Acerca de la negatividad psicológica. Michel Foucault y la verdadera psicología

July 15, 2017 | Autor: Matias Abeijon | Categoría: History, Michel Foucault, Psicología, Psicoanálisis, Negative Dialectics
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Autor: Matías Abeijón. Institución: UBA, Facultad de Psicología. Email: [email protected]

Acerca de la negatividad psicológica. Michel Foucault y la verdadera psicología

“Histoire de la folie”. Antes y después de los inicios. El 20 de mayo de 1961, Foucault defiende su tesis doctoral. Ese mismo año, ella es publicada bajo el nombre “Folie et déraison”, posteriormente reeditada en 1964 como “Histoire de la folie à l’age classique”. Al momento, Foucault contaba en su haber con una serie de escritos. Sin embargo, “Folie et déraison” se consagra como su primera gran obra. Así lo da a entender el mismo Foucault en varias entrevistas, donde la considera como su primer libro. Así lo da a entender también la repercusión que tuvo la obra, que si bien apenas publicada se limitó a una recepción académica por parte algunos intelectuales (Althusser, Barthes, Blanchot, Derrida, Serres, etc…), en la década del setenta, en el marco de la corriente antipsiquiátrica es retomada bajo una lectura política post mayo francés1. Finalmente, así lo dan a entender la mayoría de los comentarios a la obra de Foucault. Este último punto nos resulta de interés. Efectivamente, la ausencia de estudios sistemáticos respecto a la temprana obra de Foucault en la década del cincuenta es llamativa; autores como Gary Gutting incluso admiten que existe una falta de constancia en los estudios sobre las ideas del joven Foucault respecto a la enfermedad mental (Gutting, 1989). A excepción de algunos trabajos aislados como el de Moreno Pestaña (2006), los estudios sobre la obra de Foucault no suelen contener más que unas pocas palabras sobre “Maladie mentale et personnalité”, su primer libro, o excepcionalmente algún capítulo dedicado a las influencias fenomenológicas, existencialistas y marxistas anteriores a “Histoire de la folie” (Gros, 1997). En este contexto, un análisis de la temprana obra de Foucault en la década del cincuenta vale por sí mismo. Sin embargo, ¿por qué volver a esos escritos, aparentemente desechados por el mismo autor? 1

Seguimos aquí la lectura de Robert Castel, quien sostiene una doble recepción de “Historie de la folie à l’age classique” (Castel, 1990).

El presente texto tiene un doble objetivo: por una parte, analizar la obra predoctoral de Foucault. En ella encontraremos una temprana preocupación por el estado actual de la psicología, así como una serie de críticas hacia dicho estado y la necesidad de superarlo y abogar por lo que Foucault llamará una verdadera psicología2. Posteriormente, la preocupación de los textos comenzará a virar hacia la negatividad constitutiva del suelo epistémico de la psicología. Por otra parte, y retomando la pregunta formulada, sostenemos que la indagación de dichos textos permite cuestionar la tajante discontinuidad o “corte epistémico” (sostenida por varios autores) entre “Histoire de la folie” y los escritos de la década del cincuenta, en tanto varias de las categorías utilizadas en sus tempranos comienzos sirven a Foucault para desarrollar sus tesis principales en 1961. Entonces, nos proponemos demostrar que, a) la preocupación por la psicología es anterior a “Histoire de la folie”, b) las críticas al positivismo psiquiátrico y psicológico son patentes ya en sus primeras producciones, c) la tesis según la cual en la modernidad se produce la constitución de las ciencias psicológicas, haya su condición de posibilidad en el mencionado viraje de los textos de la década del cincuenta hacia la negatividad. La psicología entre el análisis existencial y las condiciones sociales de la enfermedad mental. Si bien publicado dos años después, el primer escrito de Foucault es una extensa introducción a “Traum und Existenz” del psiquiatra existencialista Ludwing Binswanger, publicada en 1954. Sin embargo, es escrito en 1952. El dato no es menor, pues veremos que tanto la “Introducción” como “Maladie mentale et personalitté” y la “La psychologie de 1850 á 1950” (un artículo dedicado a la historia de la psicología), a pesar de ser publicados en momentos diferentes, coinciden en ser escritos entre el 19521953, lo cual explica la afinidad conceptual entre ellos, sobretodo entre la “Introducción” y “La psychologie…”. A lo largo de la “Introducción”, Foucault abordar al hombre (Menschsein) desde el marco de una analítica existencial que permite ir de las formas antropológicas -el contenido real de una existencia que se vive en situación en el mundo– a las condiciones ontológicas de la existencia –la estructura trascendental del Dasein. De notoria 2

