La Reelección de Barack Obama

La Reelección de Barack Obama

"Recuerda siempre que tu propia resolución de triunfar es más importante que cualquier otra cosa."
Abraham Lincoln
Fernando Álvarez Simán*
http://mx.geocities.com/feralvarezsiman/

Hace casi cinco años, en febrero de 2007 la ciudad de Springfield; Illinois fue testigo del anuncio del entonces Senador por ese estado, Barack Obama de su intención de contender por la presidencia de los Estados Unidos. Desde ese momento la campaña del hoy cuadragésimo cuarto presidente americano fue histórica, puesto que su condición de afro descendiente hacían pensar que remaría contra la corriente ya que la regla no escrita de que los candidatos presidenciales debían ser parte de un grupo selecto de norteamericanos de buena posición social, descendientes de británicos y practicantes de alguna religión protestante o lo que es lo mismo un (WASP) White, Anglo-Saxon, Protestant (Blanco, Anglo-Sajón y Protestante) no se cumplía en Obama. Además por primera vez en la historia, la competencia por la nominación del partido demócrata era cosa de un afroamericano y una mujer, la esposa de un ex presidente y hoy Secretaria de Estado Hillary Clinton. El hoy presidente Obama sabía lo que hacía, de hecho el haber escogido Springfield para el anuncio de la candidatura era para recordar que en esa misma ciudad Abraham Lincoln había pronunciado el famoso discurso "la casa dividida" donde fijaba su posición sobre el sistema esclavista que en esa época dominaba el sistema económico de su país.

El asunto es que una combinación de hartazgo de la opinión pública por el accionar de la administración de su antecesor George W. Bush, el deseo de la población de concluir la ocupación militar de Irak y el debate nacional sobre el sistema de salud que favorecía la propuesta demócrata de asistencia universal inclinaron la balanza a su favor. Claro está también que fue de gran apoyo el hecho de utilizar de manera muy novedosa las nuevas tecnologías de información, como lo son la Internet y la telefonía celular. Sin embargo, las condiciones con las que Obama arribó a la Casa Blanca han cambiado incluso de manera drástica. Tan solo en lo interno Estados Unidos se debate en la peor crisis económica de los últimos tiempos que ha dejado un saldo por demás alarmante de desempleo que ronda en la cifra histórica del nueve por ciento de la población económicamente activa desempleada. Por si ello fuera poco el deterioro salarial de la clase media es ya evidente por lo que han aparecido las voces de mucha población indignada en dos vertientes: el movimiento progresista en lo que se conoce como Ocupemos Wall Street que está inspirado en las revueltas árabes y que se ha extendido hasta 52 ciudades americanas. Las voces conservadoras se agrupan en el denominado Tea Party que es ya un partido político y busca llevar al máximo las libertades individuales.

De cara a lo que constitucionalmente sería su primera y única reelección, a la que tiene derecho siempre y cuando no esté sometido a juicio político, fallezca o una causa de fuerza mayor se lo impida, Obama se juega su futuro político en las próximas elecciones presidenciales que tendrán lugar el martes 6 de noviembre de este año. De igual manera en esa misma fecha la Cámara de Senadores está llamada a elecciones para renovarse en un tercio (33 escaños de 100) y once estados elegirán también a su gobernador. En ese sentido la intención de contender por un segundo mandato la hizo patente en el 2011 con un video que su equipo de trabajo divulgó titulado "Empieza con nosotros" (It begin with us), ese mismo día presentó ante el órgano americano encargado de las elecciones, los documentos para contender por el cargo.

El proceso de elegir presidente y cualquier otro cargo de elección popular en Estados Unidos es diferente a cualquier otra parte del mundo. Este año el proceso para que los partidos políticos escojan candidatos, llamado también "primarias" inició el pasado 3 de enero con el "caucus" en el estado de Iowa y culminará el 17 de marzo en Missouri (la palabra caucus procede del idioma algonquino, una nación india norteamericana, en la que el término cau´-cau-as´u significa "reunión de jefes de tribus" o "consejo"). Ya sea con primarias o caucus, el aspirante presidencial republicano que reciba el mayor número de votos por parte de los delegados sera nombrado oficialmente el candidato. El partido Demócrata ya tiene candidato en la persona del Presidente Obama, que busca su reelección y se antoja poco probable que otro miembro de su partido quiera o pueda competir para arrebatarle la casi oficial nominación.

