A VERY SINGULAR ROMAN CAREER FROM TUFICUM: 407. La carrera de Sextus Aetrius Ferox de Tuficum (regio VI), Picus, XXXV, 2015, pp. 73-85.

maRC mayeR i Olivé la CaRReRa de SexTuS AeTrIuS Ferox de TuFICum (regIo VI)

Un reciente trabajo sobre la administración de las vías en la italia romana y sus documentos epigráficos1 da pie a que volvamos sobre uno de los documentos más singulares de Tuficum, C.I.L. Xi 5693 y 5694 (= I.L.S. 2666 y 2666a), que responde a dos textos epigráficos publicados separadamente pero que en nuestra opinión debieron estar grabados sobre un mismo pedestal, como sucede a menudo cuando se trata de un texto honorífico acompañado por la decisión que da origen al mismo. la razón por la que ambos textos son conocidos separadamente es debida seguramente al hecho de que se trata de un pedestal que fue serrado para ser empotrado en la pared de un edificio de manera que se vieran ambas partes inscritas, que evidentemente más tarde fueron separadas y tuvieron una tradición distinta2, una de las partes está efectivamente conservada en el palazzo Ramelli de Fabriano y la otra se ha perdido y sólo nos es conocida

Cfr. el bien documentado trabajo de C. Campedelli, L’amministrazione municipale delle strade romane in Italia, Bonn 2014 (= ‘antiquitas’, Reihe 1, 62), que trata el caso de Tuficum en diversas ocasiones, aunque para el tema que nos ocupa principalmente hay que destacar pp. 229-242, núm. 116, en que se refiere a las inscripciones de Aetrius Ferox que recoge, aunque puede discreparse sobre la exactitud de la traducción de las mismas, en p. 240, notas 71 y 72. 2 C.I.L. Xi, p. 831. 1

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por una copia de i. de vecchi, de finales del siglo Xvii3, de la que dependen todos los testimonios posteriores. la posibilidad de que ambas caras fueran de un mismo pedestal fue ya propuesta por el conde Camillo Ramelli, que supuso que el texto honorífico ocuparía la cara anterior y el decreto el lado izquierdo del pedestal4. el texto del decretum decurionum resulta interesante no sólo porque nos detalla el procedimiento y nos transmite de forma directa la propuesta oral en la sesión del senado local, sino también porque nos proporciona dos ciudadanos del ordo de Tuficum que no tienen documentación epigráfica independiente: el IIIIvir Lucius Varius Firmus, que actúa como referente de la propuesta hecha por gaius Caesius Silvester, y gaius Cluvius Sabinus que ejerce la función de censere la propuesta5, es decir da una opinión favorable una vez comprobada la validez del resultado de la votación de la misma en la sesión del 26 de noviembre del año 141 d.C., decisión que obtendrá también el consenso de la plebe según se desprende del texto que recogemos: T(ito) Hoenio Severo m(arco) Peducaeo Priscino co(n)s(ulibus) / VI K(alendas) Dec(embres) decr[e]t(um) decur(ionum) / quod C(aius) Caesius Silvester p(rimi)p(ilaris) v(erba) f(ecit) Aetrium / Ferocem centur(ionem) leg(ionis) II Traian(ae) Fortis per incremen/ta gradus militiae sua tam singulis quam rei p(ublicae) n(ostrae) / quotiens necesse fuit multum praestitisse / proxime quoque petitioni nostrae ab optimo / maximoque principe Antonino 3

C.I.L. Xi, pp. 831 y 824 para la noticia sobre ioanne vecchio de verdini del

1695. 4 Cfr. C. Ramelli, Cenni I(s)torici sopra Túfico, Sanseverino 1848, p. 132, recogido por m. TRamUnTO, Silloge epigrafica tuficana, en m.F. peTRaCCia (ed.), Tuficum in età romana, Fabriano 2013, pp. 163-164, para C.I.L. Xi 5693 = I.L.S. 2666, y pp. 164166 para C.I.L. Xi 5694 = I.L.S. 2666a = Ann. épigr. 2006, 243. 5 Hay que señalar que ni Varii ni Cluvii están documentadas en la zona de directa influencia de Tuficum, cfr. para este área m. mayeR, el patronato y los cargos ejercidos por los notables en diversas ciudades de las regiones V y VI como indicio de vinculación y complementariedad estrecha entre las mismas, en G. paCi (ed.), epigrafia e Archeologia romana nel territorio marchigiano. In memoria di Lidio gasperini. Atti del Convegno (macerata 22-23 aprile 2013), Tivoli 2014 (= ‘ichnia’, 13), pp. 339-356. los Varii más cercanos se hallan en Hispellum (C.I.L. Xi 5175) y Vettona (C.I.L. Xi 5344), además de Asculum (C.I.L. iX 5210). los Cluvii en Iguvium (C.I.L. Xi 5850) y Bononia (C.I.L. Xi 6826).

