Guaraní: La cultura de los profetas de la selva. Esbozo etnohistórico, cultural y socioeconómico: espacio y tiempo. Etnocentrismo y cultura.

July 22, 2017 | Autor: Ilias Tampourakis | Categoría: Paraguay, Paraguayan History, Guarani, Astronomía Cultural, Etnoastronomía, Cultura Guaraní, Arqueología guaraní, Cosmovisión guaraní, Tupi-Guarani, The Guaranis aboriginal identity research, πρωτόγονος «άλλος» ανθρωπολογία ετερότητα δυτικισμός, Guarani Archaeology, Ethnology and Anthropology of the Guaranis and Polynesians, Paraguayan Guarani, Educacion Tupi Guarani, Guarani Indians, Guaranìes Etnohistory, Cultura Material. Kaiowá e Guarani. Confinamento, κοινωνική ανθρωπολογια, κοινωνική ανθρωπολογία, Κοινωνιολογία-Ανθρωπολογία-Βιομηχανική Αρχαιολογία-Εθνοαρχαιολογία και Αστική και Νεωτερική Λαογραφία, Tupí-Guaranian Languages, Lengua Guaraní, Πολιτισμική και μουσική ανθρωπολογία, Cosmovisión guaraní, Tupi-Guarani, The Guaranis aboriginal identity research, πρωτόγονος «άλλος» ανθρωπολογία ετερότητα δυτικισμός, Guarani Archaeology, Ethnology and Anthropology of the Guaranis and Polynesians, Paraguayan Guarani, Educacion Tupi Guarani, Guarani Indians, Guaranìes Etnohistory, Cultura Material. Kaiowá e Guarani. Confinamento, κοινωνική ανθρωπολογια, κοινωνική ανθρωπολογία, Κοινωνιολογία-Ανθρωπολογία-Βιομηχανική Αρχαιολογία-Εθνοαρχαιολογία και Αστική και Νεωτερική Λαογραφία, Tupí-Guaranian Languages, Lengua Guaraní, Πολιτισμική και μουσική ανθρωπολογία
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Descripción

Ηλίας Ταμπουράκης
Καθηγητής Ισπανικής & Πορτογαλικής Γλώσσας & Πολιτισμού
https://idiaiteramathimataxenonglosson.wordpress.com/
Εργασία για το Αυτόνομο Παν/μιο Querétaro, (Μεξικό), Τμήμα Εθνολογίας,
Σεμινάριο: Aproximación antropológica al mundo Tupí-Guaraní del Paraguay.
1991

GUARANI: La cultura de los profetas de la selva.

SUBTITULO:

Esbozo etnohistórico, cultural
y socioeconómico: espacio y tiempo.

INTRODUCCION: Etnocentrismo y cultura.

Presentación.

Un breve estudio etnográfico, referente al medio ambiente de la
cultura guaraní, a los informantes Mby´á, a su cosmogonía e historia, al
pensamiento simbólico, a la organización socio-económica y jurídica y a la
cultura material de estos indígenas.

Las sociedades –dice el Profesor F. F. Armesto de la Universidad de
Oxford- se pueden juzgar en lo que se refiere a su nivel cultural, y esa
decisión se puede tomar solamente investigando su interacción con su
propio medio ambiente. Por eso, un estudio de cualquier civilización debe
comenzar por su marco antropogeográfico.
Las fuentes informativas –sobre todo de las culturas de tradición
oral, como ésas se definen por Louis Jean Calvet- constituyen los cimientos
de la veracidad de las conclusiones. Por dicha razón debe estar siempre en
vigor una colaboración multifacética entre varias ciencias, -y en el caso
de los guaraní, las cuatro ciencias americanistas: la Antropología Física,
la Antropogía Cultural, la Lingüística y la Historia.
El sentido del Tiempo, el cual es de importancia primordial para la
comprensión de una civilización bajo investigación, es un accesorio
insuficiente para el historiador, y se ofrece más para el estudio
etnológico de las culturas en las que el abecedario se ha introducido
recientemente por medio de un idioma "colonizador". Las fuentes escritas
coloniales, en combinación con las orales de la cosmogonía indígena,
recopiladas por León Cádogan, proporcionan una visión global de los
guaraní.
Los mitos o antiguos símbolos *1, son la "Palabra Icónica" de los
Principios de cada sociedad, refiere Luc Benoist, mientras que Freud los
llama "complejos" y Jung utiliza el término de "arquetipos". De todos
modos,
las leyendas, o sea las relaciones contemporáneas de sucesos antiguos que
tienen más elementos tradicionales o maravillosos que históricos,
constituyen la evolución de la "idea cultural", es decir la forma, la
apariencia, la imagen, y consecuentemente la substancia espiritual de
cualquier civilización.
La estratificación social, basada en el parentesco de linajes, la
estructura político-religiosa –la esencia íntima del pensamiento guaraní- y
las instituciones económicas fueron los instrumentos administrativos de su
sociedad.
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*1 Etimológicamente, la palabra "símbolo" se deriva del verbo griego
(clásico) συμβάλλειν, que significa colocar juntos.
I. El marco antropogeográfico: interacciones.

