CAMBIO DE PERSPECTIVA PARA LA ALIMENTACIÓN

CAMBIO DE PERSPECTIVA PARA LA ALIMENTACIÓN VÍCTOR MARTÍN BANCES PERALTA

Es aceptado por todos que la seguridad alimentaria es un tema muy complejo y con varias aristas, que no solo implica disponibilidad de alimentos sino también y sobre todo el acceso a los mismos, su uso adecuado (dieta) y su estabilidad en el tiempo (FAO 2006). Sin embargo, parece ser que son pocos quienes han advertido que la seguridad alimentaria depende estrechamente de los ecosistemas, la biodiversidad y la diversidad cultural (Torres, 2014.) Entonces, es importante ampliar nuestro panorama de fuentes de alimentos vegetales e incluir a los llamados parientes silvestres de las plantas cultivadas. Estudios realizados por los investigadores del laboratorio "Ecotono"de Bariloche en 1998 señalan que plantas consideradas como "malezas" son comestibles y, de hecho, fueron utilizadas como sustento desde los mismos orígenes de la humanidad. Dos momias muy bien conservadas en turberas de Dinamarca (El Hombre de Tollund y el Hombre de Grauballe, datadas de la Edad de Hierro) a partir de las cuales se pudieron realizar un análisis minucioso de sus contenidos estomacales que dieron una valiosísima información sobre sus hábitos alimenticios. Sus últimas comidas contenían restos de 66 especies de plantas, incluyendo semillas de Bromus mollis, Chenopodium album, Holcus lanatus Plantago lanceolata, P. major, Polygonum convolvulum, P. lapathifolium, Rumex acetosella, Spergula arvensis, Stellaria media y Viola arvensis. Todas ellas son especies cosmopolitas que se encuentran en la Argentina, en su mayoría transportadas como malezas por los conquistadores y colonizadores europeos. Pero, nadie utiliza sus semillas como alimento. Duke., 1992 nos dice que uno de cada diez plantas en la Tierra es una mala hierba significa que hay aproximadamente 30.000 especies de malas hierbas a nivel mundial.

Price y Ogle [4,5] identificar tres tipos de valores de uso para las malas hierbas comestibles. 1

El primero es el valor de uso directo que se refiere a la beneficiarse de la utilización real como vegetales para la alimentación (así como la superposición con la medicina entre otros usos directos). Indirecto utilizar el valor de las hortalizas de malezas incluiría la cultural y valor social de la diversidad de verduras silvestres (expresado por ejemplo en las recetas culinarias locales o uso ritual). El último tipo de valor es el valor de opción que es la de tener y la gestión de la especies como una forma de seguro para el futuro (como el seguro contra tiempos de sequía). Cabe responder las preguntas propuestas por Torres, 2014: ¿Cuántas especies vegetales y animales que pueden ser futuros alimentos o que antes lo fueron existirán? ¿Cuántas especies con potencial alimenticio habrán en los desiertos costeros (lomas), en los bosques estacionalmente secos de la costa norte (bosques de algarrobo), en los valles interandinos, en los pastizales, paramos, bofedales, bosques andinos (queñoales) y, finalmente, en los bosques tropicales lluviosos de la Amazonía (potenciales, que en algún momento se perdieron o que quizá se olvidaron)? 1

Tabla 1. Proporción de especies comestibles en diferentes biomas y comunidades.

2

Nº de especies Total Comestibles

%

LUGAR

FUENTE

ECOSISTEMAS NATURALES 18956

1112

6

2500 430 360

375 26 75

15 6 21

275

11

4

América del Norte. Plantas comestibles usadas por aborígenes Desierto de Sonora,EEUU Tierra del Fuego,indios onas Amazonas boliviano Amazonas peruana ( sólo árboles frutales

Duke 1992

* *

Felger & Nabhan,1978 Martinez - Crovetto,1968 Boom,1987 Peters et al,1989

ECOSISTEMAS ANTÓPICOS 653

124

19

446

77

17

165

55

33

SO Provincia de Córdoba O Uruguay,E entre Rios, S Brasil(Represa de Salto Grande)

Blanco & Cantero,1992 Lema 1988

E.H. Rapoport,C.R. Parque La Chata,La Habana, Cuba Martínez,P. Herrera ( sin publicar) ESTRICTAMENTE MALEZAS

51 14 761 300 200 40 176 168 422 305 18

31 6 177 90 59 20 51 111 177 137 16

61 43 23 30 30 50 21 66 42 45 89

Campo experimental,Canadá Tumba y quema,N India Catálogo de Malezas Malezas y escapadad, NO Patagonia Muestra ala azar, malezas mundiales Malezas comunes de Cuba Malezas urbanas,Rosario Malezas de Cánada Malezas de los EEUU Xapala,México Las Peores malezas del mundo2