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Aug(usto) Pio / vectigal viae silici stratae ita in/stitisse ut mature impetraretur et / impendis urbicis res p(ublica) beneficio eius / relevaretur ut optimus Imp(erator) n(oster) ex / corniculario praef(ecti) vigulum (sic) primo / ei omnium ordinem Alexandriae / dederit debere nos itaq(ue) ei statuam / pedestrem secus merita eius / decernere q(uid) f(ieri) p(laceat) d(e) e(a) r(e) referente / L(ucio) Vario Firmo IIIIvir(o) censente C(aio) / Cluvio Sabino ita cens(uerunt) / placere universis consensu plebis / Aetrio Feroci (centurioni) secus merita / eius statuam ubi ipse desiderave/rit quam primum poni cens(uerunt). el texto en la parte que reproduce la propuesta de Caesius Silvester es un ejemplo claro de lengua hablada, aunque tenga carácter oficial y burocrático, de aquí que Th. mommsen6 observara que el texto debería decir: ita institisse ut vectigal viae silici stratae y no vectigal viae silici stratae ita institisse, como reza el texto inscrito. la versión recogida de forma directa en el acta de la reunión, que copia el texto epigráfico, es perfectamente comprensible tratándose de una forma coloquial en la que se sitúa en primer lugar el hecho o la causa desencadenante de la propuesta de resolución, con lo que se pretende atraer con mayor facilidad la atención de los oyentes susceptibles de votarla. evidentemente, según nuestro punto de vista actual, forzaría la sintaxis que requeriría ita...ut, como bien señaló mommsen, pero no cabe duda tampoco que la forma usada fue la expresión que consta en el texto más allá de cualquier otra consideración gramatical. Sabemos como se ha repetido en numerosas ocasiones que la carrera de Sextus Aetrius Ferox que recoge también C.I.L. Xi 5693 es singular: Sex(to) Aetrio S[ex(ti) f(ilio)] / ouf(entina) Feroci / centurioni leg(ionis) II / Traianae Fortis / huic primo omnium / ex cornicul[ar(io)] praef(ecti) [v]igil(um) / Imp(erator) Caesar Antoninus /

6 C.I.L. Xi, p. 831, comentando C.I.L. Xi 5694 = I.L.S. 2666a y Ann. épigr 2006, 243, del año 141 d.C. J.B. CampBell, The emperor and the roman Army 31 BC - AD 235, Oxford 1984, p. 272, parece ver en el texto del decreto de concesión de honores las trazas del rescripto de antonino pío concediendo la promoción a Aetrius Ferox.

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Aug(ustus) Pius p(ater) p(atriae) / ordinem Alexandriae dedit / quod per gradus militiae suae / tam industriae se administraverit / dec(reto) dec(urionum) et consensu plebis / ob merita eius / hic dedicatione statuae / municipibus et incolis utriusque sexus / epulum et HS IIII(milia) n(ummum) dedit. al término de su carrera es centurión de la legio II Traiana Fortis, lo que en principio no tendría nada de excepcional, pero lo que si lo es es la forma en la que llega a este grado inesperado para alguien que, bajo antonino pío y posiblemente por algún servicio especial7, es promocionado desde cornicularius del praefectus vigilum al grado de centurión, lo cual es sin duda un hecho inusual y, por consiguiente, escasamente atestiguado8. la fórmula, ordinem... dedit, es una variante de una bien documentada y contribuye a poner de relieve el honor recibido9. no nos 7 S.m. maRenGO, regio VI. Vmbria. Attidium, en Suppl. It., n.s. 12, Roma 1994, pp. 19-20; m.F. peTRaCCia, en m.F. peTRaCCia (ed.), Camillo ramelli e la cultura antiquaria dell’ottocento, Roma 2006 (= ‘Studia archaelogica’, 149, Sentinum II), pp. 134136, m. TRamUnTO, en peTRaCCia (ed.), Attidium, cit., p. 32; y. le BOHeC, remarques historiques sur les inscriptions militaires d’ombrie, en m. medRi (ed.), Sentinum 295 a.C. Sassoferrato 2006. 2300 anni dopo la battaglia. una città romana tra storia e archeologia. Convegno internazionale (Sassoferrato 21-23 Settembre 2006), Roma 2008, pp. 31-43, esp. pp. 37-38; m. mayeR, municipes et incolae Tuficani utriusque sexus. Algunas consideraciones sobre la sociedad de una ciudad de la regio VI: Tuficum, en peTRaCCia (ed.), Tuficum, cit., pp. 21-46, esp. pp. 34-35, y el patronato y los cargos, cit., pp. 344-347, con bibliografía complementaria; R. SaBlayROlleS, Libertinus miles. Les cohortes de vigiles, Roma 1996 (= ‘C.e.F.R.’, 224), pp. 49-50 y nota 121; appendice v, núm 14, pp. 626627, y pp. 405-406. R. Sablayrolles lo compara con el rescripto de Skaptopara, C.I.L. iii 12366 = I.g.r. i, 674, del año 238 d.C., en el que se documenta una intervención de un personaje, Aurelius Pyrrhus, ante el emperador en beneficio de sus conciudadanos, según se desprende de m. dURRy, Cohortes prétoriennes, paris 1938 (= ‘B.e.F.a.R.’, 146), pp. 284-266, añade además del ejemplo comentado, el de un pretoriano, en I.g.r. i 833, que parece haber hecho un favor semejante a su ciudad. 8 SaBlayROlleS, Libertinus miles, cit., p. 348, nota 84, la promoción de Aetrius es comparada por este estudioso con una segunda de m. Caecilius Concordius en 191 d.C., C.I.L. vi 414b, y se refiere en p. 208 a estas promociones inusuales de corniculari. 9 por ejemplo ordinem accipere ex: C.I.L. iii 1480 = I.L.S. 2654, ordinem accepit ex equite romano; C.I.L. vi 3584 = I.L.S. 2656 ex equite r. ordine(m) accepit in leg. V;

