Cinco etapas lectoras para favorecer los procesos de lectura

June 9, 2017 | Autor: Sheherazade Bigdalí | Categoría: Comprensión de lectura, Lectura, Estrategias de comprensión de lectura, Cinco etapas lectoras
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Descripción

az • 096 • agosto • 2015

www.educacionyculturaaz.com Agosto 2015 No. 96

Un concepto

en busca de materialización CINCO ETAPAS

“SI EVALUAR NO SIRVE PARA MEJORAR, LA EVALUACIÓN NO TIENE SENTIDO” Entrevista a Sylvia Schmelkes.

LECTORAS PARA FAVORECER LOS PROCESOS DE LECTURA

PADRES QUE NO DEJAN CRECER A SUS HIJOS

CONTENIDO

Año 8, número 96, agosto 2015

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PORTADA

POLÍTICA Y GESTIÓN CULTURAL: DIGRESIONES, CONVICCIONES Y SUGERENCIAS JOSÉ RAMÍREZ SALCEDO UN CONCEPTO EN BUSCA DE MATERIALIZACIÓN ARMANDO GONZÁLEZ TORRES EL IMPACTO DE LAS POLÍTICAS CULTURALES. CASO: PACAEP BLANCA BRAMBILA MEDRANO RED TEMÁTICA EN TECNOLOGÍAS DIGITALES PARA LA DIFUSIÓN DEL PATRIMONIO CULTURAL CRISTINA RIVAS HERRERA

CORTE DE CAJA

MUNDOS

¿CÓMO POTENCIAR EL TALENTO EMPRENDEDOR DE LOS NIÑOS? ENTREVISTA A CAROLINA BARCO

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MUNDOS

EN EDUCACIÓN, “SI EVALUAR NO SIRVE PARA MEJORAR, LA EVALUACIÓN NO TIENE SENTIDO” ENTREVISTA A SYLVIA SCHMELKES. 1a PARTE CINCO ETAPAS LECTORAS PARA FAVORECER LOS PROCESOS DE LECTURA SHEHERAZADE BIGDALÍ HERNÁNDEZ LÓPEZ

HALLAZGOS

LA EDUCACIÓN DEBE DE VENIR DESDE CASA ENTREVISTA A MARÍA FRISA

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ALMA MATER

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LO QUE TODO UNIVERSITARIO NECESITA SABER SOBRE LOS MAPAS MENTALES DIEGO SANTOS

CIENCIA Y TECNOLOGÍA

ILUSTRACIÓN DE PORTADA:

HEYLIANA FLORES

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Leer ha de contribuir a la expansión de miras de cada persona.

CINCO ETAPAS

LECTORAS PARA FAVORECER LOS PROCESOS DE LECTURA Por qué afirmamos tan tajantemente que nuestro alumnado no lee? Simple: la idea vigente de lectura en nuestro repertorio semántico es alguna de las que formaron parte de nuestro trayecto educativo tradicional. La idea de lectura ha variado conforme cambiaron las necesidades respecto 38

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a ella, para lo que se espere que sirva a sus usuarios. Afortunadamente es posible encontrar posturas nuevas ante la misma vieja cuestión. La lectura del mundo precede a la lectura de la palabra, de ahí que la posterior lectura de ésta no pueda prescindir de la continuidad de la lectura de aquél. Esta postura brinda la posibilidad de trabajar

la lectura como el todo vigente y vivo que es y permite reconocer que lejos de ser una práctica adquirida una vez y para siempre en la infancia, es un acto de vida que requiere constante actualización, revisión crítica y conocimiento de sí mismo en cuanto a las necesidades, preferencias y habilidades de cada lector.

Tener pocos o muchos años no determina las habilidades lectoras.

Sheherazade Bigdalí Hernández López Consultora pedagógica en cátedras para aprendizaje y escritora.

