EL PAPEL DE LOS SERVICIOS EN EL DESARROLLO DE UNA ACTIVIDAD TURÍSTICA NOVEDOSA EN UN TERRITORIO DEL INTERIOR: EL CASO DE CAMPILLO DE RANAS (GUADALAJARA)
Fernando Santander del Amo (1) y Juan Córdoba Ordóñez (2) (1) Universidad Complutense de Madrid. Departamento de Análisis Geográfico Regional y Geografía Física. Facultad de Comercio y Turismo. Avenida de Filipinas, 3 28003 Madrid.
[email protected] (2) Universidad Complutense de Madrid. Departamento de Análisis Geográfico Regional y Geografía Física. Facultad de Geografía e Historia - Edificio B. C/ Profesor Aranguren, s/n Ciudad Universitaria 28040 Madrid.
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RESUMEN Se presenta en este trabajo el caso de Campillo de Ranas: un pueblo del Noroeste de la provincia de Guadalajara que, a partir de la aprobación de la ley de matrimonios entre personas del mismo sexo en 2005, saltó a la fama convirtiéndose en “el pueblo de las bodas” y donde algunos años han llegado a celebrarse casi medio centenar de bodas cuando su población es inferior a 190 personas. Este estudio pretende destacar que este fenómeno ha sido posible gracias a la previa existencia de una infraestructura básica de servicios de alojamiento y restauración, que ha sido después potenciada por la actitud flexible del Ayuntamiento respecto al oficio de bodas. El fenómeno del turismo de bodas ha permitido fijar población nueva en Campillo de Ranas y en los pueblos de alrededor, de modo que, en un periodo marcado por los recortes en educación en el medio rural castellano manchego, es uno de los pocos pueblos de la provincia de Guadalajara que ha conseguido mantener abierta su escuela para un total de 16 niños. El retorno económico derivado de este particular auge turístico ha permitido, en combinación con el tesón del alcalde, financiar la reciente dotación de servicios e infraestructuras hoy considerados básicos: la instalación de un repetidor de televisión, acceso a la telefonía móvil e Internet, así la creación de una biblioteca con centro de internet. Palabras Clave: Turismo, Bodas, Arquitectura Negra, Guadalajara, Desarrollo Rural.
ABSTRACT This work shows the case study of Campillo de Ranas: a small village of less than 190 inhabitants in the northwest of Guadalajara Province that became famous when the Spanish ‘gay marriage’ act was approved in 2005. Since then, the village is known as the «weddings village» in the international press –in some specific years, near to 50 weddings were celebrated there. This survey aims to highlight that this phenomenon has been possible thanks to the previous deployment of an accommodation and restaurant industry’s solid base, which has been reinforced by the Campillo de Ranas’ local government flexible attitude face to the weddings service. The wedding tourism phenomenon has made possible the settlement of new dwellers in Campillo de Ranas and its surrounding area, so that Campillo is one of the few villages of the Guadalajara Province who keep open its school for 16 children, in the present context of cuts in the Castilla – La Mancha rural area’s education budget. The economic return from this particular tourist boom has allowed, in combination with Campillo de Ranas Mayor’s perseverance, financial support for the recent deployment of basic services and equipment: the installation of a TV relay station, access to mobile phone and proper Internet services, as well the creation of one library equipped with an Internet room. Key Words: Tourism, Weddings, Black Villages, Guadalajara, Rural Development.
Esta comunicación forma parte de los resultados del Proyecto de Investigación Referencia CSO2011-26527 “Lugares, Imaginarios y movilidades turísticas en tiempos de crisis”
INTRODUCCIÓN / ANTECEDENTES El 30 de junio de 2005 se aprobó en el Congreso de los Diputados la ley que modificó el Código Civil legalizando los matrimonios entre personas del mismo sexo. Aquel día, en la tribuna de invitados, se encontraba Francisco Maroto, alcalde de Campillo de Ranas. En las ruedas de prensa inmediatamente posteriores a la votación de la ley, Maroto levantó la mano y pronunció, en un acto de militancia en la causa homosexual, dos sencillas palabras: “yo caso”, invitando con ellas a cualquier pareja homosexual que encontrase problemas para celebrar su matrimonio en su lugar de residencia, que lo hiciera en Campillo de Ranas. A los pocos días, varias parejas se pusieron en contacto con él para celebrar allí sus respectivas bodas. La iniciativa del alcalde de Campillo no tardó en sobrepasar las fronteras españolas: en 2007, Maroto aparecía en un artículo de la revista estadounidense Time dedicado a las personas que habían destacado aquel año por su carácter innovador, en el que se calificaba a Campillo de Ranas como “Las Vegas ibérica” por la gran cantidad de matrimonios, hetero y homosexuales, que se celebraron en este municipio desde junio de 2005. Desde aquel momento hasta la actualidad se han celebrado en el pueblo 379 bodas, a una media de casi 40 bodas al año, frente a una población que no llega a 90 habitantes (190 en el total del municipio).
METODOLOGÍA La metodología empleada en este trabajo es, sobre todo, analítico-descriptiva. Para la elaboración de esta investigación, se han manejado tanto fuentes cualitativas como cuantitativas. Así, se han realizado entrevistas abiertas a los principales actores del turismo nupcial en Campillo de Ranas: el alcalde (Francisco Maroto), el secretario del Registro Civil de Campillo de Ranas y el gerente de la casa rural y restaurante “Aldea Tejera Negra”. También han sido entrevistadas varias parejas que han celebrado su boda en Campillo de Ranas. La información cualitativa ha sido completada con los datos cuantitativos que permiten conocer las dimensiones del turismo nupcial en Campillo de Ranas, así como las características demográficas básicas de este municipio; estos datos proceden de dos fuentes distintas: el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Registro Civil de Campillo de Ranas. La información relativa a la oferta turística del área de estudio procede del Registro de Establecimientos Turísticos, proporcionado por el Servicio de Turismo de Guadalajara de la Consejería de Turismo de la Junta de Comunidades de Castilla – La Mancha. Toda esta información ha sido plasmada en tablas y mapas temáticos; la cartografía base de estos últimos procede del Instituto Geográfico Nacional (IGN). ÁREA DE ESTUDIO Descripción geográfica El municipio de Campillo de Ranas se encuentra en el extremo Noroccidental de la provincia de Guadalajara. Su término se extiende por el denominado macizo de Ayllón, que alberga las mayores altitudes de toda la provincia sobrepasando la cota de los 2.000 metros (Pico del Lobo, 2.272 msnm) en el sector más próximo a la provincia de Madrid (Figura 1). Concretamente, Campillo de Ranas se encuentra en la falda oriental de la Sierra del Robledal o del Ocejón, que arranca en el macizo de Ayllón y discurre, perdiendo altitud, en sentido Noroeste – Sureste. En esta sierra, como su nombre indica, se encuentra el Pico Ocejón (2.048 msnm) que aunque no es el más alto de la provincia, sí es el más conocido de la provincia de Guadalajara y es objeto de una gran frecuentación turística. El término municipal de Campillo de Ranas está atravesado de Norte a Sur por el río Jarama, que discurre trabajosamente por su cauce angosto y revirado, excavado sobre un lecho de pizarras negras y esquistos, materiales que condicionan los agrestes relieves del entorno. Este sustrato geológico, en conjunción con los bosques de robles y encinares, generan uno de los conjuntos paisajísticos más bellos de la provincia de Guadalajara. El término municipal de Campillo de Ranas se encuentra rodeado por el de El Cardoso de la Sierra al Noroeste, Majaelrayo al Norte, Valverde de los Arroyos al Noroeste, Tamajón al Este, y Retiendas, Valdesotos y Tortuero al Sur (Figura 1) los núcleos de población más importantes del entorno de Campillo de Ranas son, en términos de población y de funcionalidad, Tamajón y Valverde de los Arroyos. Tamajón constituye la principal puerta de entrada al territorio donde se encuentra el área de estudio, mientras que Valverde de los Arroyos es, junto a Campillo de Ranas y Majaelrayo, uno de los principales destinos turísticos de la zona.