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cabe duda de que la iniciativa de Caesius Silvester tiene diversas connotaciones; la primera de ellas reconocer el favor que el emperador pudo otorgar a la ciudad por la intercesión de Aetrius Ferox, pero indica también una cierta comunidad de intereses propiciada seguramente por el origen militar de la ascensión social de ambos personajes10. la curatela viarum et pontium Vmbriae et Piceni de gaius Caesius Silvester, elegido por el mismo emperador, pudo también jugar un papel, sin duda, importante en la solicitud del favor a antonino pio. Hay que considerar que la curatela de Caesius se data en el 142 d.C.11, pero quizás podamos anticiparla al mismo año de los honores otorgados a Sextus Aetrius Ferox o al momento de la concesión del privilegio por antonino pío, por más que se podría esperar la mención de la misma en el cursus de Caesius Silvester que se menciona en el decreto de los decuriones de Tuficum. muy posiblemente los grados militares fueron en aquel caso suficientes para definir la situación social de ambos personajes. Se ha señalado tambien con razón que la propuesta fue hecha por un primipilaris

Ann. épigr. 1996, 1339, ex optione…in ordine legionis Ital., cit., factus p.p. leg. s.s. Otra fórmula está presente en C.I.L. v 7872, optio ad ordine(m) 7 leg. xxII Primigeniae Piae Fidelis. 10 Ann. épigr. 2006, 243. F. CeneRini, “I Caesii: prosopografia delle regioni VI, VIII e V”, en Cultura epigrafica dell’Appennino. Sarsina mevaniola e altri studi, Faenza 1985 (= ‘epigrafia e antichità’, 8), pp. 203-232, esp. p. 217, hace notar como la datación del decreto del ordo demuestra la presencia de Caesius Silvester como decurio en el año 141 d.C. R. SaBlayROlleS, Libertinus miles, cit., p. 627, lo cita como pequeño evergeta junto a Sextus Aetrius Ferox: “evèrgetes au petit pied, Sex. aetrius Ferox et le primipile C. Caesius Silvester venaient à leur retraite jouir dans leur municipe d’une estime bien gagnée.” Sobre C. Caesius Silvester: le BOHeC, remarques historiques, cit., pp. 36-37; mayeR, municipes et incolae Tuficani, cit., pp. 29-35, y el patronato y los cargos, cit., pp. 348-350, con bibliografía complementaria. 11 Cfr. C. CaRdinali, gli interventi edilizi nel tratto umbro-marchigiano della Flaminia e la cura viarum, en m. lUni - O. mei (eds.), Forum Semproni II. La città e la Flaminia: 1973-2013, Urbino 2013 (= ‘Quaderni di archeologia nelle marche’, Xviii), pp. 219-272, esp. p. 269, basándose en C.I.L. Xi 5697 = I.L.S. 5891 y en la mención imperatori II. véase además H.-G. pFlaUm, Les carrières procuratoriennes équestres sous le Haut-empire romain, i, paris 1960, pp. 21-22, que fecha la intervención de antonino pío en el nombramiento de Caesius Silvester en el 142 d.C. y la separa de la concesión a Tuficum que data el 140 d.C.

