En Búsqueda de las Diferencias… Análisis del Artefactual Lítico de Molienda del Sitio El Encanto, Provincia del Cachapoal, VI región de Chile.

September 15, 2017 | Autor: Gaby Santander | Categoría: Prehistoric Archaeology
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Descripción

Departamento de Antropología Facultad de Ciencias Sociales Universidad de Chile

Informe de Práctica profesional: En Búsqueda de las Diferencias… Análisis del Artefactual Lítico de Molienda del Sitio El Encanto, Provincia del Cachapoal, VI región de Chile. Laboratorio de Departamento de Arqueología Universidad de Chile

Nombre de Alumna: Gabriela Santander Horta Profesora Supervisora de Práctica: Lorena Sanhueza Fecha de Inicio: 22 de octubre de 2008 Fecha de Entrega: 29 de Enero de 2009 Horas de Prácticas Efectuadas: 365 horas

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Índice 1. Introducción__________________________________________ 3 y 4 2. Justificación de la problemática___________________________ 5 3. Objetivos ____________________________________________6 a. Generales b. Específicos 4. Antecedentes a. Los artefactos de Molienda ___________________________7 y 9 b. Las sociedades alfareras prehispánicas que poblaron la Cuenca del Cachapoal _________________________________9 – 12 5. Marco Conceptual ____________________________________13 y 14 6. Metodología _________________________________________15 y 16 7. Resultados I.

Universo de Estudio ______________________________17

II. Estado de conservación y procesos postdepositacionales __________________________________ 18 y 19 III.

Materia Prima __________________________________ 20 – 22

IV.

Estudio de las Formas ____________________________23 – 29

V.

Estudio Espacial de los Artefactos ___________________30 - 33

II. Conclusiones y Evaluación del Trabajo efectuado ____________ 34 – 36 III. Bibliografía __________________________________________ 37 –40 Anexo 1: Registro Fotográfico ____________________________41 – 60 Anexo 2: Tabla de Datos _______________________________ 61 - 67

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1. Introducción El siguiente escrito tiene como fin entregar los resultados obtenidos a partir de la realización del Trabajo de Práctica Profesional basado principalmente en tratar de observar las diferencias tecnológicas identificadas a partir del análisis del artefactual lítico de molienda proveniente de las investigaciones efectuadas en el sitio El Encanto, localizado inmediatamente al sur del Cachapoal, en la localidad de Olivar Alto (UTM N 6211749; E 329783), bajo el alero del proyecto FONDECYT 1030667. En este contexto fue posible registrar gran cantidad de materiales líticos y cerámicos, entre los que destaca el material lítico de molienda presente en el área. El estudio de estos artefactos se considera de especial relevancia, debido a que ellos habrían servido a nivel mundial para el procesamiento de diversos recursos, incluyendo aquellos provenientes del cultivo, la recolección, la caza y la pesca (Babot 1999). Constituyen así, conjuntos artefactuales altamente significativos en la comprensión de los contextos arqueológicos, de los procesos de formación de sitio y para el conocimiento de aspectos tecnológicos, socioeconómicos, demográficos e incluso ideológicos de las poblaciones que hicieron uso de este tipo de tecnologías (Jackson 2004). De esta manera el objetivo de este trabajo es entregar primeramente, una caracterización general de la materialidad, para posteriormente ser profundizado en un análisis espacial cruzado utilizando variables que atañen a los atributos morfológicos de las manos y las interpretaciones efectuadas para el material cerámico, con el fin de poder observar la posible correlación existente entre cronología, tipos cerámicos y morfología de las manos de moler. Con el presente trabajo se espera poder contribuir así, no solamente a la generación de una tipología artefactual de las manos pertenecientes a las poblaciones que habitaron los distintos periodos de la zona del valle Cachapoal que aquí nos atañen, sino que también poder entregar herramientas significativas para mostrar esta alteridad, que por lo general ha sido caracterizada y discutida a partir del estudio y determinación de tipologías cerámicas. Tanto las comunidades que pertenecieron al periodo Alfarero Temprano como las del periodo Alfarero Tardío habrían desarrollado distintas opciones culturales relacionados no solamente con cuestiones subsistenciales, sino que también con otros distintos aspectos, las cuales se verían reflejadas en conductas aprendidas comunes dentro de una agrupación social que se desarrolla dentro de un paisaje cultural común. Estas apreciaciones podrían ser observadas por medio del estudio tecnológico y estilístico de sus materialidades entre los que se cuenta el material lítico de molienda, principalmente manifestadas en su manufactura, uso y descarte. Estos últimos aspectos se consideran aquí de especial relevancia.

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De esta manera, tanto las similitudes como las diferencias que habrían tenido las distintas poblaciones que habitaron la zona del Cachapoal durante el PAT serían reconocibles por medio del material arqueológico y de cómo éste material es utilizado dentro del paisaje social. Lo principal a tener presente es que se espera poder llegar a reconocer las características materiales comunes para las poblaciones de cada periodo, pero no se descarta que estas características correspondan también a diferencias sociales o funcionales más específicas. Por último es necesario acotar que existe la posibilidad que las distintas morfologías y otros atributos del material de molienda, específicamente en este caso de las manos de moler, no se encuentren supeditados a estas opciones culturales sino que a otros factores, no analizados en este trabajo y que por ende el artefactual lítico de molienda no sea un indicador sensible que nos ayude a diferenciar estas poblaciones o agrupaciones sociales.

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2. Justificación de la Problemática Guía

El estudio del artefactual lítico de molienda, como se observa en la realización de diferentes estudios a nivel mundial, ha conducido a conocer distintos aspectos tendientes a mostrar diversas actividades llevadas a cabo por las poblaciones prehistóricas, la mayoría asociadas a aspectos económicos y principalmente alimenticios (p.e. Diehl 1996, Wrigth 1994). Sólo algunos han tomado esta materialidad como un indicador estilístico cultural sensible como para poder llegar a reconocer la presencia de distintas comunidades (Flannery 1986, Hayden 1987, Adams 1996). De esta manera como recalca Babot (2004) podría decirse que mientras que en otros campos del análisis lítico, como es el caso de los artefactos tallados, el estudio de la organización tecnológica ha avanzado notablemente siguiendo una tendencia a nivel mundial, el análisis de los artefactos de molienda desde esta perspectiva permanece pendiente dentro de los estudios arqueológicos, sobre todo a nivel nacional. Es de esta manera como los contados trabajos efectuados en el país tampoco han tocado esta temática, por lo que efectuar un primer intento para tratar de observar las diferencias existentes en el artefactual lítico de molienda de las comunidades que habitaron durante el periodo Alfarero Temprano y Tardío de Chile Central por medio del estudio morfológico de las manos de moler, es una opción valorable. De esta manera podemos preguntarnos entonces, caso ¿Es posible registrar diferencias morfológicas entre las manos del Sitio El Encanto que nos remitan a distinciones cronológicas (PAT y PT)?. La respuesta a esta interrogante sin duda puede ser de gran ayuda para dar un punta pie inicial para el conocimiento de las distintas sociedades y para responder problemáticas atingentes a la investigación general que nos congrega. Por último y como se observará en los acápites siguientes, las dinámicas sociales en Chile Central para los periodos en cuestión, han sido definidas básicamente a partir del análisis y estudio de una sola materialidad (cerámica). A partir de lo anterior y centrándonos dentro de las unidades culturales que queremos estudiar, es imperioso preguntarse sobre la posibilidad de que otra materialidad pueda contribuir en la diferenciación de distintas poblaciones que poblaron la cuenca del Cachapoal. Creemos que de esta manera, este trabajo puede ser un real aporte ya que puede entregar nuevas herramientas para una configuración más amplia de las diferencias de las comunidades de estos periodos.

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3. Objetivos

Objetivo General

Evaluar la existencia de diferencias morfológicas entre las manos de moler del sitio El Encanto que nos remitan a distinciones cronológicas (PAT-PT).

Objetivos Específicos

1) Analizar el artefactual lítico de molienda perteneciente al sitio El Encanto. 2) Generar una descripción sistemática de los artefactos de molienda pertenecientes al Sitio en cuestión. 3) Reconocer la distribución espacial de los artefactos de molienda dentro del sitio El Encanto. 4) Cotejar la distribución espacial de los artefactos de molienda con un indicador sensible. (cerámica). 5) Interpretar diferencias, similitudes e interrogantes que puedan generarse a partir de los puntos anteriormente señalados.

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4. Antecedentes

Los artefactos de Molienda Considerándolos en su papel primario como moledores y, más allá de cualquier asignación funcional simbólica, los artefactos de molienda sirvieron a nivel mundial para el procesamiento de diversos recursos de naturaleza tanto orgánica e inorgánica, incluyendo aquellos provenientes del cultivo, la recolección, la caza y la pesca (Babot 1999). De esta manera, pueden encontrarse en diferentes situaciones contextuales a lo largo de su amplia distribución espacio-temporal. Esto permite considerar que su rango funcional debió ser en el pasado, mucho más amplio de lo que frecuentemente se piensa. Entre otras funciones estos implementos debieron usarse para el procesamiento de diversos recursos provenientes de la recolección, tanto en contextos agrícolas como no agrícolas, situación que comúnmente no ha sido tenida en cuenta. A pesar de la gran importancia que se les otorga para la comprensión de los contextos arqueológicos, en la prehistoria nacional, son contados los estudios sistemáticos que se han llevado a cabo, realizándose por lo general breves descripciones, salvo en contados casos donde han surgido como entes promotores de problemáticas (Cornejo 1990, Sanhueza y Rees 1994, Toro 1997, Carrasco 2003, Jackson 2004, Vásquez 2000 y Núñez 2005). Así, un estudio pionero sobre la temática en nuestro país fue efectuado por Cornejo en el año 1990, en donde el autor analiza el artefactual de molienda del Pukara de Turi, logrando realizar una descripción de las características formales y de la distribución de los molinos y manos de moler dentro del sitio, observando una distribución diferencial de los artefactos. Otro estudio enfocado en una línea investigativa similar fue realizado por Sanhueza y Rees, (1994) quienes analizaron el material recuperado del sitio Quivolgo (VII región de nuestro país) llegando a la conclusión, que el material de molienda en conjunción del cerámico y el lítico, permiten diferenciar dos tipos de sitios; uno de ocupación permanente y uno de actividad específica. Otro estudio de interés sobre la temática fue efectuado por Carlos Carrasco (2003) quien analizó las piezas de los sitios tardíos de las cuencas de Atacama y Loa Superior, permitiéndole observar cómo los asentamientos, al reordenarse en función de los artefactos de molienda, ofrecerían asociaciones funcionales con ámbitos relacionados tanto con lo cotidiano como lo simbólico. Además observó como estos yacimientos se especializan de acuerdo a labores de producción, almacenamiento, procesamiento y consumo de productos tanto vegetales como minerales. Posteriormente en el año 2004, Donald Jackson estudia un conjunto de implementos de molienda procedentes de un contexto arcaico de la costa norte del Semiárido de Chile, orientándose a entender el rol de estos implementos en relación con su contexto. Según el autor, la alta densidad de los implementos