Como veremos más adelante, Foucault sólo utiliza este término en MMP. Sin embargo, tomamos la expresión verdadera psicología en sentido genérico, en tanto en cada uno de los textos ésta puede representar la dirección que, según Foucault, la psicología debería seguir.

inspiración heideggeriana, el proyecto de Foucault se sintetiza en la búsqueda de una antropología que sobrepase “todas las formas de positivismo psicológico que pretenden agotar el contenido significativo del hombre con el concepto reductor de homo natura y la reubica, a la vez, en el contexto de una reflexión ontológica que tiene como tema principal la presencia en el ser, la existencia, el Dasein” (Foucault, 1954, p.66). Foucault destaca la experiencia onírica, en tanto ella anuncia la existencia del hombre. Luego de discutir las teorías del sueño y la imaginación en Freud, Husserl, Sartre y Bachelard, se concluye que abordando el sueño desde una perspectiva existencial es posible llegar a su esencia, a su indicio antropológico de trascendencia que acoge en su seno el movimiento de una libertad radical. Entonces, se hace necesario abordar las estructuras existenciales humanas. Estas pueden adoptar dos modalidades: inauténtica y auténtica. En la primera modalidad, la existencia no transcurre a la manera de la historia, sino que se agota en el devenir de las cosas, abandonándose al determinismo objetivo o alienando su libertad originaria. Foucault ubica aquí a la locura, entendida como forma inauténtica de la historia, y a la cosificación de la entidad mórbida por parte de los psiquiatras. En cambio, en la segunda modalidad la historia como forma auténtica es “esta trascendencia de lo existente respecto de sí mismo en el movimiento de su temporalidad” (Foucault, 1954, p.109). Ella coincide, naturalmente, con el modo de ser propio del hombre y su existencia, es decir, el ser del hombre en tanto presencia en el mundo. Nótese cómo los argumentos de Foucault se encuentran dirigidos básicamente a destacar un abordaje ontológico-existencialista del hombre en detrimento del abordaje positivista psiquiátrico. Finalmente, la “Introducción” apunta a superar los conocimientos antropológicos abogando por una analítica existencial adecuada al ser del hombre. Entonces, tenemos aquí la presencia tanto de una serie de tempranas críticas a la psicología y psiquiatría objetivante, así como también la apuesta a una concepción del hombre entendido como existencia auténtica, abordado a través de una experiencia privilegiada (el sueño) que permite efectuar su análisis ontológico. “Maladie mentale et personnalité”, su primer libro, es escrito casi en paralelo. Allí, Foucault dirige su ataque nuevamente a la psiquiatría y la psicopatología, centrándose en cómo estas disciplinas abordan la enfermedad mental. Según el autor, en su intento de concebir una unidad entre las patologías mentales y orgánicas, ellas recurren al postulado mítico de una metapatología que las unificaría. Más la raíz de la patología mental, según Foucault, sólo puede hallarse “en una reflexión sobre el hombre

