor; Mundo concebido como espírito, Deus, valor; Realidade: expressão de algo íntimo; constitui o desprendimento espontâneo de uma força espiritual atuante (consciente ou inconscientemente); Nalguns subsistemas, o motivo religioso domina (universo é explicatio Dei): Panteísmo e Panenteísmo são formas desses subsistemas. - Homem: está em estreita afinidade com a natureza mediante atitude contemplativa, estética ou mística; Plenitude da vida afetiva e realização da felicidade da existência humana: nasce dos valores do belo, do verdadeiro e do bem

Fonte: o autor

Do ponto de vista helênico, o naturalismo se representa por Demócrito de Abdera, incluindo

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1er Cuatrimestre • Año XXI - N.° 47 posteriormente os2017 Enciclopedistas, os materialistas modernos, os positivistas e os neopositivistas; o

Cultura de los Cuidados mo se representa por Demócrito de Abdera, incluindo posteriormente os Enciclopedistas, os materialistas modernos, os positivistas e os neopositivistas; o idealismo de liberdade se representa por Anaxágoras de Clazómenas, os Apologistas, os padres cristãos, Immanuel Kant, Henri Bergson e o Personalismo; o idealismo objetivo se representa por Parmênides de Eléia e Heráclito de Éfeso, Georg Wilhelm Friedrich Hegel, os fenomenologistas e os existencialistas. Pela tipificação de Dilthey das concepções de mundo e suas características fundamentais tornar-se-á mais facilitada uma possível e talvez necessária tarefa de identificar o paradigma subjacente à multiplicidade de conceitos e de propostas teóricas presentes e defendidas na pluralidade dos escritos de Enfermagem. Fora dessa tipificação o que se encontra é uma pluralidade de escritos, cada qual com sua concepção de mundo e buscando generalizações inadequadas para hegemonização dessa ou daquela concepção. Conclusão propositiva Independente de qual seja a concepção de mundo ou o paradigma e sem entrar na disputa conceitual sobre os metaparadigmas de Enfermagem, dois conceitos substantivos persistem nos 120 escritos nacionais de Enfermagem, analisados entre 1985 e 2014 para o processo de doutoramento em curso: corpo e cuidado, interligados pelo conceito conjuntivo de relacionamento terapêutico. Por esse conceito conjuntivo ou correlatos, forma-se estrita e caracteristicamente um conceito adjetivo: cuidado de Enfermagem – um conceito sinonímio à art of nursing, segundo Nightingale (1860), arte de enfermeira ou arte de Enfermagem. Uma observação evidenciável em todos os livros e artigos estadunidenses de Enferma-

gem é a não focalização do corpo como conceito substantivo e do qual procedem todos os demais e isto apesar do fato de que o eixo 4, localização, da classificação dos diagnósticos de Enfermagem (NANDA, 2015, p. 90) referir-se ao corpo, descrevendo “as partes/regiões do corpo e/ou funções relacionadas – todos os tecidos, órgãos, locais ou estruturas anatômicas”. No âmbito estrito da Enfermagem e no relacionamento terapêutico, iniciado em situações específicas e profissionais, corpo e cuidado criam cuidado de Enfermagem. Ou seja, o conceito cuidado de Enfermagem não é uma abstração nem resulta de uma produção teórica: dito de outro modo, cuidado de Enfermagem é um conceito aDStraído e não aBStraído da vivência (Erlebnis). Independente de quaisquer cenários, aquele relacionamento terapêutico e consequentemente o cuidado de Enfermagem expressam-se em dimensões gerenciais, educacionais, assistenciais, de pesquisa. Num parêntese explicativo, AB (A, ABS) é prefixo latino com a significação de distanciamento, separação, a partir de, depois de e AD (ADS) é prefixo latino com a significação de movimento para; em direção a; aproximação. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados A tríade corpo – relacionamento terapêutico – cuidado, criando cuidado de Enfermagem, traz em si uma conexão ainda mais originária, substantiva e histórica: a vivência (Erlebnis). Nesse itinerário, são sinonímios vivência, vida (Leben) constitutivamente histórico-humana, viver (Erleben), vivenciar ou experiência vivida. A vida histórica e humana se dá temporalmente no processo vida-morte e é dentro desse processo que se vivenciam experiência de saúde e de doença; ou seja e do ponto de vista da Enfermagem, processo vida-morte é mais fundamental que o preconizado processo saúde-doença. Com outras palavras ou expressões, a fundamentalidade da vivência para a constituição, consolidação e desenvolvimento da ciência da Enfermagem foi inicial e formalmente defendida pelas pesquisadoras Bárbara Carper e Patrícia Benner, em publicações de 1978 e 1984 respectivamente: o desenvolvimento da disciplina científica de Enfermagem procede das experiências profissionais da área, ou seja, do exercício profissional no trabalho de Enfermagem (Carper, 1978; Benner, 1984). Muitos confundem a fundamentalidade da vivência com um fazer-por-fazer ou numa concepção teoria versus prática, o que deu margem à concepção de Enfermagem como uma disciplina centrada em técnicas e procedimentos, cujas explicitações e críticas foram realizadas por Almeida e Rocha (1986), ou de uma disciplina aplicada, não teórica. Pelo exercício profissional no trabalho de Enfermagem, a historicidade (em alemão, historizität) do corpo – relacionamento terapêutico – cuidado de Enfermagem não é deduzida nem inferida porque tanto não existe realidade humana-histórica-social sem corpo quanto não existe cuidado de Enfermagem sem corpos humanos que o criem fora daquele rela96

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cionamento terapêutico: esses corpos são vida e história, não são discursos ou abstrações de um pensamento desencarnado e a-histórico. Por isso a sinonimização vivência (Erlebnis), vida (Leben), viver (Erleben), vivenciar ou experiência vivida. Esta vivência, expressa em cuidado de Enfermagem, é vivência de corpo. Porque tais expressões são realizadas no corpo, pelo corpo e para o corpo, o corpo é um conceito substantivo, sobretudo porque não existe, da concepção à morte, vida histórica e humana aquém ou além do corpo. Na vida histórica, humana e necessariamente corpórea, o que se denomina prática ou trabalho de Enfermagem é cuidado de Enfermagem, em quaisquer dimensões: gerenciais, educacionais, assistenciais, de pesquisa. Eis o porquê de se propor igualmente o cuidado como conceito substantivo, sendo que no campo disciplinar específico o conceito adjetivo é cuidado de Enfermagem. De inúmeras outras formas, com outros termos ou expressões e traduzindo concepções variáveis, os conceitos de corpo e de cuidado são destacados na Enfermagem; no entanto, é incomum e possivelmente inédita a radicalidade histórica se enunciar que não existe vida histórica e humana sem corpo tanto quanto não existe aquela mesma vida histórica e humana sem cuidado. Ou seja, corpo e cuidado não são fenômenos, epifenômenos, alteregos, simbologias, representações, construções sociais. Isto tudo o que corpo e cuidado não são expressam concepções de não corpo e concepções de não cuidado. Tal realidade e radicalidade histórica não é questão de teorias nem de métodos porque a vida histórica e humana não é um processo teórico, ainda que teorizável. Tais conclusões são consequentes à pesquisa de doutoramento em curso e na qual o ob-

Cultura de los Cuidados jeto de estudo é o corpo mediador do cuidado de Enfermagem. Nesse itinerário conclusivo e em termos aristotélicos, para a Enfermagem o corpo é causa material, o corpo mediador é causa formal, o relacionamento terapêutico no processo de cuidado é a causa eficiente e o cuidado de Enfermagem é a causa final.

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Cultura de los Cuidados

Del Hospital Municipal de Trujillo y del cese de las Hermanas Amantes de Jesús Municipal Hospital of Trujillo and the cessation of Lovers Sisters of Jesus O Hospital Municipal de Trujillo ea cessação de amantes Irmãs de Jesus Esperanza Santano Mogena1, Julián Fernando Calderón García2, José Luis Cobos Serrano3, María Luz Sánchez Calvarro4, Mariana Martínez Álvarez2, Sergio Rico Martín2 1 Diplomada en Enfermería. Hospital Virgen de Guadalupe de Cáceres. Doctor por la Universidad de Extremadura. Profesor en el departamento de Enfermería en la Universidad de Extremadura. 3 Doctor por la Universidad Complutense de Madrid. Asesor del Consejo General de Enfermería. 4 Diplomada en Enfermería y Licenciada en Antropología. Enfermera en el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres..

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Cómo citar este artículo en edición digital: Santano Mogena, E., Calderón García, J.F., Cobos Serrano, J.L., Sánchez Calvarro, Mª L., Martínez Álvarez.M., y Rico Martín, S. (2017). Del Hospital Municipal de Trujillo y del cese de las Hermanas Amantes de Jesús. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.09 Correspondencia: Facultad de Enfermería y Terapia Ocupacional de Cáceres. Avd/ Universidad s/n. 10001. Correo electrónico: [email protected] y [email protected]

ABSTRACT The objectives were to make a description of the hospital and the works undertaken, exposing the conditions of the agreement between the city and religious and describe changes that occur during 1894. There has been a historical documentary study during the years 2014-2015 of the files deposited in the Municipal Archives of Trujillo.

The Municipal Hospital in the city of Trujillo, was destined to service citizens, sick soldiers and bystanders. The Sisters Lovers of Jesus and Mary Immaculate performed treatment of patients since the year 1890. To assist the sisters would be hired a nurse and a nurse, paid by the city. During 1894 the City Council performed changes that produced the cessation of the assistance service of religious. The changes originated by the complaints of some patients and the high costs that the City Council had to pay for hospital maintenance. With the cessation, the religious began to study a new organization of the regime and the management of the institution. KeyWords: Municipal Hospital, religious, contract, Trujillo RESUMEN Los objetivos del estudio fueron realizar una descripción del hospital municipal y de las obras acometidas, exponer las condiciones 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados del convenio entre el Ayuntamiento y las religiosas y describir los cambios que se producen durante 1894. Se ha realizado un estudio histórico-documental durante los años 2014-2015 de los legajos depositados en el Archivo Municipal de Trujillo. El Hospital de la ciudad de Trujillo estaba destinado a la atención de ciudadanos, militares y transeúntes enfermos. La atención a los enfermos fue realizada por las Hermanas Amantes de Jesús y María Inmaculada desde el año 1890. En la labor asistencial, las religiosas fueron ayudadas por una enfermera y un enfermero contratados por el Ayuntamiento. Durante 1894 se produjeron una serie de cambios, promovidos por la Corporación Local de la ciudad, que provocaron que las religiosas cesaran su labor asistencial. Estos cambios se vieron motivados por las quejas recibidas por los enfermos ingresados y por lo costoso que la atención resultaba para el Ayuntamiento. El cese de las hermanas llevaría a que el Ayuntamiento tuviera la necesidad de estudiar una nueva organización a nivel de régimen y administración. Palabras clave: Hospital Municipal, religiosas, contrato, Trujillo. RESUMO O alvo de este estudo foi a descrição do hospital e das obras de remodelação do mesmo, assim como expor as condições do contrato entre as religiosas e a Câmara. Descrevem-se também as alterações producidas durante 1894. Em 2014 e 2015 realizou-se un trabalho de investigação dos documentos depositados no Arquivo Municipal da cidade de Trujillo. O Hospital Municipal da cidade de Trujillo, estava destinado ao atendimento de cidadãos, militares e transeuntes doentes. O tratamento 100

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dos doentes foi realizado pelas Irmãs Amantes de Jesus e Maria Imaculada desde o ano 1890. Para dar assistência às irmãs seriam contratados uma enfermeira e um enfermeiro, pagos pela Câmara Municipal. Durante 1894 a Câmara Municipal efetuou uma série de alterações que produziram a cessação da tarefa assistencial das raligiosas. Esatas alterações foram originadas pelas queixas de alguns dos doentes e pelas elevadas despesas que a Câmara Municipal tinha que pagar pela manutenção do hospital. Com a cessação da atividadde das irmãs a Câmara começou a estudar uma nova organização do regime e da administração da instituição. Palabras-chave: Hospital Municipal, religiosas, contrato, Trujillo.

INTRODUCCIÓN En el siglo XIX, la muy noble y muy leal cuidad de Trujillo contaba varios establecimientos destinados a la atención de los enfermos, pobres, transeúntes y niños expósito. Estos son el Hospital Municipal, la Casa Cuna, el Lazareto, el Asilo de Mendicidad, de todos ellos, el presente trabajo se centra en el Hospital Municipal, también llamado Hospital de la Concepción. Este establecimiento se encontraba ubicado en la Plazuela de los Descalzos, originariamente denominada Plazuela de San Andrés, en una suntuosa mansión que había sido propiedad de los Chaves-Mendoza. Tras la invasión francesa, a principios del siglo XIX, el edificio fue abandonado por sus dueños y ocupado por los Franciscanos alcantarinos, los cuales se marcharon pasado un tiempo. Es a mediados del siglo en curso y por medio de una Real Orden cuando se concede, al expediente instruido por la Junta Municipal de Beneficencia de

Cultura de los Cuidados la Cuidad de Trujillo, lo que en él se solicita, y es que no se realice la venta del exconvento de los Descalzos por hallarse destinado a hospital. Este Hospital fue catalogado de Municipal por la Real Orden de 1847 (Tena, 1988). En la ciudad, a lo largo del siglo XIX, varios son los edificios que se van a ser destinados a albergar un hospital, como pasó con el convento de San Miguel donde se instaló un hospital militar en el año de 1838 (Santano, Rico, Sánchez y Calderón, 2015). En agosto de 1867, el edificio, que albergaba al hospital, es cedido a favor de la Municipalidad de la Ciudad de Trujillo a fin de que pueda continuar de Hospital Municipal (Legajo 492). Así, el mencionado Hospital Municipal “queda instalado en un antiguo y sólido convento en el que tiene amplia cabida todos los servicios propios de esta clase de edificios, máxime que el número de enfermos que en el concurre es tan limitado como el de la localidad. Cada sexo tiene su sala independiente y en caso de enfermedades contagiosas hay salas independientes y aisladas de la viabilidad general del edificio. La situación del edificio que nos ocupa salvo su proximidad al cementerio es inmejorable, pues se encuentra en un sitio muy ventilado y alejado lo suficiente de la viabilidad general de la población para que no lleguen hasta él los ruidos y demás causas que pudieran perturbar a los enfermos y al mismo tiempo su alejamiento no es tal que un acceso resulte incómodo” (Legajo 510-21). La atención a los enfermos que se encuentran ingresados en dicho hospital, desde el año 1890, corre a cargo de las Hermanas Amantes de Jesús y María Inmaculada, tras firmar un proyecto de condiciones con el Ayuntamiento de la ciudad. En España nos encontramos con varias órdenes religiosas femeninas encargadas de la atención tanto en asilos como en hospitales, son órdenes de origen francés,

entre ellas se encuentran las Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paúl y las Hermanitas de los Pobres (González, C. 2010). Los objetivos del trabajo son describir las instalaciones donde se encuentra ubicado el Hospital, exponer las condiciones del convenio que se establece entre el Ayuntamiento y las Hermanas Amantes de Jesús y María Inmaculada para que se hagan cargo de la atención a los enfermos ingresados en el Hospital Municipal y describir los cambios que se producen a lo largo de 1894 y que tienen como resultado final la renuncia de las Hermanas respecto de la labor asistencial que venían desarrollando en dicho hospital. MATERIAL Y MÉTODOS Se realizó un estudio histórico-documental en el Archivo Municipal de la ciudad de Trujillo. La investigación se ha desarrollado durante los años 2014-2015. La información recogida en el presente trabajo, que hace referencia al Hospital Municipal u Hospital de la Concepción, se ha obtenido a partir del fondo documental del Archivo Municipal de Trujillo. RESULTADOS Y DISCUSIÓN Del edificio y sus dependencias La casa de los Chaves-Mendoza, habilitada temporalmente como convento de los franciscanos, fue convertida en hospital durante la segunda mitad del siglo XIX. En 1890, se elaboró un proyecto donde se recogen las reformas que el edificio necesita y que tienen por finalidad permitir la instalación de las Hermanas Amantes de Jesús y María Inmaculada (Legajo 1086-13), según sus reglas de vida, ya que a partir de ese año, ellas serían las encargadas de atender a los enfermos ingresados en dicho hospital. La corporación municipal sufragaría los gastos que la reforma originara como se re1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados coge en el contrato que se establece entre las Hermanas y el Ayuntamiento (Pizarro, 2005; Legajo 635-23). A partir de los planos que se elaboran para acometer la reforma que el edificio necesita para la instalación de las religiosas (Legajo 1086-13) y de la relación de los útiles presentes en las distintas estancias del edificio (Legajo 1217-4), podemos determinar el número de salas que tiene el establecimiento, cuál es su localización y capacidad de las mismas. El edificio consta de dos plantas, en la planta baja nos encontramos las siguientes dependencias: camarín, sacristía, iglesia, sala de operaciones, sala de luces, habitaciones del camarín, zaguán, depósito de petróleo, las habitaciones que servirán de celdas de las hermanas, en total seis; en la segunda planta nos encontramos con: sala de militares, sala del botiquín, sala de hombres, sala de mujeres, sala de comedor, cocina, sala de recibimiento, comedor alto, habitación de despensa, habitación subida de la escalera (Legajo 1217-4). El proyecto de remodelación diseñado, según muestra la Imagen 1, para que las hermanas pudieran instalarse en el establecimiento incluía la reforma de otras estancias del edificio; así la planta baja, la cual es remodelada tan solo en parte, se construye una portería, cocina y un dormitorio, además de una sala de visitas, sala de presos, habitaciones de la demandadera y unos retretes; en la planta principal del edificio quedan ubicadas, entre otras las siguientes habitaciones hospitalarias: sala de hombres, sala de mujeres, dos salas de enfermedades contagiosas, y un comedor de convalecientes (Pizarro, 2005). Contaba con una sala de militares y una sala de operaciones y botiquín (Legajo 1217-4). Pero esta no es la primera obra que se realiza en el edificio, ya en 1886, se elaboró 102

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proyecto de remodelación, pues el Arquitecto de la Corporación Local, tras examinar el edificio expuso la necesidad de realizar obras de reparación que afectaban a varias de las dependencias del establecimiento, entre ellas, la sala grande, para evitar la ruina total de dicha dependencia; la sala chica, que necesitaba de la reparación para que la misma no se arruinara; la capilla, la sala de hombres y la sala de autopsias, utilizada como depósito de cadáveres, y que se encontraba en muy mal estado. También se reparó el aljibe, con el objetivo de evitar que los enfermos lo ensuciaran. El tiempo que se estimó necesario para realizar estas obras fue de unos dos meses. (Legajo 1086-13) Respecto a la capacidad de las distintas dependencias hospitalarias, determinada a partir del listado de útiles de las mismas, es el siguiente: la sala de hombres y la de militares, tenían la misma capacidad, pues en ambas había ocho catres de hierro; la sala de mujeres, que era de menor capacidad, contaba con tan solo cinco catres, y el botiquín dotado con dos catres de hierro (Legajo 1217-4). La capacidad de estas salas era muy inferior a la considerada adecuada en los hospitales de finales del siglo XIX, donde el tamaño idóneo para algunos autores era de 40 camas, otros autores, rebajaban esa cifra hasta las 24-30 camas (Herrera, 2006). Con estos datos podemos decir que este hospital contaba con una capacidad de atención reducida, ya que podía albergar un total de 21 enfermos. Este menor tamaño viene determinado por que la población a la que pretendía atender también era reducida. Teniendo en cuenta las condiciones higiénicas de la época, se aconsejaba que las camas de los enfermos fueran de hierro, dotadas de un jergón de paja y un colchón de lana (Herrera, 2006), condiciones que reúnen las camas del Hospital Municipal (Legajo1217-4)

de los enfermos fueran de hierro, dotadas de un jergón de paja y un colchón de lana

Cultura de los Cuidados

(Herrera, 2006), condiciones que reúnen las camas del Hospital Municipal (Legajo12174)

Imagen 1. Plano de la primera y segunda planta del edificio que albergaría al Hospital Municipal (Legajo 1086-13).

Respecto a la estructura que resultaba ser

contrato (Legajo 635-23) son las se describen

la estructura ser más idóneaapara este tipo de establecimientos másRespecto idónea apara este tipoque deresultaba establecimiencontinuación:

tosenenelel siglo siglo XIX, XIX, eran eran edificios edificios en en forma formade herradura o en forma de pabellones jardines patios y con no plantas; endelrelación son su de separados herradurapor o en formay de pabellones se-más deI.dos Obligaciones Ayuntamiento: parados por estos jardines y patios con noen más - El Ilustre Ayuntamiento ubicación debían estar ysituados una zona elevada y alejado de la ciudadcompletamende (Herrera, dos plantas; en El relación son su ubicación te autorizado, cede porpues tiempo ilimitado á las 2006). Hospital Municipal, cumplía en parte estas condiciones no se estos debían estar situados en una zona eleHermanas Amantes de Jesus y de María Inmavada y alejado de la ciudad (Herrera, 2006). culada, el edificio destinado a Casa de Caridad, El Hospital Municipal, cumplía en parte estas situado en la Plazuela de los Descalzos, número condiciones pues no se trataba de un edificio dos, para que en el presten su asistencia persoconstruido para tal fin sino que se trataba nal a los pobres enfermos. como ya hemos mencionado de una mansión - La Corporación Municipal se obliga á hahabilitada como hospital. cer en dicho edificio las obras de reparación necesarias para la instalación de las Hermanas, en Del contrato entre la corporación local y las conformidad con lo prescito en las reglas y consreligiosas y de las causas del cese. tituciones de estas; como tambien proveerlas del Del contrato menage y utensilios necesarios para ellas y para Las Hermanas Amantes de Jesús y María el buen servicio de los pobres enfermos. Inmaculada se hacen cargo del cuidado de los - Así mismo queda obligado á satisfacer toenfermos ingresados en el Hospital Municipal dos los gastos que se originen por asistencia faa principios de 1890. Para que las Hermanas cultativa, medicinas, vendajes, ropas… puedan desempeñar esta labor asistencial, - Para el buen servicio y asistencia de los además de la remodelación de la estructura pobres enfermos, se obliga a sostener constandel edificio que lo alberga, como ya se ha destemente a cuatro hermanas, satisfaciendo una crito, se elabora y redacta un contrato el cual pauta diaria de una peseta á cada una, no como recoge una serie de condiciones que han de ser pago de sus servicios, sino para que con ella cumplidas por ambas partes, Ayuntamiento atiendan á sus gastos necesarios, los que cobray religiosas. Las condiciones recogidas en el rán por meses ó trimestres vencidos. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados - Sostendrá también un enfermero y una enfermera, si puede ser matrimonio de buenas costumbres, los que estarán a las ordenes de las Hermanas para desempeñar los cargos y oficios que les encomienden. - El municipio administrará los fondos que destina á este Hospital. Como se observa en el presente contrato el Ayuntamiento, que cede el edificio a las religiosas para que allí puedan llevar a cabo su labor asistencial, es el encargado de realizar las reparaciones que el mismo necesite, además se encargará de proveer de los utensilios y resto de fungibles que sean necesarios para prestar dicha asistencia y se encargará de sufragar los gastos derivados de la atención a los enfermos. Pagará también a las religiosas una pequeña cantidad, para cubrir sus gastos, y contrataría un enfermero y una enfermera que ayudarán a las religiosas en su labor asistencial. II. Las Hermanas por su parte se obligan - A cuidar a los enfermos y demás personas encargadas, asistiéndolas de día y de noche en todas aquellas cosas que no desdigan de su sexo y condición. - Del aseo y conservación de las ropas y demás muevles del establecimiento, siempre que para ello no hayan de salir fuera de él - De la buena andanza y gobierno interior de la Casa, a tenor de lo aquí pactado. - Quedarán en libertad para dedicarse también á educar cierto número de niñas desvalidas, y las que puedan de otras clases. Este convenio será rescindible por ambas partes, con tal que la que desista avise á la otra con un año de anticipación. Las religiosas, según muestra el contrato, eran las encargadas de atender a los pacientes, tanto de día como de noche, en dicha asis104

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tencia las religiosas se verían ayudadas por el personal contratado por el Ayuntamiento para tal fin y que fueron una enfermera y un enfermero, ya que la atención dispensada por las hermanas no debía atentar contra su sexo ni contra su condición. En este documento, Legajo 635-23, no se han encontrado referencias explicitas al cuidado que recibirían los enfermos, pero al contratar personal sanitario serían los encargados de realizar estas funciones. Sin embargo, en otros hospitales, es el hospitalero la persona encargada de la atención a los enfermos incluyendo entre sus tareas la alimentación y cuidado de los mismos (Garde, 2007). Las religiosas eran las responsables del aseo y conservación de las ropas, del edificio y todos los enseres que había en el mismo. Se encargarían de hacer cumplir las normas de régimen interno del establecimiento. El Ayuntamiento les concedía libertad para educar a un grupo de niñas. Por lo que a la labor asistencial se une también una labor docente. Se recogen seguidamente la aportación personal de algunos de los Concejales reunidos en dicha sesión y que expresan lo siguiente: - Que el Ayuntamiento facilite todos los recursos que el Ayuntamiento pueda legalmente destinar á estas atenciones, y que en este caso debe reclamarse con urgencia el legado de cinco mil pesetas, que adeuda al Hospital la testamentaria de Dña Joaquina Hernandez Montero. - Se indica la conveniencia de solicitar a la Superioridad el que se declarara como Hospital de Partido, con los mismos beneficios que tiene el de Plasencia. - Se propone que el Arquitecto municipal elabore un proyecto de las obras que son necesarias para la instalación de las Hermanas de

Cultura de los Cuidados la Caridad, con el fin de conocer el alcance é importancia. - Se solicita que conste que se acepte el dictamen verbal de la Comisión de Beneficencia y las bases que esta había presentado. En su virtud y no habiendo ningún otro Sr Concejal que quisiera hacer uso de la palabra se acordó tomar en consideración las bases presentadas por la Comisión de Beneficencia para la instalación de las Hermanas Amanes de Jesus y de María Inmaculada en el Hospital de esta Ciudad, y que por el Arquitecto municipal, se proceda con urgencia á la formación del oportuno proyecto y presupuesto de las obras indispensables para que dicha instalación se tenga lugar al efecto de conocer su coste é importancia. Según recoge la sesión ordinaria celebrada el 29 de Septiembre de 1890. Las Hermanas que aceptaron las condiciones impuestas por el Ayuntamiento se harían cargo de la atención a los enfermos del Hospital Municipal. Del cese de la hermanas y sus causas Las Hermanas se hacen cargo de la atención a los enfermos del hospital desde principios de 1890 hasta mediados de 1894. El 7 de julio de 1894, las religiosas cesan en la administración del Hospital Municipal por no convenirlas continuar desempeñando los cargos que en el mismo tenían, como así informó el Sr Alcalde Presidente a la Corporación Municipal (Libro de Acuerdos de 1894), y mediante la siguiente cita se informa a la Superiora de la Congregación sobre la decisión que habían tomado las religiosas (Legajo 650). En la tarde el dia 7 del actual han entregado mediante inventario ante la comisión de Beneficencia de este Excmo

Ayuntamiento que tengo el honor de presidir, las Hermanas de esa Congregación encargadas de la asistencia de los enfermos de este Hospital municipal todos los efectos y enseres que tenían a su cargo, cesando a su instancia en la administración de dicho establecimiento por virtud de las reformas introducidas en el presupuesto ordinario del actual año económico, para liquidación y pago de las estancias debengadas del 1 al 7 del corriente. Lo que comunica á Usted para su inteligencia y efectos, pudiendo disponer desde luego la morada de las Hermanas al punto donde mejor vea conveniente-Dios. En el margen de dicho registro: Sra Superiora de Amantes de Jesus, hijas de Maria Inmaculada. Don Benito, Julio 10 nº 512 (Legajo 650). Esta decisión deriva de la confluencia de una serie de circunstancias acontecidas desde comienzos de 1894 (Libro de Acuerdos de 1894, Legajo 650) y que tienen como colofón final los cambios introducidos en el contrato que existía entre las religiosas y el Ayuntamiento (Legajo 635-23). Los cambios que se fueron sucediendo durante 1894, son los que se muestran a continuación: - En febrero, se insta a Sor Concepción, Superiora de las Hermanas encargadas del Hospital Municipal, que pongan en conocimiento diario de la Secretaría del Ayuntamiento todas las alteraciones que ocurren en el Hospital, además el comunicado también informa que desde ese momento que el Ayuntamiento no abonará ninguna entrada ni salida que no esté debidamente autorizada como muestra la Imagen 2. (Legajo 650). 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Imagen 2: Instancia a la madre Superiora para que informen al Ayuntamiento sobre los cambios acontecidos en el Hospital. - -En al enfermero interino Felipe Superiora de las Hermanas de Jesús, sobre Enmarzo, marzo,elelAyuntamiento Ayuntamientotoma tomalaladecisión deci- de despedir Gimenez Bernal, contratado el 1 de diciembre de 1893 para encargarse de la atención de la decisión que ha tomado la Corporación y sión de despedir al enfermero interino Felipe que no es otra que el deshaucio del contrato, Gimenez Bernal, contratado el 1 de diciembre los enfermos de viruela que había en el Hospital Municipal, con un salario de 1 peseta y realizado con las Hermanas en el mes de sepde51893 para diarios encargarse dede la Acuerdos atención de los céntimos (Libro de 1894), alegando: tiembre de 1890. Esta decisión tomada por la enfermos de viruela que había en el Hospital “…no conceptuar servicios deCorporación dicho empleado temporal…..se le la existense debe a dos motivos: Municipal, con un salario denecesarios 1 peseta ylos 5 céncia de numerosas quejas sobre la timos diarios (Libroy de Acuerdos 1894),devengados desde aquella fecha á razon demala admiliquidarán satisfaran los de haberes nistración y asistencia que los enfermos recialegando:una peseta y cinco céntimos diarios…” ben y que dicha asistencia resulta muy costosa “…no conceptuar necesarios los servi- Se cios procede al despido de temporal…..se la nodriza Gabriela Quiles, nodriza la Casa-Cuna, porse instalaron para las arcas de públicas, desde que de dicho empleado le las falta Hermanas en el Hospital 1890, como se y satisfarancontra los haberes de- en la variasliquidarán quejas formuladas ella basadas de lactancia de los en niños muestra en la Imagen 3. (Libro de Acuerdos, vengados desde aquella fecha á razon de expósito (Libro de Acuerdos, 1894), contratándose en su lugar a Josefa Fernández, 1894). También se les solicita a las religiosas una peseta y cinco céntimos diarios…” quién cuenta con el informe favorable de los médicos titulares, con un salario de 247 que sean devueltos los útiles que tienen a su pesetas y 25 céntimos (Legajo 650). cuidado (Legajo 650). - Se procede al despido de la nodriza Ga- En ajunio, en la sesiónMadre celebrada el 21 briela Quiles, nodriza de la Casa-Cuna, por - En abril, en la sesión el 30 del corriente, se decide informar Sor Concepción, del corriente, se da lectura, por una parte, a varias quejas formuladas contra ella basadas Superiora de las Hermanas de Jesús, sobre la decisión que ha tomado la Corporación y las bases propuestas por el Sr Arcipreste de la en la falta de lactancia de los niños expósito que no es otra que el deshaucio del contrato, realizado con las Hermanas en el mes de Cuidad para el nuevo convenio entre el Ayun(Libro de Acuerdos, 1894), contratándose en de 1890. Esta decisión tomadacon por la Corporación debe a dos motivos: la de Jesús, tamiento se y las Hermanas Amantes su septiembre lugar a Josefa Fernández, quién cuenta de numerosas quejas sobre la mala administración y encontrado asistencia que los no habiéndose documentos que el existencia informe favorable de los médicos titulares, recojan las condiciones expuestas en dicho conenfermos un salario de 247 pesetas y 25 céntimos reciben y que dicha asistencia resulta muy costosa para las arcas públicas, proyecto, para quesecontinúen conlala asistencia (Legajo 650). desde que se instalaron las Hermanas en el Hospital en 1890, como muestra en a los enfermos en el Hospital, y seguidamente - En abril, en la sesión el 30 del corriente, se procede a la lectura del proyecto de contrase decide informar a Sor Concepción, Madre

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Imagen 3. (Libro de Acuerdos, 1894). También se les solicita a las religiosas que sean devueltos los útiles que tienen a su cuidado (Legajo 650).

Imagen 3. De las quejas recibidas por la atención de las monjas y de lo costoso de su mantenimiento (Libro de Acuerdos, 1894). - Enformulado junio, enpor la sesión celebrada el de 21ladel corriente, se ádasufragar lectura,los porgastos una que parte, las bases la Alcaldía respecto tamiento se aoriginen administración y régimen delSr Hospital. por la asistencia facultativa, medicinas, bases propuestas por el Arcipreste de la Cuidad para el nuevo convenio entrebarbero el En esta reunión, tras la votación realizapracticante y material de oficina que estos neAyuntamiento y las Hermanas Amantes de Jesús, no habiéndose encontrado da, se aprueba por unanimidad el proyecto cesiten. documentos recojan las condiciones expuestas en dicho proyecto, para quevenpresentado por laque Alcaldía, remitiéndose una 3. Á pagar puntualmente por trimestres copia del mismo a las Hermanas. si las en elcidos las estancias causadas por enfermos continúen con la asistencia a losAsí, enfermos Hospital, y seguidamente selos procede a de religiosas están de acuerdo con el mismo, éste la población, transeúntes y militares en igual la lectura del proyecto de contra-bases formulado por la Alcaldía respecto de la entraría en vigor en el mes de julio de 1894 (Liforma que al presente, estos eventos serán fory régimen del Hospital. broadministración de Acuerdos, 1894). mulados y autorizados únicamente por el Médico Director y la Superiora de la casa. En esta reunión, tras la votación realizada, se aprueba por unanimidad el proyecto El nuevo proyecto de bases (Legajo 6354. Abonará también las camas, ropas y mepresentado la Alcaldía, remitiéndose una copia las enfermedad Hermanas. contagiosa, Así, si 23), recoge las por siguientes condiciones. nage del que,mismo en casoa de “Bases para elestán nuevo Exfueran quemadas ó en retirados las religiosas deconvenio acuerdo entre con elel mismo, éste entraría en vigor el mesdel de servicio julio de por celentísimo Ayuntamiento de Trujillo y las Herprescripción facultativa. 1894 (Libro de Acuerdos, 1894). manas de María Inmaculada para la asistencia 5. Será cargo de dicha Corporación reparar a enfermos ingresados en el hospital municipal” los desperfectos que ocurran en todo el edificio y El nuevo proyecto de bases (Legajo 635-23), recoge las siguientes condiciones. 1. El Ayuntamiento cede el edificio destinael blanqueo del mismo. para nuevo conveniopresten entre el Ayuntamiento de Trujillo y las los do“Bases á hospital paraelque las hermanas su Excelentísimo 6. Entregará bajo inventario duplicado asistencia á losdepobres enfermos que, compemuebles, ropas y demás menage de la casa, Hermanas María Inmaculada para la asistencia a enfermos ingresados en eltodo tentemente autorizados por dicha corporación lo cual será devuelto por las Hermanas al cesar hospital municipal” ingresen en él. este contrato en el estado en que se encuentren, Se esceptuan las habitaciones que con buen sustituirán conque otrolas igual el que haya desapa1. El Ayuntamiento cede el edificio destinado á yhospital para hermanas presten acuerdo se destinen á casa cuna y presos de poca recido. su asistencia á los pobres enfermos que, competentemente autorizados por dicha consideración 7. La Excelentísima Corporación municipal corporación ingresen en él. 2. Asimismo se obliga al Excelentísmo Ayunejercerá la alta inspección del establecimiento 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Si comparamos ambos convenios, el de 1890 y el actual, se aprecian los siguientes cambios:

mediante las visitas que juzgue oportuno giran ra que ayudarían a las hermanas en su labor por sí- óEn por1890, comisión de su seno: solose serán aten-a sostener asistencial. el nuevo que convenio, no cargo se hace el Ayuntamiento obliga a cuatroEn hermanas, se harán didas las quejas dadas por esta ó por el Médico mención a la contratación de dicho personal de los enfermos del hospital, cada de una de ellas recibirá una peseta diaria, para sus Director, oyendo también á la Superiora de la sanitario, recayendo sobre las religiosas todo el gastos. En este segundo convenio refiere que lasdeHermanas, respecto al casa. peso la asistenciason a loslibres, enfermos. 8. Las Hermanas obliganque á asistir hacey especial hincapié que es la número de las se mismas han ádelosestar en la- Se casa, que además no en percibirán enfermos con la mayor caridad posible, sin Corporación Local la encargada de realizar la retribución alguna por su trabajo. retribución alguna: quedando en libertad en inspección de las instalaciones y en que todo lo cuanto al número de las que han de estar en la que ocurraa en mismo, respecto ingreso y - En 1890, el Ayuntamiento se encargaría de contratar unelenfermero y una del enfermera casa; como también para admitir niñas pobres y alta de los pacientes está supeditado a lo que el que ayudarían a las hermanas en su labor asistencial. En el nuevo convenio, no se hace pudientes que bajo su dirección sean instruidas. Médico Director indique. mención a la contratación de dicho personal sanitario, recayendo sobre 9. Asímismo se hacen cargo del aseo del En general, se aprecia que las las religiosas condiciones todoy proveherle el peso de de la agua, asistencia a los enfermos. del convenio se endurecen para las Hermanas edificio carbón, alumbrado, lavandera y paja para los gergones por las y que el Ayuntamiento, quiere ejercer una suSe hace especial hincapié en que es la Corporación la encargada de realizar la cantidades consignadas para estos servicios en pervisiónLocal más directa sobre todo lo que aconel presupuesto año económico de todotece en dicho establecimiento. inspeccióndel depróximo las instalaciones y en que lo que ocurra en el mismo, respecto del 1894ingreso al 95. y alta de los pacientes está supeditado a loDe segundoDirector convenio, se envía una queeste el Médico indique. Legajo 635-13 copia a las Hermanas, para que lo firmen o desahucien. Las religiosas, enHermanas respuesta a En general, se aprecia que las condiciones del lo convenio se endurecen para las Si ambos convenios, de 1890 una supervisión todos los cambios producidos en 1894, que y comparamos que el Ayuntamiento, quiereel ejercer más directa sobre todo lo que y el actual, se aprecian los siguientes cambios: comenzaron con el despido de varios trabaacontece en dicho establecimiento. - En 1890, el Ayuntamiento se obliga a sosjadores y finalizaron con la modificación de tenerDea este cuatro hermanas, que se harán cargo condiciones delpara convenio segundo convenio, se envía una copialas a las Hermanas, que losuscrito firmen con o lo el de los enfermos del hospital, cada de una de Ayuntamiento, deciden cesar en su labor asisdesahucien. Las religiosas, en respuesta a todos los cambios producidos en 1894, que ellas recibirá una peseta diaria, para sus gastencial en el Hospital Municipal con fecha 7 de comenzaron con el despido de varios trabajadores y finalizaron con la modificación de tos. En este segundo convenio refiere que las julio de 1894. Hermanas, son libres,del respecto al número En este momento, el Presidente de labor la Corlas condiciones convenio suscritodecon el Ayuntamiento, deciden cesar en su las mismas que han de estar en la casa, y que poración Local propone a dicha Corporación asistencial en el Hospital Municipal con fecha 7 de julio de 1894. además no percibirán retribución alguna por la necesidad de estudiar una nueva organizasu trabajo. ciónLocal a nivelpropone de régimen y administración En este momento, el Presidente de la Corporación a dicha Corporaciónpara la - En 1890, el Ayuntamiento se encargaría dicho establecimiento (Libro de Acuerdos de necesidad de estudiar una nueva organización a nivel de régimen y administración para de contratar a un enfermero y una enferme1894), como recoge la imagen 4.

dicho establecimiento (Libro de Acuerdos de 1894), como recoge la imagen

4.

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Imagen 4. Sobre la necesidad de una nueva organización para el Hospital.

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CONCLUSIONES

Cultura de los Cuidados CONCLUSIONES El Hospital Municipal de Trujillo, era un establecimiento de pequeñas dimensiones que se encontraba ubicado en una mansión. Contaba con dos plantas y una serie de estancias que permitía la atención a enfermos, militares, pobres y transeúntes. Contaba con una buena ubicación, ya que se encontraba en un lugar bien ventilado. El edificio que fue remodelado para permitir la instalación de las hermanas En 1890, las Hermanas Amantes de Jesús y María Inmaculada, tras aceptar el contrato suscrito por la Corporación Local, son las responsables del cuidado de los enfermos ingresados en el hospital, además de encargarse del funcionamiento y mantenimiento del edificio, como continente, y de la conservación de todo su contenido. Las religiosas, para el desarrollo de esta labor asistencial se verían ayudadas por un enfermero y enfermera contratados por el Ayuntamiento. Además tienen libertad para educar a un número determinado de niñas, lo que hace que puedan realizar una función docente. Los cambios que se producen en 1894 y que afectan al despido de varios trabajadores del Hospital y a al convenio suscrito con el Ayuntamiento en 1890, llevan a que las religiosas cesen en la administración de dicho establecimiento el 7 de julio de 1894.

- Pizarro, F.J. (2005). Arquitectura y urbanismo en Trujillo (siglos XVIII y XIX). Trujillo: Construcciones Abreu S.A. - Santano, E., Rico, S., Sánchez., M.L., y Calderón G, J.F. (2014). Hospital Militar de San Miguel (1838-1839). Cultura de los Cuidados (Edición digital), 18(40), 40-49. - Tena, J. (1988). Trujillo Histórico y Monumental. Trujillo: Gráficas Ortega.

