EL PAISAJE CULTURAL, ESPACIO DE APRENDIZAJE
Aprender en y con el paisaje cultural: Las Hurdes (Extremadura) Ana M. Hernández, Francisco J. Jaraíz, José L. Gurría Universidad de Extremadura
En este artículo se aborda la importancia del paisaje cultural como recurso didáctico y como iniciación a la investigación en el último ciclo de la ESO. Los objetivos que se plantean son: fomentar el valor educativo del paisaje, su lectura e interpretación a través de la investigación e incentivar su conservación desde los centros educativos. La metodología educativa se basa en el trabajo con aplicaciones colaborativas: los alumnos crean sus propios contenidos multidisciplinares y trabajan competencias como las relacionadas con las nuevas tecnologías o actitudes vinculadas con la concienciación social y ambiental. 22
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Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia • núm. 81 • pp. 22-28 • octubre 2015
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paisaje cultural educación percepción reflexión conservación
Aprender en y con el paisaje cultural: Las Hurdes (Extremadura)
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n el patrimonio cultural convergen la naturaleza y las manifestaciones humanas en una síntesis histórica, permanentemente viva, del devenir de nuestros pueblos. En este sentido, es diversidad y pluralidad, un factor de identidad e integración y, en definitiva, una síntesis de la vida cotidiana de sus gentes. Por ello, precisa un enfoque sistémico, global e integral, de todos los elementos que constituyen las manifestaciones de una sociedad, fundamentalmente en lo que respecta a su adaptación al medio natural. Pero frágil, amenazado por desastres naturales, conflictos humanos y abandono, el patrimonio cultural se va perdiendo de manera inexorable e irrecuperable y con ello el alma de los pueblos. Su protección y su preservación, en nombre de las generaciones futuras, constituyen imperativos éticos. Con estos objetivos, y como llamada de atención ante la intensa degradación que vienen sufriendo los paisajes culturales, diseñamos una estrategia educativa que permitiera a los estudiantes de educación secundaria el conocimiento de estos paisajes a través de la investigación, así como su conservación y puesta en valor para el desarrollo sostenible, pues tal como señala Liceras: «el paisaje sólo se abre a los ojos de quien sabe interpretarlo, sentirlo y disfrutarlo» (2013, p. 85).
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Su enfoque sistémico e integrador lo convierte en un potente recurso didáctico, con múltiples posibilidades para trabajar contenidos interdisciplinarios, competencias y actitudes, a la vez que se ponen en marcha metodologías educativas innovadoras y el inicio en trabajos de investigación. Así pues, considerando la riqueza del paisaje cultural de Las Hurdes, se decidió abordar este ejemplo tan paradigmático como atractivo, según demuestran los numerosos testimonios que se han ido sucediendo desde mediados del xix, que dieron lugar a la «leyenda negra» de la comarca. Al respecto, dejaron distintos testimonios de sus visitas Madoz, Marañón, Unamuno, Alfonso XIII, Buñuel, etc.
EL MARCO NATURAL DE LAS HURDES, CONDICIONANTE DE LA ACCIÓN HUMANA
Unamuno hablaba de «huertos trágicos», de una «naturaleza madrastra», de «rudo combate» contra esa naturaleza y, refiriéndose a uno de sus poblados, «miserable alquería tan heroicamente arrancada a los furores de la madrastra». Otros comentan la «fatalidad» física de la montaña o la «tierra sin pan» inmortalizadas en las durísimas imágenes del documental de Buñuel, o bien las páginas en donde Legendre (Les Jurdes, 1929) se refiere a Las Hurdes como un medio extremadamente hostil en el que se da una lucha desigual entre la naturaleza y el hombre, que es inevitablemente vencido. Sin duda, la impresión del visitante es la «imagen externa de unos factores naturales extremadamente adversos y la dura adaptación –mal interpretada y entendida e inmerecidamente teñida de leyenda negra– que ha tenido que desarrollar el hurdano» (Gurría y Mora, 1994, p. 9).
