Crónica de un verano. Dispositivos y pasajes de la protesta en la Ciudad de México

July 4, 2017 | Autor: Israel Covarrubias | Categoría: Mexico, Estado De Derecho, Decretos Ley, Protesta, CNTE
Share Embed


Descripción

artículos de investigación Crónica de un verano. Dispositivos y pasajes de la protesta en la Ciudad de México Israel Covarrubias La educación en el presente y para el futuro Natalia Arellano Vázquez El docente universitario ante las competencias Patricia Altamirano Maciel El descubrimiento de Cho. Un ejemplo de intervención psicoanalítica en la clínica infantil María de Jesús Abrego González Juan Rulfo y la fotografía: una interpretación desde Giorgio Agamben Javier Edgar Tapia Navarro

ensayos La importancia de la clausula penal en los contratos civiles Rodolfo González Maluf La reforma educativa del presidente Enrique Peña Nieto María Soledad Mora Saucedo

RESUMEN El objetivo principal de este trabajo es dilucidar los ámbitos de inteligibilidad de algunas maneras de enunciar y semantizar las protestas (y sus desplazamientos al “campo de fuerza” de la opinión pública) que se derivaron de la reforma educativa a través de la serie de acciones de protesta que dirigió la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) durante los meses de agosto y septiembre de 2013 en la Ciudad de México, por parte de una serie restringida de editorialistas y analistas políticos de los principales periódicos de circulación QDFLRQDO&RQHOORHVWDUHPRVHQSRVLELOLGDGHVGHSHUÀODUORVFRQWHQLGRV y percepciones más recurrentes alrededor de la semántica de la legalidad, el Estado de derecho, el orden político, y su distanciamiento cuando se pretende que coincidan con el terreno histórico de su operativización. Palabras clave: 2SLQLyQS~EOLFDOHJDOLGDGSURWHVWDUHIRUPDHGXFDWLYD CNTE.

 8QDSULPHUDYHUVLyQGHHVWHWUDEDMRIXHOHtGDHQHO&RORTXLR´'HPRFUDFLD\YLROHQFLDµRUganizado por la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, el 31 de octubre de 2014. 2 Doctor en ciencia política por la Universidad de Florencia, Italia. Profesor investigador de tiempo completo en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México y Director editorial de la revista Metapolítica. Ha participado en el área de Formación Humana de la Universidad Salesiana de la Ciudad de México. 1

7

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

Universidad Autónoma de la Ciudad de México [email protected]

I

Dr. Israel Covarrubias2

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

&5Ð1,&$'(819(5$12 ',6326,7,926FXUVLYDVPtDV@ $TXtKD\XQDVXHUWHGH´GHVWLHPSRµGRQGH´HVDRWUD cosa” en el discurso de Mancera aparece como una no-operación de nombramiento de lo que está escondido en la estrategia semántica: la protesta y la situación de desbordamiento social en la capital del país. Sin embargo, no SHUGDPRV GH YLVWD TXH VyOR HVWi IXQGDGR FRPR VXSXHVWR OD ´UHDFFLyQ LQVWLWXFLRQDOµ SRUTXH DSDUHFH FRQ FLHUWD RSDFLGDG HQ IUDVHV FRPR ´1R UHKXLré mis responsabilidades, ni tampoco las consecuencias de mis decisiones”; ´3RUHOORVRPRVÀUPHVHQHOHMHUFLFLRGHOJRELHUQRµ´$QWHKHFKRVFRPRORV que hemos vivido”; expresiones de una acción política que conlleva un dicho DFHUFDGHOXVRHÀFD]GHODIXHU]DOHJtWLPDSRUSDUWHGHODVLQVWLWXFLRQHVS~EOLco-políticas. Además, evoca por el contexto coyuntural en el cual son enunFLDGDV GHVHSWLHPEUHGH HORSHUDWLYRGHGHVDORMR´VLQYtFWLPDVµSRU parte de la Policía Federal en coordinación con la Policía local el viernes 13 de septiembre del campamento que la CNTE mantenía en el zócalo capitalino.

I

Solicitaré de manera respetuosa y coordinada al Gobierno Federal la creación de un Fondo de Capitalidad, orientado al apoyo extraordinario para las y los capitalinos por afectaciones propias a su condición política de esta ciudad” (Mancera Espinosa, 2013 [negritas mías]).

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

Ante hechos como los que hemos vivido, garantizar el desarrollo de las actividades S~EOLFDV\SULYDGDVGHORVFDSLWDOLQRVHVPLWDUHDSHURWDPELpQHVPLUHVSRQVDELlidad fundamental la paz pública.