FUENTES PRIMARIAS - Legajo 492. Libro de Acuerdos de 1890. Archivo Municipal de Trujillo. - Legajo 510-21. Libro de Acuerdos de 1890. Archivo Municipal de Trujillo. - Legajo 635-23. Libro de Acuerdos de 1890. Archivo Municipal de Trujillo. - Legajo 1086-13. Libro de Acuerdos de 1890. Archivo Municipal de Trujillo. - Legajo 1217-4. Libro de Acuerdos de 1890. Archivo Municipal de Trujillo. - Libro de Acuerdos de 1886. Archivo Municipal de Trujillo. - Libro de acuerdos de 1894. Archivo Municipal de Trujillo. - Legajo 650. Libro copiador de comunicaciones de junio de 1893 a agosto de 1894. Archivo Municipal de Trujillo.

Referências - Garde, J.M. (2007). La beneficencia rural en Navarra (S. XIX y XX): el Santo Hospital de la villa de Mélida. Rev Sancho el sabio, 26, 51-94. - González, C., y Martínez, F. (2010). La transformación de la enfermería. Nuevas miradas para la historia. Granada: Editorial Comares. - Herrera, F. (2006). El debate sobre la calidad asistencial en la España del siglo XIX. Cultura de los cuidados, 10(20), 22-31. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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La activa participación de las Madres Mayores del Hospital del Santo Cristo de los Dolores (Pozo Santo) bajo la administración dela Hermandad de la Misericordia de Sevilla

The active participation of the Greater Mothers of the Hospital of Santo Christ of the Pains (Pozo Santo) under the administracion dela Fraternity of the Mercy of Seville A ativa participação das Mães Maiores do hospital do Santo Cristo das Dores (Poço Santo) baixo a administracion de la Hermandad da Misericordia de Sevilla Paula Ermila Rivasplata Varillas Doctora en Europa, mundo mediterráneo y su difusión Atlántica. Doctora en Historia de América. Universidad Pablo Olavide de Sevilla. Cómo citar este artículo en edición digital: Rivasplata Varillas, P.E. (2017). La activa participación de las Madres Mayores del Hospital del Santo Cristo de los Dolores (Pozo Santo) bajo la administración de la Hermandad de la Misericordia de Sevilla. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.10 Correspondencia: Departamento de Historia de América. Facultad de Geografía e Historia. Universidad de Sevilla. C/Doña María de Padilla, s/n. Correo electrónico: [email protected]. Recibido: 09/05/2016; Aceptado: 12/10/2016

ABSTRACT The major mother of the Holy Well hospital-sanctorum fulfilled a transcendental paper in the maintenance of that institution. Even exceeded its functions, proposing, suggesting and making proposals even without the permission of his patronage that was the Brotherhood of the Mercy that was directing the Pious House of analogous name. The free interference of 110

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the major mother in the management of Holly Well often allowed by the Mercy provoked for the bishopric the first problem of consideration as the dismissal of the major mother Feliciana of Holy Teresa and chaplain at the request of vicar the Brotherhood of Mercy obeyed in 1737. However, soon after the incident, the same major mother proposed by the vicar resumed her leadership role absolutely necessary to maintain the Pozo Santo and the brotherhood of Mercy understood and accepted. Palabras claves: Major mother, sanctorum, hospital, Holy Well, Brotherhood of Mercy, Sevilla. RESUMO A mãe maior do hospital beaterio do Poço Santo cumpriu um papel trascendental na manutenção daquela instituição. Inclusive rebaso

Cultura de los Cuidados suas funções, propondo, sugerindo e realizando propostas inclusive sem a permissão de sua patronato, a Hermandad da Misericordia, que dirigia a Casa Pía de análogo nome. A livre intromisión da mãe maior na gestão do Poço Santo muitas vezes permitida pela Misericordia provocou pelo obispado o primeiro problema de consideração que género o despedimento da mãe maior Feliciana de Santa Teresa e do capellán do Poço Santo a pedido do provisor que acatou a fraternizem da Misericordia em 1737. No entanto, ao pouco tempo do incidente, a mesma mãe maior proposta pelo provisor voltou a assumir seu papel de liderança absolutamente necessária para a manutenção do beaterio e que a hermandad da Misericordia entendia e aceitava. Palavras-chave: Mãe maior, beaterio, hospital, Poço Santo, Hermandad da Misericordia, Sevilla.

RESUMEN La madre mayor del hospital beaterio del Pozo Santo cumplió un papel trascendental en el mantenimiento de aquella institución. Incluso rebaso sus funciones, planteando, sugiriendo y realizando propuestas incluso sin el permiso de su patronato, la Hermandad de la Misericordia, que dirigía la Casa Pía de análogo nombre. La libre intromisión de la madre mayor en la gestión del Pozo Santo muchas veces permitida por la Misericordia provocó por el obispado el primer problema de consideración que género el despido de la madre mayor Feliciana de Santa Teresa y del capellán del Pozo Santo a pedido del provisor que acató la hermanad de la Misericordia en 1737. Sin embargo, al poco tiempo del incidente, la misma madre mayor propuesta por el provisor volvió a asumir su papel de liderazgo absolutamente

necesario para el mantenimiento del beaterio y que la hermandad de la Misericordia entendía y aceptaba. Palabras claves: Madre mayor, beaterio, hospital, Pozo Santo, Hermandad de la Misericordia, Sevilla.

INTRODUCCIÓN El hospital del Cristo de los Dolores, conocido como del Pozo Santo, está ubicado en una plazuela del mismo nombre y había sido fundado en 1666 por las beatas terciarias franciscanas María de Jesús y Beatriz de la Concepción (Ortiz de Zúñiga, 1796, pp. 72-73 y 370-372) (Collantes, 1884: 207-230) (Gonzales, 2003) (Gonzales, 1967) (Roda, 2005: 321). La hermandad de la Misericordia tuvo a su cargo el patronato y administración del beaterio, destinado a mujeres impedidas e incurables desde la segunda mitad del siglo XVII (Carmona García, 1989: 69). El Pozo Santo debía ser mantenido, cuidado, asistido y administrado con la economía y buen gobierno necesario para lo cual dos miembros de la hermandad de la Misericordia eran elegidos anualmente para ejercer de diputados y tener al tanto a su cabildo sobre los asuntos del beaterio. La madre mayor, el capellán, las beatas y las enfermas vivían en el beaterio hospital del Pozo Santo y estaba especializada en incurables, impedidas y desamparadas que esperaban un buen morir cristiano. En este caso, el capellán y las beatas, como sus ayudantes, estaban entrenados en aliviar y reconfortar espiritualmente a las enfermas como en el Antiguo Régimen era costumbre realizar (Rivasplata, 2014a, pp. 81-118). La madre mayor era la responsable interna del manejo del hospital y como era uno femenino, prácticamente se ocupaba de su total gestión. Este cargo existía 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados en muchos hospitales castellanos (Rivasplata, 2014b, pp.134-184). Uno de los deberes de la madre mayor del Pozo Santo de Sevilla era pedir a la Misericordia anualmente los tres mil reales para la provisión del trigo por cuenta de la renta corrida de uno de sus benefactores1. Otra de sus obligaciones, previo permiso de la Misericordia, era hacer las reformas internas que necesitara el hospital. MATERIAL Y MÉTODO Este estudio es histórico descriptivo. La recogida de información se ha realizado a través de fuentes primarias y secundarias. Entre las fuentes primarias hemos utilizado la documentación archivística proveniente del Archivo Histórico Provincial de Sevilla (AHPSse) y del Archivo de la Diputación Provincial de Sevilla (ADPSse). En el primer archivo se encuentra documentación del hospital de la Misericordia y en el segundo del hospital del Pozo Santo. En cuanto a las fuentes secundarias se ha recurrido a libros y documentos escritos provenientes de los archivos mencionados así como del fondo histórico de la Universidad de Sevilla. DESARROLLO DEL TEMA La Casa Pía de la Misericordia y la madres mayores Beatriz de la Concepción (16841686) e Isabel de San Francisco del Hospital del Pozo Santo (1686-1706) Las fuentes del Archivo Histórico Provincial de Sevilla indican que la Casa Pía de la Misericordia gestionaba y administraba al hospital del Pozo Santo desde 1684. Aquel año, el diputado nombrado por la Misericordia para controlar al Pozo Santo don Esteban Arpe dio AHPSse, Libro cabildo 4757(1719—1723) 10/06/1723 AHPSse, Libro cabildo 4753, 12/11/1684, f. 33v 3 AHPSse, Libro cabildo 4753, 04/08/1686, f.118v. 1 2

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cuenta que la madre mayor Beatriz de la Concepción le había participado que tenía dos mil pesos que le había dado de limosna la viuda de don Ignacio Mongabur, doña María Carrillo, para que se impusiese en renta lo redituable y sirviese para la dote de una cama de las incurables del mencionado hospital. La madre mayor quería hacer este deseo realidad. El cabildo ordenó que el tesorero recibiese el dinero del arca de empleos y diese carta de pago de la mencionada cantidad, bajo el cuidado de los diputados don Luis Federique y don Esteban Arpe y que se ocuparan de que se cumpliese y diesen cuenta al cabildo de todo2. Dotar a una cama de incurables significaba atender a un enfermo gratuitamente, pues se le subvencionaba los gastos generados con la renta que el dinero donado generase anualmente. Esta era una costumbre pía bastante arraigada en el Antiguo Régimen (Rivasplata, 2015, pp. 243272). Otro de los deberes de la Misericordia era nombrar al capellán, a la madre mayor y a la madre ayudante. En 1686, el padre mayor indicó en el cabildo de la Misericordia que era necesario nombrar capellán que asistiera en los ejercicios necesarios para administrar los sacramentos a las enfermas del Hospital del Santo Cristo de los Dolores y ayudarles a bien morir, tener los libros al día y cumplir con las demás obligaciones que disponía la regla del hospital. El nuevo capellán mayor nombrado fue Francisco de los Ríos3. Asimismo, aquel año, la madre mayor era Beatriz de la Concepción, pero le había dado perlesía y ya no mejoraría, por lo cual fue necesario hacer elección de una nueva autoridad femenina que gobernara el hospital y a las demás ma-

Cultura de los Cuidados dres auxiliares. El cabildo de la Misericordia ordenó que el padre mayor dispusiera cuanto antes la ejecución de las elecciones para lo cual llamaría a las juntas y cabildos extraordinarios que fuesen necesarios para el complimiento de aquella obligación4. Todo acontecimiento que pudiese alterar la cotidianidad en el Pozo Santo tenía que comunicarse a la Casa Pía de la Misericordia. Una comisión era nombrada al iniciar el año para examinar cualquier asunto que sucediese en el Pozo Santo e emitiera un informe para que el cabildo tomase una decisión. En 1688, la madre mayor Isabel de San Francisco pidió licencia para tomar un corral para las oficinas del hospital y se remitió a la comisión un informe de los diputados y del maestro mayor5. Cinco meses más tarde, la misma madre mayor solicitó permiso para tomar asiento del sitio y solar de la universidad de beneficiados de la ciudad de Sevilla, pues era necesario ampliar el espacio ocupado para la panadería. Solicitud que se remitió a los diputados elegidos para estudiar la situación6. Una vez construido los nuevos lavaderos y demás oficinas, se procedió a terminar de hacer la tahona y el horno en la casa corral que tomaron de la universidad de beneficiados en 1689. La construcción costó 500 pesos de a diez reales de plata, obtenidas de las arcas del hospital, dando cuenta de lo gastado7. Ya para febrero de 1690, la obra del almacén, panadería, demás aposentos y oficinas del hospital del Santo Cristo de los Dolores habían sido acabadas, gastando14 mil reales8. Nueve años más tarde, en 1699, la ampliación del Pozo Santo continuó gracias a la

tenaz voluntad de su madre mayor Isabel de San Francisco quien sugirió a su patrono, la Misericordia, tomar dos casas, una de la fábrica de la parroquia de San Ildefonso a tributo perpetuo y otra del hospital del Espíritu Santo en calle los Colcheros, haciendo permuta y cambio con otra casa que tenía el hospital de los Dolores en la calle de los Lombardos. La madre pidió la licencia a la Misericordia, como a patrono para ejecutarlo y que se nombrara un hermano de esta casa para perfeccionar el ajuste y que se otorgara las escrituras que conviniese con la mayor seguridad. El cabildo cometió este negocio a Juan de Molina9. De esta manera, se observa que la intervención de la madre mayor Isabel de San Francisco en la vida del Pozo Santo fue determinante. La Misericordia aceptaba sus sugerencias antes que del mismo capellán e incluso intermediaba si éste tenía alguna necesidad. Así, en 1700, la madre mayor pidió al cabildo a través de su representante, es decir uno de los diputados elegidos para mediar los asuntos del Pozo Santo, que permitiera que el capellán de la Misericordia, Francisco de Castro, continuara asistiendo a los enfermos en sus necesidades espirituales que ya lo estaba haciendo desde la petición de la anterior madre mayor en 1686. “Habiendo dado cuenta el Sr Don Fernando Caballero, núm. 25, hermano y diputado del hospital del Santo Cristo de los Dolores de esta Santa Casa que es patrona de la pretensión que tiene la madre Isabel de San Francisco, madre mayor del dicho hospital sobre que se le de licencia por este cabildo para asis-

AHPSse, Libro cabildo 4753, 07/07/1686, f.115v. AHPSse, Libro cabildo 4753, 07/03/1688, f.183r. 6 AHPSse, Libro cabildo 4753, 08/08/1688, f.196v. 7 AHPSse, Libro cabildo 4753, 13/08/1689, f.240v 8 AHPSse, Libro cabildo 4753, 11/02/1690, f.257r. 9 AHPSse, Libro cabildo 4754, 04/04/1699, f. 350r. 4 5

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Cultura de los Cuidados tir de noche a las necesidades espirituales de sus enfermas a don Francisco de Castro y Arroyo, capellán mayor de esta santa casa con retención de su plaza cuya pretensión consiguió la madre Beatriz de la Concepción, madre mayor que fue por petición que dio en el cabildo general de 3 de marzo de 1686, y habiéndose conferido sobre todo se acordó de conformidad se observe y guarde lo que paso en dicho cabildo de 3 de marzo en que habiéndose votado por la mayor parte de votos que por entonces y sin que sirva de ejemplar para otro ningún capellán mayor se le permita al dicho don Francisco y no a otro ninguno a dicha asistencia y por no haberse puesto en ejecución se le hace la misma gracia arreglándose la dicha determinación”.10 La preocupación principal del Pozo Santo era la escasez de dinero para su manutención. Por aquella razón, la madre mayor Isabel de San Francisco propuso fundar una hermandad de señoras para fomento del hospital. La idea fue debatida y votada en el cabildo de la Misericordia, habiendo salido la mayor parte el voto positivo. De esta manera, el cabildo acordó dar licencia a la madre mayor para hacerlo en 1700.11 El Pozo Santo recibía donaciones testamentarias que le permitían continuar su obra pía. Una de las más generosas dadas en el siglo XVII correspondió del capitán Miguel de Benavides que dejó sus bienes para que lo administrara la Misericordia y pudiese con las AHPSse, Libro cabildo 4755, 01/08/1700, f.17v AHPSse, Libro cabildo 4754, 10/04/1700, f. 38v. 12 AHPSse, Libro cabildo 4755, 07/01/1703,s/f. 13 AHPSse, Libro cabildo 4755, 05/08/1703,s/f10 11

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rentas dotar a hidalgas para tomar velo negro en los conventos. También mandó que la mitad del residuo de la dotación que creó fuese entregada al hospital del Pozo Santo. Esto lo sabía la madre Isabel de San Francisco desde hacía años y al ver que no se concretaba, pidió en 1703 se le mandase pagar la porción que se le debiera. El cabildo de la Misericordia encargó esta tarea a la junta de hacienda, previo informe de la contaduría12. También aquel año, el padre prior del monasterio de San Jerónimo indicaba que el hospital del Pozo Santo del que era patrono la Misericordia tenía un haz de tierras que lindaba con sus olivares pidió se le permutara con alguna de las casas que tenía su convento. El cabildo de la Misericordia no lo aceptó.13 Todos los años, la madre mayor tenía que solicitar a su patrona, la Misericordia, para que le entregara el dinero que los donadores le dejaban a través de testamento. Se trataba de una formalidad. Por ejemplo, en 1704, la ma-

Cultura de los Cuidados dre mayor Isabel de San Francisco pidió que en atención a las grandes necesidades que tenían sus enfermas por las cortas limosnas que se le hacían, le mandara socorrer la Misericordia con las dotaciones que administraba o del residuo del capitán Miguel de Benavides, pues su mitad pertenecía al Pozo Santo. El padre mayor y los hermanos de la Misericordia acordaron que la contaduría ajustara la cuenta para que ejecutara lo pedido14. Al cabo de dos años, esta madre mayor enfermó y el 5 de junio de 1706, el padre mayor comunicó al cabildo de la Misericordia que aquella madre estaba “postrada e inhábil, sin poder continuar en el empleo”. No dejó el cargo por fallecimiento sino por enfermedad. Ocupó una cama de incurables hasta su fallecimiento. Esta madre mayor ejerció el cargo por veinte años desde 1686. La Casa Pía de la Misericordia y la madre mayor Ana de San Bernardo (1706-1714) El nombramiento de una nueva madre mayor se aproximaba según disponía la regla del hospital en el capítulo 10. Cuatro hermanas serían propuestas, dos por el capellán, otra por la madre mayor que dejaba de ser o la madre más antigua. Otra propuesta provendría de la madre ayudante15. La votación fue la siguiente: el capellán del hospital del Pozo Santo eligió a Ana de San Bernardo y a la hermana ayudante fue Jerónima Juan de Santa Teresa. La hermana más antigua, la madre Rosalia María eligió a la madre Ana de San Bernardo. También, todos los

mencionados eligieron a la madre ayudante. Finalmente, se acordó de conformidad proponer al cabildo a Ana de San Bernardo como madre mayor y Jerónima Juana de Santa Teresa para ayudante de madre mayor16. El día siguiente el cabildo aprobó la elección17. En aquel año de 1706, el Pozo Santo recibió una importante donación hereditaria. El padre mayor comunicó que había fallecido don Juan Francisco Gómez y había dejado en su testamento por heredero al hospital beaterio de mujeres de Santo Cristo de los Dolores junto al Pozo Santo y por patrono y administrador a la Misericordia tres fiestas que dejaba dispuesto se celebraran en los días de la “Purísima Concepción de Nuestra Señora, San Joseph y San Juan Bautista” y que se impusiera lo necesario para ellas del caudal que dejaba a la Misericordia. La distribución del residuo se convertiría en obras pías dirigida a pobres y personas que asistían en el hospital. El cabildo después de leer las cláusulas del testamento, aceptó el patronato. La Misericordia como patrono y administrador del hospital del Santo Cristo de los Dolores aceptó la herencia con beneficio de la ley del inventario “en todo por todo según y cómo se contiene en las cláusulas de testamento que pasó ante Pedro Luis de Vargas secretario público de Sevilla el 22 de junio de 1706”.18 Respecto a este testamento, el padre mayor indicó que en el mencionado documento había unos bienes muebles inventariados que se debían entregar a las madres del beaterio para que los usaran a su arbitrio, sus menesteres y

AHPSse, Libro cabildo 4755, 06/04/1704,s/f. ADPS. Legajo 1. Acuerdos del cabildo de la Casa de la Misericordia, referentes a los nombramientos de la madre mayor y madre ayudante del hospital, (1714. 1748, XIX), s/f. ADPS. Acuerdos del cabildo de la casa de la Misericordia referente a los nombramientos del Capellán Mayor del hospital (1718-1797), s/f. 16 AHPSse, Libro cabildo 4755, 05/06/1706,s/f. 17 AHPSse, Libro cabildo 4755, 06/06/1706,s/f. Eligieron el capellán del hospital, la madre ayudante, la hermana más antigua se aprobó la elección. 18 AHPSse, Libro cabildo 4755, 04/07/1706,s/f. 14 15

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Cultura de los Cuidados en lo que tocaba a papeles y títulos se entregarían a la contaduría. En cuanto la factura de las alhajas empeñadas y géneros que el difunto envió a Indias se entregarían al tesorero y que se otorgaría carta de pago por el cabildo dando la orden a Joan Cid de cómo había de hacerse. Se necesitaba de persona que corriese con la administración de la renta del hospital por lo que se nombró a don Agustín de Valderrama a quien se le dio poder para la percepción y cobranza para que lo entregase a las madres para su manutención, tomando recibo de ellas. Este administrador recibiría por este trabajo cinco por ciento por su cobranza.19 La nueva madre mayor sugirió comprar un órgano para evitar el gasto de alquilar uno varias veces al año que sería como tener un tributo perpetuo. El Pozo Santo no tenía órgano y alquilaba uno por 20 reales cada vez que lo necesitaba para las fiestas religiosas. La dotación de don Juan Francisco Gómez exigía la realización de tres eventos cada año. En aquel entonces, un realejo de buena calidad estaba siendo ofertado a 100 ducados al contado, lo que valdría 200 ducados. La madre mayor Ana de San Bernardo lo comunico a su patrona, la Misericordia, para que decidiera lo que conviniese. El cabildo mandó a los diputados para que realizaran la compra del realejo con el dinero del mismo testador al que iban dirigidas

las fiestas. Se prohibió adquirirlo a través de un préstamo, para evitar endeudamientos.20 Entretanto, la antigua madre mayor Isabel de San Francisco falleció. La Misericordia entregó 500 reales para su entierro, cubierto la mitad de la dotación del capitán Benavides, a petición de la nueva madre Ana de San Bernardo. Como se observa, prácticamente, toda sugerencia dada por las madres mayores del Pozo Santo era aceptada por la Misericordia21. Las responsables femeninas del beaterio estudiado solían tomar la iniciativa para solucionar sus premuras económicas e incluso, a veces, solo comunicaban a la Misericordia lo que ya habían realizado. Así, la nueva madre mayor había ido a ver al arzobispo de Sevilla ante la estrechez económica del Pozo Santo, para suplicarle licencia para salir a las calles sevillanas a pedir limosna para cubrir la manutención del Pozo Santo22. Una vez que la madre mayor obtuvo el permiso del arzobispo, se lo comunicó al cabildo de la Misericordia. Y “visto la licencia que se da se acordó de conformidad conformarse con ella.”23 La Casa Pía de la Misericordia y la madre mayor Jerónima Juana de Santa Teresa (1714-1726) El Pozo Santo estaba conformado por 34 madres y sirvientas,7 sirvientes, 46 enfermas

AHPSse, Libro cabildo 4755, 30/07/1706, s/f. AHPSse, Libro cabildo 4755(1700-1706) 05/09/1706, 21 AHPSse, Libro cabildo 4755(1700-1706) 17/10/1706. En 1706, “viose una petición de la madre Ana de San Bernardo madre mayor del hospital del Santo Cristo de los Dolores diciendo haberse llevado nuestro señor para sí a la madre mayor Isabel de San Francisco que fue del hospital, pidiendo que dé la mitad del residuo de la dotación del capitán Miguel de Benavides que pertenece a dicho hospital se le socorrió para el entierro de la susodicha y habiéndose conferido se acordó de conformidad se diesen 500 reales para este fin y que la contaduría aplicara de los primeros que perteneciere y hubiere de haber dicho hospital”. 22 ADPSse, Licencias dadas al hospital para pedir limosnas, 1674-1713, legajo 1, s/f. 23 AHPSse, Libro cabildo 4755(1700-1706) 05/02/1707, s/f. En 1707, “Petición de la madre mayor del hospital del Pozo Santo había ocurrido al arzobispo de esta ciudad representándole la estrechez que padecía el hospital suplicándole diese licencia para tener demandante que pudiese salir para que pudiese salir a pedir y solicitar limosnas para su manutención y que se le había concedido de que las madres daban cuenta al cabildo y habiéndose conferido y visto la licencia que se da se acordó de conformidad conformarse con ella.” 19 20

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Cultura de los Cuidados en cama, de las cuales 8 estaban dotadas. En total había 87 personas en 171524. El Pozo Santo solía endeudarse para mantenerse y le prestaban personas conocidas, pero para que otra vez le diera, tenía primero que devolver lo que le había prestado. Aquel año, la madre Jerónima Juana de Santa Teresa del Pozo Santo indicó el hospital gastaba mucho para el sustento de las madres y sirvientes pobres quienes superaban la cantidad de 100 personas. También el Pozo Santo gastaba mucho en ropa y vestuario que había llevado a la madre a empeñarse en más de 40 reales que le habían prestado diferentes personas. La urgencia de comprar trigo, llevó a pedir dinero a la Misericordia que mandó dar 200 reales del residuo del legado de Juan Francisco Gómez.25 En 1716 se volvió a elegir a las mismas personas que ocuparon los puestos de madre mayor y ayudante, es decir a Juana de Santa Teresa y Flora Francisca de San Antonio, respectivamente. Esta decisión se tomó como respuesta a los memoriales que se leyeron en la Misericordia enviadas por el capellán del Pozo Santo Francisco de Castro y Arroyo y otros miembros, apoyando la buena gestión de las mencionadas mujeres.26 La madre mayor Juana de Santa Teresa se mantuvo por muchos años en el cargo. En 1719, puso al corriente que había sido preciso hacer 113 varas de cañería que había tenido un costo de 1.200 reales y para que se saldara la deuda, hallándose el hospital con falta de medios, solicitaba que la Misericordia lo pagara con el dinero producto de los réditos que el donador Juan Estaban de

Ollo había dejado para que lo empleara el Pozo Santo después del ajuste de cuentas realizado con los herederos de un tributo. 27 La ampliación del Pozo continuó a mediados del XVIII porque su patrono, la Misericordia, había comprado la casa contigua a su iglesia que había pertenecido a las monjas de San Clemente.28 En 1726, el padre mayor aviso que la madre mayor Juana de Santa Teresa del Pozo Santo había muerto después de 12 años ejerciendo el cargo. La Casa Pía de la Misericordia y la madre mayor Flora Francisca de San Antonio (1726-1737) En el cabildo se propuso a su reemplazante29. La elegida fue Flora Francisca de San Antonio al cabo de un mes recibió 400 ducados para el suministro de trigo anual, facturada del caudal que estaba en las arcas de empleos de la Misericordia del legado que dejó el secretario Sebastián de Santamaría. También recibió 600 reales para el entierro de la anterior madre mayor. La madre ayudante elegida fue Isabel de San Francisco.30 En 1728, el Pozo Santo tenía 90 personas entre enfermas, hermanas y sirvientes. La madre mayor sugirió por ser su renta corta y la necesidad muy grande, viviendo con carencias, le parecía preciso que igual que la hermandad de la Caridad se debía nombrar diputación en el hospital del Pozo Santo para que se pidiese limosna para trigo y otras cosas para su sustento.31 En 1728, Flora Francisca fue reelegida como madre mayor.32 Ejerció el cargo por 11

AHPSse, Libro cabildo 4756(1715—1718) 18/07/1715. AHPSse, Libro cabildo 4756(1715—1718) 07/07/1715 26 AHPSse, Libro cabildo 4756(1715—1718) 8/08/1716. 27 AHPSse, Libro cabildo 4757(1719—1723) 03/09/1719. s/f 28 AHPSse, Libro cabildo 4758(1723—1727) 12/01/1726 29 AHPSse, Libro cabildo 4758(1723—1727) 06/07/1726 30 AHPSse, Libro cabildo 4758(1723—1727) 07/07/1726 31 AHPSse, Libro cabildo 4759(1727-1732) 11/04/1628, s/f. 32 AHPSse, Libro cabildo 4759(1727-1732) 1/08/1628, s/f. 24 25

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Cultura de los Cuidados años. Al mes se nombró como madre ayudanta a Feliciana de Santa Teresa quien en 1737 se convirtió en madre mayor.33 El primer problema de consideración que provocó el despido de la madre mayor Feliciana de Santa Teresa y del capellán del Pozo Santo a pedido del provisor que acató la Hermandad de la Misericordia(1737) El 3 de agosto de 1738, la madre mayor Felisiana de Sta. Teresa había realizado una petición en la que dijo necesitaba hacer suministro de 400 fanegas de trigo para el año y que aunque había hecho muchas diligencias sólo había podido juntar 7 fanegas de limosna, por lo cual se dirigió al arzobispado de Sevilla, logrando hablar con el arzobispo a quien manifestó que no tenía dinero para comprar el trigo. Al final lo cubrió el hospital del dinero que tenía en las arcas para pagar a los que trabajaban en la Misericordia. Acto frecuentemente practicado el prestarse dinero de otras obras pías para mantener a otras.34 El 16 de octubre de 1738, la madre mayor comunicó al cabildo de la Misericordia que era patrono administrador no tener bastante dinero para el abastecimiento de trigo. No fueron suficientes los 4.015 reales que quedaron líquidos del medio año de 1737 de la pensión que pagaba el arzobispo cuya libranza se le había entregado con acuerdo del cabildo general de 3 de agosto de 1738 para que la cobrase, ni tampoco con los 20.001 reales que por acuerdo del cabildo de 7 de septiembre de ese año se le

libraron por cuenta de las rentas del mencionado hospital, además de que aquella libranza no se había podido cobrar. La madre mayor solicitaba con el arzobispo le mandase pagar y siendo precisas 400 fanegas de trigo era corta la mencionada cantidad por lo cual solicitó al cabildo que diese algún dinero perteneciente al Pozo Santo o lo que el cabildo tuviese por más conveniente le mandase despachar para la referida provisión de trigo. Este pedido de la madre mayor no fue atendido.35 Ese mismo día, el padre mayor propuso que era necesario que tuviesen voto resolutivo los diputados de la junta para las cosas relativas al hospital del Pozo Santo sobre todo en los casos graves. Sin embargo en su creación se les dio voto consultivo, por lo que los hermanos decidieron realizar un cabildo extraordinario para deliberar el asunto. Otros puntos a tratar eran arrendar o vender la hacienda de campo que tenía el Pozo Santo por considerar algunos no ser útil su administración y que se le diese otro uso. Los hermanos eligieron entre ellos a dos diputados con capacidad de reformar y arreglar lo que les pareciera en el asunto encomendado. El cabildo les encargó a los diputados del Pozo Santo estudiar la mejor decisión en cuento a la venta o arriendo de la hacienda y la reforma necesaria en la panadería del beaterio.36 Sin embargo a los pocos días, la madre mayor Feliciana Teresa de Santa Teresa y las demás madres del hospital volvieron a pedir dinero para el trigo que necesitaban a pesar que la Misericordia había rechazado este pedido.

AHPSse, Libro cabildo 4759(1727-1732) 14/09/1628, s/f; AHPS, Libro cabildo) 4761(1736-1741) 27/01/1737, f.11r. AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 08/09/1738. El 21 de mayo de 1737 había hecho esta junta por provisión del cabildo en que se propuso que para tomar satisfacción de 110 reales que la Misericordia le había suplido del caudal de arcas corrientes se le descontasen en el tiempo de 4 años de las rentas que se le administraran de juros y tributos y que de lo demás que de ella sobrase lo recibiese el Pozo Santo para su mantención además de las rentas que estaban a cargo de Agustín de Valderrama ,su receptor, y las limosnas y demás efectos que le pertenecen lo que se aprobó en el cabildo de 7 de abril de 1737. 35 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 16/10/1738 36 AHPSse, Libro cabildo) 4761(1736-1741) 16/10/1738 33 34

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Cultura de los Cuidados “Viose un memorial de la madre mayor Feliciana Teresa de Santa Teresa y de las demás madres del hospital de que este cabildo es patrono administrador en que dicen que por los señores padre mayor y diputados de dicho hospital se les hizo saber lo acordado en el cabildo del 5 próximo pasado y hallándose con diferentes reparos sobre los puntos que contiene y no siendo tan fáciles dar entero cumplimiento de ellos por necesitarse de consulta y no poderse dar prontamente pues se necesita de tiempo dilatado para la referida consulta suplicaron a este cabildo se sirviese suspender el referido acuerdo quedando por ahora obedientes a sus mandatos sin perjuicio del derecho que a dicho hospital puede pertenecer por su regla y fundación . Y asimismo suplicaron que mediante estar manteniéndose con bacalao no teniendo trigo y necesitando de diferentes provisiones como lo manifestaron a esta cabildo, si de presente hubiese algún caudal de las rentas de dicho hospital o de lo que este cabildo tuviese por conveniente se les entregase y habiéndose conferido se acordó de conformidad se guarde lo acordado y este memorial se remite a la junta que está formada para lo tocante a dicho hospital para que se ejecute lo que le pareciese en orden a la necesidad que representa dicho hospital”.37 Al cabo de un mes, el provisor había enviado a la Misericordia un dictamen escrito el 15 de diciembre de 1638 que se leyó en el cabildo de la casa pía sobre convenir sin dilación el

despedir al capellán del Pozo Santo y nombrar a otro, como también otra madre mayor y ayudantes para que hubiese la paz que se deseaba y se pusiese en orden lo demás que fuese conveniente, dispensando por esta vez la formalidad que para ello exigía la regla del hospital, pues así lo tuvo por conveniente después del escrutinio y visita que hizo al beaterio el día 14 de diciembre. El provisor sugirió a una de las madres como madre mayor, aunque sabía que la hermandad de la Misericordia nombraría la que le pareciese. Al día siguiente, el 16 de diciembre de 1738, se realizó el cabildo extraordinario en la Misericordia en donde fueron nombrados como diputados el conde del Águila y el conde de Mejorada para que investigaran que pasaba en el Pozo Santo e informaran al cabildo para tomar una decisión. “En 1638, en vista de todo lo que se ha expuesto por escrito y de palabras en este cabildo tocante a dependencia del hospital del Pozo Santo de que es patrono administrador se acordó de conformidad el nombrar a el sr. Conde del Águila para que con el de Mejorada ejecuten lo que llevan entendido y que dé resulta de su comisión se aboquen con el sr. arcediano de Sevilla para que practique su comisión y el manifiesto que se ha extendido para el sr. arzobispo se comete a el sr. Alonso de los Ríos para que lo proporción de acuerdo con el contador mayor según la postura que ha tomado el negocio de que se trató en este cabildo”.38 La investigación llevó al cabildo de la Misericordia a despedir al capellán y a la madre

AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 31/10/1738 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 16/12/1738 cabildo extraordinario.

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Cultura de los Cuidados mayor porque estaban exigiendo dinero para comprar trigo que no alcanzaba en el Pozo Santo, incluso fueron a ver al arzobispo de Sevilla y al Provisor para manifestarles las razones por las que la hermandad de la Misericordia había tenido para mudar de gobierno en diferentes cosas tocantes al hospital del Pozo Santo del que era patrono administrador. Los diputados lograron informar verbalmente solo al provisor, mas no al arzobispo por encontrarse fuera de Sevilla, sin embargo supieron que estaba enterado de lo que pasaba. El provisor indicó que permitía en su nombre y en el del arzobispo que la Misericordia, como patrono que era del Pozo Santo, aplicara las correcciones que creyera oportunas El padre mayor formó cabildo extraordinario en el que se volvió a leer el papel del provisor, opinando los hermanos sobre el tema. El cabildo aceptó la dispensa de la regla que el provisor le concedió por esta vez para el nombramiento de la madre mayor y ayudante y cambiar al capellán, conformándose con el dictamen del mencionado inspector. El cabildo escuchó a los diputados de lo que había pasado con el provisor en cuanto a las novedades que se habían ocasionado por la madre mayor y capellán del hospital del Pozo y la forma que gestionaban y cuya consecuencia había creado perjuicio al hospital en cuanto a su régimen y buen gobierno, asistencia y cuidado de las enfermas en cuanto a la superfluidad con que se había procedido y otros daños irreparables que la hermandad y el provisor habían reparado, inclinándose a que no había otra solución que cambiar a las cabezas. “El motivo del despido fueron las novedades que habían ocasionado la madre mayor y el capellán del hospital de que la en el modo y forma que AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 19/12/1738.