8 de molienda registrados en el sitio, indicaría una actividad de importancia para estos grupos. Lo anterior, sumado a su vida útil remanente sugiere, más que una actividad prolongada o intensa, un gran número de personas, una actividad colectiva cuya agregación podría estar vinculada con aspectos sociales y no exclusivamente con ámbitos económicos. Por último Núñez (2005) analiza 227 manos de moler y 53 piedras de molino provenientes de los distintos niveles del sitio Cuchipuy en el marco de la ejecución de una Práctica profesional. La conclusión que efectuó el autor se limita a advertir que los implementos de molienda, al encontrarse dentro del contexto de un cementerio, forman parte de un complejo simbólico y que no fueron destinados de ninguna manera al trabajo de molienda. Estos estudios además han ayudado a establecer una definición de los artefactos de molienda, nomenclatura que será utilizada en el presente proyecto. Así por Molienda se entiende la acción de moler (reducir a polvo), machacar o triturar, con al menos dos elementos, que involucran una parte inmóvil (piedras tacitas, morteros, conanas y molinos) y otra móvil (manos de moler y machacadores) accionada por fuerza humana (Carrasco 2003). Es importante destacar la presencia de otro tipo de artefactos como lo son los yunques, percutores y pulidores los que están directamente relacionados al uso del material de molienda. Dichas categorías son de relevancia ya que es posible encontrar, en los artefactos de molienda, implementos multifuncionales, como lo son por ejemplo las manos percutoras, las cuales son muy comunes ya que habrían servido por ejemplo para el reavivado del canal de molienda. En la zona que nos compete las investigaciones sobre la temática han sido más bien reducidas limitándose a Diseños de práctica profesionales y a manuscritos con énfasis exploratorios que se encontraban bajo el amparo de Proyectos de investigación. El primer estudio efectuado corresponde a una práctica profesional perteneciente a María José Toro y fue realizada en el año 1997. Este estudio se llevó a cabo con el fin de efectuar un análisis de los artefactos de molienda del sitio arqueológico la Granja, el cual es atribuido al complejo Cultural Llolleo, queriendo entregar una explicación de la variabilidad morfológica de estos artefactos. Según Toro, el registro efectuado pieza a pieza, le permitió entender el contexto desde lo singular y por otro lado el trabajo etnográfico efectuado por la misma autora le otorgo la posibilidad de observar los artefactos de molienda dentro de su contexto sistémico, logrando informarse acerca de algunos momentos de la cadena conductual de los aparatos, llegando a la conclusión que la materias primas utilizadas son de carácter local, el uso del artefacto corresponde básicamente a la dueña de casa, es decir a personas del género femenino, la mecánica de movimiento es horizontal y por presión y le permitió conocer la manera en que se reavivaba los artefactos (molinos). El análisis contextual y el trabajo realizado con flotaciones vegetales, le permitió inferir que los vegetales que fueron utilizados en la molienda fueron el maíz y quínoa, los que habrían sido utilizados para hacer harina, actividad que se habría producido en los metates, lo que se vería ratificado por datos entregados por la

9 etnografía, dada su morfología y materia prima porosa que permitiría que los granos no se resbalen. El segundo trabajo pertenece a Mario Vásquez (2000), quien presenta el análisis del conjunto de molienda del sitio arqueológico el Mercurio-1, el cual fue asignado al Complejo Cultural Llolleo. En dicho trabajo se efectuó una descripción sistemática del contexto arqueológico. Su observación muestra una tendencia creciente hacia el procesamiento de alimentos vegetales pulverizados los que básicamente, por medio de asociación, se piensa que habrían correspondido a maíz, quínoa y porotos. Por otro lado es sugerente que los molinos depositados en el contexto de funebria estén preferentemente identificados con individuos de sexo femenino, lo que complementado con datos etnográficos, hace suponer que fueron personas de este sexo las que utilizaron predilectamente dichos implementos. Otro aspecto interesante es que asociados a estos artefactos es posible encontrar percutores, los cuales podrían haber sido utilizados para la reactivación del canal de molienda por medio de la tecnología de percusión, por lo que dicha tecnología, sugerentemente, podría también estar relacionada a su vez con este género. Por otro lado son los molinos los que se encuentran asociados en contextos de funebria, por lo que debieron contar una connotación especial dentro de esta sociedad. Las sociedades alfareras prehispánicas que poblaron la Cuenca del Cachapoal. No debemos olvidar que el material lítico de molienda es ante todo una materialidad y como todo lo que estudiamos en nuestra disciplina, es un reflejo de distintos cambios sociales y del pensamiento e historicidad de seres humanos que vivieron en un momento determinado de nuestra prehistoria. Por lo tanto, su estudio no debe ser considerado como un fin en si mismo. De esta manera, el análisis de estos artefactos no tiene sentido si es que no aspiramos a conocer distintos aspectos sociales que estas comunidades dejaron estampados en ellas, quedando así detenidas como huellas en el tiempo, necesitando comprender los fenómenos sociales que acaecieron durante los periodos culturales que aquí nos atañen. Podemos notar que la historia cultural de la cuenca del Cachapoal ha sido tradicionalmente definida por la extensión de dos conjuntos culturales identificados para áreas vecinas, determinados principalmente para la cuenca de Santiago. A pesar de ello, son numerosos los hallazgos de tipo ocasional que logran dar cuenta de distintos asentamientos cerámicos pertenecientes a los periodos Tempranos y Tardíos, los cuales manifiestan una particularidad local, que permite observar diferencias significativas respecto a lo que ocurre más al norte. El Periodo Alfarero Temprano La zona que aquí nos atañe se caracterizaba por ser un espacio donde existían muy escasos antecedentes sobre las ocupaciones humanas de este periodo,

10 los cuales constaban básicamente por la presencia de algunas vasijas cerámicas y unos cuantos rescates de funebria que hizo que se incluyera este espacio dentro de la esfera del complejo cultural Llolleo (Falabella y Stehberg 1989), lo anterior avalado por los trabajos de Santana (1984) en el sector de Punta Cortez y Cáceres et al (1995), aunque con algunas particularidades (p.e. asociado a tembetás). Sin duda la mayor cantidad de información provenía del estudio del sitio La Granja, primero a partir de un proyecto Fondecyt (Planella et al. 1997) y luego en el marco de un EIA (Ciprés Consultores 2002), que vinieron a confirmar la presencia del Complejo Llolleo en esta zona, a través de un sitio complejo, con evidencias habitacionales, de funebria y posiblemente rituales (Planella et al. 2000) y sugerir la presencia de otros componentes en el PAT. Estos precarios conocimientos se han visto complementados a partir del trabajo intensivo efectuado en la zona a partir del proyecto Fondecyt 1030667, quienes postulan que la situación observada en la cuenca de Rancagua viene a confirmar lo observado en la de Santiago donde la diversidad cultural, la contemporaneidad entre las distintas unidades y su interdigitación espacial sería la tónica (Sanhueza et al. 2007). A pesar que la gran mayoría de los sitios estudiados pueden ser atribuidos al Complejo cultural Llolleo, los investigadores lograron identificar al menos dos sitios con ocupaciones distintas (Chuchunco y Chamico), con fechados que los situarían en un momento contemporáneo a las ocupaciones Llolleo y que se encuentran ubicados en las mismas áreas de ocupación, muy similar a lo que sucede en las regiones cordilleranas colindantes (Sanhueza et al. 2007). Un punto fundamental identificado fue la nula presencia de la unidad Cultural Bato en la zona, A pesar de registrarse materialmente algunas semejanzas en los sitios de Chuchunco y Chamico, estos asentamientos carecen de elementos diagnósticos característicos como es la decoración incisa lineal punteada, prácticamente inexistente. Por el contrario es posible observar ciertas particularidades que hace que sea más adecuado no atribuirlas a este complejo cultural sino que simplemente hablar de la presencia en la zona de otras unidades PAT. En lo que respecta al patrón de asentamiento los autores logran observar una homogeneidad compartida a pesar de las diversidades descritas con anterioridad, tanto dentro de esta zona como con la cuenca de Santiago, los cuales deberían estar asociadas a la manera en que estas poblaciones manejan los distintos cultivos, especialmente el maíz (Sanhueza et al. 2007). Por último cronológicamente es posible observar dataciones tempranas, atribuibles incluso a lo que se ha denominado como Comunidades Alfareras Iniciales en el sitio La Granja (Ciprés Consultores 2002), que indican que el proceso de adopción de la tecnología cerámica fue regional. Por otra parte, varios fechados indican la mantención de contextos con características PAT hasta por lo menos el 1300 dC.

11 Periodo PIT Y PT Al igual que el momento anterior, el PIT en esta zona también había sido escasamente trabajado hasta la puesta en marcha del proyecto Fondecyt 1030667. Si bien la presencia inka en la región está ampliamente documentada a partir del estudio del pukara de Cerro Grande de La Compañía, tampoco existe para este momento una visión general de la ocupación de esta área, o de los cambios que su presencia pudo haber generado. Si bien se ha podido identificar materialmente la existencia de grupos diferentes a los del período Alfarero Temprano, ubicados cronológicamente en el período Intermedio Tardío, no se había efectuado hasta ese momento una explicitación clara de las características de sus materialidades (Sanhueza et al. 2007) Contrariamente a lo observado para el período Alfarero Temprano, donde se documenta la presencia mayoritaria del Complejo Llolleo en la zona, para el período Intermedio Tardío, a excepción de una débil presencia Aconcagua, no se han definido unidades culturales concretas, existiendo más bien un estudio de sitios puntuales considerados como tardíos a partir tanto de características estilísticas de su cerámica como por algunos fechados absolutos (Sanhueza et al. 2007) A partir de los trabajos del mencionado proyecto fue posible constatar en el área la presencia de 33 sitios con material cerámico asignable al PIT y PT, de los cuales 23 presentan cerámica decorada que puede ser considerada diagnóstica de estos períodos, y el resto presentan cerámica reconocida como diagnóstica del Complejo Aconcagua, más específicamente del tipo Aconcagua Salmón. En primer lugar, y de forma similar a lo que ocurre más al norte, no sería posible observar una transición entre los estilos cerámicos propios del periodo temprano con los característicos del periodo tardío, sino que más bien se apreciaría un cambio abrupto (Cáceres et al. 1995). Se plantea además la presencia de dos tipos cerámicos. El bícromo (rojo sobre blanco/crema) que constituirían uno de los estilos locales anteriores a la ocupación incaica, y que se encuentra en Hacienda Cauquenes, Cerro La Compañía (ocupación preincaica) y Peumo; y la decoración trícroma (rojo y negro sobre engobe blanco), que, si bien se encontraría en contextos con influencia incaica, posiblemente sea anterior a lo Inca (Cáceres et al. 1995). Consecuentemente a lo planteado con anterioridad Sanhueza y colaboradores en el marco de su proyecto Fondecyt 1030667 plantean que en términos de la cerámica lograron constatar la presencia del tipo Aconcagua Salmón, sin embargo su proporción dentro de los conjuntos cerámicos de los sitios es muy baja y no se encuentra asociado a su contexto cerámico habitual, el tipo Aconcagua Rojo Engobado, que en la cuenca de Santiago es especialmente abundante. De esta forma las autoras comparten los postulados de Cáceres et al. (1991) en el sentido de destacar la no presencia de cementerios de túmulos, característicos de la funebria de áreas interiores de este Complejo.