Las Américas proporcionan gran variabilidad en su relieve geográfico y
sus zonas climáticas, lo cual resulta importantísimo desde el punto de
vista cultural. Suramérica presenta la siguiente estructura geológica:
1. la Cordillera de los Andes, hasta done se expandieron los guaraní,
2. el macizo brasileño y el de las Guayanas, separados por la cuenca
amazónica, cuna de los Mby´a o guaraní arcaicos,
3. los Llanos del Orinoco,
4. la Pampa argentina y el Gran Chaco paraguayo, habitado por los guaraní
actuales.
Nueve de los ríos más caudalosos del globo terrestre se encuentran en el
continente americano, y entre ellos:
1. el Amazonas –Madre Patria de los Mby´a,
2. el sistema fluvial del Plata-Paraná, formado a partir de los ríos
Uruguay *2 y Paraguay, zona habitada por los actuales tupí-guaraní.
Desde el sur del Brasil, hasta el el sureste de Argentina y Uruguay, el
clima se caracteriza como "chino", puesto que presenta veranos cálidos y
húmedos de tipo tropical e inviernos suaves y lluviosos.
Las sabanas, la vegetación subtropical y la selva pluviosa
identifican esa vasta región.
La fauna, favorecida por la flora existente, cuenta con diferentes
especies de monos, murciélagos, perezosos *3, yacarés *4, marsupiales,
felinos y roedores excavadores.
El Nuevo Mundo está escasamente poblado, ya que sólo viven
600.000.000 de personas en sus 42.000.000 de km2. Lo que singulariza al
pueblo iberoamericano es su carácter mestizo, resultante de la conquista y
la mezcla racial efectuada a partir del s. XVI d.C. La estirpe amerindia
pertenece a la raza amarilla, si bien forma una raza aparte. Son
xantodermos, tienen el pelo liso y un rostro similar al de los mongoles.
Culturalmente, el continente americano se divide en dos grandes
zonas: la nuclear y la marginal. La América nuclear incluye tres áreas
culturales:
1. Mesoamérica (México, Guatemala, Belice, y parte de Honduras)
2. Area Intermedia (Centroamérica y la mitad norte de Colombia y Ecuador)
3. Area Andina (Sur de Colombia y Ecuador, Perú, Bolivia, norte de Chile
y norte de Argentina).
La América marginal –cuyas culturas no han dejado vestigios arquitectónicos
monumentales, ni escrituras alfabéticas- comprende el resto del continente.
La adaptación humana resulta allí muy difícil; por eso los grupos étnicos
de la zona, como los Mby´a tupí-guaraní nunca sobrepasaron la fase de
jefaturas.


*2 El territorio de la actual República Oriental de El Uruguay no alberga
poblaciones indígenas.
*3 Bradypus variegatus, clasificado dentro de la clase de mammalia y el
orden de edentata.
*4 Reptil de la familia de los caimanes, cuyo espíritu se ha deificado por
los guaraní bajo el nombre de Pa´i, que significa "Sacerdote."

II. Fuentes: los informantes indígenas


y los antropólogos-cronistas.