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y no por un magistrado12, aunque seguramente ambas condiciones no son excluyentes entre sí y no sabemos la condición del primipilaris en el seno del ordo local. no viene al caso insistir en la naturaleza de la curatela viarum et pontium Vmbriae et Piceni, atestiguada en Tuficum en dos casos13, que en último término parece representar un cargo de nombramiento imperial. en C.I.L. Xi 5697 = I.L.S. 5891 consta: allecto ab optimo imp. T. Aelio Antonino Aug. Pio, otorgado a algunos personajes de Tuficum, quizás por la situación estratégica de la ciudad respecto a una red menor dependiente de la via Flaminia. no sabemos tampoco cómo se pudo articular este cargo menor en relación con el senatorial de curator viae Flaminiae14, aunque, sin duda, una cierta dependencia debió de existir, ya que, a pesar de algunas opiniones autorizadas, no creemos que se mueva en el ámbito municipal, si bien los dos curatores que conocemos en Tuficum tuvieron una carrera de este tipo y no nos parece tampoco un cargo que reflejara una especificidad tuficana aunque no conozcamos por el momento otros ejemplos. R.K. SHeRK, The municipal Decrees of the roman West, Buffalo 1970 (= ‘arethusa monographs’, ii), pp. 48-49, núm. 53, para el texto, cf. J.F. ROdRíGUez neila, Las sesiones de trabajo de los senados municipales, en e. melCHOR Gil - a.d. péRez zURiTa - J.F. ROdRíGUez neila, Senados municipales y decuriones en el occidente romano, Sevilla 2013, pp. 163-213, y esp. p. 186 nota 144, donde destaca que es un primipilaris y no un magistrado el que propone la moción en C.I.L. Xi 5694. 13 el otro caso seguramente precedente es el de Lucius Sibidienus Sabinus, C.I.L. Xi 5689, que se data en principio en época augustea, cfr. CaRdinali, gli interventi, cit., p. 268, donde abre la posibilidad de que pueda datarse más tarde en el siglo ii como propuso maRenGO, regio VI, cit., p. 20; le BOHeC, remarques historiques, cit., pp. 32-33, para L. Sibidienus Sabinus; además mayeR, municipes et incolae Tuficani, cit., pp. 25-27, y el patronato y los cargos, cit., pp. 342-344, con bibliografía complementaria. 14 Cfr. para este cargo: p.C. eRTman, Curatores viarum: a study of the superintendent of hightways in Ancient rome, ph.d. State University of new york at Buffalo 1976, microfilm-xerography ann arbor mi. 1981, esp. pp. 72- 73, 196-208, para los curatores conocidos p. 81, sitúa la de curator viarum et pontium Vmbriae et Piceni entre las curatelas ecuestres, además pp. 256- 257, núm. 109, para Lucius Sibidienus Sabinus, y pp. 258-259, núm. 116, para gaius Caesius Silvester; W. eCK, Cittadini e amministrazione statale nell’umbria in età imperiale, en G. BOnamenTe (ed.), Assisi e gli umbri. Atti del Convegno internazionale (18-21 dicembre 1991), assisi 1997, pp. 283-300, esp. p. 292, donde considera un cargo de nombramiento imperial la curatela viarum et pon12

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Un hecho importante es que sabemos con certeza quién concedió el ascenso inusual a Aetrius Ferox y la ciudad, alejandría, donde tuvo lugar esta promoción o quizás donde se produjo tan sólo la resolución respecto a la misma, posibilidad esta última poco probable. Un cornicularius del praefectus vigilum dificilmente abandonaba la ciudad de Roma si no lo hacia también el praefectus o era mandado por el mismo con una misión especial. diversas explicaciones serían posibles: una intervención excepcional en Roma misma, un hecho acaecido en alejandría, o la presencia del emperador en esta última ciudad en el momento de la concesión. debemos por tanto ver lo que pudo suceder al respecto en el reinado de antonino pío. Otra posibilidad podría venir dada por la legión a la que es destinado con el grado de centurión y a la ubicación de la misma, evidentemente en egipto15. la combinación de la información de la que podemos disponer sobre todas estas cuestiones nos podría quizás sugerir una posible explicación del ascenso de Aetrius Ferox. Si situamos la actuación de antonino pío en alejandría, como parece desprenderse del texto epigráfico de Tuficum donde Alexandriae parece claramente un locativo, las consecuencias históricas pueden ser notables ya que entra en contradicción con el texto de la Historia Augusta considerado en este punto por algunos estudiosos dirimente. la vita Pii, 5, 4-5, reza exactamente: Per legatos suos plurima bella gessit. Nam et Brittannos per Lollium Vrbicum vicit legatum alio muro cespiticio summotis barbaris ducto; et mauros ad pacem postulandam coegit, et germanos et Dacos et multas gentes atque Iudaeos rebellantes contudit per praesides et legatos. In Achaia etiam atque Aegypto rebelliones repressit; Alanos molientis saepe refrenavit16.