11

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

Leamos completa la línea de la cual abreva la observación sobre la toleUDQFLD'LFHHO-HIHGHJRELHUQRORFDO´/DWROHUDQFLDHVVtPERORGHIRUWDOH]D nunca de debilidad, la tolerancia encuentra razón cuando hay diálogo constructivo, cuando no se afectan los intereses de terceros3RUHOORVRPRVÀUPHV en el ejercicio de Gobierno”. ¿Qué universo de interpretación está latente en HOSiUUDIR"¢TXpVXJLHUHODLGHDHVSHFtÀFDGHWROHUDQFLDHQODVSDODEUDVGHO Jefe de gobierno del Distrito Federal? Primera hipótesis: es insistente la suposición o sugerencia que coloca a la tolerancia como un dispositivo totalmente inmaterial que a un tiempo permite y contiene a las manifestaciones. Las permite al grado de volver tautológico el arJXPHQWR´£VLVR\WROHUDQWHFRPRJRELHUQRFyPRQRYR\DSHUPLWLUODVPDQLIHVtaciones!”. Es probable que haya un principio político donde la representación TXHHOWLWXODUGHOJRELHUQRORFDOHQDUERODVHDVXÀFLHQWHSDUDGHWHQWDUHOGHUHFKR GHSURPRYHURSURKLELUODVPDUFKDV3HURD~QHVQHFHVDULRHQJDU]DUODVHJXQGD parte del argumento: contiene a las manifestaciones en la medida en que las limita y cerca2EVHUYHPRVODIUDVH´FXDQGRQRVHafectan los intereses de terceros. Por HOORVRPRVÀUPHVHQHOHMHUFLFLRGHO*RELHUQRµ6LKD\DIHFWDFLRQHVHQWRQFHVVX H[SUHVLyQVHUiOLPLWDGDFRLQFLGLHQGRFRQHOHMHUFLFLR´ÀUPHµGHOJRELHUQR¢)LUmeza traduce fuerza?, ¿traduce desalojo o desplazamiento?, ¿qué traduce en térPLQRVGHODHFXDFLyQUHDFFLyQLQVWLWXFLRQDO´VXSXHVWDµ\GHVERUGDPLHQWRVRFLDO" No está claro, el terreno en el que está moviéndose el discurso es ambiguo. Sin embargo, saca a la luz una serie de dispositivosTXHUHVXOWDQ~WLOHVSDUDHODQiOLVLV En las líneas sucesivas aparece la tolerancia desplegada como operación de MXVWLÀFDFLyQGHORTXHHQHOGLVFXUVRHVGHÀQLGRFRPR´HOTXHDWDFDµDODFLXGDG GLFH´DTXtUHLWHURTXHquien ataque a la ciudad, encontrará la respuesta de la ley”. ¿Cómo pasamos en el párrafo precedente de la retórica de la tolerancia al uso de la ley en contra aquellos que atacan a la ciudad?, ¿dónde queda la tolerancia? Segunda hipótesis: la tolerancia deviene una operación política que produce legitimidad a partir de aquel tercero ausente convocado, pero no para fungir FRPRWHVWLJRVLQRSDUDTXHVHDSDUWtFLSHGHOFRQÁLFWRFRQORTXHHOGLVFXUVR quien lo presenta (el Jefe de gobierno) y las instituciones que lo soportan, distribuyen las responsabilidades por los actos o dichos que están publicitando. /HDPRVGHQXHYROD´FRQYRFDWRULDµ´ODWROHUDQFLDHQFXHQWUDUD]yQ>«@FXDQdo no se afectan los intereses de terceros”. ¿Quién es este tercero al que le dirige su discurso el gobierno del Distrito Federal? Es decir, ¿quién es el tercero que se vuelve el depositario de la tolerancia dada la insistencia del llamado? 0iVDGHODQWHGLFH´>«@DORVKDELWDQWHVGHODFLXGDGµ´FDSLWDOLQRVµ

12

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

2WUDYH]´DTXtUHLWHURTXHquien ataque a la ciudad, encontrará la respuesta de la ley”. Si aguzamos la mirada, el interés está puesto en el sujeto contenido en la oración, no en el fenómeno que tiene lugar bajo el rubro ´PDQLIHVWDFLRQHVµUHIHULGRFRQDQWHULRULGDG1RREVWDQWHKD\TXHKDFHUXQD acotación. En el Informe Estadístico al Primer Informe de Gobierno del DistriWR)HGHUDOGHHQODVHFFLyQ´&DSLWDO6HJXUDµWHQHPRVTXHODHWLTXHWD ´PDQLIHVWDFLRQHVµ GHVDSDUHFH (Q VX OXJDU DSDUHFH OD GH ´0RYLOL]DFLRQHV VRFLDOHVµEDMRHOSDUDJXDVGH´&REHUWXUDGHDFWRVPDVLYRVSRUHOHPHQWRVGH la policía”. Dentro de las llamadas movilizaciones sociales, el Anexo EstadísticoFODVLÀFDD ODVPDUFKDV ORVPtWLQHV FRQFHQWUDFLRQHV SODQWRnes; 5) bloqueos; 6) toma de instalaciones; 7) caravanas; 8) asambleas; 9) cita agendada; 10) huelga de hambre, y 11) otros (Secretaría Particular del Jefe de Gobierno, 2013: 261). Tercera hipótesis: el discurso de Mancera tiene que ser vinculado con la reforma que él decretó al artículo 362 del Código Penal para el Distrito Federal en el mes de diciembre de 2012, y que fue publicada el día 27 del PLVPR PHV 0DQFHUD (VSLQRVD    /D UHIRUPD HV VX ´EDVWLGRUµ (Q SDUWLFXODUSRUTXHHO-HIHGHJRELHUQRVXJLHUHTXH´>@WDPELpQHVPLUHVponsabilidad fundamental la paz públicaµ(QWRQFHV¢ODSD]S~EOLFDHVSXHVta en entredicho por aquel que ataca a la ciudad?, ¿por aquel que disiente? Recordemos que el artículo 362 es el apartado jurídico que hace referencia GLUHFWD D ´$WDTXHV D OD SD] S~EOLFDµ$QWHV GH OD UHIRUPD GH 0DQFHUD HO artículo en cuestión decía: ´6HOHLPSRQGUiQGHcinco a treinta años de prisión y suspensión de derechos políticos hasta por diez años, al que mediante la utilización de sustancias tóxicas, por incendio, inundación o violencia extrema, realice actos en contra de las personas, ODVFRVDVRVHUYLFLRVS~EOLFRVTXHperturben la paz pública o menoscaben la autoridad del Gobierno del Distrito Federal, o presionen a la autoridad para que tome XQDGHWHUPLQDFLyQµ /ySH]2EUDGRU>QHJULWDVPtDV@ 

Con la reforma, el artículo queda: ´6HOHVLPSRQGUiQGHdos a siete años de prisión y suspensión de derechos políticos hasta por diez años, a los que mediante la utilización de sustancias tóxicas, por incendio, por inundación o violencia, realicen actos en contra de las personas, de ORVELHQHVS~EOLFRVRVHUYLFLRVS~EOLFRVTXHperturben la paz pública.

13

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

La reincidencia se estará a lo que establezca éste Código” (Mancera Espinosa 2012: 3 [negritas mías]).