El patrimonio cultural se va perdiendo de manera inexorable e irrecuperable y con ello el alma de los pueblos Íber
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Éste es el primer objetivo que se planteó, enseñar a los estudiantes a percibir y sentir el paisaje cultural, investigando y profundizando más allá de la simple fisonomía o apariencia. Las Hurdes (imagen 1) se configura como un macizo montañoso del Sistema Central, de altitudes moderadas (800-1.200 metros), fuertes pendientes y suelos raquíticos y pobres, consecuencia del profundo encajamiento de los tres ríos principales, el río de los Ángeles con el Esperabán, el Hurdano y el Ladrillar, que se erigen en las tres arterias que organizan no sólo el medio natural, sino también todo el desarrollo de la vida hurdana. El clima, muy extremo, condiciona una vege-
tación arbórea de pequeños rodales de encina y castaños, y un generalizado pinar de repoblación que, devastado por continuos incendios, ha dado paso a un generalizado matorral.
EL PAISAJE HURDANO: EXPRESIÓN DE IDENTIDAD Y CULTURA
El hurdano desarrolló una economía agraria de subsistencia a través de la explotación integral de los escasos recursos que ofrecía este medio tan hostil. Era una economía complementaria entre el aprovechamiento comunal de la mayor parte del territorio, con una ganadería caprina y apícola, y la explotación intensiva de pequeños
Imagen 1. Comarca natural de Las Hurdes (Fuente: elaboración propia)
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huertos en los que alternaban las hortalizas de temporada. La dura adaptación a esta «fatalidad física» del medio natural dio lugar a un «esculpido de detalle», a una arquitectura funcional tallada piedra a piedra a lo largo de siglos: paredones a veces de más de tres y cuatro metros de altura para los huertos abancalados, colmenares, «pesqueras» (pequeñas represas) y canales para el riego, caminos empedrados casi colgados en ocasiones sobre las pendientes de las montañas, majadas, chozos… construidos con piedra seca y escaso barro, que se integran de manera indiferenciada en el paisaje, dotándolo de un enorme valor estético y cultural. Pero todo lo que el hurdano «fue robando» a la naturaleza a lo largo de tanto tiempo, se vio bruscamente interrumpido y alterado por la política del Patrimonio Forestal del Estado, que entre 1940 y 1970 llevó a cabo repoblaciones masivas y generalizadas con pinar en todas las tierras comunales, lo cual acabó con la ganadería caprina y la apicultura, al mismo tiempo que destrozó gran parte del legado histórico (caminos, acequias, paredes de piedra, etc.), además de que, al abancalar sin ningún sostén todos los montes, provocó una intensa y acelerada erosión. El paisaje se vio profundamente alterado y la economía tradicional rota, lo que ha ido incrementado, en las últimas décadas, la emigración, el envejecimiento, la despoblación y el progresivo abandono de todo este legado.
LA ESTRATEGIA EDUCATIVA: OBJETIVOS Y PROCEDIMIENTOS
Con este planteamiento y la constatación documental previa, se inicia con los estudiantes de educación secundaria el trabajo de campo y la
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Se aprende haciendo, por lo que nuestra estrategia parte de un aprendizaje por indagación, activo y participativo
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investigación en el itinerario elegido y, aunque es más idónea para la asignatura de ciencias sociales, geografía e historia, es cierto que el «paisaje cultural» favorece aprendizajes interdisciplinarios que, por ello, no quedan limitados a los contenidos de una asignatura concreta. Esta estrategia busca la percepción del estudiante, su sensibilización, implicación, interés y carácter vivencial (Martínez de Pisón, 2012, p. 374), favoreciendo así competencias y actitudes vinculadas no sólo a la formación y la investigación. Se aprende haciendo, por lo que nuestra estrategia parte de un aprendizaje por indagación, activo y participativo; deben ser los estudiantes, dirigidos por el profesor, trabajando en cooperación y aplicando los principios científicos, quienes construyan su propio conocimiento e identifiquen e interpreten el paisaje, pues como señala Busquets: «el paisaje debe ser vivido y experimentado por los alumnos y alumnas, algo que sientan como suyo y que comprometa su actitud como ciudadanos» (2010, p. 9). Los objetivos didácticos de esta estrategia son interdisciplinarios, partiendo de la propia experiencia, la observación, la investigación y las vivencias y percepciones personales. En definitiva, se pretende: 1. Enfocar el paisaje cultural como la interrelación causal entre los elementos bióticos, abióticos y antrópicos.