El estudio de la constitución física de los indoamericanos, su
origen, evolución e historia, sus manifestaciones culturales, sus
costumbres y creencias religiosas y sus lenguas, es una ciencia muy
reciente *7, conocida como "americanismo", y abastecida por datos de la
Botánica, la Geografía, la Psicología y la Arqueología.
Se reconocen dos categorías de fuentes de información:
1. las prehispánicas (arqueológicas, iconográficas, escritas u orales),
2. las hispánicas (documentales y narrativas-testimoniales).
En estas últimas, se incluyen las crónicas histórico-etnológicas y las
obras literarias, teatrales y religiosas de los indígenas y los mestizos,
como los morangú o mitos indígenas, la obra teatral bilíngüe guaraní-
española "Sandía yvyguy" *8 de Julio Correa y los cantos de guerra "Chácore
purahéi" *9, que constituyen parte de la literatura popular que alimenta la
identidad nacional paraguaya. Los Jesuitas –"kechuitas", como los indígenas
los pronuncian- han jugado un papel muy importante en el mantenimiento de
la cultura oral guaraní.
En fin, antropólogos como Rubén Barreiro Saguier, Pierre Clastres,
Bratislava Susnik o León Cádogan *10, han llevado a cabo la complicadísima
tarea de la transcripción (con la ayuda de los símbolos fonológicos
internacionales) de la tradición oral guaraní, entrevistando a personajes-
líderes de la actual sociedad guaraní, como Vicente Gauto o Alberto Medina.


*7 Su primer congreso internacional se celebró en Nancy de Francia, en
1875.
*8 Se trata de una obra costumbrista cuyo autor supo captar la mentalidad
campesina dentro del ámbito de su
propia cultura.
*9 Celebra la batalla de Nanawã ocurrida entre el 20 y el 24 de enero de
1933 en la cual el ejército paraguayo como
"muralla viva" logró oponer resistencia a los ataques bolivianos.
*10 León Cádogan recibió el asiento de los fogones del que reza bien, como
honra de parte de los guaraní, por el
estudio que llevó a cabo acerca de su cultura.

III. Esbozo histórico: una simple hipótesis.

El hombre que llega a América hace 20.000 años *5 aproximadamente, es
portador de la cultura paleolítica superior.
Se puede afirmar que los guaraní son descendientes de grupos
australoides, proto-siberianos, es decir mongoloides, y proto-malayos.
Desde el 2.500 a.C., -período neolítico- hasta el año del
descubrimiento del continente por Colón, y tras una catástrofe ecológica
ocurrida en el área amazónica, grupos representantes del neolítico migran
desde el norte (la región de los caraibes y los arawak), hacia la zona
central sudamericana, habitada en aquel entonces por los gê chaqueños.
Aquellas olas migratorias gozaban de cierta homogeneidad racial: eran
amazónides en paulatino proceso de particularización etnolingüística. Por
medio de la práctica común de la agricultura, la sedentarización aumentó.
Con el crecimiento demográfico, aparecen fenómenos de guaranización y
tupinización, que marcan diferencias entre los proto-mby´á y las etnias
paleo-amazónicas. Entre ellos, los guaraní evolucionaron con más rapidez en
lo que se refiere a la agricultura, adquiriendo así cierta superioridad
ante los "otros" *6.
A finales del siglo XV d.C., llegaron hasta las fronteras del imperio
Inca, y se denominaron "chiriguanos".
Su homogeneidad hizo que los conquistadores españoles les permitieran
un contacto parecido al término francés de "laissez faire, laissez passer"
entre los territorios paraguayos, argentinos, uruguayos, bolivianos,
peruanos, ecuatorianos y guayaneses. En el s. XVII, los jesuitas
contribuyeron a esos contactos, por medio de la evangelización.
La estratificación cronológica de las culturas de tradición oral
constituye más una hipótesis que un resultado histórico, puesto que los
vestigios no son suficientes para la conjetura.


*5 Según Germán Vázquez y Nelson Martínez Díaz (véase bibliografía), esta
fecha se remonta hasta 200.000 años,
pero una fijación alrededor de los 50-40.000 años, o sea, a principios
del período glaciar Wisconsin, sería
la más modesta.
*6 Úsese aquí el término "Otro" con el sentido elaborado por Jean Servier.
(Véase bibliografía).

