Clase 8 septiembre

June 30, 2017 | Autor: Claudia Peña | Categoría: Disability Studies, Inclusive Education, Discapacidad Intelectual
Share Embed


Descripción

Clase 8 de septiembre
Película XXY
Durante toda la película, se dice lo no dicho que alude a la vergüenza, al miedo, al prejuicio y que acaba reforzando el estigma que Alex ha tenido desde su nacimiento. Basta ver la actitud de cada uno de sus padres, la madre por un lado, buscando al médico que puede ayudarla a salir de su angustia y por otro lado, el padre que ensimismado, pareciera que no tiene otra cosa que le pase por la mente.
Me parece que es una película que retrata de una forma muy cercana, las implicaciones de tener un hijo con un cuerpo diferente al esperado, desde los sentimientos encontrados de los padres que los orillan a mudarse a otro lugar, hasta la comunidad que enterándose de lo ocurrido, lo utiliza como un pretexto para que los pares tomen a Alex como un objeto de burla que alimenta su morbo, su crueldad y sus prejuicios.
Sin embargo, Alex es una persona que vive en una lucha interior constante, lo refleja en su forma de ser tan cambiante, que por un lado es agresiva, por otro lado, busca ser la hija tierna y cercana de su padre y por otro lado refleja una búsqueda constante por encontrarse, pues ella misma se desconoce, no es capaz de sentirse un ella o un él. Aunque llega un momento en el que uno como espectador se pregunta: ¿ y tendría que serlo?
XXY es una película que toca un tema que es considerado Tabú y que la manera en que lo aborda va metiendo poco a poco al espectador en cada uno de los personajes, los que se sienten expertos para opinar sobre el destino de una hija(o), hasta los que se sienten con el poder de rechazar a los otros, como si representaran un peligro hacia su comunidad.
Entre todo ello, vale la pena observar la relación entre los dos amigos, aquellos que platican, no cuestionan, que apoyan y que incluso son capaces de ir a orinar a la orilla del mar sin recordar los prejuicios y los estigmas que los rodean.


Claudia L. Peña








Clase 22 de septiembre

Me parece que las lecturas dan cuenta de dos abordajes que parecieran distintos, pero que tienen puntos de encuentro recurrentes.
Por un lado, la cuestión del desorden mental y por el otro, el cuerpo con todas las interrogantes que hacen reflexionar sobre su propia definición.
Tanto la mente como el cuerpo, pueden ser reflejo y causa de la perturbación social. La primera, en su manifestación de la anormalidad por los movimientos, gestos, palabras, que rápidamente son calificados como anormales y que son designados como un segmento perteneciente a los llamados desórdenes mentales.
En el caso del cuerpo, como lo que no tiene una definición homogénea, por un lado, como parte de un símbolo dentro de un rito religioso, pero por otro lado, como la entidad de la enfermedad, que representará lo indeseado para la sociedad, que siempre buscará tener un estado de bienestar, como si ello fuese naturalmente humano.
Tanto la mente como el cuerpo utilizados por la medicina para su corrección, para su modificación, para su normalización. Pues para ser deseable se tiene que ser corregido, ya sea por algún ser calificado para ello o en alguna institución. En este sentido, la inclusión significa, estar dentro de algún recinto, aunque se vive excluido todo el tiempo y recibir tratos disciplinarios, con la finalidad de ser el resultado de lo que la sociedad y el Estado esperan de los sujetos.
En el caso del cuerpo, la intervención vendrá desde el exterior para que éste que ha sido inaceptable debido a las características que tiene, pueda ser aceptado. Sin embargo, con todas las percepciones que el cuerpo ha sido tratado y definido, llega un punto en donde nos preguntamos: ¿Qué es el cuerpo?
"En el Darwinismo social y en el funcionalismo de Talcott Parsons, el cuerpo se introduce en la teoría social como "el organismo biológico", en el marxismo, la presencia del cuerpo es significada por la "necesidad" y la "naturaleza"; en el interaccionismo simbólico, el cuerpo se manifiesta como el yo representacional; en el freudismo la encarnación humana es presentada como un campo de energía en la forma de deseo". (Bryan:1989)
Sin embargo, podemos darnos cuenta de que existen un sinfín de clasificaciones de enfermedades o trastornos que tienen que ver con el cuerpo. Lo mismo que pasa con la mente.
A que nos lleva tanta clasificación? Hasta cuando la idea de la normalización estará presente en las formas sociales que tenemos de interacción?
¿Cuándo podremos dejar de utilizar etiquetas para llamar a quienes históricamente han existido sin un nombre? Pues son lo que les han dicho que son: Enfermos, locos, trastornados, donde incluso el nombre de la enfermedad, es parte de si mismos. De tal forma que no hay una identidad propia ni construida, es una identidad impuesta y un destino programado.








Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.