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2. Entender el paisaje como producción y expre-
sión de las relaciones socioeconómicas y culturales. 3. Comprender que el paisaje es dinámico, en permanente evolución y cambio. 4. Valorar el paisaje como parte de la identidad de un pueblo. 5. Aplicar los principios científicos y la metodología de investigación para construir el conocimiento. 6. Fomentar acciones de respeto, conservación y recuperación para un desarrollo sostenible.
PROCEDIMIENTOS Y ACTIVIDADES
Se realizaron una serie de actividades en el aula para incentivar el interés de los estudiantes y alcanzar un conocimiento integral de la comarca: revisión bibliográfica, cartográfica, datos de población y censos agrarios. Finalmente, se realizó un itinerario, con fotografías de los principales elementos del paisaje cultural y la huella de los cambios.
Localización: el uso de Google My Maps
Los estudiantes deben ser conscientes de la importancia del medio natural en la vida del ser humano, lo que supone localizar, describir y explicar sus características geográficas. Para ello, además de la cartografía, se utilizó la aplicación de Google Drive My Maps. Los alumnos localizan
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Los estudiantes deben ser conscientes de la importancia del medio natural en la vida del ser humano 26
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la comarca de Las Hurdes en el mapa, señalando los principales elementos geográficos, con el fin de trazar rutas hasta las cabeceras de los valles, en los que aún se conservan los mejores ejemplos de este paisaje (imagen 2). Se utilizaron las técnicas y elementos cartográficos, desarrollando a su vez competencias digitales. Asimismo, con este ejercicio, se aplica el principio científico de localización y de distribución territorial, entendiendo que el medio es el escenario en el que vive y del que vive el hombre.
Observación y percepción del paisaje cultural
Usando la aplicación Google Fotos, el profesor vincula fotografías de este paisaje al mapa anterior con las características físicas, actividades y usos: agricultura en bancales, acequias y canalizaciones, caminos, núcleos, etc. (véase la imagen de apertura del artículo: huertas y bancales en el inicio de la ruta por el río Malvellido). Los alumnos, en grupo, buscan información sobre estos ejemplos del patrimonio cultural. Para la recogida de esta información, realizaron una primera búsqueda a través de páginas web,1 pero se pretende que sus dudas las consulten a los habitantes de la comarca, que tienen el saber y los conocimientos. Para ello, diseñaron una encuesta a través de la aplicación colaborativa Formulario, de Google Drive. Para establecer la relación con los informantes, los estudiantes entraron en contacto con algún agente local (corporaciones, grupos de acción local, agentes de desarrollo, etc.), lo que permitió trabajar también las competencias sociales y el desarrollo de habilidades para el aprendizaje fuera del aula y su desenvolvimiento en el entorno social.
