Aproximación a la Lógica que opera en el pensamiento de los actores de la contienda electoral, una mirada desde la etnopsicología

Aproximación a la Lógica que opera en el pensamiento de los actores de la contienda electoral, una mirada desde la etnopsicología:

En una aproximación a la lógica del pensamiento que se deja ver en el discurso y la actuación de los actores en las contiendas electorales venezolanas, podemos delinear lógicas que influyen directamente en la capacidad de participar, acceder y mantener el poder. En estos modos de aproximación a la realidad hemos encontrado, al menos tres tipos de actores y dos niveles de participación que vale la pena describir:

En un primer nivel de participación, operan las lógicas Partidista-ideológica, lógicas de las que participan los líderes de los partidos y sus asesores, que en muchas ocasiones son menos del del 1 % de la población que decide.

Lógica del partidismo: en su cara externa, está centrado en el hecho partidista, siendo parte de esta dinámica: la encuesta, la medición de la popularidad, el slogan, la campaña, la propaganda y el lobby; y en su cara interna está basado en redes de poder, capital social y relación de fuerzas dentro del seno del partido.
Este nivel connota una visión centrada en la vida cotidiana del político, cuya mayor o menor influencia está determinada por el escalafón en el partido. Siendo el reconocimiento del electorado un subproducto o resultado del empuje que resulta del aparato mediático, que le sirve de vitrina y como cara visible para servir de opción en el momento de elegir una forma u otra de gobierno.
Esta es la causa de las luchas intestinas en los partidos políticos, como quien se pelea por estar sentado en el cohete que le lleva al espacio y lo salva del caos que puede ser la invisibilidad y la falta de popularidad.En razón de esta lógica que opera a este nivel, un gran número de ocasiones no son los más capaces (intelectual y profesionalmente) los que llegan a ser líderes del partido, sino los aquellos que sean hábiles en estructurar sus relaciones de poder.

Aquí encontramos la razón de la permanencia de los partidos y políticos antiguos, ya que en organizaciones como la MUD y el GPP, las personas u organizaciones con alta influencia en el partido o la respectiva alianza; de alli que personajes que han estado una y otra vez en contiendas electorales y se adjudican el secreto del éxito electoral, lógica que les dificulta entender el antipartidismo, los movimientos sociales no electorales, los cambios estructurales y de base que se ha alineado al grupo opositor en una y les orienta a una postura futurista "cuando tengamos el poder", como si se tratara de "un apartamento en preventa".

Los "ideologisístas o ideólogos" : comprenden a los "pensadores" los conocedores de tendencias políticas e intelectuales como el liberalismo, conservadurismo, la derecha, la Izquierda y tantas otras expresiones que llenos de intelectualidad y del sentido estratégico de sus ideas son capaces de explicar los fenómenos pero incapaces de entender lógicas más sencillas, estos actores dentro de la política se ven sentimental y personalmente comprometidos con las causas que comprenden pero no se aproximan a la lógica de la vida cotidiana, no son capaces de comprender porque el electorado va de la izquierda a la derecha como quien cambia de lugar.
Este sujeto no comprende la razón por la cual una persona es capaz de castigar una vieja gestión con su voto, sin dar cuenta de la trascendencia, del tiempo y los efectos que esta nueva gestión que para su postura es perjudicial para el pueblo. Con su mirada en el Horizonte olvida el lugar en el que se encuentra.

En un segundo nivel, en el que encontramos un 95% de la población que está operando en la Lógica de la vida cotidiana:

Este sujeto, "el elector", es quien decide, es quien "pone y quita", es el objeto de la propaganda y las políticas sociales. Este sujeto que opera desde la vida cotidiana evalúa la gestión del gobierno desde la accesibilidad de bienes, servicios, este sujeto entiende la política desde su realidad familiar y comunitaria. Entiende que este gobierno de corte no le da resultados, no le permite vivir bien, no le ayuda a tener la calidad de vida que desea tener. Le interesan la seguridad y la justicias no como seguridad jurídica ("nivel Ideológisista") sino como la limitación de su libertad de movimiento, de vida social y de modos de relación. Este sujeto decide por lo que le sucede, mira el voto como una opinión y en algunas ocasiones una oportunidad de cambiar las cosas que le suceden (compra el discurso del político "cambiemos"), pero no elige entre "izquierda" o "derecha", "capitalismo" o "socialismo", no mira el horizonte, mira el lugar y la posición en la que se encuentra desde un sentido práctico.

Cómo se impone la lógica de la vida cotidiana en la acción electoral actual?

Ante la incompetencia del actual Gobierno de brindar bienestar, se crea un momento de crisis social y toda propuesta de cambio que promete alivio al malestar social tendrá altas posibilidades de obtener la victoria. Recordemos que no es la competencia de la oposición en capitalizar el bienestar, sino la incompetencia de los gobiernos la que crea estas situaciones.

En Venezuela el grado de malestar es tal, que el alivio a dicho malestar cotidiano, es subsidiario de las formas en que se va a gobernar, esto es evidente en la propia conformación de la MUD, donde partidos de tendencias ideológicas tan disímiles como Vente Venezuela, Acción Democrática, COPEI, Un Nuevo Tiempo, Voluntad Popular, Primero Justicia han hecho pactos para sumar a sus votantes en una campaña única "sacar al chavismo del poder".

Sostenerse en el poder o sustituir al que se encuentra en él, es la razón por la cual la agenda legislativa no es tema central en esta contienda electoral, las propuestas de ley, la defensa y materialización de los intereses de movimientos sociales es un tema subsidiario al cambio de gobierno, y se resuelve con ideas simples: "convocamos a un dialogo nacional", "vamos a garantizar sus derechos sociales", entre otras frases que lo resuelven todo; con lo que el discurso político de los candidatos a diputados de la Asamblea se hace inauditable.

Hoy día el ciudadano común, que no es militante, que no es activista, intelectual o ideólogo, solo desea vivir mejor, solo eso y da cuenta de la insostenibilidad de su estilo de vida en las condiciones actuales. Es por eso que vota en favor de su esperanza no es contra de una ideología ni a favor de ella. Ya veremos que ocurre posteriormente, cuando las necesidades básicas sean resueltas y la contienda electoral sea una elección de conciencia.

Hoy día las ideas en el colectivo son: "crisis social", "escasez", "falta", "necesidad","peligro", "inseguridad personal" y "pobreza" ideas que emergen de su cotidianidad; las frases "neoliberalismo", "socialismo"," capitalismo", "Justicia social", son hitos discursivos de los políticos que miran desde su balcón ideológico y su intención de poder. Es asi que la esperanza opera en este siglo como operó a finales de los noventa.

Sergio Yepez Santiago
Psicologo - investigador en etnopsicología política.