El munnicipio de Campillo de Ranas R incluyye siete locallidades: Cam mpillejo, Cam mpillo de Ran nas, El Espinnar, Matallana, L La Vereda, Roblelacasa R y Robleluenngo. Salvo Matallana M y La L Vereda, quue sólo son accesibles a a través de una pista forestaal que arrancca en la pres a de El Vad do y que disccurre en el laado derecho del río Jaram ma, todos los muunicipios de la zona de trrabajo están conectados por p una mod desta carreterra local: la GU-182.
Figu ura 1. Localiización del m municipio de Campillo dee Ranas y su entorno. Esa misma carreteera constituyee a su vez laa principal vía v de acceso o a este enclaave de la pro ovincia. La ruta r más rápida que lo coneecta con la caapital provinncial pasa po or Yunquera de Henares,, Humanes y Tamajón, eme pleándose aalgo menos de d una hora para realizarr el trayecto.. Desde Mad drid, la ruta m más rápida es e la que unee la capital naciional con la ciudad de Guadalajara G ppor la autovíaa A2, para seguir luego el itinerario antes señalaado. En este casoo, el trayectoo requiere enttre una hora y media y do os horas de coche. c El áreaa de estudio está comuniicada, a travéés de una pissta forestal que q arranca een Majaelray yo, con otra importante áreea turística de d la provinccia: el tramoo alto del río o Sorbe, dond de se encuenntra el Hayeedo de la Tejjera Negra y muunicipios quue albergan algunas a de llas mejores muestras m dell románico rrural de Guaadalajara, coomo Cantalojas, Galve de Soorbe, Villacad dima o Camppisábalos, en ntre otros. pio alcanzó en 2013, seg gún el Nomeenclátor del INE, 186 haabitantes. Enn el La pobblación totall del municip mapa de la Figura 2 se ha representtado su distrribución: 86 personas viv ven en Camppillo de Ranaas, 27 en Robblelacasa y 22 en Campilleejo. En Robleeluengo habiitan 21 perso onas, mientraas que en El Espinar lo hacen h 20. Finnalmente, en M Matallana ressiden 7 perso onas y en La Vereda, 3. Estas E dos últiimas localidaades llegaron n a quedarse sin población een el siglo XX X tras la ex xpropiación fforzosa realizzada por el antiguo a Instiituto de Con nservación dee la Naturaleza ((ICONA) paara su repoblaación forestaal, aunque acctualmente see encuentrann habitadas po or neorruralees. La pobblación de esste área está sufriendo deesde comienzzos del siglo XX, al iguaal que su ento orno, una fueerte sangría dem mográfica quue se acentuó ó sobre todoo con el éxod do rural de los l años 60 y 70 del sig glo XX (Sanccho
Comins y R Reinoso Moreeno, 2007a: 38). En los úúltimos años la emigració ón ha disminnuido, aunqu ue no ha desaaparecido, de m modo que el tamaño de laa población sse ha estabilizado aparen ntemente. Loos motivos dee dicha estabbilización aparrente son preeocupantes: por un lado,, la población que residee en estos puueblos de la Sierra Nortee no emigra porqque es poblacción mayor, envejecida; ppor otro, los inmigrantes que llegan a este lugar son s en su maayoría jubilados que ahora vuelven v al pueblo a pasaar la mayor parte p del año. Como resuultado, la piráámide de pobblación del áreea de trabajoo está muy desestructura d ada, con una elevada proporción de ppoblación deependiente, y lo que es más preocupante: apenas exisste reemplazoo generacion nal (Figura 2, 2 gráfico infferior derech ha). mbargo, en loos últimos añ ños (Reinosoo Moreno, 2009) 2 se estáán instalandoo en toda la Sierra Nortee de Sin em Guadalajaraa, Campillo de Ranas inccluido, famillias que com mponen lo qu ue se ha vennido a denom minar poblacción neorrural: ppoblación quue abandona las zonas uurbanas, norm malmente dee profesioness liberales qu ue les permiiten cierta movillidad geográáfica, en buscca de aquelloos aspectos que q mejoran n la calidad dde vida y quee entienden que q sólo los esppacios ruralees pueden pro oporcionar: ttranquilidad,, entornos naaturales bienn conservado os, etc. Esta población neorrural, en edad reproducttiva, sí puedee contribuir a fijar poblacción de forma ma efectiva en n el territorioo.
l localidaddes del municcipio de Cam mpillo de Rannas y su entorno. Figura 2. Pooblación de las m see traduce en n una muy lim mitada ofertaa de servicio os. No obstannte, La esccasa poblacióón de estos municipios dentro del ppanorama geeneral de aussencia de serrvicios en laa zona, en Caampillo de R Ranas existen n más serviccios que en el reesto de muniicipios circun ndantes. Asíí, este municcipio disponee de un consu sultorio médiico básico, auna que sólo funnciona dos días d a la semaana. En caso de urgencia, los vecinos deben despllazarse al cen ntro de saludd de Tamajón, loo que suponee un desplazaamiento en ccoche de 25 minutos por una peligrossa carretera llena de curvvas. Esta carreteera, cuyo manntenimiento depende de la Diputació ón Provinciall de Guadalaajara, ha sido o objeto de conc tinuas reclam maciones poor los alcaldes de la zona (Conde, 200 07) hasta quee fue reasfaltaada en 2011..