12 De esta manera los autores plantean a la cuenca de Rancagua, especialmente al norte del Cachapoal, como un “área de acción” de este Complejo, pero sin llegar a constituir un área de ocupación efectiva o habitual, ya que su presencia se diluye con la distancia geográfica desde la cuenca de Santiago, lo que es especialmente evidente al sur del Cachapoal. Otra opción es la de postular a esta área como la presencia efectiva de grupos que participan de este complejo o bien por la circulación de cierta categoría de vasijas, en este caso del tipo Aconcagua Salmón que reflejaría la interacción de poblaciones locales con grupos ubicados inmediatamente al norte (Sanhueza et al. 2007). Resulta interesante además advertir que los autores estiman que la fragmentería cerámica atribuible al tipo Hacienda Cauquenes presenta características posibles de ser asociables a la vertiente trasandina, lo que permitiría considerar a este tipo como algo característico de esta área, especialmente al sur del Cachapoal. De esta manera, el hecho que este tipo aparezca con más frecuencia en un área donde el tipo Aconcagua Salmón prácticamente desaparece apoyan la idea planteada con anterioridad de Falabella et al. (2001) de que estas últimas serían una “copia” de este estilo. Respecto al período Tardío, desde mediados de los ’80 y a partir de las investigaciones llevadas a cabo en el Cerro Grande de La Compañía, se pudo establecer una ocupación incaica efectiva en la cuenca de Rancagua. A las estructuras de estilo Inca provincial se suman los restos cerámicos, que son escasos y muestran rasgos de procedencia Diaguita incaica y desarrollos tardíos del valle de Aconcagua con contacto incaico y los fechados, todos post 1400 (Planella et al 1993; Planella y Stehberg 1994). Otras evidencias de la presencia incaica se han postulado a partir de atributos estilísticos y formales de piezas cerámicas en sitios de la zona. Este es el caso de los hallazgos del sitio Hacienda Chillehue (Comuna de Coinco) que presenta dos escudillas gemelas, los cuales se pueden relacionar con los hallazgos del cerro Tren Tren en Doñihue, donde se encontraron 10 vasijas cerámicas, entre ellas un aríbalo y un plato ornitomorfo, que destaca por la asociación que se manifiesta entre elementos de influencia incaica con otros de tradición local hallados como ofrenda junto a los restos de cuatro infantes (Stehberg y Rodríguez 1995). Asimismo, en el sitio de Rengo o Camarico Las Pataguas se encuentra una escudilla ornitomorfa que es considerada de influencia incaica por Cáceres et al. (2001).

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5. Marco Conceptual

Para lograr una comprensión sobre los aspectos tecnológicos relacionados al estudio del instrumental lítico de molienda es necesario conocer las distintas aproximaciones existentes que den cuenta de la producción y uso de estos artefactos, adoptando así una perspectiva organizativa de la tecnología. De esta manera se entiende aquí que la configuración morfológica de un artefacto, puede estar ligado también a factores estilísticos. La organización tecnológica se define como la forma en que una cultura o sociedad diseña los artefactos y estructura su producción, uso y mantenimiento de tal manera que estos puedan responder efectivamente a las demandas que les hace la sociedad (Koldelhoff 1987 en Babot 2004). Esta perspectiva enfatiza el análisis de la variabilidad dentro y entre conjuntos artefactuales y es particularmente apta para encarar la manera en que los cambios tecnológicos reflejan cambios de comportamientos en otros niveles, en una escala de larga duración. Por otro lado según Sackett (1993) existiría un largo espectro de alternativas equivalentes, de distintas opciones válidas para poder alcanzar cualquier fin dado en la manufactura o uso de ítems materiales. Estas opciones según el autor serían denominadas como variaciones isocrésticas. De esta manera se puede derivar que las distintas elecciones se encuentran mediatizadas por la tradición tecnológica de la persona que materializa y trabaja estas materialidades, es decir sería reflejo de las distintas opciones culturales que serían enseñadas de generación en generación dentro de su comunidad o agrupación social. Dentro de la línea conductual, Schiffer (1988) enfatiza la relación entre los artefactos y las actividades realizadas con ellos, como también distintos factores que ayudan a observar el proceso de manufactura de los artefactos. Este enfoque atiende a la variabilidad en el registro producto del sistema de asentamiento, los tipos de actividad que se realizan y los procesos de formación, entre otros. Creemos también que nos ayudaría a comprender y visualizar distintas agrupaciones humanas ya que tendería a la búsqueda de distintos patrones de manufactura, uso y descarte asociado a una agrupación específica. Ello contendría dentro de sí una red de relaciones sociales expresadas en distintas funciones y roles que cada individuo debe cumplir dentro de las agrupaciones o comunidades para el funcionamiento óptimo del tejido social. Una postura similar ofrece Lemonnier (1990) para quien las técnicas serían antes que cualquier otra cosa, pensamientos socialmente elaborados o producciones sociales. Así, los gestos empleados en la producción y utilización de los artefactos serían representaciones nacientes de las imágenes mentales y de las ideas socialmente transmitidas y compartidas, el conocimiento de esta forma sería socialmente pauteado, aceptado y transmitido. En lo que respecta

14 a la manera como estas técnicas se ponen en acción tienen que ver con las relaciones sociales y las representaciones de los roles sociales, es decir, las técnicas serían compatibles con la organización social particular de cada grupo y su propia visión del mundo. Para este autor, una acción técnica además de poseer un significado, es también una acción física sobre la materia, de esta manera se configura de manera polideterminada. A pesar de ello son muy pocas las inferencias vinculadas a los actos técnicos a los cuales se puede acceder de manera certera y no ambigua, para lo cual es necesario poder basarse en el análisis de los procesos concretos de la acción sobre la materia. Un ejemplo de ello sería mediante la reconstrucción de las cadenas operativas. (Babot 2005). Según Ingold (1990), la existencia de un conocimiento técnico vinculado a ciertas habilidades, se encuentran inmersas en la experiencia de los sujetos adquirida por la observación e imitación más que por una instrucción verbal, lo que a fin de cuentas sería un elemento activo dentro de la construcción identitaria tanto social como personal. Por ello es que las fuerzas de producción se encuentran inmersas profundamente en la estructura de las relaciones sociales, allí donde se originan y adquieren significado, de esta manera lo técnico pasa a ser netamente competencia de lo social. De esta manera, podemos definir la tecnología de la molienda como la combinación de conocimiento, ideas, pauta de comportamiento y equipamiento (Adams, 1996). Es necesario considerar entonces que la equifinalidad y la polideterminación de las estrategias tecnológicas que ofrecen los enfoques antes mencionados, sumados a la concepción de tecnología como la puesta en práctica de decisiones contextualizadas, son aspectos fundamentales. Dicha mixtura sería de especial relevancia al momento de aproximarnos a las distintas estrategias y prácticas tecnológicas posibles de ser observadas dentro del artefactual lítico de molienda. De esta manera la tecnología sería un aspecto dinámico que muta o permea de una sociedad a otra, entrelazándose con otras estrategias o prácticas sociales. El estudio tecnológico se configura de este modo como un aspecto social característico y posible así de ser identificado en sociedades tan disímiles como serían las poblaciones PAT y PT, que pertenecieron a la cuenca del Cachapoal e identificadas en el sitio que será estudiado a en el presente trabajo.

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6. Metodología En la investigación que se entrega a continuación fue utilizado el material proveniente de la Recolección Superficial Intensiva efectuada en el Sitio El Encanto, recolección que cubrió un área de 230 x 750 m.(172500 m2), a lo largo del eje de la plantación de los árboles que corren en un eje E-W. A partir de dicho trabajo en terreno fue posible recuperar un total de 5387 fragmentos cerámicos y 1328 piezas líticas, entre los que se cuentan distintos instrumentos de molienda. Una vez en laboratorio estos instrumentos no fueron lavados de tal manera de poder conservar eventuales microresiduos presentes tanto en la superficie como en los intersticios de los artefactos. A estos materiales, primeramente se efectuó un examen macroscópico asignándoles un grupo según la posible función que éstos habrían tenido antaño. Es de esta manera como fueron segregados por: 1. Manos, entre los que se cuentan aquellas que cumplieran una o más funciones (percutores, sobadoras, etc.) 2. Preformas de manos, las cuales deberían presentar diversos lascados y trituramientos en su borde asociados a procesos de formatizado y sus caras activas no se encontrarían con huellas de uso visibles. 3. Conanas, las cuales tendrían un canal de molienda caracterizado por una concavidad poco profunda y de extensión longitudinal mayor que los morteros. 4. Molinos, que presentan por lo general un canal muy poco pronunciado, casi insinuado y en la mayoría de los casos de gran amplitud areal. 5. Morteros, los cuales presentarían canales de molienda pronunciados, tubulares y poco extensos. 6. Sobadores, cuyas caras activas serían más bien pulidas, con huellas de uso más bien circulares y no presentarían trituramientos asociados a reavivado. Una vez efectuada esta agrupación, y como se puede observar detalladamente en la tabla presentada a continuación, se procedió a caracterizar el material por medio de distintos atributos ingresando toda esta información en una Tabla Excel.

