La acción colectiva como fuente de empoderamiento personal en un ámbito rural: Proyecto Artesanas del Mar. (Spanish Only)

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Descripción





Acción Colectiva y Empoderamiento 2



La acción colectiva como fuente de empoderamiento personal en un ámbito rural: Proyecto Artesanas del Mar.

Carlos Enrique Escalante Ruíz, Andrea Elena Mcleod Alvarado,
Ileana Gabriela Merino Artiga, Adela Esmeralda Zayas Hernández.
Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas".

Noviembre 28 de 2014

Resumen: El empoderamiento es un proceso fundamental para el desarrollo humano, este puede ser tanto individual como grupal. La acción colectiva puede contribuir al proceso en el nivel personal, a través de la organización, concienciación y movilización. La presente investigación pretende evaluar el impacto que el "Proyecto Artesanas del Mar", realizado en la comunidad San Rafael Tasajera, ha tenido sobre el proceso de empoderamiento en la mujer. Para esto, se creó un instrumento que mide el empoderamiento personal en tres dimensiones: autonomía, autoestima y autoeficacia. Se evaluó a las mujeres que forman parte del proyecto y a mujeres que no se encuentran dentro de una organización comunitaria. Los resultados revelan que no existe una diferencia estadísticamente significativa entre las puntuaciones obtenidas en la escala de empoderamiento de las mujeres dentro del "Proyecto Artesanas del Mar" (M = 24.66, DE = 3.55) y las mujeres que no participaron en dicho proyecto (M = 25.41, DE = 2.35), t (22) = 61 p > 0.05. Estos resultados pueden deberse a que la metodología cuantitativa no alcanzan a profundizar en la medición del proceso de empoderamiento; debido a la subjetividad y complejidad de este constructo. Sin embargo, se encontró, aunque no significativamente, diferencias en el grado de empoderamiento según la ocupación, grado académico e ingreso mensual; lo que refuerza hallazgos de otras investigaciones donde se establece que la mujer no debe limitarse al espacio doméstico sino tener distintos escenarios de movilización y organización, y así, fomentar el empoderamiento.

Palabras clave: acción colectiva, empoderamiento personal, autoestima, autoeficacia y autonomía.


Introducción

Los roles y estereotipos de género están a la base de muchas problemáticas actuales, una de ellas es la poca participación de la mujer en el ámbito público-comunitario. Según el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola la contribución de la mujer se ha visto obstaculizada debido al acceso más limitado que posee, en comparación a los hombres, al ámbito laboral, ingresos, espacios de recreación, servicios y organizaciones comunitarias (FIDA, 2011; citado en Cañas, Guerrero, Rivas, & Villatoro, 2012).

Esta situación es también visible en los ámbitos rurales, ya que la mujer usualmente ocupa un rol tradicional que limita sus campos de actuación. La situación de la mujer en la comunidad San Rafael Tasajera, ubicada en la Isla Tasajera es desfavorable en cuanto a sus niveles de participación y organización comunitaria. Debido a esto, se inició un proyecto llamado "Artesanas del Mar", que busca potenciar el proceso de empoderamiento femenino, desarrollado a la mujer psicológica, social y económicamente, a través de la acción colectiva. La presente investigación busca evaluar el impacto que dicho proyecto ha tenido sobre el empoderamiento personal de la mujer.


Situación actual de la mujer

Los roles de género, por tradición, justifican y naturalizan una serie de creencias que diferencian y delimitan el comportamiento de hombres y mujeres, reduciendo así su campo de movilidad. Desde el nacimiento inicia una construcción social que potencia en los individuos características y habilidades según su sexo, e inhiben otras. De manera que quienes los rodean, dan un trato diferenciado que se ve reflejado en cómo se relacionan con ellos, permitiendo la discriminación de género (Instituto Nacional de las Mujeres [INMUJERES], 2007).

El estereotipo de género, sobre todo en los ámbitos rurales, conlleva a que la mujer ocupe un rol tradicional, convirtiéndose en su principal deber el ser madre, esposa y ama de casa (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura [FAO], 2009). Este elemento es una de las razones que inhibe la búsqueda de una carrera profesional para la mujer; no solo limitándola en su potencial de crecimiento personal, sino que también perjudicando los ingresos familiares y el crecimiento económico y social de las comunidades (FAO, 2009). La poca participación de las mujeres en el ámbito laboral es una realidad actual en El Salvador, lo cual es causa y efecto de la inequidad de género existente. Se establece que en el país los hombres representan el 86% de la fuerza laboral en los ámbitos rurales, mientras que las mujeres tan sólo representan el 34.4% (Dirección General de Estadística y Censos [DIGESTYC], 2010)

El trabajo doméstico es un elemento frecuentemente utilizado para inhibir la participación de las mujeres en los grupos u organizaciones (Zapata, 1999; citado en Delgado, D., Zapata, E., Martínez, B. & Alberti, 2010). Es de vital importancia que la mujer ingrese al área laboral, ya que este, además de ofrecer beneficios económicos, brinda nuevos espacios de acción, interacción social, esparcimiento y desarrollo personal; además, enriquece la identidad y el sentido de utilidad. Diversas investigaciones concluyen que el empleo femenino contribuye a que las mujeres aumenten sus grados de independencia personal, autonomía económica y posibilidades de realización personal. (Corporación Humanas, 2007; Díaz, Godoy & Stecher, 2005; Godoy, Stecher & Díaz, 2007; Grupo Iniciativa Mujeres, 1999; Guzmán, Mauro & Araujo, 1999; Rivera & Guajardo, 1996; Servicio Nacional de la Mujer [SERNAM], 2001; Sharim & Silva, 1998; citado en Godoy y Mladinic, 2009).


