La capilla de los Bustamante en Renedo de Piélagos: aportaciones a la representación de un linaje\", en L. Lahoz y M. Pérez Hernández (eds.), Lienzos del recuerdo. Estudios en homenaje a José Mª Martínez Frías, Ed. Universidad de Salamanca, Salamanca, 2015, pp. 497-505 (ISBN. 978-84-9012-541-0)

La capilla de los Bustamante en Renedo de Piélagos: aportaciones a la representación de un linaje* Julio J. Polo Sánchez Universidad de Cantabria

En febrero de 1693 el caballero de Alcántara don Fernando Antonio de Bustamante Velasco encargaba al maestro de cantería Juan Sánchez de Otero la construcción de su capilla particular en la iglesia de Santa María de Renedo de Piélagos, en el espacio que entonces ocupaba una antigua sacristía. En el contrato de construcción de esta obra de arquitectura, del que María del Carmen González Echegaray publicó un breve extracto -y que incluimos íntegro como apéndice de este estudio-, se ordenó también labrar en su interior sendos sepulcros que, inicialmente, habrían de contener los retratos de los padres del fundador, don Fernando de Bustamante y doña María Josefa de Velasco y Ceballos 1• La práctica coincidencia onomástica entre padre e hijo, así como el incumplimiento de alguna de las cláusulas contractuales de la obra, ha provocado diversos equívocos entre algunos de los historiadores que se han ocupado de esta obra, que intentaremos aclarar aquí. En un reciente estudio de Jaime de Sal azar y Acha se recoge una amplísima biografía de don Fernando de Bustamante y Vil legas, importante militar que prestó sus servicios a la Corona en Indias, sustentada documentalmente en un volumen manuscrito conservado en la casona familiar que lleva por título "Papeles originales de los servicios que ha hecho a su Magestad el Gobernador don Fernando de Bustamante y Vi llegas, Cavallero del Horden de Calatrava, en la guerra y Real Exercito del Reyno de Chile y otras partes y de los particulares que obró siendo Governador de los presidios fortificaciones plazas de armas de Puerto y ciudad de Valdivia y sus fronteras en el Reyno de Chile" 2 • Gracias a él y a otros insignes genealogistas precedentes, como Mateo Escagedo Salmón, sabemos que este primer Fernando de Bustamante Rueda y Vil legas (habitualmente citado como Fernando de Bustamante Vil legas) había nacido en la localidad cántabra de Ontaneda en 1605. Siendo el segundo hijo del matrimonio formado por Pedro de Rueda Bustamante y María de Bustamante Villegas 3, su condición de "segundón" le lanzaría, como a otros muchos hidalgos montañeses, a buscar mejor fortuna en América, pasando como soldado al virreinato del Perú en una edad muy temprana, a los 16 años, donde serviría primeramente en la compañía de infantería que mandaba

* Estudio realizado en el marco del proyecto de I+D+i "Ciudades, gentes e intercambios: Elites, Gobierno y Policía urbana en la Monarquía Hispánica de la Edad Moderna'; Ministerio de Economía y Competitividad (Ref. HAR201 2-39034-C03-01 ). 1 González Echegaray, María del Carmen. Documentos para la historia del Arte en Cantabria. Escultores, entalladores y pintores de los siglos XVI al XVIII. Santander: Institución Cultural de Cantabria, 1971, T.l, pp. 80-81. 2 Salazar y Acha, Jaime de. "Memoria viva de un montañés en el Reino de Chile: Don Fernando de Bustamante y Vi llegas, Gobernador de Valdivia, y su mayorazgo': En Pardo de Guevara y Valdés. E. (ed.). Actas de la XI Reunión Americana de Genealogía. España y América, un escenario común. Santiago de Compostela: C.S.I.C.-Junta de Galicia, 2005, pp. 755-771. 3 Fueron sus hermanos don Francisco y doña Ana. La genealogía de esta familia puede consultarse en Escagedo Salmón, Mateo. Solares Montañeses. Viejos linajes de la provincia de Santander (antes Montañas de Burgos). Santoña: np. Di aleo Mnemaen, T.ll, 1926, pp. 102-11 O.