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Tabla de los Principales Atributos Analizados Atributos Petrográficos

Tipo de Materia Prima

Atributos Métricos

Forma Total

Forma Sección Longitudinal

Atributos Morfológicos Condición Punto Origen Fractura

Tipo de Fractura

Alteraciones Naturales

Modificaciones Funcionales

Otros

Andesita Basalto Afanítico Forma Base Granito Toba Lítica Otras MP Ancho Máximo Largo Máximo Espesor Máximo Peso Cilíndricos Discoidales Esféricos Forma Sección Transversal Elipsoidales Biconvexa Biconvexa ángulos romos Convexo- cóncavo Decimétrico Elíptico Helicoidal Forma Sección de Planta Plano- convexo Plano- convexo ángulos romos Rectangular Rectangular ángulos romos Completa Fracturadas Diferenciado Indiferenciado Plana oblícua Orientación de la Fractura Plana Transversal Cóncava- convexa oblícua En ángulo En charnela oblícua En charnela transversal Estrías de Arado Lascados accidentales Alteraciones Funcionales Meteorización

Ubicación de las ModificacionesFacial Superior Facial Inferior Extremo distal Extremo proximal Denotación Leve Moderada Marcada Restos Minerales Elementos Asociados Restos Orgánicos Otros

Guijarro Clasto Angular Laja

Biconvexa Biconvexa ángulos romos Convexo- cóncavo Elíptico Plano- convexo Rectangular ángulos romos Triángulo Isóceles Circular Cuadrado Achaflanado Elíptico Pentagonal Rectangular Rectangular ángulos romos Triángulo ángulos romos

Longitudinal Transversal Longitudinal - transversal Multidireccional

Alisado Pulido Bruñido Lascados Triturados Total Extensión de las Modificaciones Parcial

Presencia de Reavivado

Presencia Ausencia

Finalmente se observó la distribución espacial de los conjuntos más representados dentro de los artefactos analizados comparándolos con la distribución de los distintos fragmentos cerámicos registrados en el sitio, cotejando a continuación la información con el fin de poder correlacionar los datos.

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7. Resultados

A continuación se muestran los resultados obtenidos a partir del análisis efectuado del material lítico de molienda del Sitio El Encanto.

I. Universo de Estudio

El artefactual lítico de molienda analizado en el sitio el Encanto corresponde a un universo de estudio de 64 piezas adscritas a distintas categorías morfofuncionales. Esta adscripción fue llevada a cabo a partir del estudio de diversos atributos observables y medibles a simple vista. Como se observa en la tabla adjunta, fue posible el registro de 25 soportes “inmóviles” entre los que se cuentan 24 conanas y 1 molino y 48 artefactos “móviles” entre los que se cuentas distintas manos de moler, que como se verá posteriormente, presentan diversas morfologías y cualidades, algunas de las cuales se entrecruzan con otros atributos (p.e. sobador, percutor). Cabe destacar la presencia de dos preformas de manos de moler las cuales no se encontraban con huellas de uso pero presentaban grados de formatización avanzado. Asignación Funcional

Total

Conana Conana reutilizada IAD Mano Mano – Sobador Mano- Percutor Molino Preforma de Mano Sobador

23 1 23 1 12 1 2 1

Total general

64

18 II. Estado de conservación y procesos postdepositacionales

Uno de los problemas Asignación funcional Completas Fracturadas con que nos Conana 0,00% 100,00% encontraremos y que Conana reutilizada IAD 0,00% 100,00% seguirá repercutiendo a Mano 43,48% 56,52% medida que Mano – Sobador 100,00% 0,00% continuemos con el Mano- Percutor 50,00% 50,00% análisis de los Molino 0,00% 100,00% materiales, es el alto Preforma de Mano 100,00% 0,00% grado de fractura que Sobador 0,00% 100,00% presenta gran la Total general 29,69% 70,31% cantidad del conjunto. Es así que más del 70% de las piezas se encuentra con algún grado de fractura imposibilitando en algunos casos un estudio morfológico avanzado. Un ejemplo de ello lo dan las conanas, en donde el 100% de ellas se encuentra con fracturas que impiden diferenciarlas morfológicamente unas de otras, aunque presentaban parte de su canal de molienda. Para poder comprender este fenómeno fue necesario entonces observar nuevos atributos que entregan información acerca de los distintos procesos visibles que afectaron las piezas después de las actividades de descarte en que pudieron verse afectas. A partir de dichas observaciones fue posible constatar la presencia de diversas estrías y lascados con fracturas relativamente recientes, los cuales fueron calificados como no intencionales. Estas huellas visibles con notoriedad a simple vista en la superficie de las piezas, fueron de observación recurrente en más del 70% de las piezas como es posible de ver en la siguiente tabla:

Asignación funcional Conana Conana reutilizada IAD Mano Mano – Sobador Mano- Percutor Molino Preforma de Mano Sobador Total general

Estrías Lascados Lascados No se de y estrías Meteorización accidentales observa arado de arado 39,13%

0,00%

8,70%

0,00%

52,17%

100,00% 69,57% 100,00% 75,00% 0,00%

0,00% 8,70% 0,00% 0,00% 0,00%

0,00% 13,04% 0,00% 8,33% 0,00%

0,00% 4,35% 0,00% 0,00% 0,00%

0,00% 4,35% 0,00% 16,67% 100,00%

100,00% 100,00%

0,00% 0,00%

0,00% 0,00%

0,00% 0,00%

0,00% 0,00%

60,94%

3,13%

9,38%

1,56%

25,00%

19 Esta realidad no debe causar extrañeza ya que debemos recordar primero que el sitio El Encanto se encuentra emplazado en un potrero de un fundo, que ha sido permanentemente arado para la plantación de maíz y de frutales y segundo que el material proviene de una Recolección Superficial. RecaPTulando, podemos decir que el agente que influyó con mayor intensidad en los instrumentos fue la acción antrópica producida por la acción del arado ocasionando diversas estrías y lascados no intencionales. Cabe destacar también, que un bajo grado de instrumentos presentó meteorización en su superficie, fenómeno producido por la exposición recurrente de los instrumentos a las inclemencias climáticas. Este bajo grado podría indicar que los instrumentos probablemente se encontraron enterrados in situ por largos periodos de tiempo, pero posiblemente, por la acción de otros fenómenos, p.e el arado, volvieron a subir a la superficie.

20 III. Materia Prima

Como lo muestran distintos estudios (Mirabel 1968, Cotterell y Kamminga 1990 en Babot 1999), los diversos artefactos de piedra pulida, y entre ellos los artefactos de molienda, son confeccionados a partir de cantos rodados de formas definidas y dotados de cierto grado de redondez. Esto es lo que se observa en la materialidad aquí analizada, ya que el 77% de los instrumentos presentan como matriz base un guijarro y el 23% sobre clastos más bien angulares.

Esta condición se mantiene no sólo para el artefactual “móvil”, sino que también es posible encontrar esta recurrencia en las conanas y molino registrados en el lugar. Cabe destacar la presencia de dos preformas de manos circulares, lo que indica que en el lugar no solamente se están utilizando dichos implementos sino que también se estarían fabricando. Esta fabricación en la locación, unido al alto grado de matrices en guijarro sugiere una cercanía a la fuente de materia prima, lo que se ve ratificado a la proximidad (a menos de dos kilómetros) del río Cachapoal. Como es posible observar en la tabla adjunta no existe mucha variedad de materias primas utilizadas, siendo las más comunes la andesita y granito de grano grueso, en un 87,51% de los casos. Se ha estipulado que la durabilidad del artefacto depende entre otras cosas, de la dureza y resistencia a la abrasión de las rocas, siendo este tipo de materias primas consideradas de alta resistencia y durabilidad (Babot 1999). Otro atributo de estas materias primas es que presentan una textura apropiada, lo que implica invertir menor cantidad de tiempo en reacondicionar las piezas para usos posteriores.

21

Asignación funcional

Andesita Grano fino

Andesita Grano grueso

Basalto Grano fino

Granito Grano grueso

Toba lítica

Conana Conana reutilizada IAD Mano Mano - Sobador Mano- Percutor Molino Preforma de Mano Sobador

8,70% 0,00%

39,13% 100,00%

8,70% 0,00%

43,48% 0,00%

0,00% 0,00%

0,00% 0,00% 0,00% 0,00% 0,00%

43,48% 0,00% 50,00% 0,00% 0,00%

4,35% 0,00% 0,00% 0,00% 0,00%

43,48% 100,00% 41,67% 100,00% 100,00%

8,70% 0,00% 8,33% 0,00% 0,00%

0,00%

0,00%

0,00%

100,00%

0,00%

Total general

3,13%

40,63%

4,69%

46,88%

4,69%

Andesita Grano fino Este tipo de materia prima es una roca volcánica intermedia de grano fino asociada a fractura concoidal a subconcoidal, con tonalidades que van desde grises a verdosas. Se encuentra representada en un 3,13% de la muestra y fue utilizada restrictivamente en la fabricación de Conanas El que se encuentren conanas fabricadas en esta materia prima puede sugerir que se están moliendo sustancias que necesitan de una menor porosidad y que no se introduzcan en los interticios, ejemplo de ello pueden ser pigmentos y polvos finos. Andesitas Grano grueso Esta materia prima es la segunda roca en importancia registrada en la fabricación de todos los tipos de intrumentos de molienda, encontrándose representada en un 40.63% de los casos. Presenta fracturas planas a irregulares, con tonalidades que van desde grises, verdes, azulados y cafés oscuros. La recurrencia de esta materia prima pude deberse a que estas rocas tiene una gran porosidad, que incide no solamente en la manera en como se muelen granos y otras sustancias, sino que también en una larga vida útil del artefacto y una mayor efectividad en el trabajo. Basalto Grano fino Esta roca volcánica fue utilizada en un bajo porcentaje (4.69%) tanto en la fabricación de conanas como en manos de moler. Presenta fracturas de subconcoidal a concoidal con tonalidades que varían entre gris, café y azules oscuros.

22 Al igual que la presencia de andesitas de grano fino puede significar que se estén procesando distintas sustancias finas. Granito Grano grueso Es la materia prima que presenta el mayor grado de utilización para la fabricación de los distintos artefactos con un 46,88% del total. Dentro de esta variedad es posible encontrar distintos tipos de granitos y microgranitos (Rosa, Blanco) con una gran gama de tonalidades entre los que se cuentan rosados, anaranjados, azulinos, grisáceos y verdosos. La composición de esta materia prima rica en sílices y cuarzos, la hacen especialmente significativa para la fabricación del artefactual lítico de molienda, entrega herramientas de alta porosidad, resistencia abrasiva y vida útil. Toba lítica Esta materia prima es de origen piroclástico y posee un grano fino. Se encuentra representada en un bajo porcentaje (4,69% de los casos) en dos manos y una mano percutora. Presenta fracturas de semiconcoidales a concoidales y tonalidades grises olivosos y rosas claros.

23 IV. Estudio de las Formas

A continuación pasaremos a revisar las distintas características y representaciones que tienen los diferentes tipos de asignaciones morfofuncionales. Manos Como pudimos ver anteriormente la fabricación de las distintas manos fue efectuada exclusivamente utilizando como matriz base guijarros, los cuales debieron estar dotados de ciertas características (forma, tamaño, peso, materia prima, etc.), que los hicieron más aptos par cumplir con las distintas funciones encomendadas. Las materias primas utilizadas fueron casi en su mayoría Rocas ígneas de granos gruesos y en segunda medida Rocas ígneas de granos finos, lo que, como vimos con anterioridad nos permite pensar en una gran variabilidad de sustancias a procesar.