La situación de la Mujer en la Isla Tasajera

San Rafael Tasajera es una comunidad rural-costera, localizada en la Isla Tasajera, departamento de La Paz. A partir de un diagnóstico elaborado por Escalante, Ochoa, Rodríguez, Sánchez, Villalta y Zayas (2014), realizado en la comunidad, se describen las siguientes características: está conformada por 295 familias, de las cuales, el 98% se identifica como cristiana-evangélica. Los principales ingresos se dan a través de la pesca, remesas y turismo. En cuanto a la participación comunitaria, existe una Asociación de Desarrollo Comunal (ADESCO) y ocho cooperativas más. La dirección y participación de las mismas es relegada a hombres y líderes religiosos, tienen un mayor protagonismo, mientras que el rol de la mujer en este ámbito se encuentra limitado.

Se describe lo siguiente, referente a la situación de la mujer:

La población femenina es la que más se percibe como vulnerable ante las problemáticas que atañen a la comunidad. El nivel de precariedad económica, también el limitado acceso a salud y a la información-educación, junto a la reproducción de los roles de género tradicionales ponen a esta población en situación de desventaja y marginación. La participación en el ámbito económico productivo es reducida, tienen menor acceso a los recursos, a los espacios, tiempo de recreación y esparcimiento. La mujer es la población con menor participación en posiciones de liderazgo o como integrantes de los grupos organizados de la comunidad (Escalante et al., 2014).

En el análisis de los resultados se identifican tres factores que giran en torno a la problemática central: los escasos espacios de recreación, las relaciones sociales y el difícil acceso a la educación. Estos tres elementos, sin duda repercuten en la problemática central, que es: la escasa participación de la mujer a nivel comunitario; dicha población, entre 15 y 25 años, posee un limitado acceso a espacios de desarrollo integral, lo cual impide formar parte de los procesos de organización. Limitando su campo de acción, movilización y redes de apoyo; lo cual podría generar que la mujer sea vulnerable a sufrir violencia física, emocional o psicológica (Escalante et al., 2014).

¿Cómo superamos la desigualdad?

La situación de desigualdad exige una transformación urgente de la realidad; por lo tanto y como se verá más adelante (ver Método), la propuesta formulada por el proyecto "Artesanas del Mar" va orientada hacia el empoderamiento de la mujer, dentro del marco de trabajo comunitario y la acción colectiva. El empoderamiento es un proceso que involucra tanto al individuo como a su contexto social. Deben existir espacios en la comunidad donde la mujer pueda establecer relaciones que contribuyan a comprender el proceso que va orientado a transformar la naturaleza y dirección de las fuerzas del sistema que excluyen y marginan a la mujer y a otros sectores vulnerables (Sharma, 1991-1992, citado en Batliwala, 1997).

Las relaciones de poder se mantienen cuando la mujer depende económica, psicológica y socialmente de un hombre. La redistribución del poder, es posible cuando se potencia, en el sector femenino, las habilidades y capacidades para transformar la propia vida y realidad comunitaria. El empoderamiento es visto como un "proceso que va desde adentro hacia afuera", por lo tanto se inicia primero el proceso para adquirir una fortaleza interna, el cual es un proceso individual y subjetivo (Murguialday, 2006).

Para Jo Rowlands (1997, citado en Fundación para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior [FRIDE], 2006) el empoderamiento es un proceso tridimensional, conformado por una dimensión personal, relacional y colectiva. La investigación se centra en la dimensión personal, donde el individuo gana poder sobre sí mismo en su interacción con el ambiente. La dimensión personal del empoderamiento supone el desarrollo de un sentido del "yo", teniendo como base un individuo autónomo y libre; contribuyendo a la fortaleza de la confianza en sí mismo.

Para la FRIDE, 2006 el poder se entiende como la capacidad de hacer y tomar decisiones propias. El ganar poder desde adentro, se basa en la generación de confianza en uno mismo y en la propia valía. Es decir, el darse cuenta de los recursos personales que están ligados al mejoramiento de la percepción sobre sí mismo; influyendo de manera positiva sobre la autoestima, autonomía y autoeficacia. Cada uno de ellos se enlazan entre sí y la potenciación de uno influye sobre la del otro.

La movilización de la conciencia sobre la propia situación y sus causas, proporciona un sentido de control y dota a la persona de la capacidad de hacer, por medio de la toma de decisiones propias (Murguialday, 2006). Por lo tanto, dentro de la actual investigación se utilizarán estos tres componentes para medir el empoderamiento, asumiendo que el desarrollo de estos es un indicador de avance en el proceso de empoderarse como persona, y sin ellos no podría decirse que ha habido empoderamiento. A continuación se describen cada uno de estos elementos:

La autoestima, según Resines (1999; citado en Sierra, 2012), es definida como el sentimiento de aceptación y aprecio hacia uno mismo, que impulsa a la persona alcanzar sus metas y objetivos. Se construye a través de un proceso interno y uno externo; el primero se da por medio de experiencias personales, mientras que el externo se forma a partir del contacto de la persona con el medio (Bolívar y Vargas, 2001; citado en Sierra, 2012). Al tener la oportunidad de trabajar y esparcirse fuera del ámbito familiar, el proceso de construcción del autoestima de la mujer puede llevarse a cabo efectivamente; de lo contrario puede verse doblemente afectado. Primero, porque no se le permite experimentar diversas situaciones que pueden calificarse como exitosas; y segundo, porque no existe una retroalimentación de los otros/as que favorezca la valoración positiva de sí misma. El empoderamiento exige el desarrollo de una autoestima positiva y saludable ya que si no se valoran las propias capacidades no se tendrá el poder para actuar, transformar e influir sobre la propia realidad (Instituto Mexicano del Seguro Social [IMSS], 2003).

