Maltrato infantil en Colombia: algunas consideraciones

Maltrato infantil en Colombia: algunas consideraciones

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Catalogado como uno de los crímenes más atroces que puede cometer ser humano alguno, el abuso o maltrato infantil se traduce en causar daño físico y psicológico a un individuo a una temprana edad ocasionando en él problemas, cuyas consecuencias y secuelas sólo se verán en el futuro.

Cualquiera que sea la modalidad de maltrato a un menor debe ser castigada con todo el peso de la ley. Nuestro país no escapa de este flagelo, actualmente existen muchos padres que incurren en el maltrato físico o psicológico para corregir a sus hijos, pensando que de esta manera lograran resultados más efectivos.

Semanalmente ingresan a los hogares del ICBF un promedio de 375 menores de edad, el motivo: maltrato físico. Se ha comprobado que en el 75% de los casos estos actos han sido perpetrados por los padres o familiares directos.
El 15 de diciembre de 2014, ocurrió un caso que despertó la atención de toda la población del país, esto sucedió cuando se presentó ante la luz pública el caso de 4 niños que eran sometidos constantemente a abusos y maltratos físicos por parte de sus progenitores, todo esto ocurría ante nuestros ojos en una localidad del sur de Bogotá conocida como Ciudad Bolívar, evidenciando la urgente necesidad de castigar estos delitos para que no permanezcan impunes.
La directora nacional de Aldeas infantiles, informó que la problemática radica en la falta de denuncia al agresor ante las autoridades, ya que muchos de estos abusos eran admitidos como castigos normales en la sociedad Colombiana arraigados en nuestra idiosincrasia.
Estudios sobre maltrato infantil
Se realizó en la ciudad de Bogotá un estudio sobre el maltrato físico a través de una encuesta, increíblemente los resultados fueron:

Chancletazo (3%),
Palmadas y golpes con puños (10%),
Correazos (23%),
Dividiendo el 64% restante en castigos que sólo se pueden catalogar como torturas (quemadura con cuchillos calientes, laceraciones corporales con puntas de lápices, sumergimiento en albercas e inodoros, entre otros).
Pereciera que se hablara sobre una película de terror al más puro estilo de Hollywood, pero tristemente es una de las crudas realidades que día a día viven un gran número de niños en nuestro país.
Como se mencionó anteriormente, la mayoría de estos horripilantes actos los cometen familiares directos, por ejemplo: para diciembre de 2014 se encontraban registrados 4.015 casos de maltrato infantil perpetrado por los padres de la víctima, 3.409 casos por las madres, 1.077 por tíos y hermanos.

En el año 2013 se estimó que al menos se produjeron 16.457 casos de maltrato infantil, ahora bien, en los casos donde el menor fue expuesto a abuso sexual las cifras no dejan de ser alarmantes, ya que en el caso de abuso sexual en niñas, el porcentaje es del 86% en edades comprendidas entre 10 y 14 años a diferencia de los niños que con una edad entre 5 y 9 años alcanzan el 14% de los reportes.

Debemos prestar mayor atención a este tipo de delitos, ya que no sólo se destruye el futuro de los niños sino como consecuencia directa estamos destruyendo el futuro de nuestra nación.