tium Vmbriae et Piceni, aunque quizás temporáneo, propone además este autor la evolución o más bien la acumulación de la curatela de las vías de rango senatorio con la de los alimenta; además, CaRdinali, gli interventi, cit., pp. 265-272. ahora Campedelli, L’amministrazione, cit., pp. 61-62, donde resulta claro que no considera estos cargos municipales a diferencia de pFlaUm, Les carrières procuratoriennes, cit., pp. 2122, en los casos que nos ocupan. 15 para esta legión cfr. por ejemplo S. daRiS, Legio II Traiana Fortis, en y. le BOHeC - C. WOlFF (eds.), Les Légions de rome sous le Haut-empire, lyon 2000, pp. 359-373. 16 nos servimos de la edición de J.-p. Callu, con la colaboración de a. Gaden y O. desbordes, Histoire Auguste, tome I, 1re partie. Introduction générale. Vies d’Hadrien, Aelius, Antonin, paris 1992 (= ‘Collection des Universités de France’), p. 80. Cfr. el

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Un testimonio de iohannes malalas, el historiador bizantino, ioh. mal. 11, 23 = 11, 367 d ed. dindorf17, documenta la presencia de antonino pío en egipto para reprimir una insurrección de campesinos que había causado la muerte del gobernador Deinarchos, definido como augoustalios: jEpestravteuse de; kata; Aijguptivwn turannhsavntwn kai; foneusavntwn to;n aujgoustavlion Deivnarcon: kai; meta; th;n ejkdivkhsin kai; th;n nivkhn e[ktisen ejn A j lexandreiva/ th`/ megavlh/ katelqw;n th;n H J liakh;n puvlhn kai; th;n Selhniakh;n kai; to;n drovmon. el contenido texto es claro, aunque algunos estudiosos suponen que el texto haga referencia en realidad a Caracalla. el comentario de J.-p. Callu a la vita Pii, contrariamente a otros estudiosos18, no se cierra a la posibilidad de que el texto de malalas puede corresponder a la realidad histórica por lo que habría que matizar la afirmación “Per legatos suos plurima bella gessit”19. de todas ma-

comentario de S. WalenTOWSKi, Kommentar zur Vita Antoninus Pius der Historia Augusta, Bonn 1998 (= ‘antiquitas’, Reihe 4, Serie 3, 3), pp. 189-197, para el texto reproducido. 17 i. THURn (ed.), Ioannis malalae chronographia, Berlin - new york 2000 (= ‘Corpus fontium historiae Byzantinae’, XXXv), p. 212; Ioannis malalae chronographia ex rec. l. dindORFF, Bonn 1831 (= ‘Corpus scriptorum historiae Byzantinae’), p. 280 Cfr. también a. SCHenK GRaF vOn STaUFFenBeRG (ed.), Die römische Kaisergeschichte bei malalas, Stuttgart 1931, p. 250 para malalaS 11, 23, y p. 230, donde manifiesta su incredulidad respecto a la presencia de antonino pío en egipto. véase también para una traducción inglesa, e. JeFFReyS - m. JeFFReyS - R. SCOTT et alii, The Chronicle of John malalas. A Translation, melbourne 1986 (= ‘Byzantina australiensia’, 4), pp. 148-149, para malalaS 11, 21-26; p. 149 para 11, 23. 18 así B. Rémy, Antonin le Pieux. Le siècle d’or de rome 138-161, paris 2005, p. 250 y notas pp. 368-369, en p. 230, indica que no cree en la fiabilidad de malalas y que por consiguiente no mandó esta expedición militar de forma directa sobre el terreno, cfr., notas p. 362 con bibliografía sobre la cuestión; B. Rémy - H. deSaye - J. dalaiSOn, Antonin le Pieux vu par les textes antiques, paris 2012 (= ‘Collection Bibliotheca’), pp. 52-53 y 55-56, en p. 46, subrayan la actitud sedentaria del emperador. 19 CallU, Histoire Auguste, cit., pp. 151-152. WalenTOWSKi, Kommentar, cit., pp. 196-197, que pone en duda como Callu la existencia de un prefecto de nombre Deinarchos y duda de la veracidad de la presencia de antonino pío en egipto que cuenta malalas, sobre este historiador bizantino y el pasaje sobre egipto cfr. ibidem, pp. 6264, donde toma en consideración y discute además las conclusiones de R. zieGleR, Kaiser, Heer und städtisches geld. untersuchungen zur münzprägung von Anazarbos und anderer ostkilikischer Städte, Wien 1993 (= ‘ergänzungbände zu den Tituli asiae