La Consultora de la División de Asuntos de Género de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL, 2010) define la autonomía como el grado de libertad con la que la persona cuenta para actuar conforme a su propia elección y no de acuerdo a la de otros. La autonomía, está compuesta por tres dimensiones: física, económica y política; en este sentido, se relaciona a la distribución, el acceso, el uso y el control de los recursos productivos con los que cuenta una persona, ya que estos facilitan el poder de decisión sobre su destino. La actividad económica de las mujeres es una dimensión que está estrechamente ligada a la autonomía; aquellas mujeres que realizan actividades independientes al trabajo doméstico tendrán niveles de autonomía significativamente más altos que aquellas mujeres que no las realizan (Benería & Roldan, 1987; De Barbieri, 1984, citado en García & Oliveira, 2004). La adquisición de autonomía de una mujer no se limita al plano individual, sino que esta dependerá de la autonomía con la que cuentan otras mujeres dentro de su misma comunidad (Organización de las Naciones Unidas [ONU], 2005). Esto implica la construcción de espacios grupales para potenciar el empoderamiento tanto individual como colectivo.

La mujer al no tener diversos espacios de actuación se enfrenta con la desventaja de no poder conocer y valorar todas las habilidades que posee, lo cual obstaculiza su actuar. La autoeficacia, según Bardales, Díaz, Jiménez, Terreros, & Valencia, (2006), es considerada como la creencia de las propias capacidades para ejecutar una determinada tarea, influir sobre esta y manejar las demandas de su entorno social. La autoeficacia determina las conductas de las personas, ya que influye en aspectos como la orientación de los esfuerzos para alcanzar una meta u objetivo, la perseverancia para superar una determinada situación, los patrones de pensamiento y las reacciones emocionales que se puedan experimentar en la realización de una actividad (Olaz, F., 2003). Por lo tanto, el proceso de empoderamiento supone aumentar la autoeficacia, es decir, pasar de la reacción a la acción, lo cual implica el involucramiento activo del individuo en su propio proceso de desarrollo (Trevithick, 2006, 217; citado en Silvestre, M., Royo, R., Escudero, E., 2013).
¿Cómo alcanzar el empoderamiento personal colectivamente?

La intervención "Artesanas del Mar" se establece como un proyecto de acción colectiva, el cual se enmarca dentro de una metodología de trabajo social-comunitario. El trabajo comunitario se establece como un proceso que está íntimamente relacionado a la organización, definida como un intento para generar grupos de personas que comparten intereses; para cohesionar e integrar a los habitantes y poblaciones de los barrios (M.G Ross, 1967; citado en Barbero y Cortés, 2005). De esta forma, la tarea fundamental del trabajo comunitario es juntar a personas y ayudarlas a crear y mantener una organización que conseguirá sus objetivos.

Dentro del marco interventor del trabajo comunitario y los grupos que este pretende conformar, hay elementos más específicos relacionados a la interacción social, que se vinculan a otros procesos de la organización que solo pueden ser alcanzados mediante la acción colectiva (Delgado, 2005). Barbero y Cortés (2005) definen que la acción colectiva aparece como un conjunto intencional de actividades, relaciones, recursos, formas organizativas, formas de hacer, etc., que tienen como objetivo la transformación de las interacciones colectivas que se dan en un espacio social determinado. En la misma línea, Melucci (1996; citado en Morales, Mario A., 2012) menciona que la acción colectiva se refiere a una serie de actividades y conductas orientadas hacia el logro de fines específicos, emitidas simultáneamente por una conjunto de individuos, quienes exhiben características similares en un mismo lugar y tiempo y son capaces de dar sentido a lo que hacen a través de sus relaciones sociales.
La acción colectiva, no sólo se intenta construir una organización; sino poner las bases para que ejecute acciones como un actor racional; es decir, trabajando para que actúe tomando en consideración las características que influyen en su situación social y sus potencialidades [conciencia]; y que conforme a estas, ejecute las acciones que considere más útiles para conseguir los fines que se proponga [movilización] (Barbero y Cortés, 2005). De manera que, en relación al trabajo comunitario, la acción colectiva le asigna un carácter de especificidad y autonomía y le otorga un perfil en el cual el trabajo comunitario viene a ser más que la suma de los comportamientos individuales (Melucci, 1996; citado en Villanueva & Massetti, 2007).