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Imagen 2. Los alumnos aprenden a utilizar las herramientas de localización (Fuente: elaboración propia a partir de la aplicación Google My Maps)
Reflexión y valoración: el trabajo de campo Se siguió la ruta marcada en el mapa para visitar los lugares concretos donde observar y fotografiar diferentes elementos del paisaje cultural, pero sobre todo para constatar los conocimientos previos obtenidos en el aula y explicar sus características, de tal manera que apliquen de manera casi natural los principios científicos de complejidad, interrelación y causalidad. Los alumnos, haciendo uso de sus smartphones, fotografiaron distintos bienes patrimoniales y tomaron notas de los cambios y modificaciones, así como de los nuevos elementos que revelan usos y funciones diferentes. Se pretende con ello
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que los estudiantes apliquen el principio científico de evolución y dinamismo, que es inherente a todos los sistemas naturales y humanos. La observación y percepción del paisaje no es fácil, en general se mira, pero no se ve, por lo que hay que educar la visión (Hernández Carretero et al., 2006) para detectar los diferentes elementos, tanto naturales como humanos,
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Se siguió la ruta marcada en el mapa donde observar y fotografiar diferentes elementos del paisaje cultural Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia • núm. 81 • octubre 2015
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La observación y percepción del paisaje no es fácil, en general se mira, pero no se ve, por lo que hay que educar la visión
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Nota 1. Página web de los centros de interpretación de Las Hurdes con información básica por temática (www. mancomunidadhurdes.org).
Referencias bibliográficas BUSQUETS, J.: «La educación en paisaje: una oportunidad para la escuela». Íber. Didáctica de las Ciencias Sociales,
que conforman el paisaje cultural y explicarlos posteriormente a través de los mencionados principios científicos.
Geografía e Historia, núm. 65, 2010, pp. 7-16. CATANI, M.: La invención de Las Hurdes. Mérida. Editora Regional (Cuadernos Populares), 1989, pp. 27-28. GURRÍA, J.L.; MORA, J. (coords.): «Monográfico sobre
Durante esta salida, los estudiantes se reunieron con los informantes para recabar testimonios orales, tanto del formulario preestablecido como de cualquier otra duda, que grabaron en su teléfono móvil.
Las Hurdes». Alcántara, núm. 31-32, 1994, p. 419. HERNÁNDEZ CARRETERO, A.M.; PULIDO DÍAZ, F.; MARTÍN, M.: «Arquitectura y paisaje cultural en Las Hurdes: hacia la conservación de un patrimonio excepcional», en MARTÍN GALINDO, J.L. (coord.): La arquitectura vernácula. Badajoz. Patrimonio de la
Una vez en clase, subieron sus fotografías a Google Fotos, ubicándolas sobre el mapa de Las Hurdes con el uso de Google My Maps y conseguir así una síntesis visual.
Humanidad (Raíces, tomo II), 2006, pp. 1.001-1.022. LICERAS, A.: «Didáctica del paisaje. Lo que es, lo que representa, cómo se vive». Íber. Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia, núm. 74, 2013, pp. 85-93.
Con la información previa del aula, constatada en el itinerario, conjuntamente con otras informaciones obtenidas y con las encuestas, elaboraron un informe por grupo, en el que describían y explicaban los elementos fundamentales del paisaje cultural, su evolución y transformaciones, estado de conservación y puesta en valor para un desarrollo sostenible de la comarca, así como la conservación de estos paisajes históricos esculpidos a lo largo de siglos ante el progresivo abandono y deterioro que están sufriendo, cada vez de manera más acelerada. La actividad concluye con la exposición de los resultados de cada grupo, la discusión y la elaboración de una síntesis final entre todos los componentes. ◀ 28
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MARTÍNEZ DE PISÓN, E.: «Sobre la idea y la enseñanza del paisaje». Nimbus, núm. 29-30, 2012, pp. 373380.
Direcciones de contacto Ana M. Hernández Carretero Francisco J. Jaraíz Cabanillas José L. Gurría Gascón Universidad de Extremadura. Cáceres
[email protected] [email protected] [email protected]
Este artículo fue solicitado por Íber. Didáctica
de las
Ciencias Sociales,
Geografía e Historia en abril de 2015 y aceptado en julio de 2015 para su publicación.
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