Asignación Funcional Mano Mano-sobador Mano- percutor Total

Completas (%) 58,8 5,9 35,3 47,2

Fracturadas (%) 68,4 0 31,6 52,8

Total (%) 63,9 2,8 33,3 100

Como es posible de observar en la tabla presentada anteriormente el 47,2% de las manos estudiadas se encuentran completas y el resto (52,8%) se encuentran fracturadas. De las manos fracturadas 16 de ellas presentan fractura plana transversal, 2 fracturas planas oblicuas y solamente 1 cóncava convexa oblicua, destacando entre ellas que 12 presentan la fractura transversalmente, 2 tanto de forma transversal y longitudinal y 5 piezas presentan estas fracturas de forma multidireccional. Otro factor a considerar es en más de la mitad de las manos es posible poder observar punto de fractura. Si bien la forma cómo se producen este tipo de fracturas tan recurrentes en las manos del sitio El Encanto (Planas Transversales en sentido Transversal) no han sido estudiados en la actualidad, se sugiere que este fenómeno podría estar asociado a procesos postdepositacionales producidos por ejemplo por el arado. Los puntos de fractura antes mencionados se encuentran asociados casi en su mayoría a estrías y lascados producidos por ésta acción antrópica (arado) y no se encuentran asociados a pátinas y trituramientos atribuibles al uso dentro del contexto sistémico.

24

Forma Sección Transversal Rectangular ángulos romos

Plano convexo Elíptico Biconvexa ángulos romos

Biconvexa 0

5

10

Sobador

Preforma de Mano

Mano- Percutor

Mano - Sobador

15

Mano

Ahora bien, una vez efectuadas las salvedades anteriormente expresadas es posible proseguir con la búsqueda de ciertos patrones recurrentes en las formas de las manos, para ello es necesario proseguir observando como se comportan en los distintos formatos analizados. Tanto para la sección de planta transversal y Longitudinal, como se muestra en el gráfico precedente, se observa una recurrencia de las formas Biconvexas, dejando en segundo plano las formas plano- convexas, rectangulares y elípticas. En cuanto a la forma de sección de planta como se observa en el gráfico adjunto la forma más predominante son las elípticas con un alto grado de incidencia por sobre las circulares y las rectangulares.

Forma Sección de Planta 16 14 12 10 8 6 4 2 0 Circular Mano

Elíptico Mano - Sobador

Mano- Percutor

Rectangular ángulos romos Preforma de Mano

25 Por otro lado, a partir del análisis efectuado y recurrentemente con lo mostrado con anterioridad, se constata que la mayoría de las manos tanto circulares como elípticas presentan formas de sección tanto longitudinal como transversal de forma biconvexa. En cambio las manos con plantas rectangulares respetarían esta misma forma de sección tanto transversal y como longitudinalmente.

Forma Sección Longitudinal Rectangular ángulos romos Plano convexo ángulos romos

Plano convexo Elíptico

Biconvexa ángulos romos Biconvexa 0

2

Mano- Percutor

4

6

Mano - Sobador

8

10

12

14

Mano

Para poder determinar la forma total de la pieza y ser lo más ecuánime posible, fueron utilizadas una serie de razones entre los distintos ejes medidos métricamente (Babot 1999). De esta manera fueron caracterizados a partir de las siguientes fórmulas: 1. Discoidales: Cuando ancho/largo máximo es mayor que 0,67 (2/3) y espesor/ancho es menor que 0,67 (2/3) 2. Esféricos: Cuando ancho/largo máximo es mayor que 0,67 (2/3) y espesor/ancho es mayor que 0,67 (2/3) 3. Elipsoidales: Cuando ancho/largo máximo es menor que 0,67 (2/3) y espesor/ancho es menor que 0,67 (2/3) 4. Cilíndricos: Cuando ancho/largo máximo es menor que 0,67 (2/3) y espesor/ancho es mayor que 0,67 (2/3)

el el el el

A partir de la utilización de estas razones se obtuvieron las Formas totales que se observan en el gráfico que se observa a continuación.

26 Forma Total de la pieza (Manos) 8

7

6

5

4

Mano- Percutor Mano - Sobador

Mano

3

2

1

0 Circular

Elíptico

Elíptico ángulos romos

Rectangular ángulos romos

Completas

Para poder ver y obtener estas razones además son mostradas solo las manos que se encuentran completas. Se observa entonces que la forma total de las manos más recurrente son las elípticas seguidas por las rectangulares y las circulares.

27 Por otro lado tanto para las formas elípticas como para las rectangulares, la gran mayoría de las piezas presentan sus superficies alisadas y en segundo plano pulidas. En el caso de las manos circulares es posible observar que la mano- sobadora presenta la superficie pulida, lo que se encuentra en directa relación con su funcionalidad. El resto de las manos circulares se presentan en su totalidad alisadas, lo que daría con ello una recurrencia necesaria de tener en cuenta. Por otra parte, al segregar el conjunto a partir de sus formas totales (Cilíndricas, esféricas, elipsoidales y discoidales), no fue posible advertir diferencias sustanciales en la presencia o ausencia en su superficie de lascados y trituramientos, registrándose por igual estas modificaciones en las superficies de éstas.

En el gráfico presentado con anterioridad, y guardando las reservas correspondientes debido al número de la muestra, es posible observar que el único grupo que no presenta reavivado son las formas esféricas, mientras que el resto de las formas presentan un alto grado de reavivado de la superficie activa, llegando a ser casi tan importante como el descarte sin reavivado. En todo caso, es necesario recordar que el reavivado no siempre es posible de ser observado, ya que si la mano se encuentra muy utilizada, aunque esta se haya reavivado, presentaría muy poco o nulo reavivado. De todas maneras es necesario consignar las diferencias observadas entre las distintas formas.

28 Conanas Recapitulando lo visto en el apartado anterior, fueron consignados 24 fragmentos de conanas, razón que nos hace tener más cuidado y reparos al momento de su interpretación. Como es posible de observar en los gráficos que se ven a continuación, y tomando como variable la Forma Total de los cuerpos (al igual que las manos se expresan en una serie de relaciones entre la estructura métrica de la pieza), es posible observar que la gran mayoría de las cananas presentan formas Discoidales. Este tipo de conanas estarían caracterizadas por el alto grado de reutilización y reavivado que presentan, considerándose como instrumentos de carácter conservado. Esto se vería ratificado por el grado preponderante de reavivado de las superficies que se encuentran pulidas. Este pulimento debemos acotar que se produciría por el uso de la superficie activa y no como sucede en otras materialidades por “preparaciones de superficies” más bien de tipo ornamentales o estilísticas. Situaciones similares ocurren con las conanas elipsoidales o esféricas, las cuales presentan de manera similar reavivado del área activa o canal de molienda, observa al momento de ver el tipo de desgaste. En el caso de las esféricas, la gran mayoría presenta su superficie alisada mientras que las elipsoidales presentan una gama más rica de superficies tanto alisadas, pulidas como bruñidas. En el caso de las cilíndricas, la muestra es tan baja (una pieza) que poco podemos decir de ellas, excepto que esta pieza no se encuentra reavivada y está alisada.

Reavivado superficie activa de Conanas 14 12 10 8 6 4 2 0

Si No Conana

Conana

Cilìndricos

Discoidales

Conana

Conana reutilizada IAD

Elipsoidales

Conana

Esféricos

29

Desgaste de superficie activa Conanas 14

Pulido y trituramiento

12 Pulido y lascados

10 8

Pulido

6

Bruñido y trituramiento

4

Bruñido

2 Alisado, trituramiento y lascados

0 Conana

Conana

Conana

Conana reutilizada IAD

Conana

Alisado y trituramiento Alisado

Cilìndricos Discoidales

Elipsoidales

Esféricos

Otros En este ítem podemos ubicar solamente dos artefactos, un sobador y un molino plano, razón por lo cual serán descritos separadamente a continuación. 

Sobador: Este es un instrumento que posee como matriz base un guijarro de graníto Grano grueso de tonalidad gris claro, que se encuentra fracturado. El punto de origen de esta fractura “en ángulo” transversal es posible de ser diferenciada. Estas características hacen pensar en una fractura más bien por uso que por procesos post depositacionales. La forma total de esta pieza en esférica con secciones biconvexas presentando en facial inferior alisamiento de denotación leve sin presencia de reavivado visible.



Molino: Instrumento de característica pasiva fabricado a partir de un guijarro de Granito de Grano grueso de color verde grisáceo. Es de una forma total esférica, pero debido a su alto grado de fragmentación no fue posible observar las formas de sus secciones y menos de planta. Dicha fractura no posee un punto de origen diferenciado y es “plana oblicua” en sentido transversal de la pieza. Presenta toda su cara activa altamente bruñida no observándose indicios de reavivado.

30 V. Estudio Espacial de los Artefactos

A continuación trataremos de observar diferencias y correlaciones espaciales entre las manos, conanas y la cerámica del sitio El Encanto, ello con el fin de tratar de determinar la existencia de diferencias morfológicas que presenten un correlato con las diferentes poblaciones que en este caso se asentaron en el lugar. La única manera con que contamos para poder determinar estas diferencias es entrecruzando los datos con un indicador cronológico de alta confiabilidad, esto es, como ya sabemos, lo que se ha logrado con la cerámica, estableciendo tipos cerámicos característicos para cada uno de las grandes poblaciones de chile Central durantes los periodos Alfareros Tempranos y alfareros del Intermedio Tardío, en este caso. La recolección de los distintos fragmentos cerámicos y su posterior análisis arroja, como veremos en los gráficos adjuntos, que dentro del sitio es posible establecer diferencias espaciales en la distribución de los fragmentos, pudiendo establecerse por lo menos dos áreas bastante diferenciadas.

N

31

El primer gráfico muestra una concentración bastante acotada y definida (marcada con una circunferencia roja) de cerámica PAT, que se extendería entre los transectos 30-42 a 5-10. Otra situación es la que se puede observar en el gráfico que se presenta a continuación, en donde es posible ver una mayor dispersión de los fragmentos PT en el sitio (cuadrado rosado), destacándose dos concentraciones una Norte (marcado con circulo verde) y otra al Sur del sitio (marcado con rectángulo amarillo).

N

A partir de estas diferencias procederemos entonces a determinar la manera como se distribuyen los artefactos en el sitio El Encanto. En el ploteo que se presenta a continuación es posible observar que tanto las manos como las conanas se encuentran esparcidas en todo el sitio pero de manera diferencial, ya, que para el área que consideramos como una concentración PAT la cantidad tanto de manos como de molinos es mucho menor, mientras que para las áreas PT las frecuencias de estos instrumentos son bastante mayores.

32

50

N

40

30

ID

20

Manos Conanas

10

X

Cerámic a PIT 0

Cerámic a PAT 0

2

4

6

8

10

12

14

16

Y

Otra situación la podemos observar cuando vemos la distribución de las manos caracterizadas por medio de sus Formas Totales, en donde es en el área definida con tendencia PT donde se observa la mayor distribución de las formas discoidales, elipsoidales y esféricas, encontrándose en el área PAT preferentemente manos con formas discoidales.