Dumas y Seguier (1997; citado en Barbero y Cortés, 2005) identifican en el seno del trabajo comunitario y la acción colectiva, tres ejes o dimensiones de carácter transversal: a) el eje de organización, b) el eje de concienciación y c) el eje de movilización (Ver gráfico 1) Estos se describen a continuación:

Organización:
Gráfico 1. Las dimensiones del Trabajo Comunitario (Barbero y Cortés, 2005).Las investigaciones de Stromquist (1997, citado en Murguialday, 2006) ligan el empoderamiento con la participación, estableciendo que al formar parte de una organización, las personas dan inicio a su proceso de empoderamiento individual. Al mismo tiempo, Mosedale (2003; citado en Murguialday, 2006) establece que las organizaciones tienden a influir positivamente en la identidad, recalcando que las integrantes de grupos organizados tienen la oportunidad de transitar del "yo" al "nosotras" en el análisis de sus condiciones de vida, para construir una identidad colectiva. La misma autora determina que cuanto más sólida sea la organización que las integrantes construyan alrededor de sus necesidades prácticas, la habilidad de las mismas para lograr que sus intereses estratégicos sean tomados en cuenta será mayor.
Gráfico 1. Las dimensiones del Trabajo Comunitario (Barbero y Cortés, 2005).

La identidad colectiva no surge espontáneamente, requiere de la existencia de interacción en las relaciones y la reflexión conjunta. Se construye con la subjetividad individual y la empatía hacia las experiencias ajenas. Y se afianza mediante procedimientos sistematizados de organización y desarrollo de la actividad, integración y cohesión grupal; los cuales permiten la acción y progreso del grupo. Los mismos no deben considerarse como fines en sí mismos, sino como instrumentos para el logro de los objetivos colectivos (García, Moreno, Martínez, & Barranco, 2010).

Concienciación:
En el ámbito del trabajo comunitario, Batliwala (1997; citado en Murguialday, 2006) ha concluido que la concientización o reflexión colectiva sobre la subordinación femenina es la principal puerta de entrada a los procesos de empoderamiento. Este requiere, en primer lugar y sobre todo, que las mujeres comprendan los complejos factores que generan su subordinación y se movilicen para enfrentarlos. Los "talleres" son metodologías que ofrecen a las personas la oportunidad para el aprendizaje de nuevas habilidades, el intercambio de experiencias y la reflexión colectiva, para que tomen conciencia sobre su vivencia personal y su contexto social (Murguialday, 2006). En los proyectos de acción colectiva, son los individuos que integran el grupo, quienes le otorgan el sentido a la actividad que realizan (Melucci, 1996; citado en Villanueva & Massetti, 2007).

Movilización:
La movilización surge de una transformación significativa de la conciencia colectiva de los individuos implicados en un grupo. La acción colectiva multiplica los poderes individuales al asumir que un grupo actuando coordinadamente logra más que las personas aisladas. El fortalecimiento del empoderamiento, desarrolla en el individuo la toma de decisiones y le hace sentir que es capaz de realizarse dentro de un ámbito social (Aramburú, 2001). La movilización, elemento central de la acción colectiva, se expresa en la capacidad de un colectivo para presentar una solución común a sus problemas, permitiendo que todas las potencialidades se expresen en una agenda grupal que también se asume individualmente (Deere & León 2000, citado en Murguialday, 2006). En los proyectos de acción colectiva se supone que la persona, progresivamente, se transforme en agente de cambio, que tome parte en las decisiones para definir prioridades, planificar soluciones y demandar el acceso a los servicios comunitarios necesarios (Lamadrid y Ceron, 2004).

Las orientaciones y las dinámicas sociales suscitadas por los proyectos de acción colectiva, se corresponden con cada uno de estos elementos. De manera que estas iniciativas consisten simultáneamente en: a) reforzar los vínculos de interacción, a la vez internos o externos, en el marco del proceso de organización, b) trabajar la identidad del actor, permitiendo la identificación colectiva de los miembros del grupo en un proceso de concientización; y c) construir una relación de fuerzas y negociar sobre los retos colectivos y sociales con los actores institucionales, a través del proceso de movilización (Barbero y Cortés, 2005). Es así como se comprueba que la presencia de organizaciones de mujeres en las comunidades se relaciona positivamente con el nivel de participación que tienen en el ámbito público (Salas, 1996).

Método

La investigación fue llevada a cabo en la comunidad San Rafael Tasajera, Isla Tasajera; departamento La Paz. Esta pretende evaluar el nivel de impacto que tuvo la intervención "Artesanas del Mar" sobre el empoderamiento personal, específicamente en las dimensiones de autonomía, autoestima y autoeficacia, de las jóvenes habitantes de la comunidad.

El proyecto "Artesanas del Mar" se inició a mediados del mes de junio de 2014, este fue un proceso de respuesta a la situación de vulnerabilidad económica y social a la que se enfrenta la mujer, ya que ellas no cuentan con oportunidades laborales y de esparcimiento más allá del ámbito familiar. El proyecto supone que a través de la acción colectiva orientada al desarrollo de habilidades para crear un micro-negocio de artesanías, la mujer comienza su proceso de empoderamiento personal, al mismo tiempo que tiene la oportunidad de crear lazos significativos con otras integrantes del grupo. Este proyecto supuso la formación de un grupo de 23 jóvenes locales de la comunidad, incluyendo edades de entre 15 y 25 años, el cual se integraría para crear una de las primeras organizaciones comunitaria exclusiva de mujeres.

Diseño
Para la presente investigación se utilizó un diseño cuasi-experimental, de series temporales con grupo control no equivalente, con pos-prueba únicamente; es un experimento de campo y se ubica dentro del paradigma cuantitativo (Hernández-Sampieri, Fernández & Baptista, 2006). La muestra se subdividió en dos grupos, el grupo control y el experimental, en los cuales las participantes no fueron asignadas aleatoriamente debido a que son grupos intactos.