Los cambios no son menores. La reducción de la condena es sustituida SRUODSRVLELOLGDGGHODUHSHWLFLyQ ´/DUHLQFLGHQFLDVHHVWDUiDORTXHHVWDEOH]FDpVWH&yGLJRµ /D´YLROHQFLDH[WUHPDµTXHGDVyORFRPR´YLROHQFLDµ GHVDSDUHFHHO´PHQRVFDERµDODDXWRULGDGGHO*RELHUQRGHO'LVWULWR)HGHral. Esta reforma fue puesta en marcha como efecto de los disturbios que pasaron el 1 de diciembre en la toma de posesión de Enrique Peña Nieto; con el cambio legal se logró la libertad bajo fianza de los sujetos (muchos GHHOORVHVWXGLDQWHVHQWRWDO TXHKDEtDQSDUWLFLSDGRHQODV´PDQLIHVWDciones” (disturbios) de ese día. El artículo reformado fue redactado en 2002 \FRQWHQtDXQD´HVFULWXUDFLyQµSUy[LPDDOGHOLWRGHWHUURULVPRGHO&yGLJR Penal Federal (Nava Garcés, 2013: 190-191). ¿Cuál era la disyuntiva de aquel momento que hizo necesaria la reforma del artículo? Pocos días después de publicada la reforma en 2012, Soledad /RDH]D  DGYHUWtDHOiQJXOR´PXHUWRµGHODUHIRUPDDODUWtFXORHOLQcremento en la variabilidad de la decisión política; en ocasiones, estas oscilaciones pueden volverse una excepción (¿fuera de la norma sin encontrarse fuera de la ley?) con el objetivo de garantizar una salida de continuidad en el cambio forzado al ordenamiento jurídico, consecuencia de la pretensión más política que normativa de la aplicación irrestricta de la ley, en un caso (o en casos) con una enorme publicidad donde la exigibilidad del empleo (y vigencia) de la norma terminan siendo el problema y no la solución. En efecto, la indicación de Loaeza ubica el argumento en su cara no revelada en el discurso de Mancera, dimensión presente a pesar de no ser visible: la proporcionalidad o desproporcionalidad en la aplicación de la ley (por ello el FDPELRGH´YLROHQFLDH[WUHPDµ\VXWLSRORJtDDODVXVWDQFLDOL]DFLyQGH´YLRlencia” a secas). A su vez, este aspecto cuantitativo está relacionado con el incremento también de naturaleza cuantitativa (véase el llamado al censo GHODV´PDQLIHVWDFLRQHVµ SURGXFWRGHODLQWHQVLILFDFLyQGHFLHUWRVconflictos que escapan a la inhibición de la norma. $VtSXHVDSDUHFHQGLYHUVRVQLYHOHVGHGLVFXUVLYLGDGTXHDFW~DQFRPR fuentes para el análisis de la opinión p~EOLFDTXHVXUJHGHHVWHHVWDGRGH FRVDV D SHVDU GH TXH OD DPELJHGDG GH OD ´FRVDµ TXH KD SURGXFLGR ODV VHPiQWLFDVQRHVUHGXFLGD'HKHFKRVLJXHVXFXUVRGRQGHKDFHDFWR´VLlencioso” de presencia en todo nuestro alegato.

14

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

Con los dichos expuestos del Jefe de gobierno, ahora podemos dar un paso PiVDOREVHUYDUORVXPEUDOHVGHVLJQLÀFDFLyQGHDOJXQDVRSLQLRQHVTXHVH YHUWLHURQ HQ GLVWLQWRV SHULyGLFRV ´QDFLRQDOHVµ VREUH HO DVXQWR 7RPHPRV como punto de partida la opinión del periodista Ricardo Alemán, publicada el 15 de septiembre de 2013 en el periódico El Universal, donde hace referencia al operativo policiaco en el zócalo del Distrito Federal del viernes 13 anterior:

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

3. VERSIONES Y PERVERSIONES EN EL CAMPO DE LA OPINIÓN PÚBLICA

´7DUGHPX\WDUGHODVLQVWLWXFLRQHVGHO(VWDGRPH[LFDQRVHDWUHYLHURQDFXPplir su responsabilidad y hacer valer el uso de la fuerza legítima y legal contra aquellos que amenazan la estabilidad política, económica y social; contra maÀDVFRPROD&17(TXHOHVLRQDQGHUHFKRV\OLEHUWDGHVGHODVPD\RUtDV\TXH²HQ ULJRU²VRQXQULHVJRPD\RUSDUDODGHPRFUDFLDPH[LFDQD 7DUGHPX\WDUGHORVWLPRUDWRV\WHPHURVRVJREHUQDQWHVPH[LFDQRV²GHORVWUHV yUGHQHV GH JRELHUQR \ ORV 7UHV SRGHUHV GH OD 8QLyQ² HQWHQGLHURQ TXH HO XVR OHJtWLPRGHODIXHU]DS~EOLFDSDUDJDUDQWL]DUODHVWDELOLGDGGHO(VWDGR\SUHservar los derechos y libertades de las mayorías no es una ocurrencia, tampoco una utopía y menos una decisión pecaminosa.”

Dos párrafos adelante, agrega: ´7DUGH HQWHQGLHURQ 3HxD 0DQFHUD \ OtGHUHV SROtWLFRV \ OHJLVODGRUHV TXH XQD PLQRUtDGHGL]TXHPDHVWURVGHDQDUTXLVWDVTXHEXVFDQPDWDUSROLFtDV²EDVWD YHUORVYLGHRV²\GHYLYLGRUHVGHODSROtWLFDODSURWHVWD\ODH[WRUVLyQQRSXHden someter al Estado, a gobiernos electos de manera democrática y menos a las instituciones formal y legalmente constituidas. Tampoco pueden usar como ´HVWUDWHJLDGHOXFKDµFDXVDUHOPD\RUGDxRDORVFLXGDGDQRVHQJHQHUDO Tarde entendieron que los grupos que desestabilizan y dañan a miles de ciudadanos deben ser sometidos al imperio de la ley y al castigo de la justicia. 7DUGHHQWHQGLHURQTXHQDGDMXVWLÀFDODLPSXQLGDGTXHGHVGHHO(VWDGR\SRU DxRVEULQGyDPDÀDVFRPROD&17(DODTXHQDGDLPSRUWDODHGXFDFLyQ\OR que busca, en realidad, es mantener un puñado de prebendas y privilegios” (Alemán, 2013).

La tonalidad del artículo es circular. No hay variaciones, ya que es claro que la CNTE no resulta de su agrado analítico, mucho menos político. A pesar de su virulencia semántica, contiene todos los elementos para ser un ejemplo