Aunque Campillo dispone de una escuela donde 16 niños (tanto de Campillo como sus pedanías y los pueblos cercanos) reciben su educación básica, el instituto de Enseñanza Secundaria más cercano está en Yunquera de Henares, a 48 kilómetros, lo que supone que los alumnos de bachillerato deben realizar diariamente dos trayectos de casi una hora en autobús. La falta de medios asociada a la baja población ha motivado que Campillo de Ranas forme parte de la Mancomunidad de Servicios del Ocejón para disponer de un servicio de retirada de basuras y su gestión posterior. Según figura en el Registro de Entidades Locales del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, esta mancomunidad fue creada en 1993 por los ayuntamientos de Campillo de Ranas, Tamajón, Majaelrayo, Valverde de los Arroyos, Retiendas, La Mierla y Puebla de Valles, y gestiona nominalmente hasta 24 servicios para estos siete municipios, aunque en la práctica sólo se encarga de la recogida de basuras, mantener la oficina de turismo de Tamajón y proporcionar asesoramiento a los vecinos de los municipios mancomunados. En Campillo de Ranas no hay gasolinera ni talleres mecánicos, y sólo existen cuatro tiendas de comercio al por menor (Caja España, 2012). Aunque en general todas responden al modelo de “colmado”, dos de ellas están dedicadas a la venta de productos de bricolaje y equipamiento del hogar, una es una tienda de alimentación y la última es un estanco. Campillo no dispone de ningún otro servicio.
Recursos turísticos de Campillo de Ranas y su entorno La riqueza patrimonial de la Sierra Norte de Guadalajara ha sido descrita y estudiada por el equipo del profesor José Sancho Comins (Sancho et al. 2007a, 2007b, 2008, 2011; Reinoso 2009; Reinoso et al, 2010, 2011). Para estos autores, la Sierra Norte de Guadalajara constituye un destino turístico consolidado, gracias a la existencia de cinco factores (Sancho et al. 2007b, 2008): i) Existencia de un valiosísimo patrimonio natural y cultural; ii) Posición geográfica idónea respecto a Madrid y la Comunidad Valenciana; iii) Auge del turismo rural, en forma de turismo residencial y de retorno, así como turistas en sentido estricto; iv) Consolidación, durante los diez últimos años, de una oferta de servicios turísticos de calidad, que incluye alojamiento, restauración, empresas de turismo activo, etc.; y v) Existencia de un Grupo de Acción Local, ADEL - Sierra Norte, responsable de la gestión de varios programas LEADER y PRODER en la zona, que se ha materializado en la inversión de grandes cantidades de dinero procedentes de los fondos europeos en proyectos de desarrollo, entre los cuales el turismo ocupa una posición preponderante. Antes de describir los principales recursos turísticos del municipio de Campillo de Ranas, es necesario hacer hincapié en su contexto territorial. Los municipios que circundan Campillo de Ranas también cuentan con un valioso repertorio de recursos culturales y naturales, de manera que los turistas que visitan este rincón de la provincia de Guadalajara normalmente se suelen alojar en una localidad a partir de la cual efectúan excursiones para visitar los otros pueblos y parajes de los alrededores. En este sentido, gracias a su oferta de alojamiento, Campillo de Ranas funciona como uno de los principales enclaves turísticos de la zona. El principal recurso natural del área de estudio es, sin duda, el Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara (Figura 3). Este Parque, el más reciente de la provincia, fue declarado en 2011. Sus 117.898 hectáreas engloban otros espacios naturales protegidos previamente como el Parque Natural del Hayedo de la Tejera Negra (en el término municipal de Cantalojas), la Reserva Fluvial del río Pelagallinas (en Prádena de Atienza, al Este de la zona de trabajo) o la Reserva Natural Pico del Lobo – Peña Cebollera (Extremo Norte y Oeste del término municipal de El Cardoso de la Sierra) que a su vez se solapaba con la derogada Reserva de Caza de Sonsaz. Además, el Parque Natural de la Sierra Norte forma parte de la Red Natura 2000, dado que su extensión coincide con la del Lugar de Interés Comunitario (LIC) “Sierra de Ayllón” y la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) homónima. Muy cerca del término de Campillo de Ranas, es necesario destacar la cima del Pico Ocejón, el más emblemático de la provincia, que suele ser destino de muchas excursiones de montañismo. Las dos principales rutas senderistas de acceso a esta cima arrancan en Majaelrayo y en Valverde de los Arroyos. Dentro del término municipal de Campillo de Ranas se encuentran otros enclaves naturales de alto interés turístico, entre los que destacan las “Pozas del Aljibe”: sucesión de dos cascadas, próximas a Matallana, que han
excavado seendas oquedaades en el caauce del arrooyo del Soto, casi en su unión u con el rrío Jarama, y que en veraano suelen ser fr frecuentadas por turistas y locales parra bañarse en n ellas. Las mismas pizarrras negras qu ue caracterizaan el paisajee natural, con ndicionan ell paisaje construido del área á de estudio. En efecto, laa localidad de d Campillo de Ranas see encuentra en e el corazónn del territorrio denominaado “Pueblos dee la Arquitecctura Negra” o sencillameente “los pueeblos negros” de Guadalaajara (Figura 3). Estos puep blos recibenn este nombrre porque todas las consstrucciones (casas, iglesiaas, naves aggrícolas, paviimentado de las calles, etc.) tienen comoo material de construcciónn principal laas lajas de piizarra negra del lugar. bargo, no se limita al uso o de un materrial de constr trucción espeecífico, sino que q La Arqquitectura Neegra, sin emb comprende un estilo connstructivo bien definido y que respon nde, entre otrras cosas, a loos rigores cliimatológicoss de la zona. Asíí, los muros de d las casas están construuidos con lajas de pizarraa dispuestas hhorizontalmeente y tienenn un gran espesoor para aislarllas mejor del frío; con esste mismo fin n las paredess tienen pocoos huecos, y los que hay son pequeños. T También paraa ganar aislamiento térmiico, aparte del d escaso ren ndimiento coonstructivo que q dan las piizarras a la horra de levantaar los muros,, las casas suuelen ser basstante bajas: como máxim mo tienen do os plantas de las que el aleroo de la superiior no levantta más de 6 m metros desdee el suelo. No ormalmente, en la plantaa baja solía estar el establo dde los animalles, cuyo calo or corporal ccontribuía a caldear la caasa. La pizarr rra también es e utilizada para p los tejados, que suelen ser a una o dos d aguas, cconfigurando o por tanto un nas casas coompletamentee negras quee en ocasiones son decoradaas con piedraas de cuarcitaa blanca en las esquinas o en el cent ntro de las faachadas creanndo diseños ornaamentales, frecuentemen fr nte cruces o ccifras que ind dican la fecha de construc ucción de la casa c (Figura 3).
