La Declaración de Derechos del Hombre y el Ciudadano: el Aporte de la Revolución Francesa al Concepto Moderno de los Derechos Humanos en cuanto a Propiedad, Seguridad y Resistencia a los Poderes Arbitrarios

La Declaración de Derechos del Hombre y el Ciudadano: el Aporte de la Revolución Francesa al Concepto Moderno de los Derechos Humanos en cuanto a Propiedad, Seguridad y Resistencia a los Poderes Arbitrarios
Ignacio L. Prieto
Universidad Metropolitana







Noviembre 10 de 2014
Profesora: Verónica Valedón, JD
CRIM 400
Para los que soñamos con un mañana mejor sería difícil aceptar un retroceso en la concepción histórica del hombre. Nos movemos siempre hacia el futuro con la idea de que todo es progreso y desarrollo. En nuestro sentir no está concebido que algún día volvamos a vivir en cavernas. Sin embargo, hubo momentos históricos en los cuales los seres humanos giraron en torno a la idea que todo era igual y las cosas no podían dejar de ser como se manifestaban en ese entonces. Nadie que confié en el porvenir, convendría en que el mundo actual no cambia y de hacerlo, seria para empeorar.
El mundo ha girado alrededor de ese concepto de desarrollo económico y social, aunque hubo épocas marcadas por un profundo atraso en esos sentidos. Debido a que la política era motivada por los mezquinos intereses de una clase relativamente pequeña, que se había apoderado de la suerte de millones de seres humanos. Un déspota, parásito e inservible rey, llamaba a sus semejantes como súbditos, chantajeándolos con desgracias si osaban oponerse a él. Una iglesia que enmascaraba la fe y la devoción con el sentido de sometimiento de las masas. Mientras que en lo más bajo de la pirámide social, el grupo mayoritario, formado por campesinos, artesanos, comerciantes y caballeros arruinados y sin alcurnia. Así estaba dividida la sociedad francesa en tres estados o clases, desde 1302 hasta el verano de 1789 (López & Cortés, n.d.). Los pocos de arriba sometían sin piedad ni recelo a los de más baja condición.
Pero un pueblo entero se enfrentaría a los poderes tiránicos y despóticos de una minoría de inmorales y con la fuerza de la razón y el coraje arrebató poderes al rey y establecieron una forma de gobierno más acorde a los principios democráticos. Aun cuando los avanzados franceses de 1789 no establecieron inmediatamente la República, tras la toma de la Bastilla en julio 14 de ese mismo año (Ediciones RBA, n.d.), ya daban pasos hacia la consolidación del poder ciudadano, sobre los dones del monarca. Se hace necesario para nosotros reconocer que la Declaración de Derechos del Hombre y el Ciudadano en la Francia de 1789 ha devenido en una importante guía para el establecimiento del concepto de Derechos Humanos en la actualidad.
Sin dudas que la nueva institucionalidad tenía que recrear el ordenamiento jurídico, donde los poderes arbitrarios quedaran subrogados por los nuevos derechos de los ciudadanos. Es por eso que una vez que la recientemente nombrada Asamblea Constituyente se asentara más cómodamente en el poder, se aprueba y entra en vigor la célebre Declaración de los Derechos del Hombre y los Ciudadanos. El texto goza de un prestigio tremendo, pues reconoce el ius naturalis de que cada individuo, el cual puede gozar de la "libertad de propiedad, seguridad y resistencia a la opresión" (Unidos por los Derechos Humanos, 2014). De esos tres elementos sería bueno reflexionar de forma separada.
En primer lugar el derecho a la propiedad. No es posible vivir en este mundo sin ese sentido de que algo material, no importa si es mueble, o inmueble, grande o chico, nos pertenece y por eso no nos lo pueden expropiar. Es considerado injusto si un poder, incluso legítimo, llegara a cuestionarnos nuestros bienes arrebatándonoslos. De esta forma el viejo principio francés del siglo XVIII es igualmente reconocido en nuestros tiempos. La propia Declaración Universal de los Derechos Humanos establece en su artículo 17, los derechos de cada persona sobre el disfrute de sus bienes, sin perjuicio o temor de ser arbitrariamente arrebatados (Organización de Naciones Unidas, 2014). Esto sin dudas brinda estabilidad a las sociedades.
Sin embargo, los poderes arbitrarios continúan torpedeando el sentir democrático y justo. Muchos justifican el asalto y expropiación de la propiedad como una necesidad social y atemperan los hechos a ciertas normas jurídicas que sirven como justificaciones a actos viles de arrebatamiento de la propiedad. Un caso específico lo encontramos en la Constitución de la República de Cuba, en su artículo 14 establece que "En la República de Cuba rige el sistema de economía basado en la propiedad socialista de todo el pueblo sobre los medios fundamentales de producción" (Cuba.cu, n.d.). Sin duda la expresión propiedad de todo el pueblo no es más que una falacia. Todos no pueden ser dueños de una misma cosa y al final es el estado el que dispone de la propiedad de manera totalitaria, aparentemente a nombre y por voluntad del pueblo.
Con relación al elemento seguridad este es de vital importancia para el mundo en que vivimos. Queremos y tenemos la necesidad de sentirnos seguros y protegidos por las leyes. Nadie pudiera hoy imaginarse viviendo en un mundo donde primara la violencia y la incapacidad del estado para brindar este bienestar a los ciudadanos. En este supuesto, la mencionada Declaración de los Derechos Humanos vuelve sobre su antecesora y retoma en su artículo 3, donde dispone que "Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona" (Organización de Naciones Unidas, 2014). Sin dudas una justa apreciación de lo que significa vivir en una sociedad civilizada.
Pero, de igual manera en otras partes del mundo no sucede así. Recientemente en nuestro vecino México acaba de suceder un macabro supuesto asesinato masivo de 43 estudiantes en Iguala, Guerrero (Martinez, 2014). El hecho ha sacudido a la opinión pública mexicana e internacional. Lo más triste es que los estudiantes fueron asesinados presuntamente por los propios agentes del orden público por órdenes del propio alcalde de la ciudad José Luis Abarca Velázquez y su esposa María de los Ángeles Pineda Pina, ambos vinculados al narcotráfico y a grupos narcoterroristas como los Zeta, los Guerreros Unidos y otros carteles (Martinez, 2014). Se conoce que la desaprobación del gobierno y los políticos en ese país han llegado a un punto casi cero y esto es debido esencialmente de que en México, hace años que la población vive despojada de su derecho a estar segura.
Por último, se hace menester reflexionar sobre el derecho de protestar contra un poder arbitrario. En este sentido el artículo 21 de la Declaración reconoce el derecho de las personas a elegir, ser elegidos y participar volitivamente en los asuntos de su país (Organización de Naciones Unidas, 2014). Esto demuestra que la aplicación de la referida norma solo es posible en una nación democrática. Esta presunción, unida a otra en el artículo 14, primer párrafo donde se acepta jurídicamente el derecho de los perseguidos políticos en recibir asilo en otro país (Organización de Naciones Unidas, 2014), dispone que es un derecho de todo ciudadano a oponerse a regímenes autoritarios y no ser considerado por ello un delincuente o ser reclamado como criminal.
Un ejemplo lo encontramos en la figura del luchador y líder religioso Tenzin Gytaso, decimocuarto Dalai Lama de los budistas tibetanos (Oficina de Tíbet, Washington DC, 2014). Cansado de vivir en la servidumbre y ser perseguido por sus ideas religiosas por parte de los comunistas de Beijing, intentó iniciar un movimiento de resistencia pacífica para establecer un gobierno dual autonómico con los comunistas chinos. Sin embargo, el movimiento se tornó violento y en la década de los '50 tuvieron lugar enfrentamientos entre ambos frentes (Oficina de Tíbet, Washington DC, 2014). El Dalai Lama tuvo que huir hacia la India donde en virtud de lo establecido en el mencionado artículo 14 le fue otorgado asilo político. Una vez más la Declaración apoyando la lucha de los más necesitados.
A modo de conclusión, es justo destacar que siempre miramos hacia el pasado, pensando traer al futuro todo lo hermoso que dejamos atrás, pero sí dejando a un lado lo oscuro del pasado. Hemos logrado establecernos como especie con la mirada puesta en un mañana promisorio. No importa que un momento dado nuestros antepasados no conocieran como es vivir en libertad, ellos representan para nosotros un ejemplo a no imitar. No obstante, las enseñanzas de un grupo de revolucionarios franceses que un día cualquiera de 1789 asaltaron el futuro, con la inmortal Declaración de los Derechos del Hombre y los Ciudadanos, ahora forman parte de nuestro legado como sujetos creadores y provistos de libertades que garantizan esa creación.