50

40

N

ID

30

Esfericos 20

Elipsoidales Discoidales Cilíndrico

10

X

Cerámica PIT 0

Cerámica PAT 0

Y

2

4

6

8

10

12

14

16

33 Diferente al parecer es la situación cuando observamos la distribución de las manos a partir de la Forma de Planta de cada una de ellas. Es necesario recordar que esta morfología solamente se puede observar en las manos completas por lo que obviamente nuestra muestra disminuye considerablemente. Aún así, es posible ver que las formas elípticas (de las cuales poseemos la mayor muestra) se inclinan mayoritariamente para las áreas definidas como PT, lo mismo sucede con las manos circulares, mientras que las rectangulares, si bien se acercan más hacia el lado PT no serían muy diagnósticas debido al pequeño número registrado. (n = 4).

50 N

40

30

ID Rectangulares

20

Elípticas Circulares

10

X

Cerámica PIT 0

Cerámica PAT 0

Y

2

4

6

8

10

12

14

16

34

8. Conclusiones y Evaluación del Trabajo efectuado

A partir del estudio de un total de 64 artefactos de molienda, entre los que se cuentan 25 soportes “inmóviles”, 24 conanas y 1 molino y 48 artefactos “móviles”, (manos y sobadores) distribuidas en un área total de 172500 m 2, fue posible establecer que existe un alto grado de fragmentación del material (70%) lo que dificulta en gran medida la asignación morfológica de los distintos artefactos. Se constata que el arado, posiblemente, habría jugado un rol fundamental en el proceso de depositación de los artefactos, fracturándolos y dejando impreso en ellos gran cantidad de marcas observadas en la mayoría de los instrumentos. Es de esta manera, como la fractura más característica que se registra en los instrumentos del sitio (plana transversal), podría estar también estrechamente ligada con este fenómeno, se sugiere así la realización de un estudio posterior para la observación de este fenómeno. Además el arado pudo acarrear los artefactos que se encontraban depositados en distintos estratos del sitio hacia la superficie, ocasionando una depositación secundaria del material, lo que pudo estar favorecido por el tamaño del artefactual de molienda. Así, se cree también necesario efectuar un estudio que establezca también, cómo el arado, no solamente puede transportar el material enterrado a la superficie sino que también estableciendo un depositación diferencial a nivel espacial en la superficie del sitio. Por otro lado, fue posible establecer también que las distintas poblaciones que habitaron el lugar favorecieron la fabricación de los artefactos de molienda en materias primas de orígenes locales sobre guijarros, aprovechando la gran cantidad de estos recursos localizados en la ribera del río Cachapoal, el cual se encuentra a menos de dos kilómetros del lugar. Esta idea se ve reforzada por la presencia de un bajo espectro de tipos de materias primas encontrándose preferentemente tanto andesitas como granitos de grano grueso, los cuales habrían sido ocupados no solamente por su alta disponibilidad sino que también por sus excelentes cualidades mecánicas (alta dureza, durabilidad y texturas rugosas) para la fabricación de este tipo de artefactos. De esta manera en el sitio no solamente están utilizando los guijarros sino que también están fabricando los distintos instrumentos (manos), lo que se ve ratificado por la presencia de preformas de mano de moler que no se encuentran con huellas de haber sido utilizadas. Se establece que la morfología más recurrente en el sitio son las formas de planta elípticas y de secciones (transversales y longitudinales) biconvexas. En cuanto a las Formas Totales de las manos el tipo más característico son elípticos con superficies predominantemente alisadas. La gran mayoría a su

35 vez están reavivadas destacando las formas discoidales con mayor grado de reavivado y las esféricas que no presentan indicios visibles a simple vista. Por otro lado solamente fue posible el hallazgo de conanas fracturadas impidiendo un análisis avanzado de ellas a nivel morfológico, a pesar de ello, un alto grado de ellas presenta reavivado del canal de molienda, haciendo suponer con ello una conducta altamente curatorial de estos artefactos, es decir, las poblaciones tendían a reparar y así volver a utilizar el artefacto continuamente. Esta situación puede parecer contradictoria con la idea de amplia disponibilidad de materias primas existentes en el área, pero debemos recordar que (1) la fabricación de las conanas es mucho más compleja que otro artefactual de molienda, teniendo que triturar y percutir el área para la formación del canal de molienda, (2) el tamaño de los guijarros es mayor lo que implica invertir en el transporte de la pieza mayores esfuerzos y (3) puede ser más bien una conducta habitual de la comunidad el preferir ciertos instrumentos que posean determinadas características haciéndolos más especiales dentro de otros. Por último cabe destacar que a diferencia de las manos que efectivamente se estaban fabricando en esta locación, no se encontraron “preformas de conanas”, de molinos o algún otro tipo de soporte, haciendo suponer que este tipo de instrumental era fabricado en otro lugar, quizás cerca del lugar de obtención de materia prima, y solamente eran acarreados al sitio aquellos instrumentos satisfactoriamente terminados. Ahora bien, habiendo ya caracterizado el sitio en su completitud, es posible observar diferencias claras en la forma como se distribuyen espacialmente los artefactos dentro del asentamiento. Es así como es posible observar dos áreas claramente diferenciadas: 1. Área Alfarera Temprana En la zona norte del sitio, compuesta por 61600 m 2 aproximadamente, es posible registrar la presencia de gran cantidad de fragmentaría cerámica que presenta características atribuibles cronológicamente al Periodo Alfarero Temprano. En lo referente al artefactual lítico de molienda es posible encontrar una baja concentración de instrumentos en relación al área PT, en donde por cada conana registrada es posible encontrar 1,75 mano, es decir 0,64 * 10-4 conanas por m2 y 1,13 * 10-4 manos por m2. También es posible observar una menor diversidad de morfologías tanto totales como de planta de las manos, destacando la presencia de las morfologías discoidales. 2. Área Alfarera Tardía Al Sur del sitio es posible encontrar una concentración densa de fragmentería cerámica perteneciente al Periodo Intermedio Tardío de unos 110900 m2 aproximadamente, más dispersa que el área anterior pero posible de ser diferenciada a nivel espacial. Esta zona, en relación al área PAT, presenta mayores concentraciones de instrumentos de molienda, en donde es posible

36 encontrar 1,31 manos por conana registrada, lo cual representa a 1,53 * 10-4 conanas por m2 y 2,25 * 10-4 manos por m2. La mayor cantidad de artefactos puede estar relacionada a una mayor cantidad de procesamiento de diversas sustancias, sobre todo productos alimenticios asociados con el agro o la recolección, o bien a que las comunidades se estarían conformado con un mayor número de unidades residenciales, o por que no, ambas dos. En lo que respecta a las Formas Totales de las manos es posible observar una mayor concentración de manos tanto discoidales, elipsoidales y esféricas y es en ésta área donde podemos encontrar una mano cilíndrica. Esta mayor cantidad de formas representadas podría estar relacionada con un mayor número de funciones que puede tener las manos. Cuando observamos la distribución de las manos a partir de la Forma de Planta de cada una de ellas es posible observar que las formas elípticas se inclinan mayoritariamente para las áreas definidas como PT, lo mismo sucede con las manos circulares, mientras que las rectangulares, si bien se acercan más hacia el lado PT no serían muy diagnósticas debido al pequeño número registrado. (n = 4). Como se pudo observar con anterioridad y teniendo en cuenta los distintos sesgos generados por la distribución diferencial de los artefactos debido al arado, podemos reconocer diferencias que nos ayudarían a distinguir los artefactos de molienda, y especialmente las manos de moler pertenecientes a cada uno de los periodos estudiados (PAT o PT). A partir de lo anterior este trabajo se ha configurado como un puntapié inicial para futuras investigaciones, contribuyendo así a la generación de nuevas problemáticas. Se espera de esta manera que dicho trabajo haya contribuido en el camino del conocimiento de esta materialidad.

37

9. Bibliografía

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41

Anexo 1: Registro Fotográfico

42

Fotografía 1: El Encanto, Transecto 42/9, Nº 56 y 57

Fotografía 2: El Encanto, Transecto 15/4, Nº 65

43

Fotografía 3: El Encanto, Transecto 21/8, Nº 66

Fotografía 4: El Encanto, Transecto 21/8, Nº 64

44

Fotografía 5: El Encanto, Transecto 40/7, Nº 54

Fotografía 6: El Encanto, Transecto 39/8, Nº 63

45

Fotografía 7: El Encanto, Transecto 33/1, Nº 53

Fotografía 8: El Encanto, Transecto 41/7, Nº 52

46

Fotografía 9: El Encanto, Transecto 8/10, Nº 15

Fotografía 20: El Encanto, Transecto 16/13, Nº 18

47

Fotografía 31: El Encanto, Transecto 2/2, Nº 60

Fotografía 42: El Encanto, Transecto 2/2, Nº 61

48

Fotografía 53: El Encanto, Transecto 21/2, Nº 55

Fotografía 64: El Encanto, Transecto 17/14, Nº 58

49

Fotografía 75: El Encanto, Transecto 17/14, Nº 59

Fotografía 86: El Encanto, Donación, Nº 14

50

Fotografía 97: El Encanto, Transecto 2/12, Nº 1

Fotografía 108: El Encanto, Transecto 4/10, Nº 6

51

Fotografía 119: El Encanto, Transecto 6/3, Nº 45

Fotografía 20: El Encanto, Transecto 6/5, Nº 37

52

Fotografía 212: El Encanto, Transecto 6/10, Nº 29

Fotografía 22: El Encanto, Transecto 7/6, Nº 5

53

Fotografía 23: El Encanto, Transecto 7/9, Nº 7

Fotografía 24: El Encanto, Transecto 9/14, Nº 4

54

Fotografía 25: El Encanto, Transecto 10/1, Nº 36

Fotografía 26: El Encanto, Transecto 10/10, Nº 33

55

Fotografía 27: El Encanto, Transecto 15/12, Nº 13

Fotografía 28: El Encanto, Transecto 17/5, Nº 26

56

Fotografía 29: El Encanto, Transecto 17/7, Nº 40

Fotografía 30: El Encanto, Transecto 18/4, Nº 38

57

Fotografía 313: El Encanto, Transecto 19/3, Nº 41 y 42

Fotografía 32: El Encanto, Transecto 21/11, Nº 31

58

Fotografía 33: El Encanto, Transecto 33/4, Nº 28

Fotografía 34: El Encanto, Transecto 34/7, Nº 32

59

Fotografía 35: El Encanto, Transecto 35/7, Nº 44

Fotografía 36: El Encanto, Transecto 38/10, Nº 30

60

Fotografía 37: El Encanto, Transecto S/R, Nº 25

61

Anexo 2: Tabla de Datos

62

Número de pieza

Unidad/ Sector

Nivel

Mprima

Color Carta

Color

Forma base

Ancho

Largo

Espesor

Peso

B/A

C/B

Forma total

1 2 3 4 5 6 7

2 1 19 9 7 4 7

12 10 13 14 6 10 9

Andesita porfírica Granito porfírico Granito porfírico Andesita porfírica Granito porfírico Granito porfírico Granito porfírico