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neras este comentario se hace eco de la hipótesis de que los hechos referidos por malalas puedan referirse al reinado de Caracalla. pesa sobre todo en el criterio de todos los estudiosos la afirmación de vita Pii, 7, 1112: Nec ullas expeditiones obiit, nisi quod ad agros suos profectus est et ad Campaniam, dicens gravem esse provincialibus comitatum principis, etiam nimis parci. et tamen ingenti auctoritate apud omnes gentes fuit, cum in urbe propterea sederet ut undique nuntios, medius utpote, citius posset accipere20. dejaremos el tratamiento de esta cuestión y las polémicas que genera para otra ocasión, en que nos centremos en el estudio de la Historia Augusta. Baste por ahora decir que creemos que los epígrafes de Tuficum que tratamos aquí parecen confirmar fehacientemente el texto de malalas y que, en consecuencia, resulta fuera de lugar la duda sobre la presencia o no de antonino pío en el norte de África y concretamente en egipto

minoris, 16, Öst. akad der Wiss. phil-Hist. Klasse denkschriften’, 234) pp. 97-103, pp. 97-98 y 102-103, según el cual sería cierto el viaje de antonino pío que menciona malalas, el cual se situaría de acuerdo con las emisones monetarias en 156/157, o como quería vogt en 148/149 o 153/154; es destacable F. SCHeHl, untersuchungen zur geschichte des Kaisers Antoninus Pius, en «Hermes » 65 (1930), pp. 177-208, esp. pp. 193-206, cuyo comentario está en la base de la atribución a Caracalla del pasaje de malalas; W. HüTTl, Antoninus Pius, Bd. I : Historisch-politische Darstellung, prag 1936, pp. 231, y nota 14 y 290-301, esp. 290-293, además de la importante y extensa nota 356; Hüttl sitúa la revolución en egipto entre el 26 de agosto del 142 y el 12 de mayo del 144, considerando el discurso de Aelius Aristides en elogio de Roma que data en la primera mitad del 144 d.C.; intenta identificar al prefecto mencionado por malalas B. THOmaSSOn, Laterculi praesidum, i, Göteborg 1984 (ed. por B. THOmaS), p. 350, núm. 59, que cree improbable la existencia del Deinarchos mencionado por malalas dado que conocemos todos los prefectos de egipto del reinado de antonino pio. Cfr. sobre este gobernador, G. BaSTianini, Lista dei prefetti d’egipto dal 30a al 299p, en «zeitsch. papyr. epigr.» 17 (1975), pp. 263-328, esp. p. 291 nota 1, donde propone que quizás pudiera, de haber existido, ser prefecto en el 149. la propuesta de l. Cantarelli (La serie dei prefetti d’egitto da Augusto a Diocleziano, Roma 1906, p. 52) de leer en malalas deinw`~ a[rconta, no es, como dice ya Bastianini, en absoluto descartable. los gobernadores del momento pudieron ser según el trabajo más arriba citado de G. Bastianini: m. Petronius mamertinus pp. 286-288, del 133 al 137, o g. Avidius Heliodorus del 137 al 141/142, p. 288; anteriormente Petronius Quadratus en el 126 con el nombre erasum, cfr. pp. 284-285, nota 3 de la p. 284; T. Flavius Titianus fue prefecto del 126 al 132/133, pp. 285-286. 20 Según el texto de CallU, Histoire Auguste, cit., pp. 82-83.

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al inicio de su reinado, y, con toda seguridad, en un momento anterior al final del 142 d.C. Si se trataba como se desprende del texto de malalas de una acción militar, en ella se debió distinguir de algún modo el cornicularius del prefecto de los vigiles, Sextus Aetrius Ferox. Si consideramos este último hecho podemos pensar que pudo acompañar al emperador en su campaña también el praefectus vigilum de quien dependía el personaje, recordemos que los vigiles pueden ejercer funciones de escolta imperial21. Todo ello podría venir avalado además por el hecho de que la sublevación en egipto podía tener consecuencias sobre la annona y los vigiles tenían competencias importantes de custodia de la misma y también de control de alguno de los principales puertos en italia22. de nuevo, sin embargo, esto es ir más allá de nuestro objetivo en esta ocasión, aunque podemos añadir que la propia Historia Augusta recuerda el malestar en Roma ante la posibilidad de que se produjera una carestía que un texto del pseudo-aurelio víctor precisa que afectó a la persona del propio emperador23. en este punto debemos cuestionarnos sobre la posible vinculación entre este el ascenso de aetrius y el otorgamiento por parte del emperador de un peaje para que el municipio, situado en una encrucijada de caC. RiCCi, Il principe in villa: residenze imperiali in Italia e servizi di sicurezza, en «Cahiers du Centre Gustave-Glotz» 15 (2004), pp. 317- 341, y para la posible presencia de vigiles como escolta imperial p. 333. 22 SaBlayROlleS, Libertinus miles, cit., pp. 47, 158-162, 289-310 y 383-384 para Ostia y Puteoli; RiCCi, Il principe in villa, cit., pp. 321-324 para Civitavecchia. además a. maSTinO, Absentat(us) Sardinia. Nota sulla missione di un distaccamento della II Cohors vigilum Philippiana presso il procuratore P. Aelius Valens il 28 maggio 245 d.C., en a. iBBa - p. FlORiS (eds.), ruri mea vixi colendo. Studi in onore di Franco Porrà, Ortacesus 2012, pp. 339-352, para un período más tardío pero en misiones vinculadas a la annona. 23 epitome 15, 9: Vsque eo autem mitis fuit ut, cum ab inopiae frumentariae suspicionem lapidibus a plebe romana perstringeretur, maluerit ratione exposita placare quam ulcisci seditionem, citamos siguiendo la edición de m. FeSTy, Pseudo-Aurélius Victor, Abrégé des Césars, paris 1999 (= ‘Collection des Universités de France’), p. 25, en nota p. 115, pone en paralelo el pasaje de la vita Pii 8, 11: Vini, olei et tritici penuriam per aerarii sui damna emendo et gratis populo dando sedavit, cit. según la ed. de CallU, Histoire Auguste, cit., p. 84, cfr. el comentario p. 159, sobre el patrimonio privado del emperador que pone también en relación este pasaje con el del pseudo-aurelio víctor. 21