15

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

de la disolución del proceso ordenativo de la política al tiempo que indica el advenimiento del momento de polemización de lo político. 2EVHUYHPRVODHVWUDWHJLDGHOSHULRGLVWDTXHDGLIHUHQFLDGHODGHO-HIHGHJRELHUQRLGHQWLÀFDHQVXDOHJDWRDOVXMHWRFRQXQ´QRPEUHSURSLRµDOGLULJLUVX ´FUtWLFDµDORTXHOODPD´PDÀDVFRPRODGHO&17(µ´XQDPLQRUtDGHGL]TXH PDHVWURVµ´DQDUTXLVWDVTXHEXVFDQPDWDUSROLFtDVµ´YLYLGRUHVGHODSROtWLFDOD SURWHVWD\ODH[WRUVLyQµ£9D\DVHPiQWLFDORTXHHVWiHQVXWRWDOLGDGDXVHQWHHQHO GLVFXUVRGH0DQFHUDVHYLVLELOL]DDSOHQLWXGHQHOGH$OHPiQ2EVpUYHVHDGHPiV HO´XVRFRP~QµGHOOODPDGRDOHMHUFLFLR´OHJtWLPRGHODIXHU]DS~EOLFDµ\DTXH IUHQWHD´ORVJUXSRVTXHGHVHVWDELOL]DQ\GDxDQDPLOHVGHFLXGDGDQRVGHEHQVHU VRPHWLGRVDOLPSHULRGHODOH\\DOFDVWLJRGHODMXVWLFLDµ'HQXHYR´ODUHVSXHVWD de la ley” que viene de muy lejos, pues se puede argüir que Ricardo Alemán, al igual que Miguel Ángel Mancera, así como el prócer de la patria, Don Benito -XiUH]LQGLFDQXQDOtQHDVHPiQWLFDFRPSDUWLGDTXH´1DGDSRUODIXHU]DWRGR por la razón y el derecho”. Pero, ¿no hay una contradicción de términos? Es decir, ¢HOHXIHPLVPR´1DGDSRUODIXHU]DWRGRSRUODUD]yQ\HOGHUHFKRµQRWHUPLQD por descarrilar cualquier lógica procedimental del campo semántico? Si separamos sintácticamente la oración y la colocamos con el reclamo del periodista que GHVOL]DOtQHDVDGHODQWH¢TXpOXJDURFXSDHO´1DGDSRUODIXHU]DµVL´ODUHVSXHVWD GHODOH\µRHO´VRPHWLPLHQWRDOLPSHULRGHODOH\µVXSRQHSUHFLVDPHQWHHOXVR OHJtWLPRGHODIXHU]D"$GHPiVVLJXHVLHQGRFRQYRFDGRXQWHUFHURDXVHQWH´PD\RUtDVµ´FLXGDGDQRVHQJHQHUDOµ&RQPXFKDSUREDELOLGDGHVODFRQVWDQWHTXH aglutina a las opiniones, al grado de volverse el nudo ciego de ellas. ¿En qué sentido son un ejemploHVWRVIUDJPHQWRV"(OYRFDEOR´HMHPSORµWLHQH GRVYDULDQWHVXQDHVODTXHGHÀQHDOexemplar (modelo); la otra, es subsidiaria, aparece bajo el rubro del exemplumHQWHQGLGRFRPR´ODFRSLDODUHSURGXFFLyQµ (Derrida, 1998: 20). Luego entonces, el artículo de Ricardo Alemán es una ilustración de esta segunda acepción, desde el momento que expresa el punto de la quiebra del rasgo paradigmático de la política cuando alude de manera discrecional, incluso irracional, el uso de la épica de la ley y el derecho a través del UpJLPHQGHODRSLQLyQS~EOLFD ´KDFHUYDOHUHOXVRGHODIXHU]DOHJtWLPD\OHJDO contra aquellos que amenazan la estabilidad política, económica y social”). En VtQWHVLVHVORSROtWLFRGHODSROtWLFDLQVWLWXFLRQDOORTXHDÁRUDHQODVREVHUYDFLRQHV de Ricardo Alemán. Una dimensión de lo político que produce un efecto de menoscabo del suelo social y no de la autoridad, porque recordemos que en términos semánticos ésta desapareció con la reforma al artículo mencionado del Código Penal local, con lo que funge como contenedor del código escritural de la ley.

16

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

´>«@ODVHVWUXFWXUDVFOLHQWHODUHVVREUHYLYLHURQ\SRUORTXHVHYHFRQODVSURtestas de la CNTE en el DF, siguen vivitas y coleando. Frente a este escenario sorprende la respuesta tanto del gobierno federal como del gobierno de la CiuGDGGH0p[LFR(OVHFUHWDULRGH*REHUQDFLyQ0LJXHOÉQJHO2VRULR&KRQJKD dicho que no se permitirán actos de violencia. ¿Y la violencia de los miembros de la CNTE qué? El Jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, después de estar escondido un par de días mientras la CNTE generaba caos en la CiuGDGGH0p[LFRÀQDOPHQWHVDOLyDGHFLUWtPLGDPHQWHTXHKDEtDTXHFRQYRFDUD XQD´PHVDGHGLiORJRµ(VRVtGHXVDUODIXHU]DS~EOLFDQDGD4XHORVPLOORQHV GHFDSLWDOLQRVVHDJXDQWHQ)LQDOPHQWHHVRGHO´HVWDGRGHGHUHFKRµDQDGLHOH LPSRUWD'HKHFKRHOGLVFXUVRGH0DQFHUDFRPRHOGH2VRULR&KRQJVHSDUHFH PXFKRDOGH/ySH]2EUDGRUODOH\VHSXHGHYLRODUVLHPSUHTXHVHDGHPDQHUD SDFtÀFDµ

I

Ahora léase la opinión del profesor de ciencia política Jorge Chabat. En dos artículos que le dedica al tema llega a rozar los términos del periodista Alemán:

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

&XULRVDIRUPDGHUHDSDULFLyQGHOD´GLVPLQXFLyQµTXHDKRUDODHQFRQWUDPRV relacionada con el suelo social y las narrativas que producen frente a una autoridad abstraída.

Más adelante, su alegato de pronto se precipita a un callejón sin salida: ´&LHUWDPHQWHHOGLOHPDTXHHQIUHQWDQHOJRELHUQRGHO')\HOJRELHUQRIHGHUDO frente a los contingentes de la CNTE no es fácil. En cualquier democracia consolidada, el gobierno defendería los derechos de los ciudadanos enviando a la IXHU]D S~EOLFD 3DUD HVR H[LVWH OD SROLFtD 6LQ HPEDUJR GDGR TXH ORV SROLFtDV mexicanos son francamente incapaces de ejercer su función sin violar derechos humanos, muchos gobernantes se abstienen de cumplir con su obligación básica de dar seguridad. Lo lamentable es que las policías presentan este problema desde hace décadas y no parece que haya esfuerzos para cambiar esta situación. El resultado no podría ser más lamentable: gobiernos escondidos bajo la cama, llamando tímidamente al diálogo con la esperanza de que los poderes fácticos recapaciten y les perdonen la vida a los ciudadanos” (Chabat, 2013).

