El sorprendente ascenso de Podemos. ¿Instrumentalización coyuntural o innovación política ?

Tomás de León-Sotelo Fuentes.

30.03.2015

El sorprendente ascenso de Podemos. ¿Instrumentalización coyuntural o innovación política ?

Resumen : La fugaz irrupción de la plataforma-partido Podemos en el panorama político y electoral español se ha visto confirmada por las recientes elecciones al Parlamento andaluz. (15 escaños). Lejos del ruido mediático que ha acompañado su ascenso, este breve análisis tratará de investigar las bases del arraigo social del discurso de la formación, así como analizar su influencia en el sistema de partidos español, para poder así dilucidar si el carácter populista que se le atribuye puede resultar beneficioso para la política española. Palabras clave : España, Podemos, populismo, sistema de partidos, acción política.

¿Es Podemos populista ? El eslogan de Podemos ante las elecciones europeas revelaba el componente emocional de su estrategia de captación de votos : ¿Cuándo fue la última vez que votaste con ilusión ? Formado a partir de bases provenientes de Izquierda Unida, Izquierda Anticapitalista y de otros movimientos sociales, vio su ventana de oportunidad en un momento en que los niveles de satisfacción con el sistema bipartidista estaban en caída libre. (véase anexo 1). Si bien otros partidos ya habían tratado de romper el sistema nacional bipartidista (UPyD, desde 2007), el potencial electoral de Podemos que anuncian las encuestas, así como su entrada como tercera fuerza en el parlamento andaluz, hacen que sea el primer partido en amenazar seriamente la predominancia de los dos grandes partidos, PP y PSOE, desde la desaparición de UCD-CDS. A lo largo de este año de existencia orgánica del partido, se ha analizado su discurso como populista, carácter que incluso Iñigo Errejón, director de campaña de las pasadas elecciones europeas asumió implícitamente : Existen condiciones para que un discurso populista de izquierdas, que no se ubique en el reparto simbólico de posiciones del régimen sino que busque crear otra dicotomía, articule una voluntad política nueva con posibilidad de ser mayoritaria1. Asimismo, Montero apunta que el discurso del partido combina en mayores o menores dosis recetas extraordinariamente simplificadas de neopopulismo, antieuropeísmo, anti-partidismo y antisistema 2. Sin llegar a ese extremo antisistema, es cierto que la formación ha ganado popularidad con sus frecuentes apariciones televisivas en las que denuncia la existencia de una casta de gobernantes, la corrupción en ambos grandes partidos y la imposición de políticas 1 Errejón, 2014. 2 Montero, 2014, en El País.

económicas desde la Unión Europea. Este discurso plantea una nueva dicotomía, como señala Errejón, que se corresponde con la teoría del populismo de Ernesto Laclau. Laclau observa tres etapas de desarrollo del discurso populista : cuando existen muchas demandas individuales en una sociedad, éstas son aceptadas por los ciudadanos a nivel colectivo y se crea una cadena de equivalencias entre todas las demandas. Estas demandas equivalentes se transforman en un discurso que separa a la sociedad en dos polos : la clase popular y la élite gobernante. Cuando la cadena de demandas se institucionaliza, por ejemplo, mediante estructuras de partido o la aparición de un líder discursivo, su discurso adquiere pretensiones hegemónicas. Así, un discurso de origen contestatario se presenta como alternativa y busca su acceso a las estructuras de poder político. El partido efectivamente adopta un discurso populista, no por su ideología, sino por los términos en los que plantea su acción política : asumen su carácter de representantes del pueblo frente a una clase política cuya popularidad toca fondo. Para ello, se apoyan en un amplio abanico de denuncias sociales más o menos polémicas (desahucios, asuntos sanitarios, educativos), cuya relevancia es compartida por amplios sectores de la ciudadanías. Todo ello combinado con una nueva metodología organizativa, que analizaremos en detalle más tarde. Se trata, a nivel organizativo, de canalizar las demandas del pueblo – o de establecer una cadena de equivalencias que agrupe las distintas demandas individuales en un movimiento colectivo. El discurso populista culmina en la oposición entre ellos y nosotros, el pueblo y la casta, como teorizó en 2005 Laclau en La Razón Populista. De este filósofo postmarxista , la formación toma también una marcada crítica al economicismo actualmente predominante, con su denuncia del rescate financiero y el abandono de la inversión en política social. Si bien los líderes del partido afirman constantemente que la formación no es ni de derechas ni de izquierdas, lo que es también característicamente populista, lo cierto es que los ciudadanos asumen claramente su posición a la izquierda de Izquierda Unida3. El discurso de Podemos, entre realismo y oportunismo. Germán Cano, miembro del consejo ciudadano de Podemos, declara4 asimismo que el partido tiende a inscribirse dentro del nuevo populismo, como un espacio subestimado por las tradiciones liberal y marxista, que no han comprendido que la composición de la sociedad no responde a identidades fijas y preconstituidas. Es decir, si las identidades sociales se crean y transforman constantemente, Podemos estaría aspirando a representar a una nueva categoría social : los perjudicados por la crisis y las políticas socioeconómicas que esta ha motivado. Por un lado, se ha de constatar la aparición de una nueva clase de damnificados cuyo estatus económico se ha visto profundamente degradado desde el estallido de la burbuja inmobiliaria, la explosión del desempleo y el recorte de las partidas de gasto social. Esta nueva clase o categoría social señala como principales preocupaciones el desempleo, la coyuntura económica actual, y la falta de expectativas. (véase Anexo 2) Asimismo, entre las preocupaciones más acuciantes de la ciudadanía se señala la clase política, a quien se asocia una imagen de corrupción y de ejercicio interesado de sus funciones públicas.