5YR 5/2 10GY 5/2 10GY 5/2 5B 5/1 5YR 7/2 N6 10YR 8/2

Café Pálido verde grisáceo verde grisáceo Gris medio azulino Rosado anaranjado grisáceo Gris claro medio Anaranjado muy pálido

Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro

101,7 83,3 73,1 96,4 122,5 113,1 93,1

143 73,8 107,7 143,8 202 125,5 139,2

53,3 85,3 37,5 59,2 69,9 52,2 38,3

1243,6 728,9 500,1 1246,2 2449,4 1333,1 471,4

0,71 1,13 0,68 0,67 0,61 0,90 0,67

0,37 Discoidales 1,16 Esféricos 0,35 Discoidales 0,41 Discoidales 0,35 Elipsoidales 0,42 Discoidales 0,28 Discoidales

8 9 10 11 12 13 14

7 8 8 2 42 15 donación

8 8 8 3 8 12 donación

Toba lítica Granito porfírico Granito porfírico Andesita porfírica Andesita afanítica Granito porfírico Andesita porfírica

5Y 5/2 N6 5YR 7/2 5YR 5/2 5BG 5/2 5YR 7/2 5B 5/1

Gris claro olivoso Gris claro medio Rosado anaranjado grisáceo Café Pálido Azul verde grisáceo Rosado anaranjado grisáceo Gris medio azulino

Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro

96,7 79,4 97,7 125,4 102,3 92,9 127

61,5 151,8 97,6 87,6 98,4 193 175

40,6 39,7 43,1 56,9 54,7 41,2 57

317,9 551,3 674,6 862,3 857,7 1323,1 2610

1,57 0,52 1,00 1,43 1,04 0,48 0,73

0,66 Esféricos 0,26 Elipsoidales 0,44 Discoidales 0,65 Esféricos 0,56 Discoidales 0,21 Elipsoidales 0,33 Discoidales

15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29

8 5 5 10 12 12 21 21 14 14 donación 17 33 33 6

10 2 7 13 8 12 2 2 3 3 donación 5 1 4 10

Andesita porfírica Granito porfírico Granito porfírico Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita porfírica Granito porfírico Granito porfírico Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita porfírica Granito porfírico Andesita porfírica Granito porfírico Granito porfírico

5B 5/1 5YR 7/2 5YR 7/2 5B 5/1 5B 5/1 5B 5/2 5YR 7/2 5YR 7/2 5BG 5/2 5YR 5/2 5BG 5/2 5B 5/1 5YR 5/2 5B 5/1 N6

Gris medio azulino Rosado anaranjado grisáceo Rosado anaranjado grisáceo Gris medio azulino Gris medio azulino Gris azulado medio Rosado anaranjado grisáceo Rosado anaranjado grisáceo Azul verde grisáceo Café Pálido Azul verde grisáceo Gris medio azulino Café Pálido Gris medio azulino Gris claro medio

Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro

83,5 118,7 114,3 71,8 107,9 98,6 121,1 100,6 101,8 70,9 116,1 101,3 69,7 97,5 98,4

68,7 98,1 118,6 132,3 146,2 131,1 123,2 57,6 131 75,9 189 82,5 113,6 96,1 135,1

23,8 261,9 54,6 767,3 56,3 1210,5 46,4 763,5 151,4 1184,3 56,2 1024,2 58,5 1263,1 49,7 363,6 41,9 865,5 40,2 321,4 45,7 1573,4 38,5 460,5 39,4 N/R 50,6 727 47,9 824,3

1,22 1,21 0,96 0,54 0,74 0,75 0,98 1,75 0,78 0,93 0,61 1,23 0,61 1,01 0,73

0,35 Discoidales 0,56 Discoidales 0,47 Elipsoidales 0,35 Elipsoidales 1,04 Cilìndricos 0,43 Elipsoidales 0,47 Elipsoidales 0,86 Discoidales 0,32 Discoidales 0,53 Discoidales 0,24 Discoidales 0,47 Discoidales 0,35 Elipsoidales 0,53 Discoidales 0,35 Discoidales

63

Número de pieza 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30

Forma sec. Longitudinal Biconvexa No determinado Convexo- cóncavo Biconvexa Helicoidal Convexo- cóncavo Plano convexo Biconvexa Biconvexa ángulos romos Biconvexa ángulos romos Plano convexo Plano convexo Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Biconvexa Biconvexa Elíptico Plano convexo ángulos romos Biconvexa Biconvexa Biconvexa Biconvexa ángulos romos Biconvexa Biconvexa Biconvexa Biconvexa Rectangular ángulos romos Biconvexa Biconvexa Biconvexa

Forma sec. Transversal Plano convexo No determinado Convexo- cóncavo Biconvexa Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Plano convexo Biconvexa Biconvexa Biconvexa ángulos romos Plano convexo Elíptico Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Biconvexa Biconvexa Elíptico Plano convexo Biconvexa Biconvexa Biconvexa Biconvexa Biconvexa Biconvexa Biconvexa Biconvexa Rectangular ángulos romos Biconvexa Biconvexa Biconvexa

Forma seccion planta Rectangular ángulos romos No determinado Rectangular Elíptico No determinado No determinado Elíptico No determinado Rectangular ángulos romos Circular No determinado Triángulo con esquinas romas No determinado Rectangular Elíptico Elíptico Circular Elíptico Elíptico Elíptico Circular Circular Elíptico No determinado Elíptico No determinado Rectangular ángulos romos Elíptico Elíptico No determinado

Condicion Completas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Completas Completas Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Completas Completas Completas Fracturadas Completas Fracturadas Completas Fracturadas Completas Fracturadas Completas Fracturadas

Punto origen fractura

Tipo fractura

Orientacion de la fractura

Indiferenciado Indiferenciado

Plana oblícua Plana oblícua

Transversal Transversal

Indiferenciado Indiferenciado

Plana oblícua Plana transversal

Transversal- Longitudinal Transversal- Longitudinal

Diferenciado

Plana transversal

Transversal

Diferenciado

Plana transversal

Transversal

Indiferenciado Indiferenciado Indiferenciado Diferenciado

Plana transversal Plana transversal Plana transversal Plana transversal

Longitudinal Transversal Transversal Transversal

Diferenciado

Plana transversal

Transversal

Indiferenciado

Plana transversal

Transversal

Indiferenciado

Plana transversal

Transversal- Longitudinal

Indiferenciado

Plana transversal

Transversal

Diferenciado

Plana oblícua

Transversal

Indiferenciado

Plana transversal

Multidireccional

64

Número de pieza 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30

Alteraciones naturales Estrías de arado No se observa No se observa Lascados y estrias de arado Estrías de arado Estrías de arado Lascados y estrias de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado No se observa No se observa Lascados y estrias de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Lascados y estrias de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado

Alteraciones funcionales Pulido, trituramiento y láscados Bruñido Pulido Pulido, trituramiento y láscados Pulido y lascados Pulido Pulido, trituramiento y láscados Alisado y Lascados Alisado, trituramiento y lascados Alisado y trituramiento Alisado Lascados y trituramientos Bruñido y trituramiento Alisado y trituramiento Pulido, trituramiento y láscados Pulido, trituramiento y láscados Alisado Alisado y trituramiento Pulido, trituramiento y láscados Pulido, trituramiento y láscados Alisado, trituramiento y lascados Alisado, trituramiento y lascados Alisado Alisado Alisado y trituramiento Alisado y trituramiento Pulido Alisado, trituramiento y lascados Alisado, trituramiento y lascados Alisado

Ubicación modif. En casi toda la pieza Facial superior Facial superior Facial superior, inferior e izquierdo Facial superior, inferior y distal Facial superior e inferior Facial inferior e izquierdo Facial superior e inferior En casi toda la pieza Facial Inferior Facial Inferior Extremo proximal No determinado Facial superior En casi toda la pieza En casi toda la pieza Facial superior e inferior Facial inferior y distal En casi toda la pieza En casi toda la pieza En casi toda la pieza En casi toda la pieza Facial superior e inferior Facial superior e inferior Facial Inferior Facial Inferior Facial inferior e izquierdo En casi toda la pieza En casi toda la pieza Facial superior e inferior

Extension modif. Total Total Total Total Total Total Total Total Total Total Parcial Parcial Total Total Parcial Total Parcial Parcial Total Total Total Total Total Total Total Total Total Total Total Total

Denotacion Marcada Marcada Moderada Marcada Moderada Moderada Marcada Marcada Moderada Leve Leve Marcada Marcada Moderada Moderada Moderada Leve Moderada Marcada Marcada Moderada Leve Leve Leve Moderada Moderada Moderada Moderada Moderada Leve

Elementos asociados No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa Restos orgánicos No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa Restos minerales No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa

Presencia reavivado Si No No No No No Si No Si Si No No Si Si No Si No No Si Si No No No No Si Si Si Si Si No

Asignación funcional Mano Molino Conana Mano- Percutor Conana Conana Mano Mano- Percutor Mano- Percutor Mano Mano Choper Conana Conana Mano- Percutor Mano Mano Mano Mano Mano- Percutor Mano- Percutor Mano- Percutor Mano Mano Mano Mano Mano Mano- Percutor Mano- Percutor Mano

65

Número de Unidad/ Sector pieza

31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69

21 34 10 40 40 10 6 18 18 38 19 19 5 35 6 21 4 4 17 15 17 41 33 40 21 42 42 17 17 2 2 9 39 3 15 21 41 41 41

Nivel

11 7 10 6 6 1 5 4 4 9 3 3 10 7 3 14 1 1 6 13 11 7 1 7 2 9 9 14 14 2 2 3 8 1 4 8 9 9 9

Mprima

Toba lítica Granito porfírico Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita afanítica Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita afanítica Granito porfírico Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita porfírica Andesita porfírica Granito porfírico Granito porfírico Granito porfírico Andesita porfírica Granito porfírico Andesita porfírica Andesita afanítica Andesita porfírica Andesita porfírica Granito porfírico Granito porfírico Toba lítica Andesita porfírica Granito porfírico Basalto afanítico Granito porfírico Granito porfírico Basalto afanítico Andesita afanítica Granito porfírico Granito porfírico Basalto afanítico Granito porfírico Granito porfírico

