Batallas de Molino del Rey y Chapultepec septiembre 1847

Share Embed


Descripción

BATALLAS DE MOLINO DEL REY Y CHAPULTEPEC,
8 Y 13 DE SEPTIEMBRE DE 1847

Enrique Moreno Kegel

En 1847, la situación del país era de una convulsión absoluta, la guerra y
posterior pérdida de Texas significó una catástrofe y nuestro país se
encontraba en ese momento en una pugna constante entre conservadores y
liberales, gobiernos y presidentes entraban y salían, y lo que menos había
era estabilidad política, económica y social, por lo que los Estados
Unidos, aprovechando el desconcierto y con su afán expansionista,
decidieron emprender una guerra con un sin fin de pretextos, entre ellos,
apoyar la creación de la Republica de Texas, esto tomando parte de los
territorios de los estados de Coahuila, Tamaulipas, Chihuahua y Nuevo
México; y posteriormente los intereses estadounidenses por la Alta
California y Nuevo México, en gran parte por el descubrimiento de grandes
yacimientos de oro en California.

La guerra inició cuando el Presidente de Estados Unidos, envió a su
ejército a la frontera con México, dando órdenes de traspasar el río
Nueces hasta llegar al río Bravo, el ejército de los Estados Unidos atacó
nuestro país por distintos frentes, Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila,
Tampico, Sinaloa y Veracruz fueron atacados y bombardeados por mar y
tierra.

En marzo de 1847 inicio la invasión a México por el puerto de Veracruz y
después de varios días de bombarderos el Puerto cayó en manos de los
invasores y comenzaron su marcha hacia la Ciudad de México

Debido a la falta de acuerdos entre los bandos rivales para poner fin al
conflicto, la mañana del 8 de septiembre de 1847, el general Scott ordenó
se reanudara el fuego sobre Molino del Rey.

Esta batalla dio pie a una de las historias de mayor valentía en la
historia de México pero por una extraña razón oculta y olvidada por los
libros.

Fue una de las batallas más cruentas de la guerra con Estados Unidos, el
combate duró varias horas y aunque las tropas mexicanas lograron rechazar
una y otra vez a los invasores, al final cayeron vencidos.

Al acercarse el final de la batalla y cuando eran indispensables los
refuerzos para lograr la victoria, inexplicablemente, las tropas de
reserva a cargo de Santa Anna y la caballería al mando del general Juan
Álvarez se mantuvieron observando el combate desde la Hacienda de los
Morales, ante esto el ejército invasor se reorganizo y la posibilidad de la
victoria mexicana se diluyo al caer la tarde.

El capitán Margarito Zuazo fue uno de los últimos en caer abatidos en la
batalla. Zuazo continuó luchando; y en el punto donde la batalla se hizo
más compleja y las posibilidades de triunfo del ejército mexicano se
esfumaron, ingresó al edificio principal de Molino de Rey, se quitó la
chaqueta y la camisa, enredó en su cintura la bandera mexicana que ondeaba
en la torre y regreso al combate, donde fue herido, logró retirarse para
salvaguardar el pabellón nacional de las manos enemigas y murió a los pocos
días según algunos o a las pocas horas, sin embargo retuvo la bandera para
que no cayera en manos de los invasores.

La bandera que Zuazo salvó con su cuerpo y manchada con su sangre se
encuentra al día de hoy en el Museo Nacional de Historia.

El ejército invasor avanzó y llego a las faldas del Cerro de Chapultepec,
el Castillo era lo único que los detenía en su paso a la Ciudad de México,
este se encontraba defendido por menos de mil hombres, entre los cuales
había algunos cadetes del Colegio Militar.

El 13 de septiembre, luego de dos días de constante bombardeo, comenzó el
asalto al Castillo, desde que los primeros rayos del sol alumbraron la
mañana, los cañones enemigos golpeaban los muros del castillo y por más
esfuerzos que hacían los ingenieros, no era posible reparar estos, uno de
los primeros muertos fue el coronel Felipe Santiago Xicoténcatl, jefe del
Batallón de San Blas, sin embargo desde el castillo seguían disparando
Cadetes del Colegio Militar, murieron muchos soldados mexicanos y entre
ellos los seis cadetes conocidos del Colegio Militar, hubo también
prisioneros, entre ellos el director del Colegio Militar y Nicolás Bravo,
quien fuera héroe de la independencia, así como civiles que se unieron a la
defensa del Castillo.

La defensa del Castillo, consistió en 46 cadetes del Colegio Militar, 832
soldados bajo las órdenes del General Nicolás Bravo y más de 400 del
General Felipe Santiago Xicoténcatl

Porque entonces y de donde nace la historia de los niños héroes y Juan
Escutia?

La defensa del Castillo y la muerte de los cadetes son hechos reales, pero
también la muerte de muchos otros mexicanos que defendieron con valentía su
nación durante la guerra y particularmente en la batalla de Chapultepec.

La historia oficial, se encargó de reducir la batalla a la muerte de los
seis cadetes restando merito a todos aquellos que participaron en la lucha.

La defensa del Castillo era conocida y conmemorada desde tiempos de Benito
Juárez y Porfirio Diaz, pero fue hasta el sexenio de Miguel Alemán, que se
volvió parte y factor determinante de la historia oficial.

En marzo de 1947, el Presidente de Estados Unidos, Harry Truman, visito
nuestro País y colocó una ofrenda floral al pie del monumento, sin embargo
el hecho no fue bien visto, el arreglo floral termino durante la noche en
el suelo de la embajada de los Estados Unidos y días más tarde, se
"localizaron" los restos de los seis cadetes que murieron en los
enfrentamientos, adquiriendo a partir de ese momento la batalla de
Chapultepec tintes heroicos.

Como aclaración pertinente, es de mencionar que en esa época, los cadáveres
de los muertos en batalla eran apilados e incinerados todos juntos, pues no
había tiempo ni lugar para entierros.

A partir de ese momento la leyenda de Juan Escutia lanzándose con la
bandera cobro notoriedad y se convirtió en uno de los episodios nacionales
favoritos, sin embargo, la realidad es que esto no ocurrió, pues no solo no
hay registro de estos hechos, la bandera capturada por el ejército invasor,
permaneció como trofeo de guerra del ejército de los Estados Unidos y fue
devuelta durante el sexenio del Presidente José López Portillo, de la
bandera solo se conservan la parte verde y blanca.

Existen otras historias relativas a la batalla de Chapultepec, como la de
un cadete que defendió con honor el Castillo y que 20 años después
encontraría la muerte en un pelotón de fusilamiento junto al Emperador
Maximiliano.

Miguel Miramón, defendió a los 15 años el Castillo de Chapultepec, fue
ascendido por meritos a General cuando tenía 24 años y a los 26 se
convirtió en el Presidente más joven que ha tenido nuestro País, sin
embargo estar del lado conservador y haber sido derrotado por Juárez, lo
hicieron quedar relegado de la historia patria.

La historia de México en muchas de sus páginas se ha construido por
decretos y por decreto se ha decidido quienes son los buenos y quienes los
malos de la historia.
Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.