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practicaban que había ocasionado daño y perjuicio al hospital, en su régimen y buen gobierno asistencia y cuidado de las enfermas y superfluidad con que se había procedido y otros daños irreparables que así por esta hermandad como por dicho sr. provisor se han reparado”.39 El capellán Isidoro de Rivera fue despedido en adlibitum et adnutum porque fue nombrado por el tiempo que quisiera la hermandad y también por el veredicto proveniente de la visita y escrutinio que el provisor personalmente realizó formalmente en el Pozo Santo. Prohibiéndole que bajo ningún pretexto pudiese incluirse en la iglesia ni en el hospital ni en la hacienda de campo que tenía. Obligándosele que cumpliera lo mandado, dejando el cuarto que ocupaba. Mientras tanto el cargo lo ocupó un sacerdote que eligió el padre mayor hasta que el cabildo en pleno nombrara a otro capellán. Por las mismas razones expuestas, la madre mayor Teresa fue separada del cargo, no pudiendo ejercerlo nunca más ni siquiera el de ayudante. El cabildo siguió el consejo del provisor, eligiendo a la madre Antigua por madre mayor y en la misma forma por madre ayudante a la madre Concepción. El padre mayor y el secretario les comunicaron la decisión para su aceptación y a todas las demás hermanas para que las consideraran madre mayor y ayudante para que las obedecieran en todo. Ambas madres nombradas tomarían las llaves de todos los cuartos del hospital, así como de la despensa para hacer las distribuciones del caso. Una vez terminado el cabildo extraordinario, el padre mayor don Luis de Castilla y Guzmán acompañado del Conde de Villlanueva, el

Cultura de los Cuidados marqués de Vallehermoso, Francisco de Paiva Torres, conde del Águila, conde de Mejorada y de Francisco de Villasis y el secretario de la Misericordia fueron al Pozo Santo. Reunidos todos los mencionados además del capellán del hospital, la madre mayor, la ayudante y la mayor parte de las demás hermanas en la sala principal del Pozo, se leyeron los acuerdos tomados en el mencionado cabildo el que se despedía al capellán, se suspendía de sus cargos a la madre mayor y ayudante. Mientras se eligiera a la nueva madre mayor, se eligió a la madre Antigua y a la madre Concepción por su ayudante. Al cabo de algunos días, el contador de la Misericordia realizó un informe que en virtud de lo acordado en el cabildo general del 1 de febrero de1739, se pusieron edictos por 15 días, llamando a los parientes hacedores y confesores para nombrar al capellán de misas que en el hospital del Pozo fundó Ana de Trujillo y habiéndose cumplido el termino no había acudido pariente alguno y sólo Felipe Ponce y Figueroa, cura de la iglesia de San Andrés y capellán mayor del hospital, pretendiendo que se le nombrara. Entrego memorial y el cabildo acordó nombrarlo el 4 de enero de 1739.40 La actitud del nuevo capellán era de completa supeditación a la Misericordia, no tomando resolución alguna sin antes consultarle. Felipe Ponce y Figueroa, preguntó si se habían de cumplir las memorias que tenía obligación el hospital del Pozo, proveniente de las diferentes memorias de misas cantadas y rezadas de que presentó nómina y que habiéndose dejado de celebrar como la del día de la Purísima Concepción y estando próxima la que tocaba

que era el día de San José, no habiendo en el hospital cómo satisfacer sus costos avisaba al cabildo si se iba a cumplir con aquella memoria.41 La administración del Pozo Santo después de la remoción de las autoridades de sus autoridades por la Misericordia ( 1739- 1745 ) durante la gestión de la madre mayor María de la Antigua La Misericordia tenía que tomar las resoluciones y no la madre mayor ni el capellán como antiguamente se hacía. Así que el cabildo determinó que en casos de urgencia la Misericordia prestaría al Pozo Santo 10000 y 2000 reales, proveniente de las arcas corrientes, pero esta cantidad ya se había comprobado que no era suficiente para cubrir los gastos en trigo, carne, aceite, legumbres, gastos menudos y manutención de las enfermas, de la madre y hermanas que asistían y del culto llevado a cabo por el capellán mayor. Según la contaduría, el Pozo tenía una renta corriente de un juro del que recibía una pensión 1000 reales que le pagaba la dignidad arzobispal, pero las demoras de la cobranza como era habitual en toda renta, provocaba retrasos en su cobranza. La consecuencia inmediata era la necesidad de un suplemento y adelanto que en ocasiones podía subir de los 2000 reales, otorgada por la Misericordia. El cabildo llevaba cuenta y razón de todos los gastos efectuados y del estado del Pozo a través de los recibos de la madre mayor, firmados por los diputados de la comisión. De esta manera, el cabildo llevaba las cuentas y sabía el estado del Pozo Santo anualmente.42

AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 04/01/1739. Giménez Muñoz, María Carmen (2006) “Breve historia de los establecimientos benéficos de Sevilla desde su fundación hasta 1900”, en Hispania Nova. Revista de Historia Contemporánea, núm. 6. Sevilla, Universidad-Departamento de Historia Contemporánea, 2006, p.10. 41 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 01/03/1739 42 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 01/03/1739 40

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Cultura de los Cuidados En 1739, el padre mayor dio cuenta que la madre mayor suspendida de ejercer algún cargo en el Pozo llamada Feliciana Teresa de Santa Teresa por acuerdo del cabildo extraordinario del 19 de diciembre del 1738 era de las más antiguas del hospital, habiéndose retirado en el interior de él, ejerciendo los oficios más humildes y que estaba arrepentida de su accionar. Su intención habría sido “el aumentarlo y solicitar sus alivios” y que “lo que hubiese faltado, nació de ignorancia, lo noticiaba todo dicho ser”. El cabildo acordó de conformidad que la madre Santa Teresa quedara apta para poder ejercer el empleo de madre mayor y el de ayudante, siempre que este cabildo le nombrara a ello, sin que sirviera de impedimento el haberla suspendido por el citado acuerdo. Incluso, el cabildo devolvió la buena opinión y fama que tenía antes.43 El cabildo extraordinario del 19 de diciembre de 1738 había prohibido que el Pozo lavara la ropa de la iglesia y de sacristía de la Misericordia, pero se volvió a hacer al año siguiente. Así, en 1739, el padre mayor dio cuenta de que la madre mayor le había hablado repetidas veces al cabildo de la Misericordia para que la mencionada ropa se volviese a lavar en él como antes se hacía lo que se comunicó al cabildo para que lo determinase. La ropa de la iglesia sería llevada al Pozo por el atento aseo con que lo hacían las madres.44 En 1740, el cabildo aplicó lo acordado en el cabildo del 1 de marzo de 1739 de que todo lo que procediese de las rentas pertenecientes al hospital del Pozo, incluso la pensión y lo que

sobrase de la hacienda de campo, entrase en poder de su receptor don Agustín de Valderrama que daría cuenta de lo que hubiese cobrado anualmente y que en el ínterin fuese supliendo de los caudales de la Misericordia.45 El capellán mayor había realizado diferentes memorias que ascendía a la suma de 204 reales que no fueron pagadas por el Pozo Santo y no tenía como pagarlos por la brevedad de la limosna que se juntaba. La Misericordia no dio lugar a la ayuda económica que pedía.46 En 1740, la madre mayor fue María de la Antigua y su ayudante Juana de la Concepción y el capellán mayor fue José de Ávalos. Sin embargo, en la elección de 1741 hubo un acontecimiento fuera de lo normal, la madre ayudante no quiso proponer a ninguna madre mayor y solo indicó que no quería ser ya más ayudante. La Misericordia la amonestó y le dijo que debía hacerlo la próxima vez y advirtió a la nueva que debía hacerlo y no concurrir en la falta de la madre Concepción.47 Aquel año, Manuela de Santa Rita fue elegida y reelegida la anterior madre mayor.48 La madre mayor pedía que se deshiciera del campo que administraba el Pozo porque en él se gastaban las limosnas y exigía una mejor administración que se asignó a una comisión de diputados de la Misericordia. En el tiempo que ejerció el cargo había experimentado lo inútil que era para el hospital el administrar la hacienda de campo que tenía, pues además de gastar en los beneficios sus frutos, gastaba cuanto adquiría de limosnas, representando otros diferentes inconvenientes por lo que

AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 03/05/1739, f. 199 r-v. AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 03/05/1739, f. 199 v. 45 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 03/01/1740, f. 256r. 46 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 11/08/1740, f. 295rv 47 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 07/01/1741, f. 336r-337v. 48 AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 07/01/1741. ADPS. Legajo 8. Donación de la Manuela de Santa Rita, madre mayor del hospital (1733-1755), n°20 43 44

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Cultura de los Cuidados siendo en perjuicio de las pobres suplicó ante el cabildo dispusiese de su administración o propiedad para que administrada bien su producto sirviese de alivio al hospital. En este caso, la madre mayor exigió mejor administración de las propiedades para que el Pozo Santo satisficiera su mantenimiento. El cabildo pidió a la comisión de diputados informara la real situación en cuanto a la renta y arrendamiento de los bienes que pertenecieran al Pozo para hacérselo saber al padre mayor.49 Finalmente después de la queja el terreno fue vendido. A pesar de las exigencias impuestas por la Madre mayor al cabildo de la Misericordia siguió en el cargo, siendo reelegida en 1743, así como su ayudante María de Santa Rita.50 En 1744, la madre María de la Antigua pidió a la Misericordia que le proveyera del aceite que necesitaba que lo solía obtener de la hacienda de campo que había pertenecido al Pozo Santo, pero que la Misericordia había vendido. El cabildo accedió.51 Como observamos la madre mayor volvió asumir el papel denunciador que siempre tuvo, necesario para la estabilidad del beaterio y que la Misericordia solía escuchar y atender. Volviendo a la normalidad, la gestión de la madre mayor Manuela de Santa Rita(17451746), Petronila de San Francisco (17461748) y María de San Bernando (1748-1752) En 1745, la elección de la madre mayor recayó en Manuela de Santa Rita y como su ayudan-

te Petronila de San Francisco.52 En 1746, la madre mayor Manuela de Santa Rita murió el 12 de marzo de ese año y se eligió una nueva Petronila de San Francisco que había sido madre ayudante y como ayudante María de San Bernardo.53 En 1748, se nombró a la madre María de San Bernando como madre mayor54 y a Petronila de San Francisco como madre ayudante.55 En 1748, la madre María de San Bernardo del Pozo dijo que le avisaron los diputados de haberse perdido la pensión de 1000 ducados que gozaba sobre las rentas del arzobispado sevillano. Esta situación afectaba gravemente a los gastos diarios del beaterio. La madre mayor estaba determinaba a ir a la corte para lograr que por intercepción del rey pudiese hacer algo por recuperar esta donación, para que no quedase el desconsuelo de no haberse realizado cuantos medios hubiesen sido posibles para recuperarlo. La madre estaba consciente que era necesario hacer varios gastos para ir a la Corte y no teniendo el Pozo Santo dinero para hacerlo, suplicó al cabildo entregarle los medios económicos para hacerlo. También pidió que el abogado Juan Trillo de la Misericordia elaborara dos memoriales uno para el rey y otro para la reina. El cabildo acordó aprobar la resolución de la madre y para facilitarlo se dio comisión al padre mayor y diputados para que discutieran lo que se necesitara gastar en el viaje.56 Logro que se volviese a donar el dinero. De esta manera la madre mayor elaboró

AHPSse, Libro cabildo 4761(1736-1741) 05/02/1741, f. 344v. 345r AHPSse, Libro cabildo 4762(1741-1746) 12/01/1743 51 AHPSse, Libro cabildo 4762(1741-1746) 09/02/1744. Memorial de la madre María de la Antigua, madre mayor, de que esta cabildo es patrón. 52 AHPSse, Libro cabildo 4762(1741-1746) 02/01/1745 53 AHPSse, Libro cabildo 4762(1741-1746) 13/04/1746 54 AHPSse, Libro cabildo 4763(1746-1751) 28/04/1748, f 121r-v. 55 AHPSse, Libro cabildo 4763(1746-1751) 05/05/1748, f 126r. 56 AHPSse, Libro cabildo 4763(1746-1751) 29/09/1748, f 134v-135v. ADPS. Cartas dirigidas a la Madre mayor (siglos XVII y XIX), legajo 1, s/f. En el Archivo de la Diputación Provincial de Sevilla en el fondo del Pozo Santo se hallan varias cartas enviadas a las madres mayores de personas, hombres y mujeres, que estaban en Aranjuez o en Madrid con los reyes. En una de ellas relata el fallecimiento de Carlos Domingo Eusebio, hijo del futuro Carlos IV y María Luisa de Borbón-Parma el 11 de junio de 1783. El rey en aquel entonces era Carlos III. 49 50

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Cultura de los Cuidados la idea y la ejecutó, cumpliendo largamente lo que se esperaba de su gestión, abogar por el Pozo Santo. Independencia plena, pues solo notificó su decisión a su patrona, la Casa de la Misericordia. En 1750, relección de madre mayor María de San Bernardo por dos años.57 Los capellanes del Pozo Santo y la gestión de la madre mayor Josepha de la Presentación (1752-1775) y Isabel del Espíritu Santo(1775-1783) (1785-1798), Isabel de San Cristóbal(1783-1785) y la madre mayor del Pozo Josefa de Santa (1798) En 1752, el cabildo propuso a Josepha de la Presentación como madre mayor del Pozo Santo y en segundo lugar quedo Josefa de Santa Marta.58 Ambas fueron reelegidas en 1754.59 En 1756 fue nombrado contador del hospital del Pozo Santo Martin de Arrieta.60 En 1758, 1760 y 1762 el mismo dúo de mujeres fue reelegido.61 En 1760, el padre mayor informó al cabildo que la madre mayor del Pozo Santo pidió licencia para ir a Madrid para pasar a la corte en solicitud de que continuara la pensión de mil ducados que gozaba el hospital sobre las rentas de este arzobispado que estaba para cumplir el año próximo.62 En 1764, la madre mayor del Pozo solicitó al cabildo permiso para comenzar la construcción de una enfermería y un dormitorio de co-

munidad para cuyo fin se había incorporado en 1757, la casita que hacía esquina con la calle de la Coneja. La madre mayor había conseguido del rey el valor de 13 o 14 mil reales en madera de Segura y de diferentes bienhechores de la corte y de la ciudad de Sevilla hasta 1.300 ducados. La madre mayor estaría al cargo el seguimiento del trabajo hasta su término.63 La madre Josepha de la Presentación ejerció el cargo de madre mayor desde 1752 hasta 1775 y durante su cargo incorporó al Hospital del Pozo Santo la devoción a la Virgen del Tránsito, según el capellán mayor del Pozo, José Ávalos y Urrieta. Esta madre trabajó durante estos años hasta 1770 con su ayudante José de Santa Marta.64 En 1774, trabajó junto a una nueva ayudante llamada Isabel del Espíritu Santo.65 En 1775, al fallecer la madre mayor fue Isabel la que asumió el cargo máximo con la ayuda de Isabel de San Cristóbal.66 Un envejecido capellán, Joseph de Valos y Urrieta trabajó en el hospital desde 1739 y dejó aquel cargo en 1778 en muy avanzada edad y con achaques, se le pagaba 1500 reales, y una casa contigua al hospital y postigo a su zaguán. Además tenía que cumplir una memoria de misas a 6 reales, fundada en el mismo hospital por Ana de Trujillo, aunque estuviese empeñada según tanteo. A este capellán se le jubiló y se nombró a Antonio Fontanez y Neve.67

AHPSse, Libro cabildo 4763(1746-1751) 03/05/1750, f. 294v. AHPSse, Libro cabildo 4764(1751-1756) 05/05/1752 f 61 r-v 59 AHPSse, Libro cabildo 4764(1751-1756) 10/05/1754 f 198 r-v. 60 AHPSse, Libro cabildo 4765(1756-1761) 05/12/1756 folio 1v 61 AHPSse, Libro cabildo 4765(1756-1761) 06/05/1758 folio 112v. AHPS, Libro cabildo 4765(1756-1761) 02/05/1760; AHPSse, Libro cabildo 4766(1761-1765) 08/05/1762. 62 AHPS, Libro cabildo 4765(1756-1761) 20/04/1760, f. 264r. ADPS. Cartas dirigidas a la Madre mayor (siglos XVII y XIX), legajo 1, s/f. 63 AHPSse, Libro cabildo 4766(1761-1765) 11/03/1764. 64 AHPSse, Libro cabildo 4766(1761-1765) 05/05/1764; AHPS, Libro cabildo 4766(1761-1765) 31/05/1766; AHPSse, Libro cabildo 4767(1767-1772) 04/06/1768, f. 89 v.; AHPSse, Libro cabildo 4767(1767-1772) 16/06/1770, f. 223 r. 65 AHPSse, Libro capitular de acuerdos de cabildos y juntas de la Casa Misericordia de Sevilla. 4768(1772-1778) 01/05/1774, f. 103 r-v 66 AHPSse, Libro cabildo 4768(1772-1778) 05/05/1775, f. 179v. 67 AHPSse, Libro cabildo 4768(1772-1778) 24/05/1778, f. 340v y 340r. 57 58

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Cultura de los Cuidados En 1779, un memorial presentado por Joseph Alvarazin y Troya, presbítero, vecino de Sevilla, solicitaba que la Misericordia le nombrase capellán mayor del Pozo Santo por tener todas las cualidades para aquel oficio, además era “pobre cargado de familia”, y haber estudiado filosofía y teología. Por años había sido teniente de cura de la iglesia parroquial de San Pedro y tenía corriente su licencia de confesar hombres y mujeres. La contaduría informó que aquella capellanía ofrecía 1500 reales anuales y casa. El capellán tenía la obligación de confesar y decir misa fundada por Ana de Trujillo a 6 reales de limosna que al año acumulaban 128 reales, sujetas a los vaivenes de la finca. Este cargo se hallaba vacante por desistimiento hecho por Antonio Fortanez que había sido nombrado por cabildo extraordinario el 24 de mayo de 1778, por jubilación de Joseph Avalos.68 Sin embargo, al cabo de un mes, la madre mayor se quejó del capellán José de Alvarazin ante el cabildo.69 En 1783, la madre Isabel de San Cristóbal fue nombrada como madre mayor.70 Ese mismo año, Clara Chamorro y Sotomayor quedó como única beneficiaria del testamento de Manuel Larios. Había fundado un vínculo en favor de ciertas personas y de mujeres de su linaje, disponiendo que a falta de ellas recayeran sus fincas en el Pozo Santo para los fines que dejaba dispuesto. El cabildo debía resolver lo que estimara, mandando dar certificación

para presentarla en el juzgado de testamentos. El padre mayor firmó decreto para que el abogado Nicolás de Herrera reconociera los testimonios que se presentaban, es decir el testamento y codicilo de Martín Larios realizado ante Antonio de Madariaga, secretario público de Sevilla, en 11 y 23 de noviembre de 1778, en que nombró por una de sus albaceas a la citada doña Clara dándole amplias facultades para la admisión del caudal, fundando un vínculo en favor de su sobrina María de los Dolores Aguirre, para que residiese y estudiase en el convento de Santa Clara de Sevilla, hija de don Francisco Javier de Aguirre y de doña Ana Larios, vecinos del reino de Guatemala, y sus hijos si llegare el caso de tomar estado de casada y si fuese religiosa debía el día de su profesión pasar a su hermano Luis Pedro de Aguirre y Larios, ausente. Si hubiese falta de sucesión entonces los bienes del citado vínculo pasarían al hospital del Santo Cristo de los Dolores de la que destinaría 300 reales algo más o menos para el costo de una fiesta anual de Nuestra Señora del Tránsito. El resto del dinero sería destinado a mantener una o más camas de enfermas.71 En 1785, nombramiento de la madre mayor Isabel del Espíritu Santo y su ayudante Isabel de San Cristóbal.72 En 1787 y 1788, relección de madre mayor Isabel del Espíritu Santo y su ayudante Isabel de San Cristóbal.73 En 1789,1791 y 1793 fueron reelegidas las mismas.74

AHPSse, Libro cabildo 4769(1778-1786) 19/ 10/1779, f. 58 v-59 r-v. AHPSse, Libro cabildo 4769(1778-1786) 13/ 11/1779, f. 69rv 70 AHPSse, Libro cabildo 4769(1778-1786) 04/05/1783, f.256r 71 AHPSse, Libro cabildo 4769(1778-1786) 02/ 11/1783, f.278r-279v. 72 AHPSse, Libro cabildo 4769(1778-1786) 30/ 04/1785, f.346v. 73 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4770(1786-1797) 05/03/1787 f.23. ADPS. Cartas a la madre mayor, legajo 1, s/f. La madre mayor Isabel del Espíritu Santo enviaba estampas de Nuestra Señora del Transito según consta en la carta mandada a la madre el 12 de agosto de 1786. 74 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4770(1786-1797) 02/05/1789, f. 95v. Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4770(1786-1797) 04/06/1791, f. 180r-v Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4770(1786-1797) 06/06/1795, f. 347vv 68 69

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Cultura de los Cuidados Una madre mayor pidió que se la exonerase del cargo, pero el cabildo accedió a que eligiese la ayudante que necesitara para ayudarla y aliviara su trabajo, descargándosela a la madre ayudante. En 1798, la madre mayor del Pozo Josefa de Santa Gertrudis renunció a su cargo por su mala salud, que no le permitía dar cumplimiento a las obligaciones de su empleo, pidiendo al cabildo el desistimiento formal y su exoneración. El cabildo accedió que la madre segunda se ocupara de todos los asuntos que la madre mayor no pudiese poner en práctica por su falta de salud y que si necesitara alguna compañera que le ayudara, la madre mayor la eligiera de las demás asistentes del hospital a su voluntad.75 En 1799 se reformaron las reglas del Pozo.76 Las últimas madres del Pozo Santo y su relación con la Casa Pía de la Misericordia En 1803, relección de Mercedes como madre mayor y a su ayudante la madre San Agustín.77 En 1805, la madre María Ana de San Agustín y la madre mayor Paula de las Mercedes comunicaron a la Misericordia que para hacer las provisiones de bacalao, potajes, leña, carbón y suplemento de pan, de la pasada cuaresma le había sido preciso a la actual madre mayor pedir prestado la cantidad de 2.720 reales y a la pasada los 9.762 reales cuyas dos partidas componían 12.492 reales y no pareciéndoles justo detener por más tiempo el pago de un dinero que les habían prestado por el bien del Pozo Santo. La madre mayor consideraba su deber quedar bien con estos sujetos

para que repitiesen esta ayuda cuando se encontrara en apuros el Pozo.78 En 1819, la madre mayor María Teresa de San Basilio, las madres y las otras mujeres del Pozo Santo pidieron nombrar un diputado sacerdote que procediera al escrutinio y elección de la madre mayor y a quien pudiera acudir en los casos puramente espiritual como sucedía en los demás conventos y beaterios. Pero, la Misericordia no lo aceptó e indicó que era muy impropia e inconveniente su conducta y por lo tanto podría hacérseles varios cargos.79 Esta vez la Misericordia no despidió a la madre mayor sino que quedó en una amonestación. Las camas ocupadas por enfermas que fallecían se sometían a un concurso público para volver a ocuparlas, poniendo avisos o edictos, comunicando la convocatoria. En fechas tan tardías como 1821, aún se llevaba a cabo esta costumbre. Así, el 20 de mayo, la madre mayor de las beatas daba cuenta de que había muerto María Barranco que ocupaba una de las camas de la dotación del Marques de Campo Nuevo y se acordó que se fijarían edictos por el término que prevenía la dotación.80 Algunas personas legaban testamentariamente una renta para mantener una cama a ocupar por un incurable y que era entregada a la persona que cumpliera con los requisitos impuestos por el testador. Una costumbre pía que se arrastraba desde siglos atrás en diferentes hospitales castellanos (Rivasplata, 2015, pp.81-118). En 1821, el alcalde constitucional y presidente de la junta municipal, Feliz María Hidalgo, hizo saber que en virtud del decreto de

AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4771(1797-1800)4/11/1798, p, 58v AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4771(1797-1800)1/18/1799 f, 92 r 77 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4771(1797-1800)30/04/1803, f 2210v 78 AHPSse, Legajo 22302, 14/06/1805. ADPS. Libro de cuentas con la casa de la Misericordia (1783-1796)(1787-1821), legajo 15, s/f. 79 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4772(1808-1821)16/08/1819 s/f. 80 AHPSse, Libro cabildo 4773(1821-1836) 20/05/1821. 75 76

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Cultura de los Cuidados cortes del 27 de diciembre del próximo había determinado la referida junta pasar a tomar posesión de la casa de la Misericordia y hospital del Santo Cristo de los Dolores del cual el primero era administrador.81 En 1821, el Pozo Santo fue admitido por los muchos atrasos y deudas a no ser de los fondos que estaban a disposición de la junta parroquial por lo que se le asignaría cuota suficiente para su manutención.82 Un año después, el padre mayor hizo presente que a consecuencia del oficio visto en el cabildo anterior vinieron a tomar posición de esta casa y el Pozo Santo los comisionados por la junta municipal de beneficencia y que Feliz María Hidalgo como presidente de la junta había nombrado interinos de la casa al padre mayor Osorio y a los claveros que lo acompañaban.83 Otra vez, una cama pagada por una dotación en el Pozo Santo se ofreció en llamamiento público en 1825. El Pozo cumplió con el llamamiento público y los edictos, convocando a las que quisieren postular a la cama vacante de la dotación del marqués de Camponuevo, teniendo presente lo dispuesto por el fundador, los memoriales presentados y lo informado en ella. Una vez terminado la convocatoria y entrega de documentos se procedió a votar para su provisión y salió nombrada por mayor parte de votos, Basilia López.84 Otra cama del

mismo patrono fue otorgado a Isabel Garina.85 En 1826, otra cama del mismo patrono lo ganó Rosa Morales.86 En 1828, madre mayor fue Carmen y su ayudante madre Jesús María.87 Y en 1830, la elección de la madre mayor recayó en Espíritu Santo y su ayudante la madre Nicolás.88 Asimismo, en 1832, fue reelegida la madre mayor Espíritu Santo y para segunda la madre Nicolás.89 Aún se nombraban capellanes en el Pozo Santo en 1836 cuando se presentó vacancia para la capellanía mayor del Pozo por fallecimiento de José Morín, eligiéndose a don José Gil, además a la madre Asunción como madre mayor y a su ayudante a la madre Jesús.90 CONCLUSIONES El beaterio y hospital del Pozo Santo se fundó a finales del siglo XVII. Asumió su patronato y administración externa la hermandad de la Misericordia que gestionaba la Casa Pía del mismo nombre, conocido como el “hospital de la Misericordia de Sevilla”. El beaterio hospital del Pozo Santo estaba dirigida internamente por una madre mayor, la cual tenía como responsabilidad velar por su mantenimiento y denunciar sus necesidades a su patrona, la Misericordia. Asumió a plenitud sus deberes y muchas veces sus iniciativas individuales fueron sólo comunicadas una vez realizadas.

81 AHPSse, Libro cabildo 4773(1821-1836) 04/08/1821 82AHPSse, Libro cabildo 4773(1821-1836) 04/08/1821. 83AHPSse, Libro cabildo 4773(1821-1836) 26/08/1822 84AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 10/11/1825, f,.66r. 85 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 23/12/1825,f.67v-r. 86 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 02/05/1826,f.76r. 87 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 23/12/1825,f.67v-r. AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 11/05/1828,f.115v-116r. 88 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 02/05/1830,f.149r 89 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 27/05/1832,f.177v178r 90 AHPSse, Libro capitular de acuerdos y cabildos y juntas que se hacen en la Misericordia 4773 (1821-1836) 11/05/1836,f.241r. f.243v y 244 r

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Cultura de los Cuidados tución y que se mantuvo como una costumbre entre algunas de las subsiguientes madres mayores. De esta manera se puede concluir que la madre mayor cumplió un papel crucial en el buen mantenimiento del hospital y, también, en la propagación de la fe de la Virgen del Transito Sevillana.

BIBLIOGRAFÍA - Carmona, J. I. (1989). La reunificación de los hospitales sevillanos. En Los hospitales de Sevilla. Sevilla: Academia Sevillana de Buenas Letras. - Collantes, F. (1884). Memorias históricas de los estable-

Exigía el dinero que le correspondía donado por testamento, denunciaba sus carencias o necesidades, recomendaba transacciones económicas que consideraba necesarias para el mantenimiento del establecimiento, solicitaba permiso para recaudar limosnas, etc. Sólo una vez la hermandad de la Misericordia siguiendo el consejo del procurador consideró que había extralimitado sus funciones y la madre mayor fue despedida junto al capellán en 1737. Aunque no se la arrojó del beaterio se la condenó al confinamiento y a no poder ejercer otra vez cargo alguno en el hospital. Mientras que al capellán se le expulsó. Esta decisión de la hermandad de la Misericordia fue mancomunada con el procurador del obispado sevillano. Sin embargo, paulatinamente, la madre mayor volvió a asumir su liderazgo y lo empezó la misma madre mayor recomendada por el procurador que expulso a la anterior. No cabiendo duda que la actitud demandante de la madre mayor obedecía a la necesidad de mantener en pie al hospital del Pozo Santo. Pronto las nuevas madres asumieron más responsabilidades y prerrogativas al grado que una de ellas inició el peregrinaje a la corte para pedir limosnas necesarias para el mantenimiento de la insti128

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cimientos de caridad de Sevilla y descripción artística de los mismos. Sevilla: Imprenta y Litografía de José María Ariza. - Gonzales, J. (1967). III Centenario del Hospital del Pozo Santo: 1667-1967. Sevilla: Graficas Sevillanas. - Gonzales, J. (2003). El Pozo Santo. Sevilla: Imprenta y Papelería Rojo. - Ortiz de Zúñiga, D. (1796). Anales Eclesiásticos y Seculares de la muy noble y muy leal ciudad de Sevilla. Madrid: Imprenta Real. - Rivasplata, P. E. (2014a). Las madres del buen morir del Hospital de las Cinco Llagas de Sevilla en el Antiguo Régimen. Erebea. Revista de Humanidades y Ciencias Sociales, 4, 81-118. - Rivasplata, P. E. (2014b). La madre mayor del Hospital de las Cinco Llagas de Sevilla en el Antiguo Régimen. Hispania Sacra, LXVI (134), 134-184. - Rivasplata, P. E. (2015). Las áreas de incurables del Hospital de la Sangre de Sevilla, Erebea. Revista de Humanidades y Ciencias Sociales, 5, 243-272. - Roda, J. (2005). Un crucificado hispano-filipino de marfil en el hospital del pozo santo de Sevilla, Laboratorio de Arte, 18, 321-326

Cultura de los Cuidados

Literatura y enfermería: Fuentes y saberes para investigación em historia

Literature and nursing: sources and knowledge for research in history Literatura e enfermagem: fontes e saberes para pesquisa em história Taka Oguisso1, Onã Silva2 1

Enfermeira e advogada. Professora Titular. Escola de Enfermagem da Universidade de São Paulo (aposentada). Membro do Grupo de Pesquisa em História e Legislação da Enfermagem Enfermeira. Doutora em Enfermagem. Graduada em Artes Cênicas. Poetisa do Cuidar. Presidente da Academia Internacional de Poetas e Escritores de Enfermagem. Escreve diversos gêneros literários. Brasília, DF.

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Cómo citar este artículo en edición digital: Oguisso, T., & Silva, O. (2017). Literatura e enfermagem: fontes e saberes para pesquisa em história. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.11 Correspondencia:Taka Oguisso. Av. Dr. Enéas de Carvalho Aguiar, 419 – CEP 05403-000 Cerqueira César - São Paulo – Brasil. Correo electrónico: [email protected] Recibido: 07/07/2016; Aceptado: 20/12/2016

ABSTRACT As a profession, nursing needs to define its humanitarian character and the caring culture through literature in support of its professional identity. Objectives: a) to present historical data of publications on nursing within literature of Brazilian and foreign authors; b) to identify contemporary nurses with production and publication in the literature field; c) to reflect on the interfaces between literature and nursing as humanistic knowledge for the caring art. Method: historical study based on documen-

tary analysis of literary works. Primary sources were literary works published by Brazilian or by foreign writers referring to nursing or nurses. Outcomes: After reading the literary texts by selected writers, were drawn out dialogues, texts or information related to nursing or the nurse’s job performed by the fictitious characters created by the writers. Conclusion: In fact, literature as an art and effective knowledge field for nursing studies and researches deserves more attention due to the humanistic, philosophical and more inclusive vision and the new look not addressed only to the world of contemporary sophisticated technology of the profession. Key words: Nursing, nursing history, literature. RESUMEN Como profesión la enfermería necesita definir su caracter humanitario y una cultura de cuidados mediada por la literatura en favor de 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados su identidad profesional. Objectivos: a) presentar datos históricos de publicaciones sobre enfermería, en obras de autoria de escritores brasileños y extrangeros; b) identificar enfermeros contemporáneos con producción y publicación en el campo de la literatura; c) reflexionar sobre las interfaces entre la literatura y la enfermeria como saberes humanísticos para el arte de cuidar. Método: Se trata de un estudio histórico basado en análisis documental de obras de literatura. Las fuentes primarias fueron las obras publicadas de escritores brasileños y estranjeros que tengan hecho referencia a la enfermería o la función del enfermero. Resultados: Despues de leídas las obras de escritores selecionados, fueron extraídos diálogos, textos o informaciones referentes a la enfermería o la función de enfermero por los personajes fictícios creados por eses escritores. Conclusiones: De hecho, la literatura como arte y campo del saber para estudios e investigaciones de enfermería.merece más atención por la visión humanística, filosófica y abrangente y con nuevo mirar no dirigido solamente al mundo de la sofisticada tecnologia contemporánea de la profesión. Palabras clave: Enfermería, historia de la Enfermería, literature. RESUMO Como profissão, a enfermagem precisa definir o seu caráter humanitário e uma cultura cuidativa mediada pela literatura, em prol de sua identidade profissional. Objetivos: a) Apresentar dados históricos de publicações sobre enfermagem, em obras de autoria de escritores brasileiros e estrangeiros; b) Identificar enfermeiros contemporâneos com produção e publicação no campo da literatura; c) Refletir sobre as interfaces entre literatura e enfermagem como saberes humanísticos para a arte do cuidar. Método - Trata-se de um estudo histó130

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rico baseado na análise documental de obras literárias. As fontes primárias foram obras literárias publicadas, de escritores brasileiros e estrangeiros, que tenham feito referência à enfermagem ou ao ofício de enfermeiro. Resultados: Após leitura das obras de escritores selecionados, foram extraídos diálogos, textos ou informações referentes à enfermagem ou ao ofício de enfermeiro pelos personagens fictícios criados por esses escritores. Conclusões: De fato, a literatura como arte e campo do saber para estudos e pesquisas da enfermagem merece mais atenção, pela visão humanística, filosófica e abrangente e com um novo olhar não dirigido apenas ao mundo da sofisticada tecnologia contemporânea da profissão. Palavras-chave: Enfermagem, história da Enfermagem, literatura.

INTRODUÇÃO Uma profissão dedicada ao bem-estar humano e melhoria social precisa cultivar, apreciar e produzir saberes literários que formem e expressem o seu caráter humanitário. Como profissão, a enfermagem precisa definir o seu caráter humanitário e uma cultura do cuidar mediada pela literatura, em prol de sua identidade profissional – cuja realidade é dominada pela tecnologia, direcionada pela ciência e orientada por crises. John Stone, médico cardiologista, escritor e poeta, em seu livro “No país de corações”, descreveu como a literatura pode ser útil aos profissionais de saúde. Margretta Styles e Patrícia Moccia, qualificadas enfermeiras americanas, adaptaram para o mundo da enfermagem as considerações de Stone. Refletindo sobre esse olhar, da literatura para os profissionais de saúde podem ser destacados os seguintes benefícios:

Cultura de los Cuidados - Poderosa ressonância entre os saberes da enfermagem e literários; - Enfermeiros e escritores extraem das mesmas fontes, isto é, do encontro com as pessoas e suas indeléveis histórias e o uso hábil e competente dos sentidos; - A literatura tem função laboratorial, pois as pessoas podem inspirar uma série de estórias que, misturadas ao tempo, formam fascinantes contos; - A literatura oferece oportunidades de catarse, inspirações pessoais e apoio; - A literatura não é algo extracurricular; é um dado concreto, não um apêndice; - A literatura proporciona oportunidade para reflexão; - Escrever um texto literário é terapêutico em si e por si. O estudo de literatura relacionada à enfermagem constitui um laboratório propício, provocativo e catártico e até eventual apoio para enfermeiros. Pode também favorecer um movimento para que os cursos de enfermagem – no seu papel de educar em nível de graduação ou pós-graduação – possam infundir a cultura e a literatura no currículo, por meio de palestras e atividades literárias e de humanidades. Ler e escrever sobre os fatos cotidianos põe uma face humana no conteúdo biopsicossocial e aprofunda o significado intrínseco da enfermagem. Ademais, envolver-se na literatura torna o profissional mais culto, com visão mais ampla, enriquecendo sua vida e sua prática. Todas as formas literárias são produções importantes: poemas, biografias, ensaios, contos, romances, artigos, editoriais ou estórias abrangendo todos os tempos, culturas e nações. O que é literatura? Diferentes dicionários a definem ora como a arte de compor ou escrever trabalhos artísticos em prosa ou verso

(Aurélio); ora como arte de compor escritos, em prosa ou em verso, de acordo com princípios teóricos ou práticos (Michaelis); e também como a arte da utilização estética da linguagem escrita, arte literária (Houaiss). Todos os três dicionaristas da língua portuguesa são unânimes em afirmar que a literatura é uma arte. Sendo uma arte, essa escrita deve caracterizar-se pela excelência – na forma ou expressão – ou ainda pelas ideias de interesse permanente ou universal. Ao contrário de livros-texto ou relatórios técnicos, a literatura deve conduzir o leitor ao discurso ou narrativa e levá-lo a alcançar a profundidade da compreensão ou do sentimento. Exemplificando, a partir de um texto cientifico é possível conhecer os últimos achados sobre a fisiologia do envelhecimento, mas a literatura possibilita saber como é a experiência de envelhecer e quais são as percepções dos idosos. Assim, a literatura oferece uma conexão vital entre o profissional e o leigo porque o fato torna-se compreensível e interessante a ambos. A literatura faz interfaces entre as profissões e campos do saber, pelo grau de desenvolvimento intelectual, sensibilidade e valorização. A literatura é duradoura e não envelhece. Pode refletir a época em que foi escrita, mas a beleza, irrefutabilidade e agudeza de conteúdo são duradouras. A literatura é uma escavação antropológica, nela estão incorporadas camadas de nuances culturais antigas e modernas, e valores a serem descobertos, examinados e lembrados. Considerando tratar-se de um aspecto ainda pouco estudado e discutido pela maioria dos profissionais de enfermagem, ou seja, as interfaces entre enfermagem e literatura, embora pareça não haver relação entre uma arte abstrata como a literatura e uma arte concreta como enfermagem, foram definidos os seguin1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados tes objetivos: a) apresentar dados históricos de publicações sobre enfermagem, em obras de autoria de escritores brasileiros e estrangeiros; b) identificar enfermeiros contemporâneos com produção e publicação no campo da literatura; c) refletir sobre as interfaces entre a literatura e a enfermagem como saberes humanísticos para a arte do cuidar. METODOLOGIA Trata-se de um estudo histórico utilizandose a técnica da análise documental em obras de literatura sobre a enfermagem e o ofício de enfermeiro. Quanto às fontes de pesquisa primárias, relativas às obras literárias publicadas, com inserção de referências relativas à enfermagem e/ ou ao ofício de enfermeiro, foram selecionadas para este estudo: a) obras de escritores brasileiros a partir do período do Romantismo até o Modernismo; b) obras de escritores estrangeiros do século XIX e início do século XX. Nessa coleta de dados, foram identificados seis escritores brasileiros, três escritores portugueses e três escritores britânicos. As obras dos escritores selecionados foram cuidadosamente lidas e analisadas, extraindo-se diálogos, textos ou informações referentes à enfermagem ou ao ofício de enfermeiro realizado pelos personagens fictícios, criados por esses escritores. Quanto aos enfermeiros contemporâneos que escrevem ou escreveram textos literários, foram selecionados quatro profissionais, autores de produções e publicações literárias expressivas e reconhecidas na história da enfermagem. Também foram levantadas referências secundárias sobre a importância da literatura na história da enfermagem para subsidiar a reflexão e discussão do artigo.

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DESARROLLO DEL TEMA Reflexões sobre as interfaces entre a literatura e a ciência do cuidar O componente do cuidar de enfermagem não é mera combinação do científico e do técnico, mas o equilíbrio entre a mente, o coração e as mãos. Patrícia Donahue (1993) refere sobre a ênfase às áreas de ciência e tecnologia, e o temor de que o espírito cada vez seja menos valorizado com o passar do tempo. Ela reafirma que o espírito foi essencial ao desenvolvimento da arte de enfermagem: “a essência real da enfermagem, como qualquer fina arte, está não nos detalhes mecânicos da execução, nem na destreza do executor, mas na imaginação criativa, no espírito sensível, e na compreensão inteligente que permanece na retaguarda dessas técnicas e habilidades. Sem isso, a enfermagem pode-se tornar um ato comercial cheio de habilidades e não uma profissão, propriamente dita, ou uma fina arte” (Donahue, 1993, p. 7). Ela vaticina que “todos os rituais e cerimônias que nosso moderno culto de eficiência pode projetar e todo o elaborado equipamento científico não irão nos salvar se os aspectos intelectuais e espirituais em nossa arte estiverem subordinados ao fator mecânico da execução” (Donahue, 1993, p. 7). A enfermagem necessita usar conhecimentos e princípios das ciências humanas no cuidado integral às pessoas, interagindo com elas, respeitando-as ao entrar na sua privacidade ou intimidade para realizar um cuidado específico. Visando compreender melhor a dimensão intrínseca do paciente ou cliente, os profissionais necessitam de saberes das ciências humanas, que não devem ser reduzidos para acomodar mais saberes científicos no agir da enfermagem. Nota-se que vem sendo esquecida a luta realizada pelas pioneiras para incorporar estas ciências no ensino e prática de

Cultura de los Cuidados enfermagem e manter vivo o espírito humanitário e social da profissão – sua essência e força vital. Ou seja, esse espírito permite o equilíbrio entre o aspecto científico e técnico do cuidado. Portanto, a competência no cuidado requer conhecimento da filosofia e da história da profissão, formando a postura desejável do ponto de vista legal, cultural, ético-profissional e técnico-científico. Parafraseando Donahue (1993), é tempo de lembrar que a fase em que estamos devese à visão e à luta de nossas pioneiras, e perguntar-nos se tal visão tem sido, ou vem sendo ampliada, ou ao menos sustentada. Ou se o espírito ou arte de cuidar está vagarosamente desaparecendo da sociedade quando o foco humanitário deveria tornar-se valor supremo. Será que o cientificismo está avançando mais rápido e amplamente no ensino de enfermagem, atropelando e sobrepujando o sentido humanitário, ético, cultural e social da profissão? Haverá algo vital na missão social da enfermagem que está faltando? Paterson e Zderad (1988) afirmam que, quando a arte e humanidade são incluídas no ensino de enfermagem, deveriam ocorrer efeitos humanitários na ação de cuidar, reconhecidos como influências da civilização moderna. Na enfermagem, esses efeitos são percebidos como elementos do humanitarismo e da compaixão, em contraposição à tendência da despersonalização que costuma acompanhar a tecnologia científica e a mecanização, que deveriam estimular a criatividade imaginativa que alarga a perspectiva da pessoa sobre tal situação humana em seu mundo. Descrições sobre o sofrimento ou outros aspectos da condição humana, encontrados na poesia, drama ou outro gênero literário, são mais minuciosos e próximos da realidade do que aqueles encontrados em típicos livros técnicos.

A prática da enfermagem reflete o preparo educacional de seus profissionais que recebem um grande e reforçado peso da ciência e metodologia positivista. Mas as artes e humanidades continuam sendo complementos imprescindíveis. A ciência busca a descoberta de leis gerais e a arte revela a singularidade do indivíduo, o ser único e indivisível dentro da coletividade e do mundo. Estudos científicos exigem estrita conformação à metodologia e replicabilidade. A arte é muito mais livre e única em seu estilo. Obviamente, a ciência abre a mente dos profissionais para mudanças e inovações, mas o pano de fundo permanece no senso de imutabilidade e constância do ser humano com suas necessidades. A ciência provê o enfermeiro de conhecimento técnico no qual basear suas decisões, mas estão nas artes e humanidades os instrumentos para que o profissional possa analisar os valores jacentes no exercício da prática de enfermagem. De fato, nos eternos questionamentos sobre o significado da enfermagem, nenhum termo tem sido utilizado e invocado mais consistentemente do que cuidado. Muito já se escreveu sobre os conceitos do cuidado. Ainda que a enfermagem não seja a única profissão a prestar cuidados, pois, em seus respectivos âmbitos, a fisioterapia, a psicologia, a nutrição, o serviço social e a medicina prestam cuidados 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados de algum tipo. Apesar das discussões em torno de curar e cuidar, reconhece-se que cuidar é muito mais abrangente. Quando o curar chega ao seu limite, resta ainda muito a cuidar; seja como forma de aliviar o sofrimento, proporcionar conforto, manter a higiene, assegurar uma posição favorável que possibilite ou facilite a realização das necessidades humanas básicas, entre outros cuidados que podem ser prestados pela enfermagem. Chao (1993) afirma que cuidado é um fenômeno universal e que o cuidar é essencial à existência, ao crescimento, ao desenvolvimento e à sobrevivência humana. Cuidar inclui a interação entre pessoas no tempo, espaço e interações entre quem cuida e quem recebe o cuidado. Localizar a pessoa para cuidar, no lugar certo e na hora exata, diante de quem lhe pode realizar a assistência é a questão maior no processo de cuidar. O melhor da enfermagem é aquele momento em que se pode compartilhar com os outros os mais importantes e significativos acontecimentos da vida humana – o nascimento e a morte, o bom-dia e o adeus, os começos e os fins. E, ainda, assistir ao triunfo do espírito e do corpo sobre a doença e a morte, mas também experimentar a dor de saber que alguns pacientes irão morrer e quanto alívio poderá ser dado (Black, 1993). Nesta reflexão introdutória, observa-se que o ponto essencial entre enfermagem e literatura está exatamente nessa partilha de experiências e sentimentos vivenciados. Legado de Florence Nightingale para a história, a enfermagem e a literatura Débora pode ser considerada a primeira enfermeira registrada na história por cuidar

de Rebeca, segundo consta no livro de Gênesis 35,8: “Foi então que morreu Débora, ama de Rebeca. E foi ali sepultada, ao pé de Betel, debaixo de um carvalho, ao qual se chamou carvalho dos Prantos” (Bíblia Sagrada Ave Maria, 1987) O texto bíblico acima mostra que o significado da história pode ser encontrado na literatura. A história permite especulação e reflexão. Ela pode lançar luzes sobre as origens das questões e conflitos, oferecendo bases analíticas que, potencialmente, levam à resolução. A história pode abrir as portas de fontes inusitadas de informações que ajudam no desenvolvimento do pensamento sobre fenômenos específicos. O pensar crítico não pode ser formado sem o reforço do estudo da história. Não basta apenas procurar fatos do passado, mas refletir sobre eles, descobrir relações com outros fatos, levantar inferências, e até mesmo usar a imaginação para cruzar eventos. Fatos isolados não têm valor até que se descubram os seus significados. Margretta Madden Styles1 (1930-2005) afirmava que Florence Nightingale é um símbolo permanente e duradouro da enfermagem, embora alguns a considerem como uma mera ancestral; outros a viram como déspota e tirana, ou excêntrica e maluca. Mas podemos aceitá-la pelo que foi e fez: uma pessoa com as suas fortalezas e fragilidades. Ela foi poderosa em seus dias. Plantou as sementes da moderna enfermagem. Seu nome sobrevive e, acima de tudo, é universalmente associado à enfermagem, enfermeiras e ao público. Mais importante do que o fato de ela ser o nosso mais duradouro símbolo é o reconhecimento do que ela merece ser. Ela representa muitos dos valores que continuamos a prezar. As origens de mui-

Foi presidente da Associação Americana de Enfermeiras, de 1986-1988, e, também do Conselho Internacional de Enfermeiras (CIE), de 1993-1997, em Genebra, Suíça.