De nueva cuenta un tercero que no habla ni observa, más bien hablan en su nombre al grado de volverlo por repetición en el actor central de este WHDWURGHEORTXHRV\DOFREDV´ORVFLXGDGDQRVµ´4XHORVPLOORQHVGHFDSLWDlinos se aguanten”. En conjunto, una insistencia que se une a la de Mancera, $OHPiQ\DOFDQ]DGHQXHYDFXHQWDD-XiUH]´(QFXDOTXLHUGHPRFUDFLDFRQ17

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

Días después el académico regresa al asunto:

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

solidada, el gobierno defendería los derechos de los ciudadanos enviando a ODIXHU]DS~EOLFD3DUDHVRH[LVWHODSROLFtDµ¢'HTXLpQHVHOSUREOHPD"¢D TXLpQ OH FRPSHWH UHVROYHU HO SUREOHPD GH UHVWLWXLU OD SD] S~EOLFD" /D TXH SDUHFHXQDLURQtDWHUPLQDSRUGHÀQLUORVPDUFRVGHODFRQWHFLPLHQWRLQFOXVR el régimen de la opinión no puede sustraerse de la situación donde el actor FHQWUDOVLJXHVLQSURQXQFLDUSDODEUD ´PLOORQHVGHFDSLWDOLQRVµ SHURIUHQWH al cual los señalamientos siguen su parábola hasta llegar al desliz de abierto FDUiFWHUVH[XDO´JRELHUQRVHVFRQGLGRVEDMRODFDPDµ ´1RUHFXHUGRHQORV~OWLPRVTXLQFHDxRVXQMHIHGH*RELHUQRGHOD&LXGDGGH 0p[LFRWDQYDSXOHDGRSRUODRSLQLyQS~EOLFDFRPR0LJXHOÉQJHO0DQFHUD6X ausencia ante el caos cotidiano provocado por los profesores de la CNTE ha OOHYDGR\DDTXHDOJXQRVODQFHQHQODVUHGHVVRFLDOHVOD´$OHUWD$PEHUµSRUHO Jefe de Gobierno pues desde que los profesores hicieron acto de presencia está prácticamente desaparecido. De hecho, después de dos semanas de complacencia ante las manifestaciones, bloqueos y vandalismo de la CNTE, salió a decir que pagaría el ‘costo político’ por no generar violencia. Esto es, por no aplicar la ley” (Chabat, 2013a).

El 5 de septiembre, Agustín Basave escribe en términos similares a los del primer artículo de Chabat, sólo que cambia el orden de los factores: primero se detiene en el problema en el uso de la fuerza por parte de las policías, OXHJRDERUGDODFXHVWLyQ´GHIRQGRµTXHLGHQWLÀFDFRQORTXHOODPD´HVTXLzofrenia estructural”: ´&XDQGRXQDRUJDQL]DFLyQSRSXODUVDOHDODFDOOHQXHVWUDVSROLFtDVVHOLPLWDQD contener la embestida de los manifestantes, y cuando las cosas se desbordan y tienen que usar la coacción pasan al otro extremo, el del cobro de agravios que implica golpizas y detenciones arbitrarias. Por eso el trato que las autoridades PH[LFDQDVGDQDODVPRYLOL]DFLRQHVVRFLDOHVVXHOHÁXFWXDUHQWUHODOHQLGDG\HO H[FHVRGHYLROHQFLD>«@'HVGHDUULEDVHDSR\DODHYDOXDFLyQDOPDJLVWHULR\HO despido de quienes no aprueben los exámenes con un argumento igualmente válido: nuestra educación es muy mala y mientras las plazas se compren o se hereden y los malos maestros sigan ahí no saldremos del subdesarrollo. ¿Quién tiene la razón? ¿Hay que acabar con el capitalismo o mejorar la calidad de la enseñanza dentro de los cánones liberales? ¿Lucha de clases o clases de lucha? En medio del debate hay un imaginario colectivo que se encoge de hombros, oscila pendularmente y apuntala la contradicción. Tengo la impresión de que, en general, la clase media respalda la reforma, repudia las marchas que des-

18

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

´>«@HORWURLQWHUSHODGRHVHOJRELHUQRGHO')TXHVHKDFRQYHUWLGRHQXQDHVpecie de comité de bienvenida, con edecanes incluidas, para los manifestantes de todo el país. Los bloqueos a céntricas avenidas, estaciones del Metro e incluVRDO%RXOHYDUG3XHUWR$pUHR>«@HVXQGHVDItRDELHUWRDVXDXWRULGDG\DVX capacidad de establecer orden en la ciudad. El costo que pagan los ciudadanos SRUHVWDDUELWUDULHGDGPDJLVWHULDO²FRPELQDGDFRQODLQFDSDFLGDGGHOJRELHUQR de la ciudad para hacer valer la razón (que no la represión) y usar los recursos que todo gobierno civilizado tiene para despejar, sin derramamiento de sangre \VLQYLRODUGHUHFKRVKXPDQRVODVDUWHULDVGHXQDXUEH²HVDOWRµ &XU]LR 

I

Por su parte, el 24 de agosto Leonardo Curzio escribe:

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

quician su vida cotidiana y, sin embargo, movida por un remordimiento de FRQFLHQFLDDFDEDMXVWLÀFDQGRDORVUHEHOGHV(VXQDHVTXL]RIUHQLDHVWUXFWXUDOµ (Basave, 2013).

0HQRVYLQFXODEOHFRQODYHUVLyQRÀFLDO5RJHU%DUWUDHVFULEHHOGHVHStiembre: ´/DVPDUFKDV\EORTXHRVGHOD&17(HVWiQRFDVLRQDQGRYDULRVHIHFWRV(QSULmer lugar, estimulan una cohesión en torno al gobierno, especialmente de las clases medias, que ven con temor y repugnancia las manifestaciones rijosas de los maestros. La CNTE, con sus provocaciones, ha resultado un peculiar agente legitimador del gobierno de Peña Nieto, y ha estimulado en muchos el deseo de reprimir las protestas callejeras. En segundo lugar, está ocasionando serios problemas a la izquierda, ya que mucha gente ve con malos ojos las relaciones (sean mediadores o de apoyo) del PRD con la CNTE. El asunto además ha ahondado las divisiones que fracturan a ese partido. Y hay que agregar los disgusWRVTXHRFDVLRQDOD&17(DOPRYLPLHQWRHQFDEH]DGRSRU/ySH]2EUDGRUTXH ahora parece como el bloqueador bloqueado, pues los maestros impidieron que realizase su mitin del pasado domingo en el Zócalo” (Bartra, 2013).