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Ordoño de Aguirre en el puerto de El Callao. Sucesivamente ocupó los puestos de alférez de la Real Armada (1623), capitán de diversas compañías de infantería, caballería y arcabuceros (1626-1629), castellano del castillo de San lldefonso en el estado de Arauco y Tucapel (1629), siendo designado por entonces también "benemérito de aquellas provincias"4 • Todavía residía en Perú en 1639, aunque al año siguiente consiguió licencia del virrey Marqués de Mancera para regresar a su tierra, donde ya se encontraba en junio de 1640. Gracias a los servicios prestados a la Corona y a las certificaciones que se le otorgaron en la Real Audiencia de Chile, don Fernando consiguió el hábito de caballero de Calatrava, tal como consta en los expedientes custodiados en el Consejo de Órdenes (Madrid, 15-111-1642)5. Encabeza este memorial una relación de sus familiares más próximos, paternos y maternos6, así como las distinciones, cargos y hábitos caballerescos alcanzados por algunos de los miembros de su linaje más próximos, a título de"actos positivos" que reforzaban su solicitud de ingreso en esta orden militar. Entre ellos se cita a su padre, Pedro de Rueda y Bustamante, del que se destaca su condición de familiar del Santo Oficio, a sus primos don Bartolomé de Rueda y Ceballos (también familiar del Santo Oficio), al doctor don Felipe de Vi llegas (rector de la Universidad de Alcalá de Henares, colegial mayor del colegio de San lldefonso y canónigo de Sigüenza) y a don Diego de Vi llegas (caballero de Alcántara), así como al hijo de éste, don Fernando de Vi llegas (caballero de Santiago). Tras una prolongada estancia peninsular (1640-1648). don Fernando de Bustamante regresó a Indias, donde continuaría su carrera militar. Entre 1648 y 1656 prestó servicios en varios ejércitos destinados en el virreinato del Perú y en los presidios del Puerto de El Callao. Entre diciembre de 1656 y abril de 1659 ejerció el cargo de gobernador del presidio y fortificaciones de la ciudad de Valdivia (fuertes de San Luis de Alba de las Cruces, ciudad de Valdivia y San Francisco de Vaides). puesto que también llevaba aparejado el mando militar de otros territorios alejados como los de Toltén, Villa rica, Osorno o Chilve. Por estas fechas el virrey Conde de Alba le encargó la construcción de varias defensas que hicieran frente al peligro inglés, incluyendo diversas iglesias en los fuertes de San Sebastián de la Cruz, San Luis de Alva de las Cruzes, en la punta de los Amargos, y en el propio fuerte de la ciudad de Valdivia. En junio de 1660 el virrey Conde de Alba le concedió licencia para regresar nuevamente a la capital del virreinato. Poco después, en agosto de 1661, el nuevo virrey Conde de Santisteban le nombraba Corregidor de la Provincia de los Armaraés, puesto en el que sirvió dos años 7• Tras estos últimos servicios en Indias don Fernando regresó a su solar nativo, haciéndose cargo del mayorazgo familiar, tras el fallecimiento de su hermano Pedro, al que sumó su fortuna personal, atesorada tras sus cuarenta años de residencia en América. Viudo de su primera mujer, Constanza de Becerra y Castro, con la que se había casado en Lima en 1646 a una edad ya madura (41 años) y al encontrarse sin descendencia, decidía volver a contraer matrimonio, el19 de septiembre de 1666, a los 61 años, con una dama del Valle de Toranzo mucho más joven que él, María Josefa de Velasco y Ceballos Neto (natural de Las Presillas). lo que no le impidió engendrar tres hijos: Fernando Antonio (n. 1667). Tomás (n. 1669) y María Teresa (n. antes de 1673).