mismo” (Foucault, 1954a, p.10). Se impone, entonces, la necesidad de analizar la enfermedad mental en sus formas concretas. Para ello, el desarrollo de Foucault se centra en la enfermedad y sus relaciones con la evolución, la historia individual y la existencia. La vertiente evolutiva descubre que la enfermedad se revela “como la naturaleza misma, pero en un proceso inverso” (Foucault, 1954b, p.32); por su parte, la dimensión de la historia individual, desde el psicoanálisis permite descubrir la significación defensiva propia de la enfermedad, que pone en relación pasado y presente. Finalmente, la dimensión existencial se destaca al igual que en la “Introducción”. Foucault la define como una experiencia fundamental, y el método adecuado para abordarla es el fenomenológico de la comprensión, que permite superar los “análisis discursivos”, la “causalidad mecanicista” y la “descripción de los encadenamientos sucesivos y su determinismo en series” de la historia biográfica (Foucault, 1954a, p. 63). Jaspers, Minkowski, Kuhn y Binswanger son los principales referentes. Lo que se pretende es la “comprensión de la conciencia enferma, y reconstitución de su universo patológico” (Foucault, 1954a, p.66). Evitando reducir la originalidad de la conciencia mórbida tanto a los métodos de la patología orgánica como a los del análisis evolutivo e histórico, se lleva a cabo el examen, por un lado, de las formas de autocomprensión de la conciencia mórbida y, por otro lado, del examen de las modalidades del mundo patológico. Sin embargo, hasta aquí se analizaron las formas de la enfermedad mental. Resta ahora investigar sus condiciones de aparición, sus condiciones exteriores y materiales. Surge la necesidad de explicar el hecho patológico refiriendo las tres dimensiones anteriores a las “estructuras sociales”, al “medio humano del enfermo” (Foucault, 1954a, p.95). Foucault afirma que si el hecho patológico es vivenciado como tal, lo es porque al intentar escapar de la opresión real de las contradicciones inherentes al mundo contemporáneo, el hombre termina por experimentar esa misma opresión como destino mórbido. Es decir, las contradicciones del contexto económico-social, las relaciones de explotación humana son, en última instancia,

la causa del hecho

patológico. Más allá de la utilización vaga de nociones marxistas, lo que Foucault intenta destacar es que la enfermedad mental debe ser pensada no como un hecho natural, sino en relación a una serie de condiciones sociales e históricas. Por consecuencia, el libro termina impugnando las prácticas psicológicas actuales, pues en un contexto alienante, ellas necesariamente cumplen una función alienante dado que no

toman en serio las contradicciones reales del contexto socio-histórico. Así, Foucault reclama la presencia de una verdadera psicología de corte marxista3: “La verdadera psicología debe liberarse de esas abstracciones que oscurecen la verdad de la enfermedad y alienan la realidad del enfermo; pues cuando se trata del hombre, la abstracción no es simplemente un error intelectual; la verdadera psicología debe desembarazarse de ese psicologismo, si es verdad que, como toda ciencia del hombre, debe tener por finalidad desalienarlo” (Foucault, 1954a, p122). Analicemos ahora el primero de los artículos dedicado íntegramente a la psicología, “La psychologie de 1850 á 1950”. Como ya se mencionó, si bien fue publicado en 1957, su fecha de redacción es contemporánea a la “Introducción” y “Maladie mentale et personnalité”. Una vez más, Foucault impugna a la psicología positivista, esta vez bajo lo que denomina “prejuicio de la naturaleza” (Foucault, 1957, p. 122): la psicología del siglo XIX habría heredado de la Aufklärung el mandato de alienarse a las metodologías de las ciencias naturales (determinación de vínculos cuantitativos e hipótesis explicativas, pasaje obligado por la verificación experimental). El postulado que le sigue a esto: “la verdad del hombre se agotaba en su ser natural” (Foucault, 1957, p.120). Sin embargo, la historia de la psicología habría experimentado un viraje entre las exigencias de dicho mandato y su desarrollo hacia principios de siglo XX. Un nuevo estatuto del hombre como realidad que no se agota en su ser natural trae consigo un nuevo estilo de ciencia. Se efectúa, entonces, el “descubrimiento del sentido”. La obra de autores como Janet, Dilthey, Husserl, Jaspers y principalmente Freud, abría permitido alcanzar aquella dimensión propia del hombre, la del sentido. Al igual que en la “Introducción” y “Maladie mentale et personnalité”, el análisis fenomenológico goza de una posición privilegiada. Foucault aboga nuevamente por la analítica existencial de Binswanger y su “análisis de la existencia humana en sus estructuras fundamentales” (Foucault, 1957, p.136). Como puede verse, la analítica existencial permite un análisis más certero de la dimensión humana. La psicología y el viraje hacia la negatividad. Hasta aquí destacamos cómo tempranamente Foucault piensa la psicología y la enfermedad mental a través del postulado de una dimensión existencial propia del hombre y de las condiciones históricas del fenómeno mórbido, dirigiendo sus críticas a 3

Específicamente, Foucault aboga por una psicología de corte pavloviano (Foucault, 1954a, pp. 103-114).