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minos, pudiera soportar los gastos que esta situación suponía24. Sextus Aetrius Ferox pudo conseguir el favor imperial seguramente en razón de las vinculaciones personales que se establecían entre estos personajes y los dignatarios de la corte imperial o incluso el propio emperador25, su ascenso sin embargo por concesión del propio emperador en alejandría nos hace suponer un hecho singular, quizás de guerra o de custodia personal, que comportó el ascenso de Aetrius Ferox desde cornicularius praefecti vigilum a centurio que la epigrafía refleja con la fórmula huic primum, un ascenso que a continuación resultará normal26. Una última cuestión queda viva, cuál pudo ser el privilegio concedido a Tuficum por parte del emperador por intermediación de Sextus Aetrius Ferox. Cuestión que como señala el texto del decreto de Tuficum y reconocen todos los historiadores está intimamente vinculado a la viabilidad de la zona. Hay además acuerdo en que se trata de un vectigal27 y en que naturalmente la concesión imperial benefició a la ciudad o a algunos de sus habitantes28. no podemos precisar en qué pudo consistir el bene24 Cfr. pFlaUm, Les carrières procuratorienne, cit., p. 22, que cree que se trata de un peaje que permitió a la ciudad recuperar lo invertido en la vía. J.B. CampBell, The emperor and the roman Army 31 BC – AD 235, Oxford 1984, p. 106 cree, en cambio, que se trata de una “reduction of a road tax”. 25 CampBell, The emperor, cit., pp. 101-120, para los privilegios de estos oficiales y suboficiales que estaban en relación con la corte, que cita el caso de Aetrius Ferox, p. 106 y nota 19, y vuelve sobre el mismo caso en pp. 272-273. 26 SaBlayROlleS, Libertinus miles, cit., pp. 49-50 y nota 121. 27 así: W. lieBenam, Städteverwaltung im römischen Kaiserreiche, leipzig 1900 (reimpr. Roma 1967), pp. 149-150, para el posible vectigal da en p. 150 ejemplo de Tuficum y el de C.I.L. X 6954 = I.L.S. 5876, con la restitución de un vectigal en Salernum; Th. peKÁRy, untersuchungen zu den römischen reichsstrassen, Bonn 1968 (= ‘antiquitas’, Reihe 1, 17), p. 161: C.I.L. viii 10327 = I.L.S. 5874 via a milevitani munita ex indulgentia eius de vectigali rotari, bajo antonino pío, y en pp.162-163 lo compara con el vectigal de Tuficum y cita C.I.L. X 6954. Queda claro en el comentario de pekáry que los beneficiados son los possessores sea de milev que de Tuficum que no quieren pagar los costes de la manutención viaria y piden su exoneración. 28 F.m. aUSBüTTel, Die Verwaltung des römischen reiches. Von der Herrschaft des Augustus bis zum Niedergang des Weströmischen reiches, darmstadt 1998, esp. pp. 95-103, “Strassenwesen”, que hace notar que los possessores son los principales responsables del mantenimiento de la vía al margen de la cual se sitúan sus propiedades, por lo que el vestigal afectaría fundamentalmente a estos, pp. 99-100.

