Algo huele mal en Dinamarca. Historiografía estética en la primera Selva Dánica de Bernardino de Rebolledo

En su primera "Selva dánica" (Copenhague 1655), Bernardino de Rebolledo y Villamizar – noble, militar, poeta, erudito, diplomático y embajador español en Dinamarca entre 1648 y 1661 – narra la historia de Dinamarca desde el pasado más remoto y legendario hasta Cristiano IV (1577-1648), padre del monarca coetáneo Federico III (1609-1670). Basándose en la "Gesta danorum" de Saxo Grammaticus, entre otras fuentes historiográficas, este curioso poema tan desconocido como singular en la literatura española, revela una visión de la historia danesa como un teatro funesto en que la Fortuna representa sus tragedias; un escenario constante del horror pagano-herético sólo brevemente interrumpido por momentos de paz en períodos cortos de dominio católico. Sin embargo, aunque se muestre así su historia danesa como todo un catálogo de atrocidades y transgresiones, el Conde de Rebolledo no da por perdido la salvación espiritual de este pueblo nórdico glorioso pero también salvaje. Todo lo contrario, la otra cara de esta narración sangrienta de muertes violentas, guerras brutales, tiranos viciosos, fraticidios y patricidios es la propagación de la fé católica como el remedio que terminará, por fin, con el estado de emergencia más o menos permanente que rige en este desgraciado país luterano. Aprovecha el ministro de Felipe IV la libertad de culto otorgada a enviados extranjeros para sugerir al rey danés, a quien envia su poema, que la "temptestad procelosa" de guerras y regicidios que sacude recurrentemente su reino se calmará con sólo regresar a la "Puerta Sacra" de la Iglesia católica. En esta obra, historiografía se entrelaza con narrativa escatológica cuando hechos reales se interpretan a la luz de la historia de la salvación humana. Así, la primera "Selva dánica" del Conde de Rebolledo ofrece un testimonio fascinante de la concepción alegórica de la historia todavía corriente en el período en que escribió Nicolás Antonio su famosa "Censura de las historias fabulosas", inicio de la historiografía alumbrada y el pensamiento crítico en España.