los abordajes positivistas de la época. Sin embargo, en sus dos artículos sobre psicología su preocupación comenzará a girar en torno a la condición de posibilidad de la psicología misma. En “La psychologie de 1850 á 1950”, el motor del viraje de la dimensión naturalista a la del sentido se encuentra en la particular relación de la psicología con la práctica: “La psicología (…) nace en ese punto en que la práctica del hombre encuentra su propia contradicción. La psicología del desarrollo nació como una reflexión sobre la detención del desarrollo; la psicología de la adaptación como un análisis de los fenómenos de inadaptación; la de la memoria, de la conciencia, del sentimiento aparecieron como psicología del olvido, del inconsciente y de las perturbaciones afectivas” (Foucault, 1957, p.121-122). Es decir, las psicologías contemporáneas nacen en el punto en que las prácticas científicas del hombre entran en contradicción con ellas mismas. Si hay, por ejemplo, una psicología de la adaptación es porque ella se constituyó como reflexión sobre la inadaptación, y secundariamente devino análisis de la adaptación. Foucault no dice mucho más, pero en su artículo posterior, retomará el mismo tema calificándolo como una negatividad que hace posible la positividad de la psicología. La “La recherche en psychologie” es publicado en 1957 y redactado posteriormente a 19544. Foucault realiza aquí una crítica al estatuto de cientificidad de la psicología. En primera, la psicología no posee un campo científico común. La investigación no se desarrolla en ella “como en las ciencias que caminan por rectificaciones sucesivas, según una trascendencia siempre renovada del error, sino por una denuncia de la ilusión: ilusión de la subjetividad (Watson), sofisma del elemento (Guillaume), mitología de la tercera persona (Politzer), espejismos aristotélicos de la esencia, de la cualidad y del encadenamiento causal (Lewin), presupuestos naturalistas y olvido del sentido (psicología de inspiración fenomenológica) obliteración por la estructura y de la estructura por la génesis (Piaget)” (Foucault, 1957a, p143-144). Es decir, el movimiento de la investigación en psicología no se define por la superación del error, sino por la denuncia de la ilusión determinada por el compromiso de las psicologías con sus objetos de estudio. Nótese aquí como, a diferencia de las tres publicaciones anteriores, no se da cuenta de ninguna bondad del análisis existencial.

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No se poseen referencias biográficas exactas sobre la fecha de redacción de este artículo. Cabe suponer, basándose en el currículum vitae que Foucault envía Dumezil en 1954, que su redacción es posterior, pues en él no se lo menciona.

Ahora bien, las relaciones de la psicología y la investigación se realizan en un marco de condiciones de vida económica y social. Foucault retoma la temática de las condiciones sociales e históricas presentes en “Maladie mentale et personnalité”. Contraria a la verdadera psicología, aquella que des-aliena al hombre, las prácticas psicológicas actuales, por naturaleza, continúan alienándolo. Sin embargo, las necesidades histórico-económicas no son, como sí lo eran antes, la condición de posibilidad última de la psicología. Retomando lo desarrollado en “La psychologie de 1850 á 1950”, Foucault afirma que las aplicaciones de la psicología se derivan de los obstáculos mismos presentes en la práctica humana: “La psicología de la adaptación del hombre al trabajo nació de formas de inadaptación que surgieron del desarrollo del taylorismo en América y Europa. Sabemos cómo la psicometría y la medición de la inteligencia se derivan de los trabajos de Binet sobre el retraso escolar y la debilidad mental; el ejemplo del psicoanálisis y de lo que se llama ahora la “psicología profunda” habla de lo mismo: están desarrolladas en el espacio definido por los síntomas de la patología mental” (Foucault, 1957a, p.152). El suelo de “positividad” de la psicología se funda, entonces, en “tomar la negatividad del hombre por su naturaleza positiva” (Foucault, 1957a, p. 154) y en la revelación de su verdad a través de la experiencia de su contradicción. La psicología se ve condenada a una “vocación eternalmente infernal” (Foucault, 1957a, p.157) de tomar la negatividad del hombre en su naturaleza positiva; vocación que ha sido olvidada. Hasta aquí demostramos cómo la preocupación por las ciencias psicológicas, y las críticas a la supuesta naturalidad de la enfermedad abordada por la psiquiatría se encuentran presentes antes de “Histoire de la folie”. El último punto, el de la negatividad, nos brinda un elemento importante para pensar la génesis de unos de los conceptos claves de dicha obra: el de la tesis del “círculo antropológico” sobre el origen de las ciencias psicológicas. En el recorrido de las diferentes experiencias de la locura propias a cada época, es recién en la época moderna cuando el hombre puede tomarse a sí mismo como verdad a través de su relación con la locura, y al mismo tiempo constituir a la locura como objeto científico. Pues bien, sorpresivamente, nos encontramos con este párrafo: “No es por azar, ni por efecto de un simple desplazamiento histórico, por lo que el siglo XIX ha pedido primero a la patología de la memoria, de la voluntad y de la persona, lo que era la verdad del recuerdo, de la voluntad y del individuo” (Foucault, 1964, vol. II, p.188). Decimos “sorpresivamente” porque el mismo generalmente es pasado por alto