La evaluación, a través del cuasi-experimento, permite comparar las dos subdivisiones de la muestra. Esto con el objetivo de analizar si la acción colectiva (VI) ejerce una influencia sobre el empoderamiento personal de la mujer (VD). Se hipotetiza que las jóvenes que conformaron el grupo experimental muestren un impacto positivo sobre su autonomía, autoestima y autoeficacia, lo que se considera un indicador de empoderamiento personal.

Debido a que el proceso evaluativo requiere de la participación de personas se tomaron las medidas éticas necesarias. Fue obtenido el consentimiento informado de los padres/madres o responsables de las jóvenes, menores de 18 años, para participar en la investigación. Para aquellas participantes que no contaban con la presencia de su padre o madre, se pidió la autorización de sus responsables legales. También se obtuvo el consentimiento informado de todas las jóvenes que participaron en en la investigación.


Participantes
Para la presente investigación se contó con la participación 24 habitantes de la comunidad San Rafael Tasajera. El total de participantes se dividió en dos grupos; por lo tanto, 12 personas conformaron el grupo control y las otras 12 conformaron el grupo experimental. Para obtener resultados confiables se trató de homogeneizar ambos grupos de la mejor manera posible, asegurando que la única diferencia entre ellos fuese la intervención realizada. Todas las participantes son del género femenino, se encuentran en la etapa de la adolescencia/juventud, sus edades oscilan entre los 15 y los 25 años de edad, poseen al menos un nivel de educación básica y actualmente no se encuentran insertas dentro del ámbito laboral.

Instrumento
Para medir el empoderamiento personal se construyó una escala de 18 ítems basada en la Escala de Autoestima de Rosenberg (1965 citado en Hernández y García, 2008) y la Escala Para Medir Agencia Personal y Empoderamiento [ESAGE] (Pick et al., 2007). Debido a que los ítems del instrumento construido fueron extraídos de dos escalas diferentes se decidió llevar a cabo una prueba piloto, en la cual participaron 12 habitantes de la isla. La confiabilidad del instrumento se midió a través del análisis alfa de Cronbach, la escala obtuvo un coeficiente inicial de 0.64. Para aumentar la confiabilidad se eliminaron 6 ítems y el resultado final del alfa de Cronbach fue de 0.77, quedando la "Escala de empoderamiento personal" conformada por 12 ítems (ver anexo tal).

El instrumento es de tipo Likert y cuenta con cuatro posibles opciones de respuesta para cada reactivo. El tiempo de realización oscila entre 10 y 15 minutos. Las respuestas poseen 4 puntos (Totalmente desacuerdo= 1, Desacuerdo= 2, Acuerdo= 3 y Totalmente de acuerdo= 4); por lo tanto, a mayor puntaje menor empoderamiento. La escala puede ser aplicada individual y/o colectivamente y es auto-aplicable; cada participante debe marcar con una "X" la opción de respuesta que más corresponda con su punto de vista. En caso de que una de las participantes no pueda contestar por sí sola la escala, los investigadores le otorgaran la ayuda que le sea necesaria.
Procedimiento
La evaluación del grupo experimental se realizó en una de las sesiones del proyecto "Artesanas del Mar". Se hizo saber anteriormente a las participantes que se llevaría a cabo una investigación sobre su proceso de empoderamiento, para la cual ellas deberían contestar una escala. Se procedió a pasar el consentimiento informado a las participantes del grupo y si estaban de acuerdo se les aplicaba la "Escala de Empoderamiento Personal", la cual está dirigida a medir los indicadores del proceso empoderamiento de la mujer, entendidos aquí como: autonomía, autoestima y autoeficacia. La evaluación del grupo control se hizo posterior a evaluación del grupo experimental. Se siguió el mismo procedimiento para el levantamiento de datos, donde primero se pasaba el consentimiento informado a las participantes y luego contestaban la escala. Al finalizar se les agradecía su valiosa participación en el estudio.

Resultados
En la presente investigación se utilizó un T de Student para comparar el grupo control, conformado por 12 participantes, y el grupo experimental, igualmente conformado por 12 personas. Se compararon los resultados de las puntuaciones obtenidas en la "Escala de empoderamiento personal", la cual pretende medir el empoderamiento a través de 3 dimensiones: autonomía, autoestima y autoeficacia, en donde un puntaje alto revela un nivel de empoderamiento personal bajo.

La Tabla 1 y la Tabla 2 muestran que no existe una diferencia estadísticamente significativa entre los puntuaciones obtenidas en la escala de empoderamiento de las mujeres dentro del "Proyecto Artesanas del Mar" (M = 24.66, DE = 3.55) y las mujeres que no participaron en dicho proyecto (M = 25.41, DE = 2.35), t (22) = 61 p > 0.05.

Tabla 1 – Estadísticos Descriptivos.