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LAS ETAPAS SE RESUMEN ASÍ: 1) Etapa auditiva. Dentro de la progresión ideal que comienza en el nacimiento y hasta que inicia la autonomía motriz, requiere ayuda de los adultos. Canciones, trabalenguas, juegos de palabras, nonsense, rimas y versos sencillos cuyo valor primordial esté en el ritmo y las posibilidades del lenguaje. Pero también, los audiolibros y podcast. Aprender a escuchar es enseñar a conversar con las reglas de convivencia que incluye este acto. A los lectores de esta etapa suele gustarles la repetición que derivará naturalmente en memorización. Esto implica aprender sin teorizar sobre estructuras del lenguaje, prosodia, ritmo y otras características. 2) Etapa visual-táctil. Exploración del mundo de la primera infancia. Tocar, observar y seguir escuchando. Vivimos en un entorno visual y táctil quizá como nunca antes en la historia. Antes de entender la escritura es posible aprender a leer. Libros álbum, pop-ups, libros de texturas, sinfonías ilustradas, animaciones y cualquier soporte en el que predomine la imagen, el color y la textura; pueden (o no) contar una historia, pero pueden ser leídos. Un pequeño que comprende la imagen es capaz de leer un libro de imágenes, seguir la historia, leerlo para otros a la vez que poner en práctica actividades asociadas a la lectura en voz alta como la forma de tratar el libro, su postura, el manejo de la voz, la seguridad ante el público, etcétera. 3) Etapa visual lectora. En ese ser ideal correspondería al momento de la alfabetización. Conoce el procedimiento para decodificar mensajes escritos aunque sigue predominando el placer por lo visual. Las habilidades para la lectura de

sonidos, texturas e imagen están bien desarrolladas y mejoran las de relación con el lenguaje escrito. El cómic, web cómic, manga, novela gráfica, los libros ilustrados en una proporción estimada de 60% o más imagen. Álbumes, catálogos, incluso manuales, revistas así como películas subtituladas. 4) Etapa lectora visual. Correspondería a la adolescencia. Las habilidades para la comprensión del lenguaje escrito han mejorado, así que sus lecturas son predominantemente de texto. Las ilustraciones son parte del texto, lo complementan e integran sea cual sea el tipo o función y representan un porcentaje menor a 40% en la estructura general. Pueden ser esquemas, fotografías, diagramas, estadísticas, etcétera. Los materiales involucran la mayoría de los elementos que se aprendieron a leer en las etapas precedentes: color, textura, tamaño, posición, significado, adecuación, pertinencia. La mayor parte de los lectores con quienes se ha trabajado estos 10 años pertenecen a las categorías 3 y 4, sin distinción de edad, formación académica o núcleo socioeconómico de pertenencia. 5) Etapa plena. Se alcanzaría al terminar la adolescencia. Requiere desarrollar cada una de las etapas previas. Ser un lector pleno en este sentido es ser capaz de leer el ambiente, las señales de tránsito, una novela, los mapas del gps; procesar el significado de las canciones que se escuchan y de decidir una postura ante ellas. Significa ser capaz de seguir un instructivo, resolver un examen, localizar las fuentes para un documento académico, resolver problemas, en resumen:

Leer es anticipar y prolongarse a sí mismo en la inteligencia del mundo.

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Un lector que aparente disfrutar atraerá miradas curiosas y provocará preguntas.

la selección de lecturas por edades en la infancia, así como en las teorías de inteligencias múltiples. Así se generó hace poco más de 10 años una base sólida para trabajar la promoción lectora de manera más natural e integrada a la vida, sin importar la edad. La lectura, como acto de vida, acompaña cada momento del ser en comunidad y está implicado en las relaciones inter e intrapersonales. Tener pocos o muchos años no determina las habilidades lectoras, tampoco la preferencia por algún tipo de textos y soportes ni la cantidad de años sujetos a formación académica. Las etapas lectoras preceden material pedagógico, son una apuesta por la autoformación. Una manera sencilla de ubicar las propias habilidades para trazar una ruta hacia 40

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la reelaboración del contenido semántico personal sobre “lectura” que a su vez, permita incidir positivamente en el alumnado. LAS CINCO ETAPAS LECTORAS