3 Los barómetros CIS de Octubre 2014 y Enero 2015 sitúan la media de la ubicación ideológica de Podemos en 2,43 y 2,28 respectivamente (1= extrema izquierda ; 10 = extrema derecha). 4 Jacobin Magazine (27/03/15) , infra.

En este contexto, Podemos ha capitalizado las recientes transformaciones sociales para dirigir su discurso a una base electoral más amplia que la que hubiera alcanzado si se autodefiniera como un partido de izquierdas, puesto que ese espacio ha sido ocupado tradicionalmente por PSOE e IU. Además, su éxito se debe en parte a que se presenta como una opción de exit 5/ salida del sistema bipartidista cuando hasta ahora predominaban las alternativas de voice/ voz en el interior de los partidos establecidos, en forma de diferentes corrientes ideológicas. El contexto de crisis económica y social actual ha relegado a un segundo plano la tradicional demanda de los partidos minoritarios en España, que era la reforma del sistema electoral para eliminar su sesgo mayoritario y el sesgo conservador. Podemos no es uno de los partidos minoritarios al uso, precisamente porque goza de un empuje electoral que le permite superar esas barreras electorales que han relegado a los partidos alternativos hasta ahora.

El método Podemos, ¿herramienta de politización ? La diferencia más evidente con respecto a la vieja política es su método de organización como partido. Aunque se haya constituido oficialmente como partido, Podemos se construye sobre una base de asambleas (círculos) coordinados a nivel local, regional y nacional, lo cual le otorga un carácter híbrido entre partido político y movimiento social. Heredero del discurso indignado del 15M, su estructura orgánica aúna el componente asambleario de aquél movimiento con una coordinación supra-asamblearia, para tratar de producir un discurso propio desde la multitud de participantes. También le caracteriza un intenso uso de la tecnología en la toma de decisiones, a través de los sistemas Agora Voting y Appgree6, donde se pretende abrir las votaciones a cuantos simpatizantes deseen participar en ellas. El enfoque de proximidad local y de apertura organizativa ha sido sin duda un vector de politización de aquellos ciudadanos que anteriormente no se habían implicado directamente en política. Los círculos permiten el debate entre vecinos de barrio o compañeros de profesión, y tienen una vocación de articular, para cada contexto local, medidas políticas de ámbito más amplio. Se trata de una combinación de la acción de protesta (exponer y manifestar los problemas actuales) y la acción de propuesta ( debatir las medidas más oportunas). Al contrario que los partidos tradicionales, las posibilidades de participación son mayores (asambleas, votaciones online, campañas de financiación colectiva, ...) aunque es evidente que el vínculo militante-partido es más débil, al ser muy limitado el esfuerzo necesario para afiliarse7 al partido. Esto plantea problemas en cuanto a la cohesión del discurso del partido y la gestación de propuestas políticas concretas, si bien abre la puerta a una mayor diversidad ideológica La estrategia del partido ha sido determinada hasta ahora por una cúpula dirigente, primero constituida por las caras visibles del partido y después institucionalizada en un consejo ciudadano compuesto por 62 personas. A día de hoy, es éste el principal órgano decisional del partido, al que asiste también una comisón de garantías democráticas (8 miembros) encargada de cuestiones de orden interno. 5 Siguiendo la teoría de Hirschman (1970) de los modos de acción frente al descontento de un individuo con la organización en la que se integra. 6 La página https://participa.podemos.info/es es el portal que centraliza todas las herramientas de participación disponibles (previa inscripción online). 7 En realidad, se ha de hablar de simpatizantes cuya inscripción online ya les convierte en una suerte de miembros del partido, puesto que ni existen carnets de afiliado, ni se exige el pago de cuotas.