Grupo
N
Mean
Std. Deviation
Std. Error Mean
Escala
Total
Control
12
25.4167
2.35327
.67933

Experimental
12
24.6667
3.55050
1.02494





Tabla 2 - Prueba T para muestras independientes

Levene's Test for Equality of Variances
t-test for Equality of Means

F
Sig.
t
df
Sig. (2-tailed)
Mean Difference
Std. Error Difference
95% Confidence Interval of the Difference








Lower
Upper
Escala
Total
Equal variances assumed
1.875
.185
.610
22
.548
.75000
1.22963
-1.80010
3.30010

Equal variances not assumed


.610
19.101
.549
.75000
1.22963
-1.82273
3.32273




Se analizaron algunas variables socio-demográficas, como edad, ingresos, escolaridad, etc., para examinar su influencia sobre el empoderamiento de las mujeres, tanto del grupo control como del grupo experimental. Para dicho análisis se utilizó una ANOVA de un factor, la cual demuestra que ninguna de las variables socio-demográficas analizadas exponen diferencias estadísticamente significativas, sin embargo se muestran los resultados donde se observa una mayor diferencia en las medias de los grupos según la variable estudiada, lo cual podría ser un indicador de empoderamiento personal.

En la Tabla 3 y en la Tabla 4 se muestra que la variable Ocupación se encontraba dividida en 4 grupos: Estudiante (M = 24.22, DE = 3.19), Empleada (M = 26.83, DE = 1.13), Ama de casa (M = 25, DE = 2.61) y Otro (M = 22, DE = 0). El análisis de la ANOVA de un factor afirma que no existen diferencias significativas entre el empoderamiento de la mujer dependiendo de la ocupación que ella realiza, F (3,20) = 1.369, p>0.05. A pesar de ello, se señala que las mujeres que son estudiantes muestran una media menor al resto del grupo; lo que podría estar indicando un mayor nivel de empoderamiento en esta población.

Tabla 3 – Estadísticos descriptivos
Ocupación
N
Mean
Std. Deviation
Std. Error
95% Confidence Interval for Mean
Minimum
Maximum





Lower Bound
Upper Bound


Estudiante
9
24,2222
3,19287
1,06429
21,7680
26,6765
19,00
30,00
Empleada
6
26,8333
2,78687
1,13774
23,9087
29,7580
23,00
30,00
Ama de casa
8
25,0000
2,61861
,92582
22,8108
27,1892
21,00
29,00
Otro
1
22,0000
.
.
.
.
22,00
22,00
Total
24
25,0417
2,97057
,60636
23,7873
26,2960
19,00
30,00




Tabla 4 - ANOVA

Sum of Squares
df
Mean Square
F
Sig.
Intergrupal
34,569
3
11,523
1,369
,281
Intragrupal
168,389
20
8,419


Total
202,958
23












En la Tabla 5 se encontró que la variable Nivel de estudio se encontraba dividida en 4 grupos: Primaria (M = 26.75, DE = 2.50), Secundaria (M = 26, DE = 2.82), Bachiller (M = 23.91, DE = 3.05) e Universidad (M = 25, DE = 0). El análisis de la ANOVA, mostrada en la Tabla 6, afirma que no existen diferencias significativas entre el empoderamiento de la mujer dependiendo del nivel de estudio con el que cuenta, F (3,20) = 1.308, p>0.05. Sin embargo, se muestra que las mujeres que tiene un nivel de educación de bachillerato poseen una media menor al resto del grupo; lo cual podría señalar un mayor nivel de empoderamiento en esta población.

Tabla 5 - Descriptivos
Nivel de Estudio
N
Mean
Std. Deviation
Std. Error
95% Confidence Interval for Mean
Minimum
Maximum





Lower Bound
Upper Bound


Primaria
4
26,7500
2,50000
1,25000
22,7719
30,7281
24,00
30,00
Secundaria
7
26,0000
2,82843
1,06904
23,3841
28,6159
22,00
30,00
Bachiller
12
23,9167
3,05877
,88299
21,9732
25,8601
19,00
29,00
Universidad
1
25,0000
.
.
.
.
25,00
25,00
Total
24
25,0417
2,97057
,60636
23,7873
26,2960
19,00
30,00


Tabla 6 - ANOVA

Sum of Squares
df
Mean Square
F
Sig.
Intergrupal
33,292
3
11,097
1,308
,299
Intragrupal
169,667
20
8,483


Total
202,958
23












Finalmente, en la Tabla 7, se muestra el estudió de la variable Nivel de Ingresos, la cual se encontraba dividida en 4 grupos: Mujeres que cuentan con un ingreso de $25.00 - $50.00 (M = 25.75, DE = 1.89), $51.00 - $75.00 (M = 25, DE = 0), $76.00 - $100.00 (M = 25.45, DE = 2.84), y más de $100.00 (M = 22.50, DE = 2.64). En la Tabla 8 se muestra el análisis de la ANOVA de un factor, esta afirma que no existen diferencias significativas entre el empoderamiento de la mujer dependiendo de la cantidad de ingresos mensuales, F (4,19) = .880, p>0.05. A pesar de estos resultados, se señala que las mujeres que cuentan con ingresos de más de $100.00 mensuales muestran una media menor al resto del grupo; lo que podría revelar un mayor nivel de empoderamiento en esta población.






