El pueblo mexicano no existe

El pueblo mexicano no existe Por: Nora Estefanía Picasso Uvalle

El pueblo mexicano no existe. Por lo menos no como el pueblo tradicional preexistente y sometido, como la nación que busca, ante todo, lograr los ideales revolucionarios mexicanos: tierra y educación para todos. Tampoco existe el pueblo que ostenta la soberanía nacional, el que tiene el poder público y que se instituye para beneficio de él. El que “decidió” constituirse en una República compuesta de estados libres, regidos únicamente por la ley fundamental, que es la Constitución. El pueblo mexicano, al día de hoy, más que un referente homogéneo debe ser concebido como la articulación de una serie de demandas. Demandas que a pesar de ser distintas, se universalizan en una misma a través de la lógica equivalencial1. ¿A dónde quiero llegar con todo esto? A que el movimiento #TodosSomosAyotzinapa, entendido como organización social, al igual que “el pueblo mexicano” no pueden ni deben ser entendidos desde una lógica tradicional de izquierda mediante la cual las peticiones a su interior son todas homogéneas. El surgimiento de #TodosSomosAyotzinapa debe ser entendido como un momento de articulación, en que un conjunto de demandas al interior de un sistema de relaciones complejo pueden llegar a unificar el concepto de “pueblo”2. Desde hace algunas décadas la élite política que gobierna a México se introdujo en un camino peligroso cediendo el espacio público (y político) a los grupos de delincuencia organizada. Estos han corrompido a las autoridades federales, estatales y locales. Existen alcaldes, diputados, senadores, gobernadores, de todos los partidos políticos, que forman parte de los cárteles del narcotráfico3. Reciben sus órdenes a cambio de dólares por sus servicios. Así han reunido grandes fortunas, exhiben joyas, viajan en carros de lujo, despilfarran efectivo4 mientras presumen de controlar la seguridad en las comunidades a su cargo. Y es que hablar del narcotráfico en México es “en muchos sentidos, hablar del Estado”5, de un Narco-Estado. Pareciera que de alguna u otra manera, todas y todos, desde nuestros contextos y particularidades, hemos renunciado parcialmente a nuestras demandas para unificarnos en una sola demanda que pretende hegemonizarse, ¿cuál es esta demanda? El movimiento tiene un pedido muy concreto: regresar con vida a los 43 estudiantes desaparecidos el 26 de septiembre de 2014. Esto incluso se refleja propiamente en su lema, “vivos se los llevaron,

                                                                                                                1

Laclau, Ernesto. ¿Por qué construir al pueblo es la principal tarea de una política radical? Ob. Cit., p.25. Laclau, Ernesto. Más allá de la positividad de lo social: antagonismo y hegemonía. Ob. Cit., p.141. 3 Ayotzinapa: México se desangra. La Jornada. Nota del 25 de octubre de 2015. Disponible en línea: http://www.jornada.unam.mx/2014/10/25/opinion/010a1pol 4 Véase: Exhiben en video presunta corrupción de Yairo Marina. ADN Informativo. Nota del 12 de septiembre de 2014. Disponible en línea: http://adninformativo.mx/exhiben-en-video-presunta-corrupcion-de-yairo-marina/. #LadyDubai (hija de Gobernador de Aguascalientes) exhibe lujos en viaje a Emiratos Árabes. Unión Puebla. Nota del 2 de octubre de 2013. Disponible en línea: http://www.unionpuebla.mx/articulo/2013/10/02/politica/ladydubai-exhibe-lujos-en-viaje-dubai. Hijos de narcos cantan en instituciones oficiales de gobierno. La Opinión. Nota del 23 de enero de 2014. Disponible en línea: http://www.laopinion.com/latinoamerica/hijos-narcotraficantes-graban-canciones-palacios-gobierno-mexico 5 Chabat, Jorge. Narcotráfico y estado: El discreto encanto de la corrupción. En: Letras Libres (versión en línea). Septiembre de 2005. Disponible en línea: http://www.letraslibres.com/revista/convivio/narcotrafico-y-estado-el-discreto-encanto-de-la-corrupcion?page=0,0 2