IV. Etnolingüística: guaraní, una lengua vehicular.

Lengua guaraní es, según Bartolomeu Melià, la denominación genérica
que aplicaron los españoles a todos aquellos modos de hablar que
presentaban manifiestas analogías con el de los Guaraní de las Islas, con
quienes se había entrado en contacto en las primeras explotaciones del Río
de la Plata.
En Brasil, el tupí en el norte y el guaraní en el sur, sirvieron de
"língua geral" en las relaciones con las demás tribus, aunque a lo largo de
toda la costa atlántica la presión europea logró eliminar dichas lenguas.
No solamente desde un punto de vista histórico, sino desde un punto
estríctamente lingüístico se debe distinguir actualmente a un guaraní
paraguayo y un guaraní indígena.
Durante los últimos cinco siglos, la división lingüística y cultural
de los guaraní se distribuye de la siguiente manera: mby´a o cultura
"ayaka", chiripa o cultura "ajo", pa´i tavyterá o cultura "pynaku", guayakí
o cultura "aché" (= los primitivos) y los tapieté o guarayos.
El guaraní jesuítico y el criollo, o jo-para, es hoy en día la lengua
coloquial de los mestizos, hablada en un porcentaje de 93,8% *11 en el
Paraguay. Esta lengua tiende a darle un contenido semántico cada vez más en
consonancia con la realidad socio-cultural y política del país.
Michel Dessaint fija que la estructura de la lengua guaraní presenta
entre otros:
1. substitutos nominales: xe (yo), xeve (a mí), nde (tú), ndeve (a ti),
ha´e (él, ella), ixupe (a él, a ella), ñande (nosotros, as inclusivo),
ñandeve (a nosotros, as inclusivo), ore (nosotros, as exclusivo),
oreve (a nosotros, as exclusivo), peê (vosotros, as), peême (a
vosotros, as), ha´ekuéra (ellos, as), ixupekuéra (a ellos, as).
2. determinativos nominales: (determinativos): ko óga (esta casa), pe óga
(esa casa), amó óga (aquella casa), aipó óga (aquella casa que no se
ve), ko´ã óga (estas casas), umí óga (esas o aquellas casas), aipó
ógakuéra (aquellas casas que no se ven).
3. posposiciones: -gui (de), -guive (desde), -pe (a, en), -peve (hasta),
-goty (hacia), -rupi (por: recorrido), -ári (en, sobre), -rehe (por:
causa),
-guarã (para), -ndi (con: asociación), ´^yrehe (sin), -ixa (como).
4. marcas personales activas: a-po (salto), re-po (saltas), ja-po
(saltamos inclusivo), ro-po (saltamos exclusivo), pe-po (saltáis), o-
po (salta o saltan).
y atributivas: xe-tuya (soy viejo), nde-tuya (eres viejo), ñande tuja
(somos
viejos exclusivo), ore-tuja (somos viejos inclusivo), pende-tuja (sois
viejos), i-tuja (es viejo o son viejos).
5. causativo, factitivo y volitivo: /-mbo/, /-uka/, /-se/.
6. pronombre personal inclusivo y exclusivo: ñande, ore.
El guaraní demuestra cierta tendencia hacia la armonización fonética,
mientras su organización sintáctica de los enunciados depende de la
naturaleza semántica de los elementos predicativos.
En ocasiones rituales o de organización de la supervivencia, como la
caza, se usa además, un lenguaje secreto, místico mejor dicho, que
disfraza las palabras claves, para que los malos espíritus no se den cuenta
de las actividades humanas: "flor de arco" se le llama a la flecha,
"esqueleto de la bruma" a la pipa y "ramajes floridos" a los dedos de la
divinidad llamada Ñamandú (Nuestro Padre Primero y Verdadero).

*11 Fuente: Anuario Iberoamericano 1995, Agencia Efe.