Tabla 7 – Descriptivos
Nivel de Ingresos
N
Mean
Std. Deviation
Std. Error
95% Confidence Interval for Mean
Minimum
Maximum





Lower Bound
Upper Bound


$25.00 - $50.00
4
25,7500
1,89297
,94648
22,7379
28,7621
23,00
27,00
$51.00 - $75.00
1
25,0000
.
.
.
.
25,00
25,00
$76.00 - $100.00
11
25,4545
2,84125
,85667
23,5458
27,3633
21,00
30,00
Más de $100.00
4
22,5000
2,64575
1,32288
18,2900
26,7100
19,00
25,00
Dato perdido
4
25,7500
4,42531
2,21265
18,7084
32,7916
21,00
30,00
Total
24
25,0417
2,97057
,60636
23,7873
26,2960
19,00
30,00


Tabla 8 - ANOVA

Sum of Squares
df
Mean Square
F
Sig.
Intergrupal
31,731
4
7,933
,880
,494
Intragrupal
171,227
19
9,012


Total
202,958
23




Discusión

Según los resultados, no existe una diferencia significativa en el empoderamiento personal entre mujeres organizadas en una acción colectiva y las que no lo están. Pero hay que tomar en cuenta que el empoderamiento es un proceso amplio en su significado y subjetivo en su interpretación. Por estas dos características, medirlo con un instrumento homogéneo y general, no resulta justo a las diferencias individuales. La evolución del propio empoderamiento depende de la situación en la que la mujer se encuentra a nivel personal, emocional y psicológico; por ende su medición debe de ser personalizada y de acuerdo al proceso de cada mujer.

De acuerdo con Foucault (1994; citado en Isaza, Álvarez., 2014). Los procesos de empoderamiento están constituidos por una subjetividad particular, por lo cual las mujeres adquieren empoderamiento en tanto lo legitiman desde su sujeto esencial y desde su propia historia como sujeto parte de un contexto social. Por lo tanto, el empoderamiento se vera reflejado en cada mujer según ella misma y en un proceso personal, diferente al del grupo.

Por otro lado, el adquirir poder sobre la propia vida, lleva un proceso y tiempo distinto en cada mujer; dos historias pueden ser similares pero no iguales. La medición de dicho proceso debe ser tomando como base comparativa, la historia personal de la mujer y no la historia colectiva. El instrumento utilizado, probablemente no alcanzó a medir la profundidad del proceso de empoderamiento personal ya que este, consistía en una cantidad de ítems que limitaba a la persona a encasillarse n una opción de respuesta dada.

Por otra parte, otro aspecto metodológico que pudo influenciar en los resultados de la investigación, es la muestra considerada para la realización del mismo. Esta muestra no fue la suficientemente representativa para obtener resultados válidos y confiables.

A nivel más específico, en el análisis de las variables sociodemográficas, se encontraron diferencias en el empoderamiento según ocupación, nivel de estudio e ingresos; aunque estas no fueron significativas, se puede inferir que estas influyen de alguna manera en el proceso de empoderamiento. Las participantes con un nivel académico más alto tienen mayor empoderamiento que un ama de casa. Así mismo, influye el ingreso económico con el que las participantes cuentan mensualmente. Esto apoya la idea de que si la mujer, posee diferentes escenarios de movilización donde el ambiente le exija, ella va a responder en su capacidad de hacer y tomar decisiones propias. Además que el trabajo doméstico la limita en la búsqueda de poder dentro de ella misma, obstaculizando la percepción de su propia valía.

Comparando los resultados de esta investigación con el estudio de Barreda, D. & Gándara, G. (2007) en su investigación "Empoderamiento femenino y desarrollo rural: evaluación de un programa". La acción colectiva que se promueve mediante la organización es necesaria para que la mujer ponga en uso y promueva la adquisición de nuevas habilidades que respondan a las necesidades del ambiente. Por lo que aunque si bien el empoderamiento se da a nivel personal, surge desde un colectivo.

Los incrementos en el empoderamiento personal se trasladan al plano de las relaciones interpersonales, y a un mayor aumento de autoestima y dignidad de las mujeres, ya que la adquisición de empoderamiento promueve la expresión de opiniones, habilidades, participación en nuevos espacios e interacción grupal. Por esto es que el instrumento debe ir diseñado para medir los elementos anteriores. Dichos elementos no pueden medirse desde una metodología cuantitativa ya que son de carácter subjetivo y practico. Asimismo debe, por su carácter colectivo, medir las relaciones formadas dentro de la organización no solo el nivel personal.


Recomendaciones
Los resultados obtenidos en la investigación sugieren cambios en la metodología utilizada. En primer lugar, se cree que cuando se desee estudiar el constructo de empoderamiento es fundamental utilizar un paradigma cualitativo, ya que este analiza de mejor manera la realidades subjetivas, cuenta con una mayor riqueza interpretativa y contextualiza el fenómeno (Hernández-Sampieri, Fernández & Baptista, 2006). El enfoque cuantitativo es utilizado para medir fenómenos, pero no toma en cuenta su profundidad; debido a que el empoderamiento no es un proceso lineal sino que puede también sufrir de retrocesos no es recomendable utilizar dicho enfoque, ya que este puede solo medir una pequeña parte del proceso. Por lo tanto, un enfoque cuantitativo no es suficiente para medir el proceso de empoderamiento, pues este no alcanza a tomar en cuenta su gran amplitud.
En segundo lugar, se recomienda que futuras investigaciones tomen en cuenta una muestra más significativa de la población. Al mismo tiempo se piensa que se debería incluir a otras poblaciones, como niñez, mujeres adultas y mujeres mayores, con el propósito de comparar los resultados.También se considera importante tomar en cuenta a la población masculina, ya que el hombre debe formar parte del proceso de empoderamiento de la mujer. Por esto, es recomendable realizar una investigación comparativa entre hombres y mujeres para analizar la actitud que se tiene frente al proceso de empoderamiento femenino.
Sería importante, al mismo tiempo, no solo comparar a dos poblaciones o grupos diferentes, sino también realizar investigaciones con pre y pos-prueba, ya que estas ayudan a tener mayor claridad sobre la situación actual de la mujer y su posterior evolución. El estudio del empoderamiento exige una continuidad, por lo que es aconsejable que se dé un seguimiento al proceso de los individuos para observar la estabilidad que se mantiene en los niveles de empoderamiento.
La actual investigación se realizó dentro del marco evaluativo del proyecto "Artesanas del Mar". Por lo tanto, se recomienda que para futuras intervenciones e investigaciones sobre el concepto de empoderamiento se considere como esencial primero contar con un marco teórico y una investigación que provea claridad sobre las dimensiones en las que se va intervenir, como se van a intervenir y qué metodología es la más adecuada para hacerlo. Lo cual no solo es beneficioso para la creación de conocimiento teórico y práctico, sino también lo es para los participantes de las comunidades en donde se aplica la intervención/investigación.