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ficio y las posiciones al respecto varían desde la eliminación de gastos vinculados a la viabilidad a la imposición de un vectigal en favor de Tuficum29. Según H.-G. pflaum30, una petición de C. Caesius Silvester habría comportado la intervención de Sex. Aetrius Ferox ante el emperador e indica que el emperador “ne s’est pas borné à soulager la situation financière de Tuficum en lui accordant le droit de péage, mais qu’il à, bientôt après; pris a sa charge toutes les depenses qui incombaient à la petite ville. il a en même temps honoré ce vieux soldat si actif et si compétent en lui confiant la surveillance des travaux et la gestion des fonds nécessaires à la remise en état des routes et des ponts. voilà la raison pour laquelle, dans les deux cursus de C. Caesius Silvester, il est tellement insisté sur l’intervention d’antonin le pieux”, lo que en último término supondría una actuación mancomunada de ambos personajes en favor de la ciudad. el reciente trabajo de C. Campedelli afirma: “Gli abitanti di Tuficum, infine, fecero richiesta all’imperatore antonino pio, tramite il centurione Sex. Aetrius Ferox, di imporre un vectigal viae stratae, questa volta una tassa, forse perché la comunità si trovava in una condizione d’insolvenza. l’imposizione di un pedaggio, come quello attestato a milev, o di un imposta per la manutenzione della strada, doveva alleggerire gli oneri che incombevano sulla comunità”31. estas interpretaciones no estan en contradicción entre ellas y seguramente reflejan el fondo de la cuestión, aunque pueda parecer que extrapolan información más allá de los propios textos en que se fundan. el comentario extenso de C. Campedelli32 razona estas cuestiones y valora así W. eCK, Die staatliche organisation Italiens in der hohen Kaiserzeit, münchen 1979 (= ‘vestigia’, 28), se refiere en p. 16 al vectigal; en p. 23 a la influencia sobre el emperador de Aetrius Ferox en favor de su ciudad natal; y pp. 78-79, al hecho de que el vectigal quita gastos a la ciudad. 30 H.-G. pFlaUm, Les carrières procuratoriennes équestres sous le Haut-empire romain, i, paris 1960, p. 22; al ocuparse de L. Sibidienus Sabinus, pp. 20-23, núm. 6., esp. pp. 21-22 para Aetrius. 31 Campedelli, L’amministrazione, cit., pp. 68-69. 32 Campedelli, L’amministrazione, cit., pp. 79-79; 239-242; y 268 donde propone un paralelo a partir de un vectigal ampliatus de Aquileia, núm. 141, pp. 267-268, que es puesto en relación con el de Tuficum. Sin embargo C. zaCCaRia, Testimonianze epigrafiche relative all’edilizia pubblica nei centri urbani delle regiones x e xI in età imperiale, en La città nell’Italia settentrionale. morfologie, strutture e funzionamento dei centri urbani delle regiones x e xI. Atti del convegno organizzato dal Dipartimento di scienze dell’Antichità 29

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la posibilidad de las ciudades de dirigirse al emperador y de obtener una satisfacción a través de una imposición compensatoria. en suma, creemos que la aproximación a las circunstancias que llevaron a usar su influencia ante el emperador queda suficientemente lograda. de Sextus Aetrius Ferox no tenemos posteriores noticias, pero sí las tenemos de C. Caesius Silvester, que en último término fue honrado, adlectus, por el propio emperador para cuidar la viabilidad de la zona. las carreras de ambos son dos ejemplos distintos de promoción social, pero ambos muy significativos de un período y de un reinado que algunos estudiosos de prestigio han definido “sin historia”. reSumeN La revisión de la carrera de Sextus aetrius Ferox permite conocer una promoción extraordinaria acordada por el propio Antonino Pío en Alejandría y aporta un nuevo dato, quizás definitivo, para documentar la presencia de este emperador en la ciudad. Imperio romano, Tuficum, epigrafía, Antonino Pío, Alejandría. SummArY The revision of the Sextus aetrius Ferox’ career and his extraordinary promotion by Antonine Pius in Alexandria contributes to prove, perhaps definitively, the emperor’s presence in the city. roman empire, Tuficum, epigraphy, Antonine Pius, Alexandria.

dell’università di Trieste e dall’École Française de rome (Trieste, 13-15 marzo 1987), Trieste - Roma 1990 ( = ‘C.e.F.R.’, 130), pp. 129-162, esp. p. 141-142, nota 14, para este posible paralelo de aquileia (cfr. G.B. BRUSin, Inscriptiones Aquileiae, ii, Udine 1991, p. 202, núm. 443; G. alFÖldy, römische Statuen in Venetia et Histria. epigraphische Quellen, Heidelberg 1984, p. 103, núm 104 (= ‘abh. Heidelberger akad. Wiss. phil.-hist. Kl.’, 1984, abh. 3); C. zaccaria piensa con fundamento que el vectigal ampliatus sería el aplicado a los possessores que tenían sus fundi en los márgenes de la vía. Creemos, por consiguiente, que no se trata de un caso aproximable con certeza al ejemplo de Tuficum y que el estado mismo de la inscripción permite restituciones e interpretaciones muy diversas.

Note e relazioni