V. Cosmogonía: la teología ecológica de la selva guaraní.*12

Los elementos culturales que identifican a esta nación, en su manera
de concebir el espacio, distribuir el tiempo y compartir la memoria, se ven
reflejados en el lenguaje y en los elementos materiales de vida, así como
en su forma de relacionarse los hombres entre sí y el hombre con el mundo
mágico-religioso. Es fundamental el sentido que los guaraní dan a la
palabra. La muerte es la pérdida de la palabra. Se entierra a una persona
cuando ella ha perdido la palabra, porque ésta es el principio vital que la
anima. Es además el medio por el cual el hombre participa de la divinidad,
pues el hombre es depositario de la Palabra sobre la Tierra, y éste es el
medio que le permite alcanzar la inmortalidad. Los elegidos son los
portadores de las Bellas Palabras Divinas, Ñe´e Porangue´i.
Los "Profetas de la Selva", como aparecen antropológicamente
denominados los guaraní, utilizan hasta en nuestra época estas Palabras, es
decir su mitología religiosa, para transmitir a las nuevas generaciones
indias el sentido de su cosmogonía. Queda claro que el sincretismo ha dado
como resultado productos empobrecidos, pero, a pesar de eso, los Mby´a
continúan hasta hoy a condenar al fracaso toda empresa misionera.
La Primera Tierra Ivy Tenondé que existió anteriormente desapareció
con el diluvio *13, la catástrofe que se produjo porque se olvidó el
respeto de las reglas a seguir sobre la Tierra y el hombre transgredió las
normas. Como consecuencia de esta destrucción se produjo la separación
entre el mundo que puede ser clasificado como social y sobrenatural. La
mediación entre estos dos mundos es la Palabra.
Los guaraní creen –y siguen manteniendo esta creencia, aunque
sicretizada con el Catolicismo, en:
1. una divinidad superior, creadora,
2. la existencia de dioses creadores y héroes civilizadores con
funciones semejantes,
3. genios que se confunden con los hechos de la naturaleza (animismo):
Ywyra Ñe´ery son los árboles de la Palabra-Alma. (Culto de los
muertos).
4. un diluvio universal,
5. las aventuras de los gemelos,
6. la búsqueda de la Tierra Sin Mal (Yvy Mara´e-y).
El gran dios del panteón guaraní es Ñamandú, el Padre Primero y Verdadero,
quien creó la Tierra con cinco Palmeras Eternas, y dio origen a los
vientos, al tiempo y al espacio. Luego colocó cuatro Varas Insignias para
sostener en aquel lugar a los Siete Paraísos. Después, Él creó a los
grandes dioses secundarios, los Padres y las Madres de la Palabra. Karaí es
el espíritu divino de la moderación climática. Tupã es refrescante. Jacairá
es vivificante. Es una Trinidad que se identifica con Ñamandú. A pesar de
eso, Tupã se considera también como hijo de Ñamandú, a quien Él enseñó cómo
recomponer el mundo después del diluvio, causado por Ñande Ru Eté, el dueño
de las brumas densas y tenebrosas, como las que exhala su pipa, haciendo
inhabitable la tierra imperfecta. A pesar de esa división, dios para los
guaraní se considera como una Unidad. Es trino y uno, como Dios del
Cristianismo. Por un lado, Tupã, Karaí y Jacairá constituyen formas
espirituales del mismo Ñamandú. Por el otro lado, el sentido de UNO
equivale en la filosofía teológica de los guaraní con EL MAL. Dicen sus
sabios que todas las cosas sobre la Tierra son Uno y son Malas. Pero están
convencidos que como pueblo no se han creado para el Mal, y que en algún
punto temporal alcanzarán la Yvy Mara´e-y, la Tierra Sin Mal. Para ellos,
los dioses son hombres y los hombres son dioses también. Según su
pensamiento simbólico, lo BUENO no es lo múltiple, sino la DUALIDAD. Los
guaraní son –en su cosmovisión- las últimas personas de la Tierra Enferma
(Yvy Tenondé) que quedan por llegar a ocupar el lugar del rango divino, y
para llegar a eso, han estado errando a través de los siglos. Pobres en
mitos, los guaraní son ricos en pensamiento, dice Clastres, que pueden ser
llamados como Teólogos de la Selva, mientras que Barreiro Saguier afirma
que la densidad del pensamiento y la profundidad del mismo puede hacernos
considerarlos como bizantinos.


*12 Godoy, Marylin: seminario etnológico acerca de los guaraní, Atenas,
1991.
*13 Compárese con las migraciones tribales de la cuenca amazónica,
referidas en el cap. II (Esbozo histórico) de
este estudio.