por los comentadores de la obra. Naturalmente, al plantear una tajante discontinuidad entre “Histoire de la folie” y sus escritos pre-doctorales, es entendible que la anterior cita carezca de interés. Sin embargo, en ella puede verse cómo la tesis de la negatividad proveniente de sus artículos psicológicos es utiliza para explicar la constitución de la psicología en la época moderna. Es decir, las ciencias humanas, sean cuales fueren, sólo pueden enunciar verdades positivas sobre un fondo de experiencias en las que precisamente se expresa la pérdida de las verdades del hombre. En este punto, la categoría de experiencia pierde el trasfondo existencial que tenía en sus primeros escritos y que a su vez es olvidado en 1957 con “La recherche en psychologie”, y retoma la tesis (anticipada en “La psychologie de 1850 á 1950”) de la condición de posibilidad del suelo epistémico de la psicología a través de una negatividad en la que se pierden las verdades del hombre; negatividad que se entiende como un vacío desde el cual se constituye la figura del hombre y de sus verdades científicas. Esperamos haber demostrado que es posible trazar varios puntos de continuidad entre “Histoire de la folie” y sus escritos anteriores, para así sacarlos del olvido al que los comentadores y, varias veces, el mismo Foucault los había condenado. Bibliografía: - Abeijón, M. y Kripper, A. (2010), La temprana concepción del hombre en Foucault y sus relaciones con la fenomenología y el existencialismo, en XVII Anuario de Investigaciones, Facultad de Psicología, UBA. - Binswanger, L. (1930), Artículos y conferencias escogidas, Madrid, Gredos, 1973. - Castels, R. (1990), The two readings of Histoire de la folie, en Still, A., Velody. I. comps, Rewriting the History of Madness, London, Routledge, 1992. - Eribon, D. (1989), Michel Foucault, Barcelona, Anagrama, 1992. - Eribon, D. (1994), Michel Foucault y sus contemporáneos, Buenos Aires, Nueva Visión, 1995. - Foucault, M. (1954), “Introduction” a Le Rêve et l’Existence, recogido en Foucault, M., Defert, D. (dir), Ewald. (dir), Lagrange, J. (colab), Dits et écrits 1954-1988. 19541969, Gallimard, Paris, 1994, pp. 65-119. - Foucault, M. (1954a), Enfermedad mental y personalidad, Buenos Aires, Paidós, 1961. - Foucault, M. (1957), “La psychologie de 1850 á 1950”, recogido en Dits et écrits 1954-1988. 1954-1969, Gallimard, Paris, 1994, pp. 120-137.

- Foucault, M. (1957a), “La recherche en psychologie”, recogido en Dits et écrits 19541988. 1954-1969, Gallimard, Paris, 1994, pp. 137-158. - Foucault, M. (1964) Historia de la locura en la época clásica. Fondo de cultura económica, Buenos Aires, 1998. - Gros, F. (1997), Foucault y la locura, Buenos Aires, Nueva Visión, 2000. - Gutting, G. (1989), Michel Foucault’s Archaeology of Scientific Reason, Cambridge, Cambridge University Press. - May, T. (2006), Foucault’s Relation to Phenomenology, en The Cambridge Companion to Foucault, Cambridge, Cambridge University Press. - Moreno Pestaña, J. L. (2006), Convirtiéndose en Foucault. Sociogénesis de un filósofo, Madrid, Montesinos. - Morey, M. (1983), Lectura de Foucault, Madrid, Taurus.

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