Por eso es claro que para estas elecciones americanas del 2012 el problema está en quien será el candidato republicano que compita contra el presidente Barack Obama. En ese sentido tres son los principales candidatos que se han apuntado para desafiar al Presidente Obama: el primero de ellos es Mitt Romney ex gobernador del estado de Massachusetts quien en su segundo intento por lograr la nominación Republicana es el favorito. Los partidarios de este empresario, consultor y presidente del comité organizador de los Juegos Olímpicos de Invierno en Salt Lake City, metido a político mencionan que algunas encuestas lo ponen por encima de Obama. Sarah Palin la ex candidata a la vicepresidencia en las elecciones del 2008 y ex gobernadora de Alaska está bien posicionada en cierto sector de la opinión pública americana, además de que sus posiciones personales sobre los valores morales conservadores le atraen la simpatía de diversos sectores de opinión. El resultado en el caucus de Iowa, favoreció a Mitt Romney de quien se espera sea ungido candidato republicano, de quien incluso se ha filtrado cuales serían sus debilidades entre ellas su actuación como empresario y consultor donde se dice que la firma a la que representaba Bain Capital, mantenía el esquema de comprar empresas débiles, después venderlas y despedir a los empleados; un tema sensible hoy en Estados Unidos por el tema del desempleo. La otra debilidad es su baja popularidad entre los votantes de origen latino, donde la última encuesta de entre este sector de la población arroja que Obama se impondría por un 67 por ciento ante un 24 por ciento de Rommey. En este sentido, cualquiera de los dos candidatos para ganar las elecciones y la simpatía electoral latina, tiene que conseguir entre este sector mínimo el 40 por ciento de los votos totales. El problema para Rommey es que Obama le lleva ventaja y sobre todo el republicano se ha manifestado abiertamente por endurecer las políticas migratorias americanas.

Para Obama por su parte el reto es superar la marcada desilusión que ha dejado su administración respecto a las promesas de campaña no cumplidas, no son pocos los que creen que si la economía americana no muestra signos de recuperación, será su tumba política y significará el adiós a la posibilidad de un segundo mandato. De hecho Rommey ha comenzado a cuestionarlo públicamente y afirma "el presidente se está quedando sin ideas y ahora se está quedando sin tiempo". Está claro que estas elecciones para Obama no serán iguales a las del 2008, porque gran parte de la población pasó del encanto a la desilusión o a la desconfianza; la debilidad del aparato económico americano es su principal debilidad para lograr la reelección, pero también es claro que ninguno de los probables candidatos republicanos tiene el suficiente carisma para derrotarlo ampliamente al menos en estos momentos. Obama nuevamente ha comenzado a enfocar sus baterías hacia conseguir el apoyo de los jóvenes y de la minoría latina. En una reciente entrevista de Telemundo a Michelle Obama, la primera dama afirmó que la reforma migratoria sigue siendo una prioridad en la agenda del Presidente, pues el piensa que un sistema migratorio quebrado sólo se recompone dejando de lado la política, y ofreciendo una solución integral que asegure las fronteras, que haga cumplir las leyes y reafirme la tradición norteamericana como un país de inmigrantes. Continua diciendo que la política de inmigración debe manejarse de acuerdo a los intereses económicos de los Estados Unidos y de los trabajadores estadounidenses. Por ultimo asegura que una situación ordenada y controlada en las fronteras y un sistema migratorio diseñado para alcanzar las necesidades económicas del país son pilares importantes para una economía fuerte.
Obama más canoso y casi irreconocible como el profeta de la esperanza que llegó al poder en 2008, ha iniciado el camino hacia las elecciones de noviembre de 2012, con el anuncio de haber cumplido su principal promesa de campaña: poner fin a la guerra en Irak. También su anuncio contundente sobre la muerte de Osama bin Laden probablemente ha generado un aumento en sus niveles de aceptación y percepción. Recientemente surgió un rayo de esperanza para el presidente al conocerse la caída de la tasa de desempleo a 8.8%, su nivel más bajo desde marzo de 2009, lo cual sugiere una mejora de la economía, siempre crucial en las elecciones en Estados Unidos.
Obama también se presenta como un reformador auténtico después de sus históricas leyes de reforma del sistema de salud y de limitación de los excesos de Wall Street.
Mientras los republicanos eligen a su candidato rumbo a las elecciones presidenciales, las especulaciones sobre el proyecto demócrata encabezado por el actual presidente, Barack Obama, siguen creciendo. En este sentido, la nueva fórmula, propuesta por Robert Reich, profesor de la Universidad de Berkeley, augura que la secretaria de Estado, Hillary Clinton, remplazará al vicepresidente Joe Biden como compañero de fórmula en los comicios de noviembre. Al respecto, Patricia Escamilla, profesora del Centro de Estudios Hemisféricos de Defensa en EU, asegura que la única forma de que Obama derrote a Mitt Romney, favorito para representar a los republicanos, es con Hillary Clinton como vicepresidenta. "Hillary es justo lo que Obama necesita para conseguir el voto de los liberales, los pobres, las minorías y los intelectuales. Obama necesita estimular la pasión y el entusiasmo de la base demócrata que se ha desilusionado cuando éste ha cedido ante republicanos regresivos". Hillary Clinton es la clave para lograr eso, pues ella mostrará un coraje que Obama es incapaz de demostrar, aseguran muchos.
*Profesor-Investigador. Universidad Autónoma de Chiapas