Figurra 3. Espacio os de interés turístico nattural y cultural del área dee estudio. Al marrgen de la Arquitectura A Negra, en ell área de estu udio no hay construccion ones arquitectónicas de reelevancia artística similar, por ejemplo o, a las iglessias del romáánico rural de pueblos reelativamente cercanos coomo Villacadimaa, Campisábaalos o Alben ndiego. Se poodrían mencionar las iglesias parroquuiales de Cam mpillo de Rannas,
Tamajón o Almiruete, todas ellas del siglo XVI, aunque ninguna atesora ningún valor específico que haya motivado, por ejemplo, la incoación de un expediente de Bien de Interés Cultural sobre alguna de ellas. Antes bien, los pueblos negros basan su atractivo en la acumulación de muchos elementos, tanto naturales como culturales, que componen los paisajes característicos de la Arquitectura Negra. La Arquitectura Negra de Guadalajara no está declarada Bien de Interés Cultural; sin embargo, desde la Diputación Provincial de Guadalajara se están llevando a cabo distintas iniciativas para su conservación. La Comisión Provincial de Patrimonio de la Diputación Provincial de Guadalajara aprobó en 2007 un conjunto de normas urbanísticas para la protección de la Arquitectura Negra, que empezó a aplicarse en los municipios de Campillo de Ranas, Majaelrayo y Valverde de los Arroyos mediante la aprobación de sus respectivas ordenanzas urbanísticas de la edificación basadas en la norma redactada por la Diputación Provincial. En el momento de escribir estas líneas, se está tramitando la solicitud de declaración de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO para la Arquitectura Negra. Se trata, en definitiva, de unos esfuerzos de protección de un paisaje cultural muy característico, y que constituye en sí mismo un importante –más bien, el principal- recurso turístico de la zona. La protección de este patrimonio se plantea sin duda como un reto, considerando el grave problema de despoblación y envejecimiento de la población local. La articulación de la Arquitectura Negra como recurso turístico no es reciente. La propia Diputación Provincial de Guadalajara elaboró hace bastantes años un conjunto de rutas turísticas que recorren la provincia, una de las cuales está dedicada exclusivamente a los pueblos negros de esta zona. Más recientemente, también la Diputación Provincial de Guadalajara puso en marcha el Plan de Competitividad Turística “Pueblos de la Arquitectura Negra de Guadalajara” en 2009, mediante la firma de un convenio con los gobiernos estatal y regional, la Asociación de Hostelería de Guadalajara y la Asociación de Turismo Rural “Sierra Norte” de Guadalajara. Este Plan, que contó con un presupuesto de casi tres millones de euros, se aplicó en los municipios de Campillo de las Ranas, El Cardoso de la Sierra, Majaelrayo, Tamajón y Valverde de los Arroyos. Mediante este Plan se ha llevado a cabo, entre otras actuaciones, la creación de la marca turística “Pueblos de la Arquitectura Negra” cuyo logotipo figura en toda la señalización turística de la zona; también se han diseñado y señalizado 16 rutas senderistas y 6 rutas para bicicletas de montaña, para las que también se han publicado sus respectivas guías. Sin embargo, la principal actuación que lleva a cabo la Diputación Provincial de Guadalajara en la zona de trabajo, a efectos del turismo, no es la señalización o la promoción turística. Antes bien, el Plan Provincial de Carreteras, encargado de mejorar las carreteras existentes y gestionar su mantenimiento, ha efectuado en 2011 obras de mejora en las vías de acceso rodado al área de estudio, que tras muchos años de reclamaciones de los pueblos de la zona, ahora se encuentran en buen estado. Ello ha permitido que los tiempos de acceso desde Madrid o Guadalajara disminuyan sensiblemente y, sobre todo, mejorar la seguridad del tráfico. El entorno de la zona de trabajo, por otra parte, cuenta con un buen repertorio de fiestas tradicionales. De acuerdo con el Calendario de Fiestas Tradicionales que publica anualmente la Diputación de Guadalajara, son abundantes las fiestas cuya celebración gira en torno a las danzas, que además cuentan con la participación de botargas: personajes que representan al diablo y que en muchos casos estuvieron a punto de desaparecer debido a la despoblación del medio rural (Caro Baroja, 1968) que impidió el traspaso de la tradición a las generaciones jóvenes. Las danzas más importantes, declaradas Fiesta de Interés Turístico Regional, son las de la Octava del Corpus en Valverde de los Arroyos (que se celebran el domingo siguiente al Corpus Christi), y las del “Santo Niño” en Majaelrayo, el primer domingo de septiembre. El resto de fiestas que se celebran en las inmediaciones de Campillo de Ranas también movilizan un número importante de turistas o tienen una amplia repercusión mediática. Por ejemplo, las Botargas y Mascaritas de Almiruete, que se celebran en Carnaval, han representado en varias ocasiones a la provincia de Guadalajara en diversas ferias de turismo. En verano tienen lugar La Machá de El Bocígano, los danzantes de la Virgen del Pinar en Galve de Sorbe, mientras que la Feria de Ganado de Cantalojas, de origen medieval, se celebra en octubre. Las tres están declaradas Fiestas de Interés Provincial y atraen un buen número de turistas. Campillo de Ranas no posee ninguna fiesta tradicional destacable, pero sí es la sede de un amplio repertorio de eventos a lo largo del año, sobre todo entre la primavera y el otoño. Por ejemplo, en mayo celebra el Ra-
nas Folk, un certamen de música que convoca a artistas de todo el mundo; en asociación con Majaelrayo, Campillo también es la sede del Festival de Cine Viajero del Ocejón, donde se proyectan películas de múltiples nacionalidades, al que suelen asistir sus directores y que goza de repercusión nacional. También en colaboración con Majaelrayo, se celebra varias veces al año un mercadillo de trueque al que suelen acudir personas de toda la provincia. En definitiva, se puede afirmar que tanto Campillo de Ranas como los municipios limítrofes aglutinan un amplio y variado repertorio de recursos patrimoniales tanto naturales como culturales. Todos estos recursos no destacan individualmente como lo hacen otros de la provincia (Castillos de Sigüenza, Molina de Aragón o Atienza, por ejemplo), sino que configuran el conjunto paisajístico que caracteriza la Arquitectura Negra, de gran valor estético. Precisamente es ese conjunto de paisajes de alta calidad, como se verá más adelante, uno de los principales recursos que buscan los turistas nupciales de Campillo de Ranas. Oferta de servicios turísticos de Campillo de Ranas y su entorno Como se ha mencionado anteriormente, en la Sierra Norte de Guadalajara se ha consolidado una oferta de servicios turísticos amplia y de calidad, que responde a la demanda turística movilizada por los recursos explicados en el apartado precedente. Campillo de Ranas es precisamente uno de los municipios de la Arquitectura Negra donde más ha crecido la oferta de estos servicios, que consiste sobre todo en un amplio abanico de alojamientos y restaurantes como se aprecia en las tablas 1 y 2, donde se han incluido también los datos de Tamajón y Majaelrayo, dado que es relativamente frecuente que los turistas nupciales deban pernoctar en los alojamientos de estos otros municipios cuando los alojamientos de Campillo de Ranas se encuentran completos. Tabla 1. Alojamientos disponibles en las localidades de Campillo de Ranas, Majaelrayo y Tamajón frente a sus respectivas poblaciones, en 2006 y 2014. Municipio Localidad
2006
2014
Establecimientos
Plazas
Establecimientos
Plazas
Habitantes (2013)
7
78
13
153
186
Campillejo
1
12
3
72
22
Campillo de Ranas
5
54
9
69
86
El Espinar
1
12
1
12
20
Majaelrayo
3
46
6
71
54
Tamajón
7
82
8
111
155
Almiruete
3
33
4
64
18
Muriel
1
9
0
0
11
Campillo de Ranas
Tamajón Total
3
40
4
47
118
17
206
27
335
329
Nota: sólo se incluyen en la tabla las localidades en las que hay alojamientos turísticos en alguno de los años considerados. Fuente: Elaboración propia a partir del Registro de Establecimientos Turísticos de la Junta de Comunidades de Castilla – La Mancha y del Instituto Nacional de Estadística.