La propuesta sienta sus bases en un tejido conceptual previo, en el que se encuentra la clasificación de estadios de evolución psicológica desarrollada por Piaget de los que, a su vez, se sirvió el doctor Pedro Cerrillo para su propuesta de estadios para

EN EL AULA

Se mencionó que la propuesta está pensada para ser una herramienta de autoanálisis. La lectura es un hábito que se adquiere por contagio, no por imposición. Un lector que aparente disfrutar atraerá miradas curiosas y provocará preguntas, inquietudes y deseos de disfrutar igual que él. Como primera actividad, localice la etapa en la que se sienta más cómodo. Identifique las habilidades que ha desarrollado de las

Leer ha de contribuir a la expansión de miras de cada persona.

nutrición, clásicos de la literatura y muchos temas más. Aprender a leer la imagen es determinante en esta época. Las películas en idioma original y con subtítulos obligan a comprender la imagen, las acciones y a incrementar la velocidad de decodificación de la palabra escrita, asociándola con lo que se leyó por vista y oído. Son un excelente ejercicio de lectura que estimula habilidades de varias etapas. Habrán lectores para los cuales la ficción es poco atractiva, pero los eventos históricos o las biografías son interesantes, o quienes tengan claramente definido un interés, digamos el futbol. Si la meta es leer y mejorar sus habilidades lectoras, no hay que esperar que a todos les guste lo mismo. Ese alumno que prefiere su deporte tiene para leer la historia, las numeralias y estadísticas, los reglamentos internacionales, la biografía de sus mejores exponentes, teoría sobre el entrenamiento, es decir, un mundo completo. Leer ha de contribuir a la expansión de miras de cada persona, eso implica que debe estar unido a sus

motivaciones e intereses. Será más probable generar un hábito si va ligado a los afectos. Para que conserve ese carácter, los reportes de lectura no pueden ser convencionales. Nadie espera que a la declaración de amor se le anexe una hoja de cálculo con todas y cada una de las razones por las que se ama y el porcentaje que representa del amor total. Esta época permite hacer reportes tan sencillos y directos como la conversación en grupo sobre las impresiones de lo leído, un dibujo en el cuaderno, un cartel como parte de los contenidos de la asamblea semanal o en el periódico mural; una animación flash, un video, un vlog, una entrevista grabada, un poema, una escenificación, un rap, etcétera De esta manera puede propiciarse otro rumbo de la buena lectura: la creación.

Más recursos disponibles en https://goo.gl/vzYYw5 Agradecemos compartan sus dudas, preguntas y experiencias.

REFERENCIAS Paulo Freire, La importancia del acto de leer y el proceso de liberación, México: Siglo xxi, 1991. Kenneth Goodman S., “El proceso de lectura: consideraciones a través de las lenguas y del desarrollo”, en: Emilia Ferreiro y Margarita Gómez Palacio, Nuevas perspectivas sobre los procesos de lectura y escritura, México, Siglo xxi, 1982, pp. 13-28.

Fotos: Cuartoscuro.

etapas anteriores. Si falta alguna, diseñe un trayecto lector para un periodo determinado. En tres o cuatro semanas es posible estimular las habilidades lectoras como para afrontar textos curriculares. Para quienes prefieren escuchar que leer, existen multitud de buenos materiales disponibles: la audioteca del imer, podcast, audiolibros, bibliotecas virtuales con lector de voz incorporado. La experiencia nos demuestra que al aparecer juntos el texto y la voz del narrador, poco a poco mejora la velocidad de decodificación del lenguaje escrito, hasta que leen de manera independiente. Simultáneo a este proceso, debe propiciarse el uso del diccionario. En la actualidad se dispone de múltiples diccionarios confiables en línea de acceso gratuito. Los grupos del segundo periodo en adelante pueden comenzar leyendo cómic o novela gráfica y desde ahí revisar lo relativo a las etapas previas. Hay que recordar que el cómic no sólo es una manifestación de cultura popular, puede ser arte; ha servido para divulgar ciencia, política,

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