Catástrofes: Una lupa a la desigualdad

Catástrofes: Una lupa a la desigualdad
Debido al gran terremoto ocurrido en el norte de Chile, la zona ha sufrido un gran problema de abastecimiento y con ello un sobre precio en los bienes más básicos como el agua, la leche o el pan. Esto provoca que quién no pueda pagar, a pesar de que necesite este producto para sobrevivir, no pueda obtenerlo, pero quién si pueda y esté dispuesto a pagar lo que sea, tiene acceso casi ilimitado a él.
Este fenómeno de desigualdad es muy interesante de analizar, ya que a pesar de que en estas situaciones de crisis se hace más notorio, está presente en nuestras vidas cotidianas, hasta en los más mínimos detalles.
Entiendo como desigualdad la situación en que dos o más individuos no se encuentran en igualdad de condiciones, es decir, no tienen las mismas oportunidades.
Cabe recordar que el contexto de esta situación es una economía preponderante frente a lo social, de características capitalistas, por lo cual está regido por las fuerzas de la Demanda y la Oferta. Además me gustaría recalcar que en este ensayo no me referiré a la lógica del mercado, en la cual esta situación se ajusta al modelo de la competencia perfecta, sino a la discusión ética y social que gira en torno a estas medidas.
La respuesta del Gobierno frente a esta problemática fue la iniciativa de utilizar una ley que penalice la conducta de los vendedores, quienes suben los precios a alrededor del doble o el triple de su original. Aún así debido al proceso de modernización experimentado por Chile durante los últimos 50 años, los precios fijados, en los cuales se basa la ley que el Ejecutivo pretende que se utilice, ya no existen, por lo que hay un vacío en su aplicación en esta situación, lo que genera que no se cumpla el fin para el cual fue implementada.
Las medidas tomadas por el gobierno, y el alza de la voz de los nortinos, nos indican que esta conducta es rechazada socialmente, con lo que estoy completamente de acuerdo.
¿Por qué subir los precios a los demandantes si ellos sufrieron la misma catástrofe que los vendedores?
Se produce una relación de "dominación" de los oferentes por sobre los compradores, ya que al ser bienes de primera necesidad son estrictamente necesarios para la sobrevivencia de la población, por lo que se ven obligados a adquirirlos al precio que sea.
Todo lo anterior, genera un aumento en la desigualdad, ya que aquellos que poseen "poder", es decir, mercancías esenciales, abusan de él, para obtener mayores beneficios, que en este caso es más dinero.
De todas maneras, esta situación no solo se da en contextos de desequilibrio, sino también en la normalidad. Situaciones como el acceso a educación, salud y previsión social de calidad, son casi comunes dentro de nuestra cultura, aunque de justo tengan poco.
Es realmente necesario que la modernización sea transversal a la sociedad, que no solo avancemos en las cifras macro económicas, sino que también avancemos, por ejemplo en temas sociales, como disminuir la brecha y, ojalá, erradicarla entre ricos y pobres.
Que no sólo se den respuestas "parche" a las problemáticas, sino que se introduzca una cultura de mayor respeto, colaboración y prevención sobre ciertas situaciones.
Que no esperemos que la leche esté derramada para comenzar a limpiar. Y que no hagamos caso omiso de la problemática que está presente en las bases de nuestra sociedad, la desigualdad, la cual priva las libertades de cada individuo y su autonomía, y que aprovechemos esta "lupa" que nos presentan las catástrofes para hacer una introspección y comenzar a crear una sociedad en la cual nos orgullezca vivir.

Paula Flores
19.134.186-4