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Cultura de los Cuidados tos movimentos da enfermagem de hoje podem ser devidas ao legado de Florence. Styles, que não se considerava historiadora, nem teorista de enfermagem, mas sendo o que foi e acreditando nas impressões deixadas por Florence em sua vida, impregnou seu orgulho de ser enfermeira voar nas asas dos fragmentos de sua legenda. Entre suas impressões sobre Florence Nightingale, e a interface entre enfermagem e literatura, podem ser destacadas: É assombrosa a extensão do intelecto e interesse de Florence, cuja mente concebeu o que suas mãos fizeram ao prestar cuidados diretos, e também forjaram um ativismo social surpreendente para a época. Florence era uma mulher original e liberada que assumiu uma nova autoestima, rejeitando convenções sociais e conforto para abrir caminho para uma chamada das então aliadas para a boa educação em enfermagem. Essa foi uma afirmação pessoal dela sobre a importância do nosso trabalho. Florence trouxe racionalidade, teoria e ciência – algumas vezes brilhantes, outras vezes rudimentares, outras vezes até erradas – para a prática clínica e a administração dos serviços de saúde. Podemos orgulhar-nos por ela ter sido chamada de “estatisticista apaixonada”. Florence fazia uma política astuta e sagaz, movida pela sua militância, sempre inspirada em seus apelos arrebatadores como ao proclamar que “nenhum sistema irá resistir se não marchar para frente”. Já em seu tempo, Florence foi uma ativista do meio ambiente, pregando veementemente sobre a necessidade de saneamento, higiene e vida saudável nas coletividades para poder preservar a vitalidade como pacientes. Isso há mais de um século antes que os cuidados primários de saúde fossem elevados mundial-

mente à categoria de um verdadeiro evangelho em Alma Ata (1978) pela Organização Mundial da Saúde. Outras profissões, como nutrição e dietética e as várias terapias, saúde pública e a administração de serviços de saúde, lembram-se dos ensinamentos de Florence e incluem-se também como seus legatários. Mas “Florence é nossa”, proclama Styles. As impressões de Styles mostram uma Nightingale feminista, política, cientista, ambientalista, visionária e reformadora – sem dúvida um perfil admirável e surpreendente. Há outros aspectos humanitários e sensíveis de Florence, como, por exemplo, uma carta de próprio punho, de 1855, à família de um soldado morto na Guerra da Crimeia, de febre tifoide; na missiva ela descreve os últimos momentos do soldado. Supõe-se que ela escreveu essa carta à noite, lutando contra a desesperança e a fadiga do trabalho diurno, após a ronda noturna, utilizando aquela lâmpada que a celebrizou e tornou-a o símbolo da Enfermagem. Provavelmente, ela escreveu outras cartas para familiares de outros soldados feridos, que ela havia cuidado e tenha se sentido tão profundamente responsável. Podemos orgulhar-nos crendo que muitos enfermeiros, ainda hoje, repetem esse gesto humanitário de mil maneiras e circunstâncias, para continuar essa tradição criada por Florence Nightingale. “Florence é nossa” e “continua nossa”, como proclamava Styles. Sem dúvida, o nome Nightingale é nosso, o ideal persiste, a lâmpada continua acesa e brilhante e o símbolo perdura. Enfermagem e personagens enfermeiros nas obras de literatura brasileira A literatura é duradoura e não envelhece; reflete a época em que foi escrita, mas a beleza, 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados a irrefutabilidade e a agudeza de conteúdo permanecem. A literatura é uma escavação antropológica: nela estão incorporadas camadas de nuances culturais antigas e modernas e valores a serem descobertos, examinados e lembrados. Na história da literatura brasileira, alguns autores, identificados no presente estudo, citaram a enfermagem ou descreveram personagens no ofício de enfermeiro ou enfermeira em suas obras clássicas. a) Período literário do Romantismo Dentre os autores desse período, podem ser citados José de Alencar (1829-1877) considerado o precursor do romantismo no Brasil, nascido no Ceará. Antes do campo literário, atuou como advogado, jornalista, deputado e ministro da justiça. Aos 26 anos publicou a primeira obra: Cinco Minutos. Lucíola, quinta obra romântica de José de Alencar, de 1862, é narrada em primeira pessoa, na qual o próprio José de Alencar personifica o personagem Paulo, descrevendo o romance entre ele e Lucíola. Ambos se apaixonam e passam a conviver juntos. E cita-se, um trecho em que ele faz referência à enfermeira: “Achei instalada em sua casa, como enfermeira, uma tal Sr.ª Jesuína, mulher de cinquenta anos, seca e já encarquilhada, com quem embirrei solenemente desde o momento em que a vi. [...] a Sr.ª Jesuína tinha sempre um remédio a dar, um travesseiro a endireitar, uma recomendação a fazer.” Na obra, O gaúcho (1870), José de Alencar intitula um capítulo de “O enfermeiro”. O personagem Manuel Canho é um menino gaúcho que admira seu pai, um grande conhecedor de cavalos que morre assassinado. Ele nunca o esquece, odeia seu padrasto e, quando este morre, parte para vingar a morte do pai. Segue uma narrativa: 136

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“Manuel passou a noite, como o dia, fazendo o ofício de enfermeiro. Apenas deixava o aposento do doente para ir ver seus amigos, a baia e os outros animais a quem havia acomodado no potreiro (...).” b) Período literário do Realismo - Naturalismo Dentre os autores desse período, citamse: Machado de Assis, Lima Barreto e Aluísio Azevedo e as suas respectivas obras e personagens. Machado de Assis (1839-1908), o maior nome da literatura brasileira, escritor, poeta, dramaturgo, contista entre outros qualificativos, destacou-se no período do Realismo. Ele também foi fundador e o primeiro presidente da Academia Brasileira de Letras, instituída em 1897, permanecendo nesse cargo até sua morte. Citam-se, a seguir, três obras de sua autoria que têm referências à enfermagem e o conto “O Enfermeiro”. Memórias póstumas de Brás Cubas, obra de Machado de Assis, publicada em 1881, enfatiza o personagem Brás Cubas, homem rico e solteiro que, depois de morto, se dedica a narrar a sua própria vida. Existem cenas referentes à enfermagem, tais como: “Eu estava só, em casa, com um simples enfermeiro; podíamos falar um ao outro, sem perigo (...) Não importa a idade do adulado; a mulher há de ter sempre para ele uns ares de mãe ou de irmã, ou ainda de enfermeira, outro ofício feminil (...).” Na obra Quincas Borba (1891), o autor Machado de Assis conta a história de Pedro Rubião de Alvarenga, ex-professor primário, que se torna enfermeiro e discípulo do filósofo Quincas Borba, que falece no Rio, na casa de Brás Cubas. Rubião é nomeado herdeiro

Cultura de los Cuidados universal do filósofo, sob a condição de cuidar de seu cachorro, de nome Quincas Borba também. “Durou o cargo de enfermeiro mais de cinco meses, perto de seis. Era real o desvelo de Rubião, paciente, risonho, múltiplo, ouvindo as ordens do médico, dando os remédios às horas marcadas, saindo a passeio com o doente, sem esquecer nada (...).” Machado de Assis, no livro Dom Casmurro (1915), cria o personagem Bentinho: órfão de pai, cuidado com desvelo pela mãe (Dona Glória), protegido do mundo pelo círculo doméstico e familiar (tia Justina, tio Cosme, José Dias), destinado à vida sacerdotal, devido à antiga promessa de sua mãe. A vida do seminário, no entanto, não o atrai e tem um romance com Capitu, filha dos vizinhos. Na história há referências à enfermagem: “Como minha mãe adoecesse de uma febre, que a pôs às portas da morte, quis que Capitu lhe servisse de enfermeira. Prima Justina, posto que isto a aliviasse de cuidados penosos, não perdoou à minha amiga a intervenção.”. No livro Várias histórias (1896), Machado de Assis publicou o conto intitulado “O enfermeiro”. Nesse conto, o autor narra em primeira pessoa a história do enfermeiro Procópio José Gomes Valongo, último a cuidar do Coronel Felisberto, um homem rabugento, exigente, excêntrico, temperamental e insuportável, que sofria de aneurisma, reumatismo e outras três ou quatro afecções menores. Procópio fora convidado pelo vigário de uma vila interiorana, para cuidar desse Coronel, por considerá-lo uma pessoa inteligente, entendida (trabalhava num colégio em Niterói, onde copiava estudos de teologia de um padre), discreta e paciente que poderia servir de enfermeiro, mediante um bom ordenado. O vigário recomendoulhe ainda mansidão e caridade para cuidar do

Coronel, que gastava mais com enfermeiros do que com remédios. Com o tempo, passou a ser maltratado pelo Coronel, que o insultava, humilhava e o injuriava, batendo-lhe com a bengala, ou atirando-lhe um prato de mingau ou a moringa de água. Certo dia, a moringa arremessada com violência atingiu a face esquerda do enfermeiro, que furioso lançou-se sobre o paciente e acabou por esganá-lo. Percebendo que o paciente estava morto, foi para outro quarto e esperou amanhecer, amargando o momento de raiva que o levara àquele ato extremo, achando ter cometido um crime e que receberia punição certa. O temor complicou o remorso e era difícil restituir a paz à sua consciência, maldizia ter aceitado aquele trabalho e os que o haviam convencido a ficar, mesmo depois que ele havia decidido deixar o Coronel. Mas ninguém suspeitou de nada e os funerais foram realizados normalmente. Procópio estava em paz com os homens, mas não estava com a consciência. Regressou ao Rio de Janeiro e logo recebeu um comunicado de que ele, Procópio, era o herdeiro universal conforme testamento deixado pelo Coronel, que, apesar de áspero e duro, soubera ser grato. Achou que a recusa da herança poderia levantar suspeitas e desconfianças. Assim, rumou de novo para a vila para receber a herança do Coronel. Outro escritor do período do Realismo é Lima Barreto (1881-1922). Filho de pais pobres, ficou órfão de mãe aos seis anos. Abandonou os estudos para trabalhar e sustentar a família. Para aumentar a renda, escrevia textos para jornais cariocas. Escreveu romances, sátiras, contos, textos jornalísticos e críticas.  Lima Barreto criou a obra Triste fim de Policarpo Quaresma (1915), a qual, resumidamente, consta: a primeira parte acontece no Rio de Janeiro, após a proclamação da república brasileira. Na segunda parte, são analisados 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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os problemas enfrentados pela porção rural do país. A última parte narra as andanças de Policarpo pela Capital Federal durante a revolta da Armada e mostra sua desilusão final. “Médico e rico, pela fortuna da mulher, ele não andava satisfeito. (...) Já era médico do Hospital Sírio, onde ia três vezes por semana e, em meia hora, via trinta e mais doentes. Chegava, o enfermeiro dava-lhe informações, o doutor ia, de cama em cama, perguntando: “Como vai?” “Vou melhor, seu doutor”, respondia o sírio com voz gutural.” Considerado o pioneiro do Naturalismo no Brasil, Aluísio Azevedo (1857-1913) nasceu em São Luís, Maranhão. Foi o fundador da Cadeira nº 4 da Academia Brasileira de Letras. Autor de diversos livros, entre eles: Uma lágrima de mulher, O Mulato, Casa de Pensão, O Cortiço, Girândola de Amores, Filomena Borges, O Coruja, O Homem, O Esqueleto, A Mortalha de Alzira e outros. Casa de Pensão (1884) foi baseado em história real de grande repercussão na época, a Questão Capistrano – crime que envolveu dois estudantes semelhante à narrativa de Aluísio Azevedo. Amâncio é um jovem que veio do Maranhão para o Rio de Janeiro para estudar medicina, hospedando-se na casa de um conhecido da família. O seu modo de vida boêmio gera desentendimentos, então ele se muda 138

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para uma pensão. Lá, ele se envolve com Amélia, irmã de João Coqueiro, o dono da pensão. “Resolveu-se que seria o copeiro quem acompanharia o enfermo durante o resto da noite. O médico recomendara que dessem o remédio de três em três horas. Lúcia lamentou que, justamente nessa ocasião, a sua Cora estivesse em Cascadura ajudando a uma amiga a morrer, porque ao contrário Amâncio não teria outra enfermeira. “Ah! não havia como aquela mulata para tratar de um doente!...” (...) Ele, às vezes, já se fazia mais doente e mais carecido de cuidados, só para desfrutar os mimos da enfermeira.” c) Período literário do Pré-Modernismo Guilherme de Almeida (1890-1969) era advogado (formado pela USP, em 1912), jornalista, poeta, ensaísta e tradutor. Foi membro da Academia Brasileira de Letras, eleito em 1930. Chamado o Príncipe dos Poetas Brasileiros. Em homenagem às enfermeiras, dedicou-lhes o lindo poema intitulado “A mão que nunca falta”, atendendo ao pedido de Edith de Magalhães Fraenkel – primeira diretora da Escola de Enfermagem da USP – em maio de 1947, ano da realização do Primeiro Congresso Brasileiro de Enfermagem. Na poesia “A mão que nunca falta”, Guilherme de Almeida identifica a mão da enfermeira que, na falta da mãe que abençoa e da mão do amor-amor que acaricia, restava “sempre a mão paciente e boa de alguém que colhe a lágrima dolente, que estanca o sangue da ferida, que enxuga o suor da fronte ardente e que toma a pulsação da vida, a mão útil de uma íntima estrangeira, a mão piedosa e sábia da enfermeira”. O poeta soube, com maestria, exprimir o papel do enfermeiro no cuidar do doente, muitas vezes como mãe substituta ou mãe

Cultura de los Cuidados profissional. Ainda que a linguagem pareça sentimentalista, melíflua e afetada para os dias atuais – dominados pela objetividade da tecnologia sofisticada e linguagem técnica dos modernos computadores – o poeta exprimiu seu carinho e respeito pelos profissionais da enfermagem no estilo da época. d) Período literário do Modernismo Carlos Drummond de Andrade (19021987) nasceu em Minas Gerais. Foi poeta, cronista, tradutor e contista, formou-se em ciências farmacêuticas (1925), em Ouro Preto, embora não tenha exercido. Ingressou no serviço público em 1934, no Rio de Janeiro; foi chefe de gabinete de Gustavo Capanema, ministro da Educação até 1945. Trabalhou no Serviço de Patrimônio Histórico e Artístico Nacional e aposentou-se em 1962. Desde 1954, colaborava como cronista no jornal Correio da Manhã, e a partir de 1969 no Jornal do Brasil. No dia 13 de maio de 1954, publicou no Correio da Manhã a crônica intitulada “Ela trabalha em silêncio”, referindo-se à enfermeira, analisando com incrível exatidão a histórica luta das profissionais por um lugar ao sol e a falta de reconhecimento social. Essa mesma crônica, com ligeiras alterações formais, foi publicada trinta anos depois no jornal dominical Shopping News – City News, em São Paulo – no dia 20 de maio de 1984, data do encerramento da Semana da Enfermagem2 – enfatizando que as enfermeiras continuavam a trabalhar em silêncio, esquecidas em suas justas reivindicações. Lembrou a baixa remuneração e a falta de carreira para enfermeiras. Dado o que ela havia gastado “em esforço e estudo para a boa formação profissional e a

responsabilidade das funções tal remuneração era ridícula, em país de eterna inflação”. Drummond afirmou ainda que a enfermagem “não é uma profissão qualquer, mas uma que exige mais do que o comum para seu bom desempenho”. Indica “a doçura, modéstia, limpeza de alma, desistência de oportunidades brilhantes em outras formas de realização, interesse profundo pelo próximo, sobretudo pelo que há de doloroso e mesmo repugnante no próximo”, como virtudes esperadas de enfermeiras; mas que seria justo dispensar-lhes também atenção especial, garantindo-lhes saúde e bem-estar para que elas pudessem cuidar cada vez melhor do bem-estar e da saúde dos outros. Nessa época, a Presidente da Associação Brasileira de Enfermagem, Seção São Paulo (1980-1984), Taka Oguisso, agradeceu o autor pela homenagem prestada, mencionando o paradoxo existente de falta de profissionais nos serviços de saúde e desemprego de enfermeiros. A crônica e o ofício da ABEn-SP foram posteriormente reproduzidos na Revista Paulista de Enfermagem, e aquele semanário registrou o recebimento do ofício na edição seguinte, de 27 de maio de 1984. Enfermagem e personagens enfermeiros nas obras de literatura estrangeira Na história da literatura estrangeira, na presente pesquisa, foram identificados alguns autores que, nas suas obras clássicas, fizeram citações sobre enfermagem ou incluíram personagens no ofício de enfermeiro ou enfermeira. Entre escritores portugueses são citados: Camilo Castelo Branco, Júlio Dinis, Eça de

Semana da Enfermagem – instituída pelo Decreto nº 48. 202, de 12 de maio de 1960, para celebrar anualmente, de 12 a 20 de maio, datas nas quais ocorreram, respectivamente, em 1820 e 1880, o nascimento de Florence Nightingale e o falecimento de Anna Nery.

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Cultura de los Cuidados Queiróz e as suas respectivas obras e personagens. Camilo Castelo Branco (1825-1890) nasceu em Lisboa-Portugal. Foi registrado como filho de mãe incógnita, pelo que se diz, porque seu pai e sua avó não queriam que o nome Castelo Branco estivesse envolvido com alguém de humilde condição. Era escritor multifacetado, cujas obras o posicionaram como uma das figuras mais eminentes da literatura portuguesa. No romance Amor de perdição (1862), esse autor mostra a saga entre duas famílias que se odiavam, e sucede a paixão de Simão Botelho e Teresa de Albuquerque. Na trama vários sentimentos: ódio, paixão proibida, paixão platônica, desespero, fugas e outros acontecimentos entre os personagens das famílias inimigas. No livro constam diálogos que se referem ao ofício de enfermeira: “Estamos então bem aliviados! Eu tenho cá a minha vida, e queria que ela fosse a enfermeira do meu doente... És, ou não és, rapariga? — disse ele à filha quando ela abriu os olhos, com semblante de envergonhada da sua fraqueza. A moça ficou encostada ao batente da alcova de Simão. — Não foi nada boa esta praga que lhe caiu em casa, Mariana! — disse o acadêmico — Fazerem-na enfermeira dum doente, e privaremna talvez de ir costurar na sua varanda, e conversar com as pessoas que passam...” Júlio Dinis (1839-1871), cujo nome real era Joaquim Guilherme Gomes Coelho, nasceu em Porto-Portugal. Formado pela escola de medicina e cirurgia do Porto (1861), preferiu dedicar-se à literatura e ao ensino universitário. O conjunto de sua obra caracterizou-se pelo estilo direto e espontâneo, sugestivo, voltado para a naturalidade, abordando costumes e relações sociais nas aldeias portuguesas. Dentre as suas obras, a mais bem-sucedida foi 140

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As pupilas do senhor reitor (1867). Seus poemas e dramas tiveram edição póstuma, após sua prematura morte com 32 anos. Quanto à história do livro As pupilas do Senhor Reitor (1867), ela acontece numa aldeia portuguesa povoada de pessoas bondosas e pelo moralismo de comadres fofoqueiras. Desenrola-se a trama do inocente namoro entre Daniel e Guida, mas o reitor descobre o inocente namoro entre os jovens. O pai, José das Dornas, decide, então, enviá-lo ao Porto para estudar medicina. Dez anos depois Daniel volta para a aldeia, como médico homeopata. Margarida, agora professora de crianças, conserva ainda seu amor pelo rapaz. O romance mostra vários acontecimentos a partir do retorno de Daniel. “Assim continuou este viver por muitos anos mais, até que a mãe de Clara adoeceu. Durante a moléstia, foi Margarida desvelada e incansável enfermeira, colhendo sempre, em paga dos seus carinhos, modos rudes e ásperos, expressões inequívocas de aversão que nunca deixava de sentir por ela.” “Por isso, entre Daniel, como médico, e Clara, como enfermeira, crescera, rapidamente, certa familiaridade, a qual não pouco concorrer para fazer demorado o exame do doente, cuja moléstia era de uma evidência e de uma fatalidade de êxito, que deviam facilitar a tarefa do seu estudo.” Eça de Queirós (1845-1900) nasceu na cidade portuguesa de Póvoa de Varzim. Aos 16 anos de idade foi estudar Direito em Coimbra. Foi discípulo do escritor francês Gustave Flaubert, de quem recebeu grande influência literária, sendo um dos pioneiros da literatura realista portuguesa.  Como romancista, abordou nas suas obras os temas cotidianos, comportamento de pessoas, pessimismo, ironia e humor. Suas obras foram traduzidas em várias

Cultura de los Cuidados línguas. É considerado até hoje como um dos principais representantes do realismo português. O romance realista O crime do Padre Amaro (1875) desenrola-se na província de Leiria, e inicia com apresentação do cenário – Leiria e a sua vida devota – e das personagens principais – Amaro e Amélia. Amaro fica órfão muito cedo, sendo protegido por uma marquesa rica, que lhe torna herdeiro de um legado, mas só na condição de se tornar padre. Termina, a muito custo, o seminário e torna-se pároco em Leiria. É aí que Amaro conhece Amélia e se apaixonam. Esta fica grávida, situação que acarretaria graves consequências para a vida sacerdotal de Amaro. Num ato impensado, este mata o próprio filho, já que Amélia morre após o parto. “Para Amélia aquele tempo foi um alívio; ao menos ninguém pensava, ninguém reparava nela (...). Demais, os serviços de enfermeira ocupavam-na: como era a mais forte e a mais nova, agora que a S. Joaneira estava estafada de vigílias, era ela que passava as longas noites à beira de D. Josefa...” “Daí a dois dias o abade Ferrão apareceu restabelecido do seu ataque de reumatismo. Contou a Amélia a bondade do Morgado, que chegara a mandar-lhe todas as tardes, num aparelho de lata com água quente, uma galinha cozida em arroz. Mas era sobretudo a João Eduardo que devia a caridade melhor; todas as suas horas vagas as passava ao pé da cama, lendo-lhe alto, ajudando-o a voltar, ficando com ele até à uma hora da noite num zelo de enfermeiro. Que rapaz! Que rapaz!” O primo Basílio (1878) é uma sátira moralizadora sobre a burguesia de Lisboa. Conta a história do casal – Luísa e Jorge – que vive pacatamente. Jorge viaja para o Alentejo por motivos profissionais; na ausência do marido,

Luísa é surpreendida pela visita de Basílio, seu primo e amigo de infância, com quem trocara cartas românticas. Seduzida por este, Luísa cai em adultério. Então, a criada de Luísa, de nome Juliana, rancorosa e mesquinha, após descobrir o segredo, faz chantagem, obrigando a patroa a servi-la e exigindo uma grande quantia pelo seu silêncio. A trama continua com vários desdobramentos. Quanto aos diálogos que se refere ao ofício de enfermagem, extrai-se: “— Tu trata a velha, paparica-a, que ela o que quer é uma enfermeira que a sofra. É rica, não é nada apegada ao dinheiro; é capaz de te deixar uma independência! Durante um ano Juliana, roída de ambição, foi a enfermeira da velha. Que zelos! Que mimos! Virgínia era muito rabugenta; a ideia de morrer enfurecia-a; quanto mais ela ralhava com a sua voz gutural, mais Juliana se fazia serviçal. A velha, por fim, estava enternecida, gabava-a às pessoas que a vinham ver, chamava-lhe a sua providência. Tinha-a recomendado muito a Jorge.” Referente aos escritores britânicos, destaca-se a escritora e poetisa Emily Bronte, Archibald Joseph Cronin e Charles Dickens. Emily Bronte (1818-1848) nasceu em Thornton, Yorkshire, a quinta filha de Patrick Brontë, vigário da Igreja da Inglaterra e Maria Branwell. A empregada Thabitha costumava contar-lhes histórias, e Emily a homenageou como a fiel personagem de Nelly Dean, em “O Morro dos Ventos Uivantes”. Emily e os irmãos criaram, em suas brincadeiras, terras imaginárias (Angria, Gondal, Gaaldine). Tais terras imaginárias eram relatadas em detalhes, jornais e outros artigos que as crianças costumavam escrever, e onde seus soldados de chumbo, presente do pai, costumavam “morar”. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados A narrativa de Wuthering Heights (1847) – traduzido para o português como O morro dos ventos uivantes – é realizada em primeira pessoa pelo narrador observador; ressaltando o efeito romântico-gótico, misterioso e melodramático. Entre reviravoltas, a história mostra as diferentes faces dos personagens: todos possuem seu lado bom e mal, retrata a essência humana com defeitos amplificados. É um clássico da literatura inglesa que desperta sentimentos extremos, o ódio ou a adoração, prende o leitor de modo diferente: não para sentir afeto ou simpatia pelos personagens, mas para adorar a história. “Mal Catherine saía do quarto de Mr. Linton, vinha sentar-se à minha cabeceira. Repartia o seu tempo entre nós dois e não perdia um só minuto com distrações: negligenciou as refeições. os estudos e as brincadeiras. Era a enfermeira mais zelosa que eu já vi; devia ter um coração deveras generoso para ainda lhe sobrar tanto carinho para me dar depois de todo o amor que dedicava ao pai.” Archibald Joseph Cronin (1896-1981) era conhecido como AJ Cronin, famoso escritor do século XX, cujos livros foram traduzidos para inúmeros idiomas e adaptados para o cinema e televisão. Viveu inicialmente em Glasgow e no País de Gales, depois em Londres, mudando-se com a família para a Califórnia, Estados Unidos, no final da década de 1930. Retornou à Europa, residindo em Montreux, na Suíça, onde faleceu. Era filho de pai católico e mãe protestante, nascido na Escócia e formado em medicina, o que lhe deu conhecimento e experiência para escrever sobre doenças dos mineiros de carvão e outros temas. Convocado, serviu como médico no final da Primeira Guerra Mundial, antes de sua graduação em medicina, concluiu o curso em 1919 e recebeu o grau de doutor em medicina em 1925, com 142

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sua tese sobre “história do aneurisma”. Praticou medicina por mais de dez anos antes de se dedicar à literatura, mas sua experiência foi valiosa para escrever seus romances, situando com propriedade e realismo suas histórias, inclusive o livro Noites de vigília (1939), no qual descreveu a vida, o trabalho e as responsabilidades de uma enfermeira. Charles Dickens (1812-1870) foi um dos mais populares escritores da era vitoriana, contribuindo com seus livros para a introdução da crítica social na literatura de ficção inglesa. Entre os mais famosos clássicos encontram-se Oliver Twist, David Copperfield, Christmas Carol e Vida e Aventuras de Martin Chuzzlewit, este último escrito entre 1843 e 1844, após uma viagem aos Estados Unidos. Esses romances atravessaram séculos e continuam ainda hoje a serem editados. Alguns críticos consideram que seus romances não eram muito realistas, pelos parâmetros atuais, mas ele contribuiu para a introdução dessa crítica social. Importante lembrar que esse escritor foi contemporâneo de Florence Nightingale. Escritores de literatura, profissionais de enfermagem, do período contemporâneo Na história da enfermagem já figuram enfermeiros que estão produzindo escritos literários – romances, ensaios, poemas – sobre as

Cultura de los Cuidados suas próprias vidas e sobre assuntos relacionados ao cuidar. Dentre os profissionais de enfermagem contemporâneos, podem ser citados como precursores na literatura os seguintes nomes: Wanda de Aguiar Horta, Maria Jacyra de Campos Nogueira, Daisy Maria Gonçalves Leite, Onã Silva, José Siles González e outros profissionais que, mais recentemente, estão escrevendo, influenciados por esses precursores. a) Wanda de Aguiar Horta (1926-1981) nasceu em Belém-Pará. Graduada em enfermagem pela Universidade de São Paulo (USP) e licenciada em História Natural, pós-graduada em Pedagogia e Didática aplicada à Enfermagem. Conquistou doutorado e livre Docência na Escola de Enfermagem Anna Nery, Universidade Federal do Rio de Janeiro (UFRJ). Em 1974, tornou-se professora adjunta da USP e em seguida professora titular. É autora da Teoria das Necessidades Humanas Básicas (NHBs) que subsidia o processo de enfermagem, enfatizando o assistir ao indivíduo em suas necessidades básicas, tornando-o independente, por meio do ensino do autocuidado. Resultado de empenho pessoal, Wanda Horta foi idealizadora, criadora, editora e redatora da revista “Enfermagem em Novas Dimensões” (REND). A estrutura desse periódico incluía: editoriais, artigos originais, traduções, bibliografias, resenhas de pesquisas e lançamento de livros, glossário português/inglês e a seção denominada Arte que publicava poemas, poesias e pinturas relacionadas com o cuidado humano e com a própria enfermagem. Publicou vários poemas na REND. b) Maria Jacyra de Campos Nogueira (1934-2016) – enfermeira formada pela Escola de Enfermagem da USP (1960), concluiu o

mestrado e o doutorado em 1967 e 1973, respectivamente. Sua tese de livre-docência “Fitoterapia popular e enfermagem comunitária” (1983), recebeu apreciação da Fundação de Amparo à Pesquisa do Estado de São Paulo (FAPESP), do Ministério da Saúde, do Ministério do Trabalho e Previdência Social (na época havia muitos ambulatórios e hospitais subordinados a esse Ministério por meio do Instituto Nacional de Assistência Médica da Previdência Social - INAMPS), e da Secretaria de Saúde do Paraná, pois serviram de subsídio para a utilização de plantas medicinais em forma de infuso ou decoto pelos pacientes. Prestou concursos para professor-adjunto e titular, orientou dezenas de dissertações e teses de doutorado. Assessorou durante 5 anos (1979-1984) a Universidade Federal da Paraíba, Centro de Ciências da Saúde, para instalação e funcionamento do Departamento de Enfermagem. Além dos trabalhos técnicos e profissionais, Maria Jacyra escrevia poemas, crônicas e contos. Sua primeira incursão no campo literário foi em 1956, quando escreveu a crônica Um só par de sapatos, publicada no Diário de Notícias, em Ribeirão Preto. Também publicou o livro de poesias Simples estar no mundo, pela Editora Sangirardi (1983). Na RND publicou cinco poesias; na Revista Paulista de Enfermagem seis; e esparsamente em outros diferentes periódicos e em livro de poesias organizado por outros autores. c) Daisy Maria Gonçalves Leite, nascida e residente em Natal, Rio Grande do Norte é escritora, poetisa e compositora. Graduou-se em enfermagem pela Escola de Enfermagem de Santos, São Paulo, em março de 1963. Ainda aluna, iniciou estudos sobre comunicação do bebê por meio do choro, tendo, em 1964, viajado para a Suécia em busca de no1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados vos conhecimentos sobre o choro infantil, uma vez que, no início da década de 1960, a análise espectrográfica do choro já fazia parte da clínica pediátrica do Departamento de Pediatria do Hospital Karolinska, dirigido pelo Professor John Lind, com quem manteve contato até seu falecimento, em janeiro de 1983. Concluiu mestrado na Escola de Enfermagem da USP, com a dissertação “O Choro do Lactente - Conhecimentos das Enfermeiras no Rio Grande do Norte “ (1979), sob orientação de Maria Jacyra de Campos Nogueira. Tornou-se pioneira no estudo da “comunicação através do choro infantil” no país, merecendo crônica de Dinah Silveira de Queiroz, no Jornal do Povo/RS, na época, embaixatriz do Brasil, em Portugal. Foi também destaque no programa “Fantástico, o Show da Vida”, da TV Globo (1981 e 1998), e nas revistas “Veja” (1981), e “Isto é” (1981). Em 1965, já havia sido entrevistada pela Rádio Suécia – no programa em português para Brasil, Portugal e Colônias – como enfermeira brasileira, pesquisadora do choro infantil. Foi fundadora e vice-presidente da Sociedade Brasileira de Enfermeiros Escritores e também presidente e fundadora da Academia Feminina de Letras do Rio Grande do Norte. Formou-se em ciências jurídicas e sociais pela Universidade Potiguar (RN), em 1997. É colunista do Jornal ECOS da Literatura Lusófona. É autora de três livros de poesias: O Livro de Daisy (1979), com prefácio do escritor Luís da Câmara Cascudo; A Primavera Voltou (1999), com prefácio do acadêmico norte-rio-grandense, Jurandir Navarro; e Fragmentos de Mim (2002), prefaciado pelo acadêmico norte-rio-grandense e diretor do Instituto Histórico e Geográfico do Rio Grande do Norte, Enélio Lima Petrovich; além de outros: O choro do Lactente (1979) e O choro do Bebê (2003). Foi referência do “Projeto Zero a Seis”, da Funda144

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ção Roberto Marinho - Rede Globo; “A vida do Bebê”, do Prof. Rinaldo De Lamare, 38º edição, Editora Bloch; Programa Ensino Pré-escolar-TVU/UFRN (1982). Participou de Coletâneas e revistas culturais nacionais e no exterior, como: Poesias Brasileiras (2001), pela Casa do Livro Editora; Antologia da AJEB Letras (Associação de Jornalistas e Escritoras do Brasil) Fortaleza /CE/2003. Antologia virtual Livro do Passado (2004); Antologia virtual Dia Internacional da Mulher (2005); Antologia virtual Dia Mundial da Poesia (2005) e outras, todas do Portal Português “Cá Estamos Nós”. Recebeu inúmeras homenagens e medalhas, inclusive a medalha de mérito Carlos Drummond de Andrade, no 1º Encontro Nacional de Academias de Letras, em Caxambu, MG, 2002. Neta pelo lado materno de músico, poeta e compositor, lançou o CD “ Canta pra mim”, boleros de sua autoria, interpretados pelo cantor paraense Émerson Vaughan. Produziu os livros: Boleros de Daisy Etiel, (anagrama de Leite), em 2002, com músicas (boleros) cifradas para violão, e Song Book (2002), composições de Daisy Etiel, com letras cifradas e partituras. d) Onã Silva - A Poetisa do Cuidar - nasceu em Posse-Goiás, mas reside em BrasíliaDF, Brasil. Despontou nas artes literárias no final da década de 1980, como uma autêntica e qualificada enfermeira, formada também em Artes Cênicas, pós-graduada em Saúde Pública, Mestre em Educação, Doutora em Enfermagem. Atua na Secretaria de Saúde do Distrito Federal como enfermeira. A criatividade e a arte de cuidar em saúde são suas inspirações para a literatura e pesquisas que vem desenvolvendo. Adotou o nome literário de “A Poetisa do Cuidar”. É palestrante de temáticas relacionadas com criatividade, ludicidade, teatro e outras. Sua produção de

Cultura de los Cuidados quase três décadas no campo literário inclui diversos gêneros: poesia, romance, crônica, dramaturgia, novela, contos e outros. É autora e coautora de livros publicados (individuais e coletivos), bem como de artigos e produções científicas. Tem os seguintes livros publicados: Mas a alegria vem pela manhã (poesia); O Sol da Justiça (poesia); A Quadradinha de Gude (livro infanto-juvenil); Miriã, uma enfermeira bambambã (romance); Histórias da Enfermagem no Universo de Cordel (poesia de cordel); A Derrota de Penina (romance); Anjinho Minho...Mãezinha Minha... (livro infantil); Mundo-Bola (livro infantil); Voa Balão... Voa Imaginação... (livro infantil); Ludicidade e suas interfaces (artigos temáticos); Solange Caetano: tem coragem no nome e enfermagem no sobrenome (poesia de cordel); Poesia nas lentes do monóculo: meus pais (poesia); Cordel do Trabalhador: do labor até o burnô (poesia de cordel), Grandes Enfermeiras: Florence Nightingale e Anna Nery (quadrinhos); Enfermagem com Poesia: a arte sensível do cuidar (poesias), e outros. Como escritora, sua literatura faz interface peculiar entre as linguagens artísticas e a saúde; pela inovação recebeu, inclusive do RankRecords Brasil (2013), título homologado como primeira escritora a escrever histórias da enfermagem em cordel. Idealizou projetos inéditos como o livro Enfermagem com Poesia: a arte sensível do cuidar (reunindo poesias, exclusivamente, profissionais da enfermagem, publicado em duas edições); e a Academia IPÊ (Academia Internacional de Poetas e Escritores de Enfermagem) – primeira instituição na área de literatura, dentro da enfermagem, com objetivo literário, composto por 17 acadêmicos empossados, representantes da enfermagem do Brasil, Portugal e Espanha, da qual é atual presidente. Também é acadêmica literária, nas instituições: Academia Infantil de Letras

e Artes (AILA); Academia de Letras e Artes do Nordeste Goiano (ALANEG); Academia Internacional de Cultura (AIC); Academia Taguatinguense de Letras (ATL) e Academia Portuguesa de Ex-Libris (Ex-Libris). Tem realizado trabalho pioneiro, voltado para arte e literatura e saúde, com experiências de ações culturais em unidades de saúde (Hospitais, Postos de Saúde, Centros de Atenção) e outros cenários de promoção e cuidados à saúde. Está biografada em livros, dicionários e no Catálogo Literário. Seu trabalho tem sido reconhecido, sendo premiada em vários concursos literários e científicos. Jose Siles González, enfermeiro, pedagogo, doutor em história e professor catedrático, radicado em Alicante, junto ao Mediterrâneo, na Espanha, além da vasta produção técnica em enfermagem e antropologia, criou um campo comum para estudos e pesquisas conjugados nessas duas áreas que se consubstanciou no periódico regular denominado Cultura de los Cuidados – Revista de Enfermería y Humanidades, fundado em 1997. É o editor e diretor desse periódico desde sua fundação. Publicou diversos livros didáticos dentro de sua área de conhecimento, especialmente, sobre Historia da Enfermagem e sobre Cultura dos cuidados. Entre suas obras literárias incluem-se oito narrativas, sendo a mais antiga publicada em 1986 e a mais recente 2015. En-tre essas obras podem ser destacadas algumas como: A última noite de Erik BiKarbonato, de (Siles, 1991); A delirante travessia do soldado bêbado (e outros contos), (Siles, 1995), A chi-cotada, (Siles, 1997); A vênus de Donegal (Si-les, 2012) y La utopia rastejante (Siles, 2015). Publicou poesias em revistas e livros, de 1996

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Cultura de los Cuidados a 2014, entre as quais podem ser citadas: Tedio Protocol (Siles, 1996), O sentido do navegante, (Siles, 2000), e O sal do tempo (Siles, 2006). Nove monografias e ensaios foram publicados tais como “Estrutura familiar e função social da mulher em Alicante (1868-1936)” em 1995; “Passado, presente e futuro da enfermagem na Espanha (perspectiva histórica e epistemológica)”, em 1999; Antropologia narrativa dos cuidados, em 2000 e Antropologia educativa dos cuidados, em 2009. Recebeu inúmeros prêmios entre os quais podem ser citados: Literários: Café Iruña de novela (Bilbao, 1991), Ciudad de Villajoyosa (1992); cientistas: Castilla La Mancha de pesquisa em Enfermagem, em 1989; o Internacional de História da Enfermagem, concedido pela Universidade Complutense, Madrid, em 1990 e em 1994, Premio Vicente Mojica, de Alicante, em 1992; de Pesquisa em Enfermagem, de Valencia, em 1993, Nacional de Pesquisa em Enfermagem, de 1995; e de Humanismo e Saúde, Alicante, em 2011. Também há publicados artigos sobre a relação entre a poesia e os cuidados (Siles, 2015; Siles y Solano, 2016) ea narrativa e de enfermagem (Siles y Solano, 2014). CONSIDERAÇÕES FINAIS A história da literatura brasileira registra um exemplo de que a arte é contributo ao cuidar. Por meio do conto O Enfermeiro, Machado de Assis, ajudou a divulgar a figura do enfermeiro no século XIX. Considerando-se a época dos fatos, situada pelo próprio escritor em 1860 – e 1896 o ano da publicação – não existia no Brasil enfermeiros na concepção formativa atual, apenas pessoas que cuidavam empiricamente dos doentes, chamados de enfermeiros. Interessante, entretanto, são os qualificativos indicados para ser um bom enfermeiro: inteligência, entendimento, discrição e paciência, 146

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além de mansidão e caridade. São adjetivos que eram também indicados por muitos outros autores que escreveram manuais e textos para enfermeiros. Anos adiante na história, em 1954, novamente um escritor renomado tomou iniciativa inédita, em defesa de enfermeiras, diante do que ele sentia como injustiça social, relativa ao trabalho desempenhado por elas. Relaciona o elenco de qualidades esperadas dos profissionais, ressaltando a singularidade da função cujo exercício exigia “mais do que o comum,”, mas a sociedade lhes negava uma justa remuneração. No Brasil, são mais de 500 mil enfermeiros em exercício (COFEN, 2016), afora os técnicos e auxiliares de enfermagem. Estamos na linha de frente em todos os rincões do país: regiões inóspitas, tribos indígenas, populações ribeirinhas dos grandes rios ou igarapés, até os centros avançados e sofisticados de serviços e sistemas de saúde. Já temos enfermeiros pesquisadores nas universidades, educadores, gerentes, especialistas (em praticamente todos os ramos do saber), no campo político, em funções executivas em secretarias de saúde, superintendências e empresários de sucesso. Mas observa-se, na história, que ainda são raros os enfermeiros nas áreas de poesia, música, dramaturgia, contos, arte visual e cinema. Este estudo apresentou um pequeno número de enfermeiros atuando na literatura, que já escreveram e publicaram poemas e livros de natureza literária. Registra-se que os enfermeiros identificados na literatura têm uma formação em outros campos do saber – história, pedagogia, artes cênicas –, o que certamente contribuiu para a produção literária. Por se tratar de campo pouco explorado, é possível que outros benefícios possam ser identificados, mas o importante é abrir espaço

Cultura de los Cuidados - Assis, M. (1995). Quincas Borba. Rio de Janeiro: Ediouro. - Azevedo, A. (1989). Casa de pensão. São Paulo: Editora Ática. - Almeida, G. de (1982). A mão que nunca falta. In A.C. Carvalho (Ed.), Escola de Enfermagem da Universidade de São Paulo (p.11). Resumo histórico. - Andrade, C.D. (1984). Ela trabalha em silêncio. São Paulo: City News. - Ave Maria (1987). Bíblia Sagrada Ave Maria. São Paulo: Editora Ave Maria. - Callahan, D. (1990). The priority of care over cure. In

para diálogo com outros profissionais, em busca de interfaces de mútuos interesses e benefícios, possibilitando ampliar os horizontes das pesquisas e enriquecer o campo do saber da enfermagem. A literatura é arte e campo do saber que enfermeiros pouco têm aproveitado para seus estudos e pesquisas, e que merece maior atenção, pela visão humanística, filosófica e abrangente ao novo olhar da enfermagem para o seu mundo feito de concretudes. Agradecimento especial Os autores agradecem ao professor Maurício Apolinário pela valiosa contribuição neste estudo histórico, identificando alguns escritores de literatura brasileira e estrangeira e as respectivas obras que fazem referência ao ofício da enfermagem.