Referencias

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Anexos

Anexo 1. Esquema de la intervención/investigación.



















Anexo 2. Escala de Empoderamiento Personal

Este test tiene por objeto evaluar el sentimiento de satisfacción que la persona tiene de sí misma. Por favor, conteste las siguientes frases con la respuesta que considere más apropiada.

A. Muy de acuerdo
B. De acuerdo
C. En desacuerdo
D. Muy en desacuerdo

Edad: ____
Ocupación: Estudiante___ Empleado ___ Otro ___
Estado Civil: Casado____ Soltero____ Divorciado___ Unión Libre___
Nivel de educación: Educación Primaria___ Educación Secundaria ___ Bachiller___

1 = incorrecto
2 = apenas cierto
3 = más bien cierto
4 = cierto


#
Código
Preguntas
Puntaje



1.
ESTIMA
Soy capaz de hacer las cosas tan bien como la mayoría de la gente.
1
2
3
4
2.
ESTIMA
En general estoy satisfecha de mí misma.
1
2
3
4
3.
ESTIMA
En general, me inclino a pensar que soy una fracasada.
1
2
3
4
4.
ESTIMA
Me gustaría poder sentir más respeto por mí misma.
1
2
3
4
5.
EFICACIA
Puedo resolver problemas difíciles si me esfuerzo lo suficiente.
1
2
3
4
6.
EFICACIA
Si me encuentro en una situación difícil, generalmente se me ocurre qué debo hacer.
1
2
3
4
7.
EFICACIA
Necesitaré ayuda para manejar adecuadamente acontecimientos inesperados.
1
2
3
4
8.
EFICACIA
Cuando me encuentro en dificultades puedo permanecer tranquila porque cuento con las habilidades necesarias para manejar situaciones difíciles.
1
2
3
4
9.
AUTONOMÍA
Hago lo que creo que es mejor para mi sin importar lo que otros opinen.
1
2
3
4
10.
AUTONOMÍA
Exijo mis derechos aunque otros no estén de acuerdo.
1
2
3
4
11

AUTONOMÍA
Dejo de hacer lo que me gusta por las opiniones de los demás.
1
2
3
4
12.
AUTONOMÍA
No me gusta ser la primera en hacer cosas nuevas.
1
2
3
4
13.
AUTONOMÍA
Me es dificil expresar mi opinión públicamente
1
2
3
4


Anexo3. Consentimiento Informado para Participante de Investigación

El propósito de esta ficha de consentimiento es proveer una clara explicación a los participantes de esta investigación que contenga la naturaleza de la misma, así como el rol que ejercerán en ella.
La presente investigación es conducida por: estudiante de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas. Este estudio va encaminado a investigar sobre la organización comunitaria dirigida, al desarrollo psicológico, económico y social, y su efecto en el proceso de empoderamiento.

Si usted accede a participar en este estudio, se le pedirá responder un cuestionario que mida el empoderamiento de la mujer. El cuestionario le tomará aproximadamente _ minutos para responderlo. La participación en este estudio es estrictamente voluntaria. La información que se recoge es confidencial y no se usará para ningún otro propósito fuera de los de esta investigación. Sus respuestas al cuestionario serán codificadas usando un número de identificación y por lo tanto, serán anónimas.
Si tiene alguna duda sobre este proyecto, puede hacer preguntas en cualquier momento durante su participación en él. Si alguna de las preguntas le parece incomoda, tiene usted el derecho de informarlo al investigador y/o de no responderla.
Desde ya agradecemos su participación.

Acepto participar voluntariamente en esta investigación. He sido informada que la meta va encaminado a investigar sobre la organización comunitaria dirigida, al desarrollo psicológico, económico y social, y su efecto en el proceso de empoderamiento.
Me han indicado también que tendré que responder a un cuestionario, lo cual tomará aproximadamente 10 minutos.

Reconozco que la información que yo provea en el curso de esta investigación es estrictamente confidencial y no será usada para ningún propósito fuera de los de este estudio sin mi consentimiento. He sido informado (a) que puedo hacer preguntas sobre el proyecto en cualquier momento y que puedo negarme a responder el cuestionario, sin que esto acarree prejuicio alguno para mi persona.
Entiendo que una copia de esta ficha de consentimiento me será entregada, y que puedo pedir información sobre los resultados de este estudio cuando éste haya concluido. Para esto, puedo contactar a cualquiera de los investigadores.



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Nombre del Participante Firma del Participante Fecha



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