Derksem et al.,1993 Misra et al.,1992 Marzovv et al.,1976 Rapoport & Brión,1991 Rapoport, sin publicar Sánchez & Huranga,1970 Franceschi,1996 Frankton & Mulligan,1977 Wilkinson & Jaques,1979 Domínguez- Barradas,1995 Holm et al.,1977

2. Sobre la base de una encuesta a nivel internacional, Holm y colaboradores identificaron las 18 especies más agresivas y dificiles de controlar ( presentes en la mayoría de los cultvos sy hábitas) y de mayor dispersión ( citadas en la mayoría de los países). Como puede apreciarse, 16 de ellas contienen partes comestibles. * Las citas marcadas con ateriscos contienen valores dados por los respectivos autores ( Ghermandi et al,1998) y el resto corresponde a estimaciones realizadas por los mismos autores ( Ghermandi et al,1998)

Fuente: Ghermandi et al, 1998. USOS DE ALGUNAS MALEZAS COMESTIBLES 3

(Las abreviaturas significan: Co=cocido, Cu=crudo; F=frutos; Fl=flores; H=hojas o brotes; P=condimento; R=raíz; S=semillas; T=tallo; té=infusión.) Arctium minus Bardana,Lampazo menor Bellis perennis Coqueta,bellorita,magarita Borago officinalis Borraja Brassica nigra Mostaza negra Brassica rapa Nabo silvestre Camelina Sativa Nabo francés Capsella bursapastoris Bolsa del pastor Hypericum Perforatum Hipérico, Hierba de la Sangre Medicago sativa Alfalfa Montia perfoliata Lechuga de Minero Plantago major Llantén mayor Raphanus sativus Rábano salvaje Rorippa nasturtiumaquaticum Berro Salsola kali Cardo ruso,capitana Silybum marianum Cardo lechero Sisymbrium irio Nabillo Fuente: Ghermandi et al, 1998

H,Cu,Co H,Co H,FI,Co H,Fl,R,Cu,Co H,Fl,S,Co S H,Co,Cu,S H,Co,té H,Cu H,Co,Cu H,S,Cu,Co H,R,Fl,Cu,Co H,Cu,Co H,Co H,R,F,S,Co H,F,Cu,Co

Imagen: Chenopodium (quínoa blanca, quinquilla, quelite cenizo, bledo).

Fuente: Ghermandi et al, 1998 USO: Hojas y tallos tiernos se usan como la espinaca, y también en ensaladas.

Imagen 02: Rumex acetosella (acederilla, romancilla) 4

Fuente: Ghermandi et al, 1998 Uso: Hojas agrias en ensaladas, sopas, soufflés u omelette

Imagen 03: Stellaria media (capiquí, quilloi-quilloi, yerba del pajarero, pamplina).

Fuente: Ghermandi et al, 1998

USO: En ensaladas o cocidas.

BIBLIOGRAFIA. 5

[1]. Duke JA. Handbook of edible weeds. Boca Raton: CRC Press; 1992. [2].Food and Agriculture Organization. 2006. Seguridad Alimentaria. [3]. Ghermandi, L., Ladio, A., Raffaele, E., Rapoport, E.H., & Sanz, E.H, 1998.” Malezas Comestibles”. Revista de Divulgación Científica y Tecnológica de la Asociación Ciencia Hoy. Volumen 9, Nº49. [4]. Ogle BM, Grivetti LE. Legacy of the chameleon: edible wild plants in the Kindom of Swaziland, Southern Africa. A cultural, ecological, nutritional study. Part II – demographics, species availability and dietary use, analysis by ecological zone. Ecol Food Nutr. 1985; 17(1):1–30. http://dx.doi.org/10.1080/03670244.1985.9990879 [5]. Price L, Ogle BM. Gathered indigenous vegetables in Mainland Southeast Asia: a gender asset. In: Resurreccion BP, Elmhirst R, editors. Gender and natural resource management livelihoods, mobility and interventions. London: Earthscan; 2008. p. 213–242. [6]. Torres, J.2014. Seguridad alimentaria y Agro biodiversidad en un contexto de cambio climático. Boletín Informativo Agro biodiversidad y Soberanía Alimentaria. Noviembre 2014 n, 3, PP. 7-9. LECTURAS SUGERIDAS Por RAPOPORT ET AL, 1998. [1]. DUKE, J.A, 1992, Handbook of Edible Weeds, CRC Press, Ann Arbor, 246 pp. [2].KUNKEL, G, 1984, Plants for Human Consumption, Koeltz Scientific Books, Koenigsten, 393 pp. [3]. RAPOPORT, E.H., MARGUTTI, L.S, SANZ. E.H, 1997, "Plantas silvestres comestibles de la Patagonia Andina. Parte I. Exóticas". Programa de Extensión Universitaria, Universidad Nacional del Comahue, 51 pp. [4]. RAPOPORT, E.H.RAFFAELE. E., GHEMANDI, L. & MARGUTTI, L.S., 1995 "Edile weeds: A scarcely used resource", Bulletin of the Ecological Society of America, 76 (3): 163166.

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