8QGtDGHVSXpVGHOLQIRUPHGH0DQFHUD-HV~V6LOYD+HU]RJ0iUTXH]SUHcisa una parte del alegato que intentamos desarrollar en este artículo: ´>«@ HO GHVDFXHUGR PH[LFDQR GH ODV ~OWLPDV GpFDGDV YD PiV DOOi GH OD GLVcrepancia. Hemos vivido una polarización profunda que incluso obstruye el FRQÁLFWR>«@/DVEDWDOODVGHOSHWUyOHR\ODHVFXHODKDQGHMDGREXHQWHVWLPRQLR de esta guerra civil fría. Se trata, sin duda, de episodios importantes de nuestra YLGDS~EOLFD>«@ORTXHPHLQWHUHVDGHHVDSROpPLFDQRVRQDTXtORVDUJXPHQtos, sino el tono de los argumentos; no la polémica sino el retrato de los pole-

19

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

mistas. Los días recientes pueden ubicarse como días de vergüenza nacional. No lo digo por la ocupación de la plaza central del Zócalo. Lo digo por la ebuOOLFLyQGHOUDFLVPR\GHOFODVLVPRGHHVWDVMRUQDGDV>«@/RVLQGLRVORVQDFRV ORVVXFLRVORVLJQRUDQWHVORVÁRMRVTXHGHWLHQHQHOSURJUHVRGHODQDFLyQ(VRV morenos que han bajado de las montañas para manchar una plaza que necesita ser desinfectada. Para nuestros racistas que sonríen en las páginas de sociales y refunfuñan en sus camionetas, México debe ser limpiado, blanqueado, civilizado. Lo digo también por el resurgimiento del discurso del patriotismo excluyente: quienes no concuerdan con nosotros son antipatriotas, traidores a la patria” (Silva-Herzog Márquez, 2013).

En su conjunto, estas percepciones operan como los preliminares de una querella por la monopolización del universo de la interpretación, que dirige \GRVLÀFDODGLVSXWDSRUHO´FRQWUROµGHODQDUUDFLyQGHXQ´IXWXURDOWHUQRµ DOXQLYHUVRFRQWUDGLFWRULRYLUXOHQWR\FRQÁLFWLYRGHODVSURWHVWDVVHDQOODPDGDV´DFWRV HQ FRQWUD GHµ SRU OD OH\ ´DTXHOORV TXH DPHQD]DQ OD HVWDELOLdad política, económica y social” en la opinión del periodista Alemán y de DOJXQRVDQDOLVWDV´PDQLIHVWDFLRQHVµHQHOGLVFXUVRGHO-HIHGHJRELHUQRGH ODFDSLWDO7RGRVFRQFXUUHQDXQPLVPRÀQGHVSOD]DUORVHYHQWRVKDFLDXQ IXWXUR´RWURµTXHWRPHGLVWDQFLDGHODVQDUUDFLRQHVTXHKDQWHQLGROXJDUHQ el tiempo presente a partir de inicios de agosto y que recorren todo el mes de septiembre de 2013 en la capital mediante el mecanismo del bloqueo de calles y avenidas principales. Para aquellos que enarbolan el aspecto épico de la ley, es una ironía que casi terminan por convencerse que el problema es la ley y su aplicación. En este sentido, el sociólogo Fernando Escalante Gonzalbo (2013) escribe HOGHDJRVWR´1RSLHQVRTXHKXELHVHWHQLGRTXHPDQGDUDORVJUDQDGHURV para liberar el aeropuerto —es posible que el resultado hubiera sido peor. Pero su responsabilidad básica es con los habitantes de la ciudad. Nadie pide una masacre, ni tendría por qué producirse, pero sí que el jefe de gobierno SRUORPHQRVPDQLÀHVWHVXHQRMRHQQRPEUHGHORVFDSLWDOLQRVµ 5HVXOWDQLQVWUXFWLYDVODVSDODEUDVGHOMXULVWD5REHU&RYHU  ´(O derecho puede ser concebido como un sistema en tensión o como un puente que une un concepto de la realidad con una alternativa imaginada —es decir, es una conectividad entre dos estados de cosas, que sólo pueden ser UHSUHVHQWDGDVHQVXVLJQLÀFDGRQRUPDWLYRDWUDYpVGHODVKHUUDPLHQWDVGHOD narrativa—”. Un fenómeno poco original, pero que indica la vieja tentación

20

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

GHOLQWHQWRSRU´>«@UHFRQFLOLDUODVKLVWRULDVGHODUHJODFUHDQGRH[FHSFLRQHV o señalando circunstancias que aparten el caso de la regla” (Cover, 2002: 41). +DEUtD TXH SRQHU DWHQFLyQ D OD UHSHWLFLyQ GHO OODPDGR ´XVR OHJtWLPR GH OD fuerza” en el contexto social y político de las protestas de la CNTE, ya que DSDUHFHXQDFRLQFLGHQFLDHQWUHODVHULHGHIRUPDVGH´WRPDUODSDODEUDµTXH exacerban el carácter épico de la ley en coincidencia con el abaratamiento de la lengua y la semántica por aquellos agentes que toman la palabra y opiQDQHQWRUQRDORVSUREOHPDV´FRPXQHVµTXHVHHVWiQSXEOLFLWDQGRFRQFLHUWD potencialidad, pero que distan de estructurar un campo funcional de lo que &RYHUOODPDED´MXULVSRWHQFLDµHVWRHVXQOODPDGRDYLYLUDWUDYpVGHODOH\ y las normas que se alejaría (o por lo menos sería esperable ese alejamiento) de observarlas como un amplio universo de sofocamiento (Cover, 2002: 31). $KRUDELHQ¢GHTXpHVVtQWRPDODFRLQFLGHQFLDGHODYHUERUUHDS~EOLFD\OD pSLFDGHODOH\"¢HVXQRGHORViQJXORV´PXHUWRVµGHQXHVWURDXWRULWDULVPR\ de su transferencia a nuevas modalidades semánticas? Una primera interpretación de este micro-fenómeno es que el papel que desempeña el uso de la fuerza (y su llamado sistemático) para reforzar el sentiPLHQWRHVSDFLDO\DIHFWLYRGHVHJXULGDGHQODOyJLFDGH´IURQWHUDVµLQWHUQDVGHO orden político (en este caso, en la Ciudad de México) es imprudente. Al no ser VXÀFLHQWHODMXVWLÀFDFLyQGHOJRELHUQRGHO'LVWULWR)HGHUDOFXDQGRVHFRQÀHUH VXPRQRSROLRHO´XVRSUXGHQWHGHODIXHU]DµWHUPLQDVLHQGRXQRGHORVSURblemas esenciales para el gobierno porque afecta el consenso ganado —y no se olvide que no es poca cosa organizar nichos de consenso—, la legitimidad en la DFWXDFLyQJXEHUQDPHQWDO\ODFRQÀDQ]DHQODVHVWUXFWXUDVGHODUHSUHVHQWDFLyQ política, con lo que la necesidad de diferenciación entre lo prohibido y lo perPLWLGRVHUHODWLYL]D\TXL]iSXHGHYROYHUVHVXSHUÁXDVXGLVWLQFLyQ 0HUULDQ 1986: 11-37). Lo mismo sucede con los intentos de expansión del orden legal a ORViPELWRVFXOWXUDOHVGHODVLQVWLWXFLRQHVS~EOLFRSROtWLFDVFXDQGRQRHVSRsible establecer una relación directamente proporcional entre mayor respeto a la política de la prohibición desde el punto de vista social, y contextos de crecimiento institucional en los niveles de democracia generados.