Es preciso cuestionarse hasta qué punto esta estructura puede satisfacer las demandas de quienes participan en ella, es decir, cuál es su eficacia operativa. El nivel de base, los círculos, goza de una gran apertura, puesto que cualquier persona puede asistir a las reuniones semanales. Los documentos más relevantes del partido se someten a votación por los círculos, quienes, a su vez, también tienen la función de avalar a los candidatos a las votaciones internas para puestos de responsabilidad. Tal vez sea éste el elemento diferencial respecto al 15M, donde no existía por encima de las asambleas ningún nivel organizativo superior. Sin embargo, esta estructura es todavía reciente y las modalidades de participación, si bien numerosas, no aseguran que al final del proceso de debate interno resulte un discurso congruente con las propuestas de las bases. Conclusión. Como hemos visto, Podemos ha articulado un discurso populista8 alineado con la insatisfacción creciente de la sociedad hacia la política tradicional bipartidista. Los issues que moviliza su discurso son la denuncia de problemáticas sociales agravadas por la crisis y la denuncia de la corrupción del sistema. Ambas sirven de prueba de que los políticos han abandonado a la ciudadanía. Ante este panorama, recurren a un modelo de organización muy abierto y participativo, en el que la participación individual (input) es muy sencilla, pero cuyos resultados (outputs) se diluyen dentro de una entramado organizacional complejo. La estructura de Podemos, con una amplia base popular y una dirección unificada en torno al Consejo Ciudadano, puede funcionar como un catalizador democrático si logra poner en marcha un sistema en el que se le dé sentido y resultado a la participación ciudadana. Ese sistema debería lograr que las propuestas y demandas que cuenten con un apoyo mayoritario en los niveles de base se trasladen a los niveles superiores para formar parte de la agenda política del partido. En ese sentido, la articulación entre las instancias regionales y la cúpula central parece determinante para lograr la cohesión entre las demandas sociales y la acción política del partido a nivel macro. Si por el contrario, el partido se limitara a seguir bajo la dirección de un reducido grupo de personas que utilizan a las bases como legitimación de su discurso, instrumentalizando toda la movilización popular que han generado, estaríamos ante un movimiento peligroso, en tanto que renunciaría a representar las legítimas demandas de los ciudadanos. Lijphart definió la estabilidad de un sistema político como su capacidad de dar respuesta a las demandas que se le formulan9, y en este sentido también se puede analizar la estabilidad que tendrá el movimiento Podemos. Si logran articular un sistema organizativo que transforme la multitud de demandas que agrupa en políticas concretas, el partido tenderá a estabilizarse dentro del sistema político nacional y funcionará como un partido político tradicional, tal y como lo prevé la Constitución (art. 6 CE10). En ese sentido, su única diferencia respecto de los partidos tradicionales serían los nuevos modos de participación y construcción del discurso, que realizan de modo más fiel el precepto constitucional de democracia interna.

8 Populista puesto que responde al modelo teórico propuesto por Laclau. Utilizo el término en cursiva para diferenciarlo de su uso en el lenguaje corriente, connotado negativamente y asociado más bien a la antipolítica. 9 Lijphart, 1975 10 Art. 6 CE : Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación política. Su creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la Constitución y a la ley. Su estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos.

Bibliografía : ANDUIZA, Eva y BOSCH, Agustí, Elecciones y comportamiento electoral. ed. Ariel, 2010. ERREJÓN, Iñigo : ¿Qué es Podemos ? Le Monde Diplomatique en español, nº225, julio 2014. HIRSCHMAN, Albert O. : Exit, Voice and Loyalty. Responses to Decline in Firms, Organizations and States. Harvard University Press, 1970. LIJPHART, Arend. The Politics Of Accomodation. Pluralism and Democracy in the Netherlands. University of California Press, 1975. MINDER, Raphael : Spanish Upstart Party Said It Could, and Did. Now the Hard Part Begins. The New York Times, 29 de mayo de 2014, http://www.nytimes.com/2014/05/29/world/europe/spanishupstart-party-said-it-could-and-did-now-the-hard-part-begins.html?_r=0 MONTERO GIBERT, José Ramón : Podemos como laboratorio político. EL PAIS, 13 de junio de 2014. http://elpais.com/elpais/2014/06/11/opinion/1402474591_271003.html SCHAFGANS, Johanna : El populismo o la construcción de lo político. El Precursor, 24 de noviembre de 2014. SEGUIN Bécquer : Podemos' s Latin American Roots, Jacobin Magazine, 27/03/2015 https://www.jacobinmag.com/2015/03/podemos-spain-iglesias-morales-chavez/

Documentos internos de Podemos : Documento de principios éticos, documento de principios políticos, documento de principios organizativos, disponibles en http://podemos.info/documentos/

Experiencia propia de observación y participación en el círculo Podemos Malasaña durante el mes de julio de 2014.

Anexo 1 : Serie histórica del índice de confianza ciudadana en el sistema bipartidista.

Fuente : CIS http://www.cis.es/cis/opencms/ES/11_barometros/Indicadores_PI/documentos/serGobOpo.html

Anexo 2. Percepciones de los principales problemas de España, series históricas de multirrespuesta. (tabla de respuestas disponible en : http://www.cis.es/cis/export/sites/default/-Archivos/Indicadores/documentos_html/TresProblemas.html )