Ausencia de Dios en Espergesia de César Vallejo

Espergesia, César Vallejo
El poema está estructurado alrededor del oxímoron simbolista "sabemos pero
no sabemos", que aparece a lo largo del poema de forma reiterativa, y en el
que la parte mortal de la voz del poeta estaría representada por aquello
que 《Todos saben》, mientras que el misterio o aquello de lo que el yo
lírico participa pero no puede explicar sería 《y no saben》. Comienza la
composición con un breve estribillo en el que la voz que habla en el poema
se lamenta de haber nacido alejada de Dios. En la primera estrofa, el
hablante de Vallejo afirma ser malo, y achaca su maldad a la ausencia de
Dios en el momento de su nacimiento; partiendo de esa maldad fruto del
distanciamiento con Dios, la voz del poema inicia una búsqueda de un Ideal,
y, en la segunda estrofa, arranca de un vacío que no es capaz de explicar
porque aparece reducido al oxímoron "silencio que habla" que es en sí mismo
un imposible. La tercera estrofa es una invocación, el yo lírico implora
que alguien le escuche pues necesita hermanarse 《Hermano, escucha,
escucha...》. Versa la cuarta estrofa sobre una contradicción: el hablante
del poema, a pesar de estar vivo sabe que su verso tiene la constante
obsesión de la muerte, como muestra 《por qué en mi verso chirrían, / oscuro
sinsabor de féretro, 》 donde "sinsabor" es símbolo de amargura y "féretro",
de muerte. En la quinta estrofa, aparece el tema de los contrarios
simbolista propio de Baudelaire, esto es, estar entre el Cielo y el
Infierno: 《que la Luz es tísica, / y la Sombra gorda...》; mas con esta
contraposición la voz del poema no solo realiza una antítesis entre el Bien
y el Mal, sino también afirma que Dios es "enfermedad"; y además reaparece
el misterio, bien como Misterio revelado o palabra de Dios, bien como ideas
de las que conocemos su existencia pero de ellas solo tenemos vagas
imágenes. Es este misterio el que nos abre a distancia el camino a las
Lindes, al Ideal del que el yo lírico nació alejado; no obstante, la voz
del poema no sabe 《Y no saben》 que el misterio conoce cómo satisfacer el
deseo de encontrar una dimensión superior al hombre y percibir que hay algo
más allá de lo humano, por tanto no puede expresarlo puesto que es inefable
pues "sabemos pero no sabemos". En el último estribillo se produce una
variación 《Yo nací un día / que Dios estuvo enfermo, / grave》, el epíteto
"grave" puede referirse a la enfermedad que Dios padecía o a toda la
amargura que su ausencia provocó en la voz del poema. De este modo, la
estructura justifica que uno de los temas posibles que trata el poema sea
la ausencia de Dios o de un Ideal percibida como una carencia que le empuja
a buscarlo.