4. LA CLANDESTINIDAD DE LA OPINIÓN (OÀOyVRIR\HFRQRPLVWD$OEHUW2+LUVFKPDQ  VXJLHUHTXHKD\ELHQHV TXH GLVWDQ PXFKR GH ´SRUWDUVH ELHQµ (V GHFLU ELHQHV TXH VXSRQHQ HO reconocimiento y la potestad institucional en función de las ideas jurídicas y

21

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

políticas que se tengan o que se quieran acentuar con relación al llamado inWHUpVS~EOLFR(QHVWHVHQWLGRHVSUREDEOHTXHHOSDVDMHTXHKHPRVWRPDGRHQ FRQVLGHUDFLyQGHOGLVFXUVRGH0DQFHUDH[SUHVHXQ´DWDTXHIURQWDOµDODVPRYLOL]DFLRQHVVRFLDOHVFXDQGRVHUtDPiV~WLOXQD´HVWUDWHJLDLQGLUHFWDµ +LUVchman, 1996: 99-100). Además, el autor sugiere que tener opiniones (propias) es un bien relacionado con la calidad de vida, y en general es una problemática descuidada de las funciones y necesidades individuales, sobre todo SRUTXH´1RWHQHURSLQLRQHVHVSXHVVLQWRPiWLFRGHXQDFDUHQFLDEiVLFD\ de un predicamento desesperado” (Hirschman, 1996: 93). Recordemos que 0DQFHUDMDPiVVHUHÀHUHDOD&17(SRUVXQRPEUH ´$QWHKHFKRVFRPRORV que hemos vivido”), lo que abre un momento de pasaje en su discurso; corrobora —más que celebrar— la asimetría entre la cosa nombrada y el universo VHPiQWLFRGHVXH[SDQVLyQGRQGHHV´RWUDFRVDµDTXHOORTXHVHQRPEUD(VWH punto de fuga que desvía nuestra atención es un esfuerzo por la invención GHXQDÀFFLyQGHOFRQVHQVRGHXQDFXHUGRGHODPD\RUtD´/DVDIHFWDFLRQHVD ODYLGDFRWLGLDQDGHODFLXGDGJHQHUDQMXVWLÀFDGDLQGLJQDFLyQ>«@DODV\ORV capitalinos mi expresión solidaria con toda responsabilidad”. Sin embargo, también establece una serie de parámetros alrededor de ese pasaje hacia la clandestinidad que está presente y, por paradójico que parezca, es visible en la VXSRVLFLyQGHODH[LVWHQFLDGHXQFRQVHQVRFRQWUDULRDODV´PDQLIHVWDFLRQHVµ 0iVD~QVLDEULPRVORVSDVDMHVTXHSXHGHQVXFHGHUVHHQORVHQXQFLDGRV TXHGHÀQHQDWUDYpVGHODLQWHUGLFFLyQGHOQRPEUHSURSLR³ORTXHVXSRQH tal parece, una disolución o negación a que un agente responda a través del OODPDGRGHLGHQWLÀFDFLyQFRQXQDVLJODRQRPEUHSURSLR³HQFRQWUDPRVXQ ´VHFUHWRDYRFHVµTXHVHGHUULWHSRUVHUHVFXFKDGRREVHUYDGR\FRQWHVWDGR una clandestinidad o, mejor dicho, un anonimato que opera hacia el agente IXVWLJDGRUGHORUGHQSROtWLFR\VREUHWRGRGHOGHUHFKRGHOWUDQVH~QWHHVGHcir, del derecho de circulación (Aguayo, 2013). 3DUHFLHUDFRPRVLHOUpJLPHQGHODRSLQLyQS~EOLFDVHHVWDEOHFLHUDSRUPHdio de dispositivos enquistados en una dimensión persuasiva que no tiene mucho interés en abrir el universo de las opiniones propias a su dimensión GHPRVWUDWLYD\DTXHHO´QRPEUDUVLQQRPEUDUµSXHGHVHUOHtGDFRPRXQD YDULDQWHSROtWLFDGHOIHQyPHQRGHO´QRPEUDUHQVHFUHWRµSURSLRGHODFODQdestinidad y de los acontecimientos que en general se le pueden vincular mediante los mecanismos que lubrican el campo de accesibilidad a esa realidad cerrada, con mucha probabilidad reservada, pero que hace las veces de RSHUDGRUOyJLFRHKLVWyULFRGHOD´H[WUDOHJDOLGDGGHOGHVWLQRµ &RYHU

22

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

De tal modo, podríamos lograr un primer nivel general de inteligibilidad de los juegos de poder y lenguaje presentes en el fenómeno que estamos describiendo, que proyecta una serie de dispositivos que se repiten para hacer de la protesta el reverso absolutoGHODOH\HOOODPDGRDO´XVROHJtWLPRGHODIXHU]DµDFW~Dcomo si la ley fuera garantía total, por su parte, de la coexistencia ´SDFtÀFDµcomo si el Estado de derecho apareciera al momento de ser invocado en los discursos y las opiniones; como si fuera posible el establecimiento de determinaciones férreas acerca del orden social y de sus vínculos con los sujetos; y como si la moral y la verdad fueran categorías de uso corriente en la OHQJXD´FRP~QµGHORSROtWLFR

