\"Mr Le Corbusier\" en Juan José LaHuerta (ed.), \"Le Corbusier y España\", Barcelona, Centre de Cultura Contemporània, 1997.

Juatt José Lahuerta (ed.)

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Le Corbusier y España Juan José Lahuerta (ed.)

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García Lorca, Salvador Dalí y rl'Esprit Nouveauu

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ltryEI Ángel García Herntindez Itaggio 1928: I'arrivo di Le Corbusier Anonio Pizzu .

39 a Barcellona 83

Le Corbusier y Josep Lluís Sert: momentos de una amistad

-fuep Maria

Rouira

95

l¡ Corbusier en España. Los viajes por Levante y Mallorca XavierMonteys

....101

UNA casa: tlN árbol EnriqueGranellTrias

....109

.

Le Corbusier i les rivalitats tecnocráüques a la , asÍ llamaba ozenfant en sus Mémoires a este cuerpo múltiple; cuerpo :ue se fue quedando solo, aunque sus voces lo expandían sin cesar: el número l7 de la reüsta, por ejemplo, con la excepción de un artícuro de Gropius, estaba rntegramente redactado por ozenfant, Jeanneret y sus dobles; atgo que habria que tener muy en cuenta cuando se habla de esta revista tan internacional.Elle-

l.

, Les Arts décoratifs modernes 1925,numerc especiar devient tle paraítre,Georges crés et cie, pa¡ís 1g25, pp' 106-109; cit. en Tnov, Nancy J., Modernism and the Decoratiue Artr in France. Art Nouueau to yate Le Corbusier, University press, New Haven y iondres 1991, p. 228.

46

." El mueble no se realizó por culpa de los marcos, Ios viejos

" .:--rs dorados cubistas (o, quizás, porque seurat se había encargado de embro, - a cuestión pintando también Ios marcos). Los cuadros, en tamaño, ' .:¡ambiables en su valor arquitectónico con la pared de laiguales habitación, no son ., ¡nidades de valor estandarizadas sino que su almacenamiento origina una - :omía del ahorro de lo similar. Se abre el cajón y aparece el cuadro, del mis- :nodo que se abre el cajón y aparece la caracola. Guardado, clasificado, es -.

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con¡usnn-seucNmR, (Des yeux qui ne voient pas...

r. Les Aüonsr, L'Espit Nouueau, num. g de 1921), París, pp. 973-988; reeditado enVers une Architecture,'1923; edición castellana citada. con¡usren, . La que - -re bella, pero bella por precisa, por espritnouuosista: nÁ Ia course, sir tau:...-r sont tués dans I'etactitude: corps du torero, coeur et esprit, coeur et esprit 20.000 spectateurs>. o Le corbusier era ozenfant, o sus sensaciones fueron - -0nstantes como las del viaje de éste en 1923. Su viaje se convirtió en espejo ,: ia realización de un programa: el que anunciaba aquella fotografía ,orirp':'zando elfolklore. de Le Corbusier. El proyecto fotográfico de Faure fr"¡i" ¿.ri.itado una cartografía espritnouuosista -Les Eyzies, La primera fotografía; Le corbusier, ra última. cartografia que fue copiadá o doblada en [Jne iro¡ro,n-u, palais y su búsqueda de los orígenes primiiivos de la arquitectura. Aquer circuito, en su es_ pecularidad, muestra er sentido de su proyecto: abrir.r ii..po v cerrarlo a la vez. En el habitar la apertura y el cierie áe este circuito radica ro madrileño: gruta, rascacielos. No habia otra opción. Las cosas no se podían salir del esque_ ma' Mister Le Corbusier, aquel amigo americano que traía ra modernización y la estandarización (y asi lo entend.ierán tanto ABC como Er sol).ü ,r" embargo, el mismo que se sentó en EI Escoriar con ra sierra a r.r.rpria";'el qrr. habia construido un año antes en la weissenhof de Stuttgart dos pabeilones: uno, según su descripción, wagon-saron, como un tren, muy moderno, y otro, según sus propias palabras,