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Cultura de los Cuidados

Antropología La percepción del envejecer en una población de ancianos

The perception of the grow older in a elderly population A percepção do envelhecer em uma população de idosos

Eliane Santos Cavalcante1, Izaura Luzia Silvério Freire2, Andréa Tayse de Lima Gomes3, Micheline da Fonseca Silva4, Francisco Arnoldo Nunes de Miranda5, Gilson de Vasconcelos Torres6 Enfermeira. Doutora em Enfermagem. Professora da Escola de Saúde da Universidade Federal do Rio Grande do Norte (UFRN). Enfermeira. Doutora em Enfermagem. Professora da Escola de Saúde da Universidade Federal do Rio Grande do Norte (UFRN). 3 Enfermeira. Mestranda do programa de pós-graduação em enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte (UFRN). 4 Enfermeira. Mestranda do programa de pós-graduação em enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte (UFRN). 5 Enfermeiro. Doutor em Enfermagem. Professor adjunto da graduação e pós-graduação em Enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte (UFRN). 6 Enfermeiro. Pós-doutor em Enfermagem. Professor titular da graduação e pós-graduação em Enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte (UFRN).

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Cómo citar este artículo en edición digital: Cavalcante, E.S., Freire, I. L. S., Gomes, A.T.L., Fonseca, M.F., Miranda, F.A N., Torres, G.V.(2017). La percepción del envejecer en una población de ancianos. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.12 Correspondencia: Campus universitário, Avenida Senador Salgado Filho, s/n, Lagoa Nova, Natal/RN/Brasil. CEP: 59078-970. Correo electrónico: [email protected] Recibido: 07/07/2016; Aceptado: 20/12/2016

ABSTRACT This study aimed to understand the meaning attributed to the aging process by the elderly of a basic health unit. Qualitative, analytical and cross-sectional study, realized in a charity house in the Metropolitan region of the Rio Grande do Norte / Brazil. The sample was composed by 35 elderly and the data collection was between August and December

2014 through semi-structured interview and analyzed according to the Bardin method. Elderly reported that aging is characterized as a burden, moment of solitude and predisposition to disease. Other researched have revealed contentment and welfare notable and hope as to respective epoch lived, acknowledgment for the privilege to reach the advanced age. It is concluded that to improve the quality of life of older people, it is necessary to promote integration between them and the permanency institution as a way to encourage coexistence and social interaction. Keywords: Aging, aged, health services for the aged, primary health care. RESUMEN Este estudio tuvo como objetivo comprender el significado que se atribuye al proceso de envejecimiento por ancianos de una unidad 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados básica de salud. estudio cualitativo, analítico y transversal, realizado en una casa de caridad de la Región metropolitana de Rio Grande do Norte / Brasil. La muestra estuvo compuesta por 35 ancianos y la recolección de datos fue entre agosto y diciembre de 2014 por medio de entrevistas semiestructuradas y analizadas como el método de Bardin. Los ancianos informaron que la vejez se caracteriza como carga, momento de soledad y predisposición a las enfermedades. Otros investigados revelaron certa alegría, bienestar notable y esperanza com respecto al tiempo vivido, agradecimiento por el privilegio de llegar a la edad avanzada. Se concluye que para mejorar la calidad de vida de los ancianos, es necesario promover la integración entre ellos y la institución de permanencia como forma de estimular la convivencia y la interacción social. Palabras clave: Envejecimiento, anciano, servicios de salud para ancianos, atención primaria de salud. RESUMO Objetivou-se compreender o significado atribuído ao processo de envelhecimento pelos idosos de uma unidade básica de saúde. Estudo qualitativo, analítico e seccional, realizado em uma casa de caridade da região Metropolitana do Rio Grande do Norte/Brasil. A amostra foi composta por 35 idosos e a coleta de dados foi entre agosto e dezembro de 2014 por meio de entrevista semiestruturada e analisadas conforme o método de Bardin. Idosos relataram que a velhice caracteriza-se como fardo, momento de solidão e predisposição a doenças. Outros pesquisados revelaram contentamento e notável bem-estar e esperança a respectiva época vivida, agradecimento pelo privilégio de chegar à idade avançada. Conclui-se que para melhorar a qualidade de vida dos idosos, é necessário promover a integração entre eles 150

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e a instituição de permanência como forma de estimular a convivência e interação social. Palavras-chave: Envelhecimento, idoso, serviços de saúde para idosos, atenção primária à saúde.

INTRODUÇÃO A Organização Mundial de Saúde (OMS), por meio das Leis 8842/94 e 10741/03, considera idosa a pessoa com 60 anos ou mais. Apesar de muitas vezes predominar o preconceito e a discriminação contra esse grupo populacional, vem aumentando a consciência de que os idosos podem dar contribuição fundamental à construção de uma sociedade mais humana (Keinert & Rosa, 2009). Do ponto de vista biológico, entende-se o envelhecimento como processo dinâmico e progressivo com alterações morfológicas, bioquímicas, funcionais, comportamentais, cognitivos e sociais ocorrendo, assim, interação entre esses fatores que orientam tanto o funcionamento típico quanto atípico do processo do envelhecimento (Combinato et al., 2010). Estas alterações são dependentes de fatores como estilo de vida, condições socioeconômicas e doenças crônicas. Além do conceito “biológico”, considera-se o psíquico, que consiste na relação das dimensões cognitivas e psicoafetivas, as quais interferem na personalidade e no afeto (Fechine, & Trompiere, 2012). Desse modo, denota-se que a interação entre a biologia, o psicológico, o estilo de vida e as condições socioeconômicas interferem substancialmente nas condições do processo de envelhecimento do indivíduo. O processo de envelhecimento da população consiste em fenômeno que vem ocorrendo em nível mundial e de forma distinta entre os diversos países do mundo (Rocha, Carval-

Cultura de los Cuidados ho, Figueiredo, & Caldas, 2011; Banza & José 2012). Segundo a OMS, no ano de 2050, as estimativas para a população de mais de 60 anos é em torno de dois bilhões de pessoas idosas no mundo e a maioria delas vivendo em países em desenvolvimento. A rapidez com que ocorre o envelhecimento populacional, especialmente nos países em desenvolvimento, tornou-se tema da atualidade (Jobin, Sousa, & Cabrera, 2010). No Brasil, há previsão de que entre o período de 1970 a 2025 o crescimento do número de idosos seja de 223% de pessoas com 60 anos ou mais de idade, projetando-se para 2025 um número de 1,2 bilhões de pessoas nesta faixa etária. Esta transição demográfica decorre de diminuições importantes de taxas de natalidade, fecundidade e coeficientes de mortalidade, que geraram aumento da expectativa de vida ao nascer (Fabrício & Rodrigues, 2008). Desse modo, o processo do envelhecimento traz consigo algumas peculiaridades como mudança nos padrões de saúde, capacidade funcional, independência financeira e a possibilidade de vivenciar debilidades que torne necessário residir com familiares. Estudos mostram que 43% dos idosos não institucionalizados acima de 85 anos de idade necessitam de assistência nas atividades básicas de vida diária que são, geralmente, providas por seus familiares (Torres et al., 2009). Observa-se, portanto, um organismo fragilizado pelo processo do envelhecimento, no entanto, a Qualidade de Vida (QV) do idoso se determina, principalmente, pela garantia de autonomia e decisão sobre si e sua vida. Acredita-se assim, que para o cuidado ao idoso é necessário revelar e interpretar fatores ambientais, sociais e econômicos, e por meio dessas interfaces viabilizarem um cuidado integral a essa clientela. Nesse sentido, o conceito

para QV se torna subjetivo, multidimensional e influenciado, de acordo com o significado de cada uma dessas dimensões para o sujeito (Moliterno, Faller, Borghi, Marcon, & Carreira, 2012). A OMS define QV como: “[...] a percepção que o indivíduo tem de sua posição na vida dentro do contexto de sua cultura e do sistema de valores de onde vive, e em relação a seus objetivos, expectativas, padrões e preocupações” (Tavares, Araújo, & Dias, 2011). Nesse ínterim, reconhece-se que várias são as circunstâncias vivenciadas de forma distinta pelas pessoas idosas, tais como as perdas ou não, cognitivas, físicas e mentais e as mudanças ou não na personalidade, na vida social e produtiva, que afetam de algum modo a autonomia e a independência para o viver diário e a qualidade de vida (Gonçalves et al., 2013). A velhice, para ser compreendida, há que ser considerada em sua multidimensionalidade, onde convivem mudanças cognitivas, físicas, de papéis sociais e familiares, de perdas e ganhos, no ambiente sociocultural onde ela é construída e vivida (Almeida, Mochel, & Oliveira, 2011). Com isso, a preocupação com esta parcela da população vem aumentando, pois os idosos apresentam condições específicas que os tornam mais vulneráveis a perdas tanto do ponto de vista funcional como emocional, econômico e social, predispondo-os, principalmente, à presença de várias doenças, baixa autoestima, depressão, incapacidade para realizações e pobreza, com grandes interferências na QV (Marin, Cecílio, Rodrigues, Ricci, & Druzian, 2008). Dentro desse contexto fica nítido que o envelhecimento populacional é notoriamente um fato demográfico relevante com importantes implicações para a saúde física e mental, 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados para a QV e para programas de saúde pública (Floriano & Dalgalarrondo, 2007). Assim, o idoso tem merecido atenção especial, pois o processo de envelhecer saudável implica cuidados de promoção, prevenção, educação e intervenção e nesse contexto requer envolvimento e qualificação dos profissionais da atenção básica, como as Estratégias de Saúde da Família (ESF), com abordagem multiprofissional e interdisciplinar (Rocha et al., 2011). Infere-se, então, que para ocorrer efetiva adequação dos serviços de saúde no atendimento a pessoa idosa, é importante que os profissionais da saúde, em especial o enfermeiro, esteja qualificado para compreender as especificidades de saúde da pessoa idosa, assistida tanto pela ESF, quanto por níveis mais complexos de atenção (Queiroz, Fernandes, Cirino, Oliveira, & Menezes, 2010). Estratégias de capacitação dos profissionais de saúde se tornam essenciais para a realização do cuidado, visando à promoção, prevenção e a reabilitação. Essa realidade evidencia importante e necessária reflexão sobre os serviços prestados pelos trabalhadores de saúde na busca pela qualidade do atendimento (Andrade et al., 2011). Na atualidade existem programas específicos de educação em saúde que visa o bem-estar dos idosos, por meio de redes assistenciais com modernização nos seus serviços, como a Política Nacional do Idoso (PNI), o Pacto em Defesa da Vida por tratar-se de conjunto de compromissos, em que a saúde da pessoa idosa destaca-se como uma das prioridades pactuadas (Teixeira & Neri, 2008). Diante da transição demográfica, resultando no aumento da população idosa no Brasil e no mundo, este trabalho objetivou compreender o significado atribuído ao processo de en152

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velhecimento pelos idosos de uma unidade básica de saúde. METODOLOGIA Estudo do tipo exploratório, descritivo, analítico e seccional, com abordagem qualitativa, realizado em uma casa de caridade localizada na região Metropolitana do Rio Grande do Norte/Brasil, onde há 60 idosos institucionalizados. Os critérios de inclusão foram: idade a partir de 60 anos, lucidez, boa audição e dicção, participação voluntária e assinatura do Termo de Consentimento Livre e Esclarecido (TCLE). Com base nos critérios de elegibilidade, foram selecionados 35 idosos para a pesquisa, de ambos os sexos e com idades entre 60 e 85 anos. Os dados foram coletados no período de agosto a dezembro de 2014, por meio de uma entrevista utilizando um instrumento com questões semiestruturadas, realizada de forma individual. Ressalta-se que os participantes do estudo foram identificados por números arábicos (Idoso 1, Idoso 2... Idoso 34) a fim de preservar o anonimato dos mesmos. Posteriormente, as entrevistas foram transcritas e analisadas de acordo com análise categorial de conteúdo de Bardin, que consta de conjunto de técnicas de análise das comunicações, visando obter, por procedimentos objetivos e sistemáticos de descrição do conteúdo das mensagens, indicadores (quantitativos ou não) que permitam a inferência de conhecimentos relativos às condições de produção/ recepção destas mensagens (Oliveira, 2008). A execução dessa pesquisa seguiu em conformidade com os parâmetros éticos e legais que regem a Resolução 466/12 do Conselho Nacional de Saúde. Para tanto, o projeto de pesquisa foi previamente submetido ao Comi-

Cultura de los Cuidados tê de Ética em Pesquisa da Universidade Federal do Rio Grande do Norte (CEP/UFRN), o qual, após apreciação ética, obteve parecer favorável com parecer de número 562.318 e Certificado de Apresentação para Apreciação Ética 21996313.7.0000.5537. RESULTADOS Nesse estudo dividiu-se a percepção do processo de envelhecimento da população pesquisada em dois blocos: “O envelhecer como desgaste natural” e “A velhice enfrentada como o fim da vida”. O envelhecer como desgaste natural Nos discursos analisados, percebe-se que o processo de envelhecimento ainda se encontra arraigado no ciclo vital: nascer, crescer e morrer, ou seja, o envelhecimento faz parte da vida cotidiana do individuo, isto pode ser observado nas falas dos idosos 21 e 19. É o que Deus deixou pra natureza humana, nascer, crescer e morrer (Idoso 21). Tem que ficar mesmo, é aceitar, se tiver com saúde é bom (Idoso 19). Percebe-se também, contentamento e emoção nas falas dos pesquisados, além de uma notável associação de bem-estar e esperança a respectiva época vivida, agradecimento pelo privilégio de chegar à idade avançada. Mesmo que algum desvio de saúde estivesse no corpo consideraram que esta é a última e mais rica etapa da vida. É o passar dos tempos, já ter vencido muita coisa e ter esperança de vencer mais (Idoso 4). É agradecer os anos que já vivi (Idoso 34). O pensamento de aceitar a velhice como um bem e um sinal de experiência e sabedoria é compartilhado com os nossos entrevistados e pode ser exemplificado nos seguintes discursos:

É bom, sinal que viveu muito aprendeu mais coisas (Idoso 6). É melhor do que quando eu era nova, depois de velha estou no meu querer (Idoso 14). A velhice enfrentada como o fim da vida As falas dos Idosos 5 e 13 denotam a percepção da velhice como a fase mais difícil da vida, verdadeiro fardo, momento de solidão e desengano. Idade, doença, queria ser nova, eu era feliz e num sabia (Idoso 5). A velhice traz muitas decepções, vivo de lembranças do passado. Viver é solidão (Idoso 13). Além disso, observou-se entre as falas dos idosos a desesperança em relação a esta etapa do ciclo vital, a perda da expectativa de vida, maior fragilidade no enfrentamento das dificuldades e para essas pessoas a velhice tornouse algo com conotação negativa. É num prestar mais, perder o gosto de muita coisa (Idoso 22). É ficar como eu, doente, sem poder fazer nada, num posso trabalhar, num posso andar, eu nova fazia tudo, hoje tenho vontade e num tenho mais condição (Idoso 25). Outro ponto relevante foi que os participantes representaram a velhice como a perda do papel social de trabalhador. Aqui a velhice significa momento de declínio da capacidade para trabalhar, enfatizada pela perda da utilidade social da pessoa idosa. Infelizmente o tempo passou e eu nem vi, envelhecer é não poder mais fazer nada (Idoso 27). As doenças, as perdas, o isolamento social, o declínio funcional, a redução da renda, a falta de infraestrutura e diversos outros fatores são os responsáveis por essa ideia pessimista a respeito do envelhecer, essas pessoas tomam atitudes e posições que não são saudáveis e não 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados aceitam com tranquilidade as sucessivas mudanças desta fase da vida. Observam-se estas afirmações nas falas a seguir: Depois que eu envelheci só sinto cansaço e dor, então envelhecer é isso (Idoso 26). O tempo passa tem que ficar velho, trabalhei, trabalhei pra me aposentar e não ter nada (Idoso 28). É preocupação de ficar doente e não ter quem cuide ficar nas mãos de outra pessoa (Idoso 31). Nos respectivos sujeitos do estudo o impacto dessas mudanças é ainda mais severos devido a todos os agravos a que eles são submetidos na comunidade. DISCUSSÃO Para envelhecer com qualidade é necessário que se tenha uma vida ativa, produtiva, participativa e afetiva, com a família e sociedade. É fundamental que o idoso desperte a curiosidade de buscar novos conhecimentos para aperfeiçoá-los, proporcionando o prolongamento do seu autocuidado (Silva, Fossatti, & Portella, 2007). Diante dessa realidade, é conhecido que a dependência e falta de autonomia podem ser experienciadas de diferentes formas ao longo do ciclo vital. No processo de envelhecimento, a falta de autonomia e a dependência são comumente eventos negativos e estressantes, que conduzem à baixa QV, tanto para quem vivencia essa condição como para aqueles que estão no seu entorno (Gonçalves et al., 2013). Daí a importância da manutenção da autonomia do idoso, autossatisfação, participação e a possibilidade de atuar em variados contextos sociais, que pode ser alcançado mediante a existência de uma rede prestadora de serviços que contemplem tais assistências, a fim de adicionar qualidade aos anos vividos a esta população (Silva et al., 2007). 154

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O posicionamento teórico dos entrevistados é claramente apreciado pela literatura. No decurso da existência, poucas são as pessoas que vão se instrumentalizando para lidar com as perdas que emergem com o envelhecimento. Assim, com o avanço da idade, a aquisição destes meios é vital para uma vida mais tranquila, com menos exposição ao estresse do medo de envelhecer (Farber, 2012). Envelhecer bem é aceitar a velhice como um bem. Para atingir a sabedoria e a serenidade e para inventar nova maneira de viver, é preciso ter sido capaz de adaptar-se ao longo da vida. Na medida em que se soube viver, também se deve saber e ser capaz de envelhecer (Duarte, 2001). Não se pode deixar de notar o máximo esforço e superação que essas pessoas devem fazer para assim refletir sobre a velhice e todo o processo de envelhecimento, já que os meios e recursos de vida disponíveis lhes são extremamente limitados e restritos e elas foram capazes de englobar ao significado de envelhecer amadurecimento e sabedoria. Caracterizar uma pessoa como velha levando apenas a idade em consideração é medir a velhice apenas por critério cronológico, é esquecer as experiências acumuladas, os anos vividos. O tempo cronológico pode não fazer jus à jovialidade interior que mantém ativo um indivíduo de idade avançada, predisposições individuais, como relacionamento familiar, temperamento, tipo de trabalho e condições de moradia, interagem e tornam variável o conceito de envelhecimento, podendo fazer com que o indivíduo pareça mais velho do que realmente é assim como as condições favoráveis de vida podem propiciar que algumas pessoas envelheçam com aparência jovem. Em um estudo etnográfico realizado com

Cultura de los Cuidados idosos do Morro da Penha, município de Santos, São Paulo, inferiu-se que os idosos indicaram que a velhice não é vista, mas sim sentida. Identificaram-se como velhos os idosos com incapacidades para realizar as atividades cotidianas e aqueles com impossibilidade de exercer seus papéis sociais, como trabalho e auxílio à família (Assis & Martin, 2010). Seria bastante gratificante se todos os anciãos pensassem em envelhecimento como fase de crescimento ou amadurecimento, momento pleno do ciclo vital. Porém, apesar de estar analisando discursos, cita-se que para aproximadamente 82,8% da amostra, a velhice se caracteriza como a fase mais difícil da vida, verdadeiro fardo, momento de solidão e desengano. Percebe-se que existe um desafio a ser enfrentado e superado por essas pessoas, que é equilibrar a vontade de fazer algo que antes conseguiam fazer sem obstáculos com as atuais limitações físicas, vistas como perdas associadas ao processo de envelhecimento. Nota-se, que as dificuldades físicas acabam por totalizar toda a experiência de envelhecer. Experimentar e salientar o processo de envelhecer como sinônimo exclusivo de doença e perdas funcionais/cognitivas reforça o medo que muitas pessoas têm de envelhecer, e assim, de adoecer e ficar dependente, o que remete à noção de finitude do ser humano (Fratezi, Silva, Silveira, & Lopes, 2011). Ademais, autores demonstram que o aumento da longevidade expõe a pessoa idosa a viver com enfermidades crônicas por um longo período, o que pode comprometer sua qualidade de vida. Essa condição exige políticas públicas de atenção que possibilitem a oferta de cuidados continuados e integrados às pessoas idosas no intuito de preservar a capacidade funcional e a autonomia desses sujeitos

(Gonçalves, Alvarez, Sena, Santana, & Vicente, 2006; Gonçalves et al., 2013). O processo de envelhecimento delimita mudanças expressivas de ordem individual, familiar e social, cada um com seus significados e relevâncias. Ao envelhecer, o idoso e sua família mudam, adquirindo determinados direitos legais e perdendo outros pelas dificuldades orgânicas e mentais trazidas pelo envelhecimento. Para muitos indivíduos enfrentar essas alterações que esse processo traz além de não ser simples, os torna mais vulneráveis a sentimentos negativos e preocupantes. Infere-se assim que a percepção do envelhecimento é multidimensional em natureza, pois englobam as características negativas e positivas desse processo e refletem uma combinação entre precisas representações de mudanças relacionadas à idade e visões distorcidas de pessoas mais velhas (Lockenhoff et al., 2009). CONSIDERAÇÕES FINAIS Considera-se a velhice como processo inelutável, caracterizado por conjunto complexo de fatores fisiológicos, psicológicos e sociais de cada indivíduo. Assim certos idosos estão mais envelhecidos, outros parecem mais jovens e há ainda os que sentem não ter qualquer utilidade, afirmando a complexa heterogeneidade da velhice. Os resultados do estudo possibilitaram traçar um perfil dos participantes, bem como das necessidades referenciadas pelos pesquisados e as maiores lacunas encontradas dizem respeito à saúde, a interação e a inclusão social. Destarte, há de se buscar alternativas para integrar melhor esses idosos entre si e nos serviços de saúde. Uma das perspectivas é a formação de grupos voltados para problemas de saúde, como por exemplo: grupos de diabéticos e grupos de hipertensos, grupos de 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados ocupação com bordados, danças, artesanatos, entre outros. Todos esses grupos possibilitam promover a saúde do idoso, integrando-o na sociedade e estimulando a convivência, interação social, fazer novas amizades, e assim, construir melhor QV. A ESF e a enfermagem, dentro desse cenário ocupam lugar de destaque, pois têm por base à vigilância à saúde, onde o idoso é objeto precípuo de atenção. Cabendo aos mesmos o dever e o desafio de idealizarem estratégias para que se promova boa saúde e independência funcional além de serviços comunitários de apoio. Assim, o trabalho com os idosos tem que ser prioridade, o cuidado ideal das pessoas idosas pode ser mais bem prestado por meio de um esforço de cooperação sendo necessário trabalhar na busca de melhor entendimento do processo de envelhecimento juntamente com a família proporcionando, consequentemente, um envelhecimento com QV. Porque a verdade é que não temos de nos preocupar em viver longos anos, mas em vivêlos satisfatoriamente, viver o domínio de si mesmo depende da alma. A vida é longa quando é plena; e se faz plena quando a alma recuperou a posse de seu próprio bem e transferiu para si o domínio de si mesma.

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Cultura de los Cuidados

La interfaz salud y medio ambiente en el diálogo com estudiantes: ressignificando el sentido del cuidado

The interface health and environment in dialogue with students: resignifying the sense of care A interface saúde e ambiente no diálogo com escolares: ressignificando o sentido do cuidado Silvana Ceolin1, Marjoriê Mendieta2, Márcia Vaz Ribeiro3, Márcio Rossato Badke4, Teila Ceolin5, Rita Maria Heck6 Mestre em Enfermagem. Doutoranda do Programa de Pós-Graduação em Enfermagem (PPG-Enf) da UFPel, em cotutela com a Universidad de Alicante. 2 Mestre em Enfermagem. Doutoranda do Programa de Pós-Graduação em Enfermagem (PPG-Enf) da UFPel. 3 Doutora em Fisiologia Vegetal. Pós-doutoranda do Programa de Pós-Graduação em Enfermagem (PPG-Enf) da UFPel. 4 Mestre em Enfermagem. Doutorando do Programa de Pós-Graduação em Enfermagem (PPG-Enf) da UFPel. 5 Doutora em Enfermagem. Professora da Faculdade de Enfermagem da UFPel. 6 Doutora em Enfermagem. Professora do PPG-Enf da UFPel.

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Cómo citar este artículo en edición digital: Ceolin, S.,, Mendieta, M.C.,, Ribeiro, M.V., Badke, M.R., Ceolin, T., & Heck, T.R.M. (2017). La interfaz salud y medio ambiente en el diálogo com estudiantes: ressignificando el sentido del cuidado. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.13 Correspondencia: (Remitirse al correo electrónico) Correo electrónico: [email protected] Recibido: 23/07/2016; Aceptado: 20/11/2016 Este trabalho recebeu fomento da Fundação de Amparo à Pesquisa do Estado do Rio Grande do Sul (FAPERGS).

ABSTRACT Objective: know the meanings produced by students from dialogues of health care and the environment. Methodology: a qualitative study with 65 students of two schools of the Pelotas /RS /Brazil. The data were collected from September to August/2011/2012. The material analyzed in this paper was produced at the end of 18 workshops from essays and 158

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speeches written by focus groups. Results: it was observed that the process of participation at the workshops created a close liaison between health care encompassing the human relationship with the environment. The dynamic provided the motivation for adopting collective conscious, ethical attitudes, gesture of citizenship and ressignification of the values and symbology, including in these medicinal plants. Conclusion: the health and environmental issues can be optimized and experienced in an enjoyable way when worked interconnected with the individual’s culture. Keywords: Nursing, health Education, medicinal plants, culture. RESUMEN Objetivo: discutir los significados producidos por escolares a partir de diálogos de cuidados de salud y el medio ambiente. Me-

Cultura de los Cuidados todología: estudio cualitativo con 65 alumnos de escuelas del municipio de Pelotas/RS/ Brazil. La recogida de datos se llevo a efecto de septiembre/2011 a agosto/2012. El material analizado es resultado de 18 talleres de grupos focales. Resultados: se observó que el proceso de participación en los talleres provocó un estrecho enlace entre la atención de la salud que abarca la relación humana con el medio ambiente. La dinámica proporciono la motivación para la adopción de actitudes conscientes, colectivas, éticas, ciudadanas, de resignificación de los valores y simbología, incluidos en estas plantas medicinales. Conclusión: la salud y el medio ambiente pueden ser optimizados y vividos de forma agradable cuando son convenientemente trabajados de manera relacional con la cultura de los individuos. Palabras clave: Enfermería, educación en salud, plantas medicinales, cultura. RESUMO Objetivo: conhecer os significados produzidos por escolares a partir de diálogos sobre cuidado à saúde e ambiente. Metodologia: estudo de abordagem qualitativa com 65 educandos de duas escolas do município de Pelotas/RS/Brasil. Os dados foram coletados de setembro/2011 a agosto/2012, ao final de 18 oficinas, por meio de redações produzidas pelos escolares e grupo focal. Foi realizada análise de conteúdo temática. Resultados: observou-se que o processo de participação nas oficinas despertou uma vinculação estreita entre cuidado em saúde englobando a relação humana com o ambiente. A dinâmica oportunizou observar a motivação para adoção de atitudes conscientes, coletivas, éticas, cidadãs, de ressignificação dos valores e simbologias, incluindo nestas as plantas medicinais. Conclusões: os temas saúde e ambiente podem ser

otimizados e vividos de forma prazerosa quando trabalhados de maneira interligada com a cultura dos indivíduos. Palavras-chave: Enfermagem,, educação em saúde, plantas medicinais, cultura. Introdução Na atualidade, a interface saúde e ambiente vêm sendo cada vez mais discutida, devido à qualidade de vida estar associada ao equilíbrio socioambiental. A sustentabilidade envolve a sociedade, a educação, a política, a cultura, a arte, a natureza, o planeta e a vida de cada pessoa (Boff, 2012). É neste sentido que o conceito de cuidado inclui certo modo de estar-no-mundo-com-os-outros e uma determinada práxis, preservadora da natureza. Representa uma relação amorosa, respeitosa e não agressiva para com a realidade, e por isso não destrutiva (Boff, 2012). Em uma perspectiva interdisciplinar, o cuidado em saúde pode ser ressignificado por meio da educação. É nesse aspecto que a escola tem uma função social peculiar, pois as crianças/adolescentes estão em um período de formação de valores e em constante significação de seus conceitos (Ceolin, 2012). O conceito de cultura nesse contexto é dinâmico, pois o sujeito traz suas experiências do cuidado familiar/comunitário e compartilha conhecimentos, símbolos e significados no processo educativo, fortalecendo a sua criticidade e capacidade de reflexão (Geertz, 2011). Estudos destacam a importância da parceria entre educação, saúde e ambiente no contexto escolar, pois fortalece a construção de uma postura protagonista do educando no cuidado ao ambiente em que vive (Alves, 2015; Lima, Miranda, 2016; Amaral, 2016; Souza, Santos, 2016 Ceolin et al.,2016). Estas 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados proposições levaram ao seguinte questionamento: Quais são os significados produzidos por escolares mediante diálogos sobre cuidado à saúde e ambiente? Nesta perspectiva, o objetivo deste estudo foi conhecer os significados produzidos por escolares a partir de diálogos sobre cuidado à saúde e ambiente. METODOLOGIA Estudo qualitativo, exploratório e descritivo (Minayo, 2015), vinculado ao projeto de pesquisa “Uso de plantas medicinais e as práticas populares de saúde entre escolares da região Sul do Rio Grande do Sul”, o qual integra o Programa Novos Talentos da Coordenação de Aperfeiçoamento de Pessoal de Nível Superior (CAPES), edital nº 055/2012. Foi desenvolvido em duas escolas públicas da região periférica da cidade de Pelotas/RS/Brasil. As atividades envolveram 28 escolares matriculados no 5o ano de uma escola estadual, 26 escolares matriculados no 5o ano e 29 no 6o ano de uma escola municipal, perfazendo, neste primeiro momento, 83 alunos matriculados no ano letivo de 2011. Na primeira etapa, foram realizadas 18 oficinas (seis por turma), das quais, seis no espaço escolar e doze nas dependências da Faculdade de Enfermagem da Universidade Federal de Pelotas. As oficinas forma desenvolvidas no período de setembro a dezembro de 2011, coordenadas por três mestrandas e seis bolsistas de iniciação científica. Algumas atividades contaram também com convidados (um agrônomo e uma fisioterapeuta) que contribuíram para a interdisciplinaridade das discussões. Foram abordadas questões sobre saúde, plantas medicinais e a relação do ser humano com o ambiente. Os recursos didáticos envolveram discussões em roda, cartazes, pinturas, 160

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jogo da memória, vídeos, atividades no Laboratório de Cuidado em Saúde e Plantas Bioativas de plantas e no Horto Didático de plantas medicinais. A metodologia de operacionalização das oficinas foi alicerçada no referencial teórico de Clifford Geertz e Paulo Freire. Geertz (2011) diz que a cultura não é estática, mas construída pelos sujeitos ao interagirem no cotidiano. Para Freire (2011), os processos educativos devem ser mediados pelo diálogo ente às culturas, partindo das experiências concretas dos sujeitos e estimulando o movimento ação-reflexão-ação. No campo da saúde, a articulação desses autores fundamenta um processo de educação em saúde culturalmente sensível, no qual os agentes compartilham conhecimentos e fortalecem seus saberes e práticas em relação à prevenção e promoção da saúde. Ao final destes seis encontros, foi solicitado que os escolares escrevessem uma redação a partir da seguinte questão norteadora: “O que as oficinas representaram na minha vida?”. Dos 83 escolares participantes da pesquisa, 65 escreveram a redação e 30 participaram dos grupos focais, compondo a totalidade dos sujeitos da pesquisa. Na segunda etapa da pesquisa, foram realizados três grupos focais, sendo um com cada turma, composto por 10 escolares elencados por sorteio aleatório. Esta atividade ocorreu nos meses de julho e agosto de 2012 e contou com a presença de um mediador, um observador e um responsável pela gravação. Os grupos focais foram realizados na Faculdade de Enfermagem da Universidade Federal de Pelotas, tendo duração de aproximadamente 50 minutos. Os dados que emergiram das redações e dos grupos focais foram analisados por meio da proposta operativa de Minayo (2015), da

Cultura de los Cuidados qual emergiram três temas: 1º) diálogo sobre plantas medicinais (Ceolin et al., 2016); 2º) cuidado com a saúde; 3º) cuidado com o ambiente. Neste artigo serão abordados o segundo e o terceiro tema. Na discussão dos resultados apresentados, “texto escrito” refere-se às redações e “discurso oral”, aos grupos focais. O estudo seguiu as normas nacionais e internacionais de ética em pesquisa com seres humanos e foi aprovado pelo Comitê de Ética e Pesquisa da Faculdade de Medicina da Universidade Federal de Pelotas, protocolo 020/2011. RESULTADOS E DISCUSSÃO No que se refere à caracterização dos escolares, constatou-se que a idade destes variou entre 9 e 15 anos, com predomínio do sexo feminino (51%). As duas escolas referidas neste estudo localizam-se em uma cidade do extremo Sul do Rio Grande do Sul/Brasil, numa região de alta vulnerabilidade social, com precárias condições de saúde, educação, renda, moradia e saneamento básico. Os encontros com os escolares foram mediados por ações, reflexões e negociações integradas as suas realidades culturais. As oficinas abordaram discussões sobre poluição ambiental, reciclagem de materiais, cuidados com preservação dos recursos naturais e seus reflexos na saúde humana. Observou-se que esses diálogos provocaram a discussão integrada entre natureza, cuidado e saúde, fomentando a consciência das crianças sobre esta relação, conforme emerge nos relatos a seguir: “Eu estou adorando este projeto, porque este projeto faz as crianças cuidarem da natureza.” (Canela, texto escrito) “Eu acho que a gente tem que cuidar do ambiente, é bom para nós e os animais, é bom para nossa saúde.” (Pulmonária, discurso oral)

“Cuidar do ambiente é bom pra vida na terra. Ajudar o planeta não poluindo, o solo se torna melhor, e através da fotossíntese as plantas liberam mais oxigênio para a vida.” (Guaco, texto escrito) Os escolares revelaram a preocupação com a conservação dos recursos naturais, e seus benefícios para a saúde. Perceberam também, a interdependência dos seres vivos com o ambiente e sua relação com a qualidade de vida. A reflexão crítica do contexto em que se vive leva a interpretar as condições de vida e repensar possibilidades de promoção de um viver saudável. Deste modo, abrem-se caminhos para o fortalecimento de atitudes cidadãs, solidárias e críticas (Ceolin et al., 2016). Fazendo uma aproximação com o pensamento de Paulo Freire, entende-se o sujeito como um ser inacabado, pois está sempre em um processo de construção sociocultural e histórico, que o modela como um ser singular. Logo, a cultura é um sistema simbólico fluido e aberto (Geertz, 2011) propiciando a incorporação ou o afastamento de práticas e crenças. Daí surge o desafio dos processos educativos dialógicos: motivar a geração do viver com um significado, integrado harmonicamente ao ambiente. Neste pensar, a saúde integra diversos elementos, e a educação, quando interligada à cultura, permite a reconstrução da teia de significados que o ser humano produz para interpretar e conduzir suas práticas de cuidado de saúde de si e do mundo. Em relação à comunidade em que vivem, observou-se que os educandos vislumbraram ações prejudiciais, conforme os relatos a seguir: “A pessoas cortam árvores, botam fogo, isso acontece muito. Às vezes nem os animais se salvam.” (Menta, discurso oral) 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados “Muita gente joga lixo no bueiro. Quando chove, transborda, prejudica as casas de quem mora lá perto. E depois que chove ficam poças, e não tem como tu passar e não molhar o pé, aí pode causar aquela doença do rato, já ouvi vários casos.” (Boldo, discurso oral) “Muitas vezes não separam o lixo, isso faz mal pra saúde, para as florestas e para os animais.” (Limoeiro, discurso escrito) As falas dos escolares demonstram os problemas da comunidade em relação às ações dos moradores sobre o seu território. Estas possuem um impacto significativo na saúde, tornando o ambiente mais suscetível ao aparecimento de doenças. Crianças que residem em locais que possuem, como costume, a desposição inadequada do lixo, podem acreditar que esta atitude seja algo natural. É nesse processo que se moldam os valores e crenças de uma população, ou seja, através dos modos de viver o cotidiano (Geertz, 2011). Por isso, a importância das atividades educativas, por meio das quais indivíduos e comunidades reflitam sobre ações, como produção de lixo, queimadas, desmatamento e seus reflexos no ambiente e saúde humana, tornando-se promotores de ações sustentáveis. O pensamento crítico se instaura por meio da participação ativa e reflexiva dos estudantes no processo educativo. A construção desta participação incide sobre a relação horizontal entre os sujeitos, que precisa ser fundamentada no diálogo, para que ocorram trocas significativas de experiências e construção compartilhada de saberes (Freire, 2011). O discurso apresentado pelos escolares foi aproximado de circunstâncias habituais, que, de acordo com Geertz (2011) é o que dá sentido ao seu viver, pois a cultura constitui-se no vivido cotidianamente, significando ação humana, simbolismo. Assim, a percepção que a 162

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comunidade constrói da natureza é resultado de diversos elementos que constituem a cultura, tanto locais, envolvendo a sabedoria popular, quanto globais, que abrangem as influências dos valores da sociedade como um todo. Em uma perspectiva dialógica, a educação valoriza experiências/vivências prévias, tornando-se um processo dinâmico e significativo ao educando (Freire, 2011). A aproximação com a cultura local e com o conhecimento familiar dos escolares, oportunizada pelas oficinas, contribuiu para a compreensão do contexto e das necessidades desses sujeitos. Contemplar o cotidiano, o vivido, ouvir o outro e perceber as emoções facilitou a aprendizagem dos escolares, de forma significativa. Portanto, a interface saúde e ambiente precisa ser trabalhada de forma interligada com a cultura dos indivíduos, para estimular a formação do pensamento crítico e favorecer o bem-estar humano e ambiental. O diálogo também despertou a consciência de que podem ser os novos talentos do futuro, como revelado pelos discursos: “O Projeto Novos Talentos é para educar a gente. É para a gente crescer e ajudar outras pessoas. Elas precisam de nós, pois somos o futuro delas. Quando a gente crescer, podemos ajudar os outros a pensar.” (Bergamoteira, texto escrito) “As oficinas significaram para mim aprendizado e futuro. Para falar a verdade esses foram os mais importantes dias da minha vida.” (Ginseng, texto escrito) Trabalhar a partir da realidade vivenciada pelos educandos contribuiu para os mesmos refletirem sobre as questões sociais e ambientais que os cercam e o potencial de modificar este contexto. É nessa dimensão que visualizamos a importância da educação, que tem o potencial de despertar valores e transformar atitudes com criticidade.