4 El otorgamiento honorífico del título de"benemérito" en Indias era condición indispensable, en la práctica, para la concesión de una encomienda y fueron la base de la creación de la nobleza titulada en América. Así lo recoge Juan de Solórzano Pereira, en 1648, en su Política Indiana (Libr.l ll, cap.lll, no 1). Cfr. Lira Montt, Luis. "Los beneméritos de Indias y la gestación de la nobleza en América': Hidalguía, 1998,268-269, pp. 497-516. 5 A.H.N. OM-CABALLEROS_CALATRAVA, Exp. 374. 1642. Pruebas para la concesión del Título de Caballero de la Orden de Calatrava de (el Castellano) Fernando de Bustamante y Vi llegas, natural de Ontaneda, hijo de Don Pedro de Rueda Bustamante y de Doña María de Bustamante y Vi llegas. 6 Padres: Pedro de Rueda Bustamante y María de Bustamante (naturales de Alceda - Valle de Toranzo-); abuelos paternos: Hernando de Rueda y María de Bustamante (naturales de Alceda); abuelos maternos: Domingo Ruiz Calderón y Elena de Vil legas y Bustamante (naturales de Alceda). 7 Su hoja de servicios completa, fechada en Madrid el 17 de septiembre de 1689, copia de la que se redactó para la Secretaría del Consejo de Cámara y Junta de Guerra, ha sido publicada íntegra por Escagedo Salmón (Solares Montañeses ... op. cit. pp. 105-1 1O).

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El palacio de los Bustamante en Renedo de Piélagos Don Fernando de Bustamante y su segunda mujer otorgaron testamento el18 de septiem bre de 1673 ante el escribano de Piélagos Juan Calderón, entre cuyas cláusulas se alude a una fundación previa (1669) de sendos mayorazgos a favor de sus dos hijos varones, Fernando Anton io y Tomás, dotados con 20.000 y 14.000 reales respectivamente 8. Al mayorazgo del primogénito se vinculó la casa familiar de Renedo de Piélagos. Esta casona, conocida como Palacio de los Bustamante, fue construida poco después, hacia 1670, por los maestros de cantería del taller de Buelna Juan Fernández de Arenas y Juan Marcano9• En su fachada, portalada y tapias lucen varias piezas armeras con las armas de Bustamante, Rueda, Velasco, Ceballos y sus correspondientes alianzas (Soto y Velarde) 10• En los dos grandes escudos que campean en la fachada principal se incluyen, a la izquierda del espectador, las armas del Gobernador de Valdivia don Fernando de Bustamante (alusivas a los apellidos Bustamante, Rueda, Vi llegas y Calderón), timbradas por yelmo, adornado con lambrequines y mascarillas, acolada con cruz de Calatrava, y, a la derecha, las de su mujer doña María Josefa (con las armas de Velasco, Ceballos, Velarde, Soto y Bustillo), lo que vendría a confirmar que el palacio se construyó a expensas de este matrimonio entre 1670 y 1673 (año del fallecimiento del citado gobernador), a pesar de que la casa se había vinculado desde 1669 al mayorazgo de su primogénito. Las mismas armas se repiten en otros dos escudos situados en las tapias de la casa, más simplificados al carecer de tenantes, timbre, lambrequines y mascarillas. Quienes han sugerido que la casa iniciada por don Fernando (1670) pudo ser finalizada por su hijo, Fernando Antonio, tras el fallecimiento de su progenitor (1673) 11 no han tenido en cuenta que por entonces el heredero del mayorazgo tan sólo contaba seis años, aunque, como inmediatamente comprobaremos, sí se debió a él la construcción de la capilla familiar en la iglesia parroquial de Renedo, veinte años después (1693). La minoría de edad de los tres hermanos y el enlace de su madre, María Josefa de Velasco Ceballos, en segundas nupcias, con el capitán don Bernardo González de Ag üero, provocó un largo pleito sobre la tutela, educación, crianza y administración de sus bienes que se inició a finales de 1678 ante el Alcalde Mayor del Valle de Piélagos y que tuvo que sustanciarse, en apelación, dos años después ante la Chancillería de Valladolid 12 • El profesor Aramburu-Zabala ha supuesto que los citados canteros de Buelna ejecutaron la construcción del palacio de los Bustamante siguiendo las trazas de un maestro de mayor renombre, relacionando el modelo de portalada de esta casa con la que lució la desaparecida casa de los Riva-Agüero de Gajano,