vivos los queremos”. Sin embargo, en el análisis social una nunca puede enfocarse únicamente en su eslogan literal o a su objetivo proclamado, por esto es importante desentrañar el verdadero mensaje de #TodosSomosAyotzinapa. ¿Qué quiere decir la afirmación “todos somos Ayotzinapa”? ¿Cuál es su exigencia concreta tanto en un sentido simbólico, como en un sentido material? Se ha calculado que alrededor de 85,000 personas han sido asesinadas desde el 2006 a la fecha. 8,000 personas han desaparecido desde el 2012. Ha habido 22,732 denuncias de homicidios en 2013 (en donde se registra como principal causa de muerte los disparos por armas de fuego). Por el contrario, solamente 1,698 personas han denunciado por secuestro en 2013. En 2012 hubieron 2,764 mujeres asesinadas (en Chihuahua hay 22,7 asesinadas por cada 100 mujeres). Se estima que han asesinado a 47,000 migrantes en los últimos seis años. Aumentó el 600% el número de denuncias por tortura a manos de las fuerzas armadas o la policía. Y solamente 7 personas han sido condenadas por tortura6. Tomando en cuenta estos datos, “Todos somos Ayotzinapa” hace referencia a una situación, en la que todas las personas, por la razón que sea, nos solidarizamos y nos sentimos parte del movimiento7. Porque nos indigna, porque nos asusta, porque ayer fueron ellos pero mañana puedo ser yo. Y es que ante las barreras mediáticas y la inoperancia del sistema de partidos, resurge una solidaridad que pretende facilitar la organización social. Lo sucedido en Ayotzinapa (re)generó el coraje y la indignación para evidenciar que en México “nunca fuimos modernos, mucho menos democráticos”8. Más allá del significado de la afirmación, la cuestión también es tratar traducir dicha afirmación en una exigencia concreta. Como mencioné anteriormente, la demanda literal consiste en exigir la devolución de los 43 estudiantes con vida. La imposibilidad en el cumplimiento de esta demanda, constituye su carácter simbólico, incluso hasta revolucionario. Sin embargo, la demanda material de #TodosSomosAyotzinapa podría ser entendida como una exigencia por la fundación de un nuevo gobierno. Porque el Narco-Estado implica que el sistema político está podrido, y la única forma de remediarlo es mediante la salida de todas la autoridades (o muchísimas de ellas) y la elección de nuevos representantes. Sí, el Gobierno ha tenido “intentos” de conceder ante las demandas y de romper con la cadena de equivalencias que sostiene #TodosSomosAyotzinapa9, sin embargo, las madres y padres de los estudiantes han expresado que no se conformarán con “acuerdos protocolarios”. Anteriormente dije que la exigencia de #TodosSomosAyotzinapa pretende hegemonizarse, creo que esta respuesta de las madres y padres de los estudiantes respecto de las concesiones gubernamentales permiten afirmarlo.

                                                                                                               

6 11 numbers to help you to understan the violence rocking Mexico. The Huffington Post. Nota del 31 de octubre de 2013. Disponible en línea: http://www.huffingtonpost.com/2014/10/31/mexico-violence-numbers_n_6075258.html 7 Aunque algunos sectores se han pronunciado en contra de tal afirmación. Véase: Nosotras no somos Ayotzinapa. Organizando la rabia. Publicación del 21 de octubre de 2014. Disponible en línea: http://organizandolarabia.tumblr.com/post/100626355856/nosotras-nosomos-ayotzinapa 8 Hernández, Roque U. El poder es resistir, es vivir: ¡todos somos Ayotzinapa! Journal Mural. Publicación del 19 de noviembre de 2014. Disponible en línea: http://journal-mural.com/2014/11/19/el-poder-resistir-es-vivir-todos-somos-ayotzinapa/ 9 Los acuerdos entre familiares de desaparecidos de Ayotzinapa y Peña Nieto. La Jornada. Nota del 29 de octubre de 2014. Disponible en línea: http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2014/10/29/los-acuerdos-entre-familiares-de-desaparecidos-de-ayotzinapa-ypena-nieto-9039.html

Porque si queremos hablar de hegemonía no basta con establecer el momento articulatorio (en el que todas las personas al interior de un grupo ceden parcialmente a una sola demanda), sino que se necesita que dicha articulación se dé a través de un enfrentamiento con prácticas articulatorias antagónicas 10 . Y es que en el antagonismo, implica que la presencia del “otro” me impide totalmente ser yo mismo11. Mientras el Narco-Estado siga existiendo, vivimos en un contexto en el que no podemos ser totalmente nosotros. Por eso pienso que, a pesar de los pronósticos, o de que pase algo o no. Un nuevo México está en formación. Sectores y personas que anteriormente se sentían indiferentes a la situación política del país, hoy se unen al reclamo de #TodosSomosAyotzinapa. Pedidos que en algún momento se hicieron al interior de las instituciones (causas que dieron lugar a movilizaciones estudiantiles, campesinas, etcétera) pasaron a ser exigencias que se dirigieron a las instituciones (sanción de responsables/esclarecimiento de hechos/reparación de víctimas) y, a partir de cierto momento (la desaparición de 43 estudiantes), las exigencias pasaron a ser contra el orden institucional (que se vayan todos/que renuncie Peña). El despertar que está viviendo hoy México puede entenderse como la formación de un nuevo pueblo, tal vez no permanente, pero sí bastante coyuntural. Un pueblo que refleja la crisis orgánica del sistema político mexicano. En palabras de Ernesto Laclau, cuando el proceso de articulación “ha desbordado los aparatos institucionales más allá de un cierto límite, comenzamos a tener el pueblo del populismo”12.

Twitter: @norapicasso

 

                                                                                                                10 11 12

Laclau, Ernesto. Más allá de la positividad de lo social: antagonismo y hegemonía. Ob. Cit., p.179. Laclau, Ernesto. Más allá de la positividad de lo social: antagonismo y hegemonía. Ob. Cit., p.168. Laclau, Ernesto. ¿Por qué construir al pueblo es la principal tarea de una política radical? Ob. Cit., p.26.