Cultura de los Cuidados Os diálogos gerados instigaram os escolares a se percebem como atores sociais comprometidos com o contexto socioambiental. Também com a capacidade de transformar a realidade de sua comunidade. Eles demonstraram a preocupação com os riscos que a destruição dos recursos naturais causa à sociedade e às futuras gerações. Nutrir o processo educativo por meio das experiências culturais fortalece o exercício da liberdade em um duplo movimento de ação-reflexão, que aponta caminhos para a promoção do viver saudável (Freire, 2011). CONSIDERAÇÕES FINAIS Conhecer o significado gerado pelos escolares às discussões sobre cuidado com a saúde e a natureza permitiu constatar o potencial de metodologias participativas - a exemplo de oficinas – no despertar de novas visões de mundo, ressignificando o sentido do cuidado. Os discursos dos educandos revelaram a consciência dos reflexos da ação humana no ambiente e o compromisso social de cada um com as futuras gerações e com o planeta. A noção de cuidado produzida por eles revela uma dimensão integral, visto que passa pelo entendimento da relação dinâmica do ambiente com os seres vivos dele dependentes. O diálogo construído despertou nos escolares a criticidade sobre o contexto atual e futuro da sua comunidade. Na posição de protagonistas desse meio, sentem-se responsáveis pela manutenção das condições de vida. Isso mostra que a aprendizagem baseada na ação e no vivido contribui para a incorporação de atitudes críticas e coletivas, que ressignificam o cuidado. Ao colocar em comunicação o significado de cultura de Geertz e a perspectiva educacional de Freire, foi possível conhecer a realidade

cultural dos educandos e estabelecer uma relação que modificou tanto o pensamento dos escolares quanto dos pesquisadores, ambos, atores do processo educativo. Novas pesquisas de interesse emancipatório são sugeridas, ou seja, que tenham a intenção de fomentar o pensamento crítico e reflexivo com os sujeitos, onde todos são atores, aprendem e ensinam. Explorar referenciais teórico-metodológicos participativos potencializa a construção de uma ciência social e prática, comprometida com a transformação de realidades. REFERÊNCIAS - Amaral, I.A (2016). Educação ambiental e ensino de ciências: uma história de controvérsias.  Pro-Posições, 12(1), 73-93. - Alves, H. S., Souza, A. D. M., & Sawaki, R. (2015). Implantação de horta orgânica: educando com a horta escolar na escola de ensino integral Frei Fabiano Merz em Santarém. Cadernos de Agroecologia, 10(3), 55-68. - Boff, L (2012). O Cuidado Necessário - na Vida, na Saúde, na Educação, na Ecologia, na Ética e na Espiritualidade. São Paulo: Editora Vozes. - Ceolin, S. (2012). O processo de educação em saúde a partir do diálogo sobre plantas medicinais: significados para escolares. (Dissertação de mestrado não publicada). Programa de Pós-graduação em Enfermagem, Universidade Federal de Pelotas: Pelotas/RS/Brasil. Recuperada 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados

Teoría y Método Proceso de enfermería aplicado al paciente con tetralogia de Fallot

Nursing process applied to patient with tetralogy of Fallot Processo de enfermagem aplicado ao paciente com tetralogia de Fallot Jéssica Naiara de Medeiros Araújo1, Andréa Tayse de Lima Gomes2, Raianny Alves Costa Medeiros3, Ana Paula Nunes de Lima Fernandes4, Viviane Euzébia Pereira Santos5, Allyne Fortes Vitor6 Enfermeira. Mestra em Enfermagem. Doutoranda do Programa de Pós-Graduação em Enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte. Brasil. 2 Enfermeira. Mestra em Enfermagem. Universidade Federal do Rio Grande do Norte. Brasil. 3 Enfermeira. Mestranda do Programa de Pós-Graduação em Enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte. Brasil. 4 Enfermeira. Mestra em Enfermagem. Doutoranda do Programa de Pós-Graduação em Enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte. Brasil. 5 Enfermeira. Doutora. Professora Adjunta do Departamento de Enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte. Brasil. 6 Enfermeira. Doutora. Professora Adjunta do Departamento de Enfermagem da Universidade Federal do Rio Grande do Norte. Brasil.

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Cómo citar este artículo en edición digital: Araujo, J.N.M., Gomes, A.T.L., Medeiros, R.A.C., Fernandes, A.P.N.L., Santos, V.E.P., & Vitor, A.F. (2017) Proceso de enfermería aplicado al paciente con tetralogia de Fallot. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.14 Correspondencia: Jéssica Naiara de Medeiros Araújo. Rua Dom Joaquim de Almeida, 2076 aptdo. 202/ Lagoa Nova. CEP: 59056140 – Natal – RN. Correo electrónico: [email protected] Recibido: 23/07/2016; Aceptado: 20/12/2016

ABSTRACT Objective: To describe the steps of the nursing process applied to patients with tetralogy of Fallot, based on NANDA-I, Nursing Interventions Classification (NIC) and Nursing Outcomes Classification (NOC).

Method: This is a clinical case developed in a university hospital located in Northeast Brazil. It should be noted that this study was appreciated by the Ethics Committee of the Federal University of Rio Grande do Norte, which it approved it with number of Certificate of Presentation for Ethical Assessment: 07614812.6.0000.5537. Results: Among the four identified nursing diagnoses, has listed is a priority, which was intolerant of activity. The result, compromised moderately fatigue and activity of level, and interventions accounted for cardiac care: acute phase. Conclusions: After the execution of the care plan, it was observed that the actions taken have contributed significantly to the im1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados provement of the health status of the patient, in order to contribute to increasing confidence and independence of it, despite the limitations inherent to the disease. Keywords: Tetralogy of Fallot, nursing diagnosis, nursing process, Nursing care. RESUMEN Objetivo: Describir los pasos del proceso de enfermería aplicado al paciente portador de tetralogia de Fallot, fundamentado en la NANDA-I, Nursing Interventions Classification (NIC) y Nursing Outcomes Classification (NOC). Método: Se trata de un caso clínico desarrollado en un hospital universitario localizado en el nordeste brasileño. Se resalta que este estudio fue apreciado por el Comité de Ética en Investigación de la Universidad Federal del Río Grande del Norte, que lo aprobó con número de Certificado de Presentación para Apreciación Ética: 07614812.6.0000.5537. Resultados: Entre los cuatro diagnósticos de enfermería identificados, ha enumerado es una prioridad, el cual fue intolerancia la actividad. El resultado, nivel de actividad y de fatiga moderadamente comprometido, y las intervenciones correspondían a cuidados cardíacos: fase aguda. Conclusiones: Después de la ejecución del plan de cuidados, se observó que las acciones implementadas contribuyeron considerablemente para la mejora del estado de salud de la paciente, e forma a colaborar para el aumento de la autoconfiança e independencia de la misma, a pesar de las limitaciones inherentes a la propia enfermedad. Palabras clave: Tetralogía de Fallot, diagnóstico de enfermería, procesos de enfermería, atención de enfermería.

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RESUMO Objetivo: Descrever os passos do processo de enfermagem aplicado ao paciente portador de tetralogia de Fallot, fundamentado na NANDA-I, Nursing Interventions Classification (NIC) e Nursing Outcomes Classification (NOC). Método: Trata-se de um caso clínico desenvolvido em um hospital universitário localizado no nordeste brasileiro. Ressalta-se que este estudo foi apreciado pelo Comitê de Ética em Pesquisa da Universidade Federal do Rio Grande do Norte, que o aprovou com número de Certificado de Apresentação para Apreciação Ética: 07614812.6.0000.5537. Resultados: Entre os quatro diagnósticos de enfermagem identificados, elencou-se um prioritário, o qual foi intolerância a atividade. O resultado, nível de atividade e de fadiga moderadamente comprometido, e as intervenções correspondiam a cuidados cardíacos: fase aguda. Conclusão: Após a execução do plano de cuidados, observou-se que as ações implementadas contribuíram consideravelmente para a melhora do estado de saúde da paciente, de forma a colaborar para o aumento da autoconfiança e independência da mesma, apesar das limitações inerentes à própria doença. Palavras-chave: Tetralogia de Fallot, diagnóstico de enfermagem, processos de enfermagem, cuidados de enfermagem. INTRODUÇÃO A tetralogia de Fallot é uma cardiopatia congênita, que é caracterizada pelo agrupamento de quatro manifestações fisiológicas distintas, a saber: comunicação interventricular (defeito do septo); dextroposição da artéria aorta (deslocamento da aorta); obstrução do fluxo sanguíneo do Ventrículo Direito (VD),

Cultura de los Cuidados causando estenose pulmonar; e, hipertrofia ventricular direita. O principal sinal clínico dessa doença é a cianose, principalmente em pele, mucosas e extremidades, o que a tornou conhecida como “doença azul” (Phillips, 2012; Medina, 2011; Balliard e Anderson, 2009). As cardiopatias congênitas incidem em torno de 9 a cada 1.000 nascidos vivos (Damas, Ramos e Rezende, 2009; Rivera et al., 2007; Weber et al., 2012) e cerca de 20% a 30% das crianças cardiopatas sem tratamento morrem no primeiro mês de vida (Weber et al., 2012; Nina et al., 2007). Portanto, o diagnóstico precoce é fundamental para prevenir e minimizar as complicações decorrentes da rápida deterioração clínica e as altas taxas de morbidade e mortalidade (Weber et al., 2012; Pedra et al., 2005). Tendo em vista a gravidade da doença, denota-se a importância do cuidado individualizado ao paciente portador da tetralogia de Fallot, pois a assistência direcionada às necessidades biopsicossociais do sujeito contribuem substancialmente para a diminuição do tempo de internação e rápida melhoria do quadro de saúde (Aguiar e Braga, 2011; Borges et al., 2012). Para tanto, reconhece-se que para oferecer uma assistência de enfermagem de qualidade ao paciente portador dessa patologia, faz-se necessário a utilização de métodos, como a Sistematização da Assistência de Enfermagem (SAE), que proporcionem e contribuam para o julgamento crítico do profissional durante a prestação do cuidado, assim como sejam embasados no conhecimento técnico-científico, a fim de colaborar para o planejamento eficaz das ações, vislumbrando o alcance de resultados satisfatórios e que reduzam as complicações durante o tratamento (Tavares et al., 2013).

A SAE inclui o Processo de Enfermagem (PE), que é estabelecido em cinco etapas categorizadas em: 1) Coleta de dados (histórico); 2) Diagnóstico de Enfermagem (DE); 3) Planejamento dos cuidados; 4) Implementação das ações; e, 5) Avaliação. Essas etapas cooperam substancialmente para que o profissional identifique problemas precocemente, com vistas a solucioná-los de forma rápida e eficaz, de forma a contribuir para o bom prognóstico do paciente. Além disso, o PE auxilia para a prestação do cuidado de enfermagem organizado e coordenado (Tavares et al., 2013). À vista disso, objetivou-se descrever os passos do processo de enfermagem aplicado ao paciente portador de tetralogia de Fallot, fundamentado na NANDA-I, Nursing Interventions Classification (NIC) e Nursing Outcomes Classification (NOC). MÉTODO Trata-se de um caso clínico de uma paciente portadora de tetralogia de Fallot e internada na enfermaria cardiológica de um hospital universitário do nordeste brasileiro em 2012. Para a coleta de dados, utilizou-se um roteiro de entrevista estruturado baseado na taxonomia II da NANDA-I, o qual é composto por 13 domínios, os quais são: dados de identificação, promoção da saúde, nutrição, eliminação/troca, atividade/repouso, percepção/ cognição, auto percepção, papéis/relacionamentos, sexualidade, tolerância ao estresse, princípios da vida, segurança/proteção e conforto (Herdman e Kamitsuru, 2014). Além disso, foi aplicado um roteiro de exame físico constituído por dados referentes ao exame físico geral e dos segmentos do corpo. E, por fim, empregou-se um instrumento denominado Mini Mental Adaptação do Folstein Mini Mental Status Examination, com a 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados finalidade de verificar o nível de orientação da paciente. Esse exame é dividido em cinco seções: orientação, memória imediata, atenção e cálculo, evocação e linguagem. A avaliação desses tópicos propiciam a avaliação do estado cognitivo do indivíduo mediante a soma da pontuação de cada uma das seções, que pode variar de 0 a 30 (Vargas, Lara e Carpes, 2014). Para o acompanhamento desse caso, foram adotadas as etapas preconizadas pelo processo de enfermagem, a saber: coleta de dados, identificação dos diagnósticos de enfermagem, planejamento das intervenções e dos resultados, implementação das intervenções e avaliação dos resultados. A coleta de dados iniciou-se por meio da anamnese e do exame físico, posteriormente, foram listados os DE, utilizando as etapas do raciocínio clínico e julgamento diagnóstico preconizadas na literatura (Risner, 1986), que são: 1ª) análise (categorização dos achados, observação dos dados divergentes ou lacunas) e síntese dos dados (comparação dos achados com normas, conceitos e modelos encontrados na literatura e realização da inferência diagnóstica); e 2ª) construção redacional do DE, segundo a NANDA-I (Herdman e Kamitsuru, 2014). Após o estabelecimento dos DE, traçou-se os resultados de enfermagem esperados, conforme a NOC (Moorhead et al., 2013), e as intervenções de enfermagem de acordo com a NIC (Bulechek et al., 2013). Os resultados e as intervenções foram elencados na etapa de planejamento do processo de enfermagem. Após o planejamento, as intervenções foram implementadas para a resolução do DE prioritário escolhido para a paciente. Assim, o caso da paciente foi acompanhado durante dez dias, bem como as ações de enfermagem foram aplicadas e avaliadas diariamente, vislumbrando a me168

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lhoria dos indicadores relacionados aos resultados de enfermagem. Os indicadores dos resultados de enfermagem (NOC) são categorizados por escores de acordo com o estado do paciente, os quais são: 1 – nenhum, 2 – limitado, 3 – moderado, 4 – substancial e 5 – extenso (Moorhead et al., 2013). Para a execução desse estudo, foram respeitados os preceitos éticos e legais a serem seguidos nas pesquisas que envolvem seres humanos, conforme preconiza a Resolução 466/2012, do Conselho Nacional de Saúde. Para tanto, o estudo foi apreciado pelo Comitê de Ética em Pesquisa da Universidade Federal do Rio Grande do Norte, que o aprovou com número de Certificado de Apresentação para Apreciação Ética: 07614812.6.0000.5537. Ressalta-se que a paciente envolvida no estudo declarou sua aceitação em participar através da assinatura do Termo de Consentimento Livre e Esclarecido (TCLE). RESULTADOS Os resultados serão apresentados em dois tópicos, a saber: apresentação do caso clínico e plano assistencial. Apresentação do caso clínico MPFS, 23 anos, sexo feminino, solteira, compareceu ao hospital apresentando dispneia grave aos mínimos esforços e arritmia cardíaca, encaminhada à enfermaria cardiológica para tratamento cirúrgico. Internou-se na instituição com diagnóstico médico de tetralogia de Fallot. O familiar responsável pela paciente informou que a mesma apresentava crises de cianose nas extremidades e dispneia desde os primeiros meses de vida, realidade esta que contribuiu para o fechamento do diagnóstico

Cultura de los Cuidados médico de cardiopatia congênita cianótica, desde a infância. No entanto, apesar da patologia, a paciente não foi acompanhada por um especialista e nem se submeteu ao tratamento cirúrgico. A paciente apresenta atraso no desenvolvimento neuro-psico-motor e relata crises frequentes de cianose nas extremidades e dispneia em repouso. Nega episódios de angina, síncope, hemoptise, febre e dispneia paroxística noturna. Nega hipertensão, diabetes mellitus e desconhece histórico de câncer e cardiopatias congênitas na família. Relata ortopneia. Quanto aos antecedentes familiares, o pai faleceu aos 57 anos por complicações de Acidente Vascular Encefálico (AVE), hipertensão e diabetes. A mãe é hipertensa e, no momento, estava em tratamento para hanseníase. Todos os irmãos estavam vivos e aparentemente saudáveis. Ressalta-se que os pais da paciente são primos de 1º grau. Ao exame físico, apresentava-se: consciente, déficit no desenvolvimento cognitivo, normocorada, cianótica e anictérica. Uso de óculos em decorrência de miopia, pupilas isocóricas e conjuntiva hipercorada. Observou-se que havia ausência de alguns dentes na cavidade oral. Lábios e mucosa oral íntegra. Língua saburrosa. Acuidade auditiva preservada. Linfonodos impalpáveis e indolores. À ausculta cardíaca: bulhas normofonéticas em dois tempos e presença de sopro sistólico mais audíveis nos focos pulmonar (grau IV) e tricúspide (grau III). Na inspeção torácica percebeu-se que o tórax é do tipo chato e à ausculta pulmonar, os murmúrios vesiculares estavam presentes e ruídos adventícios ausentes. À inspeção e ausculta abdominal, respectivamente, o abdome apresentou-se globoso por adiposidade e ruídos hidroaéreos presentes. O abdome encontrava-se flácido e indolor à palpação.

Os membros superiores e inferiores apresentavam cianose periférica nas extremidades e baqueteamento digital em mãos e pés e ausência de edemas. Exames laboratoriais: hemograma, apresentando policitemia (hemácias = 8,39 milhões por milímetro cúbico), hemoglobina acima do padrão de normalidade (22g por decílitro), hematócrito acima do normal (66%) e plaquetopenia (142.000 por milímetro cúbico). Plano assistencial Foram elencados quatro DE de acordo com a história clínica e as necessidades da paciente observadas durante os dias de acompanhamento (Quadro 1). Ao avaliar esses diagnósticos e considerando a viabilidade da implementação das intervenções de enfermagem na paciente, elegeu-se o DE “Intolerância a atividade” como prioritário. Desse modo, o plano de cuidados voltado para esse diagnóstico foi elaborado de acordo com as taxonomias NANDA-I12, NOC15 e NIC16, conforme exposto no Quadro 2. Para a escolha do DE prioritário foi levado em consideração às necessidades da paciente, a possibilidade de implementação das intervenções para no serviço de saúde, bem como o tempo de seguimento do estágio (10 dias) no referido setor. DISCUSSÃO Concentração prejudicada A paciente apresentava-se ausente em alguns momentos da entrevista, de forma a demonstrar um comportamento de desinteresse em responder aos questionamentos dos instrumentos aplicados e em algumas ocasiões era perceptível o déficit de concentração. Em 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados virtude desse quadro foi realizado o teste Mini Mental, obtendo-se soma 16 em que o total esperado para o grau de escolaridade da mesma era 18. O Mini Mental é um teste que é utilizado com o intuito rastrear, reconhecer e fornecer uma avaliação do funcionamento cognitivo e de demência (Soubelet e Salthouse, 2011). Em um estudo sobre a doença cardíaca como fator de risco para a demência, foi relatado que qualquer tipo de cardiopatia é uma condição importante para a deterioração da homeostase vascular cerebral, uma vez que é responsável pela redução do fluxo sanguíneo do cérebro, além disso, ocorre o aumento de algumas proteínas que estão relacionadas às doenças que afetam o sistema neurológico. Ademais, a doença arterial coronariana é um forte fator de risco para o declínio cognitivo, incluindo a demência, e é responsável pela diminuição do volume do hipocampo, o qual auxilia na memória e nas emoções (Justin, Turek e Hakim, 2013). Nesse estudo, a paciente inicialmente encontrava-se com o indicador de concentração prejudicada igual a três, mas conseguiu alcançar o nível esperado (quatro) de concentração ao final do acompanhamento. A fim de colaborar para essa melhora, alguns jogos de memória e perguntas e respostas foram oferecidos para trabalhar esse déficit. Hematócrito A resposta fisiológica da medula óssea à hipóxia é o aumento da eritropoiese com consequente aumento dos números das células vermelhas (hematócrito e hemoglobina). A elevação no número de eritrócitos no sangue ou policitemia ocorre devido a uma resposta à quantidade de oxigênio diminuída na circulação sanguínea, que geralmente está presen170

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te em pacientes que apresentam cardiopatias cianóticas. Assim como, no caso da paciente desse estudo, cujo nível de eritrócito estava acima dos parâmetros considerados normais (66%), revelando o aumento da viscosidade sanguínea. As manifestações clínicas que podem aparecer em virtude da policitemia são: fadiga, tontura, zumbido, cefaléia, parestesia, visão turva, angina, claudicação, dispneia e tromboflebite (Smeltzer et al., 2011). Os sintomas mais evidentes na paciente eram a tontura, fadiga, cefaleia, visão turva e dispneia. Quanto aos resultados dos exames laboratoriais realizados durante os dez dias de acompanhamento não houve diminuição do hematócrito e com isso o escore esperado (quatro) dos resultados do plano de cuidado não foi alcançado, mantendo-se inalterado (dois). Cor da pele Uma das características da tetralogia de Fallot é a cianose periférica nas extremidades e o baqueteamento digital (Guyton e Hall, 2011). A paciente do presente estudo apresentava essas duas características, além de cianose discreta na região labial. A cianose periférica resulta da lenta circulação sanguínea no corpo e representa a necessidade de oxigênio pelos tecidos, apesar disso

Cultura de los Cuidados o sangue arterial mantém-se com o nível de saturação de oxigênio dentro dos padrões de normalidade. Diferentemente disso, a cianose central raramente se deve a quantidades de hemoglobinas anormais e geralmente acontece devido a uma diminuição da saturação de oxigênio no sangue arterial. Essas consequências ocorrem devido a doenças pulmonares agudas ou crônicas, assim como por alguma comunicação anatômica anormal, que nesse caso, pode ser responsável pela mistura do sangue venoso ao arterial, sem oferecer o aporte ideal de oxigênio que o corpo necessita (Díaz et al., 2012). Nesse estudo, a doença pulmonar que acomete a paciente está atrelada à patologia de base, isto é, a tetralogia de Fallot. E por isso a mudança na coloração da pele continuará até ser executada a intervenção cirúrgica para a correção do problema. Dessa forma, o indicador cor de pele continua com resultado igual ao do inicio do acompanhamento (três). Em relação ao baqueteamento digital, o qual é presente na falange distal e torna as pontas dos dedos arredondada e bulbosa, consiste em um sinal de doença pulmonar que é encontrado em pacientes que apresentam condições de hipóxia crônica (Smeltzer et al., 2011). Distância da caminhada Devido à diminuição da oxigenação, a paciente apresenta-se cansada aos mínimos esforços e isso interfere de forma direta nas atividades diárias, de forma que a mesma passa a maior parte do tempo deitada com a cabeceira da cama elevada a 90 graus (posição de Fowler). Um estudo sobre a atividade física associada à melhora da capacidade de exercício aeróbio ao longo do tempo em adultos com cardiopatia congênita, relata que a doença cardíaca e

seus tratamentos podem comprometer outros órgãos, incluindo o pulmão e, consequentemente, as vias respiratórias, fato este que pode comprometer a capacidade do paciente de executar exercícios, inclusive curtas caminhadas (Tikkanen et al., 2013). No presente estudo de caso a paciente tem um comprometimento cardiopulmonar que impede algumas atividades. Durante o período de acompanhamento, a mesma era capaz de percorrer uma distância de caminhada avaliada em nível dois no resultado atual (Quadro 2) e, posteriormente, foi alcançado o nível três, que era o esperado. Facilidade de realizar atividades de vida diária A paciente desse estudo tinha dificuldades para realizar as atividades diárias, pois precisava sempre de auxílio para andar, tomar banho e vestir-se. Assim, durante o acompanhamento da mesma, obteve-se uma boa evolução no resultado (três) referente ao indicador “facilidade para realizar atividade de vida diária”, apesar de não atingir o esperado (quatro). As atividades de vida diária são referidas como atividades físicas e cognitivas necessárias para a independência funcional do indivíduo. Essas atividades dizem respeito a deambulação, capacidade de alimentar-se sozinho, atividades domésticas, gestão de dinheiros e fazer compras. Pacientes com problemas cardíacos podem apresentar declínios para a realização dessas tarefas, a qual compromete a independência nas atividades diárias (Bowling et al., 2012). As intervenções realizadas pela equipe de enfermagem foram essenciais para a melhora do resultado, bem como contribuiu para que a paciente desse estudo fosse capaz de buscar maior independência em suas atividades co1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados tidianas, ainda que a doença lhe proporcione limitações. CONCLUSÃO A SAE permitiu que os cuidados de enfermagem à paciente com tetralogia de Fallot fossem prestados de forma integral, humanizada e singular, respeitando as peculiaridades do indivíduo. Entretanto, observou-se que a existência de algumas lacunas podem dificultar a implementação do processo de enfermagem de forma eficaz e efetiva, tais como: tempo escasso, deficiências nas ferramentas e recursos imprescindíveis à aplicação da SAE (recursos estruturais adequados e humanos qualificados e em quantidade suficiente). Ademais, o uso das taxonomias NANDA-I, NIC e NOC deram substancial embasamento para a avaliação diária do estado de saúde da paciente. Dessa forma, foi elaborado um plano de cuidados com base no DE prioritário, a partir do qual aplicou-se intervenções de enfermagem, as quais foram acompanhadas e reaplicadas diariamente, conforme a necessidade da paciente, durante 10 dias. Com isso, percebeu-se que as ações executadas contribuíram consideravelmente para a evolução positiva do estado de saúde da paciente, de forma a colaborar para o aumento da autoconfiança e independência da mesma, apesar das limitações decorrentes da própria doença e do não alcance da pontuação almejada dos indicadores arrolados nos resultados. Ressalta-se a importância da produção de outros estudos embasados na SAE, com vistas a novas formas de fornecer uma assistência sistematizada, individualizada e organizada. Além disso, esse estudo teve como limitação o curto período de acompanhamento. Portanto, recomenda-se a realização de estudos com tempo mais prolongado no que concerne a (re) 172

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aplicação do plano de cuidados e observação da evolução do paciente, posto que isso pode gerar a publicação de resultados mais satisfatórios quanto ao progresso dos indicadores e melhoria da situação de saúde do paciente.

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Quadro 1- Diagnósticos de enfermagem traçados para paciente com tetralogia de Fallot, 2015. 2015.

Diagnósticos de enfermagem 1) Intolerância a atividade relacionado ao desequilíbrio entre a oferta e a demanda de oxigênio, fraqueza generalizada e ao repouso no leito evidenciado por dispneia aos esforços; desconforto aos esforços e a relato verbal de fadiga e fraqueza. 2) Dentição prejudicada relacionada a conhecimento deficiente a respeito da saúde dental e a higiene oral ineficaz evidenciado por ausência de alguns dentes, dentes desgastados, dentes estragados, excesso de tártaro e halitose. 3) Débito cardíaco diminuído relacionado à frequência cardíaca diminuída e pós carga alterada evidenciada por bradicardia, dispneia, mudança da cor da pele, pulsos periféricos diminuídos. 4) Controle do impulso ineficaz relacionado ao ambiente que pode causar irritação, fadiga, negação e raiva evidenciado por agir sem pensar, irritabilidade e repentes de temperamento. Ao avaliar esses diagnósticos e considerando a viabilidade da implementação das 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47 intervenções de enfermagem na paciente, elegeu-se o DE “Intolerância a atividade” como

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Cultura de los Cuidados acordo com as taxonomias NANDA-I12, NOC15 e NIC16, conforme exposto no Quadro 2. Quadro 2. Plano de cuidados para o diagnóstico de enfermagem intolerância a atividade,

Quadro 2- Plano de cuidados para o diagnóstico de enfermagem intolerância a atividade, baseanos sistemas de classificação NANDA-I, NIC eeNOC e aplicado uma paciente com dobaseado nos sistemas de classificação NANDA-I, NIC e NOC aplicado a umaapaciente com tetralogia detetralogia Fallot, 2015. de Fallot, 2015. Domínio: atividade/repouso Diagnóstico de enfermagem: Intolerância a atividade relacionado ao desequilíbrio entre a oferta e a demanda de oxigênio, fraqueza generalizada e ao repouso no leito evidenciado por dispneia aos esforços; desconforto aos esforços e a relato verbal de fadiga e fraqueza. Resultado: Nível de atividade e de fadiga moderadamente comprometido. INDICADORES ATUAL ESPERADO ALCANÇADO Nível de fadiga Concentração prejudicada Hematócrito Tolerância à atividade Cor da pele Distância da caminhada Facilidade de realizar atividades de vida diária

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Soma 12 18 Intervenções: Cuidados cardíacos: fase aguda. - Monitorar o ritmo e a frequência cardíaca; - Auscultar os sons cardíacos; - Manter um ambiente propício ao repouso e ao estabelecimento; - Promover redução de estresse; - Estimular deambulação conforme aceitação da paciente.

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Para a escolha do DE prioritário foi levado em consideração às necessidades da paciente, a possibilidade de implementação das intervenções para no serviço de saúde, bem como o tempo de seguimento do estágio (10 dias) no referido setor. DISCUSSÃO Concentração prejudicada A paciente apresentava-se ausente em alguns momentos da entrevista, de forma a demonstrar um comportamento de desinteresse em responder aos questionamentos dos instrumentos aplicados e em algumas ocasiões era perceptível o déficit de concentração. Em

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Cultura de los Cuidados

Prácticas educativas en salud en la escuela: una revisión integrativa

Educational practices in school health: an integrative review Práticas educativas em saúde escolar: uma revisão integrativa Tatiane Marinz de Souza Luquez1, Vera Maria Sabóia2 Enfermeira, Especialidade em Saúde Coletiva e Gestão em Saúde, Mestranda, Programa de Pós-Graduação em Enfermagem, Universidade Federal Fluminense. E-mail: [email protected]

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Enfermeira, Professora Titular da Disciplina de Fundamentos de Enfermagem da escoal de Enfermagem da Universidade Federal Fluminense. E-mail: [email protected]

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Cómo citar este artículo en edición digital: Luquez, T.M.S., & Sabóia, V.Mª.. (2017). Prácticas educativas en salud en la escuela: una revisión integrativa. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.15 Correspondencia: Tatiane Marinz de Souza Luquez. Rua Cornélio José Pereira, nº 61. São Gonçalo. (Rio de Janeiro/Brasil). Correo electrónico: [email protected]. Recibido: 20/07/2016; Aceptado: 21/12/2016

ABSTRACT The school is an important stage in participatory construction health reality, encouraging reflection and development of educational health promotion practices. The objective is to know the approaches that have guided the education of health promotion practices at school. This is an integrative review, to search in the databases LILACS, SCIELO, MEDLINE and PubMed. Guiding question: “What educational aspects have guided research on health education practices in scientific schools published in journals in the health area in the period 2005-2014?” Were included articles published in Portuguese, English and Span-

ish; in full; which reflect the theme, published and indexed in databases surveyed from 2005 to 2014. We selected 15 articles and analyzed in two categories: The training of teachers and the impact on the practice of school health; and Educational aspects present in the practice of school health. The practice of school health, still needs improvement in the actions of educators in the school health program. One can understand the need for new interventions appropriate to the reality of the students, considering socioeconomic and cultural aspects, environmental influences, behavioral and personal characteristics that are aimed at improving the quality of life and health of the school population. Keywords: School health, health education, health promotion, child health. RESUMEN La escuela es una etapa importante en la realidad participativa de construcción de la salud, favoreciendo la reflexión y el desarrollo de las prácticas de promoción de la salud educativos. El objetivo es conocer los criterios que han guiado la educación de las prácticas de promo1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados ción de la salud en la escuela. Se trata de una revisión integradora, para buscar en las bases de datos LILACS, SciELO, MEDLINE y PubMed. pregunta guía: ¿”Qué aspectos educativos han guiado la investigación sobre las prácticas de educación sanitaria en las escuelas científicos publicados en revistas en el área de la salud en el período 2005-2014?”, fueron publicados los artículos incluidos en portugués, inglés y español; en su totalidad; que reflejan el tema, publicados e indexados en bases de datos de la encuesta de 2005 a 2014. Se seleccionaron 15 artículos y se analizó en dos categorías: La formación de los profesores y el impacto en la práctica de la salud en la escuela; y los aspectos educativos presentes en la práctica de la salud en la escuela. La práctica de la salud en la escuela, todavía necesita mejoras en las acciones de los educadores en el programa de salud escolar. Uno puede entender la necesidad de nuevas intervenciones apropiadas a la realidad de los alumnos, teniendo en cuenta los aspectos socioeconómicos y culturales, influencias ambientales, características de comportamiento y personales que tienen por objeto mejorar la calidad de vida y la salud de la población escolar. Palabras clave: Salud escolar, educación para la salud, promoción de la salud, salud infantil. RESUMO A escola é um cenário importante na construção participativa de realidade em saúde, favorecendo reflexão e desenvolvimento de práticas educativas de promoção da saúde. Objetiva-se conhecer as abordagens que tem orientado as práticas educativas de promoção da saúde na escola. Trata-se de uma revisão integrativa, com busca nas bases de dados LILACS, SCIELO, MEDLINE e PUBMED. 176

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Questão norteadora: “Que vertentes educacionais têm orientado as pesquisas sobre as práticas de educação em saúde nas escolas publicadas em periódicos científicos da área de saúde no período de 2005 a 2014?” Foram incluídos artigos publicados em português, inglês e espanhol; na íntegra; que retratassem a temática, publicados e indexados nos bancos de dados no período de 2005 a 2014. Foram selecionados 15 artigos e analisados em duas categorias: A formação dos educadores e a repercussão na prática da saúde escolar; e As vertentes educacionais presentes na prática da saúde escolar. A prática de saúde escolar, ainda necessita de aprimoramento nas ações dos educadores no programa de saúde escolar. Compreende-se a necessidade de novas intervenções adequadas à realidade dos educandos, considerando aspectos socioeconômicos e culturais, influências ambientais, características comportamentais e pessoais visando melhorias na qualidade de vida e saúde da população escolar. Palavras chave: Saúde escolar, educação em saúde, promoção da saúde, saúde da criança.

INTRODUÇÃO A comunidade escolar é um espaço de cuidar em saúde de grande viabilidade para a concretização de ações de promoção da saúde voltadas para o fortalecimento das capacidades dos indivíduos que frequentam o ambiente escolar, a tomada de decisões favoráveis à sua saúde, a criação de ambientes saudáveis e a consolidação de uma política intersetorial voltada para a qualidade de vida (Balbino, 2010). Há registros de atividades de saúde escolar no mundo desde o século XVIII. No Brasil, a saúde escolar também é uma prática antiga, com registros desde 1850. No entanto, as práticas realizadas eram fundamentadas na lógica

Cultura de los Cuidados biomédica e no policiamento de doenças. Havia um movimento em defesa da promoção de medidas sanitárias de higiene, lutando contra as doenças infecciosas, produzidas pelas más condições de vida, tentando-se assim, erradicar focos infecciosos. A visão higienista surgiu a partir de mudanças na percepção da infância que passou a ser considerada essencial no desenvolvimento individual e social. Além disso, existia interesse na classe trabalhadora visando cidadãos saudáveis e produtivos. Assim, a escola passou a ser percebida como um lugar privilegiado para desenvolver atividades higienistas e preventivas (Maté, Maté, 2015). Com a evolução técnico-científica ocorrida no século XX, aos poucos se iniciou um movimento de transformação do discurso biomédico nas escolas, para um discurso progressista onde a escola é considerada como um veículo promotor de saúde, por meio de um trabalho articulado entre educação, saúde e a sociedade (Figueiredo, Machado, Abreu, 2010). As necessidades e os problemas de saúde devem ser identificados a fim de definir estratégias de promoção à saúde no espaço escolar com enfoque integral. Porém, os profissionais que atuam nesse cenário continuamente entendem a educação em saúde na escola como sendo intervenções pontuais, mantendo assim a relação entre saúde e educação focada no modelo biomédico e no controle de doenças, fazendo com que essa prática educativa apresente-se pouco eficaz no sentido de promover reorientações (Figueiredo, Machado, Abreu, 2010). Nesse contexto, a educação em saúde pautada nas necessidades desse grupo populacional específico, reafirma a importância de uma visão problematizadora, que leva em consideração o contexto e saberes do educando, a troca de conhecimento e a construção participativa de ideias e reflexões.

Dessa forma, é fundamental conhecer as abordagens educacionais adotadas na prática da saúde escolar, assim como as dificuldades para o seu desenvolvimento, com vistas a despertar outros estudos e motivar ações educativas em saúde com escolares, e o planejamento e execução de ações, numa visão reflexiva e crítica, que promova mudanças sociais. Para tanto, objetiva-se com este estudo conhecer as vertentes educacionais que tem orientado as práticas de educação em saúde nas escolas publicadas em periódicos científicos da área de saúde, no período de 2005 a 2014. MÉTODO A presente pesquisa apresenta como método a revisão integrativa, a qual inclui a análise de pesquisas relevantes que dão suporte para a tomada de decisão relativa à temática. É um método de pesquisa que permite a busca, a avaliação crítica e a síntese das evidências disponíveis do tema investigado, combinando dados da literatura teórica e empírica, os conceitos e os objetivos, sendo o seu produto final o estado atual do conhecimento do tema investigado (Mendes, Silveira, Galvão, 2008; Martins, Brito, 2013). Para a realização da revisão integrativa é preciso percorrer seis etapas distintas: identificação do tema e questão de pesquisa; estabelecimento de critérios de inclusão e exclusão/ busca na literatura ou amostragem; categorização dos estudos/ definição das informações a serem extraídas; avaliação dos estudos; interpretação dos resultados; e apresentação da revisão/síntese do conhecimento (Mendes, Silveira, Galvão, 2008). Desta maneira, para guiar a pesquisa, formulou-se a seguinte questão: Que vertentes educacionais têm orientado as pesquisas sobre as práticas de educação em saúde nas escolas publicadas em periódi1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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cos científicos da área de saúde no período de encontrado nas bases de dados: 33,34 % (5 ar2005 a 2014? tigos) na LILACS, 33,34 % (5 artigos) na SCIEOs critérios de inclusão utilizados foram LO e 33,34 % (5 artigos) no PUBMED. artigos publicados em português, inglês e esEm relação aos idiomas, do total dos artipanhol; artigos na íntegra; artigos que retratasgos selecionados, 60% (09 artigos) são em porsem a temática sobre as práticas educativas em tuguês, 33,34% (05 artigos) em inglês e 6,67 saúde na escola e artigos publicados e indexa% (01 artigo) em espanhol. Quanto ao ano de dos nos bancos de dados pesquisados no perípublicação dos artigos selecionados nas bases odo de 2005 a 2014. Os Critérios de exclusão de dados pesquisadas de 2005 a 2014, em 2014 foram artigos publicados que se repetiram nas foi obtido um percentual de 6,67% (01 artigo), bases de dados; artigos em outras línguas; ouem 2013 26,67% (04 artigos), em 2012 6,67% tras obras, como teses, dissertações, capítulos (01 artigo), em 2011 20% (03 artigos), em 2010 de livros; e artigos que não estavam publicados 13,33% (02 artigos), em 2009 6,67% (01 artina íntegra. go), em 2008 6,67% (01 artigo), em 2007 6,67% Foram consultadas as seguintes bases de (01 artigo), em 2006 0% (nenhum artigo), e em dados: LILACS (Literatura Latino Americana 2005 6,67% (01 artigo). e do Caribe em Ciências da Saúde), SCIELO (Scientific Eletronic Library Online), MEDLIA Tabela 1 caracteriza os artigos acerca do 7 NE (United States National Library of Medicitipo, do delineamento e da natureza do estu   ne) e PUBMED em janeiro de 2015. do dos 15 (quinze) artigos selecionados como O uso dos descritores: saúde da criança, amostra dos final. Tabela 1: Caracterização artigos em relação ao tipo, delineamento e natureza do estudo. saúde escolar, educação em saúde e promoção Niterói - RJ, 2015 da saúde ocorreu através de combinações e a TIPO DO ESTUDO N % Pesquisa de campo 03 20 utilização do operador booleano AND. Vale Descritivo-exploratório 06 40 ressaltar que quando foi feita a pesquisa da Revisão de literatura 01 6,67 Pesquisa participante 01 6,67 base MEDLINE, foi gerado uma mensagem Descritivo 02 13,33 Observacional 02 13,33 informando que nenhum resultado havia sido NATUREZA N % encontrado e que deveria se redirecionar para Qualitativo 08 53,33 o PUBMED. Quantitativo 03 20 Quanti-Qualitativo 04 26,67 Para realizar a apreensão dos conhecimenDELINEAMENTO DO ESTUDO N % tos produzidos nas publicações, foram realizaBibliográfico 01 6,67 das leituras aprofundadas para reflexões críLongitudinal 03 20 Transversal 01 6,67 ticas quanto às seguintes informações: título; Relato de experiência 03 20 Não especificado 07 46,67 ano/fonte; objetivo; metodologia; resultados; conclusões/ recomendações do (s) autor(es) e De acordo com a tabela 1, verificar-se o predomínio de 40% de estudos do tipo De acordo com a tabela 1, verificar-se o base de dados. descritivo-exploratório (06 artigos). Os tipos menos utilizados foram a pesquisa participante predomínio de 40% de estudos do tipo descricom 6,67% (01 artigo) e 6,67% de revisão de literatura (01 artigo). Quanto à natureza do tivo-exploratório (06 artigos). Os tipos menos RESULTADOS estudos, houve utilizados uma predominância qualitativos 53,33% (08com artigos) em relação foramdeaestudos pesquisa participante Foram selecionados no total final para a (03 artigos) e quanti-qualitativos 26,67 (04 artigos). Em 6,67% (0120%artigo) e 6,67% de revisão de literealização do estudo, 15 (quinze) artigos aos queestudos quantitativos ratura (01 artigo). natureza dos es-com 46,67% (7 se enquadraram nos critérios de seleção, sendo relação ao delineamento, destacamos queQuanto a maioria àdos estudos analisados, 178

artigos), não especificaram o delineamento que seguiram. Dentre os estudos que

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especificaram, os estudos longitudinais são predominantes representando 20% (03 artigos).