VI. Organización social: una sociedad sin Estado.

Los guaraní reconocen cuatro categorías de personas que se clasifican
según sus dones de saber escuchar el lenguaje divino:
1. la gente que no posee ningún canto (adolescentes, y adultos que no
pueden dirigir danzas)
2. hombres y mujeres que poseen varios cantos *14, pero que no estén
dotados de un poder suceptible de ser utilizado a fines colectivos.
3. los chamanes (curanderos, clarividentes)
4. los chamanes cuyo prestigio transciende los límites de la comunidad.
El liderazgo se reparte entre dos personajes: el Mburubichá, o Gran Jefe
(administrativo, político) y el Karaí *15, o jefe religioso.
El sistema patrilineal es el que domina las relaciones de parentesco
y la reproducción del grupo se hace por la inserción de los progenitores
de la esposa en la comunidad del esposo, es decir, por la
institucionalización de la filiación masculina. Lévi-Strauss da una
importancia primordial sobre el plan sociológico a las relaciones de
parentesco, que según él es lo mismo que decir intercambio de mujeres.
Actualmente, el Estado y la Iglesia se preocupan en el Paraguay por el
efecto social del concubinato y de las madres solteras, cuando el verdadero
problema consiste en la desigualdad de la unión.
El Estado representado como aparato monopolizador de la violencia
física legitimada fue truncado por la presencia de los conquistadores
españoles. Además, el profetismo tupí-guaraní, la metafísica de lo UNO que
significa lo MALO, rechaza la unificación del poder (oligarquia) como
esencia universal de la sociedad.
Del mismo modo en que la historia de los pueblos con historia es la
historia de la lucha de las clases, la historia de este pueblo sin historia
según nos dice Clastres, es la historia de su lucha contra el Estado.
La inexistencia de una organización jurídica en nombre del Estado,
que regule las relaciones sociales entre los grupos y entre los miembros de
un grupo, hace que no exista una frontera clara que fije los límites y haga
una separación entre agresión pública y privada, entre expedición guerrera
y rapto de mujer.
La mujer, por su parte, está en relación directa con lo que para la
sociedad guaraní es la representación de la impureza: la sangre –líquido
que por excelencia mancha. Ella es la encargada de preparar el cadáver para
el ritual funerario y antropófago, y en el otro caso, se trata del momento
en que la mujer está con la menstruación. En el primer caso, lleva a cabo
una función bienhechora de provecho colectivo, pero en el segundo debe
aislarse de la población masculina.


*14 El canto de la mujer es muy diferente de el del hombre: las melodías
femeninas de las guayakí son tristísimas.
*15 En el Paraguay contemporáneo se le llama Karaí a una persona de alto
cargo, mientras que Karaí guazú
significa Gran Señor, con el sentido de dictador.

VII. Relaciones económicas y cultura material:
el arco es al hombre y el cesto a la mujer.

La conjunción del canasto con la mujer remonta a tiempos míticos,
cuando Nuestro Señor Pa´i hizo a su hija de un canasto, quien por haber
fornicado con Charia o Aña, fue nuevamente convertida en canasto por su
padre. Cádogan señala la diferencia entre el cesto o canasto y el arco: el
primero es un espacio cerrado, un receptáculo, y el otro comporta una
fuerza centrífuga. Como sea, el canasto indica claramente la función de la
mujer en la sociedad como recolectora de frutos silvestres, que nos
recuerda conceptos neolíticos, y el arco es una clara representación del
hombre-cazador de cada sociedad primitiva.
Los cronistas en general definían a los indios como unos haraganes, y
hoy en día los paraguayos continúan diciendo que ésa es gente que no le
gusta trabajar. Cuando se trata en efecto de una economía de subsistencia,
los individuos pasan gran parte de su tiempo buscando comida y no labrando
la tierra. Los guaraní tampoco pasan todo su tiempo buscando comida. Les
basta lo necesario. Por esta actitud se han caracterizado como sociedad de
abundancia.
La vida económica de los guaraní actuales es fundamentalmente
agrícola, y accesoriamente se dedican a la caza, la pesca y a la colecta de
miel y frutos silvestres.