8 La fundación de los citados mayorazgos se protocolizó el1 Ode noviembre de 1669, en Las Caldas de Besaya, ante el escribano de Cudeyo Sebastián de la Torre. Cfr. AA. VV. La escultura funeraria en La Montaña. Santander: Centro de Estudios Montañeses, 1934, pp. 181-183. 9 Son escasos los datos que conocemos de la actividad de estos maestros de cantería. Sabemos que Juan Marca no participó en 1699 como veedor de la obra de reconstrucción de la iglesia de San Vicente de lruz, en el valle de Toranzo. Cfr. Cofiño Fernández, Isabel. Arquitectura religiosa en Cantabria. 1685-1754. Las Montañas Bajas del arzobispado de Burgos. Santander: Universidad de Cantabria-Pa rlamento de Cantabria, 2004, p. 207. Por su lado, Juan Fernández de Arenas fue uno de los maestros que en 1684 contrató la construcción de la iglesia parroquial de San Sebastián de Garabandal, obra en la que también trabajó su hermano Domingo y los hijos de ambos. Cfr. AA. VV. Artistas cántabros de la Edad Moderna. Su aportación al arte hispánico (diccionario biográfico-artístico). Santander: Institución Mazarrasa-Universidad de Cantabria, 1991, p. 216. 10 González Echegaray, María del Carmen. Escudos de Cantabria. Tomo 11, Las Asturias de Santillana. Volumen l. Vitoria: Institución Cultural de Cantabria, 1969, p. 131. El documento consultado por esta historiadora, del que no se incluye referencia exacta, no ha podido ser localizado, hasta el momento, por ningún otro historiador en el Archivo Histórico Provincial de Cantabria. 11 Salazar y Acha, Jaime de. "Memoria viva ... op. cit. pp. 760-761 . 12 A.R.Ch.V. Registro de Ejecutorias. 3009,66. Diciembre de 1680. Ejecutoria del pleito litigado por Juan Calderón Velarde y Pedro González de Soto, vecinos del valle de Piélagos (Cantabria) y Santander (Cantabria), sobre la tutela, educación y crianza de los hijos de Fernando de Bustamante Vi llegas y María Josefa de Velasco, vecinos de Renedo de Piélagos (Cantabria). El pleito fue ganado por los albaceas testamentarios de don Fernando de Bustamante, los citados Juan Calderón Velarde y Pedro González de Soto.

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obra anterior a 1686. Ambas, según nuestro colega, se ajustaron en sus arcos de ingreso a un orden rústico de aspecto cercano al que se reproduce en la portada del libro 111 de Serlio 13, aunque, en nuestra opinión, la portalada de Renedo resulta aún más próxima a los modelos diseñados por el mismo tratadista en alguna de las portadas dibujadas en su Libro Extraordinario'\ especialmente las reproducidas en las láminas 111, VI y XVII, en las que se conjuga el dovelaje rústico del arco con un orden dórico de soportes pareados. Aproximadamente doce años y medio después del fallecimiento del promotor de la construcción del palacio, don Fernando de Bustamante, en marzo de 1686, se procedió a la partición de su herencia, por lo que se contrató a sendos maestros de cantería y carpintería respectivamente, Francisco de Cianea y Domingo de Solórzano, para que llevasen a cabo la tasación de los edificios que lo componían. Tras medir la casa principal, sus accesorias, la portada y el cercado de su corra lada, evaluaron tales estructuras, los materiales con que estaban construidas (sillería, mampostería, albañilería, teja, carpintería y herrajes) y el mobiliario que contenían en un total de 66.000 reales (6.000 ducados), distribuidos de la siguiente manera: Primeramente tasaron la sillería, puertas y ventanas de la casa principal y de la dicha accesoria, inclusa la escalera y cornisa y el empedrado y lo blanco del albañil en 12.200 reales. ltem más tasaron la mampostería de las dichas casas con los medianiles de dentro en 23.320 reales. ltem más tasaron la mampostería de la dicha casa accesoria en 280 reales. ltem más tasaron la portada de las dichas casas con las cercas que le corresponden y cercan el patio de las dichas casas en 1.680 reales. ltem más tasaron las cercas que rodean el solar y el huerto, de las dichas casas en 1.200 reales. ltem tasaron la carpintería de la dicha casa principal acabada como está su teja madera y clavazón en 15.960 reales. ltem tasaron las puertas y ventanas de la dicha casa y las sillas y bufetes y bancos de respaldo y taburetes y las camas de madera con guarnición en 4.200 reales. ltem tasaron los balcones y rejas de fierro, informados de los maestros que los fabricaron y por la experiencia que tienen en la tasación de otros, inclusa la cruz de la veleta, en 6.660 reales. ltem tasaron la carpintería que toca a la casa accesoria que está al mediodía con su clavazón. puerta de madera en quinientos reales 15•