Cultura de los Cuidados tudos, houve uma predominância de estudos qualitativos 53,33% (08 artigos) em relação aos estudos quantitativos 20% (03 artigos) e quanti-qualitativos 26,67 (04 artigos). Em relação ao delineamento, destacamos que a maioria dos estudos analisados, com 46,67% (7 artigos), não especificaram o delineamento que seguiram. Dentre os estudos que especificaram, os estudos longitudinais são predominantes representando 20% (03 artigos). Em relação à essência do conteúdo e produção dos conhecimentos se destacaram no total dos artigos selecionados, em ordem de percentualidade decrescente: a prática de saúde baseada na concepção de saúde mais abrangente e libertadora com 66,67% dos 15 estudos (10 artigos); em seguida tivemos: uma visão de saúde ainda centrada no modelo biomédico, focando na higiene e prevenção de doenças com um achado de 53,33% (8 artigos); a forma utilizada de abordagem do tema saúde na escola também com 53,33% (8 artigos); a formação do currículo escolar e o Projeto Político Pedagógico obtendo 40% dos estudos (6 artigos); 26,67% pontuaram as dificuldades de desenvolver ações de saúde na escola (4 artigos); 20% ponderaram a importância em trabalhar as temáticas de saúde na escola (3 artigos), e também 20% a percepção e visão que possuem do termo saúde (03 artigos); 13,33% citaram a formação dos professores (2 artigos), assim como também o mesmo quantitativo para as seguintes pontuações: preparação dos professores para trabalhar com as temáticas de saúde e da importância da participação dos pais. A análise crítica quanto à temática, metodologia e resultados dos estudos, possibilitou a construção de 02 (duas) categorias: A formação dos educadores e a repercussão na prática da saúde escolar; e As vertentes educacionais

presentes na prática da saúde escolar. Dos 15 (quinze) artigos selecionados, 09 (nove) foram alocados na primeira categoria e 06 (seis) na segunda categoria analítica construída. DISCUSSÃO A formação dos educadores e a repercussão na prática da saúde escolar Todos os artigos analisados (100%) enfatizam a necessidade dos professores e agentes de educação nas escolas, como pais, profissionais da saúde e outros, sentirem-se responsáveis pela educação em saúde em seus ambientes, e da necessidade de conhecimento teórico e técnico para desenvolvimento dessas ações de forma eficaz. No estudo de Fernandes, Rocha, Souza, (2005), os professores foram questionados sobre o conteúdo do tema ‘saúde’ em sua formação docente e 22,2% responderam não terem recebido nenhum tipo de informação sobre o tema. Entre os 77,7% que afirmaram terem estudado conteúdos relativos á questões de saúde, 34,29% não consideraram satisfatório os conteúdos ministrados. Destes, 50% argumentaram que as informações eram superficiais. Portanto, a temática Educação em Saúde Escolar merece ser ressaltada na formação dos profissionais de educação, a fim de prepará-los para desenvolverem tais atividades educativas nas escolas com maior propriedade (Sarreta, 2009). Ainda em relação à preparação para trabalhar com o tema transversal ‘saúde’ dentro do ambiente escolar, 40% dos professores afirmaram que não se sentiam aptos para o desenvolvimento desses conteúdos (Fernandes, Rocha, Souza, 2005). Os profissionais envolvidos no processo de construção de uma cultura saudável nas escolas devem ser incentivados e aprimorados para produzir e desenvolver estraté1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados gias de educação em saúde com os estudantes (Juzwiak, Castro, Batista, 2013). Em relação ao tema “Educação em saúde na escola”, 20% dos artigos (03 artigos) revelam que há educadores interessados em estimular os alunos em relação aos hábitos de vida saudáveis, concentrando-se nessa temática. Os autores referem que é preciso informar os estudantes e incentivar o desenvolvimento de habilidades que contribuam para conscientização e consequente reorientação de hábitos (Santos, Bógus, 2007). Juzwiak, Castro, Batista, (2013) sugerem algumas estratégias de aprendizado tais como: espaço de reflexão e crítica que favoreçam a integração e ideias e a reorientação de suas práticas de saúde. Discutir questões relativas à educação saúde com os alunos é relevante na opinião dos docentes. Desse modo, 20% das publicações (03 artigos) citaram essa questão. Em uma pesquisa, os professores ao serem indagados sobre a prática da saúde escolar, 20% citaram a necessidade de conhecer e prevenir doenças, 15% consideraram importante conhecer noções de higiene e alimentação, 15% o preparo e capacitação dos alunos para cuidar de sua saúde, 8,33% privilegiam trabalhar questões relativas a cidadania e a qualidade de vida (Fernandes, Rocha, Souza, 2005). Ressalta-se que a maioria dos docentes, relaciona o tema à prevenção de doenças, não levando em conta as demandas dos educandos e a promoção da saúde. Quanto à forma de abordagem de temas sobre educação em saúde, verificou-se que 53,33% (08 artigos), se referiram à essa questão. Notou-se nas respostas que, mesmo sabendo de que tais temas devem ser abordados em todas as disciplinas, prevaleceu a visão de que os responsáveis pelos temas de educação em saúde são apenas os professores de Ciên180

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cias. Além disso, alguns professores atribuem as ações programáticas de educação em saúde, assim como o processo de planejamento, à autonomia do diretor e do coordenador pedagógico, não entendendo que todos os professores devem participar de todo o processo assim como os próprios alunos (Santos, Bógus, 2007; Leonello, L’Abbate, 2006). Observou-se também em 46,67% dos estudos (07 artigos) a importância do envolvimento da comunidade e de outros profissionais na prática educativa em saúde escolar. Juzwiak, Castro, Batista, (2013) relataram em estudo que a interação, troca de experiências e conhecimento promovidas durante as oficinas realizadas na escola estimulou a participação e o trabalho em parceria. Maciel, Oliveira, Frechiani, Sales, Brotto, Araújo, (2010); Antunes, Antunes, Corvino, (2008) consideram indispensável a integração dos serviços de saúde para a solidificação de uma atividade intersetorial e interdisciplinar, favorecendo atividades de promoção da saúde. Foi enfatizado em 13,33% dos estudos (02 artigos) que é indispensável a participação de pais e cuidadores, considerando a adequação, satisfação e contexto cultural nas intervenções com estudantes e suas famílias (Fernández, Dinamarca, Bercovich, Vio, 2013; Casemiro, Fonseca, Secco, 2014). Nos depoimentos, os pais mostraram-se motivados a promover a saúde por meio de hábitos saudáveis, envolvendo os filhos e outros familiares (Santos, Caetano, Moreira, 2011). Outra pesquisa observou a correlação positiva existente entre o número de encontros com a comunidade escolar para abordar a temática alimentação saudável e a presença de ambientes saudáveis. As escolas que realizavam encontros frequentes para abordar o assunto alimentação saudável possuíam, em

Cultura de los Cuidados menor proporção, ambulantes e/ou comércios locais próximos. Tal fato revela que a aproximação da escola com o contexto em que está inserida, estimula mudanças importantes e significativas no âmbito das práticas de educação em saúde (Silva, Schmitz, Rodrigues, Gabril, 2013). Dentre os estudos analisados, 26,67% (04 artigos) abordavam as dificuldades encontradas pelos professores para o desenvolvimento das práticas educativas em saúde no âmbito da saúde escolar. Um artigo ressaltou que professores mal remunerados se referem às ações de Educação em Saúde como um “trabalho extra” (Kain, Uauy, Concha, Leyton, Bustos, Salazar, Lobos, Vio, 2012). Outro estudo, fez referência às dificuldades em trabalhar o tema ‘saúde’ no ambiente escolar, (40%) dos participantes referiram-se à falta de material didático, (20%) à falta de capacitação específica, (15%) à falta de apoio do ambiente familiar, e (10%) à falta de recursos humanos (Fernandes, Rocha, Souza, 2005). Cabe ressaltar que 40% dos estudos (6 artigos) destacaram as dificuldades relacionadas ao currículo escolar e o Projeto Político Pedagógico (PPP). Outros estudos apontam que o planejamento e execução do Programa de Saúde Escolar tem sido difícil tarefa para os professores devido ao tempo de para cumprimento do currículo. Na maioria das vezes, os currículos são inflexíveis e disponibilizam pouco tempo para o desenvolvimento das práticas educativas em saúde (Kain, Uauy, Concha, Leyton, Bustos, Salazar, Lobos, Vio, 2012; Leonello, L’Abbate, 2006). Uma outra pesquisa realizada relata que o PPP de uma escola que inclui temas relativos à saúde, não deixou claro a transversalidade e nem a interdisciplinaridade inerentes á saúde escolar. Mais uma vez destacou-se que o

conteúdo dessa temática foi abordado principalmente pela disciplina de Ciências (Cunha, Sousa, Machado, 2010). Outro artigo selecionado relata que a integração de ações de educação em saúde no currículo permitiu abordar esta temática na sala de aula, servindo como uma ligação entre a escola e a comunidade (Antunes, Antunes, Corvino, 2008). Uma informação importante descrita em um estudo dá conta que a maioria das escolas que possuía parceria com os profissionais de saúde e incluía apenas o tema “alimentação saudável” no currículo escolar (Silva, Schmitz, Rodrigues, Gabril, 2013). Percebe-se então, o quanto ainda é preciso estimular a intersetorialidade e incentivar o desenvolvimento das práticas educativas em saúde nas escolas. As vertentes educacionais presentes na prática da saúde escolar Após a análise dos estudos, observou-se que os professores continuam, na maioria das vezes, destacando questões relacionadas à higiene, alimentação e prevenção de doenças. Tal fato foi exemplificado em 53,33% dos estudos analisados (08 artigos). Esta realidade reflete a reprodução do paradigma biomédico, que prioriza o indivíduo e a doença, em detrimento da coletividade e da promoção da saúde. Por outro lado, 33,34% dos estudos (05 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados artigos) revelaram que professores desenvolveram uma articulação importante entre as questões de qualidade de vida e de cidadania (Fernandes, Rocha, Souza, 2005). Embora o discurso atual no domínio da educação enfatize a tendência libertadora, a prática pedagógica predominante nas escolas tem evidenciado a continuidade da transmissão de conhecimentos desarticulado da realidade social e da experiência de vida do discente. Isso precisa ser modificado o quanto antes para garantir a execução e sucesso das práticas educativas de promoção em saúde no âmbito da saúde escolar (Santos, Vidal, Bittencourt, Boery, Sena, 2011). No contexto das práticas de educação em saúde baseadas na concepção de saúde libertadora e participativa, Fernández, Dinamarca, Bercovich, Vio (2013) destaca a necessidade de novas linhas metodológicas de pesquisa avaliativas. Tais pesquisas deverão considerar fatores comportamentais, características pessoais e influências ambientais que permitam favorecer as práticas de educação em saúde no âmbito da promoção na escola para crianças. Segundo os sujeitos do estudo de Santos, Penna, Moriyama, Leão, Souza, Aguiar, (2009) as estratégias utilizadas na prática da educação em saúde promoveram a participação, a troca de conhecimentos e o diálogo entre os envolvidos. Considerou-se a realidade local, levando-se em conta os aspectos socioeconômicos e culturais, como a literatura recomenda. Acreditando-se que o trabalho educativo em saúde deve criar condições para que os partícipes construam um novo conhecimento. Essa vivência contribuiu para mudanças, as quais foram percebidas na prática educativa dos educadores e nas atitudes dos educandos. Um outro estudo selecionado destaca a utilização de estratégias que levam em conta 182

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o contexto e interesse dos educandos com a implementação de dinâmicas de integração e comunicação, atividades de dança, exposições dialogadas, diferentes recursos audiovisuais, estudos dirigidos por meio de leitura de textos/artigos e relatos de experiências. Além disso, foram utilizados fóruns on line para a integração e troca de informações entre os participantes durante os intervalos entre as oficinas. Percebeu-se no estudo que a adoção de estratégias variadas e participativas no processo de educação em saúde na escola favoreceram o planejamento de novas atividades, a redefinição de temas, metodologias e estratégias, indispensáveis para o sucesso da intervenção (Juzwiak, Castro, Batista, 2013). A tendência pedagógica libertadora entende o discente como centro do processo educacional, devendo ser considerado o seu contexto sociocultural. Apoiado na perspectiva freiriana, estabelece a concepção de educar para a decisão, para a responsabilidade social e política, trazendo à tona a contextualização do discente na educação como ator e não mais como sujeito (Freire, 2000). Acredita-se que as estratégias de educação em saúde para enfrentar esta problemática encontram na Educação Libertadora um forte embasamento teórico e pedagógico a ser delineado a partir das relações do homem com a realidade, por meio dos quais os diferentes atores podem se tornar os autores de suas escolhas e responsável por seus próprios caminhos (Freire, 2000). Para isso, faz-se necessário superar a visão fragmentada do conhecer e agir em saúde e de um saber científico descontextualizado. Com isso, integrar o saber científico ao saber popular para construção e reconstrução do conhecimento tem mostrado ser o caminho mais ade¬quado e eficaz para alcançar os efeitos

Cultura de los Cuidados almejados (Araújo, Araújo, Souza, Simpson, 2011; Antunes, Antunes, Corvino, 2008).

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CONCLUSÃO Os achados desta pesquisa permitiram conhecer o que está sendo produzido pela comunidade científica sobre práticas educativas no âmbito da saúde escolar, no período entre 2005 até 2014. Foi possível perceber que tal prática ainda necessita aprimoramento nas ações dos educadores no Programa de Saúde Escolar. Torna-se necessário a realização de atividades educação permanente favorecendo uma maior articulação entre os profissionais da área da saúde e da educação. A saúde escolar precisa ser mais discutida com os docentes, em todos os segmentos da escola, com os pais e com a comunidade, pois ainda não se sabe de fato o significado dessa prática educativa em saúde. Vale ressaltar que é essencial conhecer a realidade vivenciada pelos escolares, no intuito de gerar reflexões sobre a temática, promovendo a intersetorialidade entre a saúde e a educação, constituindo-se como uma estratégia fundamental para a ocorrência desse processo, especialmente por meio de metodologias ativas. Portanto, esse campo do conhecimento em saúde precisa ser refletido e levado em consideração por todos os atores sociais envolvidos. Além disso, os gestores da área de educação precisam compreender que os profissionais necessitam de condições para a realização das ações de educação em saúde além da capacitação. Conclui-se que são necessárias ações educativas voltadas para a realidade de cada comunidade, que considerem os diversos aspectos, as influências ambientais e os fatores metodológicos, além das características comportamentais e pessoais que visam melhorias na qualidade de vida e saúde, gerando uma repercussão positiva na saúde dos escolares.

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Cultura de los Cuidados

Determinar la sensibilidad y especificidad de la Percepción Materna del Peso de su descendiente de la frontera norte de Tamaulipas por palabras/ por imágenes frente al estándar de oro Determinate the sensibility and specificity of the Maternal Perception of your child’s weight of Tamaulipas North Border by words/ images in front gold standard Determinar a sensibilidade e especificidade da Percepção Materna do Peso do seu descendente da fronteira norte de Tamaulipas por palavras/ imagens frente ao padrão de ouro

Hermelinda Avila Alpirez1, Gustavo Gutiérrez Sánchez2, Ma. De la Luz Martinez Aguilar1, Laura Vázquez Galindo2. Dra.en Enfermería y Cultura de los Cuidados. Unidad Académica Multidsciplinaria Matamoros UAT. México. 2 Dr. en Psicología.

1

Cómo citar este artículo en edición digital: Ávila Alpirez, H., Gutiérrez Sanchez, G., Martínez Aguilar, Mª.L., Vázquez Galindo, L. (2017). Determinar la sensibilidad y especificidad de la Percepción Materna del Peso de su descendiente de la frontera norte de Tamaulipas por palabras/ por imágenes frente al estándar de oro. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.16 Correspondencia: Hermelinda Ávila Alpirez. Calle Leo #4 Fracc. Satelite C.P.87458. H. Matamoros Tamaulipas México. Correo electrónico: [email protected] . Recibido: 20/03/2016; Aceptado: 20/09/2016 Este trabajo se deriva del proyecto en Redes de Investigación con la Facultad de Enfermería de la Universidad Autónoma de Nuevo León

ABSTRACT Objective: Determinate the sensibility and specificity of the Maternal Perception of your child’s weight of the Tamaulipas North Border by words vs. images in front Gold Standard. Material and Methods: The study was descriptive transversal. Participants 658 dyads (mother-child). The sample size was de-

termined for studies of diagnostic tests, were selected randomly eight institutions of Matamoros City, Tamaulipas, (2 Kindergarten, 2 Elementary Schools, 2 Middle Schools and 2 High schools). Results: The sample was composed of 658 dyads of mothers and their children, who 111 were enrolled in Kindergarten, 166 Elementary School, 242 Middle School and 139 High School. The MP by weight of the child’s words compared to the gold standard. Kappa test indicates that there is a reliable concordance (k = 0.333, p = 0.000) .The 22.15% of mothers of children with overweight and obesity failed to identify this situation because they underestimated the weight of their children. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados MP imaging compared to gold standard. The kappa test points to a reliable concordance (k = 0.350, p = 0.000). 31% of mothers of children with SP-OB failed to identify this situation. Conclusions: This study concludes that according to the literature on the subject, documented in the PM body weight of their offspring both in words and images do not perceive correctly. Keywords: perception of weight, obesity, overweight, Mother. RESUMO Objetivo: Determinar a sensibilidade e especificidade da Percepção Materna do Peso do seu descendente da Fronteira Norte de Tamaulipas por palavras VS imagens frente ao padrão de ouro. Material e Método: O desenho do estudo foi de tipo descritivo transversal. Participaram 658 díades (mãe-filho). O tamanho da amostragem determinou-se para estudos de provas diagnósticas, Selecionaram-se de forma aleatória 8 instituições de Matamoros, Tamaulipas (2 Jardim de Infância, 2 escolas de ensino fundamental, 2 secundarias e 2 colégios). Resultados: A amostragem conformou-se com 658 díades de mães e filhos, os quais 111 estavam matriculados na educação pré-escolar, 166 no ensino fundamental, 242 em secundaria e 139 no colégio. A PM por palavras do peso do filho em comparação com o padrão de ouro. A prova de Kappa marca que há uma concordância fiável (k= 0.333, p= 0,000). O 22,15% das mães das crianças com sobrepeso e obesidade não conseguiram identificar esta situação, devido a que subestimaram o peso dos seus filhos. A PM por imagens frente ao padrão de ouro. A proca Kappa marca que existe uma 186

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concordância fiável (k= 0.350, p= 0,000). O 31% das mães com filhos com SP-OB falharam na identificação desta situação. Conclusões: O presente estudo concluiu que de acordo à literatura sob o tema, tem documentado que na PM do peso corporal dos seus desendentes tanto em palavras como em imagens não o percebem correctamente. Palavras chaves: Percepção do Peso, Obesidade, Mãe. RESUMEN Objetivo: Determinar la sensibilidad y especificidad de la Percepción Materna del Peso de su descendiente de la frontera norte de Tamaulipas por palabras vs por imágenes frente al estándar de oro. Material y Método: El diseño fue de tipo descriptivo tipo transversal. Participaron 658 díadas (madre-hijo). El tamaño de muestra se determinó para estudios de pruebas diagnosticas, Se seleccionaron de forma aleatoria 8 instituciones de Matamoros, Tamaulipas, (2 Jardín de Niños, 2 Primarias, 2 Secundarias y 2 Preparatorias). Resultados: La muestra se conformó con 658 diadas de madres y sus hijos, los cuales 111 cursaban educación preescolar, 166 primaria, 242 secundaria y 139 preparatoria La PM por palabras del peso del hijo en comparación con el estándar de oro. La prueba de Kappa señala que hay una concordancia fiable (k= 0.333, p= 0,000).El 22.15% de las madres de niños con sobre peso y obesidad no consiguieron identificar esta situación, debido a que subestimaron el peso de sus hijos. La PM por imágenes frente al estándar de oro. La prueba kappa señala que existe una concordancia fiable (k= 0.350, p= 0,000). El 31% de las madres con hijos con SP-OB no lograron identificar esta situación.

Cultura de los Cuidados Conclusiones: El presente estudio concluye que de acuerdo a la literatura sobre el tema, ha documentado que en la PM del peso corporal de sus descendientes tanto en palabras como en imágenes no lo perciben correctamente. Palabras Claves: Percepcion del Peso, Obesidad, Sobrepeso, Madre

Introducción De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, el sobrepeso y la obesidad se define como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. En 2013, más de 42 millones de niños menores de cinco años de edad tenían sobrepeso. (Organización Mundial de la Salud [OMS], 2015). Así mismo señala que el sobrepeso-obesidad infantil resultan del desequilibrio entre la ingesta y gasto calórico que pueden ser atribuibles a varios factores, tales como el cambio dietético mundial hacia un aumento de la ingesta de alimentos hipercalóricos con abundantes grasas y azucares, pero con escasas vitaminas, minerales y otros micronutrientes saludables, además de la disminución de la actividad física. (OMS, 2013). Por lo que el sobrepeso (SP) y la obesidad (OB) constituyen un problema de salud pública a nivel mundial. Esta organización menciona que la OB es una enfermedad crónica que se ha transformado en epidemia. El SP-OB va en aumento tanto en población adulta como infantil. (OMS, 2006). Con respecto a la Organización Panamericana de la Salud indica que, en términos generales, de 20% a 25% de los menores de 19 años de edad se ven afectados por el sobrepeso y la obesidad. En la población escolar (de 6 a 11 años), las tasas varían desde 15% (Perú) hasta

34.4% (México) y en la población adolescente de 12 a 19 años de edad), de 17% (Colombia) a 35% (México) (Organización Panamericana de la Salud [OPS], 2014). Por lo que en Alemania, el 3% de los niños de 3 a 6 años y hasta el 6.4% de los niños de 7 a 10 años ya son obesos. (Kurth & Schaffrath, 2007). Por otra parte el Ministerio de la Salud de Chile informa que el 94% de los niños (as) menores de 6 años presenta obesidad con un aumento gradual. A esto se suma un 22.4% de niños con sobrepeso, lo que resulta en que, uno de cada 3 niños tiene exceso de peso. (MINSAL, 2010). En cuanto a uno de los principales obstáculos para una vida saludable o para participar en programas de prevención parece ser la incapacidad parental para reconocer el sobrepeso o el estado de riesgo de su niño y los problemas de salud asociados (Conttrell, Menor, Murphy, (2007) ; Etelson, Marca, Patrick,& Shiral, (2003). Sin embargo en la población infantil, en México ocupa el cuarto lugar de prevalencia mundial de obesidad, aproximadamente 28.1% en niños y 29% en niñas superado por Grecia, Estados Unidos e Italia. (Franco, 2012). Dado que un posible factor implicado en la obesidad infantil es la percepción parental inadecuada del estado nutricional de los hijos, que oscila entre un 10.5-79% (Hodges, 2000). En este sentido, la Apreciación de los padres juega un papel relevante; puesto que, la identificación temprana de un estado de sobrepeso permite iniciar prontamente medidas que eviten la obesidad (Knowled, & Sharma, 2012). De acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (2006) en México entre 1999 y 2006, la prevalencia combinada de SP-OB en escolares aumentó un tercio los mayores aumentos se dieron en OB y en el sexo mascu1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados lino, estos resultados señalaron la urgencia de aplicar medidas conducentes a la prevención de la OB en los escolares. (Encuesta Nacional de Salud [ENSANUT, 2006]). Por otro lado Sonora es uno de los estados donde se presentan las mayores prevalencias de sobrepeso y obesidad en el país, siendo la población infantil una de las más afectadas. La gravedad de este problema se hace evidente por el hecho de que tres de cada 10 niños o niñas sonorenses padece de sobrepeso y obesidad. (ENSANUT, 2006).En el caso del estado de Tamaulipas la prevalencia de sobrepeso y obesidad en los menores de cinco años en 2012 fue de 12.7%. (ENSANUT TAMP, 2012). Por lo anterior se realizo el presente estudio para: Determinar la sensibilidad y especificidad de la Percepción Materna del Peso de su descendiente de la frontera norte de Tamaulipas por palabras vs por imágenes frente al estándar de oro. Material y Métodos El diseño fue de tipo descriptivo tipo transversal. Participaron 658 díadas (madre-hijo). El tamaño de muestra se determinó para estudios de pruebas diagnosticas, considerando los valores reportados en la literatura. Prueba de percepción por palabras PP sensibilidad de 36% y especificidad de 84% y prueba de percepción por imágenes PI sensibilidad de 70% y especificidad de 79%, nivel de confianza de 95%, IC de 0.1. Se seleccionaron de forma aleatoria 8 instituciones de Matamoros, Tamaulipas, (2 Jardín de Niños, 2 Primarias, 2 Secundarias y 2 Preparatorias). Los participantes se seleccionaron mediante muestreo aleatorio estratificado por tipo de institución y sexo, con asignación proporcional al tamaño del estrato. Una vez seleccionado el niño(a) participante se identificó a 188

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la madre y se le citó en cada institución educativa para invitarla (o) a participar conjunto con su hijo (a) seleccionado. Mediciones Las madres indicaron su edad, lugar de nacimiento, años de escolaridad, ocupación, estado civil e ingreso económico familiar y respondieron además las secciones 1 y 5 del cuestionario denominada Percepciones sobre la Apariencia Física y Salud en idioma español, que proporcionaron y autorizaron sus autores para ser aplicado. Para evaluar la percepción por palabras (PP) se formuló el enunciado: Creo que mi niño(a) está: a) bajo(a) de peso, b) un poquito bajo(a) de peso, c) más o menos con el peso correcto, d) con un poco de sobrepeso y e) con sobrepeso. En el caso de la percepción por imágenes (PI), se les presentó una serie de gráficos con imágenes corporales correspondientes a los rangos de edad: 2 a 5 años, 6 a 9 años, 10 a 13 años y 14 a 17 años diferenciados por sexo. Cada serie de gráficos se conforma de siete imágenes, las cuales se presentan de forma descendente, de izquierda a derecha. La imagen de la izquierda representa al niño(a) obeso y la imagen de la derecha al niño(a) delgado; a la madre se le pide encerrar en un círculo la imagen que represente la figura actual de su hijo. La imagen central de cada una de las series representa a un niño con un índice de masa corporal en el percentil 50º; el resto no representa una categoría particular. Las imágenes se dividen en: menor a la media, media o mayor y fueron creadas por un diseñador gráfico con base en consideraciones de edad, peso y sexo; luego revisadas por dos expertos en evaluación nutricional infantil y afinadas de acuerdo con sus observaciones.

Cultura de los Cuidados

Luego de contestar el cuestionario, la madre y su hijo se sometieron a las mediciones de peso y estatura; todas las mediciones las realizó la misma persona, quien recibió capacitación estandarizada basada en un procedimiento. El peso se midió en kilogramos con una báscula digital marca SECA 813, con capacidad para 150 kilogramos; el equipo tenía una precisión de 0.1 kg. Para medir la estatura se utilizó un estadímetro marca SECA y la estatura se registró en el punto más próximo a 0.1 cm. A continuación se calculó el índice de masa corporal (IMC) y de acuerdo con el percentil se consideró: bajo peso, IMC ≤ percentil 5; peso normal, IMC > percentil 5 pero < percentil 85; sobrepeso y obesidad, IMC ≥ percentil 85; medición que se consideró el estándar de oro. Por otro lado, los resultados de la prueba PP se clasificaron en tres grupos: a) cuando las madres de los niños con bajo peso refirieron las opciones bajo(a) de peso y un poquito bajo(a) de peso; b) cuando las madres de niños con peso normal lo refirieron como peso normal; c) cuando las madres de niños con sobrepeso y obesidad lo refirieron como con poco sobrepeso, sobrepeso y obesidad. En cuanto a la percepción por imágenes, se generaron tres categorías, de manera que se pudiera homologar y hacer comparable con los grupos

generados previamente. La PM por imágenes del peso del hijo se consideró como bajo peso cuando las madres de los niños seleccionaron las imágenes entre el percentil 3 y 10. Peso normal cuando las madres de los niños seleccionaron las imágenes entre el percentil 25, 50 y 75 y, SP-OB cuando las madres se ubicaron entre el percentil 90 y 97. El presente estudio se apego a lo dispuesto en el reglamento de la Ley General de Salud en Materia de investigación para la salud para la Salud (SS, 1987) Análisis Estadísticos: Los datos fueron capturados y procesados en el paquete estadístico SPSS versión 20 para Windows, se utilizo estadística descriptiva. Resultados La muestra se conformó con 658 diadas de madres y sus hijos, los cuales 111 cursaban educación preescolar, 166 primaria, 242 secundaria y 139 preparatoria. El promedio de edad de las madres es de 36.80 años (DE= 7.1) y un promedio de escolaridad de 10.13 años (DE= 3.76), con 2.83 hijos. El 68.50% se dedica al hogar y el 75% son casadas. La mayoría de las madres (61.70%) son originarias de Tamaulipas y con un ingreso promedio mensual de $ 5 681.52 M/N (DE= 4 666.64). En relación a los hijos (n= 658), el 55.6% pertenece al sexo femenino y el 44.4% al masculino con un promedio de edad de 11.21 años (DE= 3.99). El peso promedio de los hijos fue de 46.55 kg (DE= 22.25) y la estatura media de 143.22 (DE= 20.85). Se encontró bajo peso en 37.38% (n= 246), peso normal en 38.60% (n= 254), sobrepeso en 14.58% (n= 96) y obesidad en 9.42% (n= 62). Específicamente, el 84.68% (n= 94) de los niños de preescolar tienen peso bajo, el 56.63% (n= 94) de primaria peso bajo, el 47.11% (n= 114) de secundaria sobrepeso y 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados en preparatoria el 45.32% (n= 63) peso normal. Respecto al peso corporal de la madre, se identificó peso normal en 24.47% (n=161), sobrepeso en 18.39% (n=121) y obesidad en 57.14% (n=376), de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana (NOM-174-SSA2-1998) para el manejo integral de la obesidad. (Tabla 1). En la Tabla 2, se presenta la evaluación de la PM por palabras del peso del hijo en comparación con el estándar de oro. La prueba de Kappa señala que hay una concordancia fiable (k= 0.333, p= 0,000). Se encontró una concordancia de 77.85% para SP-OB, 63.39% para peso normal y 34.15% para bajo peso. En cambio, el 22.15% de las madres de niños con sobre peso y obesidad no consiguieron identificar esta situación, debido a que subestimaron el peso de sus hijos. De igual forma, en la Tabla 3 se presentan los resultados de la percepción materna por imágenes frente al estándar de oro. La prueba kappa señala que existe una concordancia fiable (k= 0.350, p= 0,000). Se encontró una concordancia del 68.99% para el SP-OB, 63.39% para peso normal y 52.44% para bajo peso. No obstante, el 31% de las madres con hijos con SP-OB no lograron identificar esta situación. Discusión De acuerdo al los objetivos de este estudio fue los siguientes: Determinar la sensibilidad y especificidad de la Percepción Materna del Peso de su descendiente de la frontera norte de Tamaulipas por palabras vs por imágenes frente al estándar de oro. Los resultados de los estudios internacionales y Nacionales de Neumark, Cols.; Grimmett, Cols. (2007): Suligoy (2012). por Lara (2010). En los estudios reportados donde menciona que al analizar la PMP se encontró que las madres de niños con obesidad no 190

1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

percibieron de forma adecuada el peso de sus hijos al igual que en la prueba de percepción por imágenes, donde refiere que las madres participantes no percibían en forma adecuada el peso de sus hijos , los cuales fueron detectados con SP u OB . De igual forma estos datos coinciden con que al evaluar la PMPH por PP, se encontró que la mayoría de las madres de niños con Sobrepeso no percibieron de forma adecuada el peso de su hijo y al momento de evaluar La PMPH por PI; se encontró que las madres de niños con OB, no percibieron de forma adecuada el peso de su hijo. Flores & cols (2013). Estos estudios coniciden que este estudio .Resultados iguales encontrados en este estudio del estado de Tamaulipas Contrariamente a lo encontrado en el estudio realizado por Flores & cols (2009), Donde se encontró que las madres de niños con sobrepeso y obesidad, percibieron esta situación adecuadamente por medio de la prueba de percepción por palabras, mientras que al aplicar la prueba de percepción por imágenes, las madres de niños con sobrepeso y obesidad pudieron percibir esta situación. Casi por igual se menciona que al evaluar la percepción materna por palabras se encontró una percepción adecuada de los hijos con SP y OB mientras que mediante la prueba IMCP se encontró que las madres de hijos con SP y OB perciben de manera adecuada de esta situación. Flores & cols (2011). Conclusiones El presente estudio concluye que de acuerdo a la literatura sobre el tema, ha documentado que en la PM del peso corporal de sus descendientes tanto en palabras como en imágenes no lo perciben correctamente considerando que intervienen factores, tales como, la escolaridad, ocupación, estado civil, variables

Cultura de los Cuidados que hemos considerado en la construcción del modelo explicativo de percepcion por la madre. Por lo que la PP y PI las madres de niños con sobrepeso y obesidad no consiguieron identificar esta situación, debido a que subestimaron el peso de sus hijos.

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Febrero de 2016, de: http://pediatrics.aappublications.org/cgi/reprint/124/1/e60   ANEXOS Anexos  

Tabla    I.     Datos    socio  demográfica  de  madres  e  hijos.     Madre  

Promedio  

DE  

Valor  mínimo  

Valor  máximo  

Edad  

36.80  

7.11  

19  

63  

Años  escolaridad  

10.13  

3.76  

0  

20  

IMC   Ingreso  mensual   familiar  

28.69  

5.60  

16.97  

52.40  

5  681.52  

4  666.64  

1000.00  

65000.00  

Hijo  

 

 

 

 

Edad  

11.21  

3.99  

4  

17  

IMC  

21.25  

5.84  

8.80  

44.90  

   

192

1

er

 Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

normal  

Bajo  peso   PM  por  palabras   Positivos  (concordantes)  

 

Negativos  (no  concordantes)   Total  

Abs.  

%  

Abs.  

SP-­‐OB  

%  

Abs.  

%  

Cultura de los Cuidados 84   34.15   161   63.39   123   77.85  

162   65.85  

93   36.61   35   22.15  

246  

254  

100  

100  

158  

100  

Tabla  2   Sensibilidad   78%             PM  por  palabras  del  peso  del  hijo  de  acuerdo  con  el  estándar  de  oro   Especificidad   37%                         Estándar  de  oro   Prueba  de  concordancia  (R  x  C  =  3  x  3)  k=  0.333     Peso   normal     SP-­‐OB   Bajo  peso   p=  0,000  

   

PM  por  palabras   Positivos  (concordantes)   Negativos  (no  concordantes)  

     

Abs.   84  

%  

Abs.  

%  

Abs.  

%  

34.15   161   63.39   123   77.85  

162   65.85  

93   36.61   35   22.15  

Total  

246  

100  

254  

100  

158  

100  

Sensibilidad  

78%  

 

 

 

 

 

Especificidad  

37%  

   

   

   

   

   

Prueba  de  concordancia  (R  x  C  =  3  x  3)  k=  0.333  

 

p=  0,000  

 

           

Tabla  3.     PM  por  imágenes  del  peso  del  hijo  de  acuerdo  con  el  estándar  de  oro    

Estándar  de  oro   Peso   Bajo  peso   normal  

     

PM  por  imágenes  

Abs.  

%  

Abs.  

%  

SP-­‐OB   Abs.  

%  

Positivo  (concordantes)  

129   52.44   138   54.33   109   68.99  

Negativo  (no  concordantes)  

117   47.56   116   45.67   49   31.01  

Total  

246  

100  

254  

100  

158  

100  

Tabla  3.     Sensibilidad   69%                       PM  por  imágenes  del  peso  del  hijo  de  acuerdo  con  el  estándar  de  oro   Especificidad   46%                         Estándar  de  oro   Prueba  de  concordancia  (R  x  C=  3  x  3)  k=  0.350     Peso   p=  0,000  

   

PM  por  imágenes  

Bajo  peso   Abs.  

%  

normal   Abs.  

SP-­‐OB  

 

%  

Abs.  

%  

Positivo  (concordantes)  

129   52.44   138   54.33   109   68.99  

Negativo  (no  concordantes)  

117   47.56   116   45.67   49   31.01  

Total   246   100   Agradecimientos Sensibilidad   69%       Al Programa de Mejoramiento del ProfeEspecificidad   46%       sorado (PROMEP/103.5/07/2522) y al InstiPrueba  Kellogg’s de  concordancia   R  x  fiC=  3  x  3)  k=  0.350   tuto de Nutrición y Salud por (el p=   0 ,000   nanciamiento otorgado para el desarrollo del   presente proyecto de investigación. Declaración de   conflicto de intereses. Los autores declaramos no tener conflicto de intereses. Por su participación PESS .Gloria Mayte Del Ángel del Ángel PESS. Grecia Mitz Martínez Herrera

254  

100  

158  

   

   

   

   

   

   

100          

   

1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

193

Cultura de los Cuidados

Vacunación contra Hepatitis B: un estudio de revisión Vaccination against hepatitis B: a review study Vacinação contra hepatite b: um estudo de revisão

Telma Maria Evangelista de Araújo1, Karinna Alves Amorim de Sousa2, Samya Raquel Soares Dias3, Vanessa Cavalcante Oliveira4, Evellyn Stefanne Bastos Marques5. Enfermeira. Doutora em Enfermagem pela Universidade Federal do Rio de Janeiro Escola de Enfermagem Anna Nery. Professora da Graduação em Enfermagem e do Programa de Pós-Graduação (Mestrado e Doutorado) em Enfermagem da Universidade Federal do Piauí – UFPI. Professora do Programa de Mestrado RENASF/FIOCRUZ. Teresina, Piauí-PI. 2 Enfermeira. Doutoranda e Mestre em Enfermagem pelo Programa de Pós-Graduação em Enfermagem da Universidade Federal do Piauí – UFPI. Teresina, Piauí-PI. 3 Enfermeira. Residente em Alta Complexidade pelo Programa de Residência Multiprofissional da Universidade Federal do Piauí – UFPI. Teresina, Piauí-PI. 4 Enfermeira. Pós graduanda em Terapia Intensiva. Teresina, Piauí-PI. 5 Enfermeira pela Universidade Federal do Piauí – UFPI. Teresina, Piauí-PI.

1

Cómo citar este artículo en edición digital: Araújo, T.Mª.E., Sousa, K.A.A., Dias, S.R.S., Oliveira, V.C., Marques, E.S.B. (2017). Vacunación contra Hepatitis B: un estudio de revisión. Cultura de los Cuidados (Edición digital) 21,47. Recuperado de http://dx.doi.org/10.7184/cuid.2017.47.17 CCorrespondencia: Samya Raquel Soares Dias- Rua Professor Machado Lopes, nº 3665, Bairro Ininga, CEP: 64048-485, Teresina, Piauí, Brasil. Correo electrónico: [email protected] Recibido: 20/03/2016; Aceptado: 20/09/2016

ABSTRACT The precise knowledge of the hepatitis B vaccination coverage is a key element for the epidemiological surveillance and interruption of the infection transmission chain. The objective of that study is to analyze the accession and the vaccination status against hepatitis B in the general population. It is an integrative literature review. They sought for articles in databases of the Virtual Health Library (VHL) - Nursing and Scientific Electronic Library Online (SciELO). Articles published in Portuguese, available online in full text and 194

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published from 2005 to 2013. At the end, 17 of the selected articles to review were included. A low vaccination coverage ranging from 14% to 99% between the groups was found. The main factors related to non- accession to vaccination were: not to like needle, to be treated for HIV, low income, lack of knowledge about the vaccines, among others. We conclude that the immunization coverage for hepatitis B is below of the recommended by the Brazilian Department of Health. In this sense, it is suggested greater role of the Family Health Strategy, in the target population of the vaccine, especially schoolchildren, and increase in permanent education health professionals. Keywords: Vaccination; Hepatitis B; Health Services Coverage. RESUMEN El conocimiento preciso de la cobertura vacunal contra Hepatitis B es uno de los elementos esenciales para la supervisión epi-

Cultura de los Cuidados demiológica e interrupción de la cadena de transmisión de la infección. El objetivo de ese estudio es analizar la adhesión y la situación vacunal contra Hepatitis B en la población en general. Se trata de revisión integrativa de la literatura. Se buscaron artículos en las bases de datos de la Biblioteca Virtual de Salud (BVS) – Enfermería y Scientific Eletronic Library Online (SCIELO). Fueron agregados los artículos publicados en portugués, disponibles online en texto completo y publicados entre 2005 al 2013. Al final fueron seleccionados 17 artículos para la revisión. Se identificó una baja cobertura vacunal que varió de 14% a 99% entre los grupos estudiados. Los principales factores relacionados a la no adhesión a la vacunación fueron: miedos a las agujas, estar en tratamiento para VIH, bajos ingresos, falta de conocimiento acerca de las vacunas, entre otros. Se concluye que la cobertura vacunal contra Hepatitis B está a quien de la preconizada por el Ministerio de la Salud. En este sentido, se sugiere una mayor actuación de la Estrategia Salud de la Familia, con la población objetivo de la vacuna, especialmente la escuela, así como un aumento de la formación constante de los profesionales de la salud. Palabras clave: Vacunación; Hepatitis B; Cobertura de los Servicios de Salud. RESUMO O conhecimento preciso da cobertura vacinal contra hepatite B é um dos elementos essenciais para a vigilância epidemiológica e interrupção da cadeia de transmissão da infecção. O objetivo desse estudo é analisar a adesão e a situação vacinal contra hepatite B na população geral. Trata-se de revisão integrativa da literatura. Buscaram-se artigos nas bases de dados da Biblioteca Virtual de Saúde (BVS) - Enfermagem e Scientific Electronic Library

Online (SCIELO). Foram incluídos os artigos publicados em português, disponíveis online em texto completo e publicados entre 2005 à 2013. Ao final foram selecionados 17 artigos para a revisão. Foi encontrada uma baixa cobertura vacinal que variou de 14% a 99% entre os grupos estudados. Os principais fatores relacionados a não adesão à vacinação foram: não gostar de agulha, estar em tratamento para HIV, baixa renda, falta de conhecimento quanto às vacinas, dentre outros. Conclui-se que a cobertura vacinal contra hepatite B está aquém da preconizada pelo Ministério da Saúde. Neste sentido, sugere-se maior atuação da Estratégia Saúde da Família, junto a população alvo da vacina, especialmente escolares, além de incremento na educação permanente dos profissionais de saúde. Descritores: Vacinação; Hepatite B; Cobertura de serviços de saúde.