La Tabla 1 permite constatar, en primer lugar, que la distribución de los alojamientos no es homogénea: En Campillo de Ranas sólo existen en 3 de las 7 localidades de que consta, y en Tamajón aparecen actualmente en 2 de 5 localidades (precisamente las que están más próximas al corazón de la Arquitectura Negra de Guadalajara). El municipio de Campillo de Ranas destaca del resto, siendo el que dispone de más establecimientos y plazas de alojamiento actualmente. En su conjunto, el área de estudio presenta una oferta de 27 establecimientos con una capacidad de 335 plazas en 2014. En general, son cifras modestas de alojamiento, pero que cobran más significado cuando son
comparadas con la población local: hay más plazas de alojamiento disponibles que habitantes censados. Llaman la atención localidades como Campillejo o Almiruete, cuyas plazas de alojamiento llegan a triplicar la población; en Majaelrayo, hay 71 plazas disponibles frente a 54 habitantes. Sólo Tamajón tiene más población que plazas disponibles: 118 habitantes para 47 plazas. La oferta de alojamiento de este ámbito está constituida fundamentalmente por establecimientos extrahoteleros: casas y albergues rurales, y apartamentos turísticos. El único alojamiento hotelero de la zona es un hostal localizado en Majaelrayo, aunque su configuración es más bien la de una casa rural. Entre los dos años considerados en la Tabla 1 se constata un crecimiento medio del 50% tanto en establecimientos como en plazas del área de estudio, siendo Campillo de Ranas el municipio que ha registrado el mayor aumento: casi duplicó su oferta entre 2006 y 2014. En general, la evolución de los alojamientos se ha apoyado sobre todo en el crecimiento de los alojamientos rurales, en detrimento de los establecimientos hoteleros. Respecto a los restaurantes, en la Tabla 2 se aprecia que la capacidad total de la zona de trabajo supera con mucho la capacidad de alojamientos: frente a las 335 plazas, los restaurantes permiten recibir hasta 526 personas. Esto significa que los restaurantes del área de estudio están preparados para recibir, en el mismo día, a los turistas que se alojan allí, más los excursionistas que puedan llegar. Tabla 2. Oferta de restaurantes de los municipios de Campillo de Ranas y su entorno, por localidades (2006 y 2014). 2006 Municipio Localidad
Establecimientos
2014 Plazas
Establecimientos
Plazas
Campillo de Ranas 4 194 3 158 Campillejo 1 40 1 40 Campillo de Ranas 3 154 2 118 Majaelrayo 2 118 2 118 Tamajón 5 242 6 250 Almiruete 1 24 0 0 Tamajón 4 218 6 250 Total 11 554 11 526 Nota: sólo se incluyen en la tabla las localidades en las que hay restaurantes en alguno de los años considerados. Fuente: Elaboración propia a partir del Registro de Establecimientos Turísticos de la Junta de Comunidades de Castilla – La Mancha y del Instituto Nacional de Estadística.
Entre 2006 y 2014 apenas ha habido variación en el caso de los restaurantes: el número de establecimientos se mantiene, mientras que la capacidad ha disminuido levemente. Esta disminución se puede deber, tal y como sugiere Such Devesa (2011) a la adecuación de una oferta sobredimensionada. Los restaurantes que aparecen en la Tabla 2 suelen tener entre 1 y 2 tenedores, con la única excepción del establecimiento “Aldea Tejera Negra”, situado en Campillo de Ranas, que tiene 3 y que es el local pionero que alberga casi todas las celebraciones de bodas que tienen lugar en este municipio; por ello, es el único restaurante del área de estudio con capacidad para 100 comensales, frente a la capacidad media de unas 45 plazas del resto de establecimientos.
LAS BODAS EN CAMPILLO DE RANAS Como se ha mencionado anteriormente, en junio de 2005 Campillo de Ranas saltó a la fama gracias, entre otros factores, al ofrecimiento (“yo caso”) que Francisco Maroto, el alcalde de este pueblo, realizó ante los medios de comunicación aprovechando la oportunidad que supuso la aprobación de la ley de legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo.
