Medina Istibūna (Estepona), una ciudad andalusí

MEDINA ISTIBŪNA (ESTEPONA), UNA CIUDAD ANDALUSÍ

Recreación de la Medina Istibūna (Estepona) realizada por Alejandro Pérez Ordóñez (dibujo), Ildefonso Navarro Luengo y Joaquín Aragón Jiménez. Este dibujo está expuesto en el Museo Arqueológico de Estepona (Málaga), inaugurado el 17 de marzo de 2013.

Medina Istibūna (Estepona), una ciudad andalusí Leyenda: 1. Murallas de la medina. Destruida en 1460 por los cristianos, en los documentos de la repoblación, a principios del siglo XVI, se describen en la zona los restos de una "albarrada" y unos "paredones de argamasa". 2. Murallas de la alcazaba. Sobre las ruinas de esta fortificación se construyó el castillo que acogió a los primeros repobladores castellanos. En 1502 se ordena la construcción del castillo "sobre la cerca antigua". La cimentación del frente sur de estas murallas, incluyendo una torre-puerta, ha sido descubierta en las excavaciones arqueológicas en la cercana calle Villa. 3. Mezquita. Es el núcleo de la ciudad musulmana, además de las religiosas cumple funciones judiciales, educativas, etc. A su alrededor solía disponerse el zoco (mercado). En el caso de Istibūna, es muy probable que ocupase el lugar sobre el que los cristianos construyeron la primitiva Iglesia de los Remedios, en la actual Plaza del Reloj. 4. Baños. Imprescindibles en una ciudad musulmana por la purificación obligatoria previa a las oraciones, solían ubicarse en las inmediaciones de las mezquitas. Se desconoce la ubicación real de los baños de Istibūna, que debieron estar cerca de la mezquita. 5. Torre noroeste de la alcazaba. En el subsuelo de esta torre existía un aljibe que se ha conservado hasta la actualidad bajo el patio de este museo. 6. Funduq (alhóndiga). Establecimiento público con un patio alrededor del cual se disponían tiendas, almacenes y alojamientos para mercaderes de paso en la ciudad. Se han localizado los restos arqueológicos de un funduq de la Istibūna del siglo XII en la calle Mar, en una zona donde confluían los caminos del Campo de Gibraltar y Málaga, junto a las principales puertas de la medina y el fondeadero al cual arribarían las mercancías por vía marítima. 7. Medina. En numerosas excavaciones arqueológicas en el Casco Histórico de Estepona se han descubierto restos de las viviendas de la medina. Organizadas en torno a un patio central, solían disponer de zaguán, cocina, letrina y habitaciones.

8. Arrabal. En excavaciones en la Plaza de las Flores se encontraron viviendas islámicas que estaban situadas fuera del recinto amurallado. Fueron construidas probablemente por pobladores que vinieron a Estepona a lo largo del siglo XIV, tal vez huyendo tras la conquista de Algeciras por los castellanos. Formaban un barrio extramuros, que en las ciudades medievales se llamaba arrabal. 9. Fondeadero de la Rada. Excelente puerto natural, el trasiego de mercancías debía ser muy importante. Tuvo que existir una flota pesquera de cierta importancia, ya que varios autores árabes se refieren a la abundancia de especies como la sardina y el atún en la zona. 10. Maqbara (cementerio) del camino del Campo de Gibraltar. Las necrópolis de las ciudades andalusíes solían ubicarse a las afueras de la ciudad, junto a las puertas de la muralla. Eran espacios abiertos, con enterramientos en fosas en las que el cuerpo se disponía sobre el costado derecho, con el rostro vuelto hacia La Meca. En diversas excavaciones en la zona de la actual calle San Roque se han exhumado varios centenares de enterramientos de esta maqbara de entre los siglos XII y XV. 11. Maqbara (cementerio) del camino de Málaga. Aunque las necrópolis andalusíes eran muy austeras, en ocasiones se erigían cubas (mausoleos), pequeños edificios habitualmente cubiertos por una cúpula que albergaban los restos de personas destacadas por su santidad o vida piadosa. En la zona de la actual calle Málaga se han descubierto varias decenas de enterramientos pertenecientes a una maqbara de los siglos XIII al XV. 12. En el territorio de Istibūna debían ser frecuentes las huertas, regadas por medio de una red de acequias, norias y albercas, algunas de las cuales son mencionadas en los documentos castellanos de principios del siglo XVI. Además de las huertas, diversos autores alaban la calidad y abundancia de los higos y las uvas de la zona, aunque también debían producirse otro tipo de cultivos como el cereal, el olivo, los morales, etc. 13. En las excavaciones arqueológicas realizadas en la Istibūna andalusí se han recuperado centenares de vasijas de todo tipo (platos, jarras, candiles, ollas, cazuelas, etc.) que fueron elaboradas en un taller de alfarería local. Se han localizado varios hornos en la actual calle Pozo de los Palos, en la zona del río Monterroso, lejos de la ciudad para evitar molestias a los vecinos pero donde abundan dos elementos imprescindibles para la alfarería: agua y arcilla de buena calidad. 14. El territorio de Istibūna estaba poblado de alquerías, asentamientos rurales que se dedicaban a la explotación agrícola y ganadera. Algunas de ellas llegaron a alcanzar un gran tamaño, con centenares de habitantes, y contaban con mezquita y necrópolis propias. 15. Sierra Bermeja, denominada por los andalusíes Yabal al-Ahmar (Sierra Roja).