INTRODUÇÃO A infecção pelo vírus da hepatite B é um problema de saúde global. Se caracteriza por uma infecção do fígado potencialmente fatal que pode causar doença hepática crônica e infecção crônica e coloca as pessoas em alto risco de morte por cirrose e câncer de fígado (Who, 2014). No mundo mais de 240 milhões de pessoas têm infecções crônicas do fígado e mais de 780 000 morrem todos os anos devido às consequências agudas ou crônicas de hepatite B (WHO, 2014). No Brasil, no período de 1999 a 2011, foram notificados no Sinan 120.343 casos confirmados de hepatite B, sendo a maior parte deles notificados nas Regiões Sudeste (36,3%) e Sul (31,6%) (Brasil, 2012). A maioria das pessoas não apresentam quaisquer sintomas durante a fase de infecção 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

195

Cultura de los Cuidados aguda. No entanto, outras apresentam sintomas que duram várias semanas, incluindo icterícia na pele e olhos, urina escura, fadiga extrema, náusea, vômito e dor abdominal (Who, 2014). Frente à problemática da infecção pela hepatite B, tem-se a vacina, como importante forma de prevenção a qual foi disponibilizada licenciada e comercializada a partir de 1987. Para a sua produção utilizaram-se os recursos da engenharia genética, a partir da recombinação de DNA de partículas proteicas do vírus da hepatite B. A sua eficácia é de 95% na prevenção da infecção e suas consequências crônicas, sendo considerada a primeira vacina contra um grande câncer humano (Who, 2014). No início da década de 1990, a Organização Mundial da Saúde (OMS) recomendou que a vacina contra a hepatite B fosse incorporada aos programas nacionais de imunização em todo o mundo. Em 2012, 79% das crianças dos 183 países que compõem os Estados-membros da OMS foram vacinadas contra a hepatite B, sendo que 94 destes países introduziram também a dose ao nascimento (Who, 2014). O Programa Nacional de Imunização (PNI) garante vacina para população geral menor de 50 anos e para grupos vulneráveis à infecção pelo VHB, sendo estes: trabalhadores da saúde; bombeiros, policiais militares, civis e rodoviários; carcereiros, agentes de delegacias e de penitenciárias; coletadores de lixo hospitalar e domiciliar; comunicantes sexuais de VHB; doadores de sangue; lésbicas, gays, bissexuais, travestis e transexuais (LGBT); pessoas reclusas; manicures, pedicures e podólogos; populações de assentamentos e acampamentos; populações indígenas; potenciais receptores de múltiplas transfusões de sangue ou politransfundidos; profissionais do sexo/prostitutas; usuários de drogas injetáveis, 196

1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

inaláveis e pipadas; portadores de doenças sexualmente transmissíveis; imunodeprimidos, profissionais de saúde, caminhoneiros, dentre outros. A vacina também está disponível para qualquer indivíduo a partir de 50 anos de idade que procurar o serviço de saúde (Brasil, 2010; 2013). Não obstante a vacina venha sendo utilizada como forma de interromper a cadeia de transmissão de doenças imunopreveníveis a qualidade das ações e o alcance das metas relativas às atividades de vacinação dependem da compreensão e do engajamento dos profissionais em ações de cunho coletivo, que incluem, além do ato individual de vacinar, acompanhamento, supervisão dos serviços e informação consistente (Carvalho; Araújo, 2008). Considerando-se que a vacina é uma medida de prevenção eficaz contra a infecção pelo vírus contra hepatite B, sendo amplamente disponibilizada pelo Sistema Único de Saúde, para uma abrangente faixa etária, questiona-se sobre o alcance da sua cobertura. O estudo, portanto, busca analisar na literatura a adesão e a situação vacinal contra hepatite B na população geral. METODOLOGIA Trata-se de uma revisão integrativa da literatura. Para a construção desta revisão foram seguidas as seguintes etapas: definição de questão norteadora, estabelecimento dos objetivos da revisão e dos critérios de inclusão e exclusão para seleção da amostra, categorização e definição das informações a serem obtidas a partir dos artigos selecionados, análise dos resultados, discussão dos achados e apresentação da revisão (Botelho, Cunha, Macedo, 2011). A pesquisa surgiu do seguinte questionamento: Como se apresenta a adesão e situação vacinal contra hepatite B na população brasi-

Cultura de los Cuidados leira? Partindo-se desta pergunta, buscaram-se artigos nas bases de dados Biblioteca Virtual de Saúde (BVS) - Enfermagem e Scientific Electronic Library Online (SCIELO). Para a busca foram considerados como critérios de inclusão: artigos publicados em português, disponíveis online em texto completo, publicados entre os anos de 2005 à 2013 e que correspondessem à questão da pesquisa. Os critérios de exclusão foram: textos editoriais, cartas aos leitores, artigos com apenas resumos disponíveis, artigos duplicados, teses, dissertações e não se adequar à questão do estudo. Os descritores utilizados de forma cruzada foram: “vacinação”, “hepatite B” e “cobertura de serviços de saúde”. Utilizou-se junto aos descritores a expressão booleana “and” que corresponde à inserção de duas ou mais palavras nas duas bases. A busca permitiu encontrar 275 artigos na BVS Enfermagem. A princípio foram aplicados os critérios de inclusão que filtrou para 32 artigos, e após análise dos resumos foram selecionados 11 artigos desta base, sendo estes todos da Bdenf. Na base Scielo foi realizado o mesmo processo, com os descritores e foram encontrados 86 artigos. Após aplicação dos critérios restaram 24 sendo selecionados, apenas 6 artigos, totalizando 17 artigos para a revisão. RESULTADOS Para auxiliar a análise e síntese dos artigos foram elaborados dois quadros para apresentação mais detalhada e compreensível dos achados. O primeiro trata da caracterização dos artigos, e o segundo sumariza os que abordaram a temática cobertura vacinal e adesão à vacinação contra hepatite B. Dentre os estudos selecionados, o ano com maior número de artigos publicado foi 2013 (23,52%), seguido do ano de 2012 (17,64%).

Observou-se que a maior parte das pesquisas concentrou-se na Universidade Federal de Minas Gerais (21,43%). Um número significativo de artigos (42,85%) foi publicado em revistas voltadas à saúde pública, quais sejam: a Revista Panamericana de Salud Pública; Ciência & Saúde Coletiva; Caderno de Saúde Pública; Revista Brasileira de Epidemiologia; Revista de Saúde Pública; Revista Brasileira de Epidemiologia e Epidemiologia dos Serviços de Saúde (quadro 1). No quadro 2 observa-se a prevalência de estudos de natureza quantitativa. Os estudos indicaram que não há completude de esquema vacinal básico, mesmo frente à oferta gratuita. A adesão a vacinação contra hepatite B se relaciona a diversas faixas de idade e segmento social, sendo direcionada à criança, adolescentes, população privada de liberdade, usuários de drogas ilícitas e a profissionais da saúde. Houve grande variação da cobertura vacinal entre os estudos supracitados com limite inferior de 14% e o limite superior de 99%. Os principais fatores relacionados a não adesão à vacinação contra a hepatite B foram: não gostar de agulha (Carvalho; Araújo, 2010; Souza, y otros, 2005), estar em tratamento para HIV, ter baixa renda e estudar no turno da noite (Oliveira, y otros, 2007), oportunidades perdidas, faixa etária menor que 15 anos, ser do sexo masculino e referir medo da dor (Carvalho & Araújo, 2010). Referiram ainda deficiência de conhecimento quanto a vacina (Ferreira, y otros, 2012; Carvalho; Araújo, 2010), esquecimento, negligência, medo da vacina, e falta de vacina no posto de saúde (Ferreira, y otros, 2012) e a falta de informação dos trabalhadores sobre medidas de biossegurança/importância da vacina (Garcia; Facchini, 2008). Em relação à boa adesão foram identificados os seguintes fatores associados: conhe1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados cimento do calendário (Carvalho; Araújo, 2010), os profissionais mais satisfeitos com a profissão e que conhecem o protocolo pós-exposição (Ferreira, y otros, 2012), profissionais com maior escolaridade, que tem contato com perfuro cortantes (Garcia & Facchini, 2008) e que não consomem bebida alcoólica (Garcia; Facchini, 2008; Ferreira, y otros, 2012). DISCUSSÃO O conhecimento preciso da cobertura vacinal é um dos elementos essenciais para a vigilância epidemiológica, pois permite verificar se as metas estabelecidas para cada vacina estão sendo alcançadas e mais ainda, acompanhar a existência de pessoas suscetíveis às doenças imunopreveníveis na população (Pereira, y otros, 2009). Os percentuais de cobertura precisam ser alcançados e mantidos de forma homogênea dentro de cada unidade geográfica. Ressalta-se que a cobertura mínima recomendada pelo ministério da saúde para manter a proteção contra a hepatite B é de 95% (Araújo, Carvalho, Monteiro, 2012). Contudo, foram encontradas coberturas inadequadas na maioria dos estudos. Observou-se em dois deles, grande variação da cobertura vacinal com o limite inferior de 14% (Bueno; Matijasevich, 2011) e limite superior de 99% (Barbieri, y otros, 2013). Identificar a proporção da população que deve ser imunizada é importante para que a cadeia de transmissão da infecção seja interrompida, daí a necessidade de se estabelecer percentuais mínimos de cobertura, suficientes para cessar a transmissão da doença ou a circulação do agente causador. A redução da morbidade e da mortalidade por doenças imunopreveníveis só é possível se os índices de cobertura forem mantidos altos e homogêneos (Araújo, Carvalho, Monteiro, 2012). 198

1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

É fundamental a implementação da cobertura vacinal adequada, ou seja, com as três doses da vacina contra hepatite B e com intervalos corretos entre elas, uma vez que coberturas inadequadas, com a administração de apenas com uma ou duas doses culminam não somente no crescimento da transmissão do vírus da hepatite B, mas também leva ao desperdício de recursos, pois não são suficientes para conferir proteção. Estudos evidenciaram que em idades inferiores a 5 anos a cobertura vacinal, atinge os valores mínimos recomendados em que muitas vezes é facilitado pela aplicação da primeira dose da vacina para hepatite B na maternidade (Barbieri, y otros, 2013; Bueno; Matijasevich, 2011; Pereira, y otros, 2009). Todo recém-nascido deve receber a primeira dose logo após o nascimento, preferencialmente nas primeiras 12 horas de vida, como recomendado pelo Ministério da Saúde (Carvalho, Araújo, 2010). Inquérito domiciliar realizado no município de Teresina (Piauí) (Carvalho; maior cobertura entre os adolescentes na faixa etária entre 10 a 14 anos e do sexo feminino. Os adolescentes deste estudo possuíam deficiência de conhecimento sobre as vacinas recomendadas no calendário de vacinação, pois somente 19,9% informaram conhecer a proteção conferida pela vacina contra hepatite B. Adolescentes apresentam uma concepção de invulnerabilidade e imortalidade que só correspondem ao momento em que vivem (Rodrigués, y otros, 2003). Passam assim a ser considerados um grupo de risco de elevada exposição ao VHB, isso devido aos comportamentos de risco que assumem, sendo estes: relações sexuais sem proteção, multiplicidade de parceiros, uso abusivo de álcool e drogas injetáveis, dentre outros (Coutinho, 2010). Assim, uma estratégia eficiente para vacinação de

Cultura de los Cuidados adolescentes é a vacinação no ambiente escolar, pois facilita a administração do esquema completo em quase a totalidade dos indivíduos que recebem a primeira dose (Oliveira, 2007). Diversos fatores foram relacionados a não adesão à vacina. A princípio o desconhecimento, seguido de medo e temor à agulha e dor. O longo período entre a segunda e a terceira doses tem sido apontado, como um obstáculo para a conclusão do esquema vacinal (Carvalho; Araújo, 2010). Outros motivos citados foram a necessidade de mais informações, esquecimento, negligência, e falta da vacina no posto de saúde (Ferreira, y otros, 2012). Neste sentido, é relevante enfatizar a importância do acompanhamento da estratégia Saúde da Família (eSF) e do programa saúde na escola, monitorando, por meio do agente de saúde a vacinação das famílias. Quanto à vulnerabilidade dos profissionais de saúde, para infecção pelo vírus da hepatite b se refere ao risco biológico a que se submetem no exercer das suas profissões, por fazerem uso de materiais perfurocortantes. Nesta perspectiva, estudo realizado no Piauí, com alunos de um Curso de Especialização em Saúde da Família, evidenciou que 31,63% dos enfermeiros, 90,9% dos cirurgiões-dentistas e 69,2% dos médicos não tinham informação sobre quais vacinas o Programa Nacional de Imunização preconiza para os profissionais de saúde, o que representa uma grande lacuna no conhecimento da equipe (Araújo, Paz; Griep, 2006). Em contra ponto, outro estudo realizado no Piauí, com profissionais de dois serviços de hemodiálise em Teresina evidenciou cobertura vacinal de 100% nos enfermeiros, 93,3% nos médicos e 89,3% nos auxiliares e técnicos de enfermagem (Araújo, y otros, 2012). Pesquisas de sobre a situação vacinal contra hepatite B de profissionais de saúde, cor-

roboram o achado referente a escolaridade, ou seja, verificaram que a prevalência de vacinação diminuiu com a redução da escolaridade (Assunção, y otros, 2012; Garcia; Facchini, 2008). Foi observada uma variação de 91,9% para o ensino superior/pós-graduação a 74,7% no nível de ensino fundamental (Assunção, y otros, 2012). Trabalhadores com ensino superior completo ou pós-graduação apresentaram chances entre 18% e 50% maiores de apresentarem vacinação em dia (Garcia; Facchini, 2008). No referido estudo, a maior prevalência foi encontrada entre os enfermeiros (85,19%), seguida por dentistas (84,48%) e técnicos de enfermagem (83,09%). A menor prevalência foi encontrada entre os vigias e motoristas (38,89%). Frente à elevada prevalência da infecção pelo vírus da hepatite B e aos fatores de vulnerabilidade a que a população se encontra exposta enfatiza-se a importância da adesão à vacina, a qual tem o potencial de modificar o panorama da infecção culminando na redução do número de óbitos. CONCLUSÃO Foi possível observar que, independente do grupo social, os estudos evidenciaram que a cobertura da vacina contra hepatite B na população geral está aquém da preconizada pelo Ministério da Saúde. Contudo, na faixa etária inferior a cinco anos observou-se que as coberturas se aproximam mais da mínima recomendada pelo Programa Nacional de Imunização. Em face dessa situação, faz-se necessário que sejam implementadas as vacinações de rotina e incentivadas as campanhas de educação em saúde para a população. Quanto à adesão à vacina foram associados fatores relacionados à condição social, de saúde, de trabalho, de comportamento pessoal, de 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

199

Cultura de los Cuidados idade e de grupos populacionais específicos. Neste sentido, sugere-se maior atuação da eSF junto a escolares e aumento de capacitações e educação permanente aos profissionais de saúde.

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Quadro 1. Caracterização dos artigos selecionados segundo título, autores, ano de publicação e periódico. Teresina/PI, 2014 Título do artigo   Inquérito de cobertura vacinal: avaliação empírica da técnica de amostragem por conglomerados proposta pela Organização Mundial da Saúde.   Avaliação do conhecimento, comportamentos de risco e adesão à vacina contra hepatite b em reeducandos da cidade de Goiânia, GO.  

Autores  

Local e Ano de publicação  

BARATA, R.B, Setores et., al   censitários, 2005   SOUSA, et., al  

A.O, Casa de Albergado, 2005  

ARAÚJO, Cobertura vacinal dos profissionais de um curso T.M.E.; PAZ, E de especialização em saúde da família do Piauí.   P.A.; GRIEP, R.H   PINTO, A.E.C.M; Campanha de imunização contra Hepatite B em RODRIGUES, escolares do Município de Vespasiano – minas S.J.A; gerais.   GENEROSO, R. C.   Análise de fatores associados à não aceitação da OLIVEIRA, M, vacina contra hepatite B em adolescentes et., al   escolares de baixa renda.   GARCIA,L.P; Vacinação contra a hepatite B entre FACCHINI, trabalhadores da atenção básica à saúde.   L.A   Cobertura vacinal em crianças de 12 a 23 meses PEREIRA, D.R, de idade: estudo exploratório tipo Survey.   et., al   CARVALHO Fatores associados à cobertura vacinal em AMC, adolescentes.   ARAÚJO TME   Cobertura vacinal contra hepatite B entre ATTILIO, J.S, usuários de drogas ilícitas.   et., al  

Curso de Especializaçãoem Saúde da Família, 2006  

Escolas públicas, 2006  

Periódico   Revista Panamericana de Salud Pública   Ciência, Cuidado e Saúde   Escola Anna Nery Revista de Enfermagem  

REME – Rev. Min. Enf  

Região Metropolitana de Goiânia, 2007  

Ciência & Saúde Coletiva  

Unidade básica de saúde, 2008  

Cad. Saúde Pública  

Domicílios, 2009  

Revista Eletrônica de Enfermagem  

Estratégia Saúde da Família, 2010  

ACTA Paulista de Enfermagem  

Centros de ACTA Paulista de Recuperação, 2011   Enfermagem   Sistema de Avaliação da cobertura vacinal contra hepatite B BUENO, M.M e Informação da Epidemiol. Serv. Saúde   nos menores de 20 anos em municípios do MATIJASEVIC Avaliação do Estado do Rio Grande do Sul, Brasil.   H, A.   Programa de Imunizações, 2011   Conselho Regional Vacinação contra hepatite B e fatores associados FERREIRA, de Odontologia de Revista Brasileira de entre cirurgiões-dentistas.   R.C, et., al   Epidemiologia   Minas Gerais, 2012   Vacinação contra hepatite B e exposição Sistema público ASSUNÇÃO, Revista deSaúde ocupacional no setor saúde em Belo Horizonte, municipal de A.A, et., al.   Pública   MG.   saúde, 2012   Universidade REME - Revista Situação vacinal dos estudantes da universidade OLIVEIRA, Federal de São Mineira de federal de São João Del Rei, 2009.   V.C, et., al   João del Rei, 2012   Enfermagem   Revista LatinoA vacinação contra hepatite B é realidade entre COSTA, F.M, Atenção Primária Americana de trabalhadores da Atenção Primária à Saúde?   et., al   à Saúde, 2013   Enfermagem   LAGES, A.S; Profissionais de saúde no processo de vacinação FRANÇA, E.B; Unidade básica de Revista Brasileira de contra hepatite B em duas unidades básicas de Epidemiologia   FREITAS, M. saúde, 2013.   Belo Horizonte: uma avaliação qualitativa.   I.F.   Cobertura vacinal infantil em um serviço Serviço filantrópico de atenção primária à saúde do BARBIERI, filantrópico de Epidemiol. Serv. Saúde   Município de São Paulo, Estado de São Paulo, C.L.A, et., al   atenção primária, Brasil, em 2010.   2013   Cobertura vacinal e fatores associados ao esquema vacinal básico incompleto aos 12 YOKOKURA, Conglomerados, Cad. Saúde Pública   meses de idade, São Luís, Maranhão, Brasil, A.V.C.P, et., al   2013.   2006.   Fonte: Pesquisa direta

No quadro 2 observa-se a prevalência de estudos de natureza quantitativa. Os estudos indicaram que não há completude de esquema vacinal básico, mesmo frente à

1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

oferta gratuita. A adesão a vacinação contra hepatite B se relaciona a diversas faixas de

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Cultura de los Cuidados

Quadro 2: Fatores relacionados à adesão e cobertura vacinal contra hepatite B. Teresina/PI, 2014. Natureza Autores   Principais Resultados Evidenciados   do estudo   ARAÚJO, T.M.E.; PAZ, E P.A.; Os profissionais de saúde de Teresina estão inadequadamente Quantitativo   GRIEP, R.H   vacinados contra hepatite B (81,3%).   As maiores prevalências de vacinação foram observadas entre as ASSUNÇÃO, A.A, ET., AL   Quantitativo   mulheres (74,9%), enfermeiros, técnicos de enfermagem e médicos.   Baixa cobertura vacinal (31%) e a falta de término do esquema ATTILIO, J.S, et., al   Quantitativo   em usuários de drogas ilícitas.   A cobertura vacinal contra hepatite B em crianças nas cidades de BARATA, R.B et., al   Quantitativo   Diadema e São Caetano do Sul foi 22,5% e 26,7%, respectivamente.   A cobertura vacinal para Hepatite B no município de São Paulo é BARBIERI, C.L.A, et., al   Quantitativo   superior à mínima recomendada pelo PNI, com 99%.   A cobertura vacinal da população 0 a 5 anos foi superior a 95% BUENO, M.M e em municípios do Rio Grande do Sul. Nos grupos de 5 a 10 Quantitativo   MATIJASEVICH, A.   anos, 11 a 14 anos e de 15 a 19 anos apresentaram variação de 18 a 95%, 50 a 95% e de 14,0% a 90,0%, respectivamente.   A não adesão à vacinação em adolescentes está relacionada às CARVALHO AMC, ARAÚJO oportunidades perdidas à deficiência de conhecimento sobre as TME   Quantitativo   vacinas, a faixa etária maior de 15 anos, ao sexo masculino e ao temor à agulha e a dor.   COSTA, F.M, et., al   Quantitativo   Apresentaram maior adesão à vacina os profissionais com maior escolaridade e os que referiram contato com instrumentos perfucortantes. Aproximadamente 52,5% relataram ter tomado três doses da vacina contra hepatite B.   FERREIRA, R.C, et., al   Quantitativo   Dos 283 cirurgiões-dentistas investigados em Montes ClarosMG, 258 (91,2%) completaram o esquema vacinal de três doses e 25 (8,8%) não se vacinaram ou não completaram o esquema. A não adesão foi relacionada a falta de informação, esquecimento, negligência, medo da vacina e falta da vacina no posto de saúde.   Verificou-se que 64,61% dos profissionais investigados em Florianópolis-SC apresentaram as 3 doses da vacina contra GARCIA,L.P; FACCHINI, L.A   Quantitativo   hepatite B. Os profissionais com maior cobertura foram enfermeiros, seguidos dos dentistas e técnicos de enfermagem.   As causas da baixa cobertura vacinal contra hepatite B foram falta de informação e orientação, descaso das mães, receio dos LAGES, A.S; FRANÇA, E.B; Qualitativo   pais quanto à idade da criança, esquecimento, falta de FREITAS, M. I.F.   conhecimento dos profissionais sobre a vacina e dificuldades com a técnica de aplicação.   OLIVEIRA, M.S, et., al   Quantitativo   Na faixa etária de 12 a 19 anos 64% dos estudantes aderiram à vacinação contra hepatite B. Houve baixa adesão à vacina em adolescentes, principalmente de baixa renda, que estudam no turno da noite.   A cobertura vacinal, foi apenas 52%. Os estudantes não estão OLIVEIRA, V.C, et., al   Quantitativo   adequadamente vacinados.   Cobertura vacinal de 96,2% em crianças de 12 a 23 meses de PEREIRA, D.R et., al   Quantitativo   idade.   PINTO, A.E.C.M; Baixa cobertura vacinal para Hepatite B nas duas unidades RODRIGUES, S.J.A; Quantitativo   escolares analisadas, em média 50,5%. Pouco conhecimento GENEROSO, R. C.   sobre a importância da imunização da criança e adolescente.   SOUSA, A.O, et., al   Quantitativo   Baixa adesão à vacinação na população carcerária, por “não gostar de agulha”, “estar em tratamento contra HIV” e “já ter recebido a vacina”.   Baixa cobertura e atraso vacinal, sendo mais frequente para a YOKOKURA, A.V.C.P, et., al   Quantitativo   terceira dose da hepatite B (40%).   Fonte: Pesquisa direta

DISCUSSÃO O conhecimento preciso da cobertura vacinal é um dos elementos essenciais para a vigilância epidemiológica, pois permite verificar se as metas estabelecidas para cada vacina estão sendo alcançadas e mais ainda, acompanhar a existência de pessoas suscetíveis às doenças imunopreveníveis na população (Pereira, y otros, 2009). Os percentuais de cobertura precisam ser alcançados e mantidos de forma homogênea dentro de cada unidade geográfica. Ressalta-se que a cobertura mínima recomendada pelo ministério da saúde para manter a proteção contra a hepatite B é de

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1er Cuatrimestre 95% 2017 • Año XXI - N.° 47Contudo, foram encontradas coberturas (Araújo, Carvalho, Monteiro, 2012). inadequadas na maioria dos estudos. Observou-se em dois deles, grande variação da

Cultura de los Cuidados

Miscelánea

Notas sobre “el Rostro Enfermo” de Isidoro y Florencio Monje Gil Notes on "the Sick Face" of Isidoro and Florencio Monje Gil Notas sobre a "Cara Doente" de Isidore e Florencio Monje Gil

Biblioteca comentada

Francisco Herrera Rodríguez

Facultad de Enfermería y Fisioterapia. Universidad de Cádiz

Notas sobre “el Rostro Enfermo” de Isidoro y Florencio Monje Gil

ómo  citar  esta  reseña  en  edición  digital:  Herrera-­‐Rodríguez,  F.  (2017).  Notas sobre “el ro Enfermo” de Isidoro y Florencio Monje Gil.  (Cádiz,  1887).  Cultura  de  los  Cuidados   (Edición  digital),  21(47).  Recuperado  de  http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2017.47.18  

Notes on “the Sick Face” of Isidoro and Florencio Monje Gil Notas sobre a “Cara Doente” de Isidore e Florencio Monje Gil

respondencia:  Francisco  Herrera-­‐Rodríguez.  Facultad  de  Enfermería  y  Fisioterapia.  Avda.   Ana  de  Viya,  52.  11009-­‐Cádiz.                                                                                                                                                                                                                                                       Correo  electrónico:  [email protected]   Recibido:  11/08/2016;  Aceptado:  20/12/2016 Francisco Herrera Rodríguez

Facultad de Enfermería y Fisioterapia. Universidad de Cádiz

Cómo citar esta reseña en edición digital: Herrera-Rodríguez, F. (2017). Notas sobre “el Rostro Enfermo” de Isidoro y FlorenRostro enfermo: pinturas universales para comprender las(Edición enfermedades de cio 50 Monje Gil. (Cádiz, 1887). Cultura de los Cuidados digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/ cara y cuello cuid.2017.47.18 Correspondencia: de Enfermería y Fisioterapia. Avda. Ana de Viya, 52. 11009-Cádiz. Madrid: ArtFrancisco Duomo Herrera-Rodríguez. Global, S.L. (120Facultad p). Correo electrónico: [email protected] Isidoro Monje Gil y Florencio Monje Gil (2016) Recibido: 11/08/2016; Aceptado: 20/12/2016

ABSTRACT In this review, the author describes and analyzes the contents of the book “The sick face” highlighting its great pertinence as a source for the history of medicine. Keywords: Iconography, history of medicine, history of nursing, history of art. RESUMEN En esta reseña, el autor describe y analiza el contenido del libro “El rostro enfermo” resaltando su gran pertinencia como fuente para la historia de la medicina. Palabras clave: Iconografía, historia de la medicina, historia de la enfermería, historia del arte. El Rostro enfermo: 50 pinturas universales para comprender las enfermedades de cara y cuello Madrid: Art Duomo Global, S.L. (120 p). Isidoro Monje Gil y Florencio Monje Gil (2016)

RESUMO Nesta revisão, o autor descreve e analisa o conteúdo do livro “O rosto doente”destacando sua grande relevância como fonte para a história da medicina. 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados Palavras-chave: Iconografia, história da medicina, história da enfermagem, história da arte. ¿Se acuerdan del soneto “A una calavera” de Lope de Vega? No me resisto a reproducirlo en el encabezamiento de esta breve nota; como el famoso desahogo de Hamlet, contemplando la calavera de Yorick, el verso de Lope es vibrante y avisador de las falsas glorias que reserva el destino, y de lo efímeros que son los placeres y la belleza: Esta cabeza, cuando viva, tuvo sobre la arquitectura de estos huesos carne y cabellos, por quien fueron presos los ojos que mirándola detuvo. Aquí la rosa de la boca estuvo, marchita ya con tan helados besos; aquí los ojos, de esmeralda impresos, color que tantas almas entretuvo; aquí la estimativa, en quien tenía el principio de todo el movimiento; aquí de las potencias la armonía. ¡Oh hermosura mortal, cometa al viento! ¿En donde tanta presunción vivía desprecian los gusanos aposento? Me acordé de estos versos leyendo el interesante libro “El rostro enfermo”, de Isidoro Monje Gil, doctor en Historia, y de Florencio Monje Gil, licenciado en medicina y cirugía, especialista en cirugía oral y maxilofacial. Feliz hermandad y feliz encuentro de estos dos hombres en el territorio apasionante de la interdisciplinariedad, de “las dos culturas”. Quien tenga la curiosidad de contemplar los cuadros aquí reproducidos y los textos escritos, en edición bilingüe (español e inglés), gran acierto éste, comprenderán que la idea del tempus fugit se apoderara de mi mente y me condujera por los caminos de la lírica 204

1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

barroca del gran y ambicioso Lope. Esto es lo que tiene el arte y la literatura que ofrecen gozo y disfrute, pero a la par reflexión y conmoción que asientan los pies en el suelo ante lo vivido y lo por vivir, tanto personalmente como por los coetáneos y los que nos han precedido. Los autores del libro, cuando lo compusieron, creo que tenían todo esto muy presente porque el encabezamiento de su libro con la siguiente frase de Molière así lo indica: “La belleza del rostro es frágil, es una flor pasajera, pero la belleza del alma es firme y segura”. Pero no solo han tenido presente, pensamos, esa idea del tiempo fugitivo, sino también la del tiempo doliente, ese tiempo que sufren y padecen los humanos por las enfemedades, en esta ocasión con el estigma visible de la misma en esa carta de presentación que llamamos rostro, cara o faz. Los autores, pues, con un eficaz Hilo de Ariadna, nos conducen por el laberinto de la enfermedad a través del arte, la historia y la cultura, estudiando las señales aparecidas desde el nacimiento o a lo largo de la vida en ese espejo de los espejos, o en esa máscara de máscaras que es el rostro humano; máscara que deslumbra de belleza por contener los ojos “violeta” de Liz Taylor, que tanto fascinan a un poeta amigo mío, o máscara que tortura y arruina la vida de Joseph Merrick. Veamos para comprobarlo, por ejemplo, “Cleopatra” (1963) y “The Elephant Man” (1980). Liz Taylor tuvo dos contingencias en el rodaje de esa película: una visible, la traqueotomía, y otra muy tormentosa llamada Richard Burton. Los estragos de la vida fueron poco a poco reflejándose en los rostros de estos míticos actores. Joseph Merrick se pasó toda la vida ocultando su rostro, su identidad preciada, para no ser víctima de la burla y del escarnio de los hombres. La vida, injusta, que otorga y

Cultura de los Cuidados niega dones, no se sabe por qué, la explicación cercana y fácil está en la Genética, pero la ontológica vaya usted a saber dónde hay que ir a buscarla. En fin, rostros que unos califican de hermosos y a otros espantan, como es el caso de “Autorretrato con pelo suelto” (1947) de Frida Kahlo, que tan certeramente eligió Gérard de Cortanze como portada de su libro, “Frida Kahlo. La belleza terrible” (2012). O el inquietante “Autorretrato” de Van Gogh (1888), en el que aparece con el cráneo rapado, la barba desastrada y la mirada perdida y orlada por un verde enfermizo. O ese “Autorretrato” de Goya (1815), que podemos contemplar en el Museo del Prado, lleno de fragilidad humana y de historias de guerras civiles vividas y por vivir. Como diría Lope “¡Oh hermosura mortal, cometa al viento!”. Hago acopio de memoria y pienso en libros predecesores del que aquí reseñamos y que me enseñaron, más o menos específicamente, a fijarme en la “máscara” del hombre; por ejemplo, ese espléndido volumen de cubiertas rojizas, de Salvat editores, “El rostro humano en el arte” (1973), o los artículos publicados por Néstor Luján, en la revista Jano, que felizmente se encuentran recopilados en un libro titulado “En la cabecera de los protagonistas de la Historia” (1992), en el que podemos estudiar los detalles de la famosa escultura “Alejandro agonizante” o la faz pálida y enfermiza que Pantoja de la Cruz retrató en su cuadro de Felipe II ya anciano. Tampoco puedo olvidar el libro de Marino Gómez-Santos, “La medicina en la pintura” (1978), prologado por Carlos Rico-Avello, donde contemplé “La mujer barbuda” de José Ribera “El españoleto”, o el estrabismo divergente de Tommaso Inghirami, en el famoso cuadro de Rafael, o la mirada triste de la niña Eugenia Martínez Vallejo, en

dos lienzos con título común, “La monstrua”, pintados por Juan Carreño de Miranda, cuando esta pequeña tenía cinco años de edad y pesaba 57 kilos. Cuánto me enseñaron estos libros y estos autores nombrados, y cuánto aprendí de la ponencia impartida por Magadalena Santo Tomas Pérez, “Fuentes iconográficas para la investigación de la Historia de la Enfermería”, impartida en el V Congreso Nacional de la disciplina celebrado en Sevilla (2001). Estoy en deuda con todos ellos por sus enseñanzas y ahora también con los autores de “El rostro enfermo”, Isidoro y Florencio Monje Gil. El libro está prologado por Javier Sierra, autor de la novela “El maestro del Prado” (2013), certeramente apunta que algunos médicos han intentado examinar la Historia de los Retratos, como Juan Rof Carballo o el oftalmólogo argentino Omar López Mato, en esta estela se sitúa Florencio Monje, especialista como hemos indicado en cirugía maxilofacial, guiado por el pulso firme de su hermano, historiador, Isidoro Monje. Javier Sierra apunta la clave del libro cuando afirma: “…la irrupción del retrato como reflejo de un individuo iba a traernos mucho más que lo obvio. Detrás de cada representación fidedigna de un ser humano, los artistas nos dieron pistas –consciente o inconscientemente- sobre detalles que hoy solo un examen médico-forense es capaz de interpretar. Ese y no otro es el objeto de este libro. Las bolsas bajo los ojos, el color de la piel del modelo, la textura y densidad de sus cabellos, la forma de la mandíbula o de los labios dan una información preciosa sobre la salud de los retratados y, a veces, sobre aspectos de su día a día que determinaron sus decisiones o sus méritos”. Gregorio Marañón solía hablar de las dificultades de hacer un diagnóstico médico preciso y certero, y esto teniendo 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados al enfermo delante, sometiéndolo a toda clase de propedéuticas clínicas. Si esto es así efectivamente, qué dificultades no tendrá realizar diagnósticos contemplando un cuadro, pongamos por caso “La mujer barbuda” de José Ribera, que en mis seminarios sobre “Arte y enfermedad” insisto en que debemos llamarla Magdalena Ventura y no por ese degradante título que lleva el cuadro. Los autores del libro que glosamos lo intentan con este cuadro y con muchos otros. Pero Javier Sierra en su prólogo recuerda algo muy importante que no debemos perder de vista: “…la enfermedad en el arte no vale solo por lo que retrata sino también por lo que simboliza”. En este sentido el prologuista señala como los hermanos Monje aciertan cuando describen el prognatismo de los Habsburgo; sin duda, sus mandíbulas prominentes fueron un rasgo genético, “pero al tiempo, un atributo inexcusable de su tenacidad y empeño. Curioso asunto este, ya que lo que hoy muchos reducen a la categoría de mal, en otro tiempo fue signo distintivo de reyes y místicos”. Sutil e importantísimo matiz que no debe perderse de vista cuando nos enfrentamos a una obra de arte buscando los perfiles de la enfermedad. Si no, compruébese lo apuntado en dos obras de Rafael Sanzio en que aparecen personajes con polidactilia, seis dedos, o bien en un pie o en una mano, me refiero a “Los desposorios de la Virgen” o a la “Madonna Sixtina”. ¿Hallazgo clínico o simbología religiosa, o ambas cosas? Un libro, pues, de gran interés para los historiadores del arte y para los historiadores de la enfermería que en nuestras clases intentamos que no solo quede reflejada la épica e importancia de la profesión, sino que aparezca en primer término el ser humano enfermo que padece sus cuitas con el tempus fugit pero también con su tiempo doliente, sea cual sea

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1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

la época que le tocó vivir; si no descuidamos este aspecto creo que esparciremos la semilla de la cultura y del cultivo en nuestros alumnos, pero también sembraremos los campos de la empatía, la simpatía y la compasión en unos profesionales que van a desarrollar una de las misiones más nobles que existen, cuidar a los pacientes en los momentos de soledad y sufrimiento que ocasiona la enfermedad. No me cabe la menor duda que a todo esto nos puede ayudar Roger van der Weyden, Leonardo da Vinci, Piero della Francesca, Domenico Ghirlandaio, Andrea del Sarto, Giambattista Tiepolo, Piero del Cosimo, Quentin Massys, Hans Holbein el Joven, Ambrogio de Predis, Rafael Sanzio, Alberto Durero, Sandro Botticelli, José Ribera, Juan Sánchez Cotán, Tiziano, Diego Velázquez, Caravaggio, Rembrand van Rijn, Carreño de Miranda, Brueghel el Viejo, Francisco de Goya, Vicent van Gogh, Giorgio de Chirico, Gustav Klimt, Alastair Adams, etc. Feliz lectura, contemplación y estudio de este excelente libro, seguro que provoca deleite, desazón y discusión ante algunos de los diagnósticos planteados, pero sobre todo seguro que ayuda a mirar con más detenimiento a las “máscaras” en las que tantas presunciones habitaron y habitan, así como los estigmas de la enfermedad.

Cultura de los Cuidados

I Jornada de Historia de la Enfermería: Retrato de la Enfermería en el Ocaso del Siglo XVI Colegio Oficial de Enfermería de Álava. Villa Suso, Vitoria Cómo citar esta reseña en edición digital: Ferreiro-Ardións, M. (2017). I Jornada de Historia de la Enfermería: Retrato de la Enfermería en el Ocaso del Siglo XVI. Cultura de los Cuidados (Edición digital), 21(47). Recuperado de http://dx.doi. org/10.14198/cuid.2017.47.19 Correspondencia: (Remitirse a correo electrónico). Correo electrónico: [email protected] Recibido: Divulgación eventos de historia de la enfermería.

ABSTRACT In this brief review, the author informs us about what happened in the course of the first day of History of Nursing in Álava, which focused on nursing in the late sixteenth century and especially in the presentation of the book: Herrera, a barber surgeon in the plague of 1599 in Vitoria. Key words: History of nursing, history of medicine, history of dentistry, history of surgery. RESUMEN En esta breve reseña el autor nos informa sobre lo acontecido en el transcurso de la I Jornada de Historia de la Enfermería en Álava, que estuvo centrada en la enfermería en las postrimerías del XVI y, especialmente, en la presentación del libro: Maese Francisco de Herrera, un barbero cirujano en la peste de 1599 en Vitoria. Palabras clave: Historia de la enfermería, historia de la medicina, historia de la odontología, historia de la cirugía. RESUMO Nesta breve revisão o autor nos informa sobre o que aconteceu durante o Primeiro Congresso de História da Enfermagem em Álava, que se concentrou em enfermagemno final do décimo sexto e, especialmente, a apresentação do livro: Maese FranciscoHerrera, um cirur-

gião na praga de 1599 em Vitoria barbeiro. Palavras-chave: História da enfermagem, história médica, história dental, história de cirurgia.

Bajo el título “Retrato de la Enfermería en el ocaso del siglo XVI”, el pasado 23 de marzo tuvo lugar en Vitoria la 1ª Jornada de Historia de la Enfermería organizada por el Colegio Oficial de Enfermería de Álava. El lugar escogido, Villa Suso, un palacio renacentista sobre la antigua muralla medieval de la ciudad, arropó una singular mesa presidida por Hosanna Parra, Presidenta del Colegio de Enfermería, y formada por la escritora Toti Martínez de Lezea, el catedrático de la Universidad de Alicante José Siles González y los enfermeros locales Manuel Ferreiro Ardións y Juan Lezaun Valdubieco. Inaugurado el acto por la presidenta del Colegio de Álava, le siguieron las ponencias invitadas en las que Toti Martínez de Lezea introdujo el escenario de la Vitoria renacentista para que José Siles plasmara en él los quehaceres cotidianos de los barberos cirujanos, dando así pie a la presentación del libro “Maese Francisco de Herrera, un barberocirujano en la peste de 1599 en Vitoria” con la que se clausuró la jornada. El libro recoge los esfuerzos de un barbero vitoriano por salvar a la ciudad 1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

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Cultura de los Cuidados de una devastadora epidemia de peste a finales del siglo XVI y fue presentado por sus autores, Manuel Ferreiro y Juan Lezaun. Editado por el Colegio Oficial de Enfermería de Álava, quien lo distribuye desde su sede,

ha sido prologado por José Siles González. La Jornada, correspondida con la presencia de un numeroso público, tiene vocación de repetirse en el futuro y servir de puente entre la enfermería alavesa y sus conciudadanos.

 

Bajo   el   título   "Retrato   de   la   Enfermería   en   el   ocaso   del   siglo   XVI",   el   pasado   2 marzo  tuvo  lugar  en  Vitoria  la  1ª  Jornada  de  Historia  de  la  Enfermería  organizada   Colegio   Oficial   de   Enfermería   de   Álava.   El   lugar   escogido,   Villa   Suso,   un   p renacentista   sobre   la   antigua   muralla   medieval   de   la   ciudad,   arropó   una   singular   presidida  por  Hosanna  Parra,  Presidenta  del  Colegio  de  Enfermería,  y  formada  p   Bajo   el   título   "Retrato   de   la   Enfermería   en   el   ocaso   del   siglo   XVI",   el   pasado   23   de   marzo  tuvo  lugar  en  Vitoria  la  1ª  Jornada  de  Historia  de  la  Enfermería  organizada  por  el   Colegio   Oficial   de   Enfermería   de   Álava.   El   lugar   escogido,   Villa   Suso,   un   palacio   renacentista   sobre   la   antigua   muralla   medieval   de   la   ciudad,   arropó   una   singular   mesa   presidida  por  Hosanna  Parra,  Presidenta  del  Colegio  de  Enfermería,  y  formada  por  la  

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1er Cuatrimestre 2017 • Año XXI - N.° 47

CONSEJO DE ENFERMERÍA DE LA COMUNIDAD VALENCIANA

ASOCIACIÓN NACIONAL DE HISTORIA Y ANTROPOLOGÍA DE LOS CUIDADOS

Facultad de Ciencias de la Salud

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