References
Cuba.cu. (n.d.). Constitucion de la Republica de Cuba. Retrieved from Gobierno: http://www.cuba.cu/gobierno/cuba.htm
Ediciones RBA. (n.d.). 14 de julio de 1789, la toma de la Bastilla. Retrieved from http://www.nationalgeographic.com.es/articulo/historia/secciones/7776/julio_1789_toma_bastilla.html
López, C., & Cortés, O. (n.d.). Brevísima Descripcion de lo que eran los Estados Generales, y un Rápido Vistazo a Ciertas Instituciones del Feudalismo. Retrieved from Biblioteca Virtual Antorcha: http://www.antorcha.net/biblioteca_virtual/derecho/convocacion/convocacion_2.html
Martinez, J. A. (2014, Noviembre 8). La Hoguera que Oscurecio la Noche de Iguala. El Pais, Internacionales. Retrieved from http://internacional.elpais.com/internacional/2014/11/08/actualidad/1415475628_050143.html
Oficina de Tíbet, Washington DC. (2014). Biografia de S.S. el Dalai Lama. Retrieved from http://spanish.tibetoffice.org/sobre-el-dalai-lama/biografia
Organizacion de Naciones Unidas. (2014). Declaracion Universal de los Derechos Humanos. Retrieved from Departamento de Informacion Pública: http://www.un.org/es/documents/udhr/
Unidos por los Derechos Humanos. (2014). Una Breve Historia de los Derechos Humanos. La Declaración de los Derechos del Hombre y de los Ciudadanos en 1789. Retrieved from http://www.humanrights.com/es/what-are-human-rights/brief-history/declaration-of-human-rights.html


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