Las ciffras muestrann por sí solaas el éxito dee la iniciativaa de Maroto: de acuerdoo a los datos proporcionaados por el Registro Civil dee Campillo de d Ranas, enntre 2002 y 2014 2 se han celebrado enn este pueblo o 395 matrim monios. Antes de este perioodo, sólo se celebró c en 19998 el matrim monio de una pareja residdente en el pueblo. p monios celebbrados en un solo año, Caampillo de R Ranas destacaa por ser unoo de Prestanndo atenciónn a los matrim los lugares donde más enlaces e se ceelebran por hhabitante. Po or ejemplo, seegún el INE,, en 2012 se celebraron 338 3 enlaces en lla ciudad dee Guadalajara (84.803 haabitantes), mientras m que en el municcipio de Cam mpillo de Raanas (186 habitanntes), 43. Diicho de otro modo, mienntras que en Guadalajara G capital se ceelebró en 2012 un matrim monio cada 2550 habitantess, en Campilllo ocurrió unn matrimonio cada 4 hab bitantes. Pareece evidentee, por tanto, que q Campillo dee Ranas merrece de pleno o derecho ell apelativo co on el que se le conoce ppopularmentee: “el puebloo de las bodas”. Figura 4 se puede p ver la evolución deel total de lo os matrimonios celebradoos en Campilllo de Ranas enEn la F tre 2002 y 22014. Llama la atención el e espectacullar salto que se produce entre e 2005 y 2006, pasan ndo de 10 boodas a 36; el saltto se debe, sin s duda, a la l repercusióón mediáticaa que supuso o la declaraciión “yo caso o” de Franciisco Maroto por televisión. Entre E 2006 y 2008 las boodas siguiero on aumentand do hasta lleggar hasta las 49, 4 registránndose un desceenso brusco en e 2009 debiido al estalliido de la crissis económicca que afectóó a todas las actividades socioeconómiicas en generral y el turismo en particcular. Posteriormente, los matrimonioos volvieron n a aumentarr alcanzando dde nuevo 49 bodas en 20 010, aunquee desde ese el e número de bodas celeebrado cada año disminuuye constante y progresivam mente, habién ndose celebrrado en 2014 4 un total dee 32 matrimoonios. Esta teendencia deccreciente es preocupante poor su carácteer sostenido, que puede in ndicar que see debe no tannto a la recesión económ mica como a otraas razones dee carácter estrructural, cuaando no a la saturación s o agotamientoo del fenómeno.
Figura 4.. Evolución de d la frecuen ncia de matrim monios de Campillo C de Ranas R según modalidad (2002 ( – 20144) La Figgura 4 reflejja un hecho importante: en Campillo o de Ranas ya y se veníann celebrando bodas antess de que se aprobbara en 20055 la ley del matrimonio m hhomosexual. En efecto, en ntre 2002 y 22004 se celeb braron en Caampillo de Rannas 16 bodaas, de las que 14 fueron civiles y 2 religiosas. Según S el gereente del resttaurante “Aldea Tejera Negrra”, fue su em mpresa quien n, gracias a uun importante esfuerzo dee promociónn en Internet, consiguió trraer las primerass bodas a Campillo de Raanas. Así, estta empresa organizó o su primera p bodaa en 2002 a modo m de prueeba, para diversiificar su actiividad princiipal que era el alojamien nto rural y ell restaurante,, dirigidos a turistas “esttándar”. Graciaas al éxito que q han tenid do las bodass, hoy en díaa las bodas ocupan o aproxximadamentte el 90% dee su volumen dee negocio.
Esto significa que, cuando Francisco Maroto levantó la mano y dijo “yo caso” ante las cámaras de televisión, además de realizar un acto de militancia homosexual al ofrecer su municipio para celebrar bodas entre personas del mismo sexo, de forma más o menos consciente también estaba afirmando que él ya estaba oficiando bodas –heterosexuales, las únicas legales hasta ese momento- en Campillo de Ranas desde hace dos años (Maroto accedió a la alcaldía de Campillo de Ranas en las elecciones municipales de 2003). En la Figura 4 también se ha representado la modalidad de los matrimonios que se celebran en Campillo de Ranas. Destacan por su escasez los matrimonios celebrados por la Iglesia (47 frente a 351 civiles), que sin duda han aumentado al calor de los matrimonios civiles. Respecto a la orientación sexual de los contrayentes, se aprecia que las bodas celebradas entre personas heterosexuales (por la vía civil y por la Iglesia) son, excepto en 2008, más numerosas que las que tienen lugar entre personas del mismo sexo. En este sentido, es conveniente hacer una pequeña contextualización de los matrimonios ocurridos en Campillo de Ranas según la orientación sexual de los cónyuges. En 2013 se celebraron en España, según el Instituto Nacional de Estadística, 155.098 matrimonios, de los cuales 3.102 fueron entre personas del mismo sexo, es decir, un 2%; ese mismo año, en la provincia de Guadalajara ocurrieron 942 matrimonios, de los cuales 17 fueron entre personas del mismo sexo residentes en la provincia (un 1,8%). Por su parte, en Campillo se celebraron 38 matrimonios, de los que 17 fueron homosexuales (casi un 45%). Es decir: aunque los matrimonios celebrados en Campillo de Ranas entre personas del mismo sexo son mínimos en comparación con los que se producen a escala nacional, sí que tiene entidad como para medirse en cifras absolutas con los matrimonios entre personas homosexuales que se celebran entre los habitantes de la provincia de Guadalajara. En términos relativos, las diferencias se disparan a favor de Campillo de Ranas. Parece evidente entonces que Campillo de Ranas puede hacer gala, tal y como afirma su propio alcalde, de los matrimonios homosexuales como su “seña de identidad” frente a otros pueblos del resto de España que también celebran bodas. Sin embargo, no se puede perder de vista el hecho de que la mayoría de las bodas que se celebran en Campillo se produce entre personas de distinto sexo. Por otro lado, los datos proporcionados por el Registro Civil de Campillo de Ranas permiten conocer los orígenes de las parejas que viajan a este municipio para contraer matrimonio. Por nacionalidades, las bodas más numerosas son las que ocurren entre parejas de las que uno o ambos contrayentes residen en España: 372 matrimonios de los 395 ocurridos entre 2002 y 2014. Las parejas formadas por cónyuges que residen ambos en el extranjero proceden de países como Francia, el Reino Unido, Marruecos, México, Perú, Grecia y Estados Unidos, a razón de entre 1 y 2 matrimonios por país para todo el periodo considerado. Respecto al origen de las parejas residentes en España, en Campillo de Ranas se casan parejas de casi toda España, aunque la provincia que más cónyuges aporta es Madrid: 291 parejas están formadas por uno o ambos cónyuges que viven allí. El segundo origen de turistas nupciales es la propia provincia de Guadalajara, con 31 parejas. A continuación aparece Valencia, con 4 parejas. Conscientes de esta distribución, los dueños del restaurante “Aldea Tejera Negra” decidieron ubicar sus oficinas centrales y el domicilio fiscal de la empresa en la ciudad de Madrid, buscando estar cerca de la demanda. La coincidencia en Madrid del origen de los turistas nupciales con el de los turistas “convencionales” que identificó Such Devesa (2011) sugiere que las pautas de movilidad de ambos tipos de turistas son también coincidentes: las parejas que van a casarse a Campillo, y sus invitados, están dispuestas a desplazarse una cierta distancia, similar a la que recorren los turistas rurales de fin de semana. Por otro lado, a partir de las entrevistas realizadas en la zona de estudio, en combinación con los datos del Registro Civil, se ha constatado que el éxito de las bodas en Campillo de Ranas obedece al menos a cinco razones. La primera razón es que las parejas que se casan allí quieren celebrar una boda diferente, fuera de lo común, organizada “a su gusto”. Esto les lleva a buscar alternativas para su boda, entre las que se encuentra el celebrarla fuera de su entorno habitual. A partir de estos supuestos comienzan a buscar destinos para su boda, utilizando sobre todo Internet. Dado que muchos establecimientos hosteleros de Campillo de Ranas disponen de su propio sitio web, además de estar registrados en los principales portales de bodas de España (bodas.net, bodaclic.com, entre otras), este pueblo aparece entre los principales resultados de búsqueda. La segunda razón, quizás la más importante y referida por todas las parejas entrevistadas así como por el alcalde y el gerente de “Aldea Tejera Negra”, es el “entorno natural bonito” (sic) del que disfruta la zona de trabajo. Sin duda, el entorno de la Arquitectura Negra configura un paisaje de gran belleza, muy adecuado para