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

45); además, sirve para dimensionar en el suelo social la narrativa alrededor de la ley y el derecho, incluso más allá de la publicidad de sus épicas. El obMHWLYRHVFODURFRPRELHQGHVFULEH/RXLV0DULQSXHVVHWUDWDGH´KDFHUFUHHU con posibilidades de éxito, en la validez de una descripción que permita al lector sustituir los símbolos abstractos por letras, por nombres que designan a individuos singulares, y que de esta manera construya una historia singular HQVtPLVPDVXSURSLDKLVWRULDTXHFRQÀUPHDOPHQRVHVTXHPiWLFDPHQWH PLVDÀUPDFLRQHVµ 0DULQ 

En suma, son gestos, actos y sentencias de una manera logocrática de estaEOHFHUSDWURQHVS~EOLFRVGHUHSURGXFFLyQ/RFXULRVRHVTXHODIyUPXODDÁRUD en los distintos lugares desde donde se enuncia, describe y querella la cuestión de la protesta en secreto, ya que no es clara la expresión de este llamado obsesivo a la ley. Si es el consenso lo que se juega con los desplazamientos semánticos y la repetición de adjetivos y usos políticos de las palabras, por ejemplo, vincular en ciertos medios de comunicación e información a los maestros de la CNTE FRQYiQGDORVDXQDGRDOHIHFWR´ORJRFUiWLFRµGHODFDOLGDG\HIHFWLYLGDGGH la ley, entonces la reproducción de nuestro Estado de derecho termina por reconocer la impotencia que la construcción del consenso produce al salirse GHOiPELWRGHXQDRSLQLyQS~EOLFDTXHLQWHQWDYROYHUVHSUHGRPLQDQWHVREUH el campo de fuerzas de su manifestación y que intenta además disimular a través de las repeticiones para terminar sustituido casi por completo por la lógica de las equivalencias, cuyo principio identitario es conocido desde el FRPLHQ]R´D Dµ&RQHVWHSULQFLSLRHOMXHJRGHODRSLQLyQWHUPLQDHQXQ punto muerto, pues la suma siempre da cero. Q

23

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

I

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

5. BIBLIOGRAFÍA Aguayo, S. (2013). Los bloqueos. Reforma, 28 de agosto. Alemán, R. (2013). ¡Sí se pudo! ¡Fin al ‘mito represor’ del 68!. El Universal, 15 de septiembre. Astorga Almanza, L. A. (1990). Census, censor, censura. Revista mexicana de sociología, LII (1), pp. 247-260 Basave, A. (2013). Dos Méxicos y una ambivalencia. El Universal, 5 de septiembre. Bartra, R. (2013). Insurgencias incongruentes. Reforma, 10 de septiembre. Bourdieu, P. (1989). Una antinomia en la noción de protesta colectiva. En $)R[OH\060F3KHUVRQ\*2·'RQQHOO FRPSV Democracia, desarrollo y el arte de traspasar fronteras. Ensayos en homenaje a Albert O. Hirschman (pp. 315-316). México: FCE. &KDEDW-  /D´IDFWRFUDFLDµPH[LFDQDEl Universal, 27 de agosto. Chabat, J. (2013a). La apuesta (equivocada) de Mancera. El Universal, 10 de septiembre. Cover, R. (2002). Derecho, narración y violencia. Poder constructivo y poder destructivo en la interpretación judicial. Barcelona: Gedisa. Curzio, L. (2013). El desafío de la Coordinadora. El Universal, 24 de agosto. Derrida, J. (1998). Políticas de la amistad seguido de El oído de Heidegger. Madrid: Trotta. Escalante Gonzalbo, F. (2013). En serio, la virgen les habla. La razón, 27 de agosto. Ginzburg, C. (2003). Huellas. Raíces de un paradigma indiciario. En C. Ginzburg, Tenativas (pp. 93-155). México: Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.

24

Mancera Espinosa, M. A. (2012). Decreto por el que se reforma el artículo 362 del Código Penal para el Distrito Federal, *DFHWD2ÀFLDOGHO'LVWULWR)Hderal, 17 (1510), 27 de diciembre.

U M A N I D A D E S

H E N N V E S T I G A C I Ó N

/ySH]2EUDGRU$0  'HFUHWRGH1XHYR&yGLJR3HQDOSDUDHO'LVtrito Federal. *DFHWD2ÀFLDOGHO'LVWULWR)HGHUDO, 12 (96), 16 de julio.

I

Loaeza, S. (2013). La aplicación de la ley como dilema, La Jornada, 3 de enero.

REVISTA VITAM n. 1 (2015).

+LUVFKPDQ$2  2SLQLRQHVSHUWLQDFHV\GHPRFUDFLD(Q$2+LUschman, Tendencias autosubversivas. Ensayos. México: FCE.

Mancera Espinosa, M. A. (2013). Transcripción de las palabras del Jefe de GoELHUQRGHO'LVWULWR)HGHUDO'U0LJXHOÉQJHO0DQFHUDDOUHQGLUVX3ULPHU,QIRUPHGH*RELHUQRHQOD$VDPEOHD/HJLVODWLYDGHO'LVWULWR)HGHUDO. México: Gobierno del Distrito Federal, disponible en: http://www.informe.df.gob.mx/ primerinforme/transcrip.php. Marin, L. (2012). Lógicas del secreto. Revista de Occidente. (374-375). Merrian, C. E. (1984). Prólogo a la ciencia política. México: FCE. 1DYD*DUFpV$(  $OJXQDVFRQVLGHUDFLRQHVVREUHODPRGLÀFDFLyQ al tipo penal de ataques a la paz contenido en el Artículo 362 del Código Penal para el Distrito Federal. En A. E. Nava Garcés. El penalista. Reseñas, artículos, opiniones sobre historia del Derecho penal, teoría del delito, Derecho procesal penal y delitos en particular (pp. 189-202). México: Instituto Nacional de Ciencias Penales. Secretaría Particular del Jefe de Gobierno (2013). Primer Informe de Gobierno GHO 'LVWULWR )HGHUDO ,QIRUPH (VWDGtVWLFR. México: Coordinación General de Comunicación Social-Dirección General de Mensaje y Nuevas Tecnologías. Silva-Herzog Márquez, J. (2013). Nuestra guerra civil fría. Reforma, 16 de septiembre.

25

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.