La capilla familiar en la iglesia de Santa María de Renedo de Piélagos Como venimos sosteniendo, creemos que la construcción del palacio de los Bustamante en Renedo de Piélagos se debió a la voluntad y promoción directa del gobernador de Valdivia don Fernando de Bustamante Vil legas. Por el contrario la capilla funeraria del linaje en la iglesia parroquial, tal como avanzamos al inicio de este trabajo, se debió íntegramente a la promoción de su hijo, el caballero de Alcántara, don Fernando Antonio de Bustamante Rueda yVelasco 16, quien lo llevó a cabo a partir del20 de febrero de 1693, fecha en que la contrató con el maestro de cantería de Mogro (Honor de Miengo) Juan Sánchez de Otero 17 •

13 Aramburu-Zabala Higuera, Miguel Ángel. Casonas. Casas, torres y palacios en Cantabria. Santander: Fundación Marcelino Botín, 2001 , T. 11., pp. 130-132. Suponemos que se refiere a la portada de la edición veneciana de 1594. Cfr. Del mismo autor, Arquitectura de los indianos en Cantabria (siglos XVI-XX). Santander: Ed. Librería Estvdio, 2007, T. l., pp. 95-96. 14 Serlio, Sebastiano. Extraordinario libro di Architettura di Sebastiano Serfio, architetto del re christianissimo. In Venecia: Apresso Giouambattista & Marchio Sessa fratelli, 1560 [ed. veneciana de 1566: Libro estraordinario di Sebastiano Serfio bofognese, nef qua/e si dimostrano trenta porte di opera rustica mista con diuersi ordini & uenti di opera dilicata di diuerse specie con fa scrittura dauanti, che narra il tutto. ln Venetia: Appresso Francesco Senese, & Zuane Krugher Alemano compagni, 1566]. 1S Cfr. Salazar y Acha, Jaime de. "Memoria ... " op. cit. pp. 760-761 . 16 A.H.N. OM-CABALLEROS_ALCÁNTARA, Exp. 1330 Bis. Prueba para la concesión del Título de Caballero de la Orden de Alcántara de Fernando Antonio de Rueda Bustamante, natural de Presillas, Valle de Toranzo. 17 A.H.P. de Cantabria. Secc. Protocolos. Ante Francisco de la Riva Velasco. Leg. 642. Doc. S, fols. 73r-76vt". 2D-II-1693. Fueron fiadores de Juan Sánchez de Otero los también maestros de cantería de Mogro Francisco y Juan Sánchez de Coterillo. Cfr. Apéndice documental.

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Figura 1. Capilla de los Bustamante en la iglesia de Santa María de Renedo de Piélagos. Escudo de don Fernando Antonio de Bustamante e inscripción conmemorativa. 1693.

Se trata de una capilla que ocupa un espacio especialmente privilegiado en el interior del templo parroquial, pues está abierta en el lado del Evangelio, junto a la capilla mayor, dominando un amplio espacio que acentúa su fuerte carácter representativo familiar, pues, tanto en su exterior como en su interior, queda identificada su pertenencia al linaje de los Bustamante por medio de elementos simbólicos, plásticos y epigráficos. A lo largo de todo el muro norte interior corre una inscripción (Fig. 1). alusiva tanto al fundador de la capilla como a sus progenitores y esposa, en la que se señala que: ESTA CAPILLA EN QVE lA