servir como telón de fondo para la celebración de uno de los momentos más importantes de la vida de las personas. En tercer lugar, es muy importante el hecho de que el Ayuntamiento de Campillo de Ranas hace todo lo que está en su mano para facilitar la organización de la boda a los novios que se van a casar al pueblo. En este sentido, la medida más importante es que el Ayuntamiento de Campillo de Ranas celebra bodas los fines de semana, sobre todo los sábados (frente a otros ayuntamientos y los juzgados del Registro Civil, que sólo celebran bodas de lunes a viernes, en horario de oficina). Según los datos del Registro Civil de Campillo de Ranas, de las 395 bodas celebradas entre 2002 y 2014, 326 bodas tuvieron lugar en sábado. La celebración de la boda en fin de semana permite que la disponibilidad de los invitados sea mucho mayor; además, al realizar la boda en un sábado, ésta adquiere la condición de viaje de fin de semana, que normalmente incluye desde el viernes por la tarde hasta el domingo por la tarde, en el que tiene cabida todo lo relacionado con la celebración del matrimonio y otras actividades turísticas convencionales. En este sentido, el turismo nupcial de Campillo de Ranas reproduce la distribución temporal típica del turismo rural: las bodas se celebran en puentes y fines de semana. Además, el alcalde pone su voluntad para que los novios disfruten de una ceremonia de matrimonio agradable, humana, frente a las ceremonias que tienen lugar en los ayuntamientos o registros civiles de las grandes ciudades, donde los matrimonios civiles son poco más que trámites burocráticos. En cuarto lugar, tanto las parejas entrevistadas como los agentes involucrados en las bodas de Campillo de Ranas manifiestan que quienes se casan en este pueblo conocían la zona antes de plantearse dónde celebrar su matrimonio. Casi todos conocían el lugar por haber estado allí anteriormente o por su aparición en los medios de comunicación, en parte debido a las campañas promocionales turísticas, pero sobre todo desde que Campillo saltó a la fama como la “meca de las bodas gay”. La última razón, aunque no por ello menos importante, tiene que ver con la existencia de una oferta de servicios turísticos con unas dimensiones suficientes que hacen posible la celebración de la boda en este lugar. El establecimiento más importante es el lugar donde realizar el banquete, que suele ser “Aldea Tejera Negra”: una casa rural con restaurante con capacidad para acoger unas 100 personas, que suele ser la cifra media de invitados que acuden a las bodas celebradas en Campillo de Ranas. Una característica muy importante de este restaurante es que está integrado plenamente en el paisaje de la Arquitectura Negra, de modo que contribuye a satisfacer uno de los deseos de los contrayentes: reforzar la imagen de que están celebrando su boda en un entorno bonito pero, sobre todo, distinto de su entorno habitual urbano. No obstante, la capacidad de “Aldea Tejera Negra” como alojamiento es insuficiente para albergar a todos los invitados de una boda: es el resto de casas rurales y apartamentos turísticos de la zona quien cubre esta afluencia turística.
REPERCUSIONES DE LAS BODAS EN CAMPILLO DE RANAS Son dos los efectos positivos de las bodas sobre el turismo de la zona. En primer lugar, las bodas inducen un incremento de turistas, por varias razones. La primera es, evidentemente, la aparición del servicio de celebración de bodas, que ha devenido en nuevo recurso turístico que moviliza, para cada ceremonia, una media de cien personas. La segunda razón, constatada por el alcalde de Campillo de Ranas, consiste en la promoción que hacen de la zona esos mismos turistas que llegan gracias a las bodas, al relatar su experiencia a familiares y amigos, quienes en algunos casos se animan a conocer de primera mano lo que les han contado. Además, muchos de los turistas nupciales acaban volviendo a Campillo de Ranas: la boda ocupa la mayor parte del tiempo que pasan en Campillo de Ranas, lo cual hace que su visita turística convencional, quede reducida a una fugaz panorámica del pueblo o sus alrededores, que incentiva una visita posterior para disfrutar con más detenimiento de la zona. El segundo efecto positivo de las bodas sobre el turismo del área de estudio consiste en la desestacionalización de la demanda turística que llega a Campillo de Ranas. Según Francisco Maroto, la demanda turística convencional del área de estudio se concentra en los fines de semana de primavera y otoño, reduciéndose drásticamente en verano y casi desapareciendo en invierno. La temporada alta de primavera comienza con la Semana Santa, mientras que la temporada alta de otoño se concentra en los fines de semana y puentes de esta estación gracias al cambio de color de las hojas de los árboles caducifolios, especialmente los del Hayedo de la Tejera Negra, así como al turismo micológico. La temporada baja de verano se debe a que los turistas no eligen Campillo de Ranas como lugar de veraneo (salvo los turistas de segunda residencia, que normalmente son obviados en
los estudioss y estadísticas de turism mo). En este ssentido, las bodas b han peermitido suavvizar la caídaa de turistas durante los meeses de veranno. Según los datos deel Registro Civil C de Camppillo de Ran nas, las parejaas que se cassan en Camp pillo reproduucen los mismos patrones tem mporales quee el resto de E España: las épocas é de maayor ocurrenncia de bodass son de mayyo a julio (es deccir, la primavvera y comieenzos del verrano) y septieembre y octu ubre (finales del verano – otoño). Si bien b existe un deescenso de laas bodas en agosto, a éste se mantiene como uno de d los meses del año en los l que más bodas se celebbran tanto a escala nacional como enn el ámbito de d Campillo de Ranas. Poor tanto, gracias a las boodas que se celebbran sobre todo t en julio o y septiembbre, y en men nor medida las de agostto, se puede afirmar quee en efecto el tuurismo nupcial sí contrib buye a desesttacionalizar la demanda turística en Campillo de Ranas. Coomo resultado, se ha creado una temporaada turística larga y relattivamente continua que eempieza en marzo m y finalliza en noviembbre: casi diezz meses de actividad a quee permiten, a su vez, la instalación ppermanente de familias que q trabajan en la hosteleríaa de la zona y, por tanto,, la fijación de población n en Campilllo de Ranas,, sus pedaníaas o los pueblos cercanos. Poor ejemplo, “Aldea “ Tejerra Negra” tieene una planttilla de 8 trabbajadores fijos que vivenn en Campillo y en Majaelrayyo. odas tambiénn ha tenido repercusione r s beneficiosaas en la orgaanización de las Por otrro lado, el tuurismo de bo empresas tuurísticas del municipio: m laas bodas prop oporcionan un na base sólid da y constantte de clientess; además, daado que las reseervas de bodas se hacen con una anteelación mediia de 5 mesees, las empreesas pueden gestionar meejor los stocks dde almacén, y la contrataación de perssonal temporral de refuerzzo, entre otrros aspectos, que en su conc junto facilittan la planificcación del neegocio a meddio y largo plazo. Ademáás, las bodass celebradas en e Campillo de Ranas haan supuesto la l aparición de una fuentte relativameente estable de ingresos direectos para el Ayuntamiennto, dado que éste cobra una tasa de 200€ por laa celebraciónn de cada matrim monio.
