Tiestos, Adoquines y Marionetas: Posibles vías hacia una Arqueología Anarquista.

Tiestos, Adoquines y Marionetas: Posibles vías hacia una Arqueología Anarquista James Birmingham Presentado en 80º Encuentro de la Sociedad Americana de Arqueólogos, 2015 (San Francisco, California, USA) Traducido por: Leonardo Faryluk @lfaryluk

El objetivo de esta presentación es inspirar posibles vías hacia una arqueología anarquista. Actualmente no estoy de forma oficial en el campo de la arqueología – o incluso en la Academia – pero poseo formación en antropología de campo y estudios de cultura material. He titulado estas tres vías: tiestos, adoquines y marionetas.

Tiestos: El registro material de sociedades en el pasado distante puede estar disponible para brindar información a los modelos sociales anarquistas que deseamos crear ahora y en el futuro. Además, frecuentemente la principal corriente del anarquismo de izquierda, en su crítica al primitivismo, tiende a tirar todo por la borda, por lo que podemos decir que: las sociedades en un pasado distante (tanto como las sociedades recientes o contemporáneas llamadas igualitarias o “tradicionales”, a menudo citadas por los primitivistas) potencialmente tienen mucho que enseñarnos. Debemos prestar atención seriamente a los aspectos positivos y negativos de las así llamadas sociedades igualitarias del pasado y el presente; necesitamos asociarlas a las economías precapitalistas y entender las estructuras de explotación de dichos modelos de subsistencia, para que en nuestra resistencia al capitalismo no caigamos en trampas que de otro modo habríamos podido evitar. Los arqueólogos anarquistas deben comenzar analizando y examinando las estructuras políticas, sociales y económicas de las sociedades pasadas con el objetivo de aportar a las teorías y prácticas anarquistas actuales respecto a la organización de una sociedad anarquista. El registro arqueológico provee sólida evidencia respecto a que otros mundos son posibles – solo necesitamos comenzar a explorar estos “otros mundos” del pasado y separar lo que pensamos que puede o no funcionar respecto a nuestras ideas sobre una sociedad anarquista aquí y ahora. Al mismo tiempo necesitamos recordar que las llamadas sociedades igualitarias de hoy en día y el pasado reciente son productos históricos – no una ventana a la pre-historia, tal como James C. Scott expresó en una revisión reciente del trabajo de Pared Diamond: La vida de los cazadores-recolectores actuales puede decirnos mucho respecto al mundo de los Estados e Imperios pero puede decirnos nada respecto a nuestra pre-historia. Virtualmente no tenemos evidencia creíble respecto al mundo hasta ayer, y hasta que la tengamos, la única posición intelectual defendible es callar. Pienso que el registro arqueológico nos proporciona evidencia creíble sobre el pasado (y por supuesto, el propio trabajo de Scott acuerda con ello) – pero para una arqueología al servicio del anarquismo – esto puede ser lo menos importante – lo que el registro arqueológico inspira en nosotros para construir un posible nuevo mundo debe ser confrontado con lo que entendemos como hechos del pasado. Podemos y debemos empoderar nuestra imaginación para soñar nuevos mundos basados en los viejos – pero es necesario no clamar estas reimaginaciones como lo que verdaderamente alguna vez fue.

Adoquines: Esta senda es una llamada a examinar el pasado relativamente reciente – el reino de la arqueología histórica. La arqueología frecuentemente ha hecho un trabajo decente al iluminar las acciones políticas colectivas en el pasado; ha documentado las estrategias de personas no privilegiadas en ciertas situaciones económicas y políticas; eventos como las luchas en Ludlow y la resistencia en las comunidades de esclavos africanos han sido cubiertos. Pero, se necesita llevar a cabo muchos más trabajos en estas áreas, donde la perspectiva anarquista sería fructífera para investigar estos temas. Ha habido muchas comunidades, algunas deliberadamente “utópicas”, que un arqueólogo anarquista puede estudiar para poner un poco de luz sobre aquello que funcionó o no funcionó para ellos, con la meta de aportar a sociedades anarquistas futuras. Y, por supuesto, están también los “grandes” eventos de la historia anarquista – la Comuna de París, la Rebelión de Kronstadt, la Revolución Española, el Mayo de 1968, etc. Para tomar un ejemplo de la Guerra Civil Española deben haber aún muchos registros materiales de la distribución de granos y otros bienes en los sitios de los colectivos anarquistas, o debe haber evidencias respecto a que áreas eran libres de alcohol, etc. Estos son campos interesantes que creo ofrecen mucho potencial para la historia anarquista y por ello deben ser explorados. Pienso que es muy prometedora una arqueología anarquista enfocada en la arqueología de la vida cotidiana en estos espacios de resistencia – por ejemplo la arqueología pública que trabaja sobre la Guerra Civil Española es de inmensa importancia – pero se enfoca sobre todo en tumbas masivas y campos de batalla. Sueño con proyectos que observen el pasado de las comunidades anarquistas enfocados en las posibilidades o alternativas, la revolución del día a día, y el poder tanto de explicar como de emancipar.

Marionetas: Finalmente, hay cultura material del anarquismo actual. El poder de las marionetas en una protesta; los beneficios y problemas de las máscaras negras; la predominancia de estrechos jeans negros; la ropa y accesorios del punk rock; las pilas de stickers, pins, insignias, publicaciones, libros y otros objetos por los cuales estamos rodeados; las bicicletas y las tablas de skate; los muebles temporales y las comidas de basurero. Siento que a través de la lente de los estudios de la cultura material, los arqueólogos anarquistas pueden examinar meticulosamente estas expresiones y hacer sólidas contribuciones a la teoría y la práctica anarquista. Proyectos en los que actualmente estoy trabajando incluyen una mirada al athurmata del anarquismo contemporáneo y a la cultura material de protesta – proyectos como este relatan y son útiles para una arqueología anarquista incluso aunque caigan más en el reino de los estudios de cultura material.

A modo de cierre: Espero que esta presentación sirva como un breve pero inspirador grito de unión para los anarquistas comprometidos con la arqueología. Esta disciplina es un campo de conocimiento y metodología llena de potencial político – es un campo que puede aportar a la teoría y la práctica anarquista.