VIII. Cultura material:

Como se refirió anteriormente (vea cap. I: El marco
antropogeográfico), las culturas de la América marginal no han dejado
importantes vestigios arquitectónicos.
Las conglomeraciones de los guaraní, llamadas teko´a, consisten en
chozas redondas, ordenadas de modo circular, incluyendo así el opy, el
templo sagrado semicircular. El concepto esférico simboliza para ellos la
(re)generación de la vida humana y animal: todo lo que crea vida es
redondo, esférico: los huevos de los pájaros, el vientre de la mujer
embarazada, nuestro planeta Tierra, hasta el universo –según la geometría
no euclídica.
En el opy sacro, se guarda el yvyra´i, el esceptro religioso,
decorado con plumas de aves tropicales.
El cesto –símbolo femenino lleva entretejidos motivos geométricos
"para mbói", de la serpiente que según la cosmogonía delimitó con su cuerpo
el primer espacio terrenal.
Los productos alimenticios –fundadores de culturas- tienen en el
Paraguay guaraní al maíz como representante.
León Cádogan, en su libro Ywyrá Ñe´ery (Fluye del Árbol la Palabra),
entrevistó a un personaje indígena, llamado Vicente Gauto, y a continuación
se presenta el diálogo antropológico, redactado según la mentalidad
lingüística del español guaranizado: *16
-¿Cuántas clases de avachi conoces?
-Avachi, conozco avachi amarillo, avachi blanco, avachi moteado, hay
también.
-¿Qué es el mejor?
-El avachi amarillo es el bueno, avachi blanco también, avachi
blanco. Eso no más.
-¿Esas dos clases las dedicáis?
-De ambas clases, sí, se hace kagwijy.
-¿Y mbojape?
-Mbojape, así también.
-Mbojape que debe "fumigar" el Karai, ¿de qué clase de avachi se
hacen?
-Esas se hacen de avachi amarillo.


*16 avachi significa maíz, kagwijy es la chicha, la bebida alcohólica que
se hace del maíz masticado y fermentado, y
mbojape son las tortas (de maíz), como tortillas.

CONCLUSIONES: cultura y personalidad.

Las sociedades de la América marginal, que no presentan monumentos
impresionantes –anteriormente caracterizadas como primitivas por los
antropólogos- logran sobrevivir tan sólo con lo que su medio ambiente les
proporciona, dice el Profesor Armesto (de Oxford). La división mínima del
trabajo entre los Mby´a tupí-guaraní del Chaco paraguayo, que propone a la
mujer recolectora de frutos silvestres y al hombre cazador -reminiscencias
ambas del neolítico- ha evolucionado hoy en día en una agricultura
incipiente –substancial, se podría afirmar- manteniendo a la vez su rostro
de recolector. El chamanismo y el cacicazgo siguen resistiendo en el marco
del parentesco de intercambio "lévi-straussiano" contra el totalitarismo
latinoamericano del siglo XX.
La Historia es más un perseguimiento humano, que una ciencia con el
significado convencional de la palabra, y eso porque el pasado no está
presente en nuestros sentidos: solamente podemos tener una imperceptible
idea de las impresiones y percepciones de los antepasados acerca de su
espacio y tiempo. Y eso ocurre con la Historia mítica de los guaraní, que
está entrelazada con la naturaleza, de la cual ellos forman parte: su era
selvática se pierde en la bruma de la pluviosidad, mientras que su período
colonial presenta vacíos que los antropólogos-cronistas actuales tratan de
encajar mediante el análisis filosófico.
Examinando períodos más recientes, realizamos que la acción
sistemática de algunos países europeos (como España) a favor de la
educación obligatoria de los indígenas durante el siglo XIX, se acompañó
por la imposición del servicio militar obligatorio y la proletarización de
las masas. De este modo, la lucha contra el analfabetismo coincide con el
control incrementado que ejerce cualquier régimen a sus ciudadanos. No
debemos de olvidar que para que el gobierno pueda proclamar que ningún
ciudadano tiene el derecho de ignorar las leyes escritas, toda la población
tiene que saber leer. Este concepto se opone al ideal guaraní, que basó su
mentalidad cultural – que no difiere de su mentalidad lingüística
aglutinada- a la tradición oral, la inexistencia de un Estado como aparato
monopolizador de la violencia física legitimada y la falta de un sistema
jurídico, que según su mitología religiosa identifica el concepto de Uno
con la calidad de Malo, insinuando la oligarquía. Los guaraní son una de
las sociedades a las que se introdujo (léase: impuso) el abecedario latín
en épocas no muy remotas y por medio del español –la lengua del "Otro",
como herencia cultural.
Ha sido, pues, una cultura legítima, destinada a convertirse en
civilización verdadera, diría Spengler, lejos de todo indicio de
globalización, que fue frenada por el imperialismo hispánico.
Periódicamente aparecerán deseos de regreso al pasado, como resultado de
las enfermedades sociales. La etnología debe quedar como memoria de los
pueblos que están en el camino de la desaparición. No existen
civilizaciones resucitadas. Sólo aparecen nuevas fases de su existencia.
Felices o fracasadas.

INDICE BIBLIOGRAFICO

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Suplemento antropológico de la revista del Ateneo paraguayo II,
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