E de la poblaciónn en los núcleeos de Camp pillo de Ranaas (2000 – 20 013) Figura 5. Evolución En la F Figura 5 se ha representtado la evoluución de la población p en Campillo dee Ranas. Se aprecia a cómoo la población hha crecido o se s mantiene estable sobree todo en lass localidades de Campilloo de Ranas, Campillejo C y El Espinar, que son precisaamente los lu ugares dondee se concenttran los estab blecimientos turísticos y por donde pasa p la carretera principal. Aunque A no see puede habllar de una reelación causaal, sí que parrece que hay y una relacióón o
secuencialidad entre las bodas y la fijación de población en el área de estudio. En cualquier caso, entre 2000 y 2013 la población de Campillo de Ranas pasa de 50 a cerca de 90 habitantes: casi se duplica la población en 14 años. Por otro lado, el incremento de la actividad económica debido al turismo supone también el incremento de ingresos del Ayuntamiento debido a los impuestos que abonan los establecimientos y la población asentada en el municipio. En general, todo lo anterior ha conducido a una dinámica de crecimiento que ha permitido, entre otras cosas, reabrir la escuela del pueblo en 2006 después de estar 32 años cerrada, que actualmente tiene 16 niños y que es una de las pocas que permanece abierta después de las políticas de ajuste presupuestario aplicadas por el gobierno regional a los centros educativos del medio rural en la legislatura 2011-2015. Otras evidencias de la mejora de las condiciones de vida de Campillo de Ranas han sido el mantenimiento del consultorio médico que también sobrevivió a la política de recortes en los medios de atención sanitaria en el medio rural llevados a cabo por el gobierno regional, así como la implantación de redes de telefonía móvil y ADSL. Muchas de estas mejoras, no obstante, se han producido también en buena medida gracias a la iniciativa del alcalde de Campillo de Ranas, que se ha movilizado y ha trabajado denodadamente para conseguirlas, al igual que reclamó en repetidas ocasiones, hasta que lo consiguió, la mejora de las carreteras de acceso al pueblo. En este sentido, la actuación del Grupo de Acción Local ADEL Sierra Norte también contribuyó a la mejora de las condiciones de vida de Campillo de Ranas y los pueblos de alrededor. Sin embargo, como se ha constatado anteriormente, en Campillo de Ranas siguen existiendo carencias de servicios. Por ejemplo, no dispone de ninguna farmacia ni gasolinera, situándose la estación de servicio más cercana en Humanes, a unos treinta kilómetros. CONCLUSIONES Se ha presentado el caso de un territorio de la provincia de Guadalajara que, al igual que otras muchas áreas rurales del interior de España (Reinoso Moreno, 2009), tiene serias dificultades para mantener su población. Este territorio dispone de un valioso patrimonio natural y cultural que ha permitido el desarrollo de una actividad de turismo rural “estándar”, orientada a los habitantes de Madrid y Guadalajara, para la cual se ha creado y consolidado una amplia oferta de servicios turísticos. El mismo binomio patrimonio – oferta turística del área de estudio ha hecho posible el desarrollo del servicio de oficio de bodas, que empezó a ofrecer el alcalde de Campillo de Ranas aprovechando la oportunidad que supuso la legalización de bodas entre personas del mismo sexo en 2005. Por un lado, el mismo patrimonio (el paisaje cultural de la Arquitectura Negra) que buscan los turistas convencionales es el que buscan los turistas nupciales, aunque con un fin diferente: servir de escenario idílico para la celebración de su matrimonio. Por otro lado, la aparición de este nuevo servicio en Campillo de Ranas sólo se puede entender en el contexto de la actividad turística: •
El servicio de celebración de bodas ofrecido por el Ayuntamiento de Campillo de Ranas se ha convertido en un recurso turístico, dado que induce movimientos turísticos sensu stricto: al realizar contrayentes e invitados un viaje fuera de su entorno habitual que incluye pernoctación y que no está motivado por trabajo. Además, en los días anteriores o posteriores a la boda estos turistas también suelen realizar alguna otra actividad turística convencional.
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Las parejas que se casan en Campillo de Ranas y sus invitados necesitan alojamientos turísticos en los que alojarse. Dicho de otro modo: sin la oferta de alojamientos consolidada en los años anteriores, las bodas no hubieran sido posibles en este municipio.
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Algunos restaurantes, entre los que destaca “Aldea Tejera Negra”, se han especializado en la organización de bodas como línea de negocio.
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Las bodas en Campillo de Ranas, a su vez, refuerzan la actividad turística desestacionalizándola y creando una fuente más constante de ingresos, que permite el asentamiento de nueva población que trabaja en las empresas turísticas.
La llegada de nuevos pobladores ha hecho posible la instalación de servicios y equipamientos básicos (escuela, biblioteca, tiendas, Internet de banda ancha) que a su vez permiten la instalación en el pueblo de otros pobladores neorrurales procedentes de la gran ciudad que buscan en Campillo de Ranas una calidad de vida que sólo un entorno rural puede proporcionar. Dado que estos nuevos pobladores suelen desarrollar profesiones liberales, necesitan los servicios antes mencionados para poder seguir desarrollando su actividad una vez instalados en el área de estudio. Se ha constatado, por tanto, el valor estratégico de los servicios (en este caso turismo) ya no tanto para construir el territorio como para permitir su pervivencia: fijar población en un contexto de despoblación generalizada del medio rural.
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