UN PEZ DE PELÍCULA

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La ColMeNa

viernes 4 de marzo, 2011

DOS Mil

reportaje

Un equipo español dirigido por un vecino de El Casar ha conseguido un hito mundial en la filmografía documental: grabar la reproducción del atún rojo. ‘Ultimatún’ es el título de la película que el grupo encabezado por el biólogo Fernando López-Mirones ha conseguido filmar en el Mediterráneo. El documental nace también para recordar la importancia universal de este pez. FOTOGRAFÍAS: CEDIDAS

Fernando López-Mirones ha sido el encargado de dirigir al equipo que consiguió filmar la reproducción del atún rojo. Sobre estas líneas, el propio López-Mirones buceando en apnea ante ejemplares de unos 300 kilos. En la foto de abajo, junto al cámara Chus Gutiérrez y el ayudante Juan Terán, también de Guadalajara, en un rodaje en Barbate.

Un pez de película EDUARDO RODRIGO

servada en sal, esa carne duraba muchos años. Servía para dominar el mundo”. Todas estas ideas –y otras muchas, porque “cada vez que encuentro una pista salen cuarenta más”– van a dar forma a un libro porque “son cosas que no caben en un documental”. Y son cosas importantes de saber porque “casi toda la cultura del mundo se basa en la carne del atún rojo”

R

esulta difícil imaginarse la reproducción de un animal de 400 kilos como el atún rojo, sobre todo si esta se produce con centenares de ejemplares pululando en la profundidad del mar, en plena noche y soltando cantidades ingentes de esperma. Pues ya no hace falta imaginarlo. Porque un equipo español, dirigido por Fernando López-Mirones, lo ha filmado por primera vez en el Mar Mediterráneo y lo ha incluido en una película documental titulada ‘Ultimatún’. López-Mirones (22-6-1964, Pontevedra) es un biólogo que ha participado en más de 120 películas documentales, siendo el primer español cuyos guiones han sido producidos por National Geographic Television y BBC Natural History Unit. Además, es profesor universitario de Documental Científico y de Investigación en la licenciatura de Comunicación Audiovisual e imparte cursos y conferencias sobre Filmación de Documentales de Historia Natural. Él, que ama el mar, decidió hace quince años trasladarse a El Casar, donde encaja como un vecino más. “Yo elegí vivir en El Casar porque el mar de Castilla está en el cielo, el cielo de Castilla no lo hay en el mar”, aclara. Y sentencia al respecto: “Guadalajara me parece un sitio muy marino”. Curiosidades aparte, LópezMirones comenzó desde hace un tiempo a estudiar el atún y ahora, después de tres años de trabajo, ha visto la luz este documental único en el mundo. “Mi obsesión son las orcas, y la orca me llevó al atún”, comienza. “Llevaba cinco o seis años

Un documental único

investigando sobre los atunes, y ahora estoy escribiendo un libro porque hemos descubierto muchísimas connotaciones en la historia de Grecia y Roma, y en la misma España, con el atún como hilo argumental”, explica.

El atún, clave para“dominar el mundo” A este biólogo le salen las palabras a borbotones y las anécdotas se le amontonan cuando comienza a explicar la importancia del atún a lo largo de toda la historia. “Al principio subestimamos a los atunes”, introduce. Después pasa a desgranar algu-

nas curiosidades. Así, relata que el nombre de Túnez procede de atún, así como el de Cerdeña (“no es de sardina, sino de sarda, uno de los nombres del atún”). También aclara que el símbolo pictórico del cristianismo es un atún o que Julio César llegó a dominar Roma gracias a este pez: “Los atunes se pescan con almadrabas, que son como laberintos de redes, con ayuda de las orcas. El secreto era, a través de las orcas, capturar los atunes. Era un secreto que se sabía por lo menos hace 5.000 años”. Pues bien, en tiempos remotos “la carne de atún se metía en ánforas con sal y aceite, y era la única proteína con la que se podía alimentar a las legiones y ejércitos, porque con-

Lo que ya es palpable es esta película documental única: “Nunca se había hecho un documental sobre el atún, bueno en National Geographic se hizo uno hace mucho tiempo muy centrado en otros aspectos; pero esta es la primera vez del mundo que se filma la reproducción del atún. Nunca se había hecho antes, se sabía cómo era, pero muchos científicos nunca lo habían visto y al ver la filmación lloraron”, asegura López-Mirones. Y esa emoción es entendible, porque capturar ese instante se antoja francamente complicado. Y peligroso. El equipo dirigido por este vecino de El Casar lo logró en la noche del 13 al 14 de junio del 2009, a las 2:31 horas. “Fue dificilísimo de filmar y también peligroso. Estábamos en medio de animales de 400 kilos totalmente excitados, dando vueltas a tu alrededor y generando un sumidero que te chupaba hacia abajo y te podía hacer incluso reventar los oídos porque te hundía”, narra.Y prosigue: “Era por la noche y con las luces autónomas, al intentar grabar, rebotaba la luz porque el mar era como una mayonesa gigante. Tuvimos que tirar muchas cintas porque