Color Carta

5Y 5/2 5YR 6/1 5B 5/1 5PB 3/2 5Y 5/2 5R 4/2 10YR 7/4 5YR 7/2 5G 5/2 5B 5/1 5B 5/1 10G 6/2 5G 5/2 10Y 6/2 10Y 6/2 N6 5G 5/2 N6 10YR 7/4 5G 5/2 5PB 5/2 5BG 5/2 5B 6/2 5B 5/1 5B 6/2 N6 5YR 7/2 10G 6/2 5PB 5/2 5PB 5/2 10YR 6/2 10YR 6/2 5YR 2/2 5GY 5/2 N8 N6 5YR 4/1 N6 5Y 8/1

Color

Gris claro olivoso Gris claro cafesoso Gris medio azulino Azul oscuro Gris claro olivoso Rojo grisáceo Naranjo grisáceo Rosado anaranjado grisáceo Verde grisáceo Gris medio azulino Gris medio azulino Verde pálido Verde grisáceo Oliva Pálido Oliva Pálido Gris claro medio Verde grisáceo Gris claro medio Naranjo grisáceo Verde grisáceo Azul grisáceo Azul verde grisáceo Azul pálido Gris medio azulino Azul pálido Gris claro medio Rosado anaranjado grisáceo Verde pálido Azul grisáceo Azul grisáceo cefé pálido amarillento cefé pálido amarillento Café oscuro Verde oscuro amarillento Gris muy claro Gris claro medio Gris cafesoso Gris claro medio Gris amarillento

Forma base

Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Clasto angular Guijarro Clasto angular Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro Guijarro

Ancho

92,8 92,4 85,6 68,1 57,5 82,6 121,7 87,1 40,6 61,7 80,2 73,3 62,6 92,5 116,2 45,5 64,3 150,6 124,6 141,4 90,1 48,8 76,1 56,1 50,1 76,1 77,7 90,1 99,9 73,2 96,8 54,5 72,1 46,1 115,9 108,6 45,7 52,1 40,6

Largo

Espesor

79,2 96,5 74,1 70,1 39,7 10,6 130,8 112,9 42,9 74,8 111,1 84,1 67,6 126,3 143,1 85,7 65,2 189 250 159,1 217,2 80,8 113,2 128,1 69,1 53,6 63,7 180 98,7 98,4 121,2 66,8 97,4 62,4 11,8 106,1 51,2 72,7 49,5

45,3 57,4 49,2 55,6 N/R 46,8 140,8 32,8 32,1 43,5 31,2 32,3 44,6 41,6 52,2 65,1 33,4 39,7 45,8 60,1 66,3 25,4 39,7 34,5 63,6 41,1 36,6 41,6 59,8 46,7 55,4 37,4 38,6 44,4 45,1 40,1 103,6 49,6 32,1

Peso

B/A

443,1 718,1 461,9 379,1 198,6 711,2 532,4 498 57,3 275,1 329,9 313,2 204,8 676,2 1455,9 456,6 197,3 2470,7 2081,3 1968,3 939,6 144,1 624,6 395,9 292,3 258,1 252,1 1233 1049,2 1079,2 855,5 184 269,6 226,9 754 687,8 432,5 180 69,1

C/B

Forma total

1,17 0,57 Discoidales 0,96 0,59 Discoidales 1,16 0,66 Discoidales 0,97 0,79 Esféricos 1,45 N/R No se observa 7,79 4,42 Esféricos 0,93 1,08 Esféricos 0,77 0,29 Discoidales 0,95 0,75 Esféricos 0,82 0,58 Discoidales 0,72 0,28 Discoidales 0,87 0,38 Discoidales 0,93 0,66 Discoidales 0,73 0,33 Discoidales 0,81 0,36 Discoidales 0,53 0,76 Cilìndricos 0,99 0,51 Discoidales 0,80 0,21 Discoidales 0,50 0,18 Elipsoidales 0,89 0,38 Discoidales 0,41 0,31 Elipsoidales 0,60 0,31 Elipsoidales 0,67 0,35 Discoidales 0,44 0,27 Elipsoidales 0,73 0,92 Esféricos 1,42 0,77 Esféricos 1,22 0,57 Discoidales 0,50 0,23 Elipsoidales 1,01 0,61 Discoidales 0,74 0,47 Discoidales 0,80 0,46 Discoidales 0,82 0,56 Discoidales 0,74 0,40 Discoidales 0,74 0,71 Esféricos 9,82 3,82 Esféricos 1,02 0,38 Discoidales 0,89 2,02 Esféricos 0,72 0,68 Esféricos 0,82 0,65 Esféricos

66

Número de pieza

31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69

Forma sec. Longitudinal

Biconvexa Elíptico Rectangular ángulos romos Elíptico No determinado Biconvexa Convexo- cóncavo Decimétrico No determinado Plano convexo Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Plano convexo Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Rectangular Biconvexa Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Biconvexa Rectangular ángulos romos Convexo- cóncavo No determinado Biconvexa No determinado Rectangular ángulos romos Convexo- cóncavo Biconvexa Biconvexa Biconvexa No determinado No determinado Biconvexa Biconvexa No determinado Biconvexa No determinado

Forma sec. Transversal

Biconvexa Elíptico Biconvexa ángulos romos Elíptico No determinado Biconvexa Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo No determinado Biconvexa Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Plano convexo Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Plano convexo Biconvexa Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo Triángulo isósceles No determinado Rectangular ángulos romos Convexo- cóncavo Convexo- cóncavo No determinado Biconvexa Rectangular ángulos romos Convexo- cóncavo No determinado Biconvexa Biconvexa Biconvexa No determinado Biconvexa Biconvexa Convexo- cóncavo Biconvexa No determinado

Forma seccion planta

Elíptico Circular No determinado No determinado No determinado Pentagonal No determinado Rectangular No determinado Cuadrado achaflanado No determinado No determinado No determinado No determinado Triángulo equilátero con esquinas romas No determinado Elíptico Elíptico No determinado Circular No determinado No determinado Rectangular ángulos romos No determinado No determinado No determinado No determinado Rectangular ángulos romos Circular No determinado Elíptico No determinado No determinado No determinado Circular Circular No determinado No determinado No determinado

Condicion

Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Completas Fracturadas Fracturadas Fracturadas Completas Completas Fracturadas Fracturadas Fracturadas

Punto origen fractura

Tipo fractura

Orientacion de la fractura

Diferenciado

Plana oblícua

Transversal

Indiferenciado Indiferenciado Indiferenciado Indiferenciado Indiferenciado Indiferenciado Indiferenciado

Plana transversal Plana transversal Plana oblícua Plana transversal Plana transversal Plana transversal No diferenciada

Multidireccional Multidireccional Multidireccional Multidireccional Multidireccional Multidireccional Multidireccional

Indiferenciado Indiferenciado

Plana transversal Plana transversal

Multidireccional Multidireccional

Indiferenciado Indiferenciado Indiferenciado Diferenciado Indiferenciado Indiferenciado Diferenciado Indiferenciado Diferenciado

Plana transversal Plana transversal Plana transversal Plana transversal Plana transversal Plana transversal Plana oblícua En ángulo Plana transversal

Multidireccional Multidireccional Multidireccional Transversal Multidireccional Multidireccional Transversal Transversal- Longitudinal Longitudinal

Indiferenciado Indiferenciado Diferenciado Diferenciado

Plana oblícua En charnela oblícua Plana transversal Plana transversal

Multidireccional Multidireccional Transversal- Longitudinal Transversal

Indiferenciado Indiferenciado

Plana transversal Plana oblícua

Transversal Multidireccional

Indiferenciado Diferenciado Indiferenciado

Plana transversal Cóncava- convexa oblícua Plana oblícua

Multidireccional Transversal Multidireccional

Indiferenciado Diferenciado Indiferenciado

En charnela transversal En ángulo Plana transversal

Multidireccional Transversal Multidireccional

67

Número de pieza

31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69

Alteraciones naturales

Alteraciones funcionales

Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado No se observa No se observa No se observa Estrías de arado No se observa No se observa No se observa No se observa Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado Estrías de arado No se observa No se observa Estrías de arado Estrías de arado Lascados y estrias de arado Estrías de arado No se observa No se observa No se observa No se observa Meteorización Estrías de arado Lascados y estrias de arado Estrías de arado No se observa Estrías de arado Lascados accidentales Estrías de arado No se observa Estrías de arado Estrías de arado No se observa Estrías de arado Lascados accidentales

Alisado y trituramiento Pulido y lascados Alisado y Lascados Alisado y Lascados Pulido Alisado Alisado y trituramiento Alisado y trituramiento Alisado Lascados Pulido y trituramiento Pulido Lascados Pulido y trituramiento Pulido y trituramiento Alisado Alisado Bruñido Alisado Alisado y trituramiento Alisado, trituramiento y lascados Alisado Alisado y trituramiento Pulido y trituramiento Pulido Trituramiento Alisado Alisado y trituramiento Pulido y trituramiento Alisado Alisado y trituramiento Pulido y trituramiento Pulido Alisado Alisado, trituramiento y lascados Lascados y trituramientos Alisado Alisado Alisado

Ubicación modif.

Facial Inferior Facial superior, inferior, izquierdo y derecho Facial inferior e izquierdo En casi toda la pieza Facial Inferior Facial superior Facial superior Facial superior No determinado Extremo distal Facial superior Facial superior Lateral derecho Facial superior Facial superior Facial superior Facial Inferior Facial superior Facial superior Facial superior Facial superior y derecho Facial Inferior Facial inferior e izquierdo Facial superior Facial superior Facial inferior e izquierdo Facial Inferior Facial Inferior Facial superior Facial Inferior Facial superior e inferior Facial superior e inferior Facial Inferior Facial superior En toda la pieza En toda la pieza Facial superior Facial Inferior Facial superior e inferior

Extension modif.

Total Total Parcial Parcial Total Total Total Total Total Parcial Total Total Parcial Total Total Total Total Total Total Total Total Parcial Parcial Total Total Total Parcial Total Total Parcial Total Total Total Parcial Total Total Parcial Parcial Total

Denotacion

Moderada Moderada Leve Leve Marcada Marcada Marcada Marcada Moderada Leve Marcada Marcada Marcada Marcada Marcada Leve Leve Marcada Leve Marcada Marcada Moderada Leve Marcada Marcada Marcada Leve Marcada Marcada Leve Marcada Marcada Marcada Leve Marcada Marcada Marcada Leve Marcada

Elementos asociados

No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa Restos orgánicos No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa No se observa

Presencia reavivado

Si No No No Si Si Si Si No No Si No No Si Si No No Si No Si No No No No No No No Si Si No Si Si No No No No No No No

Asignación funcional

Mano Mano - Sobador Mano- Percutor Mano- Percutor Conana Conana Conana Conana Artefacto indeterminado Cepillo Conana Conana Cepillo Conana Conana Conana Mano Conana Conana Conana Conana reutilizada IAD Artefacto indeterminado Mano- Percutor Conana Conana Mano Mano Mano Conana Conana Mano Mano Mano Conana Preforma de Mano Preforma de Mano Conana Sobador Mano

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