COMO SOBREPONERSE A LAS CRISIS

COMO SOBREPONERSE A LAS CRISIS POR EDUARDO GOMEZ J.

Muchas cosas suceden a nuestro alrededor a cada instante. Sobre algunas nosotros tenemos el control, y sobre otras tantas no lo tenemos, como los bruscos cambios en la economía globalizada en que hoy estamos inmersos, por poner un ejemplo. O puede ser un problema en la familia, con algún hijo, con la pareja, o qué se yo cuantas crisis de cualquier tipo debamos enfrentar. Al vernos inmersos en ella, lo primero que sentimos es como si estuviéramos en esas arenas movedizas. De pronto estás paralizado. Mientras más movimientos desesperados haces, más te hundes, y tu margen de acción parece reducirse más y más a cada instante.

Aquí te presento estos principios de cómo sobreponerte a las crisis, de la índole que sea la que puedas estar pasando: PRIMER PRINCIPIO. Has un alto. No comiences a hacer movimientos desesperados. Tómate un momento (o un tiempo razonable, dependiendo la magnitud de la crisis) para tranquilizarte y poder pensar con claridad. Preguntas: ¿Estoy seguro en este lugar? ¿Estoy tranquilo para pensar con claridad? SEGUNDO PRINCIPIO. Analiza cuál es la situación. Sin maximizar ni minimizar; analiza la situación real. Trata de pensar en cómo se originó la situación, cuál es la magnitud de la misma, y sobre todo, comienza a pensar en varias posibles soluciones. Preguntas: ¿Qué está pasando? ¿Cuál es el problema? ¿Cómo se originó? ¿Cuál es el alcance de la crisis? ¿Cuáles posibles soluciones se me ocurren? TERCER PRINCIPIO. Has un "inventario". Ya que te hayas planteado varias posibles soluciones, escoge la que consideres mejor, o más viable, y "checa en tu mochila" con qué cuentas. Piensa en todo lo que pueda ser un recurso para la solución. Pueden ser objetos, valores (dinero u objetos de fácil conversión a efectivo o que tengan valor de cambio), relaciones, conocimientos, herramientas, etc., dependiendo del caso concreto. Preguntas: ¿Cuál de éstas opciones es la mejor, la más viable? ¿Con qué recursos cuento para enfrentar esta situación? ¿Hé pasado antes por alguna situación similar, o alguien a quien yo conozca lo ha hecho? Y en su caso, ¿Cómo lo solucionó? ¿Quién puede ayudarme o aconsejarme?

CUARTO PRINCIPIO. Ya que has analizado la situación, y escogido la mejor opción para su solución, haz un plan de acción. De acuerdo a la situación de que se trate, divide la meta en pasos y acciones concretas. Si la solución total se llevará algún tiempo, fija plazos cortos de manera que puedas ir controlando el avance, y en su caso hacer correcciones para que cumplas en el plazo establecido con el objetivo. Si, por el contrario la solución tiene que ser inmediata piensa en los detalles que deban controlarse, asegúrate de tener a la mano lo que vas a requerir y de preferencia contar con alguien que pueda auxiliarte en caso de requerirse cosas adicionales, como recoger algún documento, hacer alguna compra, llamadas, etc. Preguntas: ¿Cuál es el plazo con que cuento para la total solución de la situación? ¿En cuántos periodos intermedios conviene dividir el plazo total para asegurarme de estar avanzando en la solución? ¿En qué orden conviene efectuar cada una de las acciones que me llevarán a conseguir con éxito la meta? QUINTO PRINCIPIO. Aunque parezca obvio, asegúrate un medio para dar SEGUIMIENTO al plan que elaboraste. Gran parte de las metas o de los “buenos propósitos”, no son alcanzados por falta de seguimiento. Muchas veces iniciamos algo y damos los primeros pasos con entusiasmo, y al poco tiempo éste va decreciendo, dando lugar a la apatía, pereza, desánimo, etc., hasta el abandono del objetivo en muchos casos. Si de verdad quieres superar la crisis y poder un día contarlo como anécdota, asegúrate de que esto no te suceda. Comprométete de verdad contigo mismo. Manifiesta a otros tu determinación de salir de la crisis, esto hará que te sientas comprometido. Checa tus avances periódicamente y comprueba que estés avanzando en la consecución de tu objetivo. De lo contrario haz las correcciones pertinentes para ponerte al corriente en dichos avances. Es importante que en cualquiera de estas fases recuerdes algo, no estás solo. Pide ayuda. Habla con gente de tu confianza, si no es una situación demasiado urgente busca el consejo de alguien que consideres competente para ayudarte a resolver el asunto. Te sorprenderá que en la mayoría de los casos la gente sí está dispuesta a ayudar. Más cuando se trata de algo serio. Busca varias opiniones y escoge la mejor opción y ponte en acción. Te deseo éxito en tu próxima crisis, y ya sabes, ya tienes buenas herramientas en tu mochila. Ya estás